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NOTICIAS
BOLETIN SALESIANO
ORGANO DE LA PIA UNION DE
COOPERADORES

SALESIANOS

Rtvlsia d« U obra de Don Boeoo
Año LXXXn • N.9 11 . Noviembre, 1968

DIRECTOR:

JAVIER RUBIO IBAÑEZ
DIRECCION, REDACCION Y ADMON.

Alcalá, 164
Teléfono: 255 20 00
MADRID-2
Depósito legal: M. 3.044-1958
(Con censura eclesiástica)

SUM ARIO
NOTICIAS SAIESIANAS . . .
CON EL PAPA Y CON SUS NOR­
MAS..............................................
EL LARGO Y COMPLICADO CA­
MINO DE LOS ALTARES . .
GRACIAS, DON BOSCO, GRA­
CIAS .........................................
13
CAMPAÑA ANUAL DE LOS CO
OPERADORES............................

14

HERMANDAD GEMELA . . .

15

ANECDOTARIO DE DON BOSCO

16

VUELVE PRONTO: TE ESPERA­
MOS..............................................
20
CRONICA DE GRACIAS

24

BECAS SACERDOTALES

30

COOPERADORES
SALESIANOS
EN
ALBACETE
H a tenido lu gar en e l co­
legio sálesian o d e la Dipu­
tación, la p u esta en m arch a
de la O bra d e los Coopera^
d ores Salesianos. E l Conse­
je r o In sp ectorial, Don Vi­
cen te Soriano, lleg ó d e V a­
lencia p a ra ca m b iar im p re­
siones con tres m atrim onios
alb a ceten ses a c e r c a d e la
Obra y de los m edios y m é­
todos con que cu en ta p a ra
llev ar a ca b o sus fines en
fa v o r de la edu cación cris­
tian a d e la juventud.
T ras el d iálog o los concu­
rren tes sa tis fech o s y en tu ­
siasm ad os con las perspectiv as d e ap ostolad o y fo r ­
m ación p erson al que s e les
o frec ía dieron su nom bre.
P osteriorm en te han tenido
v arias reuniones p a ra tra ­
za r sus plan es de p u esta en
m a rch a d el C entro de co­
op erad o res en A lbacete.
L a s fo to s nos m uestran
una visfa d el C olegio y los
m iem bros fu n d ad ores d e l
C entro con su d irecto r el
P. F em a n d o F errán diz.

IMAGEN
DE
MARIA
AUXILIADORA
En las Escuelas Profesio­
nales de La Robla, León,
sobre un lienzo de ladri­
llos de cara vista, resalta
esta imagen de María Au­
xiliadora, en la que el ar­
tista, suponemos, ha que­
rido decirnos que también
la vida de la Virgen tuvo
sus aristas y trazos duros.

SALESIANAS

BODAS
DE DIAMANTE
En Turín, y a los 84 años de
edad, un salesiano ha celebra­
do sus bodas de diamante, es­
to es, sus 65 años de sacer­
dote.
£1 salesiano es D. Sante Garelli, un sacerdote menudito,
de un humor envidiable, fru­
to de una alegría salesiana de
la que ha hecho gala a lo lar­
go de toda su vida y en los
más diversos paisajes. Fue mi­
sionero en China largos años.
Cuando estalló la revolución
bolchevique en Moscú, fue el
único sacerdote católico que
permaneció en la capital du­
rante dos años. Escritor de plu­
ma fácil y amena, nos deja va­
rios opúsculos sobre estampas
misioneras; al español está tra­
ducido el titulado «Pioneros
de Diosi, que es un poco su
propia historia, pues narra co­
sas vistas, oídas o protagoniza­
das por él en las misiones y
en la misma Rusia.
A su misa de diamante asis­
tió el propio Rector Mayor y
numerosos salesianos y amigos
c^ue llenaron la Basílica de Ma­
ría Auxiliadora.

UN
PEQUEÑO
"COMPLEJO"
Las H ijas de María Auxiliadora
tienen en la barriada de Pueblo
Nuevo, de Madrid, una Obra que
está desarrollando una buena la­
bor asistencial y educativa. Quien
la visita no sospecha que en esos
edificios bajos, que ocuparán una
hectárea de terreno, puedan des­
arrollarse clases para unas 500
alumnas de bachillerato y taquimecanografía, talleres de costura,
una casita aislada para retiros y
un dispensario que en días alter­
nos atiende consultas de otorrino­
laringología, pulmón y corazón;
ginecología, análisis y radiografía.
Un pequeño ccomplejo», como
se ve, que las salesianas ponen a
disposición de la juventud feme­
nina del barrio y que ofrecen tam ­
bién a las almas generosas que
buscan cómo entregarse a Dios
sirviendo al prójimo.

DEVOCION
Y
FOLKLORE
El año Centenario de la Ba­
sílica de María Auxiliadora de
Turín ha dado motivo para nú­
me r o s as manifestaciones de
amor a le Virgen de D. Bosco
por personas llegadas de to­
das las regiones de Italia y de
muchas naciones europeas. En­
tre otras descolló la concentra­
ción de más de 1.500 jovencitos, alumnos de los colegios
salesianos. Dentro del progra­
me de la peregrinación juve­
nil, había un numero dedicado
a homenajear al sucesor de D.
Bosco, D. Luis Rícoeri. Cantos,
danzas reaionales, palabras y
tepresentaciones breves se su­
cedieron en el escenario del
salón de actos de la Casa Ma­
dre. Todas las intervenciones
tenían el final obligado del sa­
ludo de los artistas al rector
mayor, al que vemos premian­
do la actuación aplaudidísíma
de un grupo de danzas napo­
litanas.

CON EL PAPA Y SUS NORMAS
La última encíclica de Pablo V I sigue siendo
motivo de discusión y polémica. Y lo será durante
mucho, porque en torno al amor y al matrimonio
se estaba desarrollando uno de los mayores com­
bates de nuestro tiempo. Todos los demonios se
habían desencadenado, al decir de Danielou, con
sus aparentes razones contra uno y otro.
La decisión de Pablo V I fue un golpe tajante,
mortal, pero no instantáneo y nos tocará asistir
a protestas, discusiones, que esperamos serán un
día más débiles y espaciadas.
Pero no nos engañemos, hoy es muy dura. Son
muchos los resentidos con la condenación de la
píldora. Muchos los que en conversaciones priva­
das, en el seno de la familia, en los contactos so­
ciales muestran su disconformidad aduciendo toda
clase de razones. Lo que les duele en el fondo es
el sacrificio que la ley de Dios impone; olvidan
que el sacrificio es ley evangélica, es la esencia de
la enseñanza cristiana. Pero además, ¿es que hay
condición humana que pueda escapar al sacrificio?
No obstante se anda detrás de una existencia fa­
miliar asegurada con garantía artificial, sin riesgos,
sin autodisciplinas; se desea una familia en la que
el don de un cónyugue al otro no esté condiciona­

4 —

do por el bien del otro o de los hijos, sino por el
propio e inmediato gusto o placer.
Esta polémica no se limita al interior de los
hogares: se aprecia en los periódicos, en ciertos
artículos, reuniones de estudio, en opiniones que
determinados personajes lanzan al público, incluso
en ciertas revistas católicas dirigidas por ecle­
siásticos.
Hoy, desde las modestas páginas del Boletín
Salesiano, queremos poner en guardia a nuestros
lectores contra una maniobra de ciertos católicos
representativos, que de tener éxito sería fatal para
la Iglesia y el Magisterio.
Hemos dicho que nos hallábamos en medio de
uno de los combates más violentos y añadimos
ahora más diabólicos.
Los contrarios a la decisión pontificia sobre el
control de nacimientos van difundiendo la teoría
de que no es válida, porque un veredicto tan im­
portante no puede darlo un hombre solo; otros,
apoyándose que no es una definición “ex cátedra”,
siguen discutiendo su validez El trabajo es de
zapa: si el Papa no puede definir solo y si, además,
no se ha pronunciado “ex cátedra”, su decisión no
obliga en conciencia a los cristianos.

''V

Si esta actitud es grave por la confusión que en­
gendra en los cristianos sencillos y por el apoyo
moral que presta a que se siga quebrantando la
ley divina, es muchísimo más grave por otros
motivos: primero, porque polemizan con el Papa
y, segundo, porque ponen en tela de juicio su Ma­
gisterio, que es el Magisterio de la Iglesia. Lo
primero es un grave desacato a la autoridad su­
prema de la Iglesia y abrir un precipicio cuyo
fondo nadie puede sospechar donde está; lo se­
gundo, es quitar a la Iglesia el medio que tiene
para acercarse a los hombres y ayudarles en su
salvación.
Porque la polémica se caracteriza precisamente
por discutir al Papa su derecho a enseñar como
Maestro de Fe y de Moral, para cuyo oficio está
divinamente asistido por el Espíritu Santo, aun­
que no defina “ex cátedra”. Y , mientras, esos crí­
ticos no dudan en dar mayor crédito a su pequeño
yo. que no sabemos por quién está asistido, que
a la autoridad augusta e iluminada del Pastor
supremo.
El que algunos escritores y polemistas, que se
jactan de ser católicos “dentro de la Iglesia y
para la Iglesia” (aunque las consecuencias que sa­
can nos lo hacen dudar), pretendan discutir la va­
lidez y el peso de la decisión papal porque “decide
solo” o porque no lo ha pronunciado “ex cátedra”;
y sostengan que el Papa con el tiempo dará mar­
cha atrás y reformará su doctrina; o que es cues­
tión personal de cada uno aceptar o no la deci­
sión sobre la regulación de la natalidad, es un
hecho que testimonia la verdadera crisis, que en
ciertos ambientes y personas sufre el principio de
autoridad de la Iglesia. Mas como esta autoridad
desciende de Dios, pues la ha recibido del mismo
Jesucristo, lo que se manifiesta es también la crisis
de Fe de esos sedicentes católicos.
Nos preguntamos: ¿qué valor puede tener para
nosotros una opinión, aquejada de falta de Fe,
sobre la Iglesia, sobre el Papa que están asenta­
dos sobre la Fe? La Iglesia y todo cuanto ella
contiene o a ella se refiere, si no se mira con los
ojos de la Fe. no se comprende en absoluto. Eso
Ies está sucediendo a los que polemizan con el
Papa.
La doctrina de la Iglesia rechaza que el Papa
tenga que decidir por mayoría. Aún más, sostiene
que puede decidir solo, incluso sin consultar a
los Obispos, aunque eso no lo suele hacer nunca
en cosas trascendentales; porque Pedro recibió
de Cristo el poder de at.ir y desatar sin restrinciones. sin sujeción a la opinión de pastores u
oveias. Y para que no errara en materias graves
se le aseguró la asistencia iluminadora del Espí­
ritu Santo.

