BS_1984_03.pdf

Medios

extracted text
D O N B O S C O una

pagina páralos niños

A LA COLA
-Usted, lo que es, es un fres­
Mis queridos amigos Juanito realidad, no los propios sueños,
y Mari:
Para erratas, ya está bien con las co que quiere colarse.
—Sí, a la cola.
Ya me figuro la cara que ha- que se les escapan a las imprentas,
-Eso es, como todo el mun­
brá puesto Juanito al leer el título Sobre todo, debemos leer nuestra
de esta carta. Porque, sin duda, propia vocación. Cada uno la su- do.
Don Bosco insistía:
habrá tenido que exclamar, fro- ya- Para Don Bosco era lo más
-Bueno, señores, sepan que
tándoselasmanosi“ ¡Coca-cola!”, importante, y decía: De la atiMari se habrá reído con ganas y le nada elección de la propia voca si yo no subo, no podrán hablar
habrá contestado:‘‘Cegato, fíjate ción depende la felicidad de la
’ con Don Bosco, porque Don Bos­
bien, que no pone ‘‘Coca-cola’ persona". ¿Habéis pensado con co soy yo.
—“ ¡Naranjas de la China!”,
seriedad lo que el Señor quiere de
vosotros? ¿Lo habéis consultado se le rieron en su cara.-Usted nos va
con alguien? Aquí sí que hemos a venir ahora con cuentos.
de leer sin confundir las palabras
—Lo mejor que hace usted es
y sin erratas. De nuestra palabra ponerse en la cola, le repitió una
pende la incógnita del destino de viejita con mucha seriedad, salpi­
cándole las palabras.
nuestra vida.
Mari, por ejemplo, podría ser
No hubo modo de abrirse pa­
“lectora” de alguna Universidad so. Tuvo que volverse atrás, en lo
del extranjero. Pero, ¿y Juanito? que no halló resistencia alguna.
Quién sabe si un día... Pudiera Libre ya, dejó la cola inmóvil, y
se fue a visitar a una familia que
que un día llegara a ser...
Mientras lo pensáis, oíd lo le esperaba hacía mucho tiempo
que le pasó una vez a Don Bosco: para que bendijese a unenferm o.
En 1883 se encontraba el San­ Si no hubiera sido por aquel con­
to en París, donde se las veía y de­ tratiempo, no habría podido con­
seaba para atender a tanta gente solar a aquel pobrecito.
que acudía a visitarlo. Aquella tar­
- ¡A lo mejor sigue la cola to­
de se le echó el tiempo encima.
Cuando se dirigía a la casa donde davía!
-N o, Juanito. Lo que hicie­
se hospedaba, se encontró con
una cola imponente que aguarda­ ron aquellos buenoseim pacientes
ba y guardaba su turno para ha­ señores fue preguntarse si de ver­
blar con Don Bosco. Bajó del co­ dad había sido Don Bosco aquel
che y caminó a pie. Pero, como fresco.
la escuela
—No es necesario
Es lo mismo que cuando nos
iba vestido a la francesa, nadie lo
para ser ministro.
invita el Señor a seguirlo. “ ¿Será
reconoció.
sino “fl/a a>/a". Y Juanito, decepLo difícil era subir al despa- de veras la voz del Señor?”. Mira
cionado, se habrá resignado una cho. Y lo peor es que nadie lo de­ que si es la voz del Señor...
Por eso hemos de leer bien su
vez más y habrá pensado en su jaba pasar. Eso de llegar el último
equipo de fútbol, que está en pe- y querer entrar el prin.-ro era el llamada, esa que se escucha en el
interior del corazón.
ligro de bajarasegundao a tercera, colmo de la frescura.
Ya veis, que no se puede c o ti“Pero es que este Juanito.
—Abridme el paso, por favor,
fundir
“coca-cola” con “alacola”.
continúa Mari, todo lo equivoca, decía bondadosamente.
El otro día recibió la revista que
-No-lerespondían.-Yotengo Y menos aún “vacaciones” con
hablaba del aumento de las voca- el número 15, y yo el 20, y yo el '‘vocaciones”. Todo es cuestión
de leer bien y sin equivocarse.
cíoner. y el tío pegó un salto de 25...
Recibid un abrazo muy fuer­
alegría, pues leyó “aumento de
—Bueno, al menos déjenme
las vacaciones”.
que me siente en aquel escalón te de vuestro mejor amigo,
PADRE RAFAE'l
No, hombre. Hay que leer la que está vacío.

BOLETIN

S A U E S IA N O
REVISTA M lA B6AMUAS<U£SIANA

Año XCV1I • N.» 3 • M arzo 1984

D irector
RAFAEL ALFARO
C o n s ^ de Redacción:
AureliarK) L ^u n a ; Blas Calejero;
Antonio García Vera; Rafael Moreno
Moreno; Laura Iglesias; Javier Artuch; Argentina Sánchez Romo.
Administrador:
Ramón Gutiérrez.
Dirección, Redacción y Admón.:
Alcalá, 164 - Teléfono 255 20 00
MADRID-2 8
Depósito Legal: M. 3.044-1958
imprime:
Inst. Politécnico Saleslanos-Atocha
(Con censura etíesiástica)

EN ESTE NUMERO
Auge de vocaciones . .
1
XXII Capítulo General de
los Saleslanos . . . .
2
Incremento general de
vocaciones.......
4
Carta a un cura recién
estrenado..........
8
Taizé en París: Encuen­
tro europeo de jóve­
nes ...............................
10
Utrera; el prestigio de
un Pregón salesiano . 12
Almuerzo de trabajo con
Juan Pablo I I ............
14
El Cardenal Silva, Doc­
tor «honoris causa» . 16
Recuerdos y divagacio­
nes en unas Bodas de
O r o .......................
20
Bodas de Oro de la ca­
nonización de Don
B osco....................
24
N o ticia s....................
26
Nuesba gra titu d............
30

Fueron a la casa del Pa­
dre ..............................

31

Becas para las vocacio­
nes salesianas . . . .
32

NUESTRA PORTADA
Saniúcar la lülayor (Sevilla):
¡Qué alegría da el contemplar
un grupo de jóvenes dispues­
tos a entregar su vida a Don
Bosco para trabajar por la
juventud! He aquí a tos novictos salesianos de las Inspec­
torías de Córdoba, Sevilla y
Valencia. Desde ese rincón tan
beUo de Andalucía nos dan
ánirrx» a toda la Familia Salesiana.
Foto.— José Luis Mena.

Auge«i|i
VOCACIONES
• Con cuánto optimismo hemos puesto en la portada de
nuestra revista ese título «Auge de vocaciones». Y nos pre­
guntamos con una pizca de asombro y otra de escepticismo:
¿es un deseo o una realidad? La respuesta es sencilla: las
dos cosas. Es una realidad porque los noviciados salesianos
han crecido. Vemos con esperanza a estas nuevas generacio­
nes de jóvenes que se entregan con amor a la misión salesiana. Los números cantan sobre todo en Inspectorías en las que
se prolongaba el largo invierno vocacional. Hoy parece que la
primavera ha venido y nos llena de entusiasmo la contempla­
ción de su verdor. E l trabajo de tantos años de movimientos
vocacionales y de centros juveniles está dando su fruto. A ve­
ces puede ser que nos descorazone el poco éxito de nuestra
pesca nada milagrosa. Pero la verdad es que nunca resulta
estéril todo trabajo realizado con ilusión. Siempre es fecundo a
corto o a largo plazo, sobre todo, s i lo riega el agua del Espíri­
tu, que es el que da el crecimiento verdadero.
• Pero este crecimiento vocacional tampoco ha de medir­
se con números. ¿Quién es capaz de medir la generosidad de
una entrega al servicio de Dios y de los jóvenes? Tampoco la
magnitud y la belleza de las obras está en proporción con el
número de operarios. No son esos los caminos de la Provi­
dencia que, generalmente, acostumbra a realizar sus hazañas
con los medios más humildes. Por eso mismo, nuestra actitud
de Familia Salesiana es la de poner todas nuestras fuerzas,
siempre escasas, en manos de Dios y de María Auxiliadora
para cumplir la misión que se nos ha confiado.
• Mas, humanamente hablando, ¿de quién depende el
crecimiento de las vocaciones salesianas? La respuesta es
también amplia y segura: de todos. De todas las familias cris­
tianas; de toda la Familia Salesiana. Podríamos seguir pre­
guntando: ¿sabemos presentar a nuestros hijos el ideal sale­
siano, el ideal sacerdotal? Decía René Bazin que hay madres
sacerdotales, las sembradoras del germen vocacional en el
corazón de sus hijos. Esta no es hoy una especie extinguida.
Pero también fe ria m o s preguntamos los que seguimos a
Don Bosco: ¿vivimos nuestra vocación salesiana de manera
que sea atrayente a los jóvenes de nuestro tiempo? Todos, to­
dos somos responsables del futuro salesiano. Y la responsabi­
lidad es grande s i pensamos que la falta de generosidad de
parte de nuestras generaciones pudiera incluso abortar el pro­
yecto amoroso de Dios hacia los jóvenes de nuestro pueblo.
Aunque Dios ya sabría apañárselas para servirse de otros me­
dios.
Pero hoy tenemos gran esperanza en el corazón cristiano
y salesiano de nuestra familia y de nuestra juventud. Los nú­
meros cantan. E l espíritu canta. Y la alegría y la generosidad
juvenil están siendo más que un deseo, una realidad gozosa.
E l Año Santo Salesiano parece que nos hace sentir y prever
no una primavera, sino muchas primaveras vocacionales.

1

documento

El día 14 de enero co­
menzó el XXII Capítulo
General de los Salesianos. Como los dos ante­
riores, se celebra en
Roma, en la Casa General
de los hijos de San Juan
Bosco.

XXII CAPITULO
GENERAL DE
LOS SALESIANOS

Forman parte de este nuevo
Capítulo General el Rector
Mayor don Egidlo VIganó, el
Rector Mayor emérito don
Luis Rícceri, el Vicario del
Rector Mayor, los miembros
del actual Consejo Superior,
setenta y nueve provinciales y
otros noventa y seis delega­
dos. elegidos democrática­
mente por los diecisiete mil
salesianos de las mil cuatro­
cientas obras repartidas por
todos los continentes. Son en
tota! ciento ochenta y ocho
miembros, más seis observa­
dores Invitados por el Rector
Mayor.
Jurídicamente
es
una
asamblea legislativa, que esta

vez se propone en primer lu­
gar hacer la redacción definiti­
va de sus estatutos —consti­
tuciones— o «regla de vida»
de la Sociedad Salesiana.
Tales estatutos o constitu­
ciones deben ajustarse a las
disposiciones del nuevo códi­
go de derecho canónico y a
las necesidades modernas de
la acción apostólico-educativa
en el campo juvenil, rasgo cen­
tral de la identidad salesiana.
El primer Capítulo General
Saiesiano lo convocó y presi­
dió en 1877 el mismo San
Juan Bosco. Duró treinta días
y participaron veintitrés miem­
bros. La Sociedad Salesiana
acababa de ser aprobada por

la Santa Sede tres años an­
tes.
Don Bosco presidió los cua­
tro capítulos primeros. El últi­
mo de ellos sólo duró una se­
mana.
Ya en 1922 el XI! Capí­
tulo General tuvo que re­
visar ios estatutos satesianos, para ponerlos de
acuerdo con el código de de­
recho canónico, promulgado
por la Santa Sede el año
1917. Además, en aquella
ocasión se trataron con ampli­
tud algunos problemas espe­
cíficos de las misiones y se
examinó un sector importante
de la actividad salesiana: las
escuelas profesionales, que

ROMA: Ei Rector Mayor pronuncia el discurso de apertura del Capítulo General.

documento
ROMA: El Rector Mayor lee a los
Capitulares la carta-telegraina en­
viada por el Papa ai XXII Capítulo
General de los Salesianos.

se habían ido enriqueciendo
con importantes datos de la
experiencia vivida en las di­
versas culturas a las que ha­
bían llegado. Entonces ya ha­
bían pasado cuarenta años
desde la aprobación de la So­
ciedad Salesiana por parte de
la Santa Sede. Entonces el
número de salesianos llegaba
a la cifra de cinco mil cua­
trocientos ochenta.
El año 1971, de acuerdo
con el decreto sobre la vida
religiosa promulgado por el
Concilio Vaticano II, los sale­
sianos celebraron su XX Ca­
pítulo General. Se lo llamó y
se llama «especial». Hasta
ahora es el más largo: seis
meses y veintiséis días. Ha­
bía doscientos dos delega­
dos, que representaban a más
de veintidós mil salesianos.
Preparó y decretó profundas
renovaciones en las estructu­
ras y se dispusieron nuevas
formas de actuación salesia­
na, adecuada a unos tiempos
que evolucionan con rapidez y
profurnjidad. Fue redactado y
aprobado «ad experiméntum»
un nuevo texto de los estatu­
tos o constituciones, «fruto de
larga y delicada latx>r, llevada
a catM con la preocupación
constante de permanecer ple­
namente fieles a Don Bosco...». Las nuevas constitucio­
nes —dijo el Rector Mayor de
entorx»s, don Luis Rícceri—
nos harán ver de un nxKJo
concreto que somos miem­
bros de la misma congrega­

ción, estemos donde estemos
y actuemos donde actuemos,
y viviremos la «comunión»
que hace de todos los saleslanos una única y auténtica fa­
milia.
Efectivamente: Desde los
tiempos de Don Bosco —y por
intuición feliz del Santo— el
«espíritu de familia» —es de­
cir, el querer y saber trabajar
fraterna y serenamente uni­
das comunidades educativas
y apostólicas, valorizando lo
más posible el dinamismo
creativo y las posiblidades de
cada persona— fue uno de los
secretos del prodigioso desa­
rrollo y de la fecundidad de re­
sultados en la obra salesiana
de todo el mundo.
Hoy los salesianos están
allá donde los problemas de
los jóvenes y de los pobres
—sobre todo los problemas
más graves y urgentes— re­
quieren mayor comprensión,
solidaridad y acción generosa,
con sus colegios, misiones,
catcquesis, centros juveniles,
animación sociocultural, coo­
perativas agrícolas y de arte­
sanos, centros de formación
obrera, asi como centros de
recuperación para toxicómanos, marginados, prófugos o
leprosos.
Durante los últimos años la
preséntela salesiana ha creci­
do de un modo espectacular
en Africa y en los pueblos
nuevos. Los resultados no se
han hecho esperar: Naciones
consideradas no hace mucho

«tierras de misión», ahora ven
cómo se afirman y multiplican
comunidades cristianas de un
florecimiento juvenil y fecun­
do. Como en épocas pasadas
lo hizo la vieja Europa, hoy la
India, Filipinas, Corea e Hispoanoamérica mandan sus
propios misioneros a tierras
en que la evangelización es
más reciente o se está implan­
tando.
En los países de antigua
tradición cristiana el análisis
de la condición juvenil de un
siglo que ha visto la explosión
de fenómenos graves y lace­
rantes —la contestación de
1968, el terrorismo, la droga y
otras mil formas de degrada­
ción social, consecuencia de
la tan cacareada sociedad del
bienestar— ha llevado a for­
mas nuevas de educación y
de acción social. En este com­
plejo cuadro los salesianos se
dedican cada vez con más
fuerza a los movimientos y
asociaciones laicales que in­
vocan el nombre de Don Bos­
co: Cooperadores salesianos
y antiguos alumnos son hoy
día los mejores colaboradores
de la Sociedad Salesiana en
su labor educadora. Una ac­
ción que ha adquirido y utiliza
al máximo la comunicación
social con sus lenguajes y
complejas técnicas: las edito­
riales, b s centros de produc­
ción audiovisual, y los de pro­
ducción y emisión por radio y
televisbn son cada vez más
en número y en calidad, junto
a los colegios, los centros ju­
veniles y las parroquias salesianas.
Durante ios meses próxi­
mos el XXII Capitulo General
de la Sociedad Salesiana de
San Juan Bosco se hará aten­
to Intérprete de tan prometerdora realidad, aunque siem­
pre con la mirada puesta en el
futuro.
HECTOR SEGNERI, S.D.B.

