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extracted text
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Año Santo en R om a
*
E L
E X A M
Queridos amigos Juanito y Mari;
En vuestras cartas me contáis vuestros apuros por
los exámenes de final de curso. «Es lo peor del año»
me dice Juanito. «Si no fuera por los exámenes
— añade Mari— me apuntaba para ser estudiante toda
la vida». Bueno, amigos, yo creo que dentro de cien
años, más o menos, ya se habrá inventado alguna
máquina que haga los exámenes en lugar de los niños.
¡Lástima que no podamos verlo! Pero será muy bo
nito, ¿no os parece?
A propósito de exámenes, mirad cómo examinó
Oon Bosco a un amigo suyo que quería hacerse saloslano:
Una tarde salió el santo a dar un paseo con un
grupo de jóvenes. Uno de ellos, Jerónimo Suttil, le
insistía: ¡Oigame, de verdad, yo quiero hacerme salesiano!
— Que esta vida no es para ti. Amigo, ¿cómo vas
a poder soportar los sacrificios y privaciones a que
han de estar dispuestos los salesianos?
—Mándeme alguna prueba. Don Bosco. y ya verá
que si soy capaz.
-Te digo que no. Yo te conozco de sobra.
—Por probar no se pierde nado.
— Bueno — dijo Don Bosco— . Aceptado.
Pero, otro día. Don Bosco fue al pueblo de Buttigliera con una cuadrilla de sus chicos. También iba
Jerónimo. Los recibió una señora condesa, bienhecho
ra del Oratorio. Había preparado una mesa con una
espléndida merienda de exquisitos manjares para Don
Bosco y algunos de sus acompañantes más distingui
dos. A los chicos también les había acomodado unas
mesas en los sótanos de la vivienda.
Jerónimo, que tocaba el piano como los ángeles,
se sentó a interpretar piezas clásicas. Hizo verdade
ros malabarismos sobre las teclas. Al final, brotó como
una llamarada de aplausos que, el joven artista agra
deció sonriente.
Llegado el momento de la merienda. Don Bosco
llamó o Jerónimo para decirle:
— Oye, quiero que me hagas un favor.
— De mil amores.
— Mira, tú que tienes criterio, durante la merienda
vas a Ir a vigilar a los chicos abajo, para que no
armen mucha bulla y coman con orden. Estando con
olios, todos se portarán bien, pues tú tienes mucho
ascendiente, ¡Bueno, también merienda con ellos!
Jerónimo no dijo ni media palabra. Bajó las esca
leras con la cabeza tomb¡én baja y llena de desilu
siones. El había pensado sentarse a la mesa, «artista
invitado» y de los mejores amigos de Don Bosco. Se
le cayeron encima los polos del sombrajo. No probó
un bocado. Los chicos notaron su mal disimulada
tristeza. El que había soñado ser el centro de la con
versación... Al terminar, se aisló de todos y se puso
o pasear o solas su melancolía.
¿Que le posará a Jerónimo? —se preguntaban los
chavales.— ¿Estará enfermo?, ¿nos habremos portado
mol con él?
También salió Don Bosco a charlar con los chicos
y a preguntarles qué tal lo habían pasado. Todos a
EN
una, le hablaron de la tristeza de Jerónimo. El Santo
que lo vio paseando su desolación, lo llamó:
— Dime, ¿qué te pasa?, ¿te han hecho algo?, ¿te
sientes mal? Jerónimo no soltaba prendas. Pero, al
darse cuenta de la amorosa insistencia del Padre,
rompió entre sollozos:
—Me ha sentado fatal el haberme excluido de sus
comensales.
— ¡Ah! — exclamó Don Bosco— . ¿No me habías
pedido una prueba?
— ¡Acabáramos! — cortó Jerónimo el llanto y alzó
los ojos llenos de alegría a Don Bosco— . ¿Y por qué
no me lo dijo que era una prueba? Entonces hubiera
recibido el golpe con gusto...
— ¡Hombre!, si te lo hubiera dicho, ya no hubiera
sido una prueba.
— Tiene usted razón.
Jerónimo recobró la alegría perdida. No fue salesiano. Adquirió un importante trabajo en Francia. Y,
al cabo de los años, regresó a Turín y disfrutaba yendo
ai Oratorio en sus tiempos libres para recordar sus
aventuras juveniles al lado de Don Bosco.
Ya veis cómo Don Bosco también hacia sus exá
menes. Y hasta el mismo Señor nos examinará a todos
un día. Nos examinará de esa asignatura tan bonita
que se llama «Amor». Hay que estudiarla mucho y
hacer prácticas. ¡Todos esperamos aprobar!, ¿verdad
que si?
Recibid un abrazo de vuestro amigo.
PADRE RAFAEL
DON
BOSCO
Una página para los niños
Cualquiera sabe si Juanito estudia o duerme. ¡A que no lo veis
mover la pAg. del libro! ¡Siempre, siempre está en la misma pág.l
A
I
llamadas
a la reconciliación
Revista d e la Obra de D on Bosce
ARO U ü ü ^tX - N.« 6 • J u n io 1975
Director: RAFAEL ALFARO
Dirección, Redacción y Admón.:
Aicaiá, 164
Teléfono 255 20 00
MADRID-2e
• Primero fue el Papa PaUo VI. A lo largo de todo el Año Santo
su llamada está siendo una constante urgencia al amor fraterno en
tre todos los cristianos.
Luego, fue el Rector Mayor. Al estrenar el nuevo año 1975, nos
dio las tres paiabras claves para el camino que entonces empezába
mos y que ahora estamos mediando: Conversión, Reconciliación,
Evangelización.
Ahora nuestros obispos nos acaban de dar otra liamada a la
reconciliación en su reciente documento colectivo: «La reconciüación
en la Iglesia y en la sociedad».
Depósito Legal: M. 3.044*1958
(Con censura eclesiástica)
Imprime: Escuela Gráfica Salesiana
Madrid-Atocha
EN ESTE NUMERO
Llamadas a la reconci
liación .........................
Personalización y reno
vación de la escuela
c ris tia n a .....................
La reconciliación en ia
Iglesia y en la socie
dad española................
“Tia Sofia” o dos nidos
para echar las alas ...
Nuevo inspector Provin
cial de Filipinas.........
Existo, luego pienso ...
Horas de angustia en
Vietnam ........................
Colaboración seglar ...
^^dríd, ia Escuela Uni
versitaria del Profeso
rado ..............................
Por el mundo salesiano
Veinte nuevos sacerdotes
Una ráfaga de ametra
lladora ........................
El Ariari nació salesiano
Por un futuro mejor ...
Nuestra gratitud a Ma
ría Auxiliadora ...........
Fueron a la casa del Pa
dre ................................
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NUESTRA PORTADA
El Papa Pablo VI en una con
celebración eucarística, en
una peregrinación del Año
Santo. El Santo Padre nos
invita a todos a la conver
sión y a la reconciliación en
este año de gracia.
• El «Boletín Salesiano» ofrece un resumen del documento epis
copal. No puede hacerse sordo ni marginar la voz de nuestros obis
pos. Una voz tan en consonancia con la del Santo Padre y la del Rec
tor Mayor.
Sin embargo, creemos que nuestros lectores no deben conformar
se con un resumen. Esto ha de ser más bien una invitación a su lec
tura integra. Hay revistas que traen el texto completo y que reco
mendamos a todos.
No obstante, al leer el documento, no hemos de quedamos en la
actitud del que lee algo sólo con el objeto de saciar su curiosidad.
Sin duda que ha despertado interés en los andiientes sociales y polfticos del país. Pero, sobre todo, nos parece un documento digno de
reflexión. La voz de nuestros obispos es seria y nos urge a una praxis
reconciliadora, a todos los niveles.
Es posible que su lectura nos lleve a subrayar la culpa que tienen
los demás y a silenciar la nuestra. Es el mismo evangelio el que nos
llama a considerar la viga que hay en nuestro ojo y no la paja que
hay en el del adversario, que resulta ser hermano nuestro.
• En la tercera parte del documento, ponen los obispos el dedo
en la llaga de la realidad presente en la sociedad y en la Iglesia. Y
en la cuarta se ofrecen los caminos de reconciliación: en la conver
sión personal, en las relaciones humanas, en la vida familiar, en la
juventud, en el mundo laboral, en el mundo político, en la Iglesia...
Nos da la impresión de que vivimos en un mundo roto, desgarra
do, dividido; de que nos aguantamos, en lugar de queremos; de que
nos damos la mano, pero reservándonos el corazón. Ardua es la tarea
de reconciliarnos. Una tarea que no hemos de desvirtuar porque
tampoco se trata de arreglos y componendas. El parche nuevo en el
vestido viejo no da resultado alguno. Ya lo advirtió Jesús en su tiem
po. La reconciliación ha de ser una mirada valiente a los signos
de los tiempos, a la realidad que vivimos, con el evangelio en la mano.
• Una tarea que exigirá arrancar muchas cosas de raíz, para em
pezar de nuevo. Quizás haya que destruir muchas cosas en las que
confiábame», y que ahora no nos sirven, aunque se desgarre el alma.
Habrá que plantar. Y edificar. Y crear una sociedad nueva.^
Es tarea urgente y obl^atoría. Obra de todos, no de unos pocos.
La llamada está hedía. Hace falta enqiezar.
1
LA EMOUELA,
¿P trniaform a p a r a la etiu o a o ló n tia la faT
El creciente fenómeno de
personalización es otro de los
factores que afectan a la ho
ra presente. Especialmente, los
jóvenes y adolescentes son
sensibles a este valor: surge
un nuevo humanismo, funda
do sobre una aguda percep
ción del valor de la persona
libre y responsable.
Los jóvenes son sujetos de
un profundo movimiento de
búsqueda intensa de intimi
dad, libertad, promoción per
sonal, democratización, diálo
go e información.
A ello se añade, como con
secuencia, una gran suscepti
bilidad por cuanto representa
un derecho de justicia, una le
gítima apetencia de libertad y
autodeterminación...
Evidentemente, este fenóme
no de personalización Incide
fuertemente sobre la renova
ción de la escuela. Los jóve
nes y adolescentes desean y
exigen poder realizar, en el
seno de la misma, una comu
nidad en la que las relacio
nes se basen, lo más posible,
en líneas de democratización,
cogestión, diálogo, autodeter
minación, acción crítica. Para
ello es preciso que la escuela,
como estructura, se desmasifique, de modo que puedan
ser posible tales líneas de per
sonalización de las relaciones.
La masificación de la escue
la es un factor relativo. No
viene determinado, en absolu
to, por el simple número de
adolescentes o jóvenes, sino
por una serie de factores que
hacen posible o imposible la
personalización de las relacio
nes. El Capítulo General de
por J09E
l u ís
PEREZ
los Salesianos dice: «La ense
ñanza no puede reducirse a
un mero hecho técnico, sino
que ha de ser un encuentro
entre personas» (doc., 382).
Es evidente que la masifica
ción, como fenómeno de des
proporción entre número de
educadores y educandos, en
tre el influjo de aquéllos en
la realidad de éstos, hace im
posible la relación personal y
grupa!, de modo que las per
sonas no se pueden encon
trar o niveles de diálogo, co
laboración, etc. De esta ma
nera, esa nueva forma de pre
sencia y testimonio de la fe a
través del hecho cultural, se
hace nula o mínima y, por
consiguiente, la identidad cris
tiana de la escuela desapare
ce, tal como dijimos anterior
mente.
Ahora bien, asistimos a un
hecho tan innegable como re
petido: muchos de los centros
cristianos de educación pre
sentan una masificación enor
me, en base a una despro
porción, cada vez mayor, del
número de educadores cristia
nos. Estos centros se encuen
tran ante problemas insolubles en la educación de la fe,
T b e n o v í;
debido a la casi nula relación
personal.
Las Reglas de los Hermanos
de las Escuelas Cristianas in
sisten en que es imprescindi
ble actuar la acción educativa
«en ambiente afectuoso, por
el trato de persona a perso
na, y gracias al diálogo con
fiado» {Reglas, IX, d). Estos
mismos religiosos, en su Capí
tulo General, intentan, a este
respecto, plantearse la pro
porción entre el número de
Hermanos religiosos, educa
dores seglares y alumnos. El
Capítulo afirma, ante el hecho
de la masificación y de la
desproporción correspondien
te: «Resultaría ilusorio afirmar
que, en esas condiciones, pue
da la comunidad, por sí sola,
tomar a su cargo la inspira
ción y animación de toda la
obra...» (Vida de comunidad,
póg. 31).
Para lograr uno posible
desmasificación en los centros
docentes cristianos será pre
ciso:
a) Proporción entre núme
ro y preparación pastoral de
los educadores cristianos y el
resto de personas y alumnos
que integran la comunidad
educativa del centro. La co
munidad religiosa no puede
renunciar a ser FERMENTO
evangelizador en la escuela
cristiana, tanto más, si ésta se
presenta como estructura de
una Congregación o Dióce
sis... (cfr. CGE de Salesianos,
doc., 381);
b) La preparación de se
glares cristianos y padres de
alumnos como educadores de
la fe, de grupos... Esto exige
que los religiosos tomen como
una de sus principales tareas
la formación de estos segla
res, la escuela de catequistas,
la escuela de padres, etc.;
c) Sólo así se podrá reali
zar una acción educativo-pastoral que implique actitudes
y ocfüodones de acercamien
to personal, encuentro, com
prensión y diálogo... (cfr. CGE
de Salesianos, doc., 361, 362,
364, 365).
CION ü ESCUELA CRISTIANA
•
LA
RECONCILIACION
EN
LA IGLESIA
Y EN
LA SOCIEDAD
ESPAÑOLA
I.
UNA LLAMADA
DEL AÑO SANTO
El Papa Pablo VI —comienzan
los obispos— nos llama con urgen
cia a la reconciliación. Todos so
mos pecadores y necesitamos re
conciliamos. «Basta con dirigir los
ojos alrededor nuestro para com
probarlo. Injusticias, egoísmos, vio
lencias, enfrentamientos y conflic
tos de todas clases, y hasta ideo
logías que socavan las bases mis
mas de la convivencia fraterna sa
cuden la sociedad que nos rodea
en un momento además decisivo
para nuestro país. Y en el seno
Carta pastoral colectiva
del Episcopado Español
El documento, publicado
en el décimo aniversario
de la clausura del Conci
lio Vaticano II, trata de se
cundar la llamada de Pa
blo VI, invitando a la re
conciliación con motivo
del Año Santo.
Ofrecemos un extracto de
este importante documen
to. Más que a una ojeada
somera, invitamos a nues
tros lectores a una lectu
ra del texto completo y,
sobre todo, a una refle
xión sobre el mismo.
mismo de la Iglesia, no sólo reper flictos que parecían irreductibles,
cuten tales sacudidas, sino que bro cuando una de las partes, o am
tan aquí y allá otras tensiones, su bas a la vez, quieren sinceramen
fre detrimento la comunión eclesial te reconciliarse y se ponen a ello
y es puesta a dura prueba la uni con empeño y humildad».
dad en la fe y en el amor».
