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Medios

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IKNOS EN ESPAÑA

D O N B O SC O
Una página para los niños.

Hace
cien años
¡os
chiquiiios
españoles..
Queridos amigos Juanito y Mari:
Os veo montados en bicicleta y caminando hacia el
futuro. Os miran los conejillos y los pájaros. Y hay un
árbol que tiene el rostro de Don Sosco en su tronco
centenario. Y vosotros vais cantando una canción muy
bonita que se oye en toda España. La letra dice así:
«Vino a esta tierra y ya no supo Irse.
Y ahondó como un árbol sus raíces...
Y se hizo centenario, y en sus ramas
las aves de este cielo iqué bien cantan!...»
Mirad qué noticia tan hermosa os doy; |1981 va a ser
fiesta todo el año! Celebraremos un año jubilar porque se
cumplen cien años de la venida de los Salesianos a
España. Pero, amigos, los Salesianos vinieron a nuestra
tierra a dar clase a los niños. Conque no penséis que vais
a estar todo el año de vacaciones. Ya veis qué idea más
feliz tuvieron aquellos primeros salesianos; a abrir cole­
gios. cuando vosotros sólo soñáis en verlos cerrados...
La historia de la llegada de los primeros salesianos a
España, contada a los niños, podría empezar asi;
«Habla una vez un santo muy amigo de los jóvenes,
que se llamaba Don Bosco. Este hombre de Dios quería
abrir casas en todas las ciudades del mundo para que se
llenaran de niños, y cuanto más pobres mejor. Para eso
envió a sus Salesianos a España. Y la primera ciudad
española, la más afortunada de todas, fue Utrera. En esta
población sevillana, blanca y coronada de torres, vivía un
señor marqués muy generoso y amigo de los pobres. El
mismo quiso ser tan pobre que no se cansaba nunca de
dar y compartir sus bienes. Se llamaba Diego María
Santiago. Marqués de Ulloa.
Este señor se puso de acuerdo con el Arzobispo de
Sevilla, el Cardenal Joaquín Lluch, y los dos le escribie­
ron a Don Bosco diciéndole que tenían muchos deseos
de que sus Salesianos vinieran a Utrera. Y el santo les
contestó que muy bien, que eso era lo que él quería
también. Y que Utrera sería la primera casa salesiana de
España, pero que después vendrían otras muchas. Y Don
Bosco no hablaba de memoria, aunque soñaba muchas
veces...

Y así fue. Los seis primeros salesianos embarcaron en
Génova y pasaron por Marsella, Barcelona, Gibraltar y
Cádiz. Venían capitaneados por Don Juan Cagliero, el
fundador de las Misiones Salesíanas de América y que,
más tarde, sería obispo y cardenal. «Ecco Utrera». Ya
estamos en Utrera, dijo al ver la hermosa ciudad el 16 de
febrero de 1881. Acudió a la estación un gentío inmenso.
Todos desfilaron a la Iglesia del Carmen, donde se cantó
un Tedéum de acción de gracias y donde el Cardenal
Lluch les dio la bienvenida...
Don Cagliero se enamoró de Andalucía y escribió a
Don Rúa una preciosa carta en la que, entre otras cosas
le decía: «Yo tenía cabal idea de lo que es cortesía y
bondad fraterna, pero la primacía creo que la tiene Es­
paña y particularmente Andalucía». Y más tarde, antes de
abandonar definitivamente España escribía al Padre
Maestro: «...Animo a tus muchachos. Diles que. en breve,
media España será salesiana... Aquí en Utrera todo ha
comenzado bien. Quizás demasiado bien. Porque ha­
biendo hecho mucho ruido al principio, se encaminó
rápidamente la iglesia y comenzó a venir gente todos los
días, comprendidos una turba inmensa de chiquillos...»

Hace cien años, los chiquillos españoles recibieron el
gran regalo que les enviaba Don Bosco. Para celebrar
este acontecimiento vendrán el Rector Mayor de los
Salesianos y la Madre General de las Salesianas. Cuando
vosotros cumpláis más de cien años y seáis unos viejecitos que vayan con bastón, otros chiquillos como voso­
tros montarán en bicicleta en busca de otro centenario.
Pero cuidado no os deis un porrazo en vuestra dislocada
carrera. ¡Y buen viaje!
Recibir un gran abrazo de vuestro mejor amigo.

PADRE RAFAEL

f
d« la
AAo X C rv

O b ra d a D o n B o te n

• N.o 2 .

F a b ra ro

1961

EDITORIAL

D ire c to r: R A FA E L A L F A flO
D irecC iót^. R e o a cció r^ y A d m o n :
A lc a li. 164 - T e lé fo n o 2 5 S 2 0 00
M A D R ID - 28
D e p o s ito L e g a l: M

3.044-1956

(C on c e n s u ra e c le s iá s tic a )
Im p rim e : E s c u e la G ra tic a S a le s ia n a
M a d rid -A to c b a

LA F E C H A C E N T E N A R IA

Sumario
1. EDITORIAL
16 de febrero: La fecha
centenaria ..............
2. LAS IDEAS
Oe un puñadito de seis
(don Egidio Viganó) ...
Obra providencial (M. E.
Canta) ......................
El sello que nos marca.
Sintonizar con ios jóve­
nes ..............................
3. LAS FUERZAS
2.100 Salesianos españo­
les al servicio de los
jóvenes ........................
1.200 Salesianas españo­
las al servicio de las
jóvenes ......................
S a l e sianos Cooperado­
res ..............................
Buenos cristianos, hon­
rados ciudadanos ...
Lazos de unidad .........
Seminarios y vocaciones.
V. O. B. Consagradas en
el mundo ...................
4. LA ACCION
Cien anos de pastoral ju­
venil ...........................
20.000 jóvenes obreros
en formación profesio­
nal ...............................
Cien años al servicio de
los jóvenes en el cam­
po de la enseñanza.
Prensa salesiana y tiem­
po libre .....................
La parroquia salesiana:
un servicio a la Iglesia
española .....................
Una vocación misionera
centenaria...................
Algunos nombres pro­
pios ..

1G d e f e b r e r o

1

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4
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8
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32

NUESTRA PORTADA
Los Salesianos. cien años en
España.—Don Bosco vino a
nuestra patria con los pri­
meros salesianos que llega­
ron a Utrera el 16 de febre­
ro de 1881. Después de un
siglo de vida, la Obra Sale­
siana ha arraigado como un
árbol que se ha hecho gigan­
te. Ahora se empieza el se­
gundo centenario. Con los
jóvenes caminamos al futuro.
Dibujo —io M Luis Cortés.

• Alegría
El 16 de febrero se cumple el primer siglo de vida salesiana en
España. Es una fiesta jubilar que nos llena a todos de alegría Y la
celebramos recordando a lodo.s los que han realizado tantas empresas
apostólicas en estos cien años. Y brindamos por el futuro, alzando la
copa de nuestros mejores deseos.
• Gratitud
Nuestro agradecimiento, en primer lugar, a Dio.s, que nos envió
el carisma de Don Bosco para vivir la fe erisiiana con el estilo salesiano. Creemos que este modo de vida ha enriquecido a la Iglesia es­
pañola durante estos cien años.
Agradecimiento a María .Auxiliadora que ha continuado haciendo
en nuestra patria la obra de Don Bo.sco en favor de los jóvenes.
Agradecimiento al pueblo español, por la acogida que dio a lo.s
primeros salesianos hasta hacer suya la misma vida salesiana que
acogía. También el carisma salesiano ha quedado así enriquecido con
la aportación de las virtudes de los hombres y mujeres de nue.sira
tierra.
Agradecimiento a los Salesianos que, a lo largo de este siglo, han
trabajado sin regateos, entregando su vida y lo mejor de sí mismos
a los jóvenes.
• Asombro
La humilde semilla que trajeron los seis primeros salesianos se ha
hecho un árbol gigante. Actualmente, la Obra de Don Bosco en Espa­
ña, en breves cifras, está constituida por ^iete Inspectorías o provin­
cias de Salesianos y tres de Hijas de María Auxiliadora, con un total
de 241 comunidades. Hoy los Salesianos españoles son 2.084; y las
Salesianas, 1.182.
Pero, además, la Familia Salesiana suma una gran cantidad de
Cooperadores, Antiguos Alumnos. Voluntarias cic* Don Bo.sco, Alum­
nos... Asociaciones de María Auxiliadora, feligreses, padres de alum­
nos...
Al mirar hacia atrás, tal vez nos asustemos de la multiplicación
realizada al cabo de estos cien años. Pero lo hacemos con el espíritu
del «Magníficat»; creemos que «todo ha sido obra de Dios. El es el
que ha obrado cosas admirables con los medios más humildes».
• Celebración
Por eso celebramos la fiesta del Año Centenario en España. Mi­
ramos hacia atrás, pero marchando adelante, siempre camino de) fu­
turo. «Es el Señor el que guía la historia, no nosotros —ha escrito
el Rector Mayor—; por consiguiente, no hemos de tener miedo. Hay
más futuro que pasado: cien año» de historia y siglos de porvenir...»
Los españoles solemos d«.-cir que «hay más tiempo que vida». Por eso
celebramos este Primer Centenario marchando hacia el porvenir.
• Unas palabras proféticas
A la altura de los cien años, qué bien suenan y resuenan a reali­
dad y a profecía las palabras de Don Bosco al comenzar su obra en
nuestra patria; «Utrera será el inicio de obra*- muy importantes. Den­
tro de poco, una señora hoy casada en Barcelona (y ahora no estoy
soñando) cuando quede viuda, nos llamará a su ciudad. Allí abrire­
mos una casa, a la que seguirán otras muchas...»
Palabras proféticas que ahora vemos cumplidamente cumplidas.
Aunque la sinfonía aún está inconclusa. Porque Don Bosco sigue.
1

T
LAS IDEAS

!

DE UM PUMADITO
EL R E C T O R M A Y O R A L O S M IE M B R O S
D E LA F A M IL IA S A L E S IA N A D E ESPAÑA

Queridos hermanos y hermanas:
La celebración del Primer Cen­
tenario de la llegada de la Voca­
ción Salesiana a España me mue­
ve a dirigirles un saludo de felici­
tación y unas sugerencias de con­
versión.
Si miramos el desarrollo de toda
nuestra Familia (Salesianos, Hijas
de María Auxiliadora, Cooperado­
res, Antiguos Alumnos, Volunta­
rias de Don Bosco) en España, a
partir de aquel puñadito de seis
que mandó I>on Bosco en 1881» he­
mos de reconocer que, sea por una
especial benevolencia del Señor Je­
sús y de su madre María, sea por
la naturaleza de nuestro carisma
y por el sentido de adaptación (hoy
lo llamaríamos de inculturación) de
quienes trasplantaron ahí la semi­
lla salesiana, ha alcanzado una al­
tura no común que puede medirse
por el número y la calidad de las
personas, por la cantidad y varie­
dad de las obras y por la difusión
de la espiritualidad propia del San­
to Educador de la juventud.
Nuestros hermanos y hermanas
de estos primeros cien años han
escrito una historia admirable. En
efecto: caminan hacia los altares
muchos Salesianos que atestigua­
ron con su sangre la fidelidad a la
vocación, varias Hijas de María
Auxiliadora, algunos Cooperadores:
han salido para otros continentes
centenares y centenares de misio­
neros y misioneras, incluso segla­
res de la Familia Salesiana; han
florecido en el país unas 250 Obras
de evangelización y de promoción
humana que están atendidas por
más de 3.000 consagrados y consa­
gradas; se ha optado preferente­
mente por la juventud necesitada
y por los hijos del pueblo, promocionándolos en particular con unas
Escuelas Profesionales muy bene­
méritas: los Cooperadores y los An­
tiguos Alumnos han ido creciendo
hasta encontrarse diseminados por

todas las regiones del País, porta­
dores del espíritu cristiano que be­
bieron al lado de los Salesianos e
Hijas de María Auxiliadora. ¡En
solos cien años!
La vida no se detiene por la ce­
lebración de un centenario: y la
mirada inteligente de quienes creen
que cada generación está nueva­
mente llamada a comprometerse en
la edificación del Reino de Dios se
lanza hacia el futuro para pregun­
tarse; Y ahora, ¿qué debemos ha­
cer?
Los primeros Salesianos llegados
a España han traído el espíritu y
el proyecto de Don Bosco bien gra­
bados en su corazón, y han sabido
testimoniar con la vida y con obras
audaces, llevadas a cabo con esca­
sísimos medios, el valor de la mi­
sión salesiana.
Ahora les toca a ustedes comen­
zar el segundo centenario: y la his­
toria hablará de ustedes sólo si sa­
brán abrir a Cristo los jóvenes de
hoy y de mañana. Esta responsa­
bilidad que pesa sobre todos los
miembros de la Familia Salesiana,
les pide a gritos que comparen su
propio corazón con el de aquéllos
de 1881; porque para continuar la
historia salesiana es indispensable
poseer el espíritu de T>on Bosco,
o con expresión ya conocida, tener
un corazón oratoriano.
Este corazón implica tantas co­
sas. Antes que nada: la entrega de­
cidida, exclusiva y permanente a
Jesucristo, siempre presente entre
nosotros en la Eucaristía, como
amor fontal de toda vocación apos­
tólica: el cultivo de la devoción a
María, Madre de la Iglesia y Auxi­
lio de los Cristianos, con el vigor
con que latía en el alma de Don
Bosco: el sentido eclesial que es
amor y adhesión al Papa y a los
demás Pastores y es compromiso
de colaboración al servicio de las
Iglesias. Tales eran los tres amores

de nuestro Fundador, con los cua­
les movía los hilos secretos de las
conciencias de los muchachos de
Valdocco hasta hacerlos apóstoles
y misioneros.
Corazón oratoriano significa pa­
sión por la juventud, donación sin
medida, acercamiento y presencia,
amistad sincera y fuerte, para lle­
varla a Cristo; clima de familia,
que se manifiesta con la confianza
y la alegría; una voluntad de ac­
ción colmada de caridad pastoral.
El corazón oratoriano lleva, ade­
más, dentro de sí el dinamismo mi­
sionero: Don Bosco pensaba en
América, en Africa, en Asia, en
Australia y Oceanía; entusiasmaba
a sus hijos con la visión de la ju­
ventud del mundo entero y los
mandaba con enormes sacrificios,
seguro de que el Señor le pedía
hacer de su Obra una Familia de
horizontes universales, esencial­
mente misionera. Tener corazón
oratoriano es sentir el llamado de
la juventud de todos los pueblos
para marchar a donde el Evangelio
carece de pregoneros y testimo­
nios.
Debemos mirar con frecuencia
al Oratorio de Valdocco; es el pa­
radigma genuino y definitivo de
nuestro Carisma. Contemplamos a
Don Bosco rodeado de sus chicos,
desviviéndose por ellos, para dar­
les el pan material, el pan de la
formación humana y el pan de la
fe cristiana; mirémoslo amando a
sus hijos como acaso ningún otro
educador lo haya sabido hacer; mi­
rémoslo en su íntima unión con
Dios que le hacía vivir en el cielo
teniendo los pies en la tierra, co­
mo él decía.
El corazón oratoriano es todo un
clima de santidad, traducido en es­
tilo genial de acción. Para hacerlo
latir continuamente en nosotros me
permito enumerarles unas breves
consignas programáticas.

• Pongamos como elemento
central en nuestra vida el segui­
miento de Jesucristo, cada uno se­
gún su estado. El es el valor abso­
luto de la historia y sólo a El en­
tregamos la totalidad de nuestro
amor, superando atractivos y difi­
cultades con el fin de permanecer
a disposición del Reino trabajando
en favor de la juventud.
• Cristo y María son los dos
resucitados de la historia. Nuestra
devoción a María, Auxilio de los
Cristianos, debe seguir ocupando
el lugar privilegiado que le corres­
ponde en la espiritualidad salesiana. Para poder hacer milagros, hoy
como ayer, y mañana como hoy,
Ella debe ser conocida y honrada
por su materno amor y por su ayu­
da, siempre presentes en el deve­
nir humano.
• La Iglesia, Cuerpo de Cristo,
es con María la segunda Eva para
dar vida al Hombre nuevo. Cuide­
mos, como Don Bosco, nuestra ca­
lidad de miembros comprometidos
y corresponsables de la comunidad
eclesial, amando a los Pastores y
guiándonos por su Magisterio
auténtico.
• Sepamos profundizar y apli­
car, hoy, el Sistema Educativo de
Don Bosco, en sus tres niveles: de
espiritualidad, de criteriología pas­
toral y de metodología pedagógica:
suscitando la confianza, respetan­
do y educando la libertad, presen­
tando con convicción testimonian­
te los valores del misterio de Cris­
to. El Da mihi animas que trajeron
a España los primeros hijos de Don
.Bosco siga siendo el lema caracte­
rizante de toda la Familia Salesiana.
• La coincidente celebración,
este año, del Centenario de la
muerte de Santa María Dominga
Mazzarello, nos recuerde a todos
el llamado a la santidad según
nuestra pluriforme vocación. En la
Familia Salesiana los varios Gru­
pos sepan concurrir, en fidelidad
a las características propias de ca­
da uno, a realizar la gran misión
de Don Bosco en favor de la juven­
tud, y a intensificar la mutua co­
munión de todos en el crecimiento
espiritual y en las iniciativas de fu­
turo.
• Sintámonos todos fuertemen­
te invitados a cultivar el ardor mi­
sionero, mirando de manera espe­

cial al Africa. España ha sido tie­
rra de grandes y numerosos misio­
neros; y debe seguir siéndolo. Lan­
zarnos al Africa con toda la fuerza
educadpra del espíritu salesiano
será, por una parte, el mejor ser­
vicio que podemos prestar a im
mundo en pleno desarrollo; y, por
otra, el rejuvenecimiento espiritual
de nuestras personas y de nuestra
Familia. En este clima podrán us­
tedes cultivar muchas vocaciones
religiosas y sacerdotales, a pesar
de los tiempos difíciles: como hizo
Don Bosco, nuestro maestro inigua­
lado en este campo.
• Finalmente, la hora actual de
España, con su transformación cul­
tural. Necesita de parte de la Fa­
milia Salesiana una gran clari­
dad de adhesión a los valores cris­
tianos, superando valientemente el
secularismo en sus diversas for­
mas y colaborando a proponer proféticamente a los jóvenes de hoy
una nueva cultura abierta al Evan­
gelio, sin espejismos de ideologías
caducas, sin timidez y ambigüeda­
des, con profundidad de prepara­
ción y sentido de diálogo, sabedo­
res de que en los corazones juve­
niles anida una inmensa capacidad
de construir una nueva civilización
del amor.