3

vocaciones
SANLUCAR LA MAYOR: Novicios
salesianos de las Inspectorías de
Córdoba, Sevilla y Valencia.

SESENTA JOVENES
INICIAN EN LOS
NOVICIADOS DE
ESPAÑA LA
EXPERIENCIA
SALESIANA
AL SERVICIO
DE LA JUVENTUD

INCREMENTO
GENERAL DE
VOCACIONES
UNA VENTANA
ABIERTA
A LA ESPERANZA
Los ventiún rostros sonrien­
tes de portada quieren ser
una ventana abierta a la esparanza para los lectores del
^ le tín Salesiano. Son los
ventiún novicios de Sanlúcar
la Mayor en Sevilla. Provienen
de las Inspectorías Salesianas de Córdoba, Sevilla y Va­
lencia. A ellos se suman otros
treinta y nueve novicios que
se forman en las otras Inspec­

torías de España. En total,
sesenta novicios saiesianos: un buen rejuvenecimien­
to para los salesianos españo­
les al servicio de la juventud.
Subrayamos el aconteci­
miento porque las Inspecto­
rías Salesianas del Sur y de
Levante no se habían distin­
guido últimamente por la
abundancia de vocaciones. Y
hoy ya son diez los novicios
de Córdoba, siete los de Sevi­
lla y cuatro los de Valencia.
Mohemando, con venticuatro novicios de la Inspectoría

de Madrid, se mantiene en ca­
beza de los Noviciados espa­
ñoles, como ha sido general
en los últimos años. Las Ins­
pectorías de Barcelona, Bil­
bao y León acusan un peque­
ño descenso sobre cursos an­
teriores, pero en todas ellas
hay una cierta estabilidad vocacional y buenas perspecti­
vas para los próximos años.
La Inspectoría de Madrid
tiene además dos novicios
guiñéanos en el Noviciado de
Africa Central en Kansebula.
La Operación Africa empie­
za a dar sus primeros frutos
vocacionales. Por vez prime­
ra en la historia de la Congre­
gación entre nosotros hay dos
futuros salesianos de color.
La esperanza se inscribe en
una cierta línea de recupera­
ción perceptible en los últimos
años. El año pasedo fueron
cincuenta y tres las nuevas
profesiones de salesianos.
Y de cara al futuro hay seña­
les de progreso en el trabajo
vocacional de las comunida­
des, la marcha ascendente
del asociacionismo entre no­
sotros y la estabilidad de ios
postulantados y centros de
orientación vocacional.
Los Noviciados de Hijas
de María Auxiliadora tam­
bién ofrecen esperanza: son
trece las novicias salesianas
en Sevilla —tres de la Inspec­
toría de Barcelona— y siete
en El Plantío de la Inspectoría
de Madrid.

T
vocaciones
INCREMENTO GENERAL
DE VOCACIONES
La esperanza es mayor, si
cabe, cuando esta recupera­
ción vocacional de los Novi­
ciados salesianos se inscribe
en un contexto más amplio de
aumento de vocaciones en
España y en la Iglesia.
Unas estadísticas recientes
apuntan que hay aumento
gradual en el número total de
alumnos de los Seminarios
Mayores en España. En este
curso son casi dos mil los
seminaristas mayores casi
cuatrocientos de aumento so­
bre la cifra de 1979.
Parece que ha quedado
atrás el descenso progresi­
vo de vocaciones que se ha­
bía producido en España de
1964 a 1979. Treinta y siete
Seminarios españoles han
crecido a partir de este año
gradual y progresivamente.
Y este incremento parece
se está dando tanto en dióce­
sis de predominio rural, como
en las grandes zonas urba­
nas.
Madrid, con 177 seminaris­
tas mayores y Toledo con 170
van a la cabeza de las Dióce­
sis españolas. Pero también

NOVICIOS SALESIANOS
EN ESPAÑA
Año 1983-84
Sesenta novicios se preparan para ser los nuevos salesíanos de España en el presente curso 1983-84. He aquí el
número correspondiente a las diversas Inspectorías;
Barcelona: 3 novicios, en Tarrasa.
Bilbao: 3 novicios, en Logroño.
Córdoba: 10 novicios, en Sanlúcar la Mayor.
León: 5 novicios, en Astudillo.
Madrid: 24 novicios, en Mohernando (2 en El Zaire).
Sevilla: 7 novicios, en Sanlúcar la Mayor.
Valencia: 4 novicios, en Sanlúcar la Mayor.

NOVICIAS
DE LAS HIJAS DE MARIA AUXILIADORA
Inspectoría de Barcelona: 3 novicias.
Inspectoría de Madrid: 7 novicias.
Inspectoría de Sevilla: 10 novicias.
Total: Sesenta novicios salesianos y veinte novicias saie-

sienas.

Barcelona, Burgos, Alicante y
Valencia están entre las dió­
cesis que superan los cin­
cuenta seminaristas Mayores,
según datos de la Comisión
Episcopal de Seminarios.
Entre los Religiosos, parti­

cularmente en las congrega­
ciones de varones y entre las
Religiosas que se han tomado
en serio la Pastoral Vocacio­
nal, parece constatarse un in­
cremento en el mismo senti­
do.

MOHERNANDO: En el Noviciado de la Inspectoría de Madrid se alza esta reproducción exacta de la Casita Natal de
Don Bosco. Es lógico que se acostumbren a contemplarla los que se preparan a nacer para la vida saleslana.

vocaciones

INCREMENTO
GENERAL DE VOCACIONES
«EL ALBA
DE UNA SITUACION
NUEVA»
Ya Juan Pablo II en su Men­
saje para la Jornada Mundial
de Oración por las Vocacio­

san un moderado despuntar
en Irlanda, Alemania, Gran
Bretaña, Yugoslavia, Canadá,
Australia y Filipinas... Mien­
tras que denotan poco o nin­
gún progreso países como
Francia, Italia, Bélgica, Holan­
da y EE.UU...» (Alocución a la

MOHERNANDO: No, no estamos en una discoteca: son novicios del pasa­
do año, hoy recién profesos de la Inspectoría de Madrid.

nes en 1983 — la vigésima de
las celebradas en la Iglesia—
destacaba «el consuelo de re­
gistrar en muchos lugares de
la Iglesia el alba de una si­
tuación nueva, por el hecho
de que son cada vez más nu­
merosos los que responden a
su llamada». Y daba gracias
al Señor por este «despertar
alentador y renovada genero­
sidad» en muchos.
Según declaraciones de
Mons. William Mullins de la
Sagrada Congregación para
la Educación Católica: «las
vocaciones al Sacerdocio Dio­
cesano están más florecientes
en muchos países de América
Latina. Africa y Polonia... Acu­

41 Convención Serra en
Roma en julio 1983).
Según estas declaraciones
hubo un aumento de cinco
mil seminaristas mayores a
nivel internacional en los úl­
timos cinco años. Esto da lu­
gar a un moderado optimismo
a nivel eclesial.

HAY UNA NUEVA
CONCIENCIA
Nos parece aun más signifi­
cativa la nueva mentalidad
que está surgiendo en la Igle­
sia y que constatamos tam­
bién entre nosotros. Una nue­
va conciencia en la comuni­

dad respecto a su responsabi­
lidad de mediación vocacional
y un nuevo estilo en la Pasto­
ral de Vocaciones.
Nuestros Documentos más
recientes (Cfr. «Vector 7: «Lí­
neas esenciales para un Plan
Inspectorial de Pastoral Voca­
cional», CCS, 1981), y cree­
mos sea la línea del actual
Capítulo General, apuntan a
unas Opciones Básicas en la
Pastoral Vocacional.
Ante todo, una Pastoral In­
serta en la Pastoral Juvenil.
La opción vocacional es fruto
de una adecuada y correcta
educación de la fe. Y no cabe
Pastoral Juvenil o Catequesis
que no atienda a esta dimen­
sión imprescindible de «hacer
emerger la llamada personal
que Dios dirige a todo joven»
(CG XXI, 110).
Nosotros los Salesianos, fa­
vorecemos «la maduración de
vocaciones apostólicas —lai­
cales, religiosas y sacerdota­
les— en beneficio de toda la
Iglesia» (Const. art. 12). Es un
aspecto de nuestra misión
desde Don Bosco, que dio
más de dos mil sacerdotes a
las Diócesis del Piamonte.
Y tenemos una responsabi­
lidad peculiar, en cuanto al carisma salesiano se refiere;
«colaborar activamente con el
Espíritu Santo a suscitar vo­
caciones salesianas, tanto
consagradas como seglares
(CG XXI, 110).
Nuestras vocaciones —se­
ñaladamente en algunas Ins­
pectorías— provienen de mu­
chachos que han madurado
su opción vocacional en gru­
pos cristianos de fe o en cen­
tros de orientación y postulantados que ayudan a decantar
una primera opción realizada
en cursillos veraniegos de
orientación vocacional.
Los Salesianos hemos op­
tado, además, por una meto­
dología concreta en la Pas­
toral Vocacional: la Orienta­
ción. Se trata de un proceso
de ayuda ofrecida a todo chico
que Dios pone en nuestro ca­
mino, y en cualquier etapa de
su maduración personal —in­
fancia, adolescencia, juven-

El movimiento «¡Cristo vivel» es
una buena escueia de formación de
donde han salido numerosas voca­
ciones para la vida salesiana. Díga­
se otro tanto de los movimientos
«Luz» y «Vida» de la inspectoría de
Córdoba.

tud— para que opte por un
Proyecto de Vida en el que
tome postura:
— respecto a sí mismo y sus
valores
— respecto a los otros y a la
realidad circundante
— y respecto a Dios.

TAREA INELUDIBLE
DE TODA
LA COMUNIDAD
También con toda ia Igiesia
que así se define en el Congreso Internacional de las Vo­
caciones, percibimos cada
vez con mayor claridad que la
orientación y la Pastoral Vocacional son tarea ineludible de
cada salesiano y de toda la
comunidad. Porque la comu­
nidad está en el origen, el ca­
mino y la meta de las vocacio­
nes consagradas.
La vocación nace en la co­
munidad, crece, se cultiva y
desarrolla en el grupo y la co­
munidad, y la llamada a la
vida religiosa y más concreta­
mente a la vida salesiana, es
llamada al seguimiento de
Cristo en comunidad.
Vamos comprendiendo que
en ia comunidad todos ios
miembros —jóvenes y mayo­
res, superiores o hermanos—
tienen su propia responsa­
bilidad y tarea en la causa
de las vocaciones, y no sólo
los Agentes de Pastoral y En­
cargados de las Vocaciones.
Finalmente, se va abriendo
camino la idea de que nuestra
pastoral «se inserta vitalmen­
te en la acción de la Iglesia
Local» y que hemos de ade­
cuamos a las orientaciones de
los Obispos «en unidad de cri­
terios doctrinales y prácticos»,
ofreciendo «nuestra experien­
cia y nuestro carisma específi­
co en la orientación y promo­

ción de las vocaciones», inte­
grándonos «en el trabajo y
compromiso concreto en favor
de las vocaciones» y tendien­
do «al bien general de la Igle­
sia sin estrechez de miras ni
particularismos» (CG XXI,
113,119).

UNA LLAMADA
A LA COLABORACION
DE TODOS
Todo esto quiere ser una
llamada también a todos los
lectores del Boletín y a los
amigos de Don Bosco. En el
pasado bastantes vocaciones
a la Familia Salesiana surgie­
ron de la lectura del Boletín.
Es a toda la comunidad cris­
tiana a quien Incumbe la res­

ponsabilidad de las vocacio­
nes.
¿No habrá también hoy en­
tre los lectores del Boletín aluno que quiera compartir con
on Bosco la responsabilidad
en favor de los jóvenes? ¿No
sigue habiendo familias cris­
tianas que entiendan, como
decía Don Bosco que «el ma­
yor tesoro que Dios puede
conceder a una familia es un
hijo sacerdote»?
Nos alienta un moderado
optimismo. Hay camino abier­
to a la esperanza. Pero sigue
siendo urgente e inmensa la
tarea. Los salesianos no están
en paro. Queremos compartir
con otros el carisma de Don
Bosco en favor de la juventud.

g

ANTONIO S. ROMO

7

BARCELONA: Liturgia de ia orde­
nación sacerdotai de un saieeiano.
El «pueblo sacerdotal» ayuda y
alienta al nuevo sacerdote.

V

y

%

Souto. TÚ, ni más ni menos.
No me costó tampoco ente­
rarme de tu ascendencia ta­
rraconense de Las Casas de
Aicanar por parte de padre, y
gallega —El Ferrol— por el
lado materno. Pero, eso sí, tú
eras catalán, de Barcelona.
También supe pronto de tus
años pasados en Vallcarca,
de ciertas peripecias escola­
res en Rocafort y hasta de tus
operaciones infantiles... Eras
un chico abierto, hay que re­
conocerlo. Y hasta dichara­
chero y bromista. No te faltaba
sentido del humor.
Te integraste pronto, a pe­
sar de la desventaja que su­
ponía el haber estudiado sólo
un año de latín (los demás lle­
vábamos ya tres cursos de
ros3j rosae...).
A l poco tiempo ya eran evi­
dentes tus cualidades teatra­
les y humorísticas y no había

CARTA A UN CURA
RECIEN ESTRENADO
Querido Emilio:
Corría el mes de septiem­
bre u octubre de 1965 no lo re­
cuerdo bien. En la casa salesiana de Gerona, a la sazón
aspirantado salesiano. ya ha­
bíamos empezado el curso.
Un día —creo que una tarde,
para ser más exactos— me
llama el P. Director, D. José
María Sanz.
— Mira, ha venido un nuevo
compañero que va a ir a vues­
tra clase. Acompáñale al dor­
mitorio, enséñale la casa y
luego llévale al estudio.