Es una tarea difícil, continúan
II. EL DESIGNIO DE DIOS
los obispos, porque la vida del
hombre y de las colectividades hu
• Sólo Jesucristo ofrece la es
manas lleva siempre en sus entra peranza cierta de una plena frater
ñas géryienes de división. «Pero, nidad y las posibilidades de reali
por ello mismo, nuestra responsa zarla, aunque parcialmente, en la
bilidad de cristianos es mayor. La tierra.
dificultad estimula el esfuerzo y
• La apertura fraterna a los
alienta la esperanza. La historia y
la experiencia acreditan que es po demás nada quita a la propia añrsible superar antagonistas y con « mación ni a la identidad de las
El documento comprende cinco partes y cuarenta y dos
párrafos numerados. Las principales ideas del documento
son las siguientes:
• No es posible desconocer la existencia de grupos que fre
nan la libertad, oponiéndose a la evolución poUtica y a los cam
bios sociales.
personas, grupos o pueblos. Por el
contrario, la diversidad descubre
las riquezas del ser humano y re
fleja la inagotable grandeza de
Dios que no puede encerrarse en
ninguna realización concreta, per
sonal y colectiva.
• Y, sin embargo, es explicable
que en la búsqueda permanente de
una convivencia más fraterna sur
jan tensiones inevitables y dolorosas.
• No es solución la renuncia indiscriminada a los propios de
rechos, peculiaridades, libertades y opciones legítimas.
• Los trabajadores han de hacer valer eficazmente sus dere
chos y participar, con plena responsabilidad y sin temor a repre
salias, en la defensa de sus intereses y justas aspiraciones.
• Hay que superar los efectos nocivos de la contienda civil
que dividió entonces a los ciudadanos en vencedores y vencidos,
y que todavía constituyen un obstáculo serio para una plena re
conciliación.
• Es necesario lograr un reconocimiento más efectivo de to
dos los derechos de las personas y de los grupos sociales, dentro
de los límites del justo orden público y del bien común.
• Del pecado provienen el des
equilibrio ético y afectivo que re
trasa o impide la convivencia.
• Se hace necesario urgir la oportuna adaptación de las nor
mas legales al avance progresivo de la conciencia cívico-social
del país.
• En el seno de la Iglesia en
cuentran expresión las más pro
fundas aspiraciones de los hom
bres a la fraternidad.
• Consideramos que se garanticen eficazmente los derechos
de reunión, expresión y asociación.
• Se le exige a la Iglesia cono
cer bien las realidades humanas en
las que vive inmersa.
• La Iglesia es signo y sacra
mento de la reconciliación en Cris
to y descubre a los hombres la
perfecta comunión a la que están
destinados.
III.
LA REALIDAD
PRESENTE
La vida individual y colectica
del hombre se desenvuelve en per
manente tensión entre el ideal y
la realidad, entre las metas a que
nos conduce el designio divino y
los hechos históricos.
• Nuestra mirada a la sociedad
en que vivimos: tSe insiste cada
vez más en el valor de la dignidad
humana y en los defedios inalie
nables que de ella se derivan. La
igualdad y la fraternidad humanas.
• La actitud crítica ante la realidad social o ante los proyec
tos y actuaciones del Gobierno no debe interpretarse como postu
ra de rechazo o enemistad.
• Hay que insistir en la necesidad de revisar la legislación
actual sobre conflictos laborales colectivos, de modo que se ase
gure a ios trabajadores la defensa de sus propios derechos.
• Cooperan positivamente a la reconciliación en la Iglesia
quienes a c a ta n el legitimo y necesario pluralismo teológico, evi
tando el peligro de aprisionar indebidamente la realidad de la fe
en una determinada expresión de escuela.
• Quienes quieran trabajar por la reconciliación en la Iglesia,
reflexionen sobre las consecuencias que una crítica poco carita
tiva, y en ocasiones injusta, de la institución eclesial puede aca
rrear.
• El Espíritu de Dios opera también en quienes buscan for
mas más puras de vida evangélica para la Iglesia y actúa en quie
nes, con imaginación creadora, alumbran modos de organización
más ágiles y adaptados a la sensibilidad de nuestro tiempo.
• Esperamos hacemos oír como voz amiga y bienintenciona
da por todos los dirigentes y por todos los ciudadanos de nuestro
país. La Iglesia vive ios afanes del pueblo español y le desea un
porvenir digno y solidario.
tenga de toda actuación directa en
este campo. Mas no es raro que,
desde una u otra posición política,
se trate de utilizarla en beneficio
de las propias posiciones o se la
acusa de abstencionismo evasivo.
• En la Iglesia de hoy también
se dan manifestaciones de progre
so hacia una mayor comunidad in
terna. Pero hay quienes separan y
oponen entre sí conflictivamente
el elemento carismático y ei insti
tucional.
• Hay un gran florecimiento
de comunidades cristianas q u e
buscan ser fieles al Evangelio vi
viendo más intensamente su com
promiso cristiano. P e r o se dan
otros grupos que introducen refor
mas al margen o contrarias a las
directrices conciliares. Hay otros
sectores que impiden la renova
ción conciliar resistiéndose a re
formas y directrices autorizada
mente señaladas por la Iglesia.
ONCILIAqiON
LY
LA^VPCIEDAD
españo la
• Se ha progresado en la co
munión entre las diversas confe
siones cristianas en orden a la uni
dad querida por Cristo. Pero tam
bién se dan rupturas e incompren
siones...
• Se pide a la Jerarquía espí
ritu de diálogo: y se recaba un ma
yor espacio para la opinión crítica
en el interior de la Iglesia. Pero
hay quienes prácticamente niegan
al que ejerce la autoridad en nom
bre de Dios el derecho y el deber
de tomar decisiones para s alvaguardar eficazmente la unión eclesial...
IV.
• Pero, al mismo tiempo, la
dignidad humana sufre muchos
ataques. Progresa el afán de ver
dad; s i n embargo, los avances
científicos y técnicos se utilizan a
veces para manipularla.
• Se multiplican los proyectos
comunitarios más allá de toda dis
criminación y elitismo, y la defen
sa del patrimonio socio-cultural de
las minorías étnicas dentro del or
denamiento político. Pero hay quie
nes, contra toda justicia, reprimen
la vitalidad y el desarrollo de ta
les minorías étnicas. Otros, en fin,
elevan a la categoría de principio
único, el conflicto o la eliminación
del adversario.
• Se trabaja con ahínco por la
libertad y participación de los ciu
dadanos, pero ciertos grupos le
frenan.
• Los hombres de hoy son más
sensibles que en otras épocas el
propio compromiso político y a
que la Iglesia jerárquica se abs-
el bien común de la sociedad en
tendido como promoción de las
personas y de las colectividades,
son proclamados como criterios bá
sicos de gobierno.
CAMINOS DE
RECONCILIACION
«La reconciliación presupone que
cada uno reconozca las riquezas de
los demás.
• Quien se olvida de Dios y
vive de espaldas a él, se olvida del
prójimo.
• La institución familiar exige
de los esposos y de los hijos el
esfuerzo de comprensión mutua.
La crítica de los jóvenes a la so
ciedad actual debe constituir un
estímulo. Es preciso que los traba
jadores puedan hacer valer eficaz
mente sus derechos.
• Yerran pues en el camino de
la reconciliación quienes aceptan
pasivamente su modo de ser sin
plantearse siquiera la conversión
interior y la reforma de vida para
lograr la armom'a personal, el en
cuentro con Dios y la apertura al
prójimo.
amplio d d derecho a unirse y ac
tuar libremente. Hay que lograr un
reconocimiento más efectivo de to
dos los derechos de las personas
y de los grupos. Consideramos
obligado que se garanticen eficaz
mente los derechos de reunión, ex
presión y asociación.
Para esta reconciliación se re
quiere:
• Por otra parte, la verdadera
reconciliación entre los diversos
sectores socioeconómicos y las re
giones de nuestro país exige ma
yor justicia social en el tratamien
to de los problemas de las áreas
deprimidas, especialmente del cam
po, y en la atención de las mi
graciones, tanto hacia el exterior
como en el interior.
a) La conversión personal. La
reconciliación con D i o s y con
nuestros hermanos implica u n a
verdadera conversión interior.
b) L a s re la c io n e s humanas:
principalmente en la vida familiar,
la juventud y el mundo laboral.
•
Si la sociedad española quie
re caminar hacia una reconcilia
ción afectiva, es preciso que los
trabajadores puedan hacer valer
eficazmente sus derechos y parti
cipar, con plena responsabilidad y
sin temor a represalias, en la de
fensa de sus intereses y justas as
piraciones, tanto en la empresa co
mo en la ordenación de la vida
económica nacional. Y para ello es
necesario avanzar hacia un más
amplio reconocimiento jurídico de
su derecho a unirse y a actuar li
bremente en asociaciones auténti
camente representativas.
c) La concordia política.—La
verdadera reconciliación en la con
vivencia cívico-política supone el
espíritu de mutua aceptación y vo
luntad sincera de participar acti
vamente en la tarea común.
• En nuestra patria, el esfuer
zo progresivo por la creación de
estructuras e instituciones políti
cas adecuadas ha de estar soste
nido por la voluntad de superar
los efectos nocivos de la contien
da civil, que dividió entonces a
los ciudadanos en vMicedores y
vencidos, y que todavía constitu
yen obstáculo serio para una lime
ña reconciliación entre hermanos.
• Es necesario avanzar hacía
un reconocimiento jurídico más
Reconciliación es partir y compartir
el pan como una señal de nuestra
entrega persortal. Por eso, la Euca
ristía es el encuentro de los hermamartos en la misma mesa.
•
Para que haya reconciliación
ha de haber justicia en el ámbito
de la educación y de la informa
ción, en la organización sanitaria,
en la seguridad social, en la aten
ción a las clases pasivas y en cual
quier actividad supeditada al bien
común.
• El valor de la crítica.—La
actitud crítica ante la realidad so
cial o ante los proyectos y actua
ciones de gobierno no debe inter
pretarse en principio como postu
ra de rechazo o de enemistad.
• Asumir los conflictos.—^Tam
bién los intereses enfrentados, las
tensiones y los mismos conflictos
han de encontrar un adecuado tra
tamiento legal que asegure la li
bertad de las partes afectadas, im
pida los abusos y salvaguarde los
intereses superiores del bien co
mún.
• La reconciliación dentro de
la Iglesia— Somos conscientes de
que las divergencias y conflictos
que padecen los cristianos en sus
relaciones terrenas repercuten en
la comimidad eclesíal del mismo
modo que las divergencias entre
grupos o entre los mismos pasto
res tienen su repercusión en la so
ciedad civil.
• Los cristianos deben recono
cer a la Iglesia el derecho a ilu
minar las realidades temporales.
• No se puede invocar el plu
ralismo para tomar posiciones
contra el magisterio.
• En una iglesia reconciliada
debe haber lugar a una crítica se
rena y reflexiva. Los pastores han
de ser libres para trascender las
opciones de los individuos.
V.
POR EL BIEN
DE LA IGLESIA
Y DEL PAIS
Terminan los obispos exhortan
do a la reconciliación y unidad:
cQue nuestras variantes persona
les y pastorales enriquezcan y
nuncan turben al pueblo de Dios.
Que la fraternidad jerárquica esti
mule la fraternidad del clero y del
laicado. La Iglesia vive los afanes
del pueblo español y le desea un
porvenir digno y solidario».
Abril, 1975
ALAS
UNA HISTORIA SENCILLA
Nljoll y NIgenti tienen nombre de
nido: "Nido gozoso" y "nido gen
til” . Se trata de dos obras en la
ciudad de Tournai (Bélgica) que
acogen a 93 niños abandonados por
su familia, o sencillamente sin fa
milia. Alii han encontrado el calor
necesario para la vida, y en ese
clima empiezan a echar las alas...
Se trata de una historia sencilla,
que gira alrededor de la figura de
una joven directora de una escuela
maternal. "Jante Sophie" la llaman
con cariño: "Tia Sofía". Ahora es
Voluntarla de Don Bosco. La histo
ria comenzó en la ciudad de Mons
hará unos doce años. "Tía Sofía",
en una corazonada sólo explicable
a la luz del Evangelio, alquiló una
casa modesta, la bautizó con el
nombre de Nljoll y en ella recogió
a los primeros "pichoncitos sin alas
y sin nido".
Nljoll tiene puertas y ventanas
— explica Tía Sofía— . Por la puerta
sólo entran los pequeños con la fi
cha del "Juez de la Juventud". Por
las ventanas entran también los que
sólo llevan la firma del recibo de
la miseria o imposibilidad de sus
padres. Imposibilidad y miseria no
reconocidas oficialmente por las au
toridades, pero que no dejan de ser
una realidad desoladora.
Claro que, los que entran por la
puerta tienen derecho a una ayuda
oficial. Los pajaritos que llegan por
la ventana sólo pueden aspirar al
arrullo de “Tía Sofía..."
MORALMENTE
ABANDONADOS
¿Quiénes son estos pajarlllos? La
sociología moderna los clasifica con
la triste denominación de "moral
mente abandonados", y declara que
8
"constituyen uno de los mayores
problemas de nuestra época".
¿Quiénes son, pues?
Aquí está Jacques. Es de los que
entraron por la ventana. Lo trajo un
señor, envuelto en un mantel, como
si se tratara de un objeto de rega
lo. Es muy chiquito, y su madre es
tá en la cárcel. Dicen que era una
vagabunda. El caso es que de nin
guna manera podía alimentar y edu
car a ios ocho hijos que trajo a
este mundo.
Jacques ha tenido la suerte de
encontrar en Nljoll a un hermanito
y a una hermanita. Los tres forman
parte de otra gran familia que aho
ra es la suya.
Otro día llegan a Nljoll tres hermanitas. La edad de las tres suman
11 años. Entre las tres pesan tam
bién 25 kilos. Se necesitarán unos
pocos meses para rodearlas de una
poquita de cerne. lAh! también hará
falta una buena dosis de ternura pa
ra que se den cuenta de que la vi
da es hermosa y de que vale la
pena luchar para sobrevivir...
Claro, en poco tiempo, el nido
resultó pequeño por la abundancia
de los pajaritos. Había que ir en
busca de otro.
Muy cerca de Journal, las mon
jas del convento de Kain le ofrecen
a “Tía Sofía” unas naves. Total, el
convento está casi vacio. Más que
un alquiler, es un regalo porque
10 francos mensuales son una gan
ga. Además, el convento tiene la
ventaja de disponer una puerta muy
ancha y muchas ventanas... Y, na
turalmente los pajarlllos fueron cre
ciendo, creciendo, hasta llenar eí
nuevo nido.
UNA VENTANA
SIEMPRE ABIERTA
Pero un día de 1966 llegan los
inflexibles miembros de la A S B L.
Las autoridades han decidido con
trolar el asunto y aplicar la ley: El
número de niños no debía pasar de
48, y siempre salían 50. ¿De dónde
venían esos dos que sobraban?
“A lo mejor dejamos una venta
na abierta — advierte “Tía Sofía”— ,
y se han colado...” [Válgame Dios!