6



Por tanto, pertenece al Papa y es cosa suya, en
el ejercicio de sus funciones de Doctor y Pastor
de los fieles, definir soberanamente la regla moral
que se impone al cristiano para su conducta y su
vida. Y no es necesario para esto que el Papa de­
fina “ex cátedra” un dogma de Fe. La autoridad,
que se deriva de su función de Vicario de Cristo,
es suficiente para hacer obligatorias las reglas de
moralidad que él precisa a la luz de la Revelación.
De esa Revelación, depositada en la Iglesia, y que
él, como Cabeza visible, tiene la obligación y mi­
sión de explicar y precisar en su aplicación a las
reglas de la vida.
De todos modos, Pablo V I tiene tras si, consigo
(y ciertamente ante sí) la continuidad de la ense­
ñanza auténtica de la Iglesia magisterial acerca
del matrimonio cristiano, desde Pío X I , con Pío
X I I y Juan X X I I I , por citar sólo los últimos. La
encíclica no significa una vuelta a doctrinas me­
dioevales, como se va diciendo para desacreditar
a Pablo V I, sino a la exacta, severa y continua
enseñanza de la Iglesia en el mundo contempo­
ráneo.
En su discurso del primero de agosto, Pablo
V I dijo que se había visto en la precisión de va­
lorar con la responsabilidad y con la libertad de
su oficio apostólico una tradición doctrinal, no
sólo secular, sino reciente: la de sus tres inmedia­
tos antecesores. Y añadió: “Estábamos obligados
a hacer nuestras las enseñanzas del Concilio por
Nos mismo promulgadas.”
La “Humanae V itae” no es, pues, la obra de
un Papa solitario y angustiado; cuanto él dice se
encuentra con pocas variantes en la Constitución
conciliar “La Iglesia en el mundo de hoy”.
Concluimos recordando, una vez más, que Jesu­
cristo está con la Iglesia y con el Papa y que los
fieles estamos con el Señor a través de la Iglesia
y del Papa. Por tanto sus enseñanzas son las úni­
cas normas seguras. Todas las demás son opinio­
nes; por consiguiente, todo aquel, sea quien sea,
que sostiene una opinión contraria a lo ordenado
por el Papa con intención de obligar y pretende
apartarnos del cumplimiento, en realidad nos apar­
ta de Jesucristo, que es nuestro único Salvador.
Hoy más que nunca, cuando tanto confusio­
nismo reina en las ideas religiosas, hemos de pe­
garnos a la norma de estar con el Papa, que es el
único que tiene garantías de verdad. Y no debe­
mos impresionarnos por el cúmulo de ataques que
desde todas partes le dirijen.
Y puesto que todo ha venido a propósito de la
encíclica sobre ciertos deberes matrimoniales, el
mejor homenaje que los esposos cristianos pue­
den rendir a Jesucristo es observar fielmente las
normas morales expuestas en ella.

TES TIM O IV IO S
TENGO SIETE HUOS
Santidad, he dudado en escribir­
le por temor a hacer un acto de
superioridad fuera de sitio, en­
viándole mi aprobación sincera a
su decisión que quiere impedir a
la mujer el degradarse. Pero hoy
es la fiesta de la Asunción del
Cuerpo de María, una fiesta que
da que pensar, y me he decidido
a escribirle mi pensamiento.
Tengo siete hijos que van de los
37 a los 22 años. Mi marido era
veterinario en una zona de mon­
taña. No nos ha faltado nunca lo
necesario: gozábamos de un bien­
estar logrado a base de serenas
renuncias y de ahorros. Quédé viu­
da cuando las tres hijas mayores,
con su carrera terminada, se ha­
bían casado y los otros cuatro hi­
jo s estudiaban. Tres de éstos ya
han acabado sus estudios; el últi­
mo hace tercero de bachillerato.
Las tres hijas me han dado ya
14 nietos; y mi hijo espera el se­
gundo chico.
Yo creo que los esposos que de­
sean lim itar los nacimientos no
se preocupan de los que nacerán,
sino de sí mismos. A ngelito Grossi.

CUARENTA Y DOS MATRIMO­
NIOS COOPERADORES SALESIANOS
A l terin inor una tanda d e e je r ­
cicios espiritu ales, adm irados con
Don B osco y ag rad ecid os por h a ­
b erles dejado como »ioía distinti­
va y hon oríficas e l A m or, la D e­
v oción y la O bediencia a l P apa,
hum illan a vuestra Santidad
sentimientos filia les d e gratitu d y
d e aleg ría p or la inspirada, clara,
convincente y co n fo rtan te en cícli­
ca <iHumanea Vitae», cu yas nor­
m as han sido siem p re reg la a la
qu e se han aten ido en su vida con­
yu gal con la confianza puesta an i­
m osam en te en la P rovidencia.
Al m ism o tiem po deponen en el
cáliz san to del oferto rio oracion es
y los fru to s d e estos ejercicios a
fin d e que M aría A uxiliadora y
ifesús S acram en tad o acom pañ en a
v u estra Santidad en el inm inente
v ia je apostólico. V iva é l P apa. H i­
jo s fieles. (Siguen las firm as).

UN GRUPO
DE PERSONAS VERANEANTES
Sentimos la necesidad de dar
gracias a Dios y a la Virgen San­
tísima por vuestra inspirada En­
cíclica, la cual demuestra con cla­
ridad que en realidad Dios no
abandona a este mundo, sino que
a pesar de todas las dificultades,
el conformismo, el espíritu reac­
cionario y contradictorio de estos
tiempos, del racionalismo y del
materialismo desbordante, n o s
asiste y guía.
En realidad la Encíclica da su
justo valor a la virtud, nueva luz
al sentido de donación y de abne­
gación, que deben acompañar la
vida del cristiano sin excluir el
amor conyugal y la paternidad
responsable bien comprendida.
La Encíclica es una prueba de
la confianza que Dios y la Iglesia
conceden al hombre de hoy. Tal
confianza suscita en los fieles bien
intencionados una fuerza particu­
lar para responder con plena ge­
nerosidad a las inspiraciones di­
vinas y para hacer refulgir con
nuevo esplendor a la Iglesia de
Cristo.

UNA MADRE
S oy una m adre qu e ha pag ad o
b astan te du ram en te los g ozos de
la m aternidad. P erd í m i p rim er
hijo ap en as n acid o ; qu ed é g rav em en te lesion ad a en algun os ó rg a ­
nos, m e vt fo rz a d a a seis m eses
de inm ovilidad y lu ego a una o p e­
ración que no salió bien d el todo.
S e m e acon sejó que no tuviera
m ás hiios. P ero com o s e m e con­
cedía, fu era con m u chas reserv as,
el intento de la cesá rea , eleg í este
cam ino. Mi segu nda hija tien e a h o ­
ra 18 /lijos, la tercera va a cum ­
plir H . E l S eñ or m e h a salvado
la vida tres v eces y h a recom p en ­
sa d o mi pequeña au d acia con m a­
ravillosa abu ndancia d e m edios.
Quiero ex p resarle, S an to P ad re,
que h ay m u chas m ad res que res­
p etan e l m atrim on io y la m a ter­
nidad, que sien ten en si m ism as
la ley d e D ios, que coincide tan
ex a cta m en te con la ley d e la na­

turaleza, y que tienen d e Dios la
recotnpensa a cad a sacrificio. P ero
son m u jeres que «o hablan, que
íio escribe» a los periódicos, que
no airean su propia intim idad, no
hacen ruido. i P o r qué, Santidad,
«o llam a a estas m adres y e.'sposas
resp on sables a rezar con U.sted e»i
HM dio particMÍarmenfe sign ifica­
tivo t

UN MEDICO
Soy un médico, padre de seis
hijos y doy siempre gracias a Dios,
por los grandes dones que me ha
concedido: mis hijos son sanos de
cuerpo y de mente y prometen
mucho en sus estudios y en la
vida. E l mayor cuenta once años
y el pequeño dos y medio.
Humildemente imploro de vues­
tra Santidad la bendición apostó­
lica para mi familia mientras jun­
to con mis hijos rezo por sus in­
tenciones todos los días. Osvaldo
Voltan.

RAJMOHAM GANDHI, NIETO
DE GANDHI, HINDU
E l pxinto de vista d él P ap a p o­
dría no ser tan im popular com o
stt«7ieren cierta s v oces estriden tes
que s e le oponen. C ierto núm ero
de p erson as que no sigu en las di­
rectrices d el Sum o P ontífice se
dan cuenta, no obstan te, que so»
justas. P uede .sMceder que no al
no seguirlas se sientan culpables,
pero más de uno p refiere un hon­
rado sexitido de culpa, a la in se­
guridad d e un d esierto m oral sin
normas...
En una ép oca en que el equívo­
co constituye un a rte, en que a
una linea derecha, se la m ira con
rec elo ; en que e l blan co y é l ne­
g ro son d esa g rad a b les y los g ri­
s e s p or el con trario siem p re son
h erm o so s; en que la am big ü ed ad
es eleg an cia y la p recisión tosca,
el P ap a P ab lo ha trazad o una lí­
nea d erec h a y precisa.
Aunque v a en cam inada a dirigir
a los católicos la E ncíclica recom ­
p en sará a cu an tos la lean sin p re­
juicios.


7

EL LARGO
Y
COMPLICADO
CAMINO
QUE LLEVA
A LOS ALTARES
Pocos conocen uno de
los liabajos más seiios y
concienzudos q u e lle ­
van a cabo los hombres
de la Sagrada Congrega­
ción de Ritos, de Roma:
la canonización de un
sanio.
La vamos a seguir su­
biendo escalón tras es­
calón Y al mismo tiem­
po iremos colocando en
cada uno a los miembros
de la Familia Salesiana
que suben ese camino.
Con lo cual, al mismo
tiempo, satisfacemos la
legitima curiosidad de
los que alguna vez nos
preguntan cómo marcha
la Causa de beatifica­
ción de alguno de nues­
tros siervos de Dios.

gloria de María Au­
xiliadora no está sólo en
el desarrollo prodigioso
de la Obra de Don Hos­
co en estos cien años; está, sobre
todo, en la floración de santi­
dad de la Virgen ha suscitado,
durante un siglo, en la Fami­
lia Salesiana.
Santo es el fundador, San Juan
Bosco; santa la cofundadora,
Santa María Mazzarello; santo el
discípulo, Santo Domingo Savio,
Y, tras éstos, una numerosa es­
cuadra encaminada hacia la glo­
ria de los altares: dos sucesores
de Don Bosco: Don Miguel Rúa
Y Don Felipe Rinaldi; dos obis­
pos salesianos, Yi luego, sacer­
dotes Y hermanas, un coadjutor
salesiano, un alumno, una alumna Y
cooperadoras salesianas.
En total 117 miembros de nues­
tra familia, ouYa causa de beati­
ficación está en curso. Damos a
continuación el estado actual del
proceso de cada uno, dentro del
desarrollo de una causa de bea­
tificación Y canonización.
^ 4: ^

L

m uerta en B alazar, O porto-Portug a l. en 1955, a los 51 años de edad.

a

UANDO una p e r s o n a
muere en fama de san­
tidad o de martirio, y
esta fama se va exten­
diendo Y se va OYCndo que se
obtienen gracias merced a su
intercesión, el obispo del lugar,
donde dicha persona ha muerto,
puede instruir el Proceso ordi­
nario o informativo, para lo cual
interroga a testigos citados al
efecto, recoge los documentos
presentados por los testigos y
los escritos del posible futuro
siervo ds Dios. Este proceso se
llama lordinarioi, porque lo
instruYe el ordinario del lugar
u obispo; es también informa­
tivo, porque tiene por objeto
informar a la Sagrada Congre­
gación de Ritos, de Roma, para
que pueda emitir un juicio auto­
rizado a propósito.

*

*

UANDO termina el Pro­
ceso ordinario informa­
tivo; el obispo manda
copia del mismo a la
Sagrada Congregación de Ritos
a Roma, acompañado de los es­
critos del siervo de Dios.