8

Me tocó asistir a la despedi­
da; a llí estaban sus padres. Si
es verdad que la madre se
emocionó al dar el adiós al
hijo, lo es más que al padre se
le saltaban las lágrimas. ¡Era
el único hijo varón, el que de­
bía dar continuidad al apelli­
do! Y ya ves, qué ideas, ser
cura, ser salesiano.
En seguida supe que venía
del colegio de Rocafort (don­
de había estudiado los tres
primeros cursos del bachille­
rato elemental) y que se lla­
maba Emilio; Emilio Marcos

velada o sobremesa donde no
aportases tu granito de are­
na..., o una paletada entera.
De carnes venías más bien
entrado; tus padres —él estu­
pendo cocinero de la Bene­
mérita, ella buena madre
como todas— te tenían lustro­
so. La austeridad del aspiran­
tado, el trabajo y los deportes
te mantuvieron a raya... La
eclosión del peso vino más
tarde, con lo cual rubricaste
físicamente el talante interior
que siempre habías demos­
trado: bonachón, excelente

compañero, siempre dispues­
to a ayudar, buen conversa­
dor, alegre, bienintencionado,
tranquilo pero seguro, etc.
Aquellos kilos de más, en una
muestra de inquebrantable fi­
delidad, ya nunca te han
abandonado; es más, con el
pasar de los años se han he­
cho connaturales a tu perso­
na; sin ellos no serías tú.
Cuando profesaste en Sentmenat. el año 70, la felicidad
familiar era ya tan notable que
ni la separación de los más de
1.000 kms. (E l Ferroi-Barcelona) dejaba mal sabor de boca.
Tu padre no sólo había dejado
de lado toda preocupación; es
que ahora estaba entusiasma­
do con don Bosco y con tu vo­
cación... Vamos, como un
BARCELONA: Ordenación sacerdo­
tal de este joven saleslano. El Obis­
po realiza la unción de las manos.

BARCELONA: Los sacerdotes con­
celebrantes imponen las manos so­
bre el ordenando.

niño con zapatos nuevos.
i Y cómo alardeabas en
aquellos años de sobrina-quebaila-muñeiras, dando envidia
a los que aún no nos había­
mos estrenado en el delicado
rol de tíos!
El magisterio —como en
todo, lento pero bien— que
acabaste y ejerciste en el Tibidabo, con los niños de la Escolanía, creo yo que te dejó

huella en tus aptitudes peda­
gógicas ya innatas.
Y los estudios eclesiásticos
—hechos desde la vida, en
esa situación ahora lamenta­
blemente perdida para los que
nos vienen detrás— te marca­
ron en tu quehacer evangelizador y catequético. ¡Qué
años aquéllos, los de la Parro­
quia San Juan Bosco! Entre
grupos y salidas, eucaristías y
pascuas, reuniones y colo­
nias, clases y exámenes...
¡qué rápidos pasaron! Y de

Navidad en Navidad recuerdo
que os rendíamos visita: no
era caso desperdiciar la tetilla
gallega que habías traído de
casa.
Y ahora, tras unos años en
la cuna salesiana de Sarriá,
has soltado todas las amarras
y te has lanzado al vacío de la
vida confiando en los acoge­
dores brazos del Padre y de
los hermanos: te has hecho
sacerdote, te han ordenado
para el servicio de los jóve­
nes. A hí es na...
Emilio, no sólo tu gesto sino
toda tu trayectoria es señal
que orienta y faro que ilumina
a muchos otros, a muchos jó ­
venes que te conocen y tra­
tan.
Enhorabuena y
cuenta
siempre con este colega en el
ministerio que respetuosa­
mente besa tus manos..., y te
da con cariño un cate en tu
mullida barriga.
Hermano en Don Bosco,
CRISTOBAL LOPEZ

jóvenes

TAIZE EN PARIS
ENCUENTRO EUROPEO DE JOVENES
Llegados de toda Europa para orar por la paz y la reconciliación, mi­
llares de jóvenes han sido acogidos por los cristianos de París y de
sus entornos. Como viene siendo habitual, la presencia salesiana y
española es notable en estos encuentros.

El Hermano Roger de Talzé sigue convocando a los jóvenes y alentándolos a abrir el corazón a la unidad y a la
fraternidad universal.

«TIENES MAS VALOR
QUE EL GUERRA»
En mi Comunidad Saiesiana de
Córdoba, tengo un compañero y
amigo cargado de perspicacia y
sentido del humor. Cuando me ve
preparando todo ei «tinglado» que
su(ráne la participación de un gru­
po numeroso (fuimos 120 cordo­
beses y canarios) en los Encuen­
tros Europeos de Jóvenes de Taizé, me suele repetir la famosa fra­
se taurina: «[Anda, que tienes
más valor que el Guerra!»
Y la verdad es que, si uno se lo

10

piensa dos veces, la tentación de
abandonar está a la vuelta de la
esquina: meterse por esas carre­
teras de Dios en pleno invierno,
cargar con las propias limitacio­
nes y con las de 120 compañeros
de viaje, ir dispuestos a comer lo
que sea, a dormir donde sea, a
que «te vaya a pasar algo»... La
tentación de tirar la toalla está ahí
como un remordimiento.
Pero hay un cúmulo de razones
que contrapesan la balanza y te
hacen vencer la tentación, lanzán­
dote «pa lante como ios de Alican­
te»: Ves mundo, sales de la rutina

diaria, conoces a miles de amigos
con tus mismas inquietudes, via­
jas, te rejuveneces en el espíritu,
y, sobre todo, sientes el gozo ine­
fable del encuentro profundo con
el Infinito a través del Espíritu que
late en Talzé, y experimentas la
alegría de ver la felicidad en el
rostro de los jóvenes a quienes
ayudaste a llegar allí.

OBRA DE TITANES
¡Dios mío, qué follón! Taizé si­
gue siendo una aparente desor­
ganizada organización; miles y

r

jovenes
miles que van llegando sin inte­
rrupción; hay que darles a todos
alojamientos, comida, explicacio­
nes, mapas, bonos para el auto­
bús y el metro..., la gente se impa­
cienta en la espera, a veces se
pone impertinente... Los jóvenes
cristianos de París son excelentes
pero muy poco numerosos (me di­
cen que tan sólo ei1 % de los pari­
sinos es practicante). Hay que im­
provisar animadores, coordinado­
res, traductores, agentes de servi­
cios técnicos... ¡Ah! Pero en po­
cas horas todo esto funciona.
Realmente el espíritu de estos
Hermanos y de sus jóvenes ayu­
dantes es de un temple fuera de
serie: sólo una enorme dosis de
amor a Dios y al prójimo puede
explicar esta obra de titanes. Ver­
daderamente: «El dedo de Dios
está aquí».

CAMPOBOSCO EN PARIS
Javi y Juan Pablo llevaban al
cuello la famosa pañoleta con los
símbolos de nuestro CAMPO­
BOSCO 83 de Mohemando. Fue
un reclamo formidable de reen­
cuentro para muchos de los jóve­
nes presentes en París: «Es ver­
dad, oye, tú eres aquel rubiales de
Córdoba». «Qué tal, yo a ti te co­
nozco, ah sí, tú eres aquella chá­
vala de los cooperadores jóvenes
de Barcelona, y tú el de Salaman­
ca y tú...» «Oye, ¿ha venido aquel
salesiano alto y con barba de Cór­
doba?»
Nuestra juventud salesiana es­
pañola se reencontraba en la in­
mensa primavera de la Iglesia que
sigue siendo la realidad de Taizé.

EN PARIS,
EL VI.® ENCUENTRO
EUROPEO DE TAIZE
Austeridad, recogimiento, em­
brujo: en Notre-Dame, en S. Sulpicio y en Saint-Germain-desPrés simultáneamente, sin pompa
exterior, algunas decenas de ve­
las sobre el altar mayor. Con
ellas, sólo los hábitos blancos de
los Hermanos de Taizé, arrodilla­
dos, perforan la penumbra. Acu­
rrucados los unos contra los otros,
sentados sobre el mismo pavi­
mento, de pie, arrodillados..., mi­
llares de jóvenes oran y meditan
eri el silencio. Recogidos en una
misma intimidad, en una unión de
la que es testigo cada columna (ni
una sola queda libre) del templo.
Una intimidad que une a la Co­
munidad de los Hermanos de Tai­

zé con los 25.000 jóvenes que,
aquel miércoles de diciembre, han
«invadido Parts».
Durante cincx) días participan
en el Vl.° Encuentro Europeo de
Jóvenes convocado por la Comu­
nidad de Taizé.

EL HERMANO ROGER
INVITA A LA JUVENTUD
A DESCUBRIR
«EL AMOR LOCO» DE DIOS
Mañana y tarde, en NotreDame, donde se reúnen sobre

DE LA CARTA
DE HAITI
«Lo urgente es buscar,
con todas tus fuerzas,
cómo disminuir e inciuso
curar io que es enferme­
dad, Haga de las perso­
nas y de los pueblos...
Hoy, en la comunidad hu­
mana, hay abundancia
para unos y hambre para
otros... El Dios del Evan­
gelio no quiere ni sufri­
miento ni angustia para
nadie...
Si te dejaras revestir
del perdón de Dios como
con un vestido... Si en
torno a ti no fueses más
que perdón, irradiarías
una transparencia de
Evangelio, incluso sin tú
saberlo. Fermento de
confianza y de paz, com­
prométete. Da lo que
Dios te da».
HERMANO
ROGER DE TAIZE
todo españoles (5.000). alemanes
(4.000), franceses y polacos: en
S. Sulpicio donde se encuentran
los italianos (6.000), yugoslavos y
portugueses; en Saínt-Germaindes-Prés donde están concentra­
dos los escandinavos, 25.000 jó­
venes oran, velan, confraternizan
como en Taizé.
Como en Taizé, el Hermano
Roger se levanta. Su silueta com­
pletamente Nanea, se dobla.
Toma un taburete, y esta vez,
frente a la multitud, rodeado tan
sólo de dos traductores, él habla.

Con su voz cálida, a la vez llena
y amortiguada, él salmodia: «Tú,
Jesús, el Cristo Resucitado, cuan­
do la indiferencia, la duda parecen
llevárselo todo. Tú estás allí para
reanimar el fuego que brilla en el
interior de nosotros».
Los hombres de Haití (de dón­
de regresa), de Calcuta (él ha re­
cibido recientemente a Madre Te­
resa), vuelven a la boca del Her­
mano Roger. Al lado de estos lu­
gares de muerte visibles, dice,
«muchos jóvenes en las socieda­
des occidentales se encuentran
en lugares de muerte invisibles».
Las frases son fuertes, pene­
trantes y resuenan como otras
tantas llamadas: «Entre esos jó­
venes, la inocencia de la Infancia
y de la adolescencia ha sido heri­
da. Herida por los abandonos, por
toda una serie de pequeñas muer­
tes interiores... Hay que hacer
todo lo posible para que esos jó­
venes descubran los dones crea­
dores puestos en cada uno de
ellos por_ Jesús el Resucitado».
Luego, anade esto otro: «El amor
loco es el secreto que nos viene
de Dios. Es él quien nos permite
desgarrar el velo que nos oculta a
Dios, a nosotros mismos, a los de­
más».
Como en Taizé también, el Her­
mano Roger toma de la mano a
un nino. Un pequeñín de Haití. Se
dirige al grupo de polacos para
darles un regalo. Estos polacos,
dice él, que viven «las primicias
de una primavera de la Iglesia».
Son 300, venidos de Katowice,
Lublín, Wroclaw, Varsovia...
El joven polaco Bogdan nos
dice rómo él está prendado por la
«atmósfera magnífica de esta
asamblea». ¿Lo que le atrae ha­
cia Taizé? «Es el manantial de mi
vida y de mi fe».
La palabra de Dios es leída en
los distintos idiomas, es ya casi el
final. Incansablemente la coral y
la asamblea vuelve a tomar el es­
tribillo: «La ténébre n’est point ténébre devant toí; la nuít comme le
jour est iumíére» («La tiniebla ya
no es tiniebla ante Ti. Tanto el oía
como la noche es resplandor»). Y
otras veces: «Dona nobís pacem,
Domine...» («Señor, danos la
paz»).
La repetición de la misma línea
melódica crea el embrujo... En las
grandes iglesias de París, se que­
dan muchos entre los cantos y los
rriomentos de silencio, sentados,
para orar a Dios y alimentar el se­
creto de este «amor loco» que El
ha puesto en nuestros corazones.
LUIS FERNANDEZ CONDE

11

actividades

El Pregón Navideño que or­
ganiza cada año la Asocia­
ción de Padres de Alumnos
del Colegio Salesiano de
Utrera, es ya como una Ins­
titución en la ciudad quínteriana. Y hasta tiene su fama
bien ganada por toda esta
parte del Sur de Andalucía.

UTRERA:
EL PRESTIGIO DE UN

PREGON
SALESIANO

La idea nació hace nueve
años. Regentaba la casona
del Carmen dori Manuel Bravo
Fernández y era presidente
de la Asociación de Padres
don Domingo Ramos Picón.
Allí, en ei seno de una de las
reuniones de la junta directiva,
se tomó el acuerdo de hacer
un Pregón navideño para que
se hablara de Dios y de Paz. Y
para reunir en un acto frater­
nal a los alumnos, padres de
alumnos y a todo el que se
sintiera atraído por el mensaje
navideño y la familia salesiana.
Tuve la suerte de ser desig­
nado primer Pregonero. Algo
de lo que cada vez me siento
más orgulloso ya que, siendo
ei más modesto, abrí el cami­
no por el que habrían de pa­
sar oradores de reconocido
prestigio.
Me siguió, al año siguiente,
don José María Javierre, el di­
námico periodista, que puso a
su disertación el título de «Na­
vidad para el hombre de hoy».
De él recogió la antorcha pre­
gonera doña Carmen Llopart

12

UTRERA: D. Manuel Bravo, exdirector del Colegio, ha sido el pregonero de
este año.

y, en 1978, le sucedió en la tri­
buna doña Soledad Becerríl,
la que más tarde habría de ser

ministro de Cultura. Y, tras
ella, llegó ei entonces director
general de la Juventud don

actividades
Ginés López Cirera. En 1980
se inició lo que habría de ser
una especie de tríptico de
poetas prestigiosos. Desde
Madrid nos llegó expresamen­
te hasta Utrera don Rafael Al­
tare y, al año siguiente, con
las sales de su Puerto de San­
ta María a cuestas, nos vino
don José Luis Tejada para ce­
rrar este, ciclo el antiguo alum­
no de Utrera, arcense de naci­
miento, don Antonio Murcia­
no.
Y así, hasta llegar a esta
edición que, como todas las
anteriores, se celebró en la
amplísima iglesia de María
Auxiliadora, exornada con ex­
quisito gusto siempre, y para
la que fue invitado don Manuel
Bravo Fernández, el creador
de todos estos Pregones
cuando, como decíamos, era

director de la primera casa salesiana de España en el año
inolvidable de su centenario.
Su Pregón, lleno de profun­
didad y ternura, fue como un
mensaje para la juventud ac­
tual tan llena de problemas y
esperanzas. Intervinieron en
el acto la masa coral del cole­
gio, grupo de campanilleros
Nuestra Señora de las Nieves,
de Los Palacios, conjuntos
musicales, el director actual
del centro, don Miguel Gutié­
rrez Muñoz, y cerró la velada
con breves, pero acertadísi­
mas y oportunas palabras, el
arzobispo de Sevilla don Car­
los Amigo Vallejo, quien había
presidido el Pregón junto con
el inspector salesíano y el ar­
cipreste del partido.
Notas curiosas de estos
Pregones — historia de la his­

toria, como diría el popularísimo Carfos Pisas— fueron que,
en dos ocasiones cada uno,
actuaron los prestigiosos ar­
tistas Enrique Montoya y Juan
Peña «El Lebrijano» y, en una
ocasión, la famosa artista
Inés. En 1979 la masa coral
del colegio —fue un momento
muy emocionante— interpretó
el Himno de Andalucía por
vez primera. En 1980 el Grupo
Centenario estrenó el Himno
de la Coronación de María
Auxiliadora. Y, en todos estos
actos, la nota simpática estu­
vo a cargo de uno de los alum­
nos más pequeños del centro
quien era el encargado oficial
de felicitar, con tintes de hu­
mor, a toda la familia salesiana.
SALVADOR DE QUINTA

UTRERA: El Arzobispo de Sevilla, monseñor Amigo Vallejo, preside el acto del Pregón, junto al P. Inspector de
Sevilla y el Director del Colegio.