De ahora en adelante, "Tía Sofía"
y demás empleadas deberán poner
más cuidado en que todas las ven
tanas queden bien cerradas. Pero,
mientras tanto, como dice el Evan
gelio, "bendito el que viene en
nombre del Señor...”
Lo cierto es que todo ha queda
do corto. Hay que construir. Mas
para construir h a y que comprar
nuevos terrenos. Y para comprar
hay que tener dinero. “Tía Sofía”
no tiene ningún tesoro escondido,
ni un tío en América. Y los bancos,
ya se sabe, sólo prestan dinero a
los que ya son ricos...
Pero cuando no falta voluntad y
hay imaginación, siempre se en
cuentra algún medio para hacer di
nero: se venden cajas de cerillas,
se invita al famoso cantante Adamo
y acepta cantar por los niños de
Nljoll, se piden las migajas que so
bran en la mesa de tantos buenos
amigos... Ante este espíritu de Ini
ciativa, hasta los bancos abren sus
cajas fuertes... Finalmente se pue
den adquirir unos terrenos conti
guos y construir un nuevo pabellón.
Ahora quedan las deudas. Pero
en 1970 los pajarlllos de Nljoll son
70. Muchos han entrado por la puer
ta; pero en gran parte se colaron
por la ventana. Son alegres y sim
páticos. Comen a boca llena. Son
pequeños, graciosos y caprichosos,
como todos los niños del mundo.
Al lado de “Tía Sofía” colabora
un equipo de 12 educadores. Tienen
sus dificultades e incomprensiones.
Tienen sus momentos de cansancio,
de mal humor, de desaliento. Pero
no acaban por encerrarse en sí mis
mas, entre otras cosas, porque no
tienen tiempo...
Unas pocas Voluntarías de
Don Bosco llevan en Bélgica
una “ Casa de Familia” , en la
que recogen a niños moral
mente abandonados. E s t a
obra ha sido acogida con
gran simpatía por todos los
amigos de la Familia Salesiana y se han hecho solidarios
con ella, ayudándola con to
dos los medios posibles...
MAS DE UNO
ECHA A VOLAR
En 1972 se construye una ala
nueva para 32 niños más. En 1974
llegan otra vez los implacables se
ñores de la ASBL. Cuentan los in
quilinos y arrugan el entrecejo: ¡Hay
18 chiquillos más de la cuenta!
Nuevamente e I corazón puede
más que la ley. “Tía Sofía” adquie
re otro caserón viejo que hay que
hacerlo nuevo. ¡Otra llamada de ur
gencia a las personas generosas
que nunca faltan! Y se ensancha el
nido.
Hay un proverbio francés que pa
rece inventado p o r “Tía Sofía":
“ PeUt á petit, l’oíseau faít son nid'’
(Poco a poco hace el pájaro su ni
do). Acuden a echarle una mano los
Socios Constructores de Austria, al
gunos religiosos con sus alumnos,
los Scout, los Salesianos y sus es
tudiantes. Todos trabajan sin tregua
a las órdenes det párroco del pue
blo. Así se levanta el segundo nido:
Nigenti.
Para septiembre, los 18 niños que
desbordaban la cuenta se traslada
ban a su nueyo nido. Ningún regla
mento podía molestarles ya.
Los educadores son ahora 18. Los
puestos claves están en manos de
las Voluntarias de Don Bosco. To
das están totalmente entregadas al
amor de estos pequeños.
Los n i ñ o s también crecen en
edad y en estatura. Más de uno
echa las alas para emprender el
vuelo y dejar e! nido. 0 más peque
ño, apenas cuenta once meses y
está aprendiendo a dar los primeros
pasos de la vida. El mayor tiene ya
16 años y también está aprendien
do a dar sus primeros pasos en el
mundo del trabajo.
ENZO BLANCO
MUNICH
[Alemania Occ.):
¿Qué nos
sugiere
esta estatúe
de Don Bosco?
Colocada
en la entrada
del Saieslanum
de M unidi está
en la actitud
de dar
la bienvenida
a todos
los que llegan.
Se trata de
un solo bloque
de cemento
de tres metros.
Pesa
siete toneladas.
Es obra
del célebre
escultor
Germán
Leltherer
de Bamberg.
0 Rector Mayor
ante la
Puerta Santa
del Vaticano.
Junto con
^ Consejo
General
ha realizado
las visitas
a las Basílicas
romanas
para alcanzar
el Jubileo.
••
-•
- - _
.
-
, ' . ' j - • • í'7 "
—
NUEVO
INSPECTOR
PROVINCIAL
DE FILIPINAS
W.v.
Entrevista a
D O N JO SE
C AR B O N E LL
Don José Carbonell, hace apenas cinco años inspector de Valencia, acaba de pasar por nuestra re
dacción. Traía la noticia fresca y nos la ha comunicado con el temblor de quien descubre su propio secreto.
«He sido nombrado Inspector Provincial de Filipinas». He hablado con él largamente y he intentado bucear
un poco en sus sentimientos de alegría y nostalgia a la vez. Nostalgia, por dejar España y, sobre todo, esa
tierra aragonesa de la Almunia, donde se encontraba actualmente como director de la Residencia Universi
taria. Pero alegría inmensa. Ese gozo del que se entrega con generosidad y de que emplea su vida en
una causa noble y grande. Pero hablemos con él en alta voz, para satisfacción de nuestros lectores:
—Don José, ¿cómo ha sido este
nombramiento?
—Algo inesperado. Hace unos
días, me llamó el Rector Mayor
por teléfono, y me comunicó la
noticia: «Inspector de... Filipinas».
«Ya has tenido un largo descanso
de cinco años desde que fuiste ins
pector de Valencia —me dijo—.
Ahora tienes que continuar hacien
do este servicio a la Congrega
ción...»
— usted, ¿qué le respondió a
don Ricceri?
—¿Y qué podía responderle? Las
primeras palabras que me vinieron
a los labios fueron éstas: «Aquí
me tiene; estoy dispuesto». Y él
me dijo que adelante, al mismo
tiempo que me ofrecía un estu
pendo campo de trabajo.
—Don José usted tiene experien
cia de lo que es ser inspector, ¿no
le asusta otra nueva etapa?
10
—Ciertamente que hoy exige
mas sacrificios que nunca. El car
go de inspector es una cruz y no
en el sentido de condecoración. No
obstante, voy a Filipinas con en
tusiasmo. Allí encontraré a bas
tantes salesianos conocidos y, so
bre todo, como me ha dicho él
Rector Mayor, encontraré un am
biente óptimo. Filipinas es una
Inspectoría joven y juvenil. Hay un
despertar de vocaciones. Hay mu
chos aspirantes, coadjutores, teó
logos. Ahora mismo tengo una
gran ilusión de ir a aquellas dul
ces islas...
—Dulces islas —así las llama
don José Luis Carrefto—. Pero, no
creo que vaya a ser todo un cara
melo, porque tendrá sus proble
mas...
—Naturalmente. Filipinas es un
país típico del Tercer Mundo. En
contraré los problemas de unas
clases sociales auténticamente po
bres, a las que están dedicados
mis hermanos los Salesianos. Re
cuerdo ahora la obra conmovedora
de Tondo, adonde fue Pablo VI en
ia visita que hizo a Manila...
Los otros, los problemas políti
cos, los tendré como en todas par
tes del Tercer Mundo.
—¿Lleva muchos planes?
—Como no conozco todavía el
mundo concreto al que me envían,
sólo he pensado unos planes fun
damentales de trabajo;
1.
—Trabajaré principalmente por
fomentar la acción salesiana entre
las clases más humildes y popu
lares.
2.
—Me entregaré por completo a
los hermanos salesianos.
3.—Promocionaré el Capítulo
General Especial. En breves pala-
bras, podría resumir este plan;
unión, observancia, renovación.
—¿Ha recibido cartas de aque
llas lejanas tierras?
—Muchas. Todas me expresan
los mejores sentimientos de bien
venida. Me invitan a que vaya sin
miedo. Y me dicen que tienen un
excelente espíritu de familia en el
que encajaré de maravilla.
—Decía que en Filipinas se da
un gran despertar de vocaciones.
¿A qué cree usted que se debe?
—Creo que Filipinas es la nación
oriental con mayor número de ca
tólicos. País hispánico, tiene la
base de una familia profundamen
te cristiana, de modo que no es
extraño que de las familias cris
tianas salgan vocaciones en abun
dancia. Pero, según me han co
municado, de los colegios salesianos salen excelentes muchachos
que van directamente al novicia
do. Hay un aspirantado repleto de
chicos seminaristas, una casa de
formación para coadjutores y bas
tantes teólogos que hacen sus es
tudios en la Universidad de Santo
Tomás de Manila. Otra de las con
signas que llevo es la de trabajar
por las vocaciones del país. Fili
pinas puede dar misioneros para
Oriente.
—¿Cuándo es la partida?
—Debería estar allí desde el 18
de mayo, fecha en que tendría
que coger el relevo de mi prede
cesor. Sin embargo, espero órde
nes de don Williams, el Superior
Regional. Quizás a mediados de
junio estaré tomando el avión que
me lleve en su vuelo sobre la mi
tad del planeta.
—Eso es, que allí será casi núes
tro antípoda. ¿No le asustan estus
lejanías?
—Naturalmente. Y más cuando
uno se aleja de tantas personas
queridas. Recuerdo con infinito ca
riño a todas las personas que han
colaborado conmigo y con quienes
he convivido. De un modo especial
quedo muy agradecido a las que
me ayudaron cuando era inspec
tor de Valencia, a los Coperadores,
bienhechores y amigos que me han
apoyado en todo momento: en Bar
celona, en Godelleta, en Valencia,
en La Almunia-Zaragoza...
Don José queda pensativo. Desea
expresar algo m u y importante.
Creo que es lo que más impresio
nará a las familias españolas...
—¿Tiene madre? Le pregunto.
Don José sonrie. Piensa en Alcoy. Se acuerda quizás del mundo
de su infancia, de los orígenes de
su vocación salesiana. Y rompe a
hablar.
—Sí, tengo madre. Sin duda, es
la que más aliento me ha dado en
mi vida sacerdotal y salesiana. En
terada de la noticia, me dijo al
momento: «Hijo mío, acepta con
tento la decisión de los Superio
res. Esto es señal de que amas
tu vocación. ¡Adelante!»
Decía René Bazin que hay m a
dres que tienen vocación sacerdo
tal. Desde Alcoy, una mujer fuer
te, empujará el trabajo apostólico
de su hijo en las lejanas tierras
de Filipinas.
—También tengo un hermano
con nueve hijos y una hermana
con cuatro. Esta acaba de cele
brar sus bodas de plata matrimo
niales.
—Entonces también le empujan
los sobrinos, ¿no?
—Todo el mundo que dejo atrás
es un buen estímulo.
—Decía que Filipinas es una
Inspectoría joven. Habrá estudiado
y se habrá aprendido bien las
obras que hay allí...
—Pues sí, es una inspectoría
que apenas cuenta con veinte años
de vida. Hay como 12 obras y
una infinidad de peticiones que
hay que rechazar por falta de per
sonal. Algunas obras son de alto
nivel, como las de Mandaluyonq
y Makiti, dos escuelas con nivel
universitario.
Hay una Ciudad de los Mucha
chos en Cebú y la simpática obra
de Tondo, que fue visitada por el
Papa. Pero la mayoría de las obras
está en función de las clases po
pulares, de los obreros y de los
pobres. Hay que destacar las pa
rroquias. Casi todas las obras son
parroquias. También son impor
tantes el aspirantado y el novicia
do.
—Encontrará por allí el espíritu
de don José Luis Carreño...
— ¡Ya lo creo! He hablado mu
cho con él antes de la partida. El
fue el creador de los seminarios
salesianos y el que infundió el es
píritu de familia de toda la l.ispectoría que ahora me espera.
—Pues bien, don José, le desea
mos un alegre, un fecundo aposto
lado en aquellas tierras con tanto
sabor español, aunque ahora ten
ga que entendérselas en inglés y
en Tagalo...
Don José sueña en aquellas 7.000
islas. Un continente roto en 7.000
pedazos. Algo así como un rompe
cabezas que hay que componer y
ordenar. Don José piensa en los
cuarenta millones de filipinos.
Piensa en muchas horas de calor,
de sudor y de trabajo. Don José
sueña en esa aventura que tiene
al alcance de la mano. Sueña en
una realidad, en una entrega sin
medida, convencido como el per
sonaje de Bernanos que decía; «Lo
que en el hombre tiene peso es el
sueño».
RAFAEL ALFARO
Don Jo sé C a rb o n e li co n u n o s jó v e n e s U n iv e rs ita rio s en ia A lm u n ia .
EXBTO.UÍGO
«¿Cómo podría quejarme de que el crítico regale media hora
a un libro mío si me consta que tiene que leerse más de diez
cada veinticuatro horas»?... Esta airosa salida es de Manuel
Halcón, ampliamente despellejado y viviseccionado por RuizCopete en su libro de conversaciones con el novelista y aca
démico lebrijano.
Dios nos libre de semejante tormento... Y nadie crea que se
trata de una ligera broma. Yo he visto a un amigo que. mien
tras atendía al plato y correspondía a las cucamonas de sus
hijos más pequeños. leía y subrayaba un libro recién enviado
por su autor para que la «¡concienzuda» crítica fuese publicada
cuanto antes. EXISTO. LUEGO PIENSO es un tomito salesiano
del que pretendo decir algo con sinceridad, después de haber
apurado alegremente todas sus páginas. Aquí no ha habido pri
sa sino regodeo a conciencia.
Uno se encuentra con equivoca
ciones morrocotudas, a veces hijas
de encopetados académicos. Como
por ejemplo, aquelia “ Misa en Re
Sostenido Mayor". ¿Dónde estará
esa tonaildad en el teclado?... Co
mo por ejemplo, aquel chotis de
la "Pobre chica la que tiene que
servir". ¿Tiene una sola corchea
con aire de chotis este número cas
tizo de “ La Gran Vía"? Como por
ejemplo, aquel "curriculum diae”
en el que el famoso escritor pasó
de la quinta declinación a la pri
mera como quien le da vuelta a
una camisa.
Pero este EXISTO, LUEGO PIEN
SO de don Antonio Martínez Azco
na, salesiano (Ediciones Don Sos
co, Barcelona) es retruécano a pos
ta y no gazapo imprevisto o trai
cionero...
Renato Descartes, en elegante
francés y en soledad fecunda, se
puso a dudar de todo... Duda co
mo método filosófico para llegar a
macizas conclusiones. Muy breve
es su Discurso del Método. Más
breve la famosa formulación carte
siana a prueba de ataques escépti
cos: "Pienso, luego existo".
Martínez Azcona, cumplidos casi
exactamente los anos con los que
murió Descartes, abandona su la
boratorio de Ciencias Naturales, sus
problemas de Física y su siilón de
Director ocupado durante más de
quince años, y nos regala su pii-
12
mer libro: EXISTO, LUEGO PIEN
SO.
Sus páginas preñadas de ideas
"claras y distintas” , para seguir la
terminología del gran filósofo de la
Edad Moderna, tienen un tono y una
intención marcadamente salesianos.