C

Siervo de Dios
Don RODOLFO KOMOREK

E stán y a en ma»os de la Sa~
g rad a C ongregación d e R itos los
P rocesos d e los 97 mártires espa­
ñoles, m uertos p or la fe , ph los
años 19S6-S9; d el coadju tor. Si­
món Srugí, de N azaret, m u erto e»i
B eitg em al-P alcstin a en Í9^S, a los
6tí a ñ o s; y el d e Afona. Luis Ma­
ría Olivares, obispo aaieaiano de
Sutri y N epi, m u erto en J9-J5, a
los 70 años.

^ >|C )(C

L

C

E n m iestra F am ilia S alesian a
s e h allan en e s te p rim er p aso del
P roceso ordinario in form ativo el
sierv o d e Dios. Rodolfo Komorek,
sa cerd o te polaco, m u erto e l añ o
19!f9, en B rasil, a los 59 a ñ o s; y
la sierv a d e Dios. Alejandrina da
Costa, C o o p e r a d o r a S alesian a,

*

Siervo de Dios
Don JOSE CALASANZ

A S a g r a d a Congrega­
ción, antes de admitir
oficialmente lo s docu­
mentos del Proceso or­
dinario, los estudia para ver si
la Causa ofrece fundadas espe­
ranzas .de éxito. Empieza por
examinar los escritos y luego
las actas del Proceso.
Si en los escritos no se hallan
ideas contrarias a la doctrina de
la Iglesia, la Sagrada Congre­
gación de Ritos emana un de­
creto reconociéndolo así; en ca­
so contrario, la causa queda
arrinconada.
En d iciem bre d el 1963 recibió
el D ecreto d e ap robación de los
e.scrit08, el sierv o de Dios, Luis
Vanara, sa cerd o te salesian o, fu n ­
d ad or de las H ijas de los S ag rad os
corazon es de Je s ú s y M aria, m u er­
to en C olom bia, en 1923, a los ^8
años.

ios escritos,
la Postulación (se llama
así a los que piden y
cuidan la beatificación),
hace imprimir las pruebas de
santidad o de martirio, sacán­
dolas del Proceso Ordinario, y
pasa copia al Promotor Gene­
ral de la Fe (el nombre popular
de este personaje es el de «abo­
gado del diablo») para que las
estudie y presente sus objecio-

A

Siervo de Dios
Coadjutor SIMON SRUGI

pro bado s

— 9

nes. Este estudio exige necesa­
riamente varios años.
E speran do esta s objecion es se
hallan los siervos d e D ios: Don Fe­
lipe Rinaldi, recto r m ay or de los
aalesian os, m uerto en Turin, en
1931, a los
a ñ o s; Laura Vicuña,
alum no de las H ijas de M aria
A uxiliadora, m u erta en Ju n in de
los A ndes-A rgentina, en 190^, a
los 15 a ñ o s: y Don Luís Mertens,
párroco salesian o, m u erto en L ieja -B élg ica , en 1920, a los 55 años.

«
las objeciones,
la Postulación tiene que
deshacerlas o aclararlas
aduciendo pruebas. Las
pruebas, las objecciones y Iss
respuestas, unidas en un solo
volumen, son examinadas, cuan­
do les llega el turno, por los
prelados de la Sagrada Congre­
gación de Ritos. Si su parecer
no es favorable, la Causa pue­
de rechazarse definitivamente;
por el contrario, si es favorable,
se comunica al Papa, el cual, si
lo cree oportuno, ordena la In­
troducción de la causa.
Introducida asi oficialmente
la Causa, la Congregación de
Ritos comienza por indagar si
al siervo de Dios se le está tri­
butando abusivamente culto pú­
blico como si fuese ya oficial­
mente beato o santo; en caso
de descubrirse abusos del gé­
nero, se suspende la Causa has­
ta tanto que no hayan desapa­
recido totalmente; si se com­
prueba que las cosas están en
regla y no se le tributa culto
público, se reconoce con el De­
creto de «Non cultu» (No hay
culto).
L a sierv a de Dios, Magdalena
Morano, in spectora de las H ijas

H

ech as

así llamado porque lo mandó
hacer la Autoridad Apostólica,
el Papa. La finalidad de este
nuevo proceso es llenar las la­
gunas y las eventuales contra­
dicciones halladas en los testi­
monios primeros sobre las vir­
tudes teologales, morales y ane­
jas (consejos evangélicos y hu­
mildad). El Tribunal formula
preguntas secretas, preparadas a
propósito por el Promotor Ge­
neral de la Fe, a cada uno de
los testigos del Proceso Ordina­
rio, si viven, y a otros testigos.
Terminados los interrogatorios,
el obispo manda copia de todo
a la Sagrada Congregación y
ésta a su vez a la Postulación.
Obtenidas estas pruebas viene
la duda, que hay que disipar:
¿qué fe merecen? ¿sen fuentes
seguras de verdad? Se impone,
pues, lo que se llama confirmar
la validez de los Procesos Or­
dinario y Apostólico, compro­
bando y verificando si en uno
y otro proceso se observaron
las sabias n o r m a s impuestas
por la Iglesia. En una palabra,
si los testigos son católicos prac­
ticantes; si prestaron juramento,
antes y después de su declara­
ción, de decir toda la verdad y
sólo la verdad y de mantener
secreto, de modo que los oíros
testigos no llegarán a conocer
las preguntas hechas por el Pro­
ceso y las respuestas dadas, y

si demostraron tener conocimien­
to, probidad y objetividad, et­
cétera.
Si Se halla que todo está en
regla, la Sagrada Congregación
emana el llamado Decreto de
Validez de los Procesos. A par­
tir de este momento el interés
de la Causa se centra en probar
que el siervo de Dios practicó
las virtudes cristianas en grado
heroico.
Cuando la Causa ha llegado
a este punto, se imprime un vo­
lumen con todas las pruebas de

Siervo de Dios
Don LUIS MERTENS

Sierva de Dios
Sor MAGDALENA MORANO

Siervo de Dios
Monseñor LUIS OLIVARES

de M aría A uxiliadora en Sicilia,
m u erta en C atania, en 1908, a los
Gt añ os, ha recibido e s te m ism o
añ o, el dia 16 de m arzo, el De­
creto de €Non cultu>.



*

«

l e g a d o s a este punto,
la Sagrada Congregación
de Ritos hace instruir en
las diócesis donde se
incoaron los procesos ordinarios
un nuevo Proceso Apostólico,

L

10



Siervo de Dios
Don LUIS VARIARA

Siervo de Dios
Don FELIPE RINALDI

Sierva de Dios
LAURA VICUÑA

santidad o de martirio encerra­
das en los Procesos y se entrega
copia al Promotor de la Fe, pa­
ra que, tras un cuidadoso exa­
men, que durará años y años,
prepare nuevas objeciones con­
tra la herocidad de las virtudes
del siervo de Dios.

f e en 19S0 y Doña Dorotea de
Chopitea, coop erad ora salesian a,
m u erta en B arcelon a, en 1891, a
les 7¡i años.

d es d el hijo del cacígue de la P am ­
pa A rgentina, Ceferino Namuncurá, m uerto, en R om a, a los 18
añ os, en 1905.

A guardan con p acien cia estas
objecion es Sor Teresa Valsé Pantellini, H ija de M aría A uxiliado­
ra, m uerta en Turín, el añ o 1907,
a los 29 a ñ o s; Mons. Luis Versiglia y Don Calixto Caravario,
osesíjiados en China por odio a la

Sierva de Dios
Sor TERESA VALSE PANTELLINI

^ ^ *

*

*

cuanto el Promotor de
la Fe presenta sus nue­
vas objeciones a la Pos­
tulación, ésta cuida de
responder adecuadamente.
E l 9 d e en ero, de este año, se
respondió a las objecion es hechas
contra la heroicidad de las virtu­

r e p a r a d a la respuesta,
la Postulación reúne en
un solo volumen las ob­
jeciones y las respuestas
con las pruebas correspondien­
tes y las distribuye entre los
prelados y consultores de la Sa­
grada Congregación de Ritos,

Siervo de Dios
Monseñor LUIS VERSIGLIA

Siervo de Dios
Don CALISTO CARAVARIO

E

n

P



11

que tendrán que estudiarlas di­
ligentemente Y dar por escrito
su voto a favor o en contra en
una solemne reunión de la Sa­
grada Congregación que se lla­
ma Congregación anteprepara­
toria.
E n octu bre de 1966 llegó a esta
m eta e l prín cipe polaco Augusto
Czartoryski, sa cerd o te salesiano,
m u erto en Alaaaio, en 189S, a los
37 años.

ilf *



*

Santo Domingo Savio, en 1954.
^

Sierva de Dios
Doña DOROTEA DE CHOPITEA

íít *

L

12

*

1951.

en Turin, en 1897, a las 87 años,
su peró esta fa s e en 1966, h ace
dos años.

LEGADOS finalmente a
este punto, sólo queda
para la beatificación el
estudio de dos milagros.
Este estudio lleva con­
sigo un trabajo análogo al se­
guido hasta este punto, a saber;

*

C

l

*

Don Miguel Rúa, p rim er su ce­
so r de San Ju a n B osco, d eclarad o
V en erable en 1953, s e h alla en es­
ta fa se.

UANDO médicos y car­
denales están de acuer­
do que los milagros son
auténticos milagros, y
que se pueden atribuir única­
mente a la intercesión del ve­
nerable, se presenta al Papa la
conclusión y, si es aprobada,
emana el Decreto de beatifica­
ción.
Para la canonización se estu­
dian con igual procedimiento
dos nuevos milagros, consegui­
dos después de la beatificación.
Como es sabido, han superado
b r i l l a n t e m e n t e esta última
prueba:
San Juan Bosco, en 1934.
Santa María Mazzarello, en

*

Promotor General de la
Fe recoge ios votos de
los prelados y consulto­
res Y, sin revelar sus
nombres, los entrega a la Pos­
tulación para que redacte la res­
puestas, Y aduzca, si las haya,
nuevas pruebas con nuevos do­
cumentos. Los votos Y las res­
puestas, reunidas en otro volu­
men, se distribuyen, esta vez,
entre los cardenales adscritos a
la Sagrada Congregación de Ri­
tos, además de los prelados y
consultores citados, y en el día
que señalen tiene lugar la Con­
gregación Preparatoria.
Si las dificultades expuestas no
se consideran suficientemente
allanadas, la Postulación tendrá
que preparar otras pruebas a dis­
cutir en una segunda Congrega­
ción Preparatoria.
Cuando quedan sólo dificulta­
des de poca monta son discuti­
das por los cardenales, prelados
y consultores, en presencia del
Santo Padre, en la Congregación
General. Si los pareceres son fa­
vorables, el Santo Padre podrá
proclamar la heroicidad de las
virtudes del Siervo de Dios, que
desde ese nomento será vene­
rable.
Don Andrés Beltrami, m uerto

E

Procesos Apostólicos al menos
sobre dos presuntos milagros,
validez de los dos procesos, es­
tudio de los presuntos milagros,
primero por parte de los médi­
cos, luego de los cardenales y
consultores, etc...