He aquí, queridos amigos unas
sugerencias que considero estraté­
gicas para el Centenario que van
ustedes a comenzar.
¡Ojalá que en el año 2081 los
miembros de la Familia Salesiana
puedan entusiasmarse contemplan­
do el panorama de una España re­
novada y siempre cristiana, en la
cual el carisma de Don Bosco apa­
rezca como forjador de nuevas ge­
neraciones de españoles creyentes,
artífice de evangelización en una
parte no pequeña del continente
africano, y formador de vocaciones
abundantes que hayan hecho posi­
ble, en el segundo siglo de existen­
cia, otro capítulo bien escrito de
historia de salvación de la juven­
tud!
¡Muchas felicidades!
Con todo el afecto de Don Bosco,

Roma, fiesta de la Virgen del
Rosario, 7 de octubre de 1980

O B R A P R O V ID E N C IA L
Me uno férvidamente a la ac­
ción de gracias al Señor, por el
siglo de vida de la obra salesia­
na en España. Obra providen­
cial que en 1886 se completó
con la primera fundación de las
Hijas de María Auxiliadora, que
está indisolublemente ligada a
la memorable visita de Don Bos­
co a Barcelona y que él quiso
por intervención directa de ¡a
Santísima Virgen.
En el largo camino de estos
años, llenos de intenso trabajo,
resplandecen figuras hoy enca­
minadas a la gloria de los alta­
res, envueltas en luces de mar­
tirio con ejemplos admirables
de fortaleza y de fidelidad a la
Iglesia y a Don Bosco.
El rico patrimonio espiritual
recogido en estos cien años de
vida obtenga, en esta gloriosa
celebración secular, nuevos do­
nes de bendición y de gracia

para asegurar un camino siem­
pre más fecundo al servicio de
la numerosa y entusiasta juven­
tud española, tan sedienta de
Dios.
Es éste el deseo que se hace
plegaria a María Santísima Au­
xiliadora y a nuestros Santos,
siempre vivos entre sus amados
hijos de España.

io v \

f#offt M
iafteo ^ ^ M o r í c ^ ^ u x l l l a

EL SELLO
Q UE NO S M A R C A
El «salesiaiio» en España está asociado a las imágenes de Don Boseo y de María
Auxiliadora, que han llegado a la entraña del pueblo y las ha hecho suyas. En el
Colegio Salesiano, los chicos se han acostumbrado al rostro de Don Bosco y a la
mirada materna de la Virgen. Y las llevan por la vida. Por eso, al hablar del pro*
yecto salesiano en nuestro pueblo es forzoso empezar por el principio; por Don Bos(!0 y María Auxiliadora. L#os fundadores de la obra al servicio de nuestros jóvenes.
El sello que marca definitivamente a los Salesianos.
¿QUIEN ES DON BOSCO?

No quién era, sino quién es. Porque Don Bosco vive
y bromea todavía entre los jóvenes cada vez que un
salesiano se acerca a ellos.
La cosa viene de lejos, de una especie de leyenda
que. entre nosotros lleva el nombre de «El sueño de
los nueve años*, «A los nueve años —escribe el san­
to— tuve un sueño que me quedó profundamente gra­
bado en el corazón para toda la vida. Me parecía estar
junto a mí casa en medio de un gentío de chiquillos.
>

\

~:7~r

Unos reían, otros jugaban, muchos blasfemaban. Al
oír las blasfemias comencé a callarlos con puñetazos
e insultos. En aquel momento apareció un Señor muy
respetable, noblemente vestido. Su rostro era tan lu­
minoso que no se podía fijar en él la mirada. Me lla­
mó por mi nombre y me dijo:
—No con golpes, sino con dulzura y caridad has de
ganarte a estos tus amigos.
—¿Cómo podré hacerlo?
—Yo te daré una maestra bajo cuya disciplina po­
drás llegar a ser sabio.
—Pero, ¿quién sois vos?
—Yo soy el Hijo de Aquélla, a quien tu madre
te acostumbró a saludar tres veces al día. Mi nombre
pregúntaselo a mi Madre.
En aquel momento apareció una Señora de aspecto
majestuoso, vestida con un manto resplandeciente co­
mo el sol. Viéndome desconcertado, el Señor me indi­
có que me acercara a Ella, tomándome bondadosa­
mente de la mano;
—¡Mira! —me dijo—. Al mirar, me di cuenta de
que en lugar de los muchachos había una multitud de
cabritas, perros, gatos, osos y otras fieras.
—He aquí tu campo. Hazte humilde, fuerte y ro­
busto y lo que veas que ocurre con estos animales lo
deberás hacer tú con mis hijos.
Volví entonces la mirada y, en vez de los animales
feroces aparecieron otros tantos mansos corderinos
que, haciendo fiestas al Señor y a la Señora saltaban
a su alrededor.
En aquel momento me eché a llorar. Pedí a la Se­
ñora que me hablara de modo que pudiera compren­
der. Entonces Ella me puso la mano sobre la cabeza
y me dijo:
—A su debido tiempo todo lo comprenderás...
San Juan Bosco. fundador de la Familia Salesiana y pa­
dre de los jóvenes.

Imagen de María Auxiliadora del Colegio de Utrera.
Fue bendecida por el mismo Don Bosco y vino a Es­
paña con los primeros salesianos. Va a ser coronada
canónicamente en mayo de este año.
villa haya conservado por largo tiempo el recuerdo
de aquella hoguera un poco insólita».

DON BOSCO EN PERSONA

LAS HONDAS ARDEN
EN HONOR DE LA SEÑORA
Hoy ya sabemos quién era el Señor. Y la maravi­
llosa historia de las fieras que se cambian en corde­
rinos.
También en nuestra tierra se habla de las mara­
villas que había visto Juan Bosco, el Soñador. En
una de las expediciones de Salesianos que vinieron a
España llegó un Joven llamado Pedro Ricaldone. ¿Lo
recordamos? Don Pedro Ricaldone. más tarde cuarto
sucesor de Don Bosco. Don Pedro llegó a Sevilla,
donde das autoridades religiosas» habían pedido a
los Salesianos que se ocuparan de innumerables hijos
del pueblo que crecían en absoluto abandono.
«Las autoridades civiles apoyaban esta petición por
la inquietud despertada en ellos por pandillas de mu­
chachos que infestaban la ciudad y amenazaban con­
vertirse en dn peligro para el orden público. Cuando
los Salesianos llegaron a Sevilla en 1892 tuvieron no
poco trabajo. Bandas rivales se combatían a pedra­
das, pero hacían frente común contra las fuerzas del
orden. La iluminación pública era el blanco constante
de sus travesuras. Poco a poco, el clérigo Ricaldone
se fue mezclando con ellos, se interpuso en sus riñas,
hasta el punto de que en breve tiempo se encontró
al frente de quinientos de estos calaveras. Un día tu­
vo una idea genial. Les propuso que, para dar gusto
a la Virgen, depositaran sus hondas a los pies de su
estatua. Así se hizo. A continuación se pegó fuego a
aquellos peligrosos objetos cuyo número subía a va­
rios miles. Se comprende que la buena gente de Se-

En la primavera de 1886 Don Bosco vino a España
Don Juan Branda, el rector do Sarriá. había escrito
al santo, y. entre otras cosa«^, le decía: «.Aquí se piensa
y se habla continuamente de nuestro Padre Don Bos­
co y del vivo deseo de verlo un día no lejano. ¡Oh si
fuese posible tal viaje!»
Y lo fue. Don Bosco llegó a Barcelona. Durante el
viaje oía una voz interior insistente; «Tibi dabo. tibi
dabo... te daré». Y en la ciudad Condal le hicieron el
regalo de la cumbre del Tibidabo para que allí cons­
truyera una ermita al Sagrado Corazón.
—No una ermita, sino un grandioso templo donde
se rinde culto al Señor.
Y el Tibidabo. el templo profetizado por Don Bosco,
es una realidad.

MARIA AUXILIADORA
Don Bosco empezó la obra de su oratorio y catequesis el día de la Purísima, el 8 de diciembre de
1841. Un «avemaria» fue el lanzamiento de toda su
acción apostólica. María lo llevó de la mano. María
fue la Madre, la estrella. !a «que todo lo hacía».
Don Bosco era el «instrumento» del que se valía la
Virgen.
El santo, agradecido a la «Señora», le levanta la
Basílica de Turín. «Cada ladrillo de este santuario es
una gracia de la 'Virgen'», diría Don Busco. Lo cierto
es que el templo es el verdadero corazón de la obra
Salesiana en todo el mundo. F.n 1861 confesó el santo
a Cagliero, uno de sus primeros Salesianos: «La Vir­
gen quiere que la nombremos con el título de Maria
Auxiliadora. Los tiempos que corren son tan tristes
que tenemos verdadera necesidad de que la Santísima
Virgen nos ayude a conservar y defender la fe cris­
tiana».
Y María Auxiliadora vino a España con los prime­
ros salesianos. Don Bosco mismo compró una estatua,
la bendijo personalmente y la envió a Utrera. Es la
misma imagen que va a ser coronada canónicamente
en mayo de este año centenario.
¿Qué alumno o antiguo alumno salesiano no venera
a María Auxiliadora?
Don Bosco y Maria Auxiliadora son el sello que
han marcado la obra salesiana en España. Con su fuer­
za y simpatía se ha desarrollado en este primer si­
glo que ahora se cumple. Ellos son la garantía del
futuro de la Congregación en esta Tierra.

No se puede ser salesiano sin querer a los jóvenes. Por muchas cualidades que se tengan,
si falta el amor a la juventud, ya no hay espíritu salesiano, se está a años luz del estilo de
Don Bosco.
Don Bosco se dio cuenta de lo que buscaban los jóvenes de su tiempo; intuyó sus dificulta­
des y buscó con ellos la solución de sus problemas. Sí hoy se cometen tantos errores con la
juventud: ¿no se deberá a que no se sabe escucharla? los educadores han de tener los oídos
siempre alerta' a las esperanzas de los jóvenes.
Claro que, a veces, los jóvenes hablan en clave. Un muchacho a lo mejor pide droga; pero
los psicólogos saben que se trata de una denuncia de algo muy importante: ese muchacho
siente falta de cariño en la familia o la sociedad lo margina.
Ello quiere decir que el salesiano ha de hacer un esfuerzo constante para sintonizar con los
jóvenes de cada generación. Es cuestión de estar a su lado, de captar la longitud de onda
en que emiten sus mensajes. Por eso, el salesiano, aunque crezca en años, siempre tiene la
tensión de la juventud. Está continuamente en trance de conversión juvenil: el salesiano
siempre tiene dieciocho años.

Sintonixar con los Jóvent
Son muchas las voces de la Ju­
ventud. Se alzan exigiendo más li­
bertad, mayor justicia, más auten­
ticidad. mayor comunicación, más
amistad...
Un psicólogo actual reduce a
tres las grandes exigencias de los
jóvenes de hoy:
— Que la vida tenga sentido.
— Que las personas puedan co­
municarse de verdad, y que
en la comunicación haya com­
prensión y comunión.
— Un modo nuevo y auténtico
de vivir la fe.
Los Jóvenes son siempre una
invitación a vivir el espíritu de

Don Bosco. Quizás nos encontre­
mos ante una juventud contradic­
toria: atea y religiosa, pasota y
contestataria, irreflexiva y equili­
brada, violenta y pacífica... Pero
siempre tendrá un seguro apoyo en
los hijos de Don Bosco.
CREATIVIDAD
EN LA EDUCACION LIBERADORA
La ductilidad ante las situaciones
es una herencia de Don Bosco. Las
Constituciones renovadas de los
Salesianos dicen expresamente:
■Hemos de actuar, renovando las
obras existentes, adaptándolas a la
evolución de los jóvenes, y crean­

do otras nuevas que respondan me­
jor a las nuevas exigencias de los
tiempos».
Con esta creatividad, el salesiano
siempre está dispuesto a transmi­
tir la buena noticia, es decir, es
«evangeiizador», convencido de que
la Catcquesis constituye el núcleo
de su mensaje a los jóvenes.
Por eso, la educación salesiana
es liberadora, pues anuncia a los
jóvenes la alegre noticia de que
Jesús libera al hombre, al joven.
Lo libera de las ataduras interiores
y exteriores que le impiden crecer
y realizarse como persona. Lo libe­
ra para orientar su vida y tomar
sus opciones en la misma y lo

n u estro estilo salesiano
libera con sus compañeros, amigos
y educadores, con los que hace
equipo y comunidad.
EL SISTEMA PREVENTIVO
El estilo salesiano de educación
es el sistema de la bondad, llamado
tradicionalmente «sistema Preven­
tivo». Se resume fácilmente en tres
palabras: Amabilidad • Razón y Re­
ligión.
Amabilidad: La palabra propia,
inventado por Don Bosco es «amore-volezza». El español tiene una
palabra más precisa y muy usada.
Se trata del «cariño». El santo lo
supo expresar en una frase lapida­
ría: «me basta saber que sois jó­
venes para que yo os quiera».
Este cariño a los jóvenes se de­
muestra con la amabilidad, con los
buenos tratos, con la alegría, con
la presencia. El amor es un don
que viene de Dios y se da gratis.
La razón: El sistema salesiano
no es sólo corazón; Está guiado por
la inteligencia. Las dos cosas han
de ir juntas. Conocer sin amar lle­
varía sólo a explotar a los jóvenes
(tal es el caso de la publicidad co­

s de hoy
mercial, de tos políticos y de los
creadores de pornografía). Pero
amar sin conocer trae consigo el
fracaso en la educación y acarrea
no pocas desilusiones. Es el desti­
no de tantos padres que un día se
ven rechazados por sus hijos.
El salesiano es cariñoso, pero
prudente: amable, pero listo. Ven­
dría a ser la paloma, y la serpiente
deJ Evangelio.
Y la religión: Este tercer elemen­
to era el más importante para Don
Bosco, sin el cual, los anteriores
El salesiano procura estar al día
sintonizaruio con los jóvenes y dán­
doles confianza.

son puramente humanos. Para el
Santo la educación debía ser inte­
gral: formar al hombre y al cristia­
no. La religión, no como medio de
«opio» o manipulación, como a ve­
ces se ha malentendido; sino como
«fin».
El O b i s p o americano Fulton
Sheen decía entre broma y serio
que para casarse debía haber tres
personas: él, ella y Dios. Lo mismo
para una educación firme: además
del educador y el educando ha de
estar Dios. En clave personal. Dios
y Cristo, el amigo de los jóvenes.
Por eso la piedad es un elemen­
to indispensable en la educación
salesiana.
Y LA ALEGRIA
«Nosotros hacemos consistir la
santidad en estar siempre alegres»,
fue la conclusión del joven alum­
no Santo Domingo Savio. «Tristeza
y melancolía, fuera de la casa mía»
solía repetir Don Bosco con pala­
bras de San Felipe Neri. Pues bien.

el mismo Don Bosco, además de
ser un Santo simpático, también
practicaba la «empatia», es decir,
sabía ponerse en lugar de sus mu­
chachos. Por eso los comprendía
como nadie, sabía darles lo que les
gustaba. Suyas son estas normas:
«Déseles a los chicos amplia liber­
tad de saltar, correr y gritar». Su
saludo era siempre «¿estás con­
tento?».
Sus colegios y oratorios son her­
videros de alegría. El deporte, el
teatro, las bandas de música, los
paseos, los títeres, y posteriormen­
te ei cine, y los cinefórum, consti­
tuyen el marco desbordante de go­
zo en el que el chico se siente a
gusto. El clima de alegría de los
centros salesianos proporcionan la
serenidad y el equilibrio necesario
para la educación de los jóvenes.
Don Bosco lo vivió. Los prime­
ros salesianos heredaron este es­
píritu que hoy es tradición, prover­
bio y frase acuñada: la alegría sa­
lesiana.

e

LAS FUERZAS
2 .1 0 0 SALESIAM O S ESPA Ñ O LES
A L SE R V IC IO OE LOS JO V E N E S

El día de la fiesta de Santa Teresa de 1880 Don Bosco decía proféticam ente al futuro
D irector de la casa de Utrera, D. Juan Branda; «Utrera será el inicio de obras muy im­
portantes. Dentro de poco, una señora hoy casada en Barcelona (y ahora no estoy so­
ñando) cuando quede viuda, nos llamará a su ciudad. A llí abriremos una casa, a
la que seguirán otras muchas...»
Estas palabras proféticas de Don Bosco se han ido cumpliendo a lo largo de este
prim er siglo. La Familia Saiesiana se ha desarrollado y ha crecido en España como
en ningún otro país fuera de Italia.