T

con el Papa

ALMUERZO
DE TRABAJO
CON JUAN PABLO II
De «L’Osservatore Romano» del 12-13 de diciembre de 1983: t<EI Santo Padre
ha recibido esta mañana en audiencia...
... al reverendísimo don Egidio Viganó, Rector Mayor de la Sociedad Salesiana de San Juan Bosco, con el P. Vicario y algunos Consejeros».

Hay que ponerse de fiesta;
hoy comemos con el Papa. No
es cosa de todos los días
—me voy diciendo para mis
adentros— mientras desem­
polvo la sotana y aireo el viejo
abrigo con cuello de terciope­
lo, que huele a cerrado.
¿A qué se debe una invita­
ción tan agradable? El Rector
Mayor, ante la inminencia del
capítulo general había solici­
tado de Su Santidad Juan Pa­
blo II una audiencia privada,
precisamente para decirle
eso: que estamos ante un ca­
pítulo, contarle cómo se ha
preparado y pedirle un en­
cuentro con los capitulares y
una bendición para sus traba­
jos.
Si el capítulo géneral es un
hecho de Iglesia —y lo hemos
repetido por doquier hasta
convencer al más distraído— ,
el Papa no podía permanecer
ajeno. Su Santidad le respon­
dió al Rector Mayor que le es­
peraba el lunes, 12 de diciem­
bre, a la hora de comer. En
otro momento alguien le pre­
guntó que cuántos comensa­
les llevaría consigo. —Cuatro,
respondió don Egidio sin vaci14

lar un instante. L’Osservatore
Romano, según su proverbial
discrección, sólo dice que con
el Rector Mayor iban el P. Vi­
cario —don Gaetano Scrivo—
y algunos consejeros. Noso­
tros, por deber de buen cro­
nista, tenemos que añadir los
nombres de esos consejeros.
Son: El P. Vecchi —regulador
del XXII Capítulo General— ,
el ecónomo o administrador
don Homero Parón y el conse­
jero regional de Asia — P. To­
más Panakózham— .
La cita era para la una de la
tarde. Así que, vestidos de
fiesta, con un poco de antici­
pación llegamos ante la puer­
ta que da a las habitaciones
privadas del Papa.
A la hora convenida, el
guardia suizo toca la campani­
lla para enerar. Pasan unos
minutos largos —para no rom­
per la tradición de que Roma
es eterna en todo— y aparece
un monseñor que por el color
de su tez adivinamos en se­
guida que no se trata de| se­
cretario polaco, sino del zaireño.
Es la primera vez —lo con­
fieso— que piso estas habita­

ciones. Miro con curiosidad
las salas por las que desfilo y
de reojo observo paredes y te­
chos, muebles y cortinas...
Una salita de espera nos re­
cibe con sus cuadros de mo­
saico en las paredes. Son es­
cenas de la vida de Cristo: te­
mas clásicos, que fácilmente
encontramos en el repertorio
de los viejos maestros, pero
con figuración moderna. El
monseñor de la tez negra nos
hace buena compañía y nos
descubre aspectos de la vida
privada del Papa: momentos
de trabajo personal, horario
de audiencia y otras curiosida­
des, que para mí son nove­
dad. Nos dice, por ejemplo,
que ahora el Santo Padre está
estudiando coreano, con mi­
ras a su próxima visita a Co­
rea dei Sur.
Sorprende la mole y el ritmo
de su trabajo... Miro con inte­
rés a Monseñor mientras nos
habla complacido, en un italia­
no perfecto con ligeras modu­
laciones romanescas.
La conversación se inte­
rrumpe: viene el Santo Padre.
Nos lleva al corredor para sa­
ludar al Papa, que sale de su

con el Papa
estudio privado. Sin mucho
ceremonial Su Santidad nos
acompaña a la capilla y, tras
una corta visita al Santísimo,
vamos al comedor.
Aquí todo es sencillo y dig­
no a la vez. Una mesa grande
ilena el salón: en el centro
—única nota de color en la
blancura del mantel— un
ramo de orquídeas. Sencillez
también en los cubiertos y en
la vajilla de loza con el escudo
papal.
La conversación —la gran
protagonista de la comida—
comienza espontánea y fami­
liar, como si se tratara de una
cita diaria. Los temas surgen
con naturalidad. Evidente­
mente sobresalen los de la
Congregación y del próximo
capítulo general. No son fra­
ses obligadas, como para te­
ner o dar unas nociones su­
perficiales — número de salesianos, novicios, naciones en
que estamos presentes—, sino
que el Papa se detiene en lo
fundamental y como con insis­
tencia pide opiniones perso­
nales a uno y otro sobre la
identidad y la fidelidad al carisma originario, sobre la pe­
netración en los diversos am­
bientes y los contactos e inci­
dencia en los jóvenes de hoy.
A veces, sin embargo, la con­
versación se desvía un poco,
para hablar con más libertad
sobre la situación religiosa y
eclesial en los diversos paí­
ses.
Durante la conversación ob­
servo el rostro del Papa: Está
fatigado. Ayer —domingo—
tuvo una tarde muy llena: visi­
ta pastoral a la parroquia de S.
Camilo. Después, encuentro
ecuménico con las comunida­
des evangélico-luteranas de
Roma. Dicen que el lunes por
la mañana' está siempre así
de cansado; pero que se recu­
pera casi inmediatamente con
el trabajo y quehacer ordina­
rio. Me percato de ello, pues

cuando la conversación llega
a puntos más interesantes, su
mirada se concentra con fuer­
za y el pensamiento se hace
más penetrante.
Pero, ¿y la comida? —Ya
se sabe que hoy hasta los re­
franes hay que cambiarlos. De
verdad: el dicho «comer como
el Papa» está pasado de
moda. No quiere eso decir
que al salir de la comida tuvie­
ra que hacer lo que el canóni­
go ¿arto —futuro san Pío X—
después de comer con Don
Sosco. Para no salimos de

Al marchar, un apretón de
manos y la despedida con el
rosario recuerdo. Ya en el um­
bral de su estudio privado, el
Papa con la puerta entreabier­
ta, como no satisfecho aún
con las noticias anteriores,
pregunta cómo va la beatifica­
ción de su compatriota Augus­
to Czartoryski.
—Santidad, sólo falta el mi­
lagro.
— Pues hala, daos prisa,
daos prisa.
Y haciendo con la cabeza
gestos de aprobación, insinúa

CIUDAD DEL VATICANO: El Rector Mayor, en la audiencia pontificia que el
pasado año tuvieron los miembros de la Unión de Superiores Generales.
En la foto lo vemos con el Cardenal Pironio.

nuestra tradición de la tem­
planza salesiana puedo decir
que me habría podido sentar
de nuevo a la mesa...
Cuando rezamos la acción
de gracias, eran las tres me­
nos cuarto. Regresamos al
corredor y a la capilla de antes
para hacer otra visita (precisa­
mente como querían y nos en­
señaban los viejos salesianos:
Un «José y María, saludad a
Jesús de parte mía» y corrien­
do al patio...).

una bendición que nos despi­
de definitivamente.
Ya no resulta una cosa rara
con este Papa tener un sitio
en su mesa. Todos los días
tiene algún invitado: obispos,
párrocos, amigos... Sin em­
bargo, no deja de ser una gran
cosa y una satisfacción in­
mensa poder decir a la gente
que has comido con el Papa.
HOMERO PARON.

presbítero salesiano
15

primer plano

EL CARDENAL SILVA

DOCTOR
«HONORIS
CAUSA»
Permitidme, ante todo, que
os presente de una manera
sucinta la personalidad de su
Eminencia el cardenal Raúl
Silva Henríquez.
Nació en la ciudad de Talca
(Chile) en 27 de noviembre de
1907. Estudió humanidades
con los Hermanos de la Doc­
trina Cristiana y con los Pa­
dres del Verbo Divino. Des­
pués cursó leyes en la Univer­
sidad Católica de Santiago de
Chile.
Cuando le tocaba comenzar
a ejercer la profesión de abo­
gado, manifestó su decisión
de ser sacerdote de Cristo y
para ello había escogido la
Sociedad Salesiana.
Al concluir los primeros
años de su iniciación religiosa
fue mandado a Turín, para
que frecuentara los estudios
eclesiásticos en el centro teo­
lógico que más tarde sería la
facultad de teología de esta
universidad.

EL SACERDOTE
El 3 de julio de 1938 recibió
la ordenación sacerdotal en la
basílica de María Auxiliadora
por la imposición de las ma­
nos del cardenal Maurilio Fossati.
En su patria, de 1941 a

ROMA: El Papa saluda fraternalmente al Cardenal Salesiano.

16

Homenaje de la Universidad Salesiana ai
ilustre Purpurado
El 17 de noviembre de 1983 la Universidad Salesiana de
Roma se dio cita en su aula magna para rendir homenaje
al cardenal Silva Henríquez otorgándole el doctorado «honoris causa».
Aquí nos limitamos a ofrecer al lector las palabras que
con esta ocasión pronunció don Egidio Viganó, Rector
Mayor de los salesianos y Gran Canciller de la Universi­
dad, en el momento de presentar a los asistentes la perso­
nalidad del doctorando.

ROMA: D. Roberto Giannatelli, Rector de la Universidad Pontificia Salesiana, dirige unas palabras de saludo al
Cardenal Silva.

1958 desempeñó en diversas
ocasiones el cargo de profe­
sor de varias asignaturas de
teología, dirigió obras juveni­
les y llevó a cabo múltiples ac­
tividades de colaboración
eclesial.
Fruto de tales actuaciones
fueron la fundación del liceo
«Manuel Arriarán Barros», el
templo nacional de S. Juan
Bosco en el barrio de La Cis­
terna, una nueva sede para el
centro Internacional salesiano
de estudios teológicos en la
localidad de La Florida (San­
tiago). Promovió las escuelas
profesionales para aprendices
obreros, colaboró con los edu­
cadores cristianos de su na­
ción mediante el organismo
nacional de la FIDE. Preparó y
dirigió el primer congreso de
religiosos convocado por la
Santa Sede y presidió la dele­
gación chilena que acudió ai
subsiguiente congreso inter­
nacional de Buenos Aires.
Fue fundador de Cáritas chile­
na y vicepresidente de Cáritas
internacional.
EL O BISPO
El 24 de octubre de 1959 el
Papa Juan lo escogía para
obispo de la ciudad de Valpa­
raíso, Importante puerto del

Pacífico. Menos de dos años
después —el 25 de abril de
1961— era trasladado a la archidiócesis de Santiago como
sucesor del primer cardenal
chileno, monseñor José M.®
Caro. En febrero de 1962 el
mismo Papa Juan lo incorpo­
raba al colegio cardenalicio,
ya en vísperas del Concilio
Vaticano II.
Fue activa e importante su
colaboración en las cuatro se­
siones conciliares no sólo en­
tre los miembros de la confe­
rencia episcopal de Chile, sino
también con otros muchos
obispos latinoamericanos.
Mientras tanto —en 1962—
había sido elegido presidente
de Cáritas internacional.
En 1965 fue legado papal
en el congreso maríano de
Santo Domingo. En 1967 par­
ticipó en el primer sínodo de
los obispos, convocado por
Pablo VI.
A C C IO N P A S TO R A L
Como pastor de la vasta
diócesis de Santiago, inme­
diatamente después del Con­
cilio organizó con decisión y
celebró durante los años 1967
y 1968 un sínodo archidiocesano de estilo nuevo, con más
de quinientos participantes,

entre ios que había no pocos
seglares, convocados para oír
y aplicar los grandes princi­
pios eclesiológicos y las orien­
taciones pastorales del Vati­
cano II.
Creó muchas parroquias y
reestructuró la Archidiócesis
en zonas pastorales y deca­
natos. Fomentó e hizo la refor­
ma agraria en las propiedades
rústicas de la Curia, con lo
que dio origen al «Instituto de
Promoción
Agraria»
(INPROA). Fundó asimismo la
«Institución Viviendas Cári­
tas» (INVICA), que construía
cerca de tres mil viviendas po­
pulares al año. Levantó la al­
dea SOS en Punta de Tralca,
en el litoral del Pacífico para
muchachos de situación irre­
gular. Fue Grán Canciller de la
Universidad Católica de San­
tiago y presidente de la confe­
rencia episcopal de Chile du­
rante varios períodos.
Ha desempeñado su minis­
terio pastoral en situaciones
eclesiales complejas, en co­
yunturas sociopolíticas de
fuerte evolución y en tensio­
nes internacionales que había
que supera en el cono sur de
Latinoamérica.
En la situación de crisis
posconciliar sufrió la hasta en­
tonces inédita ocupación de la
catedral, la ideologización y el
17

primer plano
ROMA: El Cardenal Silva pronuncia
su «lección magistral» sobre el
tema «Educación para la paz en
América Latina».

en diversas ocasiones para la
revisión del código de derecho
canónico.
Tomó parte en tres cóncla­
ves: los que eligieron a Pablo
VI, a Juan Pablo I y a Juan Pa­
blo II.

PERSONALIDAD

éxodo de parte del clero, el
vaciamiento del seminario
hasta el punto de tener que
cerrarlo. Pero logró que se re­
cuperara de forma muy positi­
va la vida del clero, tanto que
tuvo que levantar un nuevo
seminario, por el extraordina­
rio aumento vocacional y un
ROMA: Están presentes al acto el
Cardenal PIronio y los arzobispos
saleslanos monseñor Antonio Javierre y Rosalio Castillo.

nuevo esfuerzo en la forma­
ción de los jóvenes seminaris­
tas.
En las coyunturas sociopolíticas ha tenido que moverse
entre gobiernos de inspiración
muy diversa: de tipo liberal de­
mocrático, democristiano, socialista-marxista y militar.
Como cardenal fue incluido
entre los miembros de la Sa­
grada Congregación para la
Educación Católica y la del
Cuito Divino y fue convocado

Como personalidad de ni­
vel internacional ha recibido
condecoraciones importantes
de los siguientes países: Ale­
mania Occidental, Portugal,
Perú, Santo Domingo y Pana­
má. Le ha sido concedido el
doctorado honoris causa en
las siguientes universidades:
• Joña College: New Rochelle USA, 1962.
• Universidad Católica de
Chile, 1962.
• Compañía de Jesús de
Georgetown, 1963.
• Universidad de Panamá,
1977.
• Williams College, 1977.
• Vale University USA,
1978.
• Universidad Notre Dame
USA, 1978.

primer plano
ROMA: El Rector Mayor D. Egídio
Viganó, Gran Canciller de la Univer­
sidad Salesiana, lee el Decreto de
Concesión del Doctorado al Carde­
nal Silva Henriquez.