Siervo de Dios
CEFERINO NAMUNCURA

^

^

es el cuadro de los
Procesos apostólicos de
nuestros siervos de Dios.
En su desarrollo pode­
mos intervenir nosotros, pues
para que la Iglesia proclame
santo a un siervo de Dios son
necesarios dos elementos indis­
pensables: la heroicidad de las
virtudes y los milagros. A lo
primero pensaron ellos; en los
milagros hemos de pensar nos­
otros, pues los sirvos de Dios
no suelen hacer tales milagros
si no se les pide, y, si se les
pide, no los hacen si no hallan
en los peticionarios las disposi­
ciones necesarias: viva fe en
Dios Y gran confianza en la in­
tercesión de su siervo.
Este es, pues, nuestro cometi­
do; recurrir con fe a nuestros
siervos de Dios pidiéndoles gra­
cias Y milagros. De esta mane­
ra contribuiremos a hacer una
dulce realidad lo que todos de­
seamos, esto es, que la Iglesia
coloque sobre los altares a nues­
tros hermanos mejores y más
heróicos.

E

ste

GRACIAS,
DON BOSCO,
GRACIAS
Siervo de Dios
Don AUGUSTO CZARTORYSKI

Venerable
Don ANDRES 6ELTRAMI

Venerable

Don MIGUEL RUA

Gracias Don Bosco, porque donaste al mundo una Con­
gregación Religiosa dedicada al mejor de los apostolados,
al de llevar la palabra de Dios a los humildes.
Gracias Don Bosco, porque con la Palabra, ellos son ejem­
plo vivo de santidad, su ejemplar dedicación a los demás
lo pregona.
Gracias Don Bosco, porque tus salesianos a muchos de
nosotros nos enseñaron la senda de la verdadera felicidad,
desde muy pequeñitos.
Gracias te damos Don Bosco, porque en ésta, nuestra Sala­
manca Dios ha querido tener una de tus casas, y porque de
ella irradia la Voz del Evangelio a las barriadas obreras de
la capital, igual que tu enseñaste con el ejemplo de tu vida,
en la Italia de tus dias.
Gracias Don Bosco, porque quisiste que tus hijos del Teologado Salesiano bajaran a nuestro Barrio de la Vega, para
enseñar a nuestros hijos, hijos de obreros, la Divina Palabra.
Gracias porque con sus personas llega la alegría a la ba­
rriada, los juegos y las risas de nuestros pequeños se hacen
mucho más limpias, más ruidosas, más infantiles, más cristia­
nas, porque el cristiano debe ser ante todo, alegre.
Gracias Don Bosco, porque entre tus estudiantes salesianos
quisiste que bajara Don Quico como lo llamaban nuestros
niños, Don Quico, el santo paciente, el más jovial, el más ca­
riñoso, cualquier adjetivación que relacione su vida con todo
lo bueno que puede llevar el hombre se quedaría pequeña.
Gracias, porque un día 23 de junio, tu siervo Francisco
Franco Franco, estudiante teólogo, sacerdote inminente, sin
dudar un momento, entregaba su vida por salvar la de uno
de nuestros hijos, que estaba a punto de perecer ahogado en
las frías aguas del iCanalizoi en Candelario/ donde habían
ido de excursión de fin de Curso Catequístico.
Gracias Don Bosco, muchas gracias, te da esta barriada
porque ahora tiene a tu lado un representante, que no du­
damos tanto bueno conseguirá para nuestros pequeños/ por
medio de Don Quico, han llegado a caer sobre nosotros mul­
titud de gracias espirituales, y otros dones materiales.
Y gracias Don Bosco en nombre de Don Quico, porque le
diste una muerte que sólo está reservada para unos pocos, los
menos, los que Dios elige con anticipación por méritos ya
contraídos.
Que Dios Misericordioso lo tiene en su Seno, nuestra fe lo
confirma, y que su generoso sacrificio dé el fruto que todos
esperamos, para lograr un mundo mejor, un mundo, en el que
el Amor y el Sacrificio por los demás sean eje del vivir de
los hombres, en su proyección hacia Dios.
LUIS CALVO RENGEL
Padre de familia. Los Pizarrales (Salamanca)

— 13

CA M PAÑA ANUAL
D E LOS
COOPERADORES:

EUCARISTIA

LA EUCARISTIA PUNTO DE CONVERGENCIA DE DIOS Y EL HOMBRE
Dios quiere acercarse a los hombres.
Su designio es entablar coloquio y, más que esto, celebrar ban­
quete y, más todavía, comunión con nosotros.
Asi que la historia del mundo se caracteriza por las etapas de
este misterioso viaje de Oios hacia el hombre.
Por consiguiente, la relación entre la Vida Infinita y nuestra vida
humana, débil y enferma, es semejante a dos líneas convergentes que
al fin se encuentran en un solo punto, que es plenitud, que es felici­
dad, que es Vida divina comunicada a la vida humana: |Es Eucaristía!
Es pan del cielo para la peregrinación terrestre; es alimento di­
vino para el hambre humana.

EUCARISTIA, LECCION QUE EL SEÑOR NOS DA
Nuestra historia religiosa, que ha llegado al abrazo sacramental
con Cristo no termina en ese abrazo.
Está todavía en el terreno de la promesa.
Cristo está en la Eucaristía para nosotros, pero como comienzo,
como prenda; está como maestro, como educador.
Cristo está presente y está escondido, porque quiere despertar en
nosotros los actos, las virtudes y méritos que nos hagan dignos de
verlo un día y gozarlo en la plenitud de la luz y de la vida.
Cristo está presente y escondido para enseñarnos a creer, espe­
rar y amar.
Cristo nos adiestra en el ejercicio de la fe, de la esperanza y de
la caridad, es decir, en las virtudes teologales, porque son los cami­
nos que se nos ofrecen en la vida presente, para llegar a la última
etapa de la religión: la posesión de Dios.

LA EUCARISTIA NO ES DOGMA DIFICIL: ES AMOR
La Eucaristía multiplica ta presencia de Cristo en las almas que tie­
nen hambre de El, pero esto no es obstáculo para comprenderla, sino
el gozo de saber que es una sola voz para los que la escuchan, dis­
ponible para todos, pronta para todos.
Que el Sacramento más augusto, en el que no sólo está significado
sino contenido realmente el Cuerpo del Señor, se nos presente como
un trozo de pan no nos sorprende ni desconcierta, sino que nos em­
briaga de gozo, porque el encuentro supremo y definitivo que Dios,
en Cristo, ha preparado al hombre es amor.
Y que el amor se multiplique y trate de entrar, como alimento vital
Interior en los corazones; y que se sacrifique e inmole como victima,
no es incomprensible sino lógico, sabio y magnifico.
(Pablo VI. Aloe. 28-5-64.)

NUEVAS

F

6EMELA
ia r io s , revistas, noticiarios nos ha­
blan de tanto en tanto de tgemelaje»
para decirnos que dos ciudades de
distintos países, dos entidades u orga­
nizaciones con identidad de intereses o afini­
dad de arte o tradiciones comunes deciden
hermanarse para fomentar las afinidades exis­
tentes entre ambas.
El gemelaje responde siempre a una nece­
sidad de amor y de unión, ínsito en la mis­
ma naturaleza del hombre.
Como fruto del Concilio ha nacido el geme­
laje misionero. Muchas son las diócesis euro­
peas Y españolas que se han hermanado con
misiones para ayudarles con envío de sacer­
dotes, medios económicos, adoptación de pa­
rroquias, asistencia de seglares a las obras
de la misión, etc., etc.
El XIX Capítulo General de nuestra Con­
gregación, secundando el pensamiento del Con­
cilio, estableció que para «promover el espíritu
Y el interés misionero de sus casas y salesianos, una Inspectoría podía, de acuerdo con
el Superior encargado de las Misiones, hacer
convergir el interés de la inspectoría hacia
una o más misiones salesianas.i
De esta disposición han nacido diversos
gemelajes entre Inspectorías y Misiones Salesianasj hoy entendemos hablar de la herman­
dad creada entre las Inspectorías de Milán
Y la del Africa Central, que comprende el
Congo, Rwanda y Burundi y la diócesis misio­
nera de Sakania.
La elección de la misión fue un homenaje
a Pablo VI, que en su Mensaje al Africa dijo:
«Las iglesias de Africa tienen necesidad de
la ayuda constante y generosa de todos los
cristianos.*

D

Lo que es imposible a la naturaleza lo consi­
gue la caridad cristiana: hermanar como geme­
los a blancos y negros, a diócesis europeas
con otras africanas, para ayudar a las misio­
nes más pobres.

FORMAS DE APOSTOLADO MISIONERO
— 15

Es evidente que esta hermandad no se reduce
a una generosa y continua petición de medios
para la Misión elegida. iNuestro gemelaje con
las misiones del Africa Central —ha declarado
el inspector de Milán— no debe reducirse a
una ayuda puramente material, sino que ha
de expresar un vivo sentimiento de catolici­
dad. Téngase presente que una clara orienta­
ción hacia el cristianismo por parte del Con­
go y del Africa Central puede señalar decidi­
damente el porvenir cristiano del Africa Cen­
tral. Esto nos debe empujar a rezar, sufrir y
dar y, si es posible, a dar también la persona
en favor del reino de Cristo y de su Iglesia.!
La hermandad nació en Navidades de 1965.
El Inspector, terminado el Capítulo General,
consultó con el Consejo y lo propuso oficial­
mente a los salesianos, jóvenes alumnos, anti­
guos alumnos, cooperadores y amigos de nues­
tras obras para que cada uno aportara genero­
samente su parte. De esta manera todos y cada
uno se sentían personalmente ligados a una
empresa misionera concreta y, al mismo tiem­
po, se anclaban más profundamente en el es­
píritu salesiano, asumiendo más vivamente una
de las formas carasterísticas de apostolado,
el de las Misiones.
Siguió inmediatamente una obra capilar de
mutuo conocimiento, de intercambio de noti­
cias e informaciones, de correspondencia entre
jóvenes y jóvenes, salesianos y salesianos y
de documentación fotográfica y grabaciones
magnetofónicas. Objetos de artesanía del Afri­
ca Central aparecieron en los puestos de ven­
tas de las casas salesianas milanesas para ayu­
dar con su venta a la Misión hermanada.
Los hermanos de la inspectoría de Africa
Central que estudian en Italia pasan sus vaca­
ciones en la inspectoría milanesa. Se invita
a los misioneros a hacer su campaña en las
diversas casas de Milán y se les ayuda en los
viajes. Al fin del primer año la ayuda material
se concretaba en el mobiliario y puesta a
punto del nuevo aspirantado de Ngozi, que
subió a medio millón de pesetas.
El curso 1966—67 la hermandad se reforzó
con el envío de un misionero al estudiantado
filosófico de Kansebula, en Lubumbashi.
En el mismo año se pidió el concurso de los
milaneses para la «Ciudad de los muchachos!
que el padre Gerardo Van Asperdt (conocido
de nuestros lectores, lo mismo que su ciudad)
estaba construyendo en la capital de Katanga.
Esta petición desató una serie de tómbolas,
rifas, funciones de teatro y cine a beneficio
de la Ciudad, a lo que se añadió venta de
objetos exóticos africanos, sellos, subastas, etc.
teniéndose en más de una ocasión que frenar
16

Los salesianos de Milán se han hecho gemelos de
han empezado a funcionar: salesianos, material '
cana de la que damos unas notas gráficas: el río
de Sakania, una moderna escuela primaría; unas
cotar 7 Fernando Rwabuhungu, el ]pr

e los del Africa Central. Los vasos comunicanles
7 dinero van a robustecer la débil hermana airi*
o Kafubu camino para todos los Centros salesianos
niñas a las que las HHMUV. han enseñado a triprimer coadjutor salesiano de Ruanda.