Se trata, nada menos, de un libro
de Buenas Noches. El autor gusta
de ensamblar adjetivo y sustantivo
acuñando la palabra compuesta;
buenasrK>che8. Don Bosco, expla
yando el sencillo aunque pedagó
gico invento de su Madre Marga
rita, dirigía unas palabras afectuo
sas, ágiles, graciosas, profundas,
breves generalmente, a sus mucha
chos, antes de dirigirse al des
canso.
La tradición ha seguido vigente
durante un siglo con formidables
resultados. Al autor de este libro,
en la calle, más de un antiguo
alumno le ha parado en seco y le
ha espetado a renglón seguido:
— ¿Y por qué nos dejó usted sin
buenasnoches aquelia vez?...
EXISTO. LUEGO PIENSO es va
riado, profundo, confidencial y ileno de suave humor. Ya la S des
gajada y caprichosa de la portada
nos lo adelanta gráficamente... “ Livre de chevet", libro preferido o de
cabecera. Yo lo he manejado al
gunas noches para rematar su pri
mera lectura subrayada. Pero no
hay inconveniente en paladearlo a
la luz del día, a cualquier hora en
que nuestro espíritu se doblegue a
la caricia de la serena meditación...
He aquí algunos títulos; "La extra
ña conducta de Dios” , “ Los cone
jos veranean en Tarragona” , "El
dolor de las cosas” (aquel "sunt
lacrimae rerum” de Virgilio), "Ope
ración Fuenteovejuna” , "Yo salvé la
vida a una pelota” ..., etc. Hay bue
nasnoches para tres meses, lo que
hace pensar en posibles tomos del
mismo autor con los que el año
quede completo.
De vez en cuando aparece un
dibujillo gracioso, de vez en cuan
do aparece Una página de “Anas
tasias". “Anastasia” no hace rela
ción en este caso a Ingrid Bergman galardonada con un "Oscar"
por su trabajo en la cinta homóni
ma. Recuerda por el contrario a
don Anastasio Crescenzi, educador
italiano, maestro divertido en el ar
te de las buenasnoches. “ Era hom
bre originalísimo en todo. Y tam
bién en el dar las buenasnoches.
En su caso no era el conjunto de
buenasnoches lo que se parecía a
una vidriera, sino cada una de
AKTOMO MARUNEZ AZCONA
ellas. En tres d cuatro minutos, mil
cosas de los tiempos y el día que
daban certeramente aludidas por la
zorrería de aquel viejo inolvidable.
Tiraba cada pedrada a veces... Pe
ro no dolían... Nunca supe ni yo
mismo si “ anastasias” era el tipo
de buenasnoches o las frases que
tan atinadamente combinada. Aun
que para el caso era lo mismo. En
su honor, y a imitación suya — po
bre imitación— he compuesto tam
bién aquí mis “Anastasias” .
Y después de habernos enterado
por el propio autor de “ Existo, lue
go pienso” de lo que persiguen las
“Anastasias” podemos citar alguna,
al azar. Van a caballo entre las gre
guerías c!e Gómez de la Serna y
los “ minutos de filosofía” de algu
nos almanaques de pared antiguos.
— "El hombre prudente cuida las
palabras. El caritativo también las
sonrisas.
— El cielo también se refleja en
los charcos.
— Abba en arameo es diminuti
vo. Jesucristo trataba cariñosamen
te a su Padre Eterno: Abba, Padrecito...
— En ocasiones somos tan ma
los que, para poder pensar mal del
prójimo, le atribuimos lo que noso
tros quisiéramos que hiciera. Así,
faltamos gravemente a la caridad
y encima nos equivocamos.
— Quizás no sea casual que la
casa donde Decartes discurrió pro
lijamente sobre la razón sea hoy
manicomio” .
Este libro firmado por Ripoll y
dedicado a los antiguos alumnos del
autor, se emparenta por vía de sanguinidad cercana con aquel “ Rocío
de la mañana” de Raúl Entraigas o
con mi humilde "Palabras ai oído” .
Páginas todas ellas que caen de
maravilla en poder de quien tiene
que dar una diaria consigna campamental, dirigir unas palabras bre
ves y enjundiosas a un público ju
venil o echar mano de una anécdo
ta aleccionadora y sabrosa.
Pocos son los hijos de Don Sos
co entregados a este quehacer di
fícil y hermoso de la prensa educa
tiva aunque la tradición salesiana
en este campo — revistas, filminas,
obras teatrales, colecciones de li
bros formativos— cuenta con es
pléndidas realidades, a veces pre
miadas justa y oficialmente.
Aplauso cerrado para las buenas
noches del padre Martínez Azcona,
nuevo director de la revista “Tibida*
bo” — aunque con formación univer
sitaria en el campo científico— y
pluríempleísta con éxito en los di
versos frentes de apostolado en
medio de tos jóvenes.
HOBIS SE jNEffSTU
W
71ETWSM
A titulo de información, presentamos a todos los Hermanos de Es
paña la carta que el Director de nuestro gran Aspirantado de Thu Duc
ha enviado a don Modesto Bellido.
Amadísimo don Modesto:
Hoy, 30 de marzo, Pascua de Resurrección, hemos celebrado fervo
rosamente la Misa en la que han participado nuestros centenares de As
pirantes, ios Novicios y los teólogos con todo su personal. Exteriormente
serenos y bien atendidos, pero sumamente preocupados por las circuns
tancias que atraviesa este país.
Ya en la fiesta de San José comenzó nuestra santa Pasión Salesiana.
El 16 de marzo se dirigieron a Dalat, a unos 200 kilómetros de Thu
Duc, nuestros Postulantes para pasar unos días de convivencia fraterna
con los novicios y estudiantes de filosofía. En aquellos días la situación
cambió repentinamente. Todas las carreteras de regreso fueron bloquea
das por los comunistas quedando en grave peligro todos los habitantes
de la región de Dalat.
El padre Hao, que había ido al frente de los Postulantes, escapó in
mediatamente con 40 de ellos en dirección al mar, consiguiendo subir a
unas cuantas barcas de pescadores. Tras un azaroso viaje de 20 horas,
erizado de peligros, lograron llegar a Vtm Tec, puerto de Saigón. Du
rante el camino recogieron varias cadáveres de otros prófugos que se
ahogaron en el mar.
21 de marzo. Don Maximino (Delegado de los Superiores para el
Vietnam) y el padre Luvisotto logran llegar con 280 aspirantes pequeños
asimismo por vía marítima entre no pequeños riesgos y peligros. Poste
riormente fueron llegando grupos aislados de novicios, estudiantes de
filosofía y de teología tras sufrir no pocas peripecias.
Los hemos acogido a todos con verdadera fraternidad proveyéndolos
de todo cuanto hemos podido darles ya que han llegado sólo con lo
puesto, debiendo abandonar en su precipitada huida todas sus pertenen
cias personales.
No puede, pues, imaginarse cómo hemos acogido ayer el cheque de
1.800 dólares que usted nos envió; ha sido verdaderamente providencial.
Nuestro Ecónomo, el padre Luvisotto, compró inmediatamente 80 sacos
de arroz y otras muchas cosas indispensables. Aún tenemos necesidad
de muchas más, pero confiamos en la Divina Providencia que nunca
nos ha faltado.
Varias Congregaciones han mandado los Aspirantes a sus casas; otras,
que tienen pocos, los han enviado con los nuestros.
Ahora se presenta otro problema mucho más grave: todos los jóve
nes, a partir de los diecisiete años, sean religiosos o no, quedan movi
lizados. Ya han fijado la fecha de alistamiento a muchos de los nuestros.
Los atenderemos en la medida de nuestras fuerzas para salvar lo salvable.
Creemos que esta situación no puede durar mucho tiempo. Es cierto
que en la actualidad estamos muy apretados e incómodos, pero damos
gracias al Señor y a María Auxiliadora cuando pensamos en el millón
largn de refugiados que han perdido todo y se encuentran ahora en
situación insostenible.
Muchos de nuestros Aspirantes se han quedado huérfanos en estos
últimos días. Otros no tienen noticia de los suyos (que quedaron en
zona comunista), desde hac» meses y años.
Gracias, muchas gracias, don Modesto, extensivas a los numerosos
Bienhediores de España.
Su afmo.
ANDRES MAJCEN
Juan Manuel ESPINOSA, S .D .B .
13
COLAB
«Los colaboradores laicos*
que trabajan en las casas salesianas han sido el tema de
dos encuentros, uno europeo:
El Circulo de la Colonia; y
otro en Córdoba ( Argenti
na).
Es una señal de que en el
ámbito salesiano se está fra
guando una nueva presencia
cada vez más importante,
aunque de hecho ya existie
ra. Hoy adquiere esta nueva
dimensión de actualizar él
proyecto de Don Bosco : ser
virse de los seglares anima
dos de su espíritu.
EL HECHO
Los colaboradores laicos en las
obras salesianas de educación son
cada día más numerosos. Unas
veces, por falta de personal sale
siano; otras, por aumento de tra
bajo. El caso es que estos cola
boradores van ocupando cargos de
responsabilidad en nuestras obras.
«No nos es posible ya desempeñar
nuestra misión sin la colaboración
de las fuerzas laicas», se lee en
más de un documento de varios
capítulos inspectoriales. Y ésto en
varias y variadas regiones del
mundo salesiano.
Y como la presencia de estos
colaboradores es necesaria, es
también necesario que las perso
nas adquieran una verdadera pre
paración para integrarse a la ac
tividad salesiana, para desarrollar
un trabajo comunitario.
Es necesario que lleguen a un
conocimiento de Don Bosco, y de
14
su Congregación, que se impreg
nen de su espíritu y que adquie
ran una preparación específica
para trabajar y educar de acuerdo
con el Sistema Preventivo.
En nuestro Boletín Salesiano de
abril se habló ampliamente de las
Jornadas Pedagógicas llevadas a
cabo en Sanlúcar alrededor de la
fiesta de Don Bosco. Hoy trae
mos otros dos encuentros.
EL ENCUENTRO
DE CORDOBA
El «Encuentro latinoamericano
para colaboradores laicos en las
obras salesianas» tuvo lugar en
Córdoba (Argentina) del 7 al 20
de abril de este año. Se reunieron
40 educadores, 16 salesianos y 24
seglares, provenientes de Argenti
na, Brasil, Paraguay y Uruguay.
Intervinieron también seis inspec
tores salesianos de dichos países,
sumamente interesados en los te
mas y problemas del encuentro.
El ritmo de trabajo era intenso:
siete horas y media diarias, más la
participación litúrgica y las reu
niones plenarias después de la ce
na.
Se hizo una intensa vida de co
munidad, como una especie de lec
ción práctica. Los organizadores
pretendían demostrar: «Lo que
puede ser el espíritu de la Fami
lia Salesiana en acción».
El programa de estudio estuvo
a cargo de Salesianos, una Hija de
María Auxiliadora y algunos se
glares. Se trató sobre el estudio
en el ambiente latinoamericano, la
semblanza del colaborador laico
en la comunidad salesiana y, so
bre todo, de su misión educativa:
pastoral y educativa, dinámica de
sistema preventivo, programación
grupos, etc.
Al final del encuentro, todos pi
dieron la repetición anual o perió
dica de este tipo de iniciativas.
EL CIRCULO
DE COLONIA
El «Kólner Kreis» —Círculo de
Colonia— nació en 1974 por ini
ciativa del superior regional don
Ter Schure y con la colaboración
de varios inspectores de Centro
Europa. Se autodefine como un
«grupo de trabajo interinspectorial», y su objetivo es el de afron
tar y estudiar los problemas que
se originan con motivo de la pre
sencia cada vez mayor de los co
laboradores laicos en las obras sa
lesianas.
De un modo especial trata de re
flexionar sobre la relación entre los
salesianos y los educadores laicos,
de manera que se lleve a cabo un
trabajo comunitario con espíritu
salesiano.
r
ORACION SEGLAR
El Círculo de Colonia se reunió
por primera vez en agosto del 74.
Se llegó a una doble determina
ción: organizar un ideario de
orientaciones operativas y prepa
rar subsidios como impresos y ma
terial de iniciación y formación
permanente para conferencias, jor
nadas de formación, retiros y ejer
cicios espirituales.
En la Familia Salesiana se abre
un horizonte de amplias perspec
tivas. Los Cooperadores Salesianos pueden integrarse a la misión
educativa salesiana, pues tienen el
mismo espíritu de Don Bosco. Es
tas han sido las pretensiones de
Sanlúcar y de Córdoba. En Colo
nia han ido más lejos pues se ha
determinado realizar un curso de
formación por correspondencia.
ANS
Estas iniciativas tanto europeas
como americanas responden a las
orientaciones del Concilio Vatica
no II. Pide el Concilio la colabo
ración y la corresponsabilidad de
los seglares en las tareas educa
tivas y apostólicas, pero al mismo
tiempo hace notar la necesidad de
una adecuada preparación.
SIETE MIL PADRES
DE FAMILIA
CATEQUISTAS
DE SUS HIJOS
El Salesiano holandés, padre
Wim Saris, ha ideado con sus co
laboradores de Amsterdam un nue
vo método de «Catcquesis fami
liar]». Después de las primeras ex
periencias totalmente positivas, lo
han aplicado este año 7.000 fami
lias de Holanda.
El método está presentado en un
cuaderno de 53 páginas, con las
indicaciones para una práctica en
tre padres e hijos. Hasta la fecha,
los resultados han sido extraordi
narios.
La iniciativa creció como la es
puma y necesitaba un centro. Es
to fue causa de no pocas dificul
tades y tensiones, porque apenas
vienen las primeras dificultades
económicas parece que todo se
agrava. Pero la empresa recuerda
algunos casos muy semejantes a
los de la vida de Don Bosco. Cuan
do el santo andaba apurado de di
nero, le llegaba siempre en el úl
timo minuto...
Lo mismo le sucedió al padre
Wim Saris. Cuando se veía en la
mayor tensión ante el problema
del establecimiento de su organi
zación, recibió una llamada tele
fónica: ¡Era nada menos que el
Obispo! Le hablaba de una con
gregación religiosa de hermanas a
las que le sobraba un dinero de
un saldo positivo y se lo ofrecían
para una obra buena. Las herma
nas no le ponían trabas ni condi
ciones. Lo importante es que el
dinero estuviera bien empleado.
La limosna deseaba ser absolu
tamente anónima.
Fue lo sufíciente para dar a la
«Catcquesis Familiar» un empuje
definitivo. Y ya cuenta con un afio
de vida.
La nueva sede, no deja de ser
curioso, se halla situada en el nú
mero 9 de la c^le Beethoven. Y,
naturalmente, la obra catequística
del padre Saris ha sido bautizada
con el nombre de «La Novena de
Beethoven».
ANS
15
MADRID
LA ESCUELA
UNIVERSITARIA
DEL
PROFESORADO
EL CURSILLO
DE FORMACION RELIGIOSA
Me llamó por teléfono Sor Pi
lar, la directora de la Escuela
Universitaria: “Estamos hacien
do en la Escuela un Cursillo de
Formación Religiosa. ¿No con
vendría dar la noticia en el “Bo
letín Salesiano?”