Le han sido asignados di­
versos premios:
• Premio «Derechos Hu­
manos 1971» por el Congreso
israelita latinoamericano.
• Premio «Derechos Hu­
manos 1978» por las Nacio­
nes Unidas, en atención a la
labor realizada por el Vicariato
de Solidaridad, por él creado
en Santiago.
• Premio «Fundación Bru­
no Kreysky 1979» en Viena
(Austria): por sus méritos en la
defensa de los derechos hu­
manos.

DOCTOR
«HONORIS CAUSA»
Hoy esta
Universidad
Pontificia Salesiana de Roma
le confiere el doctorado honoris causa en Ciencias de la
Educación.
En efecto: La educación es
el área cultural a que lo llevó
su opción vocacional y su acti­
vidad preferida en cuanto car­
denal. Abogado recién salido
de las aulas universitarias, en
la plenitud de sus años jóve­
nes se sintió atraído por el carisma de un Santo pedagogo y
se preparó para llevar a cabo,
según su espíritu, una misión
juvenil en favor de los más ne­
cesitados.
Amaba al obrero, ai campe­
sino, al minero, al pueblo y a
los pobres. Quería darse a co­
sas grandes para el futuro de
una sociedad que tuviera una
mejor dimensión humana.
La opción salesiana le ofre­
cía la vasta y múltiple posibili­
dad de ia educación (X)pular.
Las exigencias de su ministe­
rio lo llevaron a dar la prima­
cía a la educación de las nue­
vas levas sacerdotales. Las
vicisitudes sociopolíticas de
su país lo pusieron en la nece­
sidad de acometer la empresa
de dar una educación valiente

para la paz: Solidaridad, dere­
chos humanos, justicia social,
no violencia; todo ello según
la pedagogía del Evangelio,
que descarta ideologías inmanentistas y unilaterales, y
pone las bases para una
auténtica «civilización del
amor».

MAESTRO DE LA VIDA
Y DE LA PAZ
En el reciente sínodo, los
obispos cerraban las proposi­
ciones presentadas al Papa
con una que atribuye precisa­
mente a la misión histórica de
la Iglesia esta incumbencia de
educar para la paz. Ved cómo
lo decían los padres sinoda­
les. Es la proposición 63.*:
«De educatione ad pacem».
Dice así: «Procúrese iluminar
las conciencias, para que to­
dos reconozcan que forma
parte de la misma misión de la
Iglesia el trabajar por la causa
de la verdadera paz según el
Evangelio. Hágase de forma
que todos comprendan que
dedicarse a tal labor requiere
cultivar los valores de la re­
conciliación, de ia dignidad de
la persona, de los derechos
humanos, así como favorecer

una progresiva y general re­
moción de las armas bélicas».
Pues bien, la investidura del
doctorado honoris causa por
parte de esta universidad pre­
tende ser un reconocimiento
del testimonio y de la labor del
cardenal Raúl Silva en favor
de la educación de los jóve­
nes para la vida, de los semi­
naristas para el ministerio
pastoral y de los ciudadanos
para la paz social.
En él vemos a un eminente
pastor
de
Latinoamérica
—continente de la esperan­
za— y a un agente de renova­
ción conciliar en Chile, donde
hoy la Iglesia se presenta ante
el pueblo con un semblante
tan atractivo y entregado a su
labor, que suscita la aproba­
ción de todos y hace nacer nu­
merosas vocaciones.
Ved, Eminentísimo carde­
nal Raúl Silva Henriquez, por
qué es para mí un honor que
me colma de gozo el poder
conferirle este doctorado en
nombre de la Universidad
Pontificia Salesiana y, en par­
ticular, de su facultad de cien­
cias de la educación.
ROMA
Universidad
Pontificia Salesiana
17 de noviembre de 1983

19

misiones

Recuerdos y divagaciones en
unas

BODAS
DE ORO
D. Arquimedes Pianazzl.

COMO HA CAMBIADO
TODO ESTO
El últim o 27 de noviembre
Tura —centro de las colinas garas
(al nordeste de la India)— cum­
plía cincuenta años desde que allí
pudieron establecerse los prime­
ros apóstoles salesianos.
Al llegar no tenían casi nada;
Una casucha de madera y latón
con unas estacas carcomidas por
las hormigas blancas era todo. La
pobre se vino abajo en cuanto la
dejamos. Se contentó con aguan­
tar mientras nos pudo servir...
Fue lo único que nos dio alguna
facilidad. También de allá nos
querían echar. Pero nos hicimos
los fuertes y repetimos una frase
célebre; «Hasta aquí hemos lle­
gado y de aquí no nos move­
mos».
El P. Rocca —mi primer ayu­
dante— logró montar una emisora
de radio. Fue nuestra salvación.
Nos dio a conocer en toda la
zona. Nadie allí había visto ni
oído cosa semejante. Nuestra
mísera residencia se convirtió en
meta de todas las pobres gentes
de Tura. Quien se había atrevido
a hablar mal de nosotros, se an­
daba con mucho cuidado, no fue­
ra que nuestra extraña máquina
recogiera sus palabras. Una vez
sintonizamos con radio Vaticano.
Era un discurso de Pío XI. Cuan­
do dijimos a nuestros cristianos:
«Habla el Papa», como autóma­
tas cayeron de rodillas...
Pasados unos años nos permi­
tieron adquirir una colina, fuera de
ASSAM (India): Muchacha Momba
Nafa, ataviada con el traje típico.

20

La abundante cosecha de una siembra difícil: El padre
Pianazzi, que fue Consejero General para la Formación
Salesiana, estuvo también buena porción de años en la In­
dia. Después de ocho lustros ha vuelto al gran país y nos
cuenta sus impresiones.

m

SHILLONG: Iglesia «San Pablo» del
Seminario Menor. ¡Vaya si han
cambiado los edificios!

Tura. Los pobres cristianos jadea­
ban para llegar hasta ella cuando
iban a misa. Ahora aquella colina
no sólo forma parle de la ciudad,
sino que es incluso su parte más
bonita, y la misión ha llegado has­
ta lugares entonces prohibidos,
donde se han levantado escuelas,
conventos e iglesias.
¡Cómo ha cambiado todo esto!
—pensaba yo aquel dia de fiesta
de hace unos meses.

CUARENTA
AÑOS DE AUSENCIA
En una aldea que había visita­
do en 1931 la capilla había sido
destruida por orden de la autori­
dad civil. El catequista había sido
conminado a no predicar más.
Los cristianos estaban amenaza­
dos de expulsión: pobres e igno­
rantes, vivían asustados. Recuer­
do que entonces dije la misa al
aire libre delante de la vivienda de
un pagano, el único que se atrevió
a darme hospedaje. Sólo asistía
un cristiano, y por miedo lo hacía
desde lejos. Era una pobre mujer
con una criatura en brazos. Ahora
aquí —en Tura— asistían no me­
nos de quince mil cristianos. Ha­
bían venido de todas partes para
celebrar las bodas de oro de su
misión. En toda la zona deben de
ser por lo menos ochenta mil.
¡Cuántos viejos amigos pude ver
de nuevo y cuántos se me acerca­
ron y me dijeron que me cono­
cían! Mi pobre memoria no los re­
cordaba a todos tras cuarenta
años de ausencia...
Todo está cambiado.

CAMINOS LARGOS...
Cuando ia india logró su inde­
pendencia (1947), una delegación
de la Asamblea Constituyente se
dio una vuelta por todo el nordes­
te, para sondear a aquellas po­
bres tribus. El correo llegaba a píe
incluso a ia misma capital; Tura.
La misión saiesiana —Gauhati—
distaba más de trescientos kiló­
metros... Por llegar, a veces se
tardaba una semana. La primera
vez visité catecúmenos al sur de
Tura, tuve que hacer a pie más de
cincuenta kilómetros en un día y
También han cambiado ios talleres
de Mecánica, como éste de Madrás.

21

misiones
dejar los zapatos en el barro rojizo
de lo que se llamaba carretera...
Otra vez me dijeron que en aquel
pueblecíto había cólera. En toda
Tura sólo encontré una bici, y sin
asiento. Puse una manta y monté
en ella cargado con un zurrón de
medicinas. Al llegar vi que enfer­
mo sólo lo había estado un niño
—y no de cólera— , que ya estaba
bueno. Tuve que desandar a so­
las los cincuenta kilómetros —
esta vez cuesta arriba—, porque
mi compañero se había detenido
por una manada de elefantes. No
llevaba nada conmigo, ni siquiera
el altar portátil; sólo las ya inútiles
medicinas... Ni qué decir tiene
cómo estaría yo después de
aquella carrera en una bici sin
asiento. Durante varios días cami­
né despatarrado, como jinete bi­
soñe.
Para visitar no pocos lugares, el
único camino era el río. Había
que vadearlo veinticuatro o veinti­
cinco veces; la última el agua en
un sitio me llegaba hasta el cuello.
Ahora hay carreteras asfaltadas,
desde la guerra de Bangladesh,

cuando la India se percató de la
importancia estratégica de nues­
tra zona. Los garos —así se lla­
man nuestras gentes— ya no co­
rren asustadizos como vacas
cuando llega un coche campero.
Saben apartarse, e incluso han
aprendido a viajar en él.

UNAS CUANTAS VISITAS
He visitado algunas misiones.
En Rongjeng el P. Busolín acaba­
ba de llegar de una temporada de
reposo en Italia. Vi una casa, una
iqlesia, un convento y dos interna­
dos. Un gentío acudió a saludar al
Padre. El primer sacerdote que
entró en Rongjeng fue recibido a
pedradas. Ahora la gente se dis­
puta las plazas de la escuela
construida para sus muchachos...
La misión del P. Frassy nunca
la había visto. El mismo pueblo —
Williamnagar— es nuevo. Pero
recuerdo haber visitado con el P.
Atilio Colussi otra aldea no muy
lejana,
Rongbinggih, durante
nuestros primeros años de Tura.
Corría el mes de septiembre, in­

mediatamente después de las llu­
vias. Los senderos estaban impo­
sibles, invadidos por yerbajos al­
tos. En cada mata nos acechaba
una sanguijuela, fina como una
aguja de coser. Penetraban por la
ropa. Sólo nos dábamos cuenta
cuando apipadas de sangre, se
dejaban caer. Por la noche nues­
tra camiseta estaba empapada de
sangre seca, se tenía de pie... El
P. Colussi fue víctima de una in­
fección; regresó a Gauhati por el
camino más corto. Yo seguí ade­
lante algún día más, hasta que
caí con la malaria. Después de
tres días de ayuno total, porque el
arroz — único alimento que se po­
día lograr— me repugnaba, deci­
dí no morir de hambre. Tras vein­
te kilómetros por arrozales llegué
al camino real. Por la mañana
tuve la buena suerte de que pasa­
ra un autobús destartalado que se
dirigía a Gauhati. Llegué a las
cuatro de la tarde, cuando los salesianos tomaban el té.
— ¿Qué quieres tomar?
— Un par de huevos.
Al cabo de un rato me repiten la
pregunta.
- ^ r o par, respondí.
Creo que me detuve ahí, aun­
que las malas lenguas dicen que
repetí de nuevo. No me extraña:
era el quinto día de ayuno...

RECUERDOS DE AYER
Vi también ia misión de Mendar, donde el pobre P. Costa, que
tanto había hecho por los prófu­
gos de Pakistán, fue asesinado
para ser robado por uno de sus
ayudantes...
Era el año 1964. Ochenta mil
garos llegados de Pakistán hacía
tiempo, al verse durante varios
años importunados, vejados y ro­
bados por los musulmanes, se
volcaron de la parte de acá de la
frontera, desafiando los fusiles,
las bayonestas y la violencia de
las tropas pakistaníes. Eran hom­
bres, muchachos, muchachas y
madres con sus criaturas en bra­
zos... A la ventura se internaron
por la selva con lo poco que te­
nían encima, fiados de sus her­
manos garos. Hubo epidemias de
tifus y de cólera. Vivaquearon du­
rante mucho tiempo en tiendas
improvisadas, hasta que se les
pudo hallar un arreglo.
Recordé a mis viejos catequis«Ei pobre padre Costa, que tanto
había hecho por los prófugos de
Pakistán, fue asesinado para ser
robado por ur>o de sus ayudan­
tes...»

f

i

n i

misiones
El Arzobispo de Bangalore consa­
gró en 1971 esta nueva iglesia del
Teologado Salesiano, dedicada a
«Cristo, Luz del mundo».

tas, que fueron la prolongación
del misionero. Sin ellos, dos po­
bres sacerdotes en una misión tan
extensa como una de nuestras
provincias, desprovista de carre­
teras y de medios, no habrían po­
dido hacer nada: Pitor Shem, la
primera semilla, que debió afron­
tar la persecución; Dajang y Matjim, que durante la guerra habrían
podido encontrar trabajos mucho
mejor retribuidos que la miseria
que yo les podía dar. Los tenía
que reñir, porque descuidaban su
familia para dedicarse al apostola­
do... Ahora ya están muertos;
pero viven en sus obras.

I|

Sillín mmmm

DISCURSO
INOLVIDABLE
A los festejos del cincuente­
nario asistía en Tura, entre otras
personalidades, un ministro del
gobierno central de Nueva Delhi.
Es garó y católico. Había llegado
exprofeso para esta ocasión. Yo
había bautizado a sus padres. En
un discurso a la multitud contó su
vida. Habia sido un muchacho po­
bre y huérfano. Los misioneros se
habían hecho cargo de él y lo ha­
bían ayudado a estudiar. Gracias
a ellos había podido hacer su bri­
llante carrera. Creo que aquel dis­
curso fue el más interesante de
todos los que oí. Subrayaba dos
aspectos fundamentales de nues­
tro trabajo y de nuestro éxito: la
educación y la caridad. Si se quie­
re hacer una síntesis del trabajo
salesiano en el nordeste indio—y
en concreto entre los garos— yo
creo que se puede hacer con esas
dos palabras.

UNA MARAVILLA
DEL SEÑOR
Ahora nuestra misérrima mi­
sión de antaño es una diócesis:
Dieciséis parroquias misión con
conventos, escuelas, internados,
dispensarios médicos en cada
una... Y sigue creciendo. Hace
unos años —se me ha asegura­
do— fue la diócesis que tuvo el
número más alto de conversioTambién encontró, entre los nue­
vos obispos saiesianos, a monse­
ñor Kerketta, a quien vemos en la
foto con su sombrero «Naga» junto
a este matrimonio cristiano asimis­
mo «Naga».

nes. Desde 1979 está ya en ma­
nos del clero secular; pero toda­
vía muchos de sus misioneros
son saiesianos.
¡Cómo han cambiado las cosas
en cincuenta años de trabajo...!
Sembramos entre lágrimas; cose­

chan entre cantares. Esto sí que
es una maravilla del Señor. Ale­
grémonos y bendigámoslo. ¿Que
es triunfalismo? ¡Pues que lo sea!
«Soli Deo honor et gloria...»
ARQUIMEDES PIANA22I, S.D.B.