el celo arrollador de los muchachos y alum­
nos de bachillerato.
El pensamiento misionero ya no es privativo
de un pequeño grupo de iniciados reunidos
en torno a un salesiano entusiasta que traía
de transfundirles su fuego interior. Va camino
de convertirse en un clima, que facilita no
poco la respuesta que los Salesianos se esfuer­
zan por dar a los problemas más graves del
mundo de hoy.
Es un florecimiento continuo de simpáticos
episodios entre alumnos y salesianos.
Una mañana, en la última hora de clase el
maestro nota una palidez extraña en un mu­
chacho de por sí inquieto. El muchacho, inte­
rrogado, responde que había renunciado aque­
lla mañana al bocadillo para poder ofrecer una
limosna para la misión africana gemela.
En una de las grandes casas en la que es
tradición que los salesianos den un paseo por
Pascua, el director recibe una petición angus­
tiada de un venerando misionero al que no
le parecía conveniente decir que no. Estando,
lo mismo alumnos que salesianos, empeñados
con la penitencia cuaresmal en pro de Africa
Central, les propone renunciar al paseo» la
propuesta fue acogida con entusiasmo .
Al fin del año el auxilio en metálico subía
a seis millones de liras, sin contar el envío de
medicinas, vestidos, ornamentos sagrados y
cosas semejantes.
Don Mario Ardenghi se ofreció para ir cin­
co años al Africa; destinado al aspirantado de
Kigali, en Rwanda, mantiene vivo con sus
cartas el entusiasmo por la Inspectoría gemela
y por las misiones salesianas.
El curso 1967-68 la inspectoría ambientó sus
esfuerzos para dotar al centro juvenil de Ruashi, un suburbio de Lubumbashi, donde la
juventud queda abandonada a si misma.
Un alumno de las escuelas profesionales de
Sexto-San Giovanni, ya ha tomado sus medidas
para apenas termine sus estudios de electró­
nica ir dos años a prestar sus servicios en las
escuelas profesionales salesianas del Congo.
No es posible hacer un balance de los frutos
espirituales del gemelaje, que son los más pre­
ciosos. Así lo recuerda el inspector de Africa
Central en una de sus cartas: lEntraremos en
comunión con nuestras intenciones de aposto­
lado, pues lo que más falta es siempre ese
espíritu de fe y esa esperanza que es Cristo,
el cual distribuye su gracia y la convicción de
que nosotros somos solamente los instrumen­
tos!.

— 17

A n e e d o ta n io

de

El pueblo siempre ha juzgado con
indulgencia a esos famosos saltea­
dores de caminos que «robaban a
los ricos para dárselo a los pobresi.
Es de suponer que las personas
despojadas tan a las buenas no
pensarían lo mismo.
En la vida de Don Bosco hay un
caso parecido, salvando todas las
distancias. Don Bosco tenia dos ma­
nos para pedir y un bolsillo muy
hondo, algo asi como un saco roto.
Pedia con las dos manos a todo el
que tuviera algo que darle y, con­
vencido de que hacía un bien a
los ricos invitándoles a dar limos­
na, no se cansaba de mostrarles el
bolsillo sin fondo de las necesida­
des de los muchachos que tenia
recogidos en su casa de Valdocco.
Pero nos hemos salido del asun­
to. Don Bosco fue invitado a co­
mer por un matrimonio turinés muy
acomodado. Les unía una amistad
muy grande. Fue recibido en la
puerta por ambos esposos con to­
dos los honores y con toda alegría.
Al ir pasando por distintos salo­
nes camino del comedor, la señora
se dio cuenta, con asombro, que
D on B o s c o disimuladamente se
echaba al bolsillo aquí una estaluita de plata, allí un cenicero del
mismo metal, un ílorerito y no sé
cuantos objetos más. Todos eran
de plata; todos de valor, acredi­
tando que tenia buen ojo.
La señora no se desmayó de mi­
lagro, pero se iba poniendo de to­
dos los colores; Don Bosco se reía
por dentro viendo sus apuros, pe­
ro aparentaba una tranquilidad de
santo. El marido no se dio cuenta
de nada.
Llegados al comedor, la señora
advirtió que E)on Bosco se senta­
ba con todo cuidado. Respiró.
Don Bosco, que era un admira­
ble conversador, dio comienzo a
una de sus deliciosas conversacio­
nes, alababa los platos, su delica­
do sabor, su exquisita presentación,
todo ello mezclado con alusiones
a la situación del país, del Papa,
etc.

18

tP o n

B oseo

La señora, halagada con las ala­
banzas de Don Bosco a sus exce­
lencias culinarias, se olvidaba a
ratos de lo que había visto y, aun­
que se consumía en ganas de ad­
vertir a su marido de lo sucedido,
Don Bosco hábilmente no le deja­
ba tener ningún aparte. Así llega­
ron al café, que tomaron en un
saloncito.
Faltaba poco para tener que
marcharse y la señora no sabía có­
mo decir a Don Bosco que había
tenido unas pequeñas distraccio­
nes. Y el tiempo se iba.
En esto Don Bosco se vuelve al
marido diciéndole que deseaba pe­
dirle un consejo para un negocio
que traía entre manos. El señor de
la casa se brindó de mil amores a
aconsejarle en lo que deseara.
Se trata, le dijo Don Bosco, de
que una señora, a quien usted co­
noce mucho, muy bondadosa, muy
amiga de hacer el bien a los ni­
ños pobres, le había regalado unos
objetos de plata para que los ven­
diera Y con su producto aliviara
algo las necesidades de los chicos
del Oratorio. Pero, como él enten­
día poco de metales preciosos, te­
mía malvenderlos, por lo que ha­
bía pensado ofrecérselos a él, porque como buen entendedor y ami­
go le daría el precio justo.
Y sin esperar respuesta fue ali­
neando cuantos objetos «distraidamente» había metido en sus bolsi­
llos antes de comer. El marido al
dars-e cuenta que eran suyos soltó
una alegre carcajada, reconoció que
la broma había sido muy ingenio­
sa Y tanto mejor le parecía, a me­
dida que su esposa iba contando
cómo había visto a Don Bosco to­
mar todo aquello, el sofocón que
se había llevado al verle robar, co­
sa que jamás hubiera imaginado.
El desenlace fue muy feliz para
Don Bosco f le pagaron el doble del
valor de los objetos y le invitaron
para otro día, aunque advirtiéndo­
le que lo vigilarían bien.
Poro, que sepamos, Don Bosco
no volvió a robar más.

V O L U N T A R IO S
H IS P A N O A M E R I C A

Respondiendo al llamamiento en favor de HispanoAmérica 50 salesianos europeos, de ellos 14 españo­
les, se ofrecieron voluntarios por un período de cinco
años para ayudar a las misiones salesianas ameri­
canas. Reunidos en Roma para un cursillo de orien­
tación acudieron a una audiencia general del Papa
que les dirigió estas palabras:
€Nueatro p atern al saludo se dirige a h o ra con vivo
a fe c to a l grupo d e sa cerd o tes salesian os que parten
para las misiones de H ispano-A m érica.
B ienvenidos h ijos dilectísim os. Con v u estra visita
d esp ertáis d e nuevo en nuestro án im o el e c o su aví­
sim o de las jo m a d a s in olvidables, que vivimos no ha
m ucho, du ran te nuestro v ia je a l C ongreso E ucaristico internacional de B og otá. Y nos traéis la pru eba
de vuestro g en eroso em peñ o h acia aq u el gran conti­
nente que os propon éis ab o rd ar con prop ósitos g en e­
rosos, sin escu ch a r la voz de la ca rn e y d e la san ­

g re sino sólo la del Señor que allí os llam a y la de
las a lm a s que reclam an v u estra ayuda.
S om o salesian os os en treg arán en A m érica una
h eren cia p reciosísim a, d eja d a por vuestros a n tece­
sores, que su pieron c re a r en aqu ellas region es un
patrim on io in com p arable de obras, activ id ad es y ex ­
p erien cias, d e las que pueden en org u llecerse leg íti­
m am en te los h ijos de Don B osco. Hoy sois llam ados
a h a c er fru ctificar la ob ra, p ese a la s trem en das d i­
ficu ltades que la Ig lesia h alla en aqu el continente.
Que la g ra cia d el Señor os acom p añ e en e s te co m e­
tido altísim o, lleno de ard u as fa tig a s, p ero tam bién
d e san tos consuelos. R ezam os p or vosotros a este fin
y en pren da de los au xilios d e lo A lto os dam os la
B endición A postólica.*
Pocos dias después los voluntarlos llegaron cada
uno a sus respectivas misiones.

— 19

£■ /

P~ M a n u e l

A lb ix u rí,

uno de esos m isioneros
tfue se sueña s e r ouando
jovenf esté en España cu­
rándose unas c o s iiiia s y
v é rte b ra s que se rom pió
a i fa iia r ie un puente de
bambúrn He a q u i ia p r i­
m e ra de las o rónicas que
nos ha prom etido
Es muy posible que os encon­
tréis con mapas de la India que
llevan nombres tan de cine, co­
mo estos: IJungla Virgen, In­
fierno Verde...» Esta designación
os puede llevar a un engaño.
Junglas vírgenes son, con fre­
cuencia, áreas casi inaccesibles
con aldeas desparramadas y en
tan peligrosos lugares, que los
oficiales encargados del catas­
tro han admitido sin ambages
su derrota y han cerrado su ex­
ploración con sólo dos palabras:
•Jungla Virgen». Algo parecido
a lo que nuestros antiguos car­
tógrafos cuando ponían letreriíos como iHic sunt leones el
dracones», «aquí solo hay leo­
nes y dragones».
Mi misión del Lyngngam apa­
rece sólo con este título en la
geografía del mundo; «Jungla
virgen». ¿Verdad que el título
es de película? De hecho es un
vasto territorio de montañas y
colinas, que a caballo sobre el
Brahmapulra y la llanura Gan20



VUELVE
PRONTO:
TE
ESPERAMOS

gótica, surge a los pies del Himalaya en la llanura del Assam.
Está habitado por las tribus de
Khasis, Lyngngam y Garó. For­
midables gentes de piel bronce­
ada y ojos almendra, de raza
mongólica, que se sienten poco
apegados al terruño. En cuanto
rehúsa producir, simplemente se
ponen a andar. Echan el ojo a
una nueva floresta, la queman
y sus cenizas servirán de abo­
no para sus cosechas de arroz,
mijo y boniatos. En cuestión de
pocos años brotarán de nuevo la
hierba del elefante y del tigre
y retoños de árboles colosales.
No en vano estamos en el tró­
pico con las lluvias monzónicas mayores del globo. Calor,
humedad, malaria, e inacoesibilidad son la cruz del misionero
en Lyngngam. En muchas par­
tes, soy el primer blanco que
pisa esas colinas sin caminos.
Las viejas y las criaturas de los
villorrios salen en sus trajes adamíticos a dar un vistazo a la

w m
t
iffi^íueitie colgante sobr^' el do Dhan
!j^r%en comparación con oíros óe
es una joya arquitectónica |
lídei y elegancia.-