No sólo la noticia, le respon
dí. Hay que presentar esta obra
a la Familia Salesiana, pues la
considero de suma importancia
en nuestra misión de educadores
de la juventud. Ser formadores
de los futuros maestros es como
multiplicar nuestra actividad sa
lesiana.
Y un día de lluvia de ese abril
de las aguas mil, nos dirigimos a
“La Dehesa de la Villa”, donde
funciona la Escuela Universitaria.
Sor Pilar nos hizo atravesar
unos pocos corredores. “Son unos
locales provisionales”, nos advir16
tió. Al fin llegamos al aula don
de estaban los profesores que
asistían al "Cursillo de Forma
ción Religiosa”. Asisten a él pro
fesores que desean obtener el tí
tulo para la enseñanza de la Re
ligión en la segunda etapa de la
Educación General Básica.
Como un alumno más me sen
té junto a uno de los profesores
y unas religiosas. Me fueron ex
plicando:
— El Cursillo está programa
do de acuerdo con el CENIEC y
en colaboración con el Ministerio
de Educación y Ciencia.
— El contenido se divide en
tres sectores: Formación Teoló
gica especializada; Pedagogía Ge
neral de la formación del cristia
no; y Didáctica de la Educación
de la Fe y Prácticas.
— Las solicitudes por parte
de los maestros fueron tan nu
merosas que tuvieron que hacer
se dos grupos de los 110 matricu
lados.
fc r-
— Muchos venimos de pueblos apartados.
— El Cursillo dura del 20 de
enero al 2 de mayo y se realiza
fuera del horario escolar, es de
cir, viernes por la tarde y sába
dos por la mañana.
Una salesiana con Jóvenes de la Escueta
Salesianos y Saiesíanas
de las Inspectorías de
Madrid han unido sus
fuerzas y han fusionado
sus dos escuelas norma
les en la Escuela Univer
sitaria de Formación del
Profesorado de E. G. B.
“ Don Bosco” .
Se trata de un centro uni
versitario salesiano de
gran porvenir, en el que
se formarán ios futuros
profesores de los niños
españoles.
LA ESCUELA
UNIVERSITARIA
Acompañado de la directora y
de unos universitarios, fuimos a
uno de los locutorios. Subimos la
persiana. Por los ventanales se
d»l Profeaorado.
divisaba la Ciudad Universitaria
de Madrid, envuelta entre lluvia
y neblina. En un ambiente reco
gido y en una conversación fa
miliar hablamos de la Escuela, de
su historia, del clima de estudio
y de formación que está creándo
se en estos años en que ha co
menzado.
— La Escuela, en realidad, es
la fusión de la “San Juan Rosco”
de Villaamil y la de “San José”
de Guadalajara, de las Salesianas
y de los Salesianos, rcspeciiva-
Al Curaillo de Fonnación Catequétlca asisten profesores con toda la
barba...
MADRID,
mente. Ambas comenzaron en
1959 y de las que han salido
unos 785 maestros.
— AI aparecer en 1972 el De
creto de transformación de las
Escuelas Normales en Escuelas
Universitarias de Formación del
Profesorado, se fusionaron la de
Guadalajara y la de Madrid y
cuatro Provincias Salesianas se
comprometieron a promoverla:
los Salesianos de León y Ma
drid, y las Hijas de María Auxi
liadora de Madrid y Barcelona.
— En ella se ha puesto ya en
marcha el plan experimental de
Escuelas Universitarias, aprobado
por orden ministerial del 27 de
junio de 1974. Como Escuela
Universitaria, depende de la Uni
versidad Complutense de Ma
drid.
Las d a te s de la Escuela Universitaria son dinámicas y activas.
PLAN DE ESTUDIOS
ACTIVIDADES
Se compone de tres cursos es
colares y los alumnos adquieren
el título de Diplomados, que los
habilita para ejercer la docencia
preescolar y E. G. B., o para el
acceso al segundo ciclo de la Uni
versidad.
— Actualmente hay dos cur
sos, con un total de 50 alumnos.
El próximo año ya habrá los tres
cursos. Sólo en primer año habrá
más del centenar de alumnos.
— El objetivo de la Escuela
es el de promover la formación
integral de los futuros profeso
res, como una vocación de entre
ga cristiana según las líneas de
la pedagogía actual y el Sistema
Preventivo de Don Bosco.
— Otros objetivos son: cola
borar con la Jerarquía para la
formación de profesores de Re
ligión y contribuir al perfeccio
namiento del profesorado en
otras áreas del magisterio.
18
Pregunto a los jóvenes por las
actividades que llevan a cabo y
hablan ordenadamente:
— Comenzamos el curso con
unas jornadas de mentalización.
Por grupos, y en unión del pro
fesorado estudiamos el sentido
de la vocación de maestro.
— Expusimos el modo para
trabajar comunitariamente, me
diante el estudio por grupos,
puestas en común. Así nos co
nocimos. Al cabo de estos días
terminamos con la celebración
eucarística, una convivencia y un
cinefórum.
— Como somos pocos, pode
mos desarrollar una educación
personalizada, utilizando méto
dos activos de participación, in
dividualización y socialización,
con un nivel práctico y en miras
a una preparación para ser pro
fesores de E. G. B.
— Para las actividades extra
escolares estamos divididos en
diversas comisiones: Comisión
Cultural, de Deportes y Monta
ñismo, de Teatro y Cinefórum,
y de Música Folk.
— Hemos tenido funciones de
teatro, conferencias, visitas a ciu
dades y museos, etc. En noviem
bre tuvimos un cursillo de Arbi
tros, en el que participaron 24
alumnos.
— Tenemos convivencias con
ios profesores y los Padres de
Familia.
— Gozamos de libertad para
nuestras reuniones o para tomar
parte en la Eucaristía...
— Sobre todo, creo que he
mos de subrayar las actividades
formativas: Tenemos grupos de
Cooperadores Jóvenes y grupos
de Compromiso cristiano. Un nú
mero crecido de alumnos realiza
una labor apostólica y social en
catcquesis, clases en barrios ne-
:Í--:
LA ESCUELA UNIVERSITARIA
DEL PROFESORADO
Kj
5
.
torman parte de la Junta de los
de la Universidad. De este modo
estamos conectados y vivimos la
problemática de la Universidad.
— Los representantes a nivel
de curso toman parte en las re
uniones del profesorado para re
visar y programar...
— En colaboración con el ICE
de la Universidad Complutense
y bajo la dirección de dos seño
ritas especializadas y de la profe
sora de música, tuvimos un cur
sillo de Expresión Dinámica pa
ra la E. G. B. y con validez ofi
cial.
— En este cursillo participa
ron unos 120 profesores y todos
los alumnos de la Escuela que lo
desearon.
— En febrero y marzo hemos
tenido otro cursillo de Socorris
mo.
cesitados y para adultos, clases
particulares a alumnos pobres.
Otros ayudan a preparar el 6."
de Bachillerato a un chico invá
lido. Celebramos los Ejercicios
Espirituales...
UNA ESCUELA,
UNA FAMILIA,
UNA COMUNIDAD
¿ESTAIS RELACIONADOS
CON LA UNIVERSIDAD?
Pregunto a los jóvenes si se
sienten a gusto en esta Escuela.
Sin ponerse de acuerdo, me res
ponden con sencillez: “Esto es
más una familia que un centro
tinivcrsitnti«». Convivimos profr
De acuerdo con la Universi
dad, también tenemos nuestra or
ganización de los consejos de cur
so representantes ante los Orga
nos de Gobierno y Planificación
de actividades. A principio de
curso hicimos las elecciones de
los Consejos de Curso. Entre to
dos se votó al D elgado y Sub
delegado del Centro, los cuales
sores y alumnos en la mayor ale
gría y fraternidad...
¿Es que los estudios son sua
ves?
Todo lo contrario, contesta un
diico valenciano. Son duros, pero
fáciles.
¿Cómo se explica eso? Muy
sencillo. Como somos pocos, no
tenemos más remedio que estu
diar y hacernos responsables. To
camos a muy pocos alumnos por
maestro...
— Pero esto, por desgracia,
terminará pronto —corta la di
rectora— ; porque el año que vie
ne nos llegará de buenas a pri
meras una masa de cien estudian
tes de primero...
“En una auténtica organización
—escribió Mounier— hay res
ponsabilidad por todas partes,
creación en todas partes, colabo
ración en todo”. Me sirven estas
palabras de resumen para decir
lo que he visto en esta Escuela
Universitaria de la Iglesia en Ma
drid. Una Escuela, es decir, una
familia, es decir, una comunidad,
en la que todos trabajan, todos
son responsables y todos se sien
ten partícipes.
R. A
i
Entrevista y
charla co un grupo
de la Escuela.
\
POK ai
ROMA: El Rector Mayor y su Con
sejo acompañados de los demás
Saleslanos que tr^ a ja n en la Casa
Generaticia, en una peregrinación
jubilar del Año Santo, concelebran
en San Pedro.
INVITACION AL OPTIMISMO
Las "Actas del Consejo Superior" correspondientes
a abril, 1975. traen una carta del Rector Mayor a los
Saleslanos titulada: "Miramos al futuro con el optimis
mo de Don Sosco".
Don RIcceri hace notar que el optimismo salesiano
se fundamenta sobre una fe "a lo Don Bosco” ; una
fe enraizada en Jesucristo resucitado, que no se deja
arrastrar por la crisis: ni por las que azotan a la so
ciedad civil, ni por las que afligen a la Iglesia: (pero,
¿cuánto ha vivido la Iglesia sin pruebas y sin dificultadss?). Y ni siquiera en esta actual “ crisis de recha
zo" que inevitablemente también repercute en la Con
gregación Salesiana.
Don RIcceri tunda su optimismo salesiano con rela
ción al futuro en una larga serle de motivos concretos
de esperanza: Tanto la Iglesia como la sociedad no
dejan de poner su confianza en los Saleslanos. Su mi
sión en un mundo desbordante de juventud es de pal
pitante actualidad. Hoy como nunca hay saleslanos que
se dan con la entrega absoluta. So constata una tími
da, pero real recuperación de vocaciones y vocaciones
con mayor índice de perseverancia que en el pasado.
Y apunta el florecimiento de unas iniciativas nuevas
de pastoral moderna que responde a las exigencias
de los tiempos...
“Todavía no hemos salido del túnel", advierte el
Rector Mayor recordando y solicitando un empeño co
mún para construir con manos propias el futuro de la
Congregación.
Termina con una frase muy significativa sobre la
alegría salesiana, "el undécimo mandamiento" para los
hijos de Don Bosco. ANS.
ENCUENTROS CONTINENTALES
Durante estos meses se está llevando a cabo un
acuerdo muy importante del Iter poscapitular trazado
en 1971. Se trata de los Encuentros Continentales en
tre el Rector Mayor y miembros del Consejo Superior,
por una parte, y grupos de Inspectores y Delegados
Inspectorlales, por otra.
De estos Encuentros, se ha celebrado ya el de Ro
ma, en la Casa Generalicia, del 1 al 9 de abril, que
culminó con una audiencia Pontificia. Tomaron parte
en él unos 80 Inspectores y Delegados de Europa, Es
tados Unidos, Australia y Africa Central.
El segundo se está realizando en Belo Horizonte,
del 23 al 31 de mayo. En él participan todos los Ins
pectores y Delegados de América Latina.
El objetivo de estos Encuentros Continentales es el
de hacer un examen acerca de las actuaciones del
mismo Capitulo General y programar unas directrices
comunes para los dos años que faltan para el pró
ximo Capítulo General de 1977,
JORNADA DE ORACION POR LAS
MISIONES SALESIANAS
El martes 11 de noviembre de 1975, a los cien años
justos de la primera expedición de misioneros salesianos a Argentina, estará dedicado en toda la Con
gregación como un día de oración, reflexión y re
cuerdo.
Así lo ha indicado el Rector Mayor en carta dirigida
a todos los Inspectores del mundo salesiano, preci
sando: “ En este día todos nos encontraremos unidos
para revivir en espíritu el gran acontecimiento; para
dar gracias al Señor todo lo que se ha podido reali
zar mediante su gracia durante estos años; y para re
novar nuestro compromiso misionero".
Será pues una jomada sin "manifestaciones exter
nas", pero eminentemente espiritual.
En Turín, después de esta jornada de oración, el 13
de noviembre se celebrará la “ conmemoración civii” .
Y el domingo 16 del mismo mes en la Basílica de Ma
ría Auxiliadora tendrá lugar una concelebración con la
solemne entrega del crucifijo a un grupo de misione
ros expedicionarios. Este acto será recogido por las
cámaras de la Televisión Italiana.
En Argentina tendrá lugar esta conmemoración mi
sionera con una análoga “jomada de oración", pero
el día 14 de diciembre, fecha centenaria de la llegada
de los primeros misioneros saleslanos a las tierras de
América.
20
i
II
I
UUÁ/DD SlLlSliHO
En Buenos Aires tendrá lugar una solemne conce
lebración eucarística en la iglesia “ Mater Miseticordiae” , primera iglesia confiada a los Salesianos en el
nuevo continente.
Y CONTINUAN
LLAMANDOLOS SALVAJES...
Lo estreché al momento y le di un abrazo con
todas mis fuerzas. Fue la manera de disimular mi con
moción y mi profundo desconcierto.
RAFAEL CLEMB4TE, Misionero Salesleno
CONCURSO INTERNACIONAL
DE CARTELES MISIONEROS
“ Me enco ntr^a con un grupo de indios Jíbaros, esos
El cartel ganador del Concurso internacional para
mismos que todavía muchos continúan llamándolos
el Centenario de las Misiones Saleslanas ha sido el
salvajes...
que llevaba por lema: "Sol Alumbra". Abierta la plica,
Caminábamos en una de esas largas excursiones
resultó ser el autor: Nicolás Ortega García, de Ma
que solemos hacer por las sierras. El día era esplén
drid.
dido y los chicos se divertían de lo lindo.
Nicolás Ortega es Antiguo Alumno salesiano. Actual
De repente, uno de los chicos mayores quedó rígi
mente es confeccionador de la revista “Juventud Mi
do y blanco como una pared. Le pregunté en seguida:
sionera” .
— “ ¿Que te pasa? ¿Te sientes mal?”
El concurso ha tenido dos fases, inspectorial e inter
El muchacho se repuso poco a poco de aquel des
nacional. Concurrieron a la fase internacional 37 obras.
fallecimiento:
23 provenían de las Inspectorías de Hijas de María
— “ No es nada — respondió masticando las síla
Auxiliadora y 14 de diversas Inspectorías salesianas.
bas— . ¿Ve usted a aquellos hombres?”
Alcé los ojos en la dirección de su índice. No muy
lejos ss veía a unos indios adultos junto a una casa
de labor.
Este es el cartel que obtuvo el Premio Internacional de
— "Uno de esos — continuó el muchacho— mató a ' las Misiones Salesianas. Su autor es el Antiguo Alum
mi padre. Pero yo ahora debo perdonarlo, porque soy
no Nicolás Ortega, confeccionador de la revista “ Jucristiano".
ventud Misionera".