W .Vs \, Lili:)
V '- '

? ■
V

m

1

colaboración

ir I

CANONIZACION
DE
DON BOSCO
24

BODAS
El día primero de abril de
este año se cumplirán los cin­
cuenta años de la canoniza­
ción de Don Sosco en Roma.
En aquel entonces era yo
alumno de cuarto de teología
en el Colegio Español de la
Ciudad Eterna. Muy de maña­
na nos dirigimos los semina­
ristas al Vaticano para asistir a
la canonización.
Ibamos provistos, en 1934,
de billetes de entrada para po­
der presenciar la ceremonia
desde un lugar privilegiado. Al
llegar, la sorpresa fue enorme.
Todo estaba invadido. Se ha­
bían falsificado entradas. Era
imposible el ingreso en la Ba­
sílica.
La Plaza de San Pedro es­
taba rebosante como nunca la
he visto, en mis siete años de
permanencia en la cuna de la
cristiandad.
Una noticia nos consolaba.
Puesto que era tanta la mu­
chedumbre que había acudi­
do, especialmente de Italia,
para asisitir a la ceremonia;
como algo excepcional, el
Santo Padre saldría por «II
Portone di Bronzo», y atrave­
saría la inmensa plaza vatica­
na para subir por la preciosa
escalinata que da acceso a la
Basílica. De esta suerte aque­
lla innumerable multitud de
peregrinos, podrían aclamar
al Papa,' Pío XI, aunque no le
fuera dado presenciar el acon-

colaboración
tecimiento en las naves del
templo.
Hallándome en esta situa­
ción se me presentó un Padre
Pasíonísta de Santiago, amigo
mío, que me ofreció una
«scheda», para participar en
la misma comitiva del Papa.
La acepté agradecido, y tuve
la satisfacción de penetrar en
el Vaticano entre canónigos y
Obispos y presenciar la cere­
monia sentado muy cerca del
Papa.
Apiñados, encaramados en
las columnas del primer recin­
to eclesial del mundo, encima
incluso de las estatuas esta­
ban miles y miles. Fue un
acontecimiento en Roma. Del
norte de Italia habían acudido
fieles entusiastas de Don Sos­
co en incontable cantidad.
Don Sosco en Italia hacía fu­
ror. El fuego del entusiasmo
no se ha extinguido.
LA CARTA
OE DON SOSCO
Hace precisamente un si­
glo, en 1884, Don Sosco, ya
anciano, dirigió una carta a
sus hijos que contiene lo más
profundo de su espiritualidad
y pedagogía. Se compendia
en una palabra: la bondad.
Reproduzco estas frases:
«Pongámonos, pues, todos
de acuerdo, que la caridad de
quienes mandan y la candad
de quienes obedecen, haga
reinar entre nosotros el espíri­
tu de San Francisco de Sa­
les».
El aboga en la carta para
que «vuelvan los días felices

Pascua de Resurrección del Año
1934: Car>onizactón de Don Bosco.
Perdido entre la masa estaba el
alumiK) de cuarto de Teología del
Colegk) E^>añol de Roma, futuro
Obispo de Orense.

Monseñor Angel Temiño, Obispo
de Orense.

del antiguo Oratorio: los días
del afecto y confianza cristia­
na entre muchachos y supe­
riores».
Este consejo del Santo es
de una sabiduría cristiana de
inmenso valor.
La misma mentalidad refle­
jan otras cartas y escritos. Co­
pio del Oficio de Lectura del
día de la fiesta unos párrafos
que son altamente alecciona­
dores para cuantos tienen la
sublime misión de educar, pa­
dres y profesores, maestros y
educadores: «Es más fácil

—escribía— enojarse que
aguantar, amenazar al niño
que persuadirlo; añadiré inclu­
so que, para nuestra impa­
ciencia y soberbia, resulta
más cómodo castigar a los re­
beldes que corregirlos sopor­
tándolos con firmeza y suavi­
dad».
El Santo de Turín estaba
convencido, nos dice, de esta
verdad e invitaba a sus hijos a
seguir el camino más penoso,
pero más seguro para obtener
resultados positivos.
No es educativo dar rienda
suelta al enojo momentáneo,
corrigiendo con voces descompesadas o duros castigos.
Antes bien se ha de derrochar
caridad y amor en la correc­
ción y, ai propio tiempo, man­
tener firmeza en las disposi­
ciones.
Las actitudes violentas del
educador son cosideradas por
el educando como tormentas
que pasan, y desahogo egoís­
ta de la desazón. No expre­
sión de amor que busca el
bien del castigado. No persua­
den.
Jesucristo, que es el gran
pedagogo de la humanidad,
corrigió nuestros desmanes
derrochando caridad. Nos jus­
tificó muriendo por nosotros.
ANGEL TEMIÑO SAIZ
Obispo de Orense

noticias
MONSEÑORES
SALESIANOS EN
IBEROAMERICA
Además de los obispos de Pun­
ta Arenas y de Río Gallegos hay
otros salesianos al frente de igle­
sias locales de Iberoamérica. En
Argentina está el exarca de los ár­
menos, el eparca de los ucrania­
nos, el auxiliar del obispo castren­
se y el auxiliar del Arzobispo de
Buenos Aires. En la misma Argen­
tina tienen obispo salesiano las
diócesis de Comodoro Rivadavia,
Neuquén, Concepción, Salta y
Venado Tuerto. En Brasil hay tre­
ce obispos salesianos y en el res­
to de Iberoamérica, diecisiete.

SOLEMNE ACTO DE ENTREGA
A LA VIRGEN AUXILIADORA
El pasado día 14 de enero, el Rector Mayor y todos los Capitulares hi­
cieron el solemne acto de abandono en manos de María. Lo mismo se
repitió en todas las comunidades de la Congregación Saiesiana. Es un
acontecimiento que tiene el sentido de poner toda nuestra confianza en
María como respuesta a la consagración bautismal y religiosa con que
Dios nos ha agraciado.

En el centenario
de las Escuelas
Profesionales
de Sarriá
MONS. JAVIERRE,
EN BARCELONA
Con motivo de la fiesta de San
Juan Bosco, monseñor Antonio
Javierre, arzobispo secretario de
la Sagrada Congregación para la
Educación Católica, ha estado en
nuestra ciudad.
El dia 30, dentro del programa
de actos del Centenario de las Es­
cuelas Profesionales de Sarriá.
pronunció una conferencia titula­
da «Lecciones de un centenario».
El acto se completó con un con­
cierto de la Coral Esciat, del Cole­
gio de las Salesianas, y la proyec­
ción de un audiovisual conmemo­
rativo.
El día 31 presidió la Eucaristía
que congregó en tomo a Don Bos­
co a toda la Familia Saiesiana.
Monseñor Javierre es salesia«Viva la vida» es un texto de forma­
ción religiosa preparado por el Ins­
tituto de Catequética de la Universi­
dad Pontificia Saiesiana y exhibido
en ia muestra de información y
prensa de Roma.

26

no, nacido en Siétamo (Huesca)
en 1921; trabajó varios anos en
Mataró como profesor, siendo
posteriormente destinado a la
Universidad Pontificia Saiesiana,
en Roma, de la que fue Rector
Magnífico. Es experto en ecumenismo y en temas referentes a ia
sucesión apostólica.
Barcelona, 31’ l>84

EXPOSICION
TECNICA
EN SARRIA
El día 26 de enero, a las 13 ho­
ras, se inaguró la exposición con­
memorativa del centenario del
Instituto
Politécnico - Escuelas
Profesionales Salesianas de Sa­
rriá, en un acto presidido por el
limo. Sr. Félix Amat, Regidor-Pre­
sidente del Distrito III del Ayunta­
miento de Barcelona.
La exposición consta de tantas
secciones como ramas de ense­
ñanza son impartidas en el Institu­
to; Madera, Electricidad. Electró­
nica, Automoción, Artes Gráficas
y Mecánica. Estará abierta al pú­
blico, tanto a particulares como a
centros docentes, hasta el 30 de
junio, los sábados y domingos de

noticias
El misionero salesiano de más
edad es el Sr. Schneider, al que ve­
mos en la foto con el P. Bernardo
Tohill, Consejero General para las
Misiones. El Sr. Schneider tiene 98
años. Nació el 7 de mayo de 1886.
Vive en Brasil desde 1902. Y es sa­
lesiano desde 1906.

11 a 14 y los miércoles de 11 a 14
y de 18 a 21 horas. También pue­
de visitarse en otras horas previo
acuerdo.
^
^

LA EXPEDICION
MISIONERA SALESIANA
DE 1983 CAMINA,
SOBRE TODO,
HACIA AFRICA
Desde el comienzo de las mi­
siones salesianas el 11 de no­
viembre de 1875 —día en que
Don Sosco entregó el crucifijo mi­
sionero a diez salesianos destina­
dos a Argentina— se han ido su­
cediendo una tras otra, hasta
ciento doce expediciones.
Este año son cuarenta y uno los
nuevos misioneros: Veinticinco
presbíteros, un diácono, ocho se­
minaristas y siete coadjutores.
Proceden de las siguientes na­
ciones: Trece de Italia, diez de Es­
paña, tres de Portugal, seis de la
India, dos de Filipinas, dos de Mé­
xico y uno respectivamente de
Centroamérica, Bolivia, Colombia,
Perú y Venezuela.
Unos ya están en sus destinos;
otros no tardarán en hacerlo.
La mayoría tienen como meta
las misiones de Africa: treinta y
uno. Ocho van a América y dos a
Nueva Guinea.

EL «PLAN AFRICA»
DE LAS HIJAS
DE MARIA
AUXILIADORA
«Ya está en marcha» — dice la
madre Carmen Martín More­
no— . consejera para las misio­
nes, en una circular a las inspec­
torías.
El tercer domingo de octubre
—Domund— salían camino de
Angola cuatro brasileñas, para
fundar la primera comunidad mi­
sionera de las Hijas de María Au­
xiliadora en esa nación.
La marcha había sido prepara­
da en todos sus detalles y con
mucha pacier^cia. ante las dificul­
tades que se iban acumula/Kio.
Tuvieron la grata sorpresa de

participar en la liturgia presidida
por el Papa en la basílica de San
Pablo extramuros, donde recibie­
ron el crucifijo misionero.
«Hacer todos los esfuerzos po­
sibles para fundar nuevas comu­
nidades en las iglesias jóvenes»,
fue la consigna del Papa a ios reli­
giosos y religiosas, y a los nume­
rosos misioneros y misioneras
presentes.

HA SIDO PUESTO
EN LIBERTAD
EL SALESIANO
SECUESTRADO
EN ANGOLA
Se llama José Ramón Uría. Es
uruguayo. Lo habían secuestrado

El Rector Mayor bendice el féretro
con loa reatos mortales de D. Raineii, quien fue Consejero General
para la Familia Salesiana y se nos
fue al Cielo el pasado mes de di­
ciembre.

el 5 de septiembre de 1983 en Calulo fuerzas militares de UNITA.
Lo llevaron a la selva junto con
seis teresianas — una angoleña,
varias españolas— y siete jóve­
nes aspirantes, todas ellas naci­
das en Angola.
El secuestro ocurrió cuando se
estaba ultimando la preparación
de las fiestas conmemorativas del
90.^* aniversario de la misión cató­
lica de Calulo. Esto lo hizo todavía
más doloroso para toda la dióce­
sis, que inmediatamente organizó
manifestaciones de solídandad y

27

noticias
tiocho diplomas de graduado es­
colar a otros tantos trabajadores
italianos que con asiduidad ejem­
plar han frecuentado las clases
nocturnas durante el curso 19821983.
La iniciativa ha encontrado un
eco muy consolador. Las autori­
dades del lugar y las italianas han
felicitado a sus promotores por la
labor realizada y por la seriedad
que han demostrado los maestros
y los alumnos trabajadores.
(De «Insíeme»,
misión católica italiana,
octubre 1983)

EL 5^X11 CAPITULO GENERAL
Aqui vemos en la foto un momento de la asamblea general. El Regulador del Capítulo, D. Juan VecchI dirige la palabra a los Capitulares, pre^
sididos por el Rector Mayor. Son en total 189 los saleslanos pertene-'
clentes a esta verdadera cámara legislativa de la Congregación, más 6
observadores llamados por el mismo Presidente. Estudiarán la redac­
ción definitiva de las Constituciones renovadas para presentarlas para
su 'sprobación a l a ^ n t a Sede.

NUEVO TEMPLO
A MARIA
AUXILIADORA
EN CANADA
En Montreal-Riviére des Prairies (Canadá) la misión católica
italiana comenzó, el pasado mes
de octubre, la construcción de una
iglesia nueva para la comunidad
italiana. Estará dedicada a María
Auxiliadora de los cristianos.
El proyecto incluye un semisótano debajo de la iglesia. En él se
instalará un centro de ancianos y
otras actividades. Detrás del ábsi­
de irán los despachos y la vivien­
da del párroco.
Al comienzo de los trabajos
asistieron diversas autoridades y
personalidades de la cultura y del
arte.
Fueron muy aplaudidos Alexis
Carrel y Maurice Duplessis.
La terminación de los trabajos y
la bendición de la iglesia debería
coincidir con la llegada del Papa a
Quebec.
El párroco ha hecho un llama­
miento a todos los bienhechores,
para que presten su ayuda como
miembros fundadores o protecto­
res.
(De la hoja parroquial)

Las Salesianas Oblatas: fueron fun­
dadas por el Obispo salesiano
monseñor José Cognata. En la foto
vemos a la Madre General en la
inauguración de su V Capitulo Ge­
neral. La acompaña el Rector Ma­
yor.

momentos de oración. A ellos se
sumaron con fervor las tres comu­
nidades salesianas de Angola.
Las embajadas de Brasil, de
Portugal y de España se interesa­
ron por su liberación, a través de
la Cruz Roja, aunque sin resulta­
do positivo. En cambio, e) 24 de

28

diciembre, vigilia de Navidad, una
llamada telefónica a los Superio­
res salesianos de Roma les decía
que ios secuestrados llegarían
desde Pretoria el día 31 de di­
ciembre. Así fue.