FECHAS Y NUMEROS

En 1954. Se divide la Inspec­
toría Céltica en dos: Madrid y
Zamora y la Bética en dos: Se­
villa y Córdoba. Son en total cin­
co Inspectorías, con 82 casas y
1.849 salesianos.
En 1958. Se divide la Inspec­
toría Tarraconense en dos; Bar­
celona y Valencia. Son pues seis
Inspectorías con un total de 104
casas y 2.218 salesianos.
En 1961. Se crea como sépti­
ma Inspectoría la de Bilbao, con­
figurándose el mapa actual de la
España Saiesiana: siete Inspecto­
rías. En ese año había 123 casas
y 2.612 salesianos.
En 1967. Significa el año vér­
tice de la gráfica de salesianos
en este siglo que llegaron a ser
i.299.
En 1981. Actualmente hay en
España 161 casas y 2.084 sale­
sianos.

En 1881 llegan a Utrera los
.seis primeros salesianos.
En 1899 había en España 16
casas y 256 salesianos.
En 1902 España queda dividi­
da en tres Inspectorías; BcticaSevilla; Céltica-Madrid; y Tarraconense-Barcelona. Entonces ha­
bía 22 casas; y 28*4 salesianos.
En 1936 estalla la guerra ci­
vil y había 53 casas y 767 sale­
sianos. En este período las casas
se ven abandonadas y destruidas.
Y muchos salesianos sufren y en­
tregan su vida con valentía. Son
97 las víctimas: 39 sacerdotes,
22 clérigos, 26 coadjutores. 2
hijas de María Auxiliadora, 3 as­
pirantes, 3 cooperadores y 2 co­
laboradores. De todos ellos se
ha introducido la causa de bea­
tificación y canonización, futuros
santos del martirologio salesiano
español.
QUIENES SON
En 19-12 hay 57 casas y 785 LOS SALESIANOS
salesianos.
En 1951 año de la canonización
Son hombres que han sentido
de Madre Mazzarello y año en la llama del Espíritu a continuar
que muere don Ricaldone, hay el proyecto apostólico de Don
57 casas v 1.575 salesianos.
Bosco: «ser con estilo salesiano
8

signos y portadores del amor de
Dios a los jóvenes, especialmente
a los más pobres».
Dóciles a esta llamada, llevan
vida en común, y profesan públi­
camente los votos de castidad,
pobreza y obediencia, la radical!dad evangélica de las bienaventu­
ranzas como un auténtico camino
de salvación y liberación.
Forman la llamada Sociedad
de San Francisco de Sales, o Con­
gregación Saiesiana, compuesta
de clérigos y laicos fraternalmen­
te iguales.
A QUE SE DEDICAN
LOS SALESIANOS

Dios ha suscitado a Don Bos­
co y a los Salesianos para reali­
zar un servicio específico y con­
creto: cooperar directa o indirec­
tamente a la promoción integral
y cristiana de los jóvenes, princi­
palmente los más pobres y ne­
cesitados y de las clases popula­
res.
Siguiendo a Don Bosco, los Sa­
lesianos colaboran con los jóvenes
al desarrollo de rodas sus posibi-

tamitia saiesiana

lidades para lograr plena madu­
rez humana y cristiana. Trabajan
para encaminarlos hacia la Per­
sona de Cristo y contribuyen a
educarlos a fin de que sean per­
sonas que den su aporte insusti­
tuible al crecimiento de la Igle­
sia y a la transformación cristia­
na del orden temporal.
Para ello ejercen su acción en
Centros juveniles, escuelas, cole­
gios, centros de formación profe­
sional, escuela del profesorado,
parroquias, residencias, semina­
rios, editoriales y misiones en el
extranjero...

En la Inspectoría de:
Barcelona...................... 14.000
Bilbao............................ 9.000
Córdoba ........................ 10.000
León .............................. 8.000
M adrid........................... 15.000
Sevilla............................ 17.000
Valencia .......................... 15.000
Total (alumnos) .......... 88.000
Hoy en España hay preciosas
organizaciones apostólicas y mo­
vimientos como «Cristo vive»,
«Movimientos catee umenales».

PANORAMA

Después de la crisis sufrida en
la década del 70, apuntan los sig­
nos de esperanza con las nuevas
vocaciones. En 1980 había en
España 67 novicios, cantidad que
se mantiene en este año centena­
rio. Ello supone una esperanza
para años futuros.
El Rector Mayor, don Egidio
Viganó, es el séptimo sucesor de
Don Bosco. Sus predecesores,
por orden ascendente, han sido:
don Ricceri (1965-1978); don R.

LA a l e g r ía
DE SER SALESIANO

El salesiano se siente parte de
una Congregación entregada al
servicio de los jóvenes. A su lado
ve a otros hermanos suyos que
forman en la Iglesia un verdade­
ro ejército de unos 18.000 salesianos. Siente el gozo de ser he­
redero del espíritu de Don Ros­
co, el santo de la alegría, y de la
juventud. Confiado en Dios y en
María Auxiliadora, trabaja por
realizarse a sí mismo, para per­
feccionar sus dotes personales y
ponerlas siempre a disposición
de los jóvenes.
Sabe que la Congregación Salesiana a la que pertenece le brin­
dará un campo amplio en el que
desarrollará todos los valores hu­
manos y cristianos de que dispo­
ne. Y se entregará a los demás.
Sabe que el mismo Don Bosco
prometió a sus hijos «pan, traba­
jo y paraíso». Y así trabaja con
fe y con alegría siguiendo su vo­
cación en la Pastoral Juvenil.
Las 161 comunidades en que
trabajan los 2.08-4 salesianos es­
tán al servicio de la juventud a lo
largo y a lo ancho de la piel de
toro. Actualmente los alumnos de
los colegios salesianos son:

Misión del Salesiano es convivir
con los jóvenes, estar a su servicio.

«Movimientos Luz», para chicos
de primaria, «Movimientos Vida»,
para jóvenes de secundaria, aso­
ciaciones de «Scouts», grupos ju­
veniles en las diversas Insp>ectorías, agrupaciones artísticas: tea­
trales, musicales, cine-clubs, dis­
cotecas, círculos literarios, depor­
tivos... y gabinetes de orienta­
ción psicológica.

Ziggiotti (1951-1965); don Ricaldone (1931-1951); don Rinaldi (1922-1931); don Pablo Albera (1910-1922); don Miguel Rúa
(1888-1910); San Juan Bosco.
Las siete provincias salesianas
de España más la de Portugal for­
man la Conferencia Ibérica, al
frente de la cual está don José
Antonio Rico, que pertenece al
Consejo General de la Congre­
gación. Reside en Roma y visita
frecuentemente la «región» ibé­
rica.

H i ja » de ¡Harta A u x itia d o ra

1 .2 0 0 SA LESIA M A S ESPA Ñ O LA S
A L SE R V IC IO D E L A S JO V E N E S
Don Hosco llegó a Barcelona en 1886. Cuando lo dejaban las visitas y la correspondencia, el santo
se daba sus paseos por los descampados de Sarríá. En una de sus caminatas se enamoró de una fin­
ca, «Torre Gironella» al lado de] campo de los Salesianos. «Verdaderamente es ésta», dijo a don
Branda, como si la hubiese visto en sueños. Compra esta casa para las Hijas de María Auxiliadora,
y yo haré que vengan pronto.
Don Branda hizo las gestiones. Pero le pedían primero 250.000 duros, luego 250.000 pesetas que des­
pués fueron 180.000, más tarde 170.000; posteriormente 130.000. Al fin, 70.000. ¿En qué rincón de
qué bolsillo buscar esa suma?
Sólo quedaba el remedio de acudir a doña Dorotea. «Corrió presuroso don Branda a contar a doña
Dorotea lo ocurrido. Mientras la sierva de Dios le escuchaba, sus ojos se iban llenando de lágrimas.
—¿Por qué llora? —le preguntó—. No se apure. Dejémoslo correr. Si no puede es señal de que
Dios no lo quiere.
—No, no —Se apresuró a contestar doña Dorotea—. Estoy conmovida por otra cosa. Ha de saber
usted que por la división del patrimonio familiar he dado a cada una de mis hijas grandes cantida­
des, reservándome sólo la propiedad de 70.000 pesetas que he depositado en el Banco de Barcelona,
pensando que, si se perdieran todos mis bienes, con esta reserva podría vivir modestamente el tiem­
po que Dios me quiera conceder de vida. Ahora veo que El me quiere verdaderamente pobre. Lo
seré. Conteste pues al señor Gironella que las 70.000 pesetas están a su disposición.
—Pero señora —dijo conmovido don Branda—, piense bien lo que hace...
—Nada, estoy decidida. Las 70.C00 pesetas son para la torre.
Corrió, pues, don Branda a casa del banquero para cerrar el trato...

Actualmente las Salesianas tie­ o provincias: Provincia «Nuestra
nen en España tres Inspectorías Señora del Pilar», con sede en
Barcelona: Provincia «Santa Te­
resa de Jesús», con sede en Ma­
drid; y Provincia «María Auxi­
liadora» con sede en Sevilla.
Las tres Inspectorías suman
un total de 82 casas y 1.182 her­
manas trabajan al servicio de la
juventud femenina, repartidas por
la geografía española.

QI’IKNKS SON LAS HIJAS
OK MARIA AUXILIAHOKA
Es más fácil decir «salesianas».
Y son mujeres que han sentido
la llamada del Espíritu para con­
tinuar la obra de San Juan Bosco,
entre la juventud femenina. Con
Santa María Mazzarello, cofundadora de las Salesianas. Murió a los
cuarenta y cuatro años en 1881.
También celebramos el primer cen­
tenario de su muerte.

el estilo salesiano son signos por­
tadores del amor de Dios a las
jóvenes, especialmente las más
pobres.
Para cumplir esta misión se
comprometen a vivir en comuni­
dad, y realizar la santidad en el
seguimiento de Cristo, mediante
la profesión pública de los conse­
jos evangélicos con los votos de
castidad, pobreza y obediencia.
Esta Congregación salió también
del corazón de S. Juan Bosco en
base a un grupo de «Hijas de la
Inmaculada» que existía en Mornese (1872), y siendo su primera
superiora Santa María D. Mazzarello, se denomina Instituto de
Hijas de María Auxiliadora.
En España cuentan con 82 co­
munidades y llevan adelante guar­
derías infantiles, centros preesco­
lares, escuelas primarias, secunda­
rias y de formación profesional,
oratorios y centros juveniles, cen­
tros parroquiales, escuelas urúver-

fa m ilia saiesiana
Mlsión de la Hija de María Auxilia­
dora es convivir con las jóvenes,
estar a su servicio.

sitarías para la formación del pro­
fesorado y otras múltiples activi­
dades.
Hermanas de los salesianos,
tienen el mismo espíritu de Don
Bosco y el mismo sistema educa­
tivo de la bondad y de la alegría
en la formación de las jóvenes.
WADKE
MAKIA MAZZAKEI.LO
Sobre un caballo blanco, con
una escolta de 90 chiquillos y al
son da la banda juvenil, aparació
Don Bosco en Mornese en 1864.
El santo iba precedido de una fa­
ma de santidad revolucionaria.
Era el amigo de la juventud.
«Don Bosco es un santo, me lo
dice el corazón». Así pensó una
mujer mornesina, de nombre Ma­
ría Dominga Mazzarello, que por
entonces tenía veintisiete años.
De carácter fuerte y ardiente te­

nía unos brazos de hierro y can­
saba a los demás en el trabajo del
campo, incluso a ios hombres.
A pesar de ser la más joven
del grupo «Hijas de la Inmacu­
lada» de Mornese, su madera de
líder le hizo cobrar ascendiente
entre sus compañeras.
Un día, al pasar por una coli­
na de Mornese, vio como en sue­
ños una gran casa y, en ella, a
unas hermanas y a sus alumnas,
mientras una voz parecía decirle:
«A ti te las confío».
Y otro día se le ocurrió cuidar
a dos huérfanas que, en poco
tiempo se convirtieron en siete.
Les enseñaba a trabajar, a rezar
y a divertirse, guiadas por don
Domingo, el párroco.
... Hasta que llegó Don Bos­
co. Y en 1872 fue la elegida por
el santo como guía de la primera
comunidad de Hijas de María
Auxiliadora. En Mornese nacía la
nueva Gíngregadón de Salesia-

ñas. Allí se fraguó el espíritu de
Mornese: «de pobreza, de piedad
y de trabajo».
«Temperamento franco, pero
reservado, ardiente, dotado de
gran criterio, Madre Mazzarello,
se distinguía por la virtud de la
fortaleza. Esta mujer campesina,
sencilla y seria, imponía respeto.
Con todo, resultaba fácil obede­
cerle, porque, como decía una
hermana, «ejercía el oficio de superiora como una verdadera ma­
dre; no se iba con melindres, era
más bien decidida pero tenía tan­
ta fuerza de persuasión que se
hacía obedecer de todos, sin que
la obediencia se hiciera pesada».
De vida interior intensa, apren­
dió a amar a Dios trabajando por
El. «Cada puntada de aguja sea
un acto de amor de Dios», solía
decir a una de sus compañeras
de taller.
Olvidándose de sí misma, se
preocupaba siempre de los demás
con gran delicadeza, su santidad
fue típicamente salesiana: alegre,
equilibrada, constante ejercicio
de la voluntad.
María Mazzarello, murió a la
edad de cuarenta y cuatro años,
el 14 de mayo de 1881, el mis­
mo año en que los Salesianos ve­
nían a España. El centenario Salesiano es asimismo el centenario
de la muerte de Madre Mazzare­
llo. Buena garantía para la reno­
vación apostólica de ambas ramas
del árbol de Don Bosco.
Madre Mazzarello fue beatifi­
cada por Pío XI en 1938, y ca­
nonizada por Pío XII en 1951.
Sucesoras de Madre Mazzare­
llo en el gobierno de la congre­
gación han sido: M. Catalina
Daghero (1881-1924); M. Luisa
Vaschetti (1924-1943); M. Linda
Lucotti (1943-1957); M. Angela
Yespa (1958-1972); y M. Ersilia
Canta (1972-...).
11

SALES/AM O S COOPERADORES
UNA VO CACIO N D E S A L E S IA N O SE G LA R ,
<1^ S IN VO TO S, P E R O CON EL E S P IR IT U D E DON B O S C O ,
Fue en 1841 cuando empezó Don Bosco a dar sus catequesis ambulantes. Al frente
de su tropa de chiquillos iba adonde podía y le dejaban. No se sintió del todo solo
pues le echaron una mano dos o tres curas de Turín y unos cuantos seglares. Entre
todos organizaban la catequesis, los juegos y diversiones de los crios.
¿Quiénes le ayudaban? El mismo hizo una lista de los primeros colaboradores: un
carpintero, un comerciante, un boticario, un pastelero, un agente, un impresor, un
vendedor, un orfebre. «Sin vosotros — les decía— , Don Bosco no hubiera podido
fundar el oratorio». Pero ellos le cortaban: «Somos nosotros los que debemos agra­
decerle el habernos proporcionado esta ocasión de hacer el bien».
Asi empezaron los primeros Coo­
peradores Saleslanos. Aunque el
nombre lo recibieron en 1876 cuan­
do funda la organización y les da
un -Reglamento- o estatuto. -Si en
todo tiempo se juzgó cosa útil la
unión entre los buenos cristianos
para promover y sostener el bien
y para impedir y destruir el mal,
hoy día es nece.saria e indispensa­
ble, " ¿ O lió haremos? ¿Son muchos
los enemigos, unidos y compactos
en el combate y en la propagación
del mal? Pues bien, opongámosles
nutridos escuadrones de buenos
cristianos que promuevan y bus­
quen el bien, unidos entre si-,
(B. S.. enero, 1878)
VERDADEROS SALESIANOS
EN EL MUNDO
L o s Salesianos Cooperadores
pertenecen a la Familia Saiesiana.
Y son -aquellos cristianos, sacer­
dotes o seglares que, aun sin el
vinculo de los votos religiosos, res­
ponden a su propia vocación a la
santidad, comprometiéndose e n
una misión juvenil y popular según
12

el espíritu de Don Bosco, al servi­
cio de la Iglesia local y en comu­
nión con la Congregación Salesiana- (CGE 730). Son pues verdade­
ros «Salesianos en el mundo», idea­
dos genialmente por Don Bosco y
a los que el mismo Fundador llamó
-Salesianos externos».
LOS PRIMEROS SALESIANOS
ESPAÑOLES
La Obra Saiesiana en España co­
menzó por los Salesianos Coopera­
dores. El primer cooperador fue el
Marqués de Casa Ulioa quien reci­
bió, firmado por Don Bosco. el Di­
ploma. un año antes de que llega­
ra de Italia la contunidad de los
6 primeros Salesianos. Y. tras el
Marqués, la inacabable lista de per­
sonas que aportaron su cariño y
su ayuda a la incipiente Congrega­
ción.
Basta citar algunos nombres,
muy recordados en las casas que.
en cierto modo, eran obra suya.
Doña Dorotea, en Barcelona: don
Rafael Romero, «el Abuelito». en
San José del Valle; los Marqueses
de Bertemati. en Campano; los

Condes de Bustillo, en Triana; don
Juan Torres Silva, en Jerez; doña
Ana de Viya. en Cádiz; el Conde
de la Cortina, en Montilla: don
Juan Zaragüeta en Urnieta; don An­
tonio Aristegui. en Pamplona; los
Marqueses de Alava, en Madrid...
La gran mayoría de las Obras Salesianas de España surgen del co­
razón de Cooperadores, amigos y
bienhechores. Llevan en su espíri­
tu el amor a los jóvenes y, por ello
mismo, son Salesianos. en la más
pura linea del espíritu de Don Bos­
co.
DESPUES DE CIEN AÑOS
Actualmente hay un intenso mo­
vimiento de Salesianos Cooperado­
res en España. Es una de las ra­
mas de la Familia Saiesiana que
está recobrando mayor vitalidad,
sobre todo, desde el XX Capítulo
General Especial. Se ha notado es­
te retorno a las fuentes originales
de la fundación querida por Don
Bosco. Y el nCimero de seglares
comprometidos crece en cantidad
y en intensidad. Se han tenido que
superar no pocas ideas equívocas.