VIETNAM: La fotografía representa a un grupo de chi
cos nortvietnamitas en la cárcel. Uno de ellos, católi
co, recibe la comunión. Los demás lo contemplan lle
nos de asombro.
VEINTE
NUEVOS
SACERDOTES
La mañana de Pascua, cuando
toda la Iglesia se despierta con la
nueva luz renovadora, el Espíritu
de Dios elegía a 20 jóvenes salesianos para ser guías del Pueblo
cristiano.
Pedro, Florentino, Jesús, Carlos.
Caminaban hacia eí altar ante la
mirada alegre de la numerosa
asamblea cristiana que celebraba
la pascua del Señor con una emo
ción desacostumbrada.
Sergio, Luis Fernando, Federico,
Gillermo, Juan, Emilio. Iban a dar
el paso decisivo esperado durante
largos años. Del aire pendían emo
cionadas las voces que con el ale
gre ritmo festivo de «Godspell»
proclamaban: «Preparad el camino
al Señor».
Mariano, Arturo, Hieliodoro, Her
minio, Julio. Las manos del señor
Obispo se posaban sobre sus ca
beza implorando la venida del
BECAS PARA LAS VOCACIONES SALESIANAS
INSPECTORIA DE BARCELONA
Ucea «San Marcos». P rim era en tre g a; T otal: 100.000 pts.
INSPECTORIA DE BILBAO
Beca «Mamá M argarita». L. CaOada. Pam plona. N. e .: 350. T . : 37.760 pts.
Beca «Don Hufino». un am igo Vtgués. T otal: 60.000 pts.
Boca «Don Jo sé M aría Talbo». IV. P rim era en tre g a: S.OOO pts.
INSPECTORIA DE CORDOBA
Beca «Don José M arta Doblado». P rim era en tre g a: 36.000 pts.
Beca «LXXV Aniversario». M ontllla. P rim era e n tre g a : 10.000 pts.
INSPECTORIA DE LEON
Beca «Don Felipe Qarcla». L a Corufta > Calvo Sotelo. N. e . ; 2.000 pts.
INSPECTORIA DE MADRID
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
«Arch. M aría A uxiliadora». Atocha. N. e .: 6.000. T otal: 116.000 pts.
«Fam ilia Francia». N. e .: 2.000. T o ta l: 46.000 pts.
«Besama». G lm énct-A rnau. N. e .: 8.000. T otal: 1^.460 pts.
«Don Pedro Gil». N. e .: 10.000. T otal: 89.114 pts.
«M. A. L.» N. e .: 1.000. T o ta l; 77.000 pts.
INSPECTORIA DE SEVILLA
Beca «M aría Auxiliadora». Arch. Cidix. N. e .: 1.000. T otal: 81.000 pts.
Beca «San Jo sé y San Antonio». F am ilia P ardo. N. e.: 6.000 pts.
Beca «M arta Auxiliadora». Morón de la F ro n te ra. N. e .: 10.000 pts.
INSPECTORIA DE VALENCIA
Beca «Juan Manuel». D oña Carm en Córnea. Alcoy. T otal: 50.000 pts.
22
Espíritu Santo, y las nuevas ma
nos sacerdotales eran ungidas para
bendecir y reconciliar.
Matías, Francisco, Juan José,
Alejandro, Gonzalo. Todos eran
nuevos sacerdotes, todos exten
dían sus manos recién consagra
das en su primera Misa concele
brada en la mañana de Pascua.
Todos, veinte vidas jóvenes, se
ponían al servicio de la Palabra de
Dios y de los jóvenes.
Más tarde nos pudimos encon
trar por breves momentos en una
rápida charla con algunos de los
nuevos sacerdotes. Los momentos
de la ordenación aún estaban re
cientes. Todavía aleteaba esa in
quietud que produce el encontrar
se frente a frente con una misión
grande.
La pregunta, clásica ya, pero
aún actual, acudió espontánea en
el primer encuentro con los ya
sacerdotes: ¿Por qué os habéis he
cho sacerdotes?
—«Es una llamada imperiosa de
Dios, vaga e imprecisa. No se pue
de palpar. Pero está ahí. Existe.
Día a día te va buscando y se te
va hinchaiKlo y arraigando. Luego
viene la decisión, la respuesta: sí
o no. Sólo la fe es capaz de dar
sentido a esta respuesta y de sus
tentar toda la vida» (Mariano).
—«Me he hecho sacerdote por
que se hace insistente la llamada
de Dios para cumplir una misión
al servicio de los hermanos. Veo
la necesidad de anunciar la Buena
nueva de Jesús a los Jóvenes. En
definitiva, la razón no es otra si
no que me siento llamado por Dios
una rapidez asombrosa. Las res
puestas son profundas, convenci
das, pero surgen espontáneas.
—«La misión del sacerdote en
tre los jóvenes es la de compartir
su vida. Convivir con ellos i>ara
que enriqueciéndonos por esta
convivencia, tanto ellos como nos
otros, podamos trasmitirles el
mensaje de Jesús de Nazaret»
(Emilio).
—«Sobre todo aquéllos que más
necesitan de nuestro servicio. El
salesiano se entrega a ellos con
sencillez y alegría» (Heliodoro).
—«Yo no sé qué es lo que ellos
quieren de un sacerdote. Ellos pro
bablemente tampoco lo sepan.
Ahora, muchas veces lo que les da
el sacerdote no coincide con lo
que necesitan y esto, tal vez sí lo
saben» (Federico).
—«En realidad piden del sacer
dote que sea santo y fiel al Evan
gelio, profundamente humano y
comprensivo, desprendido y ase
para anunciar a los jóvenes el
mensaje de salvación de Jesús. Y
quiero que mi vida sea una res
puesta afirmativa a esa llamada.
El me ayuda» (Emilio).
Inmediatamente han surgido en
la conversación los jóvenes. Es te
ma obligado para un sacerdote sa
lesiano y nace espontáneamente
en la conversación. Con los jóve
nes han transcurrido los mejores
momentos de la vida salesiana.
Hacia los jóvenes miran los nue
vos sacerdotes. La misión de Don
Bosco continúa.
—¿Qué os piden los jóvenes?
¿Cómo véis vuestra misión sacer
dotal entre ellos?
—«Es difícil, como toda misión
entre jóvenes. La evolución de ge
neraciones es grande. Hoy no se
ve claro lo que pueda hacer un
sacerdote entre ellos y esto preo
cupa. Hay que crear un nuevo es
tilo y bien sabes lo que cuesta
crear. Además esto te exige un
nuevo espíritu» (Mariano).
—«Sin embargo, yo veo la mi
sión con grandes posibilidades para
la Evangelización si se comparte
con ellos su aventura humana»
(Heliodoro).
—«En los jóvenes salta la fuer
za de la vida, nos desborda. Si el
sacerdote experimenta en sí mis
mo esta alegría por vivir pocW
ofrecerles algo, en caso contrario,
probablemente nada» (Fedwíco).
El tema de los jóvenes anima la
conversación. El salesiano ha na
cido y vive en la Iglesia con un
estilo juvenil. Las opiniones llue
ven y las ideas se entrecruzan con
quible a todos, en especial a los
que sufren, a los pobres y opri
midos» (Emilio).
—«Es cierto. Quieren ver en el
sacerdote un hombre de fe que
haga posible la felicidad en el tre
cho de vida que nos ha tocado re
correr juntos, pero que sea hom
bre y tome una postura de com
promiso. Odian las medias tintas»
(Mariano).
Las respuestas se multiplican,
pero los breves momentos que he
mos robado a la fiesta se están
acabando. Sobre los 20 nuevos
sacerdotes, aún con los ornamen
tos de la ordenación llueven las
felicitaciones. También les acom
paña la nuestra con el deseo de
que sean signos de esta Pascua
que celebramos entre todos los
jóvenes.
ANDRES SANZ
Salamanca, Pascua de 1975
(Arriba):
Grupo de loa
veinte nuevos
sacerdotes
recién
ordenados
en ei Teologado
Salesiano
de Salamanca.
Perteriecen a
las Inspectorías
Saleslanas
de Bilbao,
León y Madrid.
(Al lado):
Un detalle
de la ordenación
sacerdotal
de urw
de ios jóver>es
galésianos.
7
23
PresentamoB en este número de nuestra revista un ar
tículo del misionero salesíano don Valentín Aparicio.
Desde muy joven, partió para las tierras suramericanas.
Ya lleva más de veinticinco años abriendo caminos materia
les y espirituales entre los Jíbaros de El Ecuador y, ahora,
en la región colombiana del Ariari.
Buena calva y unas barbas pobladas. Y lo que le queda
por andar. Porque don Valentín ha venido por España y por
su tierra salmantina con deseos de llevarse algo y a alguien.
Aquí nos tira el anzuelo... Y nos pide que le echemos una
mano.
EL ARIARI NACIO Sí
LAS MISIONES DE SAN MARTIN
El cinco de abril de 1974 se cumplieron los diez
primeros años de la llegada de los misioneros salesianos al Ariari. Son muchos los trabajos y los fru
tos recogidos en este tiempo. He aquí algo de lo
que he ido recordando.
La Providencia se encargó de que fueran los Salesianos los que recogieran la antorcha de las an
tiguas Misiones del Oriente Colombiano. Es una
región que tiende su exuberancia tropical entre las
últimas estribaciones de la cordillera oriental y los
límites de Venezuela.
Los antiguos misioneros habían civilizado toda
la comarca, fundando poblaciones y creando gran
jas. Entre los poblados crecían las selvas enmara
ñadas y fluían ríos caudalosos, sin puentes, en los
que pululaban los caimanes, rayas y peces caribes.
He aquí los principales poblados; Villavicencio, ca
pital de la independencia del Meta, San Juan de
Arama, San Martín, Jiramena y Uribe. Pero en la
selva también había diversas tribus que mantenían
contactos, a veces no muy pacíficos, con las pobla
ciones.
El Arzobispo Primado deseaba ardientemente re
sucitar la vida religiosa en aquellas fértiles comar
cas, aunque las consideraba demasiado lejanas y
perjudícales para la salud.
24
En 1895, el misionero salesiano padre Evasio
Rabagliatti había acompañado toda la región, acom
pañado de un médico y de algunos hombres de
ciencia. Había ido en busca de un sitio para fundar
el gran Lazareto General. Aunque comprobaron
muchas de las deficiencias que se le atribuía a la
región, constataron también que la mies era mu
cha y que las ponderadas dificultades no eran tantas
ni tan graves.
El resultado fue ofrecerse para la empresa si
los superiores se lo permitían. Escribieron a don
Rúa, entonces Rector Mayor, quien aceptó con la
aprobación del Consejo Superior. Eran tiempos he
roicos.
El padre Evasio trazó su plan; apoyarse en el
pueblo, cristianizarlo y extender su radio de acción
a los salvajes. A fines de enero de 1896, empren
día su misión con otros tres sacerdotes italianos y
tres clérigos.
No habían llegado a instalarse, cuando salieron
de la selva vecina unos veinte indios con sus atuen
dos de plumas y sus taparrabos. Armados de arcos
y flechas, se apostaron en las inmediaciones. El
padre Rabagliatti y los demás Salesianos salieron a
su encuentro, no sin su buena ración de temblor.
Entre ellos había alguno que mascullaba el Caste
llano y pudieron entenderse fácilmente. Les hide-
de la agricultura y ganadería y es importante la
explotación de los recursos naturales: maderas, ca
za y pesca.
La inmigración a esta zona es cada vez mayor.
Hace diez años, cuando los Salesianos se encarga
ron de este territorio, la población apenas alcanza
ba los 30.000 habitantes. Hoy son más de 150.000.
EL LLANO
“Sobre mi caballo, yo / y sobre mí, mi som
brero”, dice la canción popular. Y dibuja perfecta
mente al habitante del Llano.
El llanero es robusto y dotado del temple que
le da su vida dura. El llano inmenso se extiende
desde la cordillera oriental hasta las selvas limítro
fes del Brasil y Venezuela, en donde sólo el azul
del firmamento se alza sobre el verde horizonte.
LESIANO
ron obsequios de caramelos, espejos y baratillas.
Los indios, en cambio, les dieron frutas y plumas
de aves raras. El padre Evasio recordó a los Sale
sianos: Don Bosco profetizó que serían los salva
jes los que vendrían en busca del Misionero.
En 1898, el padre Ernesto Briata se estableció
en la lejana población de Uribe, sede de la gran
zona explotadora del caucho. Por aquel entonces
los Superiores enviaron como profesor al clérigo
RODOLFO FIERRO TORRES.
E ES EL ARIARI
ARIARI proviene de la lengua nativa y significa |
“ORO-ORO”. La Prefectura Apostólica del Ariari,
erigida en 1964, comprende una extensión de
35.000 kilómetros cuadrados, de los que unos
6.000 ocupan la reserva Nacional de la Macarena, j
Por eso, nuestra patrona es la Virgen de la Maca-|
rena.
Granada es la sede del Prefecto Apostólico y tie-j
ne unos 15.000 habitantes. La economía depende)
Mapa de Colombia en el que se indica dónde está la ;
región del Arfar!.
[
ii
Sobre su caballo y a golpe de machete y azadón,
ha ido sometiendo la naturaleza poco a poco; una
vegetación indómita y enormes corrientes de aguas
caudalosas. Hoy son fecundas ganaderías y exube
rantes sementeras de maíz, arroz, plátano y yuca.
EL ARIARI
NACIO
SALESIANO
La distancia de los centros urbanos, la carencia
de vías de comunicación, las deficientes medidas
de seguridad, las pésimas condiciones de salubri
dad y la dureza del medio llevaron a muchos de
sus pobladores a una lucha por la subsistencia. Así
reinó la ley del más fuerte. Y se originó la violen
cia. Causaba asombro a nuestros misioneros cómo
se despreciaba la vida humana. Un hombre conta
ba poco.
El Gobierno controló la distribución de la tie
rra, asignó parcelas, abrió trochas, construyó puen
tes y prestó muchos servicios a los agricultores.
Hoy, en el Ariari se dan los grandes terratenien
tes y los recién inmigrados, gente pobre que va en
busca de trabajo y fortuna.
LOS SALESIANOS EN EL ARIARI
Año 1963. La Santa Sede confía a los Salesianos de Colombia la Misión del Ariari. El 5 de abril
de 1964, el Nuncio de Su Santidad entroniza en
su sede de Granada al primer Prefecto Apostólico,
Monseñor Jesús María Coronado, hoy obispo de
Girardot. Con él llegaron los primeros salesianos.
“El primer anhelo de mi corazón es que haya
paz entre vosotros". Fue el primer saludo de Mon
señor Coronado.
Y empezaron los difíciles comienzos. La prime
ra comunidad salesiana vivía en una vieja casud^a
26
en la que apenas había sitio para dormir. “Pueblo
con cura progresa”, decían los colonos. Y la gente
recibía a gusto a los salesianos recién llegados.
El equipo misionero preparó su plan de trabajo.
Comenzó por conocer a la gente, su mentalidad y
sus costumbres y logró de este modo ganar amis
tades.
La primera expedición misionera fue a La Playa,
un caserío dormido a la orilla del ancho río Ariari.