CON LOS
EMIGRANTES
ITALIANOS DE
ALEMANIA FEDERAL
En Gummersbach (Alemania
Federal) se han entregado vein­

LA FAMILIA SALESIANA
DE LENGUA ALEMANA
PEREGRINA
A ALTÓTTING
En la reunión de los delegados
y delegadas de Cooperadores Sa­
lesianos de las inspectorías de
lengua alemana —Austria y Ale­
mania— se hizo (a propuesta de
hacer una peregrinación de la fa­
milia salesiana.
Para celebrar el cincuentenario

noticias
Conversación animada entre ei
Rector Mayor y ei Cardenal Pironio,
en la fecha de inauguración del
XXII Capítulo General.

de la canonización de San Juan
Bosco, durante los días 31 de
marzo y el primero de abril de
1984 se acudirá en peregrinación
al santuario de Altótting, el lugar
más cómodo para todos los posi­
bles participantes.
Lo que se pretende con esta ini­
ciativa es lo siguiente; Reconocer­
se como comunidad de oración y
de celebración de la fe cristiana;
examinar la aportación hecha a la
Iglesia, según el carisma de Don
Bosco, por la familia salesiana; re­
novar el celo y la esperanza en el
encuentro con Cristo y fortalecer­
se m e d irte el reciproco testimo­
nio de fe; hacer pública, como
Don Bosco, la confianza de la fa­
milia salesiana en la protección de
María Auxiliadora de los cristia­
nos.
(«Informatíonsdienst»,
Munich, junio 1983)

• f

1/

AL CUMPLIRSE
LOS CIEN AÑOS
DEL PRIMER VIAJE
DE DON BOSCO
A FRANCIA
En Marsella (Francia) se clau­
suraron el 26 de noviembre de
1983 los festejos por el centenario
del primer viaje de Don Bosco a
Francia, que siempre le fue tan
acogedora y solidaria.
La intensa jomada tuvo tres
momentos cumbres, perfecta­
mente señalados en el programa.
Ante todo, la acogida de los edu­
cadores con sus muchachos (en
el oratorio de San León) y mucha­
chas (en Rastré) de todas las ca­
sas salesianas del sur francés.
Después, concentración en el
santuario de Nuestra Señora de la
Guardia: subida con el Arzobispo
y asamblea en el salón de exposi­
ciones, donde se tuvo un momen­
to de oración. Finalmente, a las
cuatro y media de la tarde, la gran
concentración con el cardenal Eíchegaray, los jóvenes y los incon­
tables amigos de Don Bosco. En
ella se evocó el viaje del Santo, se
representó una escena evangéli­
ca y se celebró la Eucaristía. Al fi­
nal se pM-odamó un mensaje. Lo
hkáeron el presidente, el inspector
de ios salesianos y la in s p ^ o ra
de las Hijas de María Auxiliadora.
(«Aujourd'huí, supl.
sepL-oct. 1983)

JAPON:
FESTEJOS
E INAUGURACIONES
Se han celebrado las bodas de
oro fundacionales de la obra so­
cial de Nakatsu. Es de destacar la
participación de sus antiguos
alumnos, que inciuso llegaron de
Tokio. No podía faltar, aunque
para ello tuvo que viajar desde
Alemania, el P. Carlos Demieítner, que fue quien fundó esta obra
para los muchaidK>s que sufrían
en sí miónos las corfsecuer>das
de la guerra.
Con la asisterKáa del consejero
regional para Asia, P. Tomás Panakézham, se ha inaugurado un

Eucaristía con el Papa: El 7 de di­
ciembre de 1983 pudieron conceiebrar con el Santo Padre los profe­
sores y alumnos de la Facultad de
Derecho Canónico de la Universi­
dad Salesiana de Roma.

nuevo asilo en Kusí. Ha sido he­
cho por iniciativa e interés del mi­
sionero Oliando Puppo.
En Kítsukí ha surgido una mi­
sión nueva. La ha bendecido el
señor Obispo. Estaban presentes
el alcalde — no cristiano— y el
bonzo del templo budista. Muchas
personas rv? bautizadas han favo­
recido la nueva obra, desde su
proyecto hasta su realización.
Han contribuido de un modo es­
pecial las comunidades cristianas.

29

nuestra gratitud

Salamanca: Dan gracias a Ma­
ría Auxiliadora por grandes favo­
res recibidos, esperando siga es­
cuchándonos. Envío una limosna
para su culto. G. G.
Salamanca: Doy gracias a Ma­
ría Auxiliadora por favores recibi­
dos. I. B.
Salamanca: Doy gracias a Ma­
ría Auxiliadora por favores recibi­
dos. R. R.
Salamanca: Por favores recibi­
dos de María Auxiliadora, entre­
gan un donativo y desean hacerlo
público en el Boletín Salesiano.
S. O.
Salamanca: Por múltiples gra­
cias recibidas de María Auxiliado­
ra envío una limosna para misas
en su honor. F. L.
Salamanca: Deseo se publique
en el Boletín Salesiano las gra­
cias recibidas de María Auxiliado­
ra. María Julita Sánchez.
Salamanca: Por favores recibi­
dos de Domingo Savio envío una
limosna y deseo se publique en el
Boletín Salesiano.
Salamanca: En agradecimien­
to por los muchos favores recibi­
dos de María Auxiliadora envío un
donativo para su culto. María Je­
sús Martín.
Vigo: Doy gracias a María Au­
xiliadora y a San Juan Bosco por
varias gracias recibidas. Envío
una limosna. B. L.
VIgo: Hemos acudido a María
Auxiliadora pidiéndole una gracia
singular y hemos sido escucha­
dos. Quedamos muy agradecidos
y exhortamos a todos a recurrir a
Ella. V. y A.
Vigo: Damos fervorosas gra­
cias a María Auxiliadora por su
auxilio manifiesto en el hecho que
describimos. Ibamos la familia en
coche. En una colisión se nos
echó encima otro coche dejando
el nuestro completamente estro­
peado. Ninguno de los ocupantes
sufrimos cosa importante. Una
niña que llevábamos, dirigiéndose
a la abuela, le pregunta; —Abue.la, ¿llevas la medalla de María
Auxiliadora? — Sí. mira; siempre
la llevo. — Pues Ella nos ha salva­
do. Urya devota.
Las Matas (Madrid): Envío un
donativo en agradecimiento a Ma-

30

ría Auxiliadora por la conserva­
ción de la vista de mí hijo. Deseo
se publique en el Boletín Salesia­
no. María Pilar Cordón.
Madrid: Agradezco a María Au­
xiliadora un gran favor recibido, y
envío una limosna. T. P. M.
Salamanca: Doy gracias por
favores recibidos de María Auxi­
liadora. Isabel Mateos.
Puerto Real (Cádiz): Enviamos
un donativo en acción de gracias
a María Auxiliadora por los favo­
res de ella recibidos, haciendo pú­
blico nuestro agradecimiento en el
Boletín Salesiano. Isabel García y
Dolores Domínguez.

dificultades, envío un donativo de­
seando se publique en el Boletín
Salesiano. Francisco García Mar­
tínez.
Talayera de la Reina (Toledo):
Doy gracias a María Auxiliadora y
entrego un donativo para su culto
por haberme salvado a un sobrino
tras varios meses de enfermedad
y dos operaciones. Hoy se en­
cuentra completamente bien. Ma­
riano G. G.
Valladolld: Doy gracias a Ma­
ría Auxiliadora por el feliz resulta­
do del examen de una nieta para
ingresar en la Escuela de Magis­
terio. Envío un donativo. Irene Velázquez.
Vlllasarraclno (Patencia): Doy
gracias a María Auxiliadora por un
favor recibido y envío un donativo
deseando se publique en el Bole­
tín Salesiano. Pedro Cuadrado
Cuadrado.
Xunquelra D’Ambla (Orense):
Por una gracia especial recibida
de María Auxiliadora, envío una li­
mosna para las obras salesianas

Las Palmas: Doy gracias a Ma­
ría Auxiliadora por favores recibi­
dos y envío una limosna de agra­
decimiento. l/ercedes Sánchez.
Valladolld: Doy gracias a Ma­
ría Auxiliadora por un favor recibi­
do y envío ina limosna de agrade­
cimiento. Blas García Arévalo.
Zaragoza: Expresamos nues­
tra gratitud a María Auxiliadora
por un favor recibido y enviamos
un donativo para las obras salesianas. Ascensión Pena y Car­
men Navarro.
Alcorcón (Madrid): Hago pú­
blico mi agradecimiento a María
Auxiliadora por un favor recibido y
envío un donativo. Francisca Pé­
rez.
Patencia: En acción de gracias
a María Auxiliadora por un favor
recibido, envío una limosna. Una
devota.
Andorra (Teruel): Envío un do­
nativo en acción de gracias a San­
to Domingo Savio por el feliz
alumbramiento de una hija mía en
un parto dlHcil. F. S.
Morón de la Frontera (Sevi­
lla): Agradecido a María Auxilia­
dora por su protección en muchas

y deseo que se publique en el Bo­
letín Salesiano. Isolina Cid.
Bustillo del Páramo (León):
Por favores recibidos de María
Auxiliadora envío un donativo y
deseo que se publique en el Bole­
tín Salesiano. Laura Alonso; An­
gel y Begoña de Juan.
Madrid: Doy infinitas gracias a
María Auxiliadora y a San Juan
Bosco, por los favores que me
han concedido con motivo de la
doble operación quirúrgica a las
que tuve que ser sometido por el
gravísimo peligro de muerte durante el pasado año 1983. Por
todo ello deseo se haga público
mi mayor agradecimiento, en el
Boletín Salesiano. César Delgado
González.
Astudillo: Damos gracias a
María Auxiliadora por un favor
que nos ha concedido; y, agrade­
cidos, enviamos una limosna se­
gún habíamos prometido a nues­
tra Madre del cierto. Familia Lua­
na.
Orense: Por un favor redbido
de María Auxiliadora doy gracias
y envío una limosna. Otilia Lemos.

»

fueron a la casa del padre
liadora del Colegio de Huelva.
Sus funerales fueron la expresión
del cariño y aprecio de toda la Fa­
milia Salesiana de Huelva. Fueron
presididos por el Obispo de la Dió­
cesis, D. Rafael González Moralejo junto con el Vicario General y el
Secretario Canciller. Concelebra­
ron numerosos sacerdotes de to­
dos los Colegios de la Inspectoría
de Sevilla.

D. Manuel de Dios González.
t en Huetva el 23 de diciembre
de 1982 a los 73 años de edad. 52
de salesiano y 41 de sacerdocio.
Había nacido en Quintas de Coedo (Orense) en 1909. Empieza su
marcha vocacional salesiana en
Cádiz como aspirante. En 1930
termina el noviciado y hace profe­
sión religiosa. Recibe la ordena­
ción sacerdotal en Madrid, en
1941. Totalmente disponible a la
obediencia, desarrolla su acción
sacerdotal y educativa en diver­
sos <x)legios de Andalucía: Sevilla-Triana, Málaga, Morón, Córdo­
ba, San José del Valle, Alcalá de
Guadaira, Puerto Real, Algeciras,
La Línea, Utrera, La Palma del
Condado, Huelva. Desempeñó
durante largos años el cargo de
administrador y una etapa de
once años de director y párroco
en Algeciras. Su piedad se traspa­
rentaba en las celebraciones litúr­
gicas y en el rezo de las horas.
Atendió con gran celo a los gru­
pos matrimoniales con espíritu
evangélico. La pulcritud y el orden
en toda su persona y en los obje­
tos de su uso era fiel reflejo de su
alma limpia, consagrada al Señor,
y al servicio del prójimo. Corazón
noble, agradecía profundamente
cualquier delicadeza. Supo sufrir
con callada resignación cristiana
angustiosas situaciones debido a
circunstancias difíciles, sobre
todo le afectaron mucho las de­
fecciones vocacionaies. Amó a la
Congregación Salesiana con pa­
sión, y b demostraba en el apre­
cio con que recibía y difundía la
prensa salesiana en general, y el
Boletín Salesiano en particular. El
mismo iba por las clases repartiéndc^ a ios alumnos, y les de­
cía: «Si no te interesa la revista,
dala al amigo, al vecino; pero nun­
ca la rompas ni la tires». Gréinde
era su deÁrodón a María Auxilia­
dora. Sus mejores detalles, para
eiia. Las mejores flores de su irx^píente jardín, para ella. Colaboró
eficazmente en el desarrollo de la
pujante Asociación de María Auxi­

D. Filiberto Perís Muñoz.
t en Cuenca el 7 de noviembre
de 1983 a los 81 años de edad.
Se ha ido «don Fili», como se lellamaba cariñosamente, con la
sencillez con que había vivido, y
con el silencio con que hacía to­
das las cosas, con la paciencia
fina de su alma de artista.
Había nacido el 22 de agosto
de 1902 en un hermoso pueblo de
la huerta de Valencia, Bonrepós, y
en el seno de una familia muy
cristiana y numerosa. Tres herma­
nos fueron salesianos: uno murió
a los 18 años, apenas profesado
en la Congregación Salesiana;
otro, Vicente, vive en el Ecuador
en una parroquia de Guayaquil; y
todavía un sobrino, también Vi­
cente, ha sido profesor del Cole­
gio de Cuenca, donde se ordenó
sacerdote.
El 1 de mayo de 1912 entró
como alumno del Colegio Salesia­
no de Valencia y luego cursó estu­
dios en Campeílo, en Madrid y en
Gerona. Profesó como salesiano
el 25 de julio de 1920 en la casa
de Carabanchel Alto de Madrid. Y
el 3 de septiembre de 1933 fue or­
denado sacerdote en el Monaste­
rio de Montserrat.
Ya de joven sacerdote empezó
a destacar en su atractivo con los
muchachos por saberlos entrete­
ner, por captar su simpatía dentro
de su genio fuerte, por inculcarles
la disciplina y el amor al trabajo.
Por todas partes le recuerdan
bien, porque sabía hacer. Tanto
en Azkoftia de Guipúzcoa, como
en Zaragoza, Barcelona, MurciaCabezo de Torres y Cuenca a
donde llegó hace 15 años, y don­
de ha terminado su carrera terre­
na. En todos los sitios y con car­
gos de responsabilidad colegial;
jefe de estudios y disciplina, en­
cargado de pastoral, administra­
dor y confesor. En todas fas in­
cumbencias se destacó por su
precisión, su tenacidad y empeño
por hacer bien las cosas y s i^ pre en favor de los demás.
El pasado mayo celebró sus bo­
das de oro sacerdotales con ale­
gría y participación de muchos y

por donde había pasado le esperab€in para homenajearle. Hasta
en Azkoítia le estaban preparando
una fiesta en esta primavera. Pero
Dios ha creído bien que ya estaba
maduro para el cíelo y allá se lo ha
llevado para celebrar las bodas
eternas en la vida nueva y que
nunca termina.
D. Vicente Ballester.
t en Barcelona el 14 de enero
de 1984 a los 81 años de edad. El
día 15 se celebró el funeral con
una gran concumencia de miem­
bros de la Familia Salesiana, pro­
cedentes algunos de las lnsp>ectorías de Bilbao y de Valencia. D.
Vicente nació en Valencia el 23 de
junio de 1902 y d e ^u é s de cuatro
de aspirantado en Campeílo, hace
el noviciado y su primera profe­
sión religiosa en Carabanchel, en
1920.