T
tamilia satesiana
Los Cooperadores son verdaderos
salesianos externos.
Antes, se confundía al Cooperador
con el bienhechor. Y se solía apre­
ciar por las aportaciones económi­
cas a la obra salesiana. Hoy se tie­
nen ideas claras. Los Salesianos
Cooperadores son personas com­
prometidas en el mundo, y dedican
muchas horas de su tiempo y. so­
bre todo, su cariño, en favor de
los jóvenes, en los mismos centros
salesianos. o en parroquias o en
creaciones de sus mismos centros
Tienen autonomía, pero siempre es
tán orientados espíritualmente po
Salesianos Delegados expresamen
te. en las casas, en las Inspecto
rías.
A nivel nacional, hay en España
un Consejo Nacional de los Coope­
radores, cuyo Secretario-Coordina­
dor es don Antonio García Vera;
y un Delegado Nacional, don Blas
Calejero.
Después del proceso renovador
de los últimos años, los Salesianos
Cooperadores en España cuentan
con 96 Centros y 1.625 miembros.
Cabe destacar el desarrollo de es­
ta rama de la Familia Salesiana.
sobre todo, por el dinamismo del
sector «Cooperadores jóvenes» en
todo el ámbito nacional. En algu­

nas Inspectorías en que los Sale­
sianos religiosos han disminuido
notablemente, los Salesianos Coo­
peradores trabajan intensamente
con idéntico fervor de hijos de Don
Bosco.
ACTIVIDADES DE SERVICIO
Es larga la sola enumeración de
las actividades que llevan a cabo
los Salesianos Cooperadores. Pero,
no se trata de meras posibilidades
de trabajo, sino de realidades
puestas en marcha. He aquí las
principales:
Cooperación Salesiana
y Tercer Mundo
«Desde que comenzó esta activi­
dad don Javier Rubio hasta la fe­
cha, los Cooperadores de España
ayudamos principalmente a 5 obras
del mundo salesiano: al padre Bohnen de Haití, al padre Saksida y su
Cidade «Don Bosco» de Corumbá
(Brasil], la obra de las Bienaventu­
ranzas de Vyasarpadi (India), los
Indios Moros de Paraguay con su
Obispo monseñor Obelar, y las
obras del padre Nacher en Timor.
También, aisladamente, se han lle­
vado a cabo otras ayudas a diver­
sos Salesianos. En total, desde su
fundación, se han r e p a r t i d o
55.311.502 pesetas (cincuenta y cin­

co millones trescientas once mil
quinientas dos pesetas).
— Se ha creado el apostolado
matrimonial «Hogares Don Bosco».
— Se lleva la catequesis en pa­
rroquias salesianas y no salesianas.
— Animación de Centros juveni­
les.
— Animación litúrgica en parro­
quias e iglesias públicas.
— Se participa en múltiples co­
lonias de verano en el trabajo de
organización y convivencia con los
chicos.
— Apostolado en la Escuela de
Padres, en colaboración con los Salesíanos.
— Librería, también en colabo­
ración con los Salesianos en Cór­
doba. al 50 por 100 en todo.
— Presencia en las Asociaciones
de los Padres de Familia en los
Colegios.
— Presencia en la escuela por
medio de Cooperadores profesores.
— Ejercicios Espirituales para
Cooperadores.
— Trabajo de formación de los
mismos miembros...»
♦ ♦
Se prevé un futuro con un cam­
po cada vez más abierto y concre­
to para esta rama de la Familia Sa­
lesiana en este segundo siglo de
la Obra de Don Bosco en España.

E X IG E N C IA S D E M U E S T R A V O C A C IO N
Los Cooperadores Salesianos
estamos plenamente convenci­
dos de la Paternal Providencia
de Dios, que actúa, por medio
de la Familia Salesiana, a favor
de la juventud pobre y margi­
nada. Por ello danros gracias a
Dios, y en El a las criaturas que
fueron instrumentos activos de
su voluntad: María Auxiliadora
y San Juan Bosco.
El Centenario de la presencia
Salesiana en España nos obliga
a pensar en las obligaciones y
exigencias de nuestra vocación
Salesiana. De manera particular,
hoy, quiero reflexionar con vos­
otros sobre nuestra «fidelidad
dinámica» a la vocación.
La entrega, el coraje, el tra­
bajo de aquellos primeros Coo­
peradores, que nos precedieron
y que, con su entusiasmo, «obli­
garon» a Don Bosco a enviar­
nos sus primeros colaboradores,
nos han de servir de punto de

mira y de verificación de la vi­
da de nuestra vocación.
Ante esta reflexión nuestra
reacción ha de ser humilde, pe­
ro firme, correspondiendo a ia
gracia del «Centenario» con la
sincera aceptación de una acti­
tud de conversión.
Se trata, pues, de redescubrir
ei camino andado por Don Bos­
co y de encontrar el nuestro,
día a día. apoyándonos en el
amor, la oración, y ei ejemplo
de los propios hermanos y de­
más miembros de la Familia
Salesiana
Comprometerse ante este se­
gundo Centenario que emfrieza,
es comprometerse personalmen­
te con el amor a Cristo y a ios
hombres según el estilo Sale­
siano, en los dos aspectos fun­
damentales de presencia de
Dios en nuestra vida y de pre­
sencia nuestra en el mundo.
El futuro se apoya en el pa­
sado, el Centenario nos debe

i

5
hacer reflexionar serenamente
sobre una etapa pasada, llena
de fermentos vitales, que han
de ser para nosotros una voz
de ánimo y de esperanza que
nace de nuestra historia.
ANTONIO GARCIA VERA.
Secretario-Coordinador
de! Consejo Nacional de los
Cooperadores Salesianos

13

A n tig u a s A tn m n a s Snlesianas

Buenos oristianos
y honrados ciudadanos
El origen de los Antiguos Alumnos se remonta a 1870. Unos cuantos jóvenes qui­
sieron agradecer a Don Bosco ia educación recibida. Hoy tienen una organización
mundial. En España constituyen una presencia cristiana y una aportación del espí­
ritu salesiano a la sociedad. Hay antiguos alumnos en todas las manifestaciones de
la vida nacional: en la política, en la cultura, en el arte, en la economía, en los me­
dios de comunicación, en el deporte...
LOS INNUMERABLES
ANTIGUOS ALUMNOS

¿Quién lleva la cuenta de los
alumnos que han pasado por las
casas de Don Bosco? Todos ellos
son exalumnos de hecho. Antes
bastaba que un muchacho hubie­
ra pisado una vez los patios del
oratorio para que se le considera­
se después exalumno salesiano.
Aunque muchos se olviden o no
lo reconozcan. Así que no duda­
ríamos en afirmar que los exa­
lumnos españoles se acercaran al
millón.
Pero son muchos los que guar­

dan para con sus educadores unos
lazos muy estrechos de unión y
de comunicación y, a la vez, ha­
cen gala de la educación salesiana recibida. Estos son miembros
de ese movimiento mundial de
exalumnos salesianos.
Pero los hay también confede­
rados: pertenecen a la organiza­
ción o federación mundial, nacio­
nal y local. Están inscritos y aso­
ciados. Tienen un órgano de co­
municación, la revista «Don Bos­
co en España». Y se comprome­
ten expresamente a vivir en la
sociedad según el espíritu y el
programa de Don Bosco.

Esta organización de Antiguos
Alumnos tiene en España 80
Centros con un total de 20.000
asociados. Las Salesianas tienen
sus exalumnas federadas a nivel
inspectorial, no a nivel nacional.
Basta citar a algunos, para dar­
nos cuenta que la casa de Don
Bosco ha sido un trampolín que
los ha lanzado a ocupar puestos
relevantes en la sociedad. Sus
nombres nos recuerdan inmedia­
tamente su profesión: García Vinuesa, José María Taboada, Joa­
quín Polo, José María Gil-Ro­
bles, José María Javierre, Váz­
quez Díaz, Pablo Serrano, José
Hierro, José María Requena, A.
Murciano, Benito, Asensi, Zoco,
Cardeñosa, Vindel, B. Deglané,
Miguel Ríos, Ernesto Contreras,
Antonio Ordóñez, Manuel Rodrí­
guez Manolete...
MIEMBROS
DE LA FAMILIA SALESIANA

Los Antiguos Alumnos, sobre
todo los federados, se sienten
parte de la Familia Salesiana «por
la educación recibida» y asimila­
da. Buscan y requieren la asisLa celebración del Eurobosco 78 en
Madrid ha sido uno de los aconte­
cimientos sociales más importantes
de la Asociación de Antiguos Alum­
nos. El Cardenal Tarancón abraza al
Consiliario Nacional, presentes el
Rector Mayor y don J. Raineri.

14

tencia espiritual de los Salesianos y colaboran con ellos, reali­
zando en su propio ambiente, el
proyecto apostólico de Don Bosco.
«Don Bosco quería que sus
antiguos alumnos, miembros de
su familia, fueran salesianos en
el mundo, continuadores y prolongadores de su obra. Debían
demostrar a todos que era posi­
ble vivir ”como buenos cristia­
nos y honrados ciudadanos”».
«Aun hallándose en primera
línea, los exalumnos no están
dispuestos a aflojar los lazos con
la Congregación Salesiana. Los
estatutos más recientes de la fe­
deración mundial, que reivindi­
can la plena responsabilidad de
iniciativa para sus actividades,
quieren mantener al mismo tiem­
po una intima y esencial unión
con la Congregación Religiosa.
En ella ven la garantía de su fi­
delidad a Don Bosco y de la fe­
cundidad de su obra. Por eso re­
conocen como superior suyo al
Rector Mayor, cuyas directrices
desean seguir. Muchos de ellos
se inscriben en la Unión de los
Cooperadores. Por otra parte, el
miembro del Consejo Superior
encargado de los antiguos alum­
nos —hoy don Juan Raineri—
forma parte con pleno derecho,
de los órganos del movimiento.
Lo mismo los delegados salesia­
nos que participan, a su nivel, en
la vida de la organización».
La asociación de exalumnos
es pluralista y no está comprome­
tida con partidos políticos, aun­
que sus socios lo sean personal­
mente. En la actualidad, están
cobrando gran dinamismo las
asociaciones juveniles de antiguos
alumnos.
«Doquiera que estéis —dijo
un día Don Bosco a Carlos Gastini, el primer exalumno—, no
olvidéis que sois hijos de Don
Bosco. Mostrad al mundo que se
puede ser a la vez buenos cris­
tianos y honrados ciudadanos».

éQ U E S O M O S Y Q U IEN ES S O M O S
L O S A N TIG U O S
A L U M N O S S A L E S IA N O S 7
Contestar a esta pregunta en el año
CENTENARIO de la Congregación Salesiana en España nos resulta elocuen­
temente agradable
El trabajo de cien años de los Sa­
lesianos en sus Escuelas, en sus Co­
legios, en sus Centros Juveniles, en
sus Parroquias, no ha sido, por la gra­
cia de Dios y con la ayuda siempre
viva de María Auxiliadora, ni baldío, ni
estéril, sino que ha dado sus FRUTOS.
Eso somos, y eso nos gloriamos de
ser los Antiguos Alumnos Salesianos,
los FRUTOS, de una pedagogía, los
FRUTOS de un sistema, ios FRUTOS
del trabajo de unos hombres que lo
dejaron todo para dedicarse a formcvnos, a nosotros, para que en la vida como decía Don Bosco, vaya­
mos adonde vayamos, recordemos que sontos sus hijos.
Para conseguir estos fines que forman NUESTRO IDEARIO, nos
agrupamos, nos asociamos. Las Asociaciones son para nosotros la
institución de nuestros recuerdos salesianos.
Nuestras Asociaciones son motor de vida, de espiritualidad, de
actividades, de promoción social, de trabajo en el ambiente local,
de ideas y de iniciativas para que ese «ser cristiano y honrado ciu­
dadano», nos haga tener una visión sobrenatural de la vida, al tiem­
po que nos hace ser fermento en las realidades terrenas, y todo
con una auténtica concepción salesiana basada an esa trilogía que
forma el fundamento de la idea pedagógica de Don Bosco: razón,
reiigión y amor.
Por ello ¿qué extraño tiene, que Ciudades y Pueblos hayan visto
crecer las Viviendas del Patrono Felipe Rinaldt o las Cooperativas
DON BOSCO, que Ciudades enteras vean vivir cada domingo depor­
tivamente a miles de muchachos y jóvenes por el Trofeo Bosco,
que e! teatro educativo de los Arrtiguos Alumnos sea Centro de en­
tretenimiento y formación de artistas, que la música de la alegría
y solaz a pueblos y Ciudades, que las Montañas se vean surcadas
domingo ppr los Grupos de Montaña DON BOSCO, que los
veranos se conviertan en alegría, convivencia y formación en las
Colonias DON BOSCO?
Y todo esto en 76 Asociaciones locales que al tlentpo se agru­
pan en 7 Federaciones Regionales, tantas como Inspectorías Sale*
sianas hay en España, que son motor y alma de sus respectivas
Asociaciones Locales y juntos, aunados, agrupados y federados, for­
mamos la FEDERACION ESPAÑOLA DE ANTIGUOS ALUMNOS SA­
LESIANOS que estimula, que orienta y agrupa a las Juntas Regio­
nales y a las Asociaciones locales.
Para ayuda de todo esto, y como vínculo de unión, mantenemos
una Revista mensual, que lleva a todas las familias un mensaje
cristiano, salesiarro y exalumnal; DON BOSCO EN ESPAÑA que des­
de 1917 viene siendo lazo que estrecha junto a Don Bosco a todos
los Antiguos Alumnos Salesianos y que solamente en su última
etapa desde 1944 lleva ya 425 números ininterrumpidos.
Pero lo mejor, para rrosotros, lo más grarrde es que somos el es­
pejo salesiano en el mundo, porque nos consideramos, y de hecho
somos y pertenecemos a la gran FAMILIA SALESIANA, idea genial
de DON BOSCO que hoy hemos redescubierto, y que tratamos, en
lo que a nosotros nos toca, hacerla una viva realidad.
JAViER ARTUCH,
Presidente Nacional

15

T

LA ESPAÑA SALESIAM A D E HOY
Salesíanos de Don Bosco (S. D. B.)
2.Ü84 Salesianos en total.
161 Casas o Comunidades.

Hijas de María Auxiliadora (H. M. A.)
(Salesianas)
1,182 Salesianas en total.
84 Casas o Comunidades.

7 Inspectorías ío Provincias Religiosas)
Nuestra Señora de la Merced.
BARCELONA - 30 Casas • 303 Salesianos.
San Francisco Javier.
BILBAO • 17 Casas - 289 Salesianos.
Santo Domingo Savio,
CORDOBA • 18 Casas - 175 Salesianos.
Santiago el Mayor.
LEON • 26 Casas • 330 Salesianos.
San Juan Bosco.
MADRID • 22 Casas • 514 Salesianos.
Marta Auxiliadora.
SEVILLA • 25 Casas - 219 Salesianos.
San José.
VALENCIA • 23 Casas - 254 Salesianos.

3 Inspectorías (o Provincias Religiosas)
Nuestra Señora del Pilar.
BARCELONA - 25 Casas ■ 343 Salesianas.
Santa Teresa.
MADRID • 33 Casas - 438 Salesianas.
María Auxiliadora.
SEVILLA - 26 Casas - 401 Salesianas.
Voluntarías de Don Bosco (V. D. B.): Unas 60
Cooperadores Salesianos
96 Centros.
1.625 Cooperadores.

INSPECTORIAS DE LOS SALESIANOS EN ESPAÑA

BILBAO
t

LEON



BARCELONA
l i t It la i Baleares
forman parle de la
Inspeclaria de Barcelona.

MADRID*
VALENCIA

• Ln
CORDOBA • •
SEVILLA

Loa puntos
Indican las pobtKtones
donde hay una o varias
csaas da Saleslsnoa.