Fue el primero de los viajes en canoa. Luego se
multiplicarían hasta el infinito. Después se llegó
al legendario San Juan de Arama, haciendo una
breve escala en Canguaro. El padre übaldino atra
vesó sin miedo cauces crecidos, barrizales y saba
nas, acompañado por unos soldados. Se hablaba de
serpientes cascabeles y de guías de ganado semisalvaje.
“ ¡Qué imponente paisaje!”, recuerda el misione
ro. “La serranía saltaba erizada de verde y, al fon
do, la Macarena, como una inmensa mujer yacente
con su larga cabellera de selvas. Había una colina
al pie en forma de iglesia con su torre y sus dos
puntas como inmensos candelabros...”
Aún se oyen las consejas y leyendas acerca de
esa montaña.
IMas más tarde, otro salesiano conquistador, el
padre Castillo, se dirigió a otro poblado: CastilloMedellín del Ariari. Con su simpatía y cordialidad
fue recibido por los indígenas.
chador de alma fuerte y aragonesa. Ambos se unie
ron a nuestros sacrificios y alegrías.
Más tarde, llegaron las Hijas de María Auxilia
dora, a completar la obra misionera.
LO MAS IMPORTANTE
Monseñor
Coronedo,
con la corona
de muchos
amigos y
colaboradores..
Así se comenzó la obra de evangelización y se
preparó la visita del Prefecto Apostólico.
EL BAJO ARIABI
El Bajo Ariari merece capítulo aparte. Me lo co
nozco al dedillo en mis tres años de párroco en
Pueto Lleras. Es la población centinela de la Prefec
tura, lugar de citas y correrías por este río que lo
llevo en el alma. Con sus 370 kilómetros y con
más de 50 caseríos diseminados en una extensión
superior a la de cuatro provincias andaluzas...
Lo más importante siempre es lo que queda por
hacer. Ahora, al cumplirse los diez primeros años
de nuestra labor, y precisamente en el Centenario
de nuestras Misiones Salesianas, tenemos muchos
proyectos y soñamos muchos planes.
Pero nos faltan medios. ¿Quién nos ayuda? ¿Por
qué el misionero siempre tiene que acabar tendien
do la mano en espera de una limosna. No es nin
gún instinto de mendicidad, porque no pedimos pa
ra nosotros. Lo hacemos por los demás. Y con con
fianza. El Evangelio nos impulsa a alargar el bra
zo con la frase que todos conocemos: “Pedid y se
os dará”.
Yo también me asomo a esta ventana para sa
ludar a todos los amigos de la obra salesiana de
España y decirles, adaptando una frase de uno de
nuestros novelistas suramericanos, que el mundo
es ancho y abierto.
VALENTIN APARICIO
Misionero Salesiano
Dirección; Prefectura Apostólica
ARIARI (Meta) — Colombia —
Aquí llegó en el crudo invierno, cuando el río
se sale de madre, el padre Juan Elsakker, holan
dés, quien colaboró desde el primer momento al
avance extraordinario de esta región. En seguida
conectó con sus comp>atriotas holandeses. Estos han
sido nuestra “vaca lechera” durante una buena tem
porada para nuestras obras misioneras.
El Prefecto Apostólico, que asistió a la segunda
sesión del Vaticano Segundo, volvió acompañado
de otros dos grandes misioneros, aunque pequeños
de estatura: el padre Angel Bianchi, recio y traba
jador; y Tomás Jordán, español, aventurero y lu
El nuevo Prefecto Apostólico, Monseñor Héctor Jaram illo, en viaje por ei ar>cho cauce del rio Ariari.
27
€ ^ o p e r a e ió n
S a íe s ía n a y
T ercer
ilfu n d o
POR
UN
FUTURO
MEJOR
No llores, mujer. Ya vemos que eres muy
pobre, verrK>8 que tu casa se agrieta, que
tus vestidos son andrajos. Pero nos duele
más tu pena, tu afán; nos duele esa tu
cara noble, pura expresión de un aban
dono sin remedio.
No llores, mujer; tienes
grandes, inocentes, que
ama. 0 ¿es que su vista
lor, porque adivinas para
semejante ai tuyo?
esa hija de ojos
ciertamente te
aumenta tu do
ella un porvenir
No llores, mujer. Tienes en el d élo un
Padre que no te abandonará; tienes en
la tierra un puñado de hermanos que te
vamos a ayudar, que nos vamos a preocu
par por tu hija. Cuánto nos gustaría vol
ver a recibir otra fotografía tuya a la puer
ta de tu casita nueva, sonriente, vestida
de fiesta. Sólo así se tranquilizará nues
tra alma, porque nosotros gastamos lo
que nos scÁra en lugar de mandártelo a
ti, como es debido, porque trab^as más
que nadie y tiertes menos que ninguno.
Y pensar que no eres tu sola, que hay
miles de madres qiis, como tú, lloran con
razón. A pesar de ello déjame que te dí
ga otra vez: No llores, mujer, porque gra
cias a ti, Cristo ha llamado de nuevo a
mi corazón.
Hace cosa de un mes apareció
por Madrid monseñor Obelar. Su
nombre, ciertamente, os suena,
porque varias veces éi y los Indios
Moros han salido en las páginas
del Boletín. Monseñor Obelar venía
a hacer presente su gratitud por
la ayuda especial y rápida que vos
otros. por medio de Cooperación
28
Salesiana y Tercer Mundo, le dis
pensasteis en febrero del año pa
sado, cuando las aguas del río Pa
raguay inundaron los terrenos que
tenía en cultivo para asentar a los
Indios Moros.
Repetidas veces me encareció
que os agradeciera vuestra gene
rosidad y os asegurara que reza
él y ios niños de la misión por
vosotros.
Ahora quiero presentaros a im
salesiano español, que también es
tá contento por vuestra ayuda.
Trabaja precisamente en donde
ahora hace cien años llegaron,
mandados por Don Bosco, los pri
meros salesianos: en el Neuquén
(Argentina). Se llama Amadeo Lu
cia, joven y apóstol, que lleva en
la parroquia de Las Lajas una obra
social muy interesante, aunque pe
queña, como veréis por sus letras.
Transcribo parte de su carta:
«Su generosa ap>ortación (alude
a 30.000 pesetas que recibió), su
mada a otras que recibí en mi es
tancia en España, nos ha permiti
do montar un taller de tejido a
máquina donde, con cinco máqui
nas, por ahora, están aprendiendo
diez personas mayores, madres de
familia, y otras diez muchachas,
que ya producen considerablemen
te, permitiéndoles soñar en un fu
turo mejor».
«También estamos trabajando
muy intensamente en la incentivación del tejido mapuche, que en
la actualidad cuenta con una vein
tena de rústicos telares y más 40
hilanderas, entre las que se en
cuentran las niñas de nueve años
en adelante de nuestra Obra social
parroquial...»
«Nuestro más ambicioso plan
de inminente realización, si conta
mos con los medios necesarios
(entre los que confiadamente es
peramos alguna ayuda de los co
operadores españoles) es abrir una
residencia, en una ciudad próxima
que cuenta con escuelas de apren
dizajes técnicos, para nuestros
muchachos, los que más pronto
desertan de la escuela, por nece
sidad de aportar unos pocos pe
sos al escuálido sueldo del padre...
perdiendo la escuela y sin más
futuro que recorrer los alambrados
ajenos toda su vida... o hacer pe
queños trabajos en este pueblo sin
medios de vida».
«Estamos trabajando en la pro
moción y capacitación laboral en
cuatro centros, distantes de las
Lajas de 3 a 50 kilómetros. Algu
nos de ellos en reducciones (al
deas) indígenas mapuches total
mente marginados desde hace si
glos».
«Como ve, cualquier ayuda que
nos llegara sería muy bien emplea
da en niños y gente bien pobre,
que por ahora sólo recibe auxilio
de la Iglesia a través de nosotros».
Hasta aquí el padre Amadeo Lu
cia.
Hemos recibido carta tamlñén
desde Corumbá, donde el padre
Saksida está construyendo un edi
ficio que consagrará definitiva
mente la Ciudad Don Bosco, en
donde se acogen unos 2.000 chicos
de lo más pobre y abandonado que
se pueda imaginar.
Os transcribo algunos párrafos
de su carta para que gocéis con
las alegrías que proporcionáis a
esos hombres apostólicos que,
cuanto más bien hacen o quieren
hacer, más apurados se encuen
tran:
«Lleno de satisfacción y alegría
le contesto inmediatamente a su
carta y a su regalo (4.000 dólares).
Vino en un momento de tensión
económica fuera de serie. El ban
co acababa de llamarme para de
cirme que no había fondos. Esta
mos construyendo y el dinero se
escapa de las manos. No quiera la
Divina Providencia que tengamos
que parar, porque el edificio nos
es muy preciso».
«Estaba con la cabeza hinchada
y preocupado. Al ver su carta el
corazón me decía que algo había
dentro que llegaba justo justo. Me
llené de esperanza. Por eso agra
dezco tanto a los bienhechores de
España su rasgo».
«Estoy tan apurado que, de
acuerdo con los niños, he vendido
el autobús que nos regaló un se
ñor, la camioneta, uno de los dos
teléfonos, todo lo que no nos ha
ce verdadera falta lo estamos ven
diendo para no parar las obras».
«Quiero darle una buena noticia:
tenemos tres niños en el aspirantado y el próximo curso irán cinco
más. Son los primeros frutos de
la Ciudad Don Bosco».
«Una vez más agradezco el gran
regalo».
Para termirvar os diré como de
cía Don Bosco a los cooperadores
salesianos: «No os canséis de ha
cer el bien». Hoy que tanta gente
padece hambre y angmtia ante un
porvenir r»egro para sí y los su
yos, que hay miles de niños sin
asistencia y enfermos, aunque se
pamos que nuestro donativo no va
a remediar tanto mal, no obstan
te, sumado a otros y otros está
haciendo que unos millares de i>ersonas, sobre todo niños se vean
aliviados en sus decores y en su
hambre y vean el futuro con más
esperanza.
JAVIER RUBIO
DONATIVOS RECIBIDOS
para Cooperación SaJesiana
y Tercer Mundo durante ABRIL
G racia R uiz, Jo sé Blanea. R ufina
Crespo. V íctor Bouvier, M arta C orti
nas, Consuelo P e re ira , M aría Sánchez.
Antonio Sánchez. Isid ro M arti. M aría
Angeles Mlcheo, M aría de la L astra ,
M ara M arja, Carm en P elegrí. Reme
dios Sánchez. E m ilia Valero, Adelina
Toledo. Vda. de Pérez. M aría Gloria
Z arranz. M aría Joaefa L ourido. P ilar
BoxÓ. Ja c in to E nrlquez, Jo sé Neu. Se
ñorea de López G uitián, Carm en Itu rm endi. R osarlo Baa, Jo sé M artín, B au
tis ta Fernández, E. M ata. M aximiliano
Gallego, M aría V ictoria Molina. Con
suelo de laT orre, Lucila Díaz, Jo sefi
na Alvares, A rchicofradia de M. A. de
A ntequera y de T alavera de la Reina,
O tilia C abrera. Antonio Ram os, Seño
res de Alonso, A ntoln Mata, Concepíclón Miró M aría Je sú s Conde, José
M. F ernández. Enzo M arichlni, Rosa
de Je sú s, Jaim e E splugues, Jo sé T.
Calvo, R osalía M assas, G loria Sastre,
L uisa L im ia. A raceli García, Atanasio
R odríguez, G uadalupe F e rrelro . Ma
nuela V arela, Angel A rm elles, Camilo
F e rreriro . M artín T ejada. Abdón Sán
chez. Ju a n a Galmés, Miguel T orreci
lla. J u a n T orres, B enito García, M aría
Bella. Jo sé M árquez. Ju a n a A ndrés.
A lejandro Pascua, M.é Angeles León,
A urelia P erea. M anuel M iranda, P e
dro P a ra ro ls, J u a n Pérez, Manuel
León, F é lix G arcía, P ep p y de Paúl.
A sunción Olalla, P ila r López, Josefa
A rias. M aría A m as, Carm en Delgado,
Alicia y Am elia D rets, P ra d o Pascual,
A ntonio F lo rit, Ignacio Albentosa, J u
lia Sanz, M aría y A doración Aledón,
Manuel Criado. M aría Ju lia n a R odrí
guez, F . Sánchez, Soledad Francisco,
Isabel M iranda. F am ilia Reillo-Badía,
Fam . Codesal, E utiquio C abrero, Ma
ría F uente, F . Amaro, Jo sé Ros, Mi
lagros A ndréu, F élix B arba, Remedios
R odríguez, M aría Dolores Cepeda, Ma
ría L edesm a, Moisés Reina. J u a n Díaz.
Jo sé Valencia, M aría P . González. A r
tu ro E ncina. E m ilia R odríguez. T ere
sa H uebra, C lem cntlna de Vega, Jo a
q uina E ncinas. Adela L abrador. R osa
rio Bullón. J . L u is Polo, Silvano P a s
tor. Fam . P ardo, J . M aroto, A gustina
Espino, Ana M aría Curado, M ara N a
vas, M ercedes Cerola. Candelas Gonzá
lez. Carm en Ju a n . M aría i^ a ric lo ,
Concha C haíorlé. Lorenzo Sagalés.
Francisco T endero. R osa Casellas, Ino
cencia G arcía. M aría P ep a López, M ar
cos A. H ernández. Celia Domínguez,
S ira B arreal. Antonio Fernández, Ma
ría Soria. Miguel Tormo. C. Alonso
L am bertl, Am ador Alm alano, L eonlsa
M artínez. A na S anm artín. Francisca
G arcía. Jo s é M aría Silva, Cooperado
res de Celanova, M aría Conde. José
Señor. Carm en M ontero, Fulgencio Gu
tiérrez, R am ona Solé, Fam . L apuente.
A nastasio Macho, J u a n López, E. 8.
RcHuero. J u lia M anzano, J u lia O rtega.
R afael P o rtero . L eonor Miguel, P a u li
no Morifiigo. Manuel M edrano. Obdu
lio B arrera. M aría Dolores Elchave,
M arta G arcía. F é lix Córdoba, Dolores
Dom ínguez, Isabel González, Jo sé Ca
lle. A lfonso López, M ilagros Q uintas,
P a rr. N tra . Sra. de los Angeles - Ma
drid, E ugenia Ib a rb u ru , L uis Postigo,
M aría P az T ovar, Sabino B engurla,
M arcelino Díaz. L ucía Díaz, G loria F a b r^ la s , Ciríaco Gallejones, Visitación
González. R am ona García, C atalina
González, R am ón S erra, Sres. de Cruz,
Manuel Baena. R osa M arías. M aría
Elstber M ata. M aribel P a rra . Zenón
S antam aría. J . J . M artínez, Susana
Elizalde, M arta Crespo. M arisa Lols.
M arta Je sú s M untané, Ju a n a García,
S e t^ rln a G ujas, G abriel Colinas.