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r^>k-

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Vr¿-|^.
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blancura de mi piel y ^
for­
midable paraguas de ibaserriíarrai, que me lo compré en San
Sebastián cuando iba rumbo al
país más lluvioso del mundo.
Llevo doce años en esta mi­
sión. Tengo bambúes suficien­
tes para abastecer el mercado
mundial de pescadores, y elefan­
tes, tigres, leopardos, búfalos,
osos, monos y serpientes sufi­
cientes para satisfacer al más
exigente safarista y aún expor­
tar a cada circo del mundo. Y
esto sin exagerar. Si quieres con­
vencerte, sígueme. Ponte tus bo­
tas y empuña tu metralleta o tu
rifle, porque siempre la pruden­
cia fue compañera del valor.
Adentrémonos... En fila india. La
única manera de andar por es­
tos andurriales. Esta vez camino
yo delante. Me sabía ya de me­
moria casi toda la orografía. No
en vano son años de recorrido
diario. A bastante distancia de
mi el catequista y dos portado­
res de mis bártulos, que com­

prenden desde el altar portátil
hasta las medicinas e inyeccio­
nes... Llego a un claro de la jun­
gla, que es ya dominio de un
búfalo. Para, asustado, en su pas­
tar y me clava sus ojos estúpi­
dos y duros. Le zarandeo igno­
miniosamente mi paraguas y vol­
viéndome sus cuartos, desapare­
ce bufando en la floresta. Me ol­
vido de él fácilmente. Cuatro
minutos después, me lo encuen­
tro de nuevo bufando salvaje­
mente con fuego en sus ojos.
Trato de asustarle abriendo y
cerrando como antes mi para­
guas, pero esta vez no se mue­
ve. Lo mismo que si lo hubiera
saludado con un pañuelo. Tam­
poco yo me muevo un centíme­
tro para no asustarle más y por­
que, sobre todo, me es imposible
escaparme. El bicho concentra
todo su peso, más de 600 kilos,
en sus patas delanteras y se aba­
lanza sobre mi con la furia loca
de una locomotora. En el mis­
mo instante, algún buen ángel

me inspira tirarme al suelo, ha­
cia atrás, al tiempo que pasa
sobre mí con la velocidad y el
veneno de un relámpago... Des­
de donde estoy, grito a mi ca­
tequista: sCuidado. Echate a tie­
rra». Pero el búfalo, salvaje y
altanero, sigue su marcha hacia
la floresta cubierta de bambúes,
pinos, teakwood y rhododendros. Sigo sentado en la húme­
da hierba hasta que llega el ca­
tequista que me creía malheri­
do o semimuerto y me encuen­
tra riéndome de mí mismo. iPobre Manolo. Gracias a esta caí­
da te has salvado, por esta vez,
de ser pasto de chacales en la
jungla».
Es el atardecer. Llegamos al
río Wahblei, el río Dios, que nos
tiene reservada una pequeña sor­
presa. Como a unos 600 metros
de distancia, una manada de
elefantes se están tomando su
baño diario. Los vemos jugando
en las aguas, contamos hasta
una docena, madres con sus


21

Si

Irompas converlidas en duchas,
lavando a los peques, se echan
por la arena de la orilla y se
restregan y juguetean. Hemos
caminado ya unos 18 kilómetros,
calculo. Buena ocasión para zam­
bullirme, pienso. Ya a punto de
echarme al agua, mis tres acom­
pañantes, el catequista y los por­
tadores tratan de impedírmelo y
me gritan:
iNo Padre, no; es peligroso.»
«Vamos, les respondo, que los
elefantes están demasiado lejos
para temerles.»
No son los elefantes lo que les
preocupa. Los Khasis temen las
profundidades. Aguas profundas
y torbellinos son la morada de

desaparecen y el rio se extien­
de, turbulento y amenazador, por
una anchura de medio kilóme­
tro. Los poblados permanecen
aislados por estas barreras de
aguas durante meses y los puen­
tes de lianas y bambúes son
arrastrados por su furia. Cada
año exigen muchas vidas en su
furor inigualable y así, hace cin­
co años, en pleno monzón, perdí
a mi compañero de fatigas por
muchos años, Padre Mala, arras­
trado por las aguas del turbu­
lento río Wahmyntang. Un mi­
sionero de talla excepcional. Un
fuera de clase. Que en sus co­
rrerías apostólicas, recorría im­
pertérrito la jungla mojado de

hacer dar vueltas la cabeza de
un trapecista, hasta poético en
su sencillez, y desde donde caí
junto con mis dos compañeros,
rompiéndome la espina y al que
debemos, yo, mis forzadas vaca­
ciones en Azcoitia, y tú el leer
hoy este artículo.
Perdóname, lector, que rae ha­
ya ido por los cerros de Ubeda.
Nada extraño en un misionero.
Pero volvamos. Pasamos a nado
el río Wahblei y, ahora, colina
arriba por dos horas y media,
hasta llegar a un claro de la
jungla, donde se acurruca el po­
blado de Nongriagnah. El sol
está ya calando tras la floresta
inmensa y verde. Un poco can-

los malos espíritus y temen. Yo
suelto una carcajada y me zam­
bullo, mientras les oigo decir:
«¿Por qué preocuparnos? Los
espíritus hasta ahora nunca han
podido con el Padre Albi.»
Se habrán creído que yo he
santificado las aguas con mi
zambullida, porque al cabo de
poco rato les veo en el agua
detrás de mí y armando un ja­
leo de mil diablos para acabar
de espantar a los ya atemoriza­
dos espíritus malignos. Menos
mal que no estamos en la esta­
ción de los monzones y las aguas
se estrellan y corren entre gi­
gantescas rocas calcáreas. En la
época de las lluvias las rocas

pies a cabeza y azotado por los
terribles monzones, que duran
cinco meses largos^ y en el res­
to del año aplastado literalmen­
te por un sol tropical de páni­
co. £1 día del entierro, después
de una semana de búsqueda has­
ta unos 25 kilómetros más aba­
jo del lugar de su desaparición,
hice su elogio fúnebre, glosan­
do las palabras de la Escritura:
«La muchedumbre de las aguas
no pudo acabar con su caridad».
A mediados de octubre, cuan­
do los monzones empiezan a
amainar, los Lyngngam cuelgan
de nuevo sus puentes de bam­
búes y, una vez más, tienes de­
lante de ti un puente capaz de

sados. Más que todo con ham­
bre, pues habremos caminado
hoy unos 30 kilómetros y los
gusanos de seda, que nos hemos
zampado por la mañana, después
de misa, se ve que no dan para
tanto... Si alguno no sabe lo que
es apetito, que me lo pregunten
a mí. De pronto, una voz recorre
toda la aldea, como un reguero
de pólvora: «Ha llegado el Pa­
dre Albi. Ha llegado el «Phadar».
El cacique sale de su choza
para saludarme y cumplir con
su obligación de jefe. Nos cho­
camos las manos y me ofrece
agua para lavarme. Mientras
cumplo con el ritual del caso,
da la orden de mi llegada y de

22



que recojan el arroz para mi ce­
na. Cada íamilia da su puñado
Y nadie rehúsa esla muestra de
hospitalidad hacia itan ilustre
forastero» (?). Todo el pueblo
está en la plazoleta. Con los cin­
co catecúmenos, que teníamos
en la aldea, el catequista orga­
niza un servicio religioso con
cantos Y sermones y
cuando
en cuando, mi viejo compañe­
ro de fatigas, el gramófono des­
garra el aire con un Zorlziko o
con un tjipio» del Bengala o del
Assam. No salen de su asombro
al contemplar su »Kor Kren (má­
quina parlante). Al fínal les ha­
blo de Dios Nuestro Señor, de
su Providencia y
bondad

su manera. El »show» dura más
de tres horas y ni siquiera el
gramófono con sus tres veloci­
dades puede competir con la flu­
idez de mis palabras. Lo bueno
es que les parecía poco y eran
ya las doce pasadas, cuando me
retiré a la choza del jefe para
saciar mi hambre de lobo. En
una hoja de plátanos, me sirven
dos puñados de humeante arroz.
Y en otra, un montoncito de sal
para darle el sabor y un puñadito de gusanos de seda a la pa­
rrilla. Me siento en un tarugo y
en mi apetito me imagino estar
en el Ritz. Será mi dieta diaria
mientras dure la jira, un par de

mientras voy a comer mi arroz,
reparto mis medicinas a los en­
fermos. Son unos 25 los que
apunto en la lista de catecú­
menos Y quieren seguir a Cris­
to Nuestro Señor. Dejo la aldea
hacia las nueve de la mañana y
todos esperan para despedirme y
decirme que no tarde tanto en
venir a volverles a ver. El jefe
me dirige las últimas palabras
a voz en cuello y me dice:
iTu visita ha sido fugaz como
el vuelo de nuestras aves en la
floresta. Vuelve pronto, que te
esperamos... Necesitamos de ti
para que nos enseñes de Dios y
de Jesucristo... iNamarba ngi

Cuatro largos y flexi­
bles bambúes tienden
un puente sobre el abis­
mo en Tieddeng, As­
sam; el Bramaputra, que
convierte en lago las
llanuras assamesas du­
rante los monzones y la
jungla, con sus bestias
feroces y las insacia­
bles sanguijuelas. Todo
es camino para el P. Albizuri que cuida unas
22 aldeas a las que vi­
sita una vez al mes, ca­
minando horas eternas,
para visitar a los enfer­
mos, administrar los sa­
cramentos y hablar de
Jesucristo.

I

manifestadas en Jesucristo, al
hacerse Hombre y morir por nos­
otros, por ellos Y por mí, sin
distinción de razas ni condicio­
nes sociales. Crece a lo indeci­
ble su emoción y expectación,
cuando me ven montando entre
dos árboles una sábana y mis
bártulos para mi espectáculo de
«televisión». Una linterna mági­
ca (nunca más veraz el nombre),
filminas a colores sobre la vida
del Señor y un buen farol Petromax. Eso es todo. Cada di­
bujo Y escena es saludado con
unos «Oh» Y «Eees» deliciosos,
que yo corroboro echando a es­
padas mi estentórea voz para ex­
plicar, dramatizar y gesticular a

meses, si es que no tenemos la
fortuna de cazar algo.
Nos acostamos hacia la una
de la mañana en la choza de
bambúes y hojas de palmera que
nos ha cedido el jefe. Sobre una
estera de tierra. Apenas tengo
tiempo de rezar un avemaria...
Me alzo hacia las seis. Me la­
vo. Pongo el gramófono para
reunir a la gente y les digo la
santa misa sobre el cajón de mi
linterna mágica. Todo el pue­
blo está allí entre sorprendido
Y maravillado. Les hablo nue­
vamente de El, de su Iglesia y
de la manera de ser de sus dis­
cípulos. Beben literalmente mis
palabras y al acabar la misa.

iaid haka dum ngiew-ngiew
khlem don jingshai». («Porque
caminamos como en noche os­
cura en la jungla sin luz».)
Este grito de angustia quedó
para siempre clavado en mi al­
ma Y por eso volveré. Porque
lodos somos hijos de Dios. Vos­
otros también. No sólo los blan­
cos. Con un título más a vuestro
favor. El de vuestra pobreza y
sufrimientos constantes, que os
acercan tanto, tanto a Cristo Cru­
cificado. Esperadme en la encru­
cijada de vuestra jungla, que no
tardaremos en volvernos a ver
Y, entonces, entre todos, cono­
ceremos mejor a Cristo Nuestro
Señor.