16

Las Islas Cananas form an pane
de U Inapectona de CdrdotM

T
■r^
LA ZO S D E U N ID A D
EL RECTOR MAYOR

Un día del año 1876 Don Bosco habló a los Salesianos en calidad de Rector Mayor. Y les dijo:
Denle todos una mano al Rector Mayor: apóyenlo, y ayúdenlo por todos los medios: sea el centro de
todos. Siempre la mirada en torno al centro de unidad».
Entre los Salesianos. al Retcor Mayor se le llama sucesor de Don Bosco. Es su continuador
Aunque su autoridad es de carácter jurídico, en realidad su figura adquiere un valor moral e ideal:
es el centro de la Familia Salesiana, y representa a Don Bosco, padre de todos.
LAS CASAS GENERALICIAS

En Roma se encuentran las casas generalicias de los Salesianos e Hijas de María Auxiliadora, y
los organismos directivos a nivel mundial de los Cooperadores. Exalumnos y Exalumnas; también está
en Roma el centro de las Voluntarias de Don Bosco.
El Gobierno de la Congregación Salesiana es muy semejante en su estructura al de un pequeño
estado: Actualmente:
Rector Mayor; D. E. Viganó.—Vicario; D. C. Scrivo.— Ecónomo; D. R. Pilla.
Dicasterio (Ministerio) de la Formación Salesiana; D. P. Natali.— Dicasterio de la Pastoral Ju­
venil; D. 1. Vecchi.—Dicasterio de la Familia Salesiana; D. í. Raineri.—Dicasterio de las Misiones;
D. B. Tohill.
Hav además siete Consejeros Regionales encargados de visitar las casas salesianas del mundo.
El Consejero Regional de la Península Ibérica es D. José Antonio Rico.
Las Hijas de María Auxiliadora tienen también en Roma la Casa Generalicia donde la Madre
General, Sor E. Canta preside un gobierno semejante al de los Salesianos.
INSPECTORIAS DE LAS SALESIANAS EN ESPAÑA
«(•



















BARCELONA*
Las Islas B alsarai
lorm an parís ds la
in ^ e c to rla ds Barcelona


MADRID















••

Los puntos
in d tc in las poblaciones
donde hay una o varias
casas de Salesianas.

«
• • SEVILLA
• •


Las Islas Canarias torm an pana
de la Im pectoris da S evilla.












17

T
í
S E M IN A R IO S Y VOCACIONES
Es célebre la frase de Fulton Sheen, el Obispo neoyorkíno de la Televisión: «Los Salesíanos me recuerdan la multiplicación de los panes y los peces. El crecimiento de
la Congregación Saleslana es, ni más ni menos, un milagro. Y esto se debe, en mi
opinión, a un soplo especial del Espíritu Santo y a la intercesión de Don Bosco.
Los Salesianos han encontrado una solución muy práctica a los problemas de hoy.
Trabajan por los pobres. Enseñan artes y oficios. Saben infundir alegría en los jóve­
nes. Sí continúan así, el milagro seguirá».
UN RITMO VERTIGINOSO
Las vocaciones salesianas tuvieron desde los prime­
ros años un ritmo vertiginoso de crecimiento. En un
país saturado, por así decirlo, de religiosos de gran
tradición histórica, también hubo sitio para que los
Salesianos arraigaran como en tierra propia.
La curva gráfica se iba empinando suavemente hasta
llegar al año 1936, fecha histórica en la que ya había
767 Salesianos y 218 Hijas de María Auxiliadora. Du­
rante los años de la guerra civil se sufre la baja de
muchos religiosos que fueron martirizados, murieron
en el frente o desaparecieron. Durante dichos años no
hubo noviciados ni ordenaciones. Esto dio lugar a un
descenso: en 1940 eran en España 649 Salesianos. lo
cual indica una baja de 118.
Pero la gráfica da un salto de pértiga a partir del
año 1943. En 1946 se pasa la barrera de los 1.000 y se
llega a los 1.101. Diez años más tarde, en 1957 se pasa
la frontera de los 2.000, llegándose a la cifra de 2.097.
Ocho años después, en 1965 se salta a la suma de
3.016... Hasta llegar a la cumbre el año 1967 en que
había en España 3.299 Salesianos, cifra máxima de
vocaciones españolas en este primer siglo.
• Pero, a partir de 1968, se inicia también un des­
censo de vértigo. En 1970 se baja en picado hasta los
2.034 Salesianos. En 1979 son 2.008. Lo cual supone

que en diez años se han perdido cerca de 1.300 voca­
ciones, algo más de la tercera parte. Se trata de un
bache profundo en un período de crisis de la Iglesia
universal. Se han estudiado las causas de las defec­
ciones y se está poniendo remedio.
• Las Hijas de María Auxiliadora eran 235 herma­
nas en 1943, año en que se dividió España en 3 Inspec­
torías. La curva de su crecimiento emprende desde
entonces un vuelo de altura hasta 1970, año en que
llegan a su vértice con la cifra de 1.323 hermanas.
El arco desciende suavemente hasta 1980 en que
son 1.161 hermanas más 21 novicias.
• El estado actual para ambos sigue un proceso
de estabilización horizontal, en el que ni se disminuye
ni se crece. Hay signos de esperanza y un ambiente
de mayor serenidad.
LOS SEMINARIOS
«Aman las avecillas / su dulce nido...», decía la
canción. Todos los Salesianos recuerdan con cariño
las casas en que nacieron a la vida salesiana. Cada
inspectoría tienen sus «casas de formación» o semi­
narios. Y, a lo largo de estos cien años, han sido fa­
mosos por su volumen y su cantidad de jóvenes. Ter­
minamos este artículo nombrando — no se puede hacer
otra cosa— las casas más importantes de cada inspec­
toría, aunque muchas de ellas ya no existan como ta­
les seminarios. Sirvan estos renglones de bálsamo y
consolación por algo perdido, quizás no del todo:
Inspectoría de Barcelona: Tibidabo, Gerona, San Vigens deis Horts, Marti-Codolar, Sentmenat...
Inspectoría de Bilbao: Zuazo, Urnieta, Logroño, Vito­
ria...
Inspectoría de Córdoba: Montilla, Pedro Abad. Priego,
Palma del Río, Posadas...
Inspectoría de León: Cambados, La Fontana, Astudillo, Medina, Valladolid, Santiago...
Inspectoría de Madrid: Arévalo, Carabanchel, Mohernando, Guadalajara, Salamanca...
Inspectoría de Sevilla: Cádiz. Puerto Real, San José
del Valle. Sanlúcar...
Inspectoría de Valencia; Campello, Cabezo de Torre,
Godelleta...
Hijas de María Auxiliadora: Sarrié, Zaragoza, Villaamil, Dehesa de la Villa, El Plantío, Sevilla-San Vicente.
La vocación salesiana siempre será un regalo de
Dios para trabajar en el campo abierto de la juventud.
Don Bosco ofreció a sus Salesianos: pan, trabajo y
Paraíso.
El Tibidabo, templo que profetizó Don Bosco en Barce­
lona, Además del templo, ha sido durante muchos años
aspírantado salesiano.

t»'
L A S

V

MEMORIAS
BIOGRAFICAS
OE O. BOSCO
EN
CASTELLANO

Próxima aparición de los dos primeros tomos.
La Vida del Fundador de los Salesianos, de las Hijas de Marta
Auxiliadora y de los Cooperadores, en 20 tomos, la tendremos
pronto en lengua española.
Será uno de los mayores acontecimientos del Primer Centenario
Saiesiano en España.
No debería faltar en ningún hogar de miembros, amigos y bien­
hechores de la Familia Salesiana.
Sí usted desea ir adquiriendo esta obra, recorte este anuncio
y, con la dirección de su domicilio, envíelo a:
CENTRAL CATEQUISTICA SALESIANA
Alcalá, 164
MADRID-28

L A S V O L U N T A R IA S O E D O N B O S C O
C O N SA G R A D A S E N EL M U N D O
Viven en su propia casa y visten de seglar, como
las otras mujeres. Realizan sus trabajos profesio*
nales y comparten los problemas de todos. Son se­
glares entre seglares. Pero también son personas
consagradas y han hecho su promesa de aposto­
lado, trabajan con el espíritu de Don Bosco y, a
veces, en los mismos colegios salesianos. Forman
un «Instituto Secutar». Tienen preferencia por los
apostolados en favor de los jóvenes y son asistidas
espiritualmente por ios salesianos.
ACTIVIDADES APOSTOLICAS

• Su presencia es silenciosa como la levadura. No
llevan señales externas ni hablan de su condición de
consagradas. Pero tampoco ocultan su compromiso o
estilo saiesiano.
• Su apostolado específico está en su trabajo pro­
fesional dando testimonio del Reino de Dios y vivien­
do las realidade.s temporales con el espíritu del Evan­
gelio; los trabajos a que se dedican son muy variados,
obreras, profesoras, asistentes sociales, enfermeras, mé­
dicos. Se integran en los movimientos sindicales y p^
Uticos, comprometiéndose en la lucha por la justicia
y por el Reino de Dios.
• Su apostolado al servicio de la Iglesia local es,
principalmente social y asistencial. Las V. D. B., toman
parte en los consejos pastorales de parroquias y dióce­
sis. Dan clases de catecismo, son animadores de la litur­
gia de las comunidades o desempeñan cargos en las aso­
ciaciones benéficas. A veces son “ministros éctraordinarios de la Eucaristía” para los enfermos de la parro­
quia o preparan primeras comuniones en los hogares.
• Su apostolado en la Familia Salesiana se desarro­

lla en las parroquias salesianas, en los grupos de coope­
radores, en los colegios de las H. M. A., en las librerías
salesianas...
COMO HACERSE VOLUNTARIA DE DON BOSCO

Pueden entrar en este Instituto las jóvenes de cual­
quier clase social y categoría profesional que hayan cumpUdo veintiún años de edad y no pasen de los treinta
y cinco. Se les pide estén decididas a consagrarse al
Señor viviendo en el mundo. Para ello se requiere asi­
mismo una madurez psicológica y afectiva, poder dedi­
carse al apostolado y una cierta independencia econó­
mica para el presente y el futuro.
Hay un período de preparación o “aspirantado” que
dura tres años en los que se recibe una formación hu­
mana y cristiana para la vida consagrada, el apostolado
y el espíritu saiesiano.
EL SECRETO

Prefieren trabajar sin que nadie sepa su condición
de consagradas por muchas razones. Quizás fueran vis­
tas como “bichos raros” en muchos trabajos y hasta las
excluirían de los mismos.
Fundadas en 1917 por don Felipe Rinaldi, en 1959
tomaron el nombre actual. En 1917 lograron ser Insti­
tuto secular de derecho diocesano y desde 1978 son de
derecho pontificio. Su apostolado es moderno y su nú­
mero crece de año en año. En España son unas 60.
Para dirigirse a ellas basta preguntar en cualquiera de
las inspectorías salesianas: Barcelona, Bilbao, Córdoba,
León, Madrid, Sevilla y Valencia.

19

o

LA ACCION

CIEN AMOS
DE PASTORAL JUVEMIL
Hablar de Pastoral Juvenil es tocar a los Salesianos en la niña de los ojos o hurgar
en las fibras más sensibles de su corazón. «Signos y portadores del amor de Dios a
los jóvenes, especialmente a los más pobres», los Salesianos son identificados co­
mo los «amigos de la juventud». Por eso, toda la obra de Don Sosco es Pastoral, en­
tendiendo por ello toda actividad en favor de los jóvenes: Oratorios, Centros Juve­
niles, Parroquias, Escuelas Profesionales, Escuelas de Primera y Segunda Enseñanza,
Residencias... Como Don Sosco, Padre y Maestro de los adolescentes, el Salesíano educa evangelizando y evangeliza educando...

CIEN AÑOS AL SERVICIO
DE LOS JOVENES
Los Salesianos han vivido todo
un siglo haciendo pastoral juvenil.
Desde el Colegio de Utrera a los
Talleres de Sarríá, en los patios de
los Oratorios o en las tablas del
teatro, con la banda de música o
el texto de Catecismo, en las Uni­
versidades Laborales o en las obras
de colaboración, en las Pascuas ju­
veniles o en las colonias de vera­
no, en las convivencias de orienta­
ción o en el catecumenado, los Sa­
lesianos no han hecho otra cosa
que Pastoral Juvenil.
En el estilo salesiano, lo priori­
tario son las personas: los jóve­
nes. Las obras y estructuras están
a su servicio. A pesar del marcado
carácter docente-educativo de la
Obra Salesiana en España, el ser­
vicio a los jóvenes fue siempre
muy diversificado y pluriforme. He
aquí algunas muestras.
Oratorios y Centros Juveniles
En una etapa de la acción salesiana en nuestro suelo era rara y
excepcional la obra que no tenía
implantado el Oratorio Festivo. Mu­
chos hombres de hoy en Sevilla,
Valencia, Madrid. Córdoba. Vigo,
Baracaldo, Pamplona o Barcelona,
por no entrar en otras poblaciones
más pequeñas, fueron ayer orato-

20

rios o -domingueros*. Y los patios
de los colegios se llenaban los do­
mingos de niños y de jóvenes con
derecho a Catecismo, Juegos y
Teatro.
Círculos de Domingo Savio
Han sido otra realidad multipli­
cada en casi todas las casas salesianas de España. Con los Antiguos
Alumnos jóvenes se llevaba a ca­
bo una específica labor formativa
y social. Hoy se prefieren los nom­
bres de Centro Juvenil o Servicios
Pastorales a los jóvenes en el tiem­
po libre.
En artículo aparte se trata de las
escuelas, colegios, formación pro­
fesional y parroquias, que han cons­
tituido la plataforma más importan­
te de evangelización y servicio a
la Iglesia durante estos primeros
cien años.

ASOCIACIONISMO JUVENIL
Hasta los años 60 funcionaron en
los colegios las tradicionales «Com­
pañías». Se trataba de la experien­
cia grupal más importante de los
centros salesianos. Nació de la in­
tuición de Don Bosco. El Santo
quería agrupar a los mejores alum­
nos de sus colegios para hacer de
ellos una fuerza unida y eficaz en
favor del «clímax» formatlvo y de

la acción apostólica entre los jó­
venes.
En España florecieron desde los
comienzos de la Obra Salesiana.
En los años 50 se celebraron con­
gresos inspectoriales y Nacionales.
Se fundó la revista -Dirigentes*
como órgano de unión y comuni­
cación entre los líderes. Promotor
de este movimiento juvenil fue don
Luis Chiandotto, desde el Teologado de Carabanchel y. posteriormen­
te. de Salamanca.
A lo largo de estos cien años de
historia salesiana española se han
desarrollado diversas agrupaciones
juveniles con las más variopintas
finalidades, como -Scouts», Con­
juntos musicales, Grupos de teatro,
Coros, Cineclubs, etc. Por su im­
portancia apostólica, destacamos
tres creaciones típicamente espa­
ñolas; el grupo Adsís, el movimien­
to Cristo Vive y el Catecumenado
Juvenil. De estas tres creaciones,
el grupo Adsis ha cobrado autono­
mía propia, pero tiene sus oríge­
nes en la Congregación Salesiana.
Movimiento «Cristo vive»
Nacido en la Inspectoría de Se­
villa. se ha extendido a todas las
inspectorías de España. La celebra­
ción de la Pascua constituye el
momento fuerte de convocación y
unión. A ella concurren grupos de

jó v e n e s

diversas comunidades, escolares,
parroquiales, etc. Hay en este mo­
vimiento un compromiso cristiano
integral.

programa de formación y compro­
miso. Tienen retiros y cursillos,
revisión de objetivos y vida de ora­
ción.

E! trabajo dura todo el año. Los
coordinadores y jóvenes animado­
res. provenientes de diversas co­
munidades cristianas, se reúnen
para profundizar el tema del año y
concretar la preparación de los en­
cuentros pascuales. La celebración
pascual sirve para impulsar la vida
personal y colectiva. Después de
la experiencia de la Pascua se ex­
presa la unión de cada grupo en la
formación de la comunidad cristia­
na de los diversos centros.

Sería largo hablar de tantas agru­
paciones juveniles. Pero, también
por su importancia, citamos aquí:
el movimiento de «Amigos de Do­
mingo Savio» y los equipos de ma­
duración vocacional ««Luz», para chi­
cos de básica, y «Vida», para jóve­
nes de Secundaria. Estos han ad­
quirido una vida muy pujante en la
Inspectoria de Córdoba.

Catecumenado Juvenil
Nacido en la Inspectoría de León,
este movimiento abarca a jóvenes
de los catorce a los dieciocho años.
Les propone una experiencia cris­
tiana fuerte y los Introduce en una
iglesia-comunidad de personas. Los
grupos están formados por unos 12
muchachos que llevan adelante un

CENTROS DE ANIMACION
DE PASTORAL JUVENIL
Destacan en la labor de forma­
ción de animadores el Instituto de
Pastoral Juvenil de Barcelona y el
Centro de Estudios Catequéticos
de Sevilla. Ambos promueven cur­
sos para la formación de catequis­
tas y educadores de la fe y gozan
de un merecido prestigio.

La celebración de la Pascua es centrar la vida de los jóvenes en el mis­
terio de Cristo viviente.