29
Valencia; Encontrándose nuestra
hija de doce años, aquejada de una
grave afección de riñón y con ne
cesidad de una pronta Intervención
quirúrgica^nuestra pena fue inmen
sa ante la imposibilidad de realizar
tai operación, debido al desespe
rado estado de salud de la niña.
En tan angustiosa situación acu
dimos a nuestra Madre Auxiliadora,
como es nuestra costumbre, intere
sando a varias comunidades reli
giosas para obtener de nuestra Ma
dre su protección.
Ante el estupor de los facultati
vos, la niña mejoró lo suficiente
para soportar la intervención que
(ue realizada con el más completo
éxito.
Hoy, agradecidos a María Auxi
liadora por haber devuelto a nues
tra hija sana y buena ai hogar, ha
cemos público este favor para ani
mar a otros a que acudan siempre
a tan bondadosa Madre del cielo
y ofrecemos una limosna para su
culto. Familia A. R.
que en el “ Boletín Salesiano” . Paz
Martín.
Salamanca: Doy gracias a María
Auxiliadora por el feliz resultado de
la operación de uno de los hijos y
por otros favores significativos al
canzados en estos últimos años, en
tre ios que destaca la entrañable
unión de todos los de la familia.
Antonio Ramón Pérez.
Villagarcía de la Vega (León): Da
mos gracias a María Auxiliadora, a
quien acudimos invocando su pro
tección, por haber recuperado la
salud tras una grave enfermedad y
difícil intervención quirúrgica.' En
viamos una limosna en señal de
gratitud. Agustín Pérez y familia.
Armunia-León: Por una gracia ob
tenida por mediación de María Auxi
liadora, envío una limosna. Una De
vota.
León: En agradecimiento a nues
tra Madre María Auxiliadora, envío
un donativo. Gloria C. de Fernán
dez.
Salamanca: Habiéndose fractura
do una hija mía un brazo en la co
rona del radio, lo primero a reali
zar fue escayolarla con la adver
tencia del médico que si no que
daba bien con tal medida, había
qu8 hacerle una operación. Con to
la confianza en María Auxiliadora
invoqué para que su Intercesión
iciera quedara todo sin necesidad
de operación. Así sucedió, solucio
nándose el problema sin necesidad
de operación. Por este favor y
otros muchos recibidos de tan bue
na Madre lo agradezco públicamen
te en el “ Boletín Salesiano", en
viando una limosna para propagar
su culto y devoción. T. B. S.
Burgos: Por un favor obtenido de
María Auxiliadora doy una limosna
y publico la gracia alcanzada. M. N.
Salamanca: Por una gracia reci
bida habiendo invocado con toda
onfianza a María Auxiliadora, en
vío una limosna y deseo se publi
HInojosa del Duque (Córdoba):
En agradecimiento a María Auxilia
dora envían una limosna: Soledad
Martínez, Manuela Navarro.
Torre-Cardela: Dan gracias a Ma
ría Auxiliadora por un favor recibi
do: Encamación Sánchez, Carmela
Salcedo, Juana Jordán, Justa TItoe,
Angeles Ferrer, B. F. y E. O.
Vitoria: La familia Larreina envía
una limosna para misas y culto de
María Auxiliadora en agradecimien
to a continuos favores que de ella
venimos recibiendo a lo largo de
estos últimos meses. Familia La
rreina.
a
otros santos
y siervos
de dios
C8ste{|ter»ol (B a rc e lo n a ): Doy
gracias a María Auxiliadora, por la
ayuda prestada en una intervención
quirúrgica, ya que presentándose
■na complicación sané sin ulterior
itamiento como en principio se
•'mió. Ahora sigo confiando en su
lyuda, esperando siga la total re:uperación obtenida y lo publico
muy agradecida. María A. Roca.
Sevilla: Padeciendo de desviación
de la columna vertebral, acudí al
médico y me indicó que podía ali
viar un tanlo los dolores, pero que
no se podía quitar del todo. Acudí
a María Auxiliadora, como Antiguos
Alumnos salesianos de este Cole
gio, y gracias a Dios me encuentro
perfectamente. Doy por eilo gracias
a María Auxiliadora a la cual visito
con frecuencia y entrego un dona' vo, deseando se publique en el
Boletín Salesiano” . Alonso Carras
co Pozo.
de la
familia
salesiana
Añoza de Campos (Falencia): Doy
gracias a nuestra buena Madre
Auxiliadora por un favor que me
ha concedido y le mando una li
mosna para su culto. Juliana Do
mínguez Sevilia.
Valverde E n riq u e (León): Doy
gracias a María Auxiliadora y a San
Juan Bosco por un favor recibido.
Agradecida envío una limosna y de
seo se publique en el "Boletín Sa
lesiano” . A. F.
Cañizo (Zamora): Por favores re
cibidos de María Auxiliadora, mien
tras se io agradezco a r>uestra Ma
dre, envío una limosna para su cul
to en agradecimiento. D. R.
A studllo: Por una gracia obteni
da de María Auxiliadora, San Juan
Bosco y Santo Domingo Savío en
trego una limosna. I. O uintwa.
Burgos: Doy gracias a San Juan
Bosco y a María Auxiliadora, por
la curación de mi padre. P. A. A.
Orense: Por diversos favores re
cibidos de María Auxiliadora y en
acción de gracias, envío un dona
tivo. Deseo además, que se haga
patente mi agradecimiento. Vicenta.
Llaranes (Avilés): Mi yerno y mi
hija han tenido un grave accidente
de coche. Mi hija al llegar al hos
pital iba en estado de coma. Yo
recurrí a mi querida Madre pidién
dole la pusiera bien, ofreciéndole
una misa y una limosna para las
obras salesianas. Al mes ha salido
del hospital mi hija casi recupera
da dei todo. Una Madre agradeci
da. Inés Alad.
Llaranes (Avilés): Mis papás han
tenido un grave accidente de co
che. Mi mamá ha estado en trance
de muerte. Empezamos una nove
na con mi abuelita pidiéndola los
pusiera bien. Al mes han salido det
hospital casi recuperados. Entrega
mos el donativo y lo publicamos
en la Revista. Tres hermanltos que
queremos mucho a la Virgen; Ros!,
Gamma y Francisco Javier.
Madrid: Habiendo enfermado una
persona de mi familia, en un mo
mento de gravedad, inicié una No
vena al Corazón de Jesús, ponien
do por intercesora a Sor Teresa
Valsé, cuya vida había leído y le
he cobrado gran admiración y de
voción, prometiendo publicar la
gracia y dar una pequeña limosna
para su Causa de Beatificación.
Como dentro de los días de la
Novena se inició la mejoría y hoy
la persona interesada se encuentra
mejor, cumplo agradecida lo que
prometí. Una antigua alumna sale
siana.
31
FUERON
Reverendo don Luie TorreAo t a
muy poco más de dos meses del
25.*^ aniversario de su sacerdocio,
en la capital riojana.
La noticia nos llegó el mismo 13
de abril por teléfono a sus Intimos.
Una inesperada embolia le sumió
en una larga agonía, hasta que se
le paró definitivamente su veterano
corazón, siempre tan atareado. (Una
noticia que nos resistíamos a creer!
Hijo de una familia exquisitamen*
te saleslana (su padre prestó su
colaboración durante muchísimos
anos en el Colegio de Atooha), fre
cuentó desde muy niño el Colegio
de Francos Rodríguez de Madrid,
que está enfrente de su domicilio.
Su compromiso salesiano se re
monta al comienzo de los años
treinta. La guerra trastorna y retra
sa considerablemente sus estudios,
pero es uno de los primeros aspi
rantes que regresan a Carabanchel
en la primavera de 1939. Novicio y
recién profeso en Mohernando y
primeros ensayos de apostolado
educativo salesiano en Salamanca
y La Coruña. Nuevo regreso a Ca
rabanchel y ordenación sacerdotal
el día de San Pedro de 1950. VIgo,
El Royo, Zuazo, Baracaldo, Santander-Nueva Montaña, Urnieta y Lo
groño fueron los hitos de su labor
sacerdotal y saleslana en estos
veinticinco años. En varias de las
32
A
LA
CASA
DEL
aludidas casas actuó como director
de la comunidad.
El inició la obra saleslana en Lo
groño, cuando el actual Colegio se
estaba construyendo, y, con su acri
solado espíritu de servicio, supo
ganarse en seguida la simpatía de
todos.
Aunque la bondad no suele ser
un título, don Luis era un hombre
fundamentalmente bueno. Su sonri
sa era afable y acogedora; le gus
taba dar poesía a la vida de cada
día; y rezumaba austeridad, honra
dez y fidelidad: su palabra era siem
pre un contrato. Sin grandes teo
rías mentales, pero con un gran
sentido práctico, supo hacer renta
ble su apostolado y no se ahorró
nunca a la hora de la acción.
En su misa funeral concelebraron
treinta y tantos sacerdotes salesianos, presididos por el Padre Ins
pector. La iglesia se vio, espontá
neamente repleta por los alumnos
de aquel Colegio, los muchachos
de la simpática institución “ Los
Boscos" y las colegialas de las Ma
dres Escolapias. Todos ellos tenían
una gran deuda de gratitud con don
Luis, pues, en esos tres “ campos"
exactamente, desarrolló don Luis
Torreño sus afanes apostólicos a lo
largo de estos diez últimos años.
*
*
*
Don Luis se ha Ido ai Cielo a
celebrar sus Bodas de Plata Sacer
dotales. El vivió su existencia con
ojos de eternidad. Que Dios le ha
ya premiado. | Descanse en paz!
E, M.
PADRE
Doña Simona Ellzagaray de Ugalde t en Pamplona el 23 de marzo
de 1975 a los setenta y ocho años
de edad. Murió como vivió: pensan
do en los demás. Cuando el dolor
implacable llegó a hacerle sentir
su desgarradora presencia, pedía
permiso para lamentarse. Convirtió
su casa en el centro de sus afanes
y trabajos. Desde ella a través de
la oración y el sacrificio sentía so
licitud por todas las miserias y ne
cesidades del mundo. Hay frases
de su “evangelio chiquito" que ella
solía repetir a menudo y que mues
tran el sentido que en su vida co
braba ia Palabra de Dios recibida
cada mañana en la Eucaristía:
“ Obedecer es amar", “ No Juzguéis
y no seréis juzgados", “ Dios me dé
paciencia que aigo necesito” , “ Tam
bién de ias paiabras ociosas ten
dremos que dar cuenta a Dk>s” ,
“ Conformémonos con la voiuntad
de Dios si queremos ser dicho
sos” ...
Recuerda su hijo salesiano que
nunca logró darle la sorpresa de
presentarse en casa sin asivar. Ella
ya lo esperaba precisamente aquel
día. Toda su vida fue un ejercicio
amable y desinteresado de esperar
cristianamente en la entrega sin re
servas a ias tareas domésticas. Aho
ra en ia Casa grande del Padre,
sigue esperando con la certeza del
encuentro feliz y definitivo.
DOS
R E V IS T A S
S A L E S IA N A S
1. Para chicos
«J-20» (Juventud siglo xx )
Para preadolescentes y adolescentes, a dos y cuatro colores.
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Dos estupendos logros de la prensa juvenil educativa.
*
Ambas revistas, «Premio Nacional de Prensa juvenil».
O BRA V O C A C IO N A L
DE LOS COOPERADORES SALESIANOS
A fin de ayudar al sostenimiento de las voca
ciones salesianas. los Cooperadores Salesianos
promueven ia PIA OBRA DEL SAGRADO CORA
ZON. instituida con la aprobación del Papa León
XIII por el propio San Juan Bosco, con dicha
finalidad.
La Pía Obra celebra todos los días perpetua
mente en la basílica del Sagrado Corazón de
Roma. 6 misas a intención de cuantos se ins
criben en ella.
IN S C R IP C IO N :
1.— Puede inscribirse uno a sí mismo y a otras
personas, vivas o difuntas, por las que
quiere pedir o sufragar.
2.
— La inscripción, que es nominal, se efectúa
previa aportación, por una sola vez, de una
limosna equivalente al estipendio de una
misa en la propia diócesis.
3.— La inscripción se acredita con una cédula
en la que consta nombre y apellidos de la
persona inscrita, por lo que se ruega clari
dad al enviar dichos datos.
Para ia inscripción diríjase a;
O b ra
B a rc e lo n a —
V o c a c to n a l C o o p e ra d o re s S a le sia n o s
A lc a lá . 164.— M A D R ID - 28
17.
<=EDUCñCIÓIi_ TARA
Ya han satido cinco temas (0,1,2, 3 y 4) de esta colección
indispensable, moderna y audaz para una educación sexual
integrada de los adolescentes, a nivel biológico, psicoló
gico. socio-cultural y cristlarm.
TE M A 0.— EL PRO B LEM A: Planteamiento a través de
un hecho concreto (40 diapositivas].
TE M A 1.— EL M IE D O A L A LIBERTAD (Represión
sexual y apertura a una sana liberación], 120 diapo
sitivas;
TE M A 2.— S E X U A LID A D Y A M O R IEI sexo es una
realidad íntegradora. creadora, dinámica, comunicativa
y trascendente]. SO diapositivas.
TEM A 3.— LOS D O S SEXOS (Diferencias anatómicas
y psicológicas entre el hombre y la mujer). 120 dia
positivas.
T E M A 4.— EL CUERPO. IN STRUM ENTO DE C O
M U N IC A C IO N (Anatomía y psicología sexual),
too diapositivas.
TE M A 5.— H A C IA
UNA
S E X U A LID A D
SANA
(Identificación sexual; desviaciones sexuales: elemen
tos de una sana sexualidad). 80 diapositivas.
(De próxima aparición).
T E M A 6.— DESARRO LLO DEL IM P U LS O SEXUAL
(Etapas: la infancia y la pubertad desde el punto de
vista fisiológico y p sico l^ico ).
(En preparacíMi).
t e m a 7.— l a M A D U R E Z S E X U A L Y AFE C T IV A
(Furtdamento. etapas y rasgos de madurez).
(En preparatíón).
Una gran novedad
Para animar y conjuntar las actividades de diversas áreas:
expresión dinámica, plástica, lenguaje, social...
Durante el tiempo escolar o el tiempo libre
TEATRO EDEBE JUVENIL
• Libros a todo color (en rústica y cartoné)
• Preparados con esmero pedagógico.
• Con grabación de las partes musicales
(en disco o/y cassette-ésta lleva ade
más el Play-Back para incorporar la
voz (*)
• Títulos:
* NADIE, de Amalia Navas-Sáenz
LA MAQUINA DE ESCRIBIR, de
Luis Coquard
UNOS LENTES PARA VER, de Ven
tura Porta
* LA TIERRA DE JAUJA (Pasos, de
Lope de Rueda), versión de Pablo
Villamar
* EL NIÑO DE PAPEL, de Jesús Esco
to
Títulos:
ALGO PARA CONTAR EN NAVIDAD, de Jorge
Díaz
* WHISKY Y CADAVERES, de Felipe Alcántara
PELIGRO DE SALVACION, de Jesús Ballaz
LA ENCUESTA, de Ventura Porta
De venta en librerías
EDICIONES DON BOSCO
P° San Juan Bosco, 62
BARCELONA, 17
JL:.