23

Cayó de una bicicleta
Sun J o s é d el Valle. -M.I hijo Miguel cayó de
una bicicleta dándose un fuerte golpe en la ca­
beza, sufriendo un derrame cerebral que precisó
una delicada operación, y estuvo con este daño
unido a su parálisis entre la vida y la muerte;
y ante el temor de que al reponerse quedase
ciego o imposibilitado por completo, acudí con fe
a la que es nuestro AUXILIO, y, hoy, a Ella
gracias mil. está en casa recuperado sino dol todo
en su parálisis sin el temor de un peor mal de
ceguera, pues, nunca creimos se recuperase.
Acudan a Ella con fe y verán maravillas.
Entrego una limosna para el culto de Nuestra
Madre y Patrona en nuestra Parroquia Salesiana.
M ercedes O arcla P a rr a d e liid aly o .
Ante aquel panorama
Barcelona. Tenemo.s un pequeño negocio y
últimamente sufrimos una crisis tan alarmante
durante la cual nuestro sufrimiento era terrible,
pues ya somos mayores para empezar una nueva
vida.
Ante aquel panorama pedí con toda mi alma
a nuestra querida Madre María Auxiliadora nos
alcanzará el volver a trabajar como habíamos
trabajado siempre. Aún no habíamos terminado
la novena y empezamos a notar que nos iba
concediendo la gracia hasta normalizar nuestra
vida como antes.
Nos parece que Nuestro Señor ha hecho con
nosotros un nuevo Caná por medio de María
Auxiliadora. Gracias, Dios mío. Gracias, María
Auxiliadora. B . B.
Le hice besar la reliquia de Don Bosco
M onópolis.— Mi hermano se vio de pronto ata­
cado por una fiebre altísima. Llamamos al mé­
dico que diagnosticó, enfisema pulmonar, bron­
quitis difusa y nefritis. En seguida le aplicamos
los remedios recetados por el doctor, pero ni los
pulmones ni los riñones mejoraban: antes al
contrario se agravó de tal manera que los mé­
dicos llamos a consulta declararon que la situa­
ción de mi hermano era desesperada. Le adminis­
tramos el Viático. Yo desconsolada, pero sin per­
der mi conñanza en San Juan Bosco, le hice
besar su reliquia y se la puse debajo de la almo­
hada. Aquella noche pudo dormir. A la mañana
siguiente, después de tres días que no hablaba.

24

a mi pregunta de como había pasado la noche,
respondió que había dormido y que se encontraba
bien. Hoy puedo ya cumplir mi promesa de pu­
blicar la gracia y lo hago convencida de que
es un grato deber. M aría S téfan o.
Varios días entre la vida y ia muerte
A sti.— Mi hija, alumna de las H ijas de María
Auxiliadora, mientras iba en bicicleta haciendo
unos recados, fue atropellada en un paso a nivel
por un coche. El choque fue tan violento que
recogida inmediatamente en una clínica, perma­
neció varios días entre la vida y la muerte
manteniéndole la respiración con oxígeno. María
Auxiliadora, cuya Imagen llevaba en su porta­
monedas que estrechaba entre sus manos en el
momento del choque, la salvó impidiendo que el
golpe en la cabeza fuese mortal. Temíamos tam ­
bién que le quedase una pierna más corta que la
otra debido a la fractura del fémur. Pues bien,
nuestra hija ha quedado bien del todo y del ac­
cidente sólo le queda un recuerdo agradecido a
María Auxiliadora.
He mandado decir una Misa en el altar de la
Virgen de Don Bosco en acción de gracias y pro­
piciación de toda la familia. C oncha Pía.
Ei mal que no perdona
V en ecia.— Mi padre fue atacado por el mal
que no perdona y los médicos le dieron un peque­
ño margen de vida. Como quiera que mi hijo
acude a las escuelas salesianas yo soy devota
a María Auxiliadora y de San Juan Bosco. Por
lo que hice la novena recomendada por este Santo
y, no teniendo dinero que enviar, mandé un ador­
no de oro como limosna para las obras salesianas.
María Auxiliadora ha escuchado mis oraciones
en cuanto que mi padre ha podido volver a casa
parcialmente curado. Todos, incluidos los médi­
cos. que lo atendieron, declararon que sólo un
milagro podía explicar la vuelta a la vida de
mi padre. Doy gi-acías a María Auxiliadora y a
Don Bosco y les pido que continúeen protegien­
do a mi familia. G abriela L ibra.
No nos cansamos de invocar a Don Bosco
EJI 17 de octubre, un cshoque espantoso, de fren­
te. contra un camión con nuestro pequeño auto­
car, guiado por el hermano coadjutor Accursio
Schlnelli, redujo a este a las últimas. Llevado

■nAí-'

rápidamente al hospital se le reconoció, además
del shock traum ático por conmoción cerebral,
fractura del hueso frontal en diversas partes y
astillas himdidas oprimiendo la masa enctíáJica,
una herida en el mentón y una fractura múltiple
abierta en la pierna izquierda, sin contar las
muchas contusiones.
Toda e;^>eranza humana de salvarlo parecía
perdida: hacía falta un mllagi'o. Nos encomen­
damos enseguida a nuestro Padre Don Bosco con
gran confianza: hermanos, alumnos y amigos
empezamos una novena y ccüocamos una reliquia
del Santo en el lecho del paciente. Quince días
enteros permaneció sin sentido, que fueron para

los salesianos quince días du angustiosa inccrtidumbre; luego comenzó a pronunciar palabras
sin sentido. Había salvado la vida, pero temíamos
que quedase menoscabado en sus facultades men­
tales. No nos cansamos do rezar a Don Bosco
hasta que escuchó nuestras siiplicas. El hermano
empezó a razonar casi normalmente y a poco so
restableció por completo. Incluso la pierna que
debía ser amputada, tras un calvario de nueve
meses, sanó.
A nuestro amado Padre, Don Bosco, le damos
las gracias más rendidas por lo que, más que
una gracia, consideramos un milagro. L oa aalcsianoa d e C altagirone-Sicilia.

agradecidos
S alam an ca.— Sumamente agradecida a María
Auxiliadora por varios favores recibidos, que le
pedí para mis hijos, sobre todo para que encon­
traran trabajo, pues soy viuda y necesitaba que
ganaran, le envío una pequeña limosna. A. J . B.
AUariz.—Encontrándose mi marido bastante
enfermo, recurrí a María Auxiliadora pidiendo
su ayuda. A partir de entonces se fue recobrando
hasta alcanzar la mejoría. Deseando publicar la
gracia para mayor gloria de la Santísim a Virgen
Auxiliadora, cumplo mi promesa y envío un pe­
queño donativo. C. C. R.
C órdoba.—Nuestra hija. María Auxiliadora, de
6 años, enfermó de repente el pasado mes de julio
y su estado parecía muy grave. Acudí a nuestra
Madre la Virgen Auxiliadora y la encomendé en
una novena, ofreciendo publicar la gfracia reci­
bida. Asi lo hago hoy a la vez que envío un pe­
queño donativo para el culto de tan buena Madre.
Isab el M árquez d e L lam as.
P a sa jes.—Desearía se publicara en el Boletín
un favor recibido por intercesión de María Auxi­
liadora y ai mismo tiemj>o le ruego continúe su
ayuda para alcanzar otra gracia especial. Una
C ooperadora.
S alam an ca.— Habiendo sido escuchada por Ma­
ría Auxiliadora en los exámenes de mis hijos le
envío lina limosna para su culto. A. J o s e f a Rodriaez.

RipoU.— Deseo dar gracias a nuestra buena
Madre M aría Auxiliadora por el favor, que me
hizo, de curarme, en el tiempo que dura hacerle
una novena, de una enfermedad extraña, que
tuve en la pierna y que me causaba un dolor
terrible. Por éste y por otrns muchos favores
que de ella he recibido, le doy gracias, pública­
mente y cumplo mi promesa. J o s é More7io.
San V icente del P alacio.— Agradecida a María
Auxiliadora por la protección dispensada a mi
marido en dos accidentes que tuvo y especial­
mente por tener entre los a.spirantes saK'Slanos
de Cambados a uno de mis hijos, mando esta li­
mosna y deseo se publique mi gialitud en el B o­
letín. Alejand7-a Vara Sanz.
Llaratics-A vilfís. •Desearia kc publicara la cu­
ración de una hija mía, que tuvo un fuerte dolor
de estómago. Como tantas otras vece» recurrí a
nuestra Madre Auxiliadora, pues la tengo gran
devoción y siempre que la Invoco me escucha;
esta vez sucedió igual por lo que envío una limos­
na y cumplo mi promesa. Una coop erad ora.
L a s P alm as de Graft C anario. -Doy gracias a
la Santísim a Virgen por un gran favor recibido
con la curación de la salud de mi marido. Muy
agradecida envío una limosna. D olores Calderin.
Orense.— Estando una cuñada mía muy grave
y siendo necesaria una delicada c^eracíón. cayó
en mis manos la revista y entonces encomendé

25

mi cuñada con mucha confianza a María Auxilia­
dora y demás santos salesianos, prometiendo una
limosna. Como todo ha sido fácil y la.enferm a
está recuperada y hasta trabaja normalmente,
cosa que no esperaba lo pudiera hacer en mucho
tiempo, agradecida mando una 'limosna. J . 8.
Orennana.
Madrid.—Manda celebrar una misa y da gra­
cias a María Auxiliadora y a los santos salesianos
por favores recibidos, esperando la solución de
otros nuevos, la F a m ilia A bad.
O ranada.—Encontrándome en un gran apuro a
causa de mis estudios ,me encomendé a María
Auxiliadora por mediación de San Juan Bosco.
Habiendo salido muy bien de él y de otro mu­
cho mayor, cumplo mi promesa de publicarlo y
le pido me siga ayudando. Una devota.
P ob la d e Segur.—Agradecemos toda la familia
a María Auxiliadora la constante intercesión en
todos los asuntos que le encomendamos. A los
pocos días de comenzar la novena los problemas
quedan resueltos favorablemente. ¡¡Haced la prue­
ba!! En agradecimiento envío una limosna para
su culto. A rm ando Luaña.
L érida.—Envío un donativo en acción de gra­
cias a María Auxiliadora para que no nos aban­
done nunca. M. C.
B é ja r.—Quisiera agradecer en el Boletín Salesiano a María Auxiliadora y a San Juan Bosco
la curación de una enfermedad de mi madre y
otros muchos favores que ella nos ha dispen­
sado. Aíaría Martin.
B arcelon a.— Teníamos gran necesidad de un fa ­
vor y se lo pedimos con fe a María Auxiliadora:
habiendo obtenido la gracia deseada entregamos
una limosna para la obra de las Vocaciones Saleclanas. Jo a q u ín Copa.
Doy gracias fervientes a María Auxiliadora por
haber conseguido de ella una gracia muy desea­
da por mí: ver de nuevo en mi casa a una per­
sona que sin motivo alguno se retiró. Ha vuelto
como antes, afectuosa y agradecida. Otra gracia
espero de tan buena Madre. Ruego a quien esto
loa se una a mi intención. Exhorto a todos los
devotos de María Auxiliadora y San Juan Bosco
a que acudan confiadamente a ellos. Una co o p e­
radora de las M isiones S alesianas.
V alencia.—Muy agradecida a María Auxiliado­
ra por varios favores que me ha concedido supli­
co se publique en el Boletín y envío una limos­
na. C. 8. Olalla.
V alencia.—Por un gran favor recibido de la
Virgen Auxiliadora y de San Juan Bosco, mando
una limosna. Dolorcvs Senenf.
P ozoblanro.—A fin de que mi Madre María
Auxiliadora sea conocida por todos, como lo es
por njí. Invito a todos a recurrir a tan buena
Madre, pues Ellla es nuestro Auxilio.