Por su conexión más directa con
el servicio de animación Pastoral
Salesiana se destaca el Centro Na­
cional Salesiano de Pastoral Juve­
nil. Todos los delegados en cada
Inspectoría, en equipo, forman la
Comisión Nacional de Pastoral Ju­
venil. Y prestan el servicio a tra­
vés del Centro Nacional de Pasto­
ral Juvenil.
Una de las obras más importan­
tes que ha realizado la Comisión
de Pastoral Juvenil ha sido la crea­
ción de la revista «Técnica de
Apostolado*, hoy con el nombre de
Misión Joven. Asimismo ha organi­
zado y programado diversas jorna­
das y cursillos de las más variadas
temáticas, pedagógicas, catequéticas y pastorales...

Hoy los Salesianos. trabajando
con ilusión como evangelizadores
de jóvenes, prosiguen un camino e
intentan hacer presencia la figura
de Don Bosco entre las nuevas ge­
neraciones juveniles que serán las
responsables de este País y esta
Iglesia nuestra en el siglo XXI.

i

A

----

•V* rt - i í'. ^

20^000 Jóvenes obreros
en
Form ación profesional
Don Bosco ha sido el fundador, el creador de las Escuelas Profesionales para la for­
mación de los jóvenes obreros. En 1853 creaba en Turín el Taller de Zapatería; en
1854, el de Encuadernación; en 1856, el de Carpintería; en 1861, los de Tipografía y
Mecánica... Ya en 1862 albergaba en su Oratorio más de 200 internos artesanos. A
su muerte, en 1888, había en el mundo salesiano 15 escuelas profesionales que, en
1950, alcanzaban la cifra de 253.
El Papa Juan XXIII declaró a San Juan Bosco Patrono de los jóvenes aprendices de
España. Antes lo había sido de Italia y, posteriormente, de Colombia. Don Bosco fue
verdaderamente un hombre adelantado en el mundo del trabajo y en las relaciones
de empresarios y obreros. Lo que se dice un santo sindicalista.

EN ESPAÑA,
LA HISTORIA COMIENZA
EN BARCELONA

La Casa del Niño Jesús, de
Barcelona-Sarriá, que se abrió en
marzo de 1884, es la primera Es­
cuela Profesional Salesiana de Es­
paña. La historia comienza por
aquí. Su fundadora fue la sierva
de Dios Doña Dorotea de Chopitea.
Comenzaron a crecer y a esta­
bilizarse. Hubo en seguida fun­
daciones en Sevilla, Málaga, Cá­
diz, Pamplona y Madrid. Siendo
Arzobispo de Valencia don Mar­
celino Olaechea contaba que, allá
por el año 1929, al visitar las Es­
cuelas Profesionales de Sarriá un
ministro belga, éste preguntó:
¿Cuánto les da el Estado para
sostener estas Escuelas? Le con­
testaron: Excelencia, ¡si nos deja­
ran vivir! «El ministro, comen­
taba don Marcelino, se llevaba las
manos a la cabeza».
En consecuencia, todas las Es­
cuelas de Artes y Oficios anterio­
res a la guerra del 36 fueron pro­
22

piedad de la Congregación. Esta
tuvo que vencer las dificültades
procedentes de la falta de medios
económicos, de la ausencia de un
personal cualificado y de la ca­
rencia de una mentalidad' socialabierta a la instrucción específica
del obrero.
UNA MISTICA
AL SERVICIO DEL OBRERO

La parte más importante de la
enseñanza profesional consistía
en un principio en la práctica del
oficio, en la formación artística
y la teoría. Todo ello integrado
en la educación moral y cristiana,
como preparación inmediata a la
vida.
Con esfuerzo y tesón se fue ad­
quiriendo una larga experiencia.
El Salesiano Coadjutor, otra crea­
ción de Don Bosco, se dedicó en
alma y cuerpo a la formación pro­
fesional de los alumnos. Se creó
una verdadera mística salesiana
de las escuelas profesionales, has­
ta identificar con ellas a los Sale-

sianos. En 1914 aparecieron en
Sarriá los textos de Tecnología.
Con esto, la Editorial Salesiana
de Barcelona-Sarriá comenzó a
proyectar definitivamente hacia la
especialidad del libro de enseñan­
za profesional. En este campo,
Ediciones Don Bosco (Edebé) vie­
ne a ser hoy la entidad más im­
portante en el mercado de lengua
española y, probablemente, en el
mundial.
Después de la guerra civil se
multiplicaron las Escuelas Profe­
sionales en todo el ámbito nacio­
nal. José Pemartín San Juan se
refirió con estusiasmo a la «be­
nemérita Orden Salesiana»: «Si
por medio de subvenciones pu­
diera el nuevo Estado Español
conseguir la instalación de una
Escuela Profesional Obrera Sale­
siana en cada pueblo o aglomera­
ción urbana de más de 20.000 ha­
bitantes, estaría totalmente re­
suelto el problema de la educa­
ción, catolización y formación
obrera en toda España. Juzgúese
la importancia que atribuimos a
la labor benemérita de aquella

jó v e n e »
Orden». Pemartín había conoci­
do a los Salesianos en Sevilla. Sus
planteamientos anunciaban la eta­
pa histórica que estaba llegando.
EXPANSION Y PLENITUD

La contienda civil del 36 para­
lizó las obras y muchas de ellas
fueron destruidas. La posguerra
supuso un esfuerzo heroico, pero
fecundísimo. A la recuperación
(1939-1945) le siguió la fase de
la expansión (en la llamada Era
Azul (1939-1957) y a ésta, la de
la plenitud (períodos Tecnocrático y del Funcíonariato (19571975).
Según los cálculos de la OTI
(Oficina Técnica Inspectorial, de
Barcelona), en el curso 1966-67,
los Salesianos en España actua­
ban en 67 centros profesionales
y atendían a unos 23.000 alum­
nos. Era un techo. Esta cota se
mantuvo, sin grandes variaciones,
al menos hasta el curso 1974-75.
Al propio tiempo, también las
Hijas de María Auxiliadora po­
nían en marcha algunos centros
de formación profesional propia­
mente dicha.

Solé (Cartagena), Fundación Masaveu (Oviedo), Fundación Urquijo (Bilbao-Deusto)... La bur­
guesía católica y estamentos mu­
cho más humildes coordinaron
sus esfuerzos en una empresa co­
mún: la de San Juan Bosco y sus
jóvenes trabajadores.
La Escuela Profesional Salesia­
na sigue siendo hoy en España
una magnitud considerable. Los
Salesianos atienden hoy (curso
1980) a 18.064 alumnos, y las
Salesianas a 1.728 alumnas. En

posibilidades de inserción en el
ámbito juvenil y popular. Por
otra parte, desde 1975 la expan­
sión de la Escuela Profesional Sa­
lesiana se ha detenido bruscamen­
te. Lo que refleja claramente el
cambio social, político e ideológi­
co que gravita en torno a ese año.
Si a esto añadimos el colapso vocacional registrado a comienzo de
los años setenta, se comprende
fácilmente la nueva coyuntura
histórica que se ha creado.
¿Qué hacer? Una vez más, los

SITUACION ACTUAL

«Los Salesianos nos encontra­
mos allí donde nos han llamado».
En este contexto ha sido grande
la colaboración de entidades pú­
blicas y privadas. Sería muy lar­
ga la lista de Cooperadores, Anti­
guos Alumnos o, sencillamente de
personas que se han sentido en
la responsabilidad de contribuir
a la obra social que realiza la
Obra Salesiana. Además de doña
Dorotea, señalemos algunas Es­
cuelas Profesionales que ostentan
el nombre de la fundación: Fun­
dación Aróstegui (Pamplona),
Marqueses de Bertemati (Campa­
no), Fundación Hidronitro Espa­
ñola (Monzón), Fundación Juan

Escuelas Profesionales Salesla*
total, 19.792 jóvenes obreros, Las
ñas son un jalón muy importante
distribuidos en más de 60 insti­ en estos primeros cien años. Los
tuciones. A éstos hay que añadir Salesianos han sido en España los
pioneros.
otros muchos, especialmente en
enseñanzas de adultos en colabo­
ración con organismos como el Salesianos tendrán que ser crea­
S.E.A.F.-P.P.O.
tivos, dentro de su fidelidad vocacional. Habrá que hacer un tra­
bajo de concientización, de coor­
dinación de fuerzas, de búsqueda
de colaboradores. El Centenario
Se quiera o no, se trata de una que estamos celebrando puede
plataforma muy importante, tan­ ser una ocasión propicia para ello.
to por su amplitud como por las Así lo deseamos vivamente.

23

jó v e n e s

CIEM AÑOS
A L SE R V IC IO D E LOS JO V E N E S
E N EL C A M P O D E LA EN SEÑ A NZA
Más de 100.000 chicas y chicos españoles se educan actualmente en escuelas y co­
legios salesianos. Don Bosco sabía que la verdadera liberación de la juventud pasa
a través de la enseñanza. Por eso puso an manos de los jóvenes la cartilla y e! ca­
tecismo. La enseñanza ha sido el campo específico que más ha ocupado y preocu­
pado en estos cien años de historia salesiana. Desde la fundación del colegio de
Utrera hasta (a actualidad, Salesianos y Salesianas se han dedicado intensamente a
ia educación de (a juventud. Hoy representan dos fuerzas de primera linea en el ám­
bito nacional de ia enseñanza católica.

LAS CLASES POPULARES
1881. los niños del arroyo no ne­
cesitaban cultura, pero sí alguien
que se cuidara de ellos para que
dejaran de ser la pesadilla de la
sociedad. Hacía falta más discipli­
na f|iie letra.*?, ocuparles el tiempo,
entretenerlos En definitiva, mante­
nerlos en la ignorancia hasta que
llegaran a la edad de producir. Ma­
no de obra barata. Una nueva es­
clavitud nacida de la ignorancia.
Los Selesiano.s vinieron a España a
trabajar con esta juventud de las
clases populares. Llamados más
para ocupar a los niños del arroyo
que para ocuparse de ellos.
La clase biempensante entiende
que una manera de ocuparlos es
enseñarles el catecismo. La religión
es útil para mantenerlos resigna­

dos. dóciles, temerosos. También
había quien pensaba que era un
servicio apostólico abrirles más las
puerta.*^ del cielo que las de la tie­
rra. Los Salesianos fueron bienve­
nidos a España. Se esperaba de
ellos que transformaran por el ca­
tecismo a los niños de la calle.
Pero los Salesianos no vinieron
a fundar colegios, sino casas. Ca­
sas para jóvenes y casas de jóve­
nes. en que el niño de la calle
aprendiera a vivir como honrado
ciudadano y como buen cristiano.
No se les transmitía una enseñan­
za del catecismo, sino un evange­
lio vivido en la alegría, el juego,
la horadez, la convivencia, el com­
partir con los demás unas respon­
sabilidades. Los Salesianos abrie­
ron sus casas en España para los
jóvenes de clases populares que

necesitaban vivir la plenitud de un
evangelio en cuyo nombre fueron
bautizados.
UN SERVICIO
DE PROMOCION HUMANA
El hombre de mañana se hace en
los años de la niñez. Por eso los
oratorios fueron poco a poco trans­
formándose en escuelitas muy ele­
mentales. Era necesario que la es­
cuela encontrara al niño en su am­
biente de barrio. En 1881 llegan los
Salesianos a Utrera y en 1886 las
Hijas de María Auxiliadora abren su
casa en Sarriá. Pocos años más tar­
de, en 1901. los Salesianos cuen­
tan con 12 escuelitas primarias y
las Salesianas con 6: 2 en Barce­
lona y 4 en Andalucía.
En torno a ia escuela salesiana
de principios de siglo en barrios
y pueblos creció un movimiento de
promoción cultural La casa salesia­
na fue pronto la casa de la cultura
del pueblo: clases nocturnas, mú­
sica, teatro, deporte y veladas. Se
fundaron por aquellos años muchas
bandas de música constituidas por
niños que apenas podían con el
tambor. La escuelita salesiana im­
plicaba al entorno social que parti­
cipaba de sus actividades y aprove­
chaba de su servicio de difusión
cultural realizado por los propios
hijos del pueblo.
En 1951 los Salesianos contaban
con 56 escuelas repartidas por to­
da la geografía española, y las Salesianas con 32.

En los colegios de Don Bosco se
da seriedad a los estudios.

UNA NUEVA

s o c ie d a d

Ei lento despegue de la sociedad
española hacia su desarrollo reper­
cutió en el campo de la enseñan­
za. En la década del 50 al 60. las
Salesianas abren 15 nuevos cole­
gios y los Salesianos 26, sumando
un total de 129 que ocupan todas
las regiones españolas. Lo que fue­
ron escuelas primarias se vieron
pronto completados con el bachille­
rato. Era el trampolín para saltar
del barrio al puesto de trabajo.
La década del 60 supone otra
gran crecida: 8 colegios por parte
de las Salesianas y 22 por parte
de los Salesianos. 159 colegios en
total abrían sus puertas a la juven­
tud española para educarla al estilo
de Don Sosco. Fue la época de re­
estructuración. Desde el punto de
vista de la infraestructura, se re­
mozaron muchos viejos colegios,
adaptando sus edificios y mobilia­
rio a las nuevas exigencias peda­
gógicas: se construyeron nuevas
aulas y. en no pocos casos, se hi­
cieron colegios totalmente nuevos.
Esta remodelación arquitectónica
era signo de una transformación
interior. Académicamente los cole­
gios se robustecieron con la pre­
sencia de Salesianos universitarios,
la regulación de estudios y el re­
conocimiento oficial de los centros
docentes. Dejaron de ser escuelitas para convertirse en colegios.
La década del 70 no serta pre­
cisamente de crecimiento, si bien
las Salesianas abrieron 7 nuevos
colegios y A los Salesianos.
PROBLEMATICA
DE LA ENSEÑANZA
El tema es de plena actualidad:
¿a quién compete la educación? La
respuesta es clara: el derecho de
los padres fundamenta el pluralis­
mo de sistemas educativos, la ne­
cesidad de filosofías o idearios
bien definidos al servicio de los
padres que soliciten la opción ofre­
cida. La libertad de enseñanza en­
cuentra su verdadero tratamiento
en la sociedad democrática, sin
privilegios ni marginaciones.
Los Salesianos brindan su idea­
rio que refleja lo esencial de su
quehacer pedagógico en consonan­
cia con los nuevos tiempos. Fue
aceptado tanto por los Salesianos
como por las Hijas de María Auxi­
liadora.
¿Y la financiación de la enseñan­
za? Caen por tierra privilegios sec­
toriales. es el contribuyente el que

Los colegios de Don Bosco y de
María Auxiliadora están al servicio
de la juventud.

tiene derecho a beneficiarse de los
presupuestos públicos para la ense­
ñanza. No cabe discriminación entre
enseñanza estatal y no estatal. La
libertad de enseñanza sin paridad
de financiación no sería sino un
atropello a los más elementales de­
rechos democráticos.
Así planteado el tema hay una
auténtica igualdad de oportunida­
des para toda la familia española,
sea cual fuere su opción ideológi­
ca. Con lo cual el fantasma del cla­
sismo de determinados colegios
deja de tener sentido.
LA ESCUELA QUE QUEREMOS
El Capítulo
Congregación
la línea de lo
cuela de Don

General 21 de la
Salesíana ha trazado
que ha de ser la es­
Bosco:

• Escuela popular: Por los des­
tinatarios. por el lugar, por el estilo
y especialmente porque sigue con
amor a los más olvidados.
• Escuela libre y abierta; Por­
que quiere ser afirmación de los
derechos de la familia y de la Igle­
sia; porque educa a valores univer­
sales de libertad.
• Escuela que coloca al joven
en el centro del hecho educativo:
Acoge al chico como es y en el
punto en que se encuentra y le
ayuda a crecer y a hacerse.
• Escuela que tiende a crear
una comunidad juvenil: Una familia,
en expresión de Don Bosco. donde
se favorecen y cultivan las relacio­
nes personales, la solidaridad y la
amistad. De esta comunidad for­
man parte padres y educadores y
en ella se dan espacios para gru­
pos con finalidades formatívas y
funcionales.
• Escuela en la que participan
los maestros en ntedio de los alum­
nos: -Maestros en la cátedra y her­
manos en el patío-.
• Escuela de trabajo: Prepara a
los jóvenes en el mundo del trabajo
y los cualifica con la formación
profesional.
• Escuela evangelizada y evangelizadora: Donde se sigue con res­
peto el desarrollo personal, donde
la dimensión religiosa ocupa su
justo lugar y ei muchacho puede
encontrar a Dios, conocer y amar a
Jesucristo y recorrer el camino de
la fe