D. Vicente desempeñó cargos
de responsabilidad y de confianza
en la Congregación: hace el trie­
nio en Mataré (1922-26); estudia
la teología en la Crocetta, Italia
(1926-30); desarrolla sus prime­
ros apostolados como sacerdote
de catequista en Alcoy y después
en Gerona. Los años 1936-39 los
pasa con monseñor Marcelino
Olaechea, como secretario, de
quien guardará un gran aprecio y
estima durante toda su vida y las
memorias de esta época en 84 fo­
lios. Desde 1939 hasta 1963 de­
sempeña el cargo de director en
las Casas Siguientes: Azkoítia,
Burriana, R ipollyen ArbósdelPenedés, como Director y Padre
Maestro. Y del 63 al 76 reside en
la Casa de Sarriá-Barcelona, desemF>eñando los cargos de Dele­
gado In s p ^ o ria l de Cooperado­
res y ArrtíQUOS Alumnos, Vicario
In^jtectoríaTy Secretario Inspectoriai.
Humanamente era un hombre
bueno y sencillo. Un hermano lo
definía: «era la conjunción plena
del hombre bueno, artista y entu­
siasta. Los que fueron rK>vicios,
durante sus años de Padre Maes­
tro, hablan de él como un hombre
de una bondad exquisita, de un

31

fueron a la casa del padre
hombre sencillo y acogedor, de
una relación de cercanía y amis­
tad.
Religiosamente era un hombre
de Oíos, observante de sus com­

promisos religiosos y muy riguro­
so consigo mismo: era asceta,
mortifícado y piadoso en el tipo de
espiritualidad en que había sido
formado.

BECAS PARA LAS VOCACIONES SALESIANAS
INSPECTORIA DE BARCELONA
Beca «San Marcos». Primera entrega; 100.000 pesetas.
Beca «Bibiana Soclas». N. e.; 8.008. Total: 62.000 pesetas.
Beca «Santísima Trinidad y Sagrada Familia». Primera entrega; 100.000 pesetas.
INSPECTORIA DE BILBAO
Beca «María Auxiliadora». Santander. N. e.: 10.000. Total; S I.000 pesetas.
Beca «María Auxiliadora». Deusto. N. a.: 20.000. Total; 70.000 peseü».
Beca «Rufino Encinas». Vda. de Mauricio. N. e.: 5.000. Total: 53.000 pesetas.
Beca «Luis Torrerk}». Vda. de Mauricio. N. e.: 5.000. Total: 40.000 pesetas.
Beca «Misionera». N. e.: 50.000. Total: 250.000 pesetas.
Beca «Seminario». N. e.; 50.000. Total: 250.000 pesetas.
INSPECTORIA DE CORDOBA
Beca «Pío Campero». Orense. N. e.: 50.000. Total: 200.000 pesetas.
Beca «Rosita Hernández». Córdoba. Total; 680.000 pesetas.
Beca «Familia Salesiana de Pozoblanco». N. e.; 12.000. Total 152.000 pesetas.
Beca «Joaquín Zayas». Primera entrega; 50.000 pesetas.
Beca «José de Juan». Las Palmas. N. e.; 10.000. Total: 3 ^.0 0 0 pesetas.
Beca «María Auxiliadora». El Sauzal. Total; 40.000 pesetas.
Beca «D. Bosco». La Orotava. Total; 360.000 pesetas.
Beca «N. N.» Córdoba. N. e.: 150.000. Total: 400.000 ptas.
Beca «López Qoruález». Ronda. Primera entrega; 250.000 pesetas.
Beca «Asociación de María Auxiliadora». Antequera. Primera entrega; 27.500 pesetas.
Beca «F. C.» Córdoba. Primera entrega; 60.000 pesetas.
Beca «Teresa de Lisleux». Puerto de la Cruz. Primera entrega; 100.000 pesetas.
INSPECTORIA DE LEON
Beca «Africa Salesiana». V.D.B. Zamora. N. e.; 20.000. Total: 60.000 pesetas.
Beca «D. Rúa». VIgo. María Auxiliadora. N. e.: 1 2 .000. Total; 166.000 pesetas.
Beca «D. Fila». V m . María Auxiliadora. N. e.; 1 .000. Total: 114.000 pesetas.
Beca «José Pintado». VIgo. N. e.; 20.000. Total: 172.000 ptas.
Beca «Bodas de Cro D. Cipriano». VIgo. N. e.; 40.000. Total: 163.000 pesetas.
Beca «D. Valentín Qrasso». Astudillo. N. e.; 5.000. Total: 36.000 pesetas.
Beca «D. Felipe Qarcfa». Coruña. Calvo Sotelo. N. e.: 30.000. Total: 155.000 pesetas.
Beca «Villa de la Robla». Para Senegal. N. e.: 50.000. Total; 200.000 pesetas.
Beca «Sacerdote» Vtao. María Auxiliadora. N. e.: 15.000. Total: 265.000 pesetas.
Beca «Sacerdotal». \% >. Primera entrega: 230.000 pesetas.
Nueva Beca «Sacerdbtal». VIgo. Primera entrega; 150.000 pesetas.
Beca «Gon-Viz». VIgo. N. e.; 65.000. Total: 335.000 pesetas.
Beca «Familia Salesiana». VIgo. Primera entrega: 100.000 pesetas.
Beca «Sagrado Corazón». VIgo. Cánido (Vigo). Primera entrega: 50.000 pesetas.
Beca «María Auxiliadora». Cánido (Vigo). N. e.: 50.000. Total; 100.000 pesetas.
Baca «Bodas de Oro Sacerdotales D. Manuel Rc^riguez». Total: 1.100.000 pesetas.
Beca «Senegal». Familia Manuel Gamelo. Primera entrega; 100.000 pesetas.
Beca «Senegal». Comunidad Masaveu. Primera entrega; 100.000 pesetas.
Beca «Senegal». Nuevas entregas;
Orense. N. e.: 20.000 pesetas.
A llaiiz. N. e.: 137.000 pesetas.
Astudilk). N. e.; 15.800 pesetas.
Valladolid N. e.: 37.000 pesetas.
F. Vigll. Oviedo. N. e.: 100.000 pesetas.
Cambados. N. e.; 5.000 pesetas.
Sr. Ayuso. N. e.: 10.000 pesetas.
Dionisio García. N. e.; 10.000 pesetas.
Beca «Augusto Czartorfsky». Orense. A.B. N. e.: 15.000. Total; 200.000 pesetas.
Beca «Arw icofradfa de Vigo». N. e.; 10.000. Total: 24.000 pesetas.
Beca «San Antonio». N. e.; 10.000. Total: 145.000 pesetas.
Beca «Centenario». Calvo Sotelo». N. e.: 70.000. tW I; 150.000 pesetas.
Beca «Tamba». Calvo Sotelo. N. e.: 100.000. Total; 300.000 pesetas.
Beca «San Luis». Calvo Sotelo. N. e.: 100.000. Total: 300.000 pesetas.
Beca «Pablo-Sacerdotid». Vigo. N. e.: 10.000. Total: 70.000 pesetas.
INSPECTORIA DE MADRID
Beca «Familia Francia». N. e.: 1.000. Total: 148.000 pesetas.
Beca «M. A L> . N. e.: 1.000. Total: 176.000 pesetas.
Beca «Mercedes Cruzado». N. e.: 3.000. Total; 210.000 pesetas.
Beca «Fidelidad». N. e. (Doe meees): 20.000. Total; 430.000 pt»etas.
Beca «Aichicofradfa María Auxiliadora». Atocha. N. a.; 6.000. Total; 315.000 pesetas.
Beca «D. AdoHo Pérez Urtbelarrea». N. e.: 400.000. Total: 800.000 pesetas.
Beca «C. L A • CC. Extremadura». N. e.: 15.000. Totad: 430.000 pesetas.
Beca «FamHIa A S. M.». Primera entrega; 100.000 pesetas.
ÍNSPECTORU d e SEVILLA
Beca «Misiones». N. e.; 29.500. Total: 300.000 pesetas.
Beca «Juan Pablo II». N. e.: 12.500. Total: 205.000 pescas.
Beca «D. Santiago Sánchez». N. e.: 100.000. Total: 135.000 pesetas.
Beca «Malones». N. e.; 41.000. Total: 275.500 pesetas.
Beca «San José y San Antonio». N. e.: 10.000. Total: 61.000 pesetas.
Beca «Nuestra Seóora del ValM». N. s.: 5.000. Total: 20.000 peestas.
INSPECTORU DE VALENCIA
Beca «San Patricio». NoveUa. N. e.: 10.000. Total: 95.000 pesetas.
Beca «San Juan da Ribera». Alcoy. N. e.: 50.000. Total; 150.000 pesetas.
Beca «Marta AuxMadora». Alicante. N.
240.000. Total 600.000 pesetas.

32

Salesianamente. Era un gran
entusiasta por todo lo salesiano.
Tenía un gran amor a la Congre­
gación y sus tradiciones y un
enorme aprecio a todos los supe­
riores. Fue un gran animador de
las vocaciones salesianas.
D. Avelino González Patino.
t el pasado día 2, entregó su
alma al Señor el sacerdote sale­
siano D. Avelino González Patino,
a los 74 años.
Su vida nos deja un testimonio
admirable de servicio a los hom­
bres, en especial a los niños y a
los jóvenes. Había nacido el 18 de
agosto de 1909 en Alameda de
Gardón (Salamanca). Estudió Hu­
manidades en el colegio salesia­
no de Cádiz, ingresando a los 18
años en la congregación saJesiana. Hizo estudios de Filosofía y
Magisterio en San José del V alle,'
en el Instituto Filosófico Salesia­
no. Destinado como profesor de
E. G.B., dio clases en Santa Tere­
sa (Ronda), colegio de la Santísi­
ma Trinidad (Sevilla) y en Carmona (Sevilla).
En Carabanchel, Madrid, cursó
Sagrada Teología, ordenándose
de sacerdote en 1935. Fue profe­
sor de varios colegios salesíanos
y director de la Escuela Agrícola
de Campano, del colegio de Mála­
ga y de los de Montellano y Ante­
quera.
Fue un hombre optimista, nun­
ca se dejó vencer por las dificulta­
des, y también fue organizador
entusiasta de todas las activida­
des escolares, muy apreciado por
sus muchos alumnos repartidos
hoy por toda España.
Fue asimismo, un apóstol infati­
gable de los movimientos salesianos, realizando una labor muy
apreciada en la Archicofradía de
María Auxiliadora. Amaba ardien­
temente las asociaciones de anti­
guos alumnos. Fundó la Adora­
ción Nocturna femenina en Cór­
doba y creó varios centros de (xx>peradores s^esianos. La Confe­
deración Mundial de AA.AA. Saiesianos le otorgó el diploma de Rdelltatís Signum Per 50 Annos, el
18 de febrero de 1982.
La Misa de córpore insepulto,
en el santuario de María Auxilia­
dora, fue presidida por el inspec­
tor provinctal, D. Domingo Gonzá­
lez Diz, y concelebrada por otros
35 sacerdotes, salesianos y dio­
cesanos. Participaron fieles de
Ronda, Montilla y otros lugares.
En la homilía, el provinciai desta­
có la laboriosidad, el servicio y la
entrega del benernérito salesiano.

V ID E O
FT
La CENTRAL CATEQUISTICA SALESIANA ha puesto en m archa su produc­
ción de cintas VIDEO (sistem as VMS y BETAMAX).
L as prim eras realizaciones son sencillas, pero m uy prácticas: grabaciones de
algunos de los grandes tem as audiovisuales del propio fondo editorial de la CCS. tales
como h a n sido producidos en diapositivas sonorizadas, sin m odificaciones im p o rtan ­
tes.
Con e sta nueva presentación, las fam ilias y los educadores que dispongan de un
vídeo, verán facilitada su tarea: desap arecerán los inconvenientes de una proyección
audiovisual clásica, siem pre dem asiado com plicada (proyector -i- diapositivas + m ag­
netofón -I- c in ta cassette -i- sincronizador -i- oscurecim iento de la sala. etc,).
Y a h a n salido los dos prim eros VIDEO CA SSETTES CCS:
1. VD-EA

T em as 3 y 4 de EDUCACION PARA EL AMOR.
- Los dos sexos (43’ 40”).
- El cuerpo, in stru m e n to de com unicación (42’30”).

2. VD-EA

T em as 5 y 6 de EDUCACION PARA EL AMOR.
- H acia u n a sexualidad a u té n tic a (52’ 25”).
- D esarrollo del im pulso sexual (42’ 25”).

N u e v a c o le c c ió n c a te q u é tic a

C A T E Q U IS T A S E N F O R M A C IO N
- Una colección dinámica, que lance a la creatividad y no al e.spontaneismo. que favorezca el pensar-hacer y el hacer-pensar. y no el
hacer por hacer.
- Una colección pedagógica que surge de un convencimiento: en (*1
grupo de catequesis el hacer y el decir son siempre significativos.
Todo puede tener valor.
- Una colección teórica y práctica a la vez, que quiere potenciar lo ya
experim entado por los grupos reflexionando sobre las teorías en
que se apoya la praxis.
- Primeros títulos;
1. Iglesia en catequesis. Alvaro Ginel. José María Maideu y José
Sorando.
2. Catequistas: ¿hacer o hacerse? José María Maideu.
3. Catequistas para catequistas. José María Maideu.
4. .Animadores para una catequesis de significación. Alvaro Ginel y José Sorando.
5. Escuelas de catequistas en España. Alfonso Francia.

CENTRAL CATEQUISTICA SALESIANATel.2552000/ Alcalá. 164/MADRID-28

UN P R O YEC TO
PARA A C O M PA Ñ A R
A LOS C H IC O S Y CHICAS
DE 11 a 18 AÑOS
EN SU C A M IN O
PARA LLEG AR A SER
C R IS TIA N O S
EN UNA C O M U N ID A D
C R EY E N TE
Se caracteriza por;
-

la U N ID A D : integra las dim ensio­
n es d el hom bre crey en te en un
núcleo com ún.

-

la C O N T IN U ID A D : p ro gresió n
g rad u ad a q ue evita la dispersión,
los saltos en el va cío o las lagu­
nas.

-

la FLE X IB ILID A D : ad m ite adapta­
ciones. Válido p ara am bientes
d iferen tes.

-

la P R A C TIC ID A D : p arte
acción co n creta y d irec ta
jó v en es , a d o le sc en tes y
lescen tes.
Experim entado an tes d e
crito.

de una
con los
preado­
se r es­

Ya está a la venta la Colección
com pleta (12 libros)

PREADOLESCENTES

ADOLESCENTES

JOVENES

............ 1.
2.
3.

.................... la .
Ib .
2a.
2b.

En camino. Encuentros. Reuniones. Campamento.
En cambio. Encuentros. Reuniones. Campamento.
En búsqueda. Encuentros. Reuniones. Convivencias. Campamento.
¿Quién soy
¿Quién soy
¿Con quién
¿Con quién

yo? Encuentros. Reuniones, Convivencias.
yo? Cursillos...
estoy. Encuentros. Reuniones. Convivencias.
estoy? Cursillos.

..................................1a. ¿Dónde estoy? Reuniones.
l b.
¿Dónde estoy? Encuentros. Convivencias.
lc . ¿Dónde estoy? Cursillos
2a. ¿Hacia dónde voy? Reuniones.
2b. ¿Hacia dónde voy? Reuniones. Convivencias.

Pedidos a:
CENTRAL CATEQUISTICA SALESIANA • c / Alcalá, 164 ■ MADRID-28 • Teléf. 2552000