Agradecida por varios favores y otros que es­

26

pero recibir, envío un donativo y deseo se publi­
que en el Boletín. I7«a d ev ota ag rad ecid a. A.T.H.G.
L a P alm a d el Condado.—Habiendo prometido
publicar el favor pedido a María Auxiliadora en
el Boletín Salesiano, lo hago con toda mi gratitud
y reconocimiento. Encontrándome enfermo de gra­
vedad me encomendé a María Auxiliadora y reza­
mos el rosario toda la familia para alcanzar de
tan buena Madre la salud; a los pocos días me
sentí muy aliviado y en ,1a actualidad me encuen­
tro casi bien del todo. Lo comunico para animar
a todos a confiar en tan buena Madre. Doy una
limosna para la Obra Salesiana. Ju a n L a g a r e s
R ojas.
A llariz.— Encontrándose enferma de gravedad
mi hija Consuelo Iglesias, recurrí a María Auxi­
liadora pidiendo por su salud. Mi hija se encuen­
tra bien y, agradecida, envío una limosna y ruego
se publique la gracia en el Boletín. A ntonia R o­
drígu ez F ernández.
Vigo.— Siempre agradecida a San Ju an Bosco
por un favor concedido entrego una limosna y
ruego se publique en el Boletín Salesiano, para
animar a sus devotos que se encomienden a él
en los momentos de apuros. Ufaría V aquero R o­
dríguez.
S an ta Cruz de T en erife.— Habiendo invocado a
María Auxiliadora y a San Juan Bosco para que
mis hijos salieran bien de los exámenes de 4.9
curso y reválida, deseo se publique dicho favor
en el Boletín. Afaría P érez B atista.
Coin.—^Por un favor recibido de la Santísim a
Virgen María Auxiliadora, envío una limosna para
las vocaciones salesianas. A. E riales.
S an ta M aría de Cagón (S an tan d er).— Soy un
asiduo lector del Boletín Salesiano y en él he com­
probado las innumerables gracias que María Auxi­
liadora otorga a sus devotos.
Necesitando alcanzar una, para mí de mucha
importancia y con carácter de urgencia, acudí
confiado a tan buena Madre. Ella me escuchó y
satisfizo plenamente mis deseos.
Tan señalado favor me obliga a manifestarle
mi profunda gratitud, cumplir la promesa de pu­
blicarlo en el Boletín y enviar una limosna para
las Obras Salesianas. A rturo G arcía B lanco.
O rem e.—Doy gracias a María Auxiliadora y
entrego una limosna para su culto por haber fa ­
vorecido a mi nieto en un examen difícil. C am ila
N óvoa.

Dan también gracias a María Auxiliadora
y a San Juan Bosco y envían una limosna:
Guadalupe Ferreiro, Joaquina Encinas, de M a­
drid: T. M., de Portugalete; F . Montalt, de Valen­
cia; E . P., de Salam anca; J.B ., de Bolaños; Pepa
Mata, de AldeadávUa de la Ribera; Josefa Mejias, de Jaén ; Soledad de la Fuente, de Madrid;
Ju lia Avendaño, de las Palmas de Gran Canaria;
Dati Diez, de Ribas de Fresser.



i

JP<it70f*es d e
S a n ie

D o m in g o

S a v io

P r o t e c t o r d e Mas M a d r e s y d e la s C u n a s

Todo resultó muy bien
Itero de la V ega (F a len cia ).—E l primer fruto
de mi matrimonio fue una niña que nació sin vida.
E l médico dijo que sería fácil que la próxima vez
sucedería igual. Entonces me encomendé a María
Auxiliadora y a Santo Domingo Savio, prometiéndoies una limosna y llevar su escapulario du­
rante todo el embarazo, cosa que hice. El día 1
de mayo di a luz una preciosa hija y todo resultó
muy bien.
Muy agradecida le envío la limosna y desearía
que lo pusiese en el Boletín, para animar a todos
las madres que se encuentren en iguales circuns­
tancias a que se encomienden a este pequeño y
gran Santito, Domingo Savio. P ura P elayo.

Hubiera muerto de no nacer a tiempo
B arcelon a.—Envío un donativo muy agradecida
a Santo Domingo Savio y a María Auxiliadora
por haber llegado mi sexta hija felizmente, al

mundo, a pesar de que dos días antes tenia yo
bastante alta la presión y además un poco de
albúmina. Mi hija tenía un nudo en el cordón
umbilical y venía muy mal. tanto que hubiera
muerto de no nacer a tiempo. Por eso le doy gra­
cias a Santo Domingo Savio, muy especialmente,
pues, cuando llegué a la clínica ni el doctor ni
la comadrona creyeron que era hora. Yo, que me
conozco, insistí; en vista de que no los convencía
volví a pedir a Santo Domingo Savio que me hi­
cieran caso: al fin ayudada por ellos nació mi
hija medio asfixiada, pero gracias a Dios se re­
puso bien. Una m adre ag radecida.
Corbillón.— Muy agradecida a Santo Domingo
Savio por un favor recibido quiero se publique
en el Boletín Salesiano, para que las demás con­
fien en este joven Santo. Ai(iría A m elia Vázquez.
Madrid.— Agradecida a Santo Domingo Savio
por su ayuda celestial en mi último y peligroso
alumbramiento entrego una limosna para las
Obras Salesianas. M.S T. B.
B ocian a.— Agradecida a Santo Domingo Savio
por un favor señalado recibido por su intercesión
envío una limosna. A. López.

Favores obtenidos por intercesión de nuestros venerabies
D. Miguel Rúa y D. Andrés Beltrami
G énova.—Mi marido tuvo un accidente de auto­
móvil del que resultó gravemente herida la per­
sona contra la que chocó, que llegó a las puertas
de la muerte. Las consecuencias hubieran sido
mucho más graves para mi marido en caso de
fallecer el enfermo. Aterrada me dirigí a Don Mi­
gu el R ú a ; la víctima, con grande admiración de
ios mismos médicos, curó completamente y pronto.
Otra vez me volví a encomendar a Don Mi­
g u el R úa cuando mi marido cayó enfermo de gra­
vedad; también en esta ocasión el diagnóstico
de los médicos era desesperado; pero por inter­
vención del Venerable Don Rúa recobró la salud
y mi marido se encuentra hoy en óptimas condi­
ciones físicas y morales. L uisa B albo.
Z agreb - YugoslavUi.—Un matrimonio de esta
ciudad estaba sumamente afiigido a causa de que
su hija de seis años de edad estaba afectada por
un sarcom a óseo en el hueso de la pierna. Los
médicos para curarla le habían quitado ya un
buen trozo de hueso debajo de la rodilla, pero

la enfermedad había progresado mucho. El per­
sonal de la clínica le daba a la niña sólo dos
meses de vida.
Aconsejados por mí comenzamos una serle de
novenas pidiendo la gracia por intercesión del
Venerable Don M iguel B úa. La niña comenzó a
curar y hoy, un año después, está completamente
curada y no lleva señal alguna de la enfermedad
padecida. M arino Mandic, p árroco salesiano.
R eg g io E m ilia-Ita lia.—Tenía que hacer un exa­
men muy importante para mi carrera y a pesar
de que había estudiado mucho las probabilidades
humanas de éxito eran pocas e inciertas, dado el
tribunal calificador. Por lo cual me dirigí con fe
al venerable Don A ndrés B eltram i rezando y ha­
ciendo que rezaran. Las dificultades aumentaban
por razones de salud y familia, no obstante, el
resultado fue positivo. Al mismo tiempo mi madre
había pedido por intercesión de Don Andrés B el­
trami una gracia importantísima de orden espi­
ritual y fue escuchada inmediata y mílagrosa-

— 27

.

mente. En estos últimos meses he seguido invo­
cando al venerable por diversas necesidades sen­
tidas y siempre he podido experimentar su ayuda.
Cumplo mi promesa de contribiuir con un dona­
tivo a su causa de beatificación. L iv ia Dávoli.
Milán.—Mi hijo que frecuenta el Oratorio de
los salesianos me trajo un día una reliquia de
Don A ndrés B eltram i. Precisamente en aquellos

días debía ser operada de un quiste. Como tenía
un miedo horrible a la operación le pedí a Don B el­
tram i que me diese un poco de serenidad y colo­
qué la reliquia sobre el quiste. E l venerable no
sólo me quitó el miedo sino también el quiste y
no tuve que ser intervenida. Añado que me he
decidido a publicar esta gracia porque he recibido
otra de orden espiritual que considero no menor
que la primera de mi curación. P etra R ávani.

Favores y G ra d a s d e
Mfoña D orotea d e CHopitea
€Íooperadoru S a íe s ia n a

Quedó completamente bien
B arcelon a.—Mi marido se rompió la pierna, y
después de dos años bien largos otro médico nos
dijo que si no se operaba podría quedarse cojo y
además se le podría romper otra vez. Por otra
parte le dolía muchísimo, por lo que decidimos
la operación. Aquel día fui muy temprano a Misa,
recibiendo al Señor y llena de fe en María Auxilia­
dora y la Sierva de Dios Doña Dorotea, les supli­
qué por la curación completa de mi esposo. Y así
sucedió. A los nueve meses quedó completamente
bien, de modo que no ha vuelto a sentir dolores.
Además ofrecí una limosna para la causa de bea­
tificación de la Sierva de Dios. También ofrecí
otra limosna por haber salido bien de una opera­
ción de amígdalas mi pequeño. Muy agradecida
por tantos favores, ruego publique la gracia.
M ontserrat Roxñra.
Le metí una estampa
S alam an ca.—Habiéndose presentado mi hijo a
unos exámenes, que no ofrecían ninguna esperan­
za de éxito, por no hallarse debidamente prepara­
do, tres días antes empecé una novena a la Sierva
de Dios, Doña Dorotea pidiéndole que le api'obaran. E l mismo día del examen le metí a mi hijo
una estampa de Doña Dorotea en el bolsillo de la
camisa para que ella le iluminara y yo seguí ha­
ciendo la novena. Y cuál no sería mi alegría al
ver a mi hijo en la lista de los aprobados. A tri­
buyo tal gracia a Doña Dorotea, a la que públi­
camente doy las más rendidas gracias, mientras
envío una limosna para su beatificación. Una d e­
vota.
La.s P alm as de Grow Cannnn.— Doy gracias a
la Sierva de Dios, Doña Dorotea, por varios favo­
res que me ha concedido y envío una limosna.
P ilar Velncquec.
Sníamnnra.—Muy agradecida a María Auxilia­
dora y a Doña Dorotea por los favores recibidos
envío una limosna para su causa de Beatifica­
ción. A. O.
VolPMoia.- Estando enferma y muy afligida le

28



pedí a la sierva de Dios, Doña Dorotea, pusiera
remedio a mi situación y ofrecí una limosna y
publicar la gracia en el Boletín Salesíano. Como
me lo ha concedido cumplo mi promesa. A m p a­
ro Aviñó.
E cija.—Agradecida a Doña Dorotea por favores
recibidos y esperando que siga escuchando mis
súplicas envío una limosna. P ied ad Dato.
L a s P alm as de G ran C anaria.— Habiendo reci­
bido un favor especial de Doña Dorotea en el cual
se ha hecho patente su intervención, envío una li­
mosna para su beatificación, rogando se publique
en el Boletín Salesiano para que cuantas perso­
nas se encuentren necesitadas acudan a tan gran
protectora. M argarita N avarro.
V alencia.— Da gracias a Doña Dorotea. D olo­
r e s Senent.

P o r in te rc e s