• Escuela que se propone una
atención vocacional: Haciendo cre­
cer a cada uno según el proyecto
de -Dios, ayudando a madurar los
gérmenes vocacionales.
PERSPECTIVAS DE FUTURO
Miles de antiguos alumnos ava­
lan hoy la presencia escolar salesiana. Los 170 colegios, sin contar
los de formación profesional, que
las Hijas de María Auxiliadora y
los Salesianos animan actualmente
en España tienen sus plazas cubier­
tas y se ven obligados a no poder
admitir la demanda existente. Las
Salesianas atienden 41 centros de
preescolar. La E.G. B.. cuenta con
132 centros atendidos por las dos
ramas de la Familia Salesíana. El
bachillerato unificado y polivalente
es atendido en 47 centros. No me­
nos de 40 internados acogen a mu­
chos niños que carecen de facili­
dades familiares. La presencia salesiana escolar se deja sentir en
múltiples escuelas universitarias
de formación del profesorado. Otros
Salesianos están presentes en es­
tructuras oficiales...
No menos de 3.500 profesores
seglares trabajan hoy codo a codo
con los Salesianos. Lo que ai prin­
cipio se vio con recelo es una rea­
lidad enriquecedora. El momento
presente no es ya de expansión,
sino de profundización. -Los jóve­
nes os esperan- decía Pablo VI a
los Salesianos. Mientras haya jó­
venes que esperan a los Salesia­
nos. Don Bosco seguirá presente
en medio de ellos para ayudarles
a ser honrados ciudadanos y bue­
nos cristianos

25

m ed ios de ea m u n iea eió n soeial

PRENSA SALESIAMA,
TIEMPO UBRE
. «La prensa fue una de las principales empresas que me confió la Divina
Providencia»... «En esto Don Bosco quiere estar siempre a la
vanguardia del progreso»... «La difusión de los buenos
libros es uno de los fines más importantes de nuestra Congregación»...
«Os ruego y os exhorto a que no olvidéis esta parte tan
trascendental de nuestra misión». Como se ve, Don Bosco tenía una gran
preocupación por la prensa. Más tarde, el Papa Pío XU declararía
a San Juan Bosco Patrón de los editores católicos.
TODO EMPEZO
EN NUESTRO PAIS
POR LAS IMPRENTAS
Apenas establecidos en España,
los Salesianos fundaron sus Tipo­
grafías. Así nacieron las primeras
imprentas en Barcelona-Sarriá, Ma­

drid-Atocha, Sevilla-Trinidad, Pam­
plona, Málaga, Cádiz, Valencia,
Baracaldo, Carabanchel...
En tiempos de don Pedro Ricaldone cobró justa fama la de Se­
villa, donde se publicó en castella­
no la Biblioteca Agrícola Solariana
(1903-1928), en 140 volúmenes y
más de un millón de ejemplares.
Actualmente, Artes Gráficas de
Sarriá está a la altura internacio­
nal. Dotadas de los más modernos
medios de fotocomposición y of­
fset, además de los sistemas tra­
dicionales, se realizan en ellas ver­
daderas obras maestras en el arte
de la reproducción impresa. Pero
más meritoria es, si cabe, la labor
de formación profesional de los
numerosos alumnos que allí se pre­
paran, dada la trascendencia de
dicha profesión en Barcelona. Se­
ñalamos también por su calidad
los textos preparados por el pro­
fesorado de dichas escuelas, adop­
tados en España y en el extran­
jero.
Le siguen en importancia la Im­
prenta de Madrid-Atocha, donde
se imprime el Boletín Salesiano y
otras revistas, y la Imprenta de
Pamplona, donde también se pre­
paran las portadas del mismo Bo­
letín.
Las dos librerías saleslanas de Ma­
drid y de Sevilla se saludan. Los
mensajeros sevillanos llegaron en
bicicleta a la Capital de España.

EDITORIALES Y LIBRERIAS
En España, la más antigua y,
paradójicamente, más moderna de
las editoriales salesianas es Edicio­
nes Don Bosco (Edebé) de Barce­
lona. En 1890 apareció la Galería
Teatral Salesíana, que tuvo vida
pujante más de medio siglo. Apa­
recieron luego las Lecturas Cató­
licas y las colecciones Horas Se­
renas y Amena Juventud.
Niños y adolescentes celebraron
la aparición de El Oratorio Festivo,
ameno semanario de 4 páginas.
Más tarde vino la revista «Jóve­
nes» que llegó a tener una tirada
de 70.000 ejemplares con el com­
plemento de Chiribín.
En 1972 nació J-20, de gran ca­
lidad técnica y de contenido direc­
to y atrayente para los chicos de
E. G. B., y aun para los de cursos
superiores. Varias veces ha sido
reconocida como la mejor revista
juvenil de España y, como tal, ha
sido premiada por el Ministerio de
Cultura. Tres años después, en
1975, vio la luz En Marcha, revista
mensual para jóvenes y dirigida
por las Hijas de María Auxiliadora.
Otras colecciones célebres han
sido: Ardilla, Colección Damasco,
Héroes Bíblicos, Geiser, Colección
Tiempo Libre, Hombres en Cons­
trucción, Cuadernos Edebé, Cultu­
ra Religiosa, Formación Profesio­
nal...

T
Central Catequística Salesiana
Fundada en 1944 como Casa del
Boletín Salesiano en Madrid, la
CCS desarrolla hoy día un servi­
cio de gran utilidad para los Salesianos de España y de América
y para la Iglesia.
En su tiempo cobraron mucha
vida y tuvieron gran difusión las
Lecturas Católicas. Posteriormen­
te se han publicado colecciones
tan importantes como: Colección
Cuadernos de Pedagogía Catequís­
tica, Cielos nuevos y tierra nueva,
Ala y viento.
Pero, por su volumen, calidad y
servicio, la producción más impor­
tante ha sido la de los medios
audiovisuales, en sus secciones de
filminas y diapositivas.

La alegría juvenil tiene mil rostros.
Uno es el de la música.

Salesianos, con una tirada de unos
17.000 ejemplares.
Juventud Misionera, revista ju­
venil, especializada en el tema mi­
sionero salesiano. Salen unos
15.000 ejemplares mensuales y la
edita el Secretariado de Misiones
Saiesianas de Madrid.

Librerías
También destacamos aquí la la­
bor de la red de librerías salesianas, muchas de las cuales son lle­
vadas por las Voluntarias de Don
Bosco, como las de León y MadridEstrecho, o en colaboración con la
Familia Salesiana, como la de Cór­
doba. Actualmente contamos con
El Boletín Salesiano
4 librerías en Madrid, y 1 en Bar­
La CCS edita también el Boletín celona, Bilbao, Córdoba, León, Se­
Salesiano de España. Fundado por villa y Pamplona. Hay otras en
Don Bosco en 1877, el Boletín Sa­ perspectiva.
lesiano es hoy la revista de la Fa­
milia Salesiana. Se publica en 40
naciones, en 20 idiomas con una EL TIEMPO LIBRE
tirada mundial de cerca del millón
de ejemplares mensuales. En 1886
Desde los comienzos de su obra
comenzó a publicarse en lengua en España, los Salesianos crearon
española en Turín, desde donde se agrupaciones de teatro, bandas,
distribuía a todos los países hispa­ orquestas y coros juveniles. Du­
nohablantes. Desde 1944 empezó rante muchos años se esperaba
a publicarse en Madrid para toda con ansia los estrenos de las zar­
la España Salesiana. Actualmente zuelas de don Felipe Alcántara.
tiene una tirada de unos 60.000 Aún hoy tienen gran vitalidad gru­
ejemplares mensuales, y se distri­ pos teatrales como el Rajatabla de
buye a través de todas las Inspec­ Alicante, Aires del pueblo de Pal­
torías y colegios de España. Tam­ ma del Río o el de la Asociación
bién las Saiesianas editan para su de Antiguos Alumnos de Málaga.
ámbito la revista mariana Madre
La Galería Salesiana contribuyó
Nuestra.
sobremanera a las representacio­
nes teatrales en colegio y semina­
rios de España y de América. Los
Otras publicaciones actuales
que trabajaron en ella hicieron una
labor extraordinaria que hoy re­
Misión Joven, revista salesiana
de Pastoral Juvenil. En su doble conocen todos.
Continuación de la Galería Sale­
aspecto de reflexión e información,
es una de las más importantes en siana es la colección Teatr<^debé,
España en este campo de la pas­ respuesta a las nuevas circunstan­
toral.
cias. No se trata de un teatro sólo
espectáculo, sino de un teatro in­
Tibidabo, órgano bimestral de
los amigos del Templo que profe­ tegral. Hoy por hoy es una de las
mejores colecciones de España en
tizó Don Bosco en Barcelona.
Don Bosco en España, la revista su "3bble vertiente de niños y jó­
mensual de los Antiguos Alumnos venes.

El cine.—Se han creado en mu­
chos colegios centros de forma­
ción y cultura cinematográfica pa­
ra ver los filmes desde una actitud
crítica y artística. Ha cobrado gran
importancia la Escuela de Cinema­
tografía de Granada y los cineclubs de un sinnúmero de colegios
como los de Madrid-San Blas,
M adrid-Paseo de Extremadura,
Barcelona, Vigo, Salamanca, Cór­
doba, Sevilla...
La música.—En los comienzos
de la obra salesiana florecieron
las bandos de música y los coros
de polifonía sagrada, los batallones
infantiles. Hoy han cobrado gran
impulso los grupos de scouts y las
Montañeras de Santa María.

Actualmente quedan estupendas
muestras de la tradición de coros
salesianos como el de la Escoianía
del Tibidabo, fundada en 1927 y
que mantiene viva la llama del can­
to religioso en el Templo Nacional
al Sagrado Corazón de Jesús; la
Escoianía de Santander, que ha co­
sechado grandes triunfos en Espa­
ña y en el extranjero: la agrupa­
ción Raíces de Valencia; y los mu­
chachos de Cádiz que en 1980 ga­
naron el primer premio del Festi­
val de la Canción Iberoamericana
en su edición para niños.
En la década de los 60 fueron
muy interesantes las ediciones de
la Canción Blanca, promovidas por
el Centro Nacional Salesiano de
Pastoral Juvenil y que fomentaron
la creación musical en todas las
inspectorías españolas.

27

La parroquia salesiana
un sorviaio
a ia Iglesia española
Don Bosco sólo (juería ser el párroco de los jóvenes que no tienen parroquia, pero
antes de morir había aceptado y confiado a sus hijos siete parroquias.
Hoy son más de mil las parroquias salesiaiias en todo el mundo. La actividad
parro<iuial es compatible con la misión juvenil y popular de los Salesianos, y a veces
necesaria. Kn España los Salesianos sirven a la Iglesia en 43 parroquias.
PARROQUIAS SALESIANAS
EN ESPAÑA
«La parroquia ofrece un espacio
y un contexto interesante para el
trabajo con los jóvenes... Nos per­
mite seguirlos durante todo el pe­
ríodo educativo, desde la infancia
hasta la madurez en constante y
directa relación con sus familia.^».
Así se expresaba el último Capítu­
lo General de los Salesianos.
Secundando esta apertura y esta
llamada realista a una acción pa-

rroquial, la Congregación ofrece su
servicio a la Iglesia diocesana es­
pañola en 43 parroquias con más
de medio millón de habitantes en
su totalidad.
He aquí el número de parroquias
salesianas por inspectorías; En la
Inspectoría de Barcelona hay nue­
ve parroquias; en la de Bilbao,
tres; en la de Córdoba, siete; en
la de León, tres; en la de Madrid,
diez; en la de Sevilla, cinco; y en
la de Valencia, seis. Total, cuaren­
ta y tres.

JW
é -t. *





NUESTRAS PARROQUIAS
COMO SON
He aquí algunas características
de la parroquia salesiana;
• Parroquia comunitaria. Para
nosotros los Salesianos, la parro­
quia es, sobre todo, comunidad
cristiana en la que se hace visible
y perceptible la Iglesia universal.
Los campos de acción de la comu­
nidad eclesial se señalan en tres
funciones: la profética (anuncia la
palabra), la cultural (la celebra) y
la animación cristiana de la reali­
dad (la vive: acción-testimonio),
descubierto en este último campo,
en la caridad el punto culminante
de la praxis eclesial. Queremos ser
en la barriada donde trabajamos
un signo y un testimonio de los va­
lores espirituales vinculados a los
consejos evangélicos que deben
animar la vida de la comunidad
parroquial.
• Parroquia - Comunidad de
comunidades. Construye y estimu­
la la comunidad de fieles, fomen­
tando y acompañando la formación
de grupos y comunidades cristia­
nas menores, de tai modo que la
parroquia es la comunidad de refe­
rencia donde todas ellas se encuen­
tran.
• Parroquia • Comunidades con
organismos de acción. Los SalesiaInterior del templo parroquial salesiano de Valladolid.

oecíoffi « a le s i o n a
nos procuramos ser solícitos en
crear y hacer funcionar los orga­
nismos adecuados: consejos y
asambleas parroquiales...
• Parroquia • Comunidad con
la presencia de los grupos de la
Familia Salesiana. En nuestro tes­
timonio comunitario unificamos en
fecundo apostolado los varios gru­
pos de la Familia Salesiana con
una atención a los Cooperadores
Salesianos.

• Vida litúrgica • Sacramental.
No es la materialidad de las cele­
braciones lo que pretendemos, si­
no la calidad, la participación ple­
na, y el carácter festivo.
• Dimensión mariana. Caracte­
rística sustancial de nuestro espí­
ritu y nuestra acción.
• Atención vocacional. Segui­
mos atentamente a las personas,
valorizando los dones de cada uno
para bien de la Iglesia.

pular, 15; Zona clase media, 11;
Zona clase alta, 0.
• Estilo de acción. Tratamos
de sintonizar con el pueblo, con
su lenguaje, con su cultura. El
nuestro es un estilo popular.
• Abierta a todos. Quiere de­
cir abierta e integrada en la co­
munidad del barrio. No somos con­
templativos ni conventuales, sino
religiosos cercanos a todos nues­
tros hermanos y a su servicio.

PARROQUIA JUVENIL
La parroquia salesiana realiza la
opción prioritaria por los mucha­
chos y los jóvenes, especialmente
los más pobres (C. G. XXI). ¿Qué
significado tiene esta opción? Sig­
nifica que los Salesianos alimenta­
mos una actitud de confianza ha­
cia los jóvenes y que cultivamos
una comprensión religiosa y pro­
funda del fenómeno juvenil me­
diante la reflexión sobre los datos
que su cultura proporciona. Valo­
rizamos en momento juvenil como
momento de renovación, de creci­
miento y de vitalidad de toda la
comunidad parroquial.
He aquí los movimientos juveni­
les organizados en nuestras parro­
quias: Oratorio Festivo y Catequesis infantil. Amigos de Domingo
Savio, Movimiento Júnior, Movi­
miento Scouts, Guías, Cooperado­
res Salesianos, Grupos de Fe y Catecumenado Juvenil. El campo pa­
rroquial nos permite contactar con
los jóvenes en su mismo ambiente
de vida y relación con un espacio
operativo libre.
PARROQUIA EVANGELIZADORA
«La Parroquia Salesiana evange­
liza según el estilo y el espíritu
de nuestro Proyecto Educativo
Pastoral». Nuestra manera de evan­
gelizar no es sólo la enseñanza re­
ligiosa o el servicio del culto. Ha­
cemos pastoral desde dentro de la
vida. Nuestra preocupación se am­
plía a todo el territorio y sus pro­
blemas, iluminando cristianamente
actitudes y preocupaciones del lu­
gar, teniendo presentes sus proble­
mas en el anuncio del mensaje.
En esta tarea evangelizadora se
tienen en cuenta estas característi­
cas:
• Catequesis. «La actividad
evangelizadora y catequética es la
dimensión fundamental de nuestra
misión».

PARROQUIA POPULAR
Son tres las características que
configuran este carácter popular:
la ubicación, el estilo de acción y
la apertura a la vida del barrio.
• Ubicación. Don Bosco se ubi­
có entre los muchachos pobres, tra­
bajadores y emigrantes. Queremos
ubicarnos en ambientes populosos,
en las barriadas populares de la
gente humilde. Es una preferencia
coherente con los otros elementos
de nuestro carisma y de nuestra
espiritualidad.
Nuestras parroquias se sitúan
respecto a la ciudad: en Zona cen­
tral, 5; en Zona media, 8; en zona
periférica, 17. Respecto al tipo de
viviendas: Zona rural. 4; Zona po­

los párrocos salesianos de España
se reúnen con frecuencia en Jorna­
das de estudio pastoral y de con­
vivencia.

EN CIFRAS
La Congregación Salesiana apor­
ta a la Iglesia española 167 casas
con una gama variadísima de ser­
vicios pastorales. Además de esas
obras son 43 parroquias que ofre­
cen su servicio a la pastoral espe­
cíficamente parroquial, de las cua­
les sólo 13 tienen más de veinte
años de vida. El resto han nacido
en estos últimos años. Son 165 los
sacerdotes que. con una dedica­
ción más o menos directa, trabajan
en la pastoral parroquial.

29

Una vocación m isionera
centenaria
La España Salesiana ha entrado con furia en el «Proyecto Africa»
de la Congregación.
Se diría que el espíritu m isionero español,
como si hubiera sido un Guadiana,
ha reaparecido despertando de repente y sacudiéndonos
con el asombro de su realidad.
Las siete Inspectorías Salesianas de España han porfiado
en generosidad m isionera para ir a otras tantas naciones africanas.

— Inspectoría de B a r c e l o n a :
Pronto serán realidad dos fundacio­
nes en Costa de Marfil, tierra que
ya ha sido visitada por el Padre
Inspector y su Vicario. En este año
saldrá la primera expedición de
misioneros.
— Inspectoría de Bilbao: Ya hay
dos salesianos trabajando en Benín y con la espera de próximos
refuerzos.
— Inspectorías de Córdoba y Se­
villa: Los dos inspectores provincia­
les han viajado recientemente a
Togo y Camerún para ver «in situ»
las necesidades pastorales y edu­
cativas y encargarse de posibles
obras.
— Inspectoría de León: Ya están

en marcha dos obras en el Senegal y ya han partido a su respecti­
va misión seis salesianos.
— Inspectoría de Madrid: Los
Salesianos llevan trabajando ya dos
años en Guinea Ecuatorial de don­
de habían sido expulsados y ahora
han vuelto después de la dictadura
de Maclas. Las Hijas de María
Auxiliadora están asimismo en Malabo, encargadas de la Escuela Uni­
versitaria del Profesorado de E.G.B.
— Inspectoría de Valencia: Ha
elegido como campo de misión la
República de Malí, uno de los paí­
ses más pobres del continente
africano.
Creemos que este despertar mi­
sionero debe poner en movimiento

a toda la Familia Salesiana de Es­
paña y mover el corazón de Coo­
peradores, amigos y bienhechores.
Es una empresa que merece el es­
fuerzo de toda la Familia de Don
Bosco. Asimismo nos parece que
este florecer misionero es un j f uto de los primeros cien años de
los Salesianos en España.
¿No es el Espíritu el que nos
abre las anchas puertas del futuro?
Como Don Bosco vino hace cien
años a nuestra patria a traernos
su estilo de vida cristiana, los Sa­
lesianos desean llevarlo a otros
países para enriquecerlos con el
mismo carisma con que fue enri­
quecido el-nuestro.

i
Los Salesianos y la familia españo>
la envían generosamente a sus hi*
jos a las misiones. El espíritu de
Don Bosco, sembrado en nuestra
tierra, crecerá también en otros
países...

EL SUEÑO MISIONERO
DE DON BOSCO
EN BARCELONA

)

j

Era la noche del 9 a! 10 de abril
de 1886. «... Don Bosco vio una in­
mensa multitud de Jovencitos que
corrían en su derredor mientras
gritaban: "¡Te hemos esperado tan­
to, te hemos esperado tanto, pero
finalmente estás aquí; ahora estás
entre nosotros y no te dejaremos
escapar!"
El Santo no comprendía nada y
pensaba que querrían de éi aque­
llos niños. Pero mientras permane­
cía atónito en medio de ellos, vio
un inmenso rebaño de corderos
conducidos por una Pastorcilla...
Los niños, a una invitación de aque­
lla, van leyendo: Valparaíso, San­
tiago, Pekín...
—Tira una línea, — le indica la
Pastorcita— , desde una extremi­
dad a la otra, desde Pekín a San­
tiago y haz centro en el corazón
del Africa: "tendrás una idea exac­
ta de cuánto deben hacer ios Sa­
lesianos".
—Pero ¿cómo hacer todo esto?,
—exclama Don Bosco— . Las distan­
cias son inmensas, los lugares di­
fíciles y los salesianos, pocos...
— ¡No te preocupes! ¿No ves allí
50 misioneros preparados? ¿Y no
ves allá muchos más? Traza una
línea desde Santiago al Africa Cen­
tral. ¿qué ves?
— Diez centros de misión.
Bien: estos 10 centros de misión
que ves serán casas de estudio y
de noviciado que se dedicarán a la
formación de los misioneros que
han de trabajar en esas regiones.
Y ahora vuélvete hacia la otra parte. Aquí verás otros 10 centros,
desde el corazón del Africa hasta
Pekín. También estas casas pro­
porcionarán misioneros para tc^as
estas regiones. Allá está Hong
Kong, más acá Calcutta, más lejos
Madagascar. En todas estas ciuda­
des y en otras muchas más habrá
numerosas casas, colegios, novicia­
dos...»
...Y , precisamente ahora, nues­
tra generación está_ cumpliendo
lo que Don Bosco soñó en Barce­
lona hace casi un siglo.

LOS PRIMEROS
DE UNA LARGA HISTORIA
Los primeros salesianos vinieron
a España en 1881. Pues bien, en
1898 salía la primera expedición de
misioneros españoles: el padre
Ramón Peiteado y el coadjutor Lau­
reano Santana, destinados a Vene­
zuela, y el coadjutor Abdón Senén
a Brasil. Aunque a los tres salesia­
nos se había adelantado la prime­
ra Hija de María Auxiliadora, Sor
isabel Mayo, que partió para Chile
en 1891.
Posteriormente siguieron expedi­
ciones a Argentina y al Ecuador,
entre las que figuran misioneros
de la talla del padre Matías Buil y
Sor Consuelo Iglesias.
Recordamos también la fundación
de la Obra Salesiana en Cuba, em­
presa llevada a cabo por los Sale­
sianos de España; don José Calasanz, don Felipe de la Cruz, don
Salvador Herrera, don Rafael Mer­
cader (joven superviviente, muy
cercano al siglo de vida] y el coad­
jutor Juan Rivera.
Célebres fueron las expedicio­
nes a la India desde 1921 hasta des­
pués de la Segunda Guerra Mun­
dial. Muy conocidos son los nom­
bres de misioneros como monse­
ñor Bars, don Gumersindo Cid, don
Tomás López, don Eduardo Gutié­
rrez, don Francisco Mármol, don
Mariano Huguet... ¿Y quién no co­
noce en nuestro mundo salesiano
a don José Luis Carreño? Es, sin
duda, uno de los misioneros más
intrépidos de la Congregación, que
supo sembrar ideas e imaginación
en Goa, India, Filipinas, España.
Portugal, Estados Unidos... Y hoy,
testigo y último reportero del ma­
yor de los portentos de la Historia
de la Humanidad...

En 1925 se fundó la casa misio­
nera de Astudillo, de la que salie­
ron cerca de un centenar de sale­
sianos hacia las misiones. La ex­
periencia duró hasta la guerra del
36; pero fue una etapa bonita para
el recuerdo de esta hora secular.
TRES ACONTECIMIENTOS
INOLVIDABLES
— Primero, el nombramiento de
don Modesto Bellido como Conse­
jero General para las Misiones. En
dicho período, desde 1948 hasta
años recientes, salían hacia Amé­
rica levas anuales de 15 a 30 mi­
sioneros. Así pues han sido 953
los Salesianos, y 126 las Salesianas
españolas que han ido a las Misio­
nes.
— La creación del Secretariado
de Misiones de Madrid, que se
preocupa de atender a todos los
misioneros españoles. El mismo
edita la revista «Juventud Misione­
ra», creciente en suscripciones,
rica en contenido y excelente pre­
sentación.
— La celebración del «Domisal»
en los colegios y. durante varias
temporadas, la «Expo-ambulante»,
cosas que han contribuido a crear
un clima misionero en la España
Salesiana.
*

*

*

Ahora los hijos de Don Bosco
miran a Africa. Es la tierra prome­
tida y comprometida. Y hay una
latente confianza de que, mientras
florezca el anhelo misionero, tam­
bién florecerán el espíritu salesíano y las vocaciones. Las puertas
del futuro están abiertas, de par en
par.

31

ALGUNOS
NOM BRES
PRO PIO S
Don Marcelino.

Don José Calasanz.

Hace cien años, el día 16 de fe­
brero de 1881, llegaron a Utrera los
6 primeros Salesianos. He aquí sus
nombres: Juan Branda. Ernesto
ObertI. Carlos Pane, Francisco Atzenl. Miguel Branda y el familiar
Miguel Goltre. todos ellos capita­
neados por Juan Cagliero, verdade­
ro creador de la Obra de Don Bosco
en España y América.
Inolvidables los nombres de otros
Italianos que fraguaron en España
su personalidad saleslana: don Fe­
lipe Rinaidi y don Pedro Ricaldone.
ambos sucesores de Don Bosco;
don Pedro Ollvazzo. don José Manfredlni. don Binelii, don Caprani,
don Marcos Tognetti. don Juan Al­
berto. don Anastasio Crecenzi, don
Valentín Grasso, don León Cartosio,
don Villani, don Pablo Montaldo.
tantos años maestro de novicios,
don Luis Chiandotto... y otros ex­
tranjeros que hicieron de España
su patria de adopción en la que
dieron su vida generosa...
Madrugaron ios primeros salesíanos españoles. Imposible hablar de
todos, nombrarlos a todos. Si cita­
mos algunos nombres, sólo es a
modo de ejemplo. No es ésta una
etnología de los hombres más im­
portantes. Es sencillamente una
muestra. Si nombramos algunos,
tenemos la seguridad de que ca­
llamos a la mayoría. Pero sus vo­
ces hablan en el recuerdo de cada
lector. Cada uno puede escribir los
suyos, con tinta roja y bien graba­
da, porque los lleva en el corazón.
Todos ellos hicieron posible esta
historia de amor que es la Congre­
gación Salesiana en España
Don Manuel Hermida. fue el pri­
mer hijo de Don Bosco en España.
Don José Calasanz y compañeros
mártires; su sangre fue semilla de
numerosas vocaciones. Don Marce­
lino Olaechea. corazón grande y
generoso, arzobispo de Valencia y
antes de Pamplona, figura impor­
tante de la Iglesia española; don
Felipe Alcántara, aran músico y

compositor de zarzuelas y opere­
tas; señor Gaspar Mestre, tallista
de fama mundial por sus retablos;
señor Martín Goicoechea. héroe
que cubrió durante tantos años las
necesidades de los aspirantados;
don Amadeo Burdeus, escritor a
quien honraban los catedráticos de
la Universidad como a un sabio;
don Sergio Cid. que tenia pendien­
tes a los chicos con su palabra an­
gelical...
El padre Viñas, prototipo del salesíano en Valencia; don Recaredo
de los Ríos, mártir popular y son­
riente; d o n Florencio Celdrán,
maestro y manco; don Lisardo He­
rrero. el pequeño gran hombre, co­
mo le llamaban, creador de los
Círculos de Domingo Savio; don
Ramón Zabalo, de gran criterio y
paternidad: don Esteban Ruiz. hom­
bre de fe y de simpatía arrollado­
ra; don Manuel Camaño, siempre
dispuesto a aprender para enseñar:
don Juan Gil. la elegancia de la
palabra; el señor Recasens, maes­
tro en el arte de la madera, sobre
cuyas sienes se posaron las ma­
nos de Don Bosco; don Joaquín
Dalmau, el salesiano coadjutor
ideal; don >Fila>> y su teatro y sus
muchachos: don José Saborido.
con su pincel, su compás y sus
planos arquitectónicos: don Ricardo
Beobide >Ribé>. de cuya pluma
brotaban la palabra y la música;
don José Holgado, maestro y cri­
tico literario; don Francisco de la
Hoz. jándalo cuya pluma siempre
estaba húmeda; don Francisco Villanueva. escritor; don Salvador
Rosés, músico, poeta y pintor; don
Alejandro Bailó, escriturísta de pa­
labra sabía y don de gentes; don
José Campoy. de gran simpatía:
don Angel Mateos, de gran bon­
dad...
Y hombres sencillos y populares
como don Antonio Bernad. señor
Patxi. señor don Antonio Camacho.
don Modesto Jiménez, don Juan
Romero don Antonio Do Mulño.

don Elias, don José Doblado, don
Vicente Martín, don David Morán,
don Jesús Marcellán, don Luis Con­
de, don Digno Outeiriño, don Manolito Pérez..
Hijas de María Auxiliadora como
Sor Eusebia Palomino, que trataba
con Dios y con la Virgen con la
mayor naturalidad del mundo y hoy
es un ejemplo de santidad popular
que está despertando el sentir re­
ligioso de muchos: Sor Juana Vi­
cente. mujer de extraordinaria bon­
dad y que sobrevivió al martirio
sufrido en la guerra civil; Sor María
Valle, de tal gratos recuerdos: Sor
Carmen Puras: Sor Amparo Doménech; Sor Carmen Méndez; Sor Te­
resa Iscar, con fama de santidad:
Sor Josefina Canet: Sor Ana María
Martin... Y tantas hermanas que.
en una labor callada han entregado
generosamente su vida en favor de
la juventud.
Y Salesianos Cooperadores co­
mo: la sierva de Dios doña Dorotea
de Chopitea, la familia Marti-Codolar, de Barcelona: la familia Valdés,
de Deusto; la familia Aróstegui, de
Pamplona; don Enrique VaMbona.
don José Píscopo y don Vicente
Gisbert. de Valencia; la familia Masaveu. de Asturias: el Marqués de
Casa Ulloa, de Utrera; los Condes
de Bustillo, de Sevilla; don Rafael
Romero, «el Abuelito-, de San José
del Valle; doña Ana de Viya, en Cá­
diz; los Marqueses de Alava y don
Fernando Bauer. en Madrid; el Con­
de de la Cortina, en Montílla; las
familias Busó y Albors, en Valen­
cia; los Marqueses de Bertemati.
en Campano, don Juan Torres Silva,
en Jerez...
La gratitud de toda la Familia
Salesiana que ahora celebra el Año
Centenario Salesiano a los hombres
que han hecho una historia de sim­
patía y han construido con su vida
el nombre salesiano en España.
Quizás sea el silencio su mejor
cantor Pero Dios sabe los nombres
de todos.

32
É

LA IGLESIA ESPAÑOLA
a tos SALESIANOS DE ESPAÑA
M e n s a je d e l C a rd e n a l T a ra n c ó n ,
P re s id e n te d e la C o n fe re n c ia E p is c o p a i E sp añ o ia
A los rollglosos saiesianos, en el c e n te n a rio d e su lle g a d a a España
El centenario que vais a celebrar es im portante para vosotros y para la Iglesia Española. Es ló g ico que
la Jerarquía quiera estar presente en esa celebración y que me sienta d ciig a d o . com o Ar20bispo de
M adrid y Presidente de la C onferencia Episcopal, a manifestaros mi reconocim iento y mi gratitud por la
labor, verdaderam ente adm irable, que habéis realizado durante estos cien años.
Siguiendo el ejem plo de vuestro Santo Fundador habéis hecho de la Juventud y. especialm ente, de lo
Juventud abandonada el objetivo principal de vuestro apostolado. Y habéis sabido form ar en vuestros
Centros a millares de hombres y de cristianos que han tenido una gran influencia en la Iglesia y en la
Sociedad.
Y habéis realizado esa labor con un desinterés, con una entrega y con una generosidad que
necesariam ente había de obtener la bendición de Dios y el reconocim iento de la Iglesia.
Pido al Señor que perm anezcáis siempre fieles a vuesfro carism a fundacicxial, ahora más que nunca,
cuando nuestra Juventud está necesitada de una m ayor comprensión y de una entrega más generosa, si
ca b e , para que no se dejen arrastrar por la corriente secularizadora y consumista d e la sociedad.
Com o O bispo de M adrid he de recordar tam bién la colaboración que habéis prestado a la pastoral
parroquial y diocesana, m ereciendo la gratitud de esta C om unidad diocesana.
Con mi bendición más afectuosa, os saludo s.s. en Cristo.
V icente Enrique, C ardenal Tarancón
M adrid, 15 de septiem bre de 1980

M e n s a je d e l C a rd e n a l Bueno M o n re a l,

Arzobispo de Sevilla, primera diócesis adonde llegaron los seis primeros Saiesianos.
Me parece que fue ayer cuando celebraba en Utrera lo conm em oración de los 75 años de la lle g a d a
a esa p o blación de los primeros Saiesianos. Se recordaban entonces las g estior^s laboriosas del Marqués
d e Casa Ulloa con el C ardenal Lluch y G arriga y, a través de él. con el mismo Don Bosco, que culminaron
en la lle g a d a del prim er grupo de Saiesianos a Utrera en febrero de 1881. A lgo semejante había hecho el
prócer utrerano con las Hermanos de la Cruz, y había logrado traer a Utrera la prim ero fundación que se
hizo después, de la casa de Sevilla.
Ni el mismo Don D iego M ario Santiago C alvo d e la Banda y Aragón, preocupado por la educación
cristiana d e los niños y las niñas de su ciu d a d, pudo figurarse lo trascenderxiia que sus gestiorres habrian
d e tener, no solamente en Utrera, sino en to d o A ndalucía. Sevilla. Morón, Carmorya, Jerez, A lcalá de
G uadoiro, Rota, Sanlúcar la Mayor, etc., y aún nrKis en to d a España. Ellos iniciaron la form ación
profesional que a tantos m illares de jóvenes ho abierto los cam inos difíciles d e l mundo del tra b a jo con
d ig n id a d e ilusión. Esta conm em oración dará lugar a estadísticas que recojan la variedad y abundancio
d e com pos educacionales que los Saiesianos han im pulsado y prom ovido en to d a España. Lo que no se
podrá ca lcu la r son los millones y millones d e jóvenes, hombres y mujeres, que se han venido educando en
los colegios saiesianos, y la alegria, sensibilidad hum aixj, y e ^ iritu a lid a d que ellos hon inculcado en esa
juventud. Todo e llo nos hace volver los ojos a la gran figura d e l educador cristiarvD d e los tiempos
modernos, Q je fue Don Bosco, en quien el servicio a los hombres brota y está unido a l servicio d e Dios con
entrega heroica de santidad.
José Mana. Corderxal Bueno Monreal
Sevilla, julio de 1980

Vino a esta tie rra y ya no supo irse.
Y ahondó com o un árbol sus raíces.
Y se hizo centenario. Y en sus ram as
las aves de este cielo ¡qué bien cantan!
R.A.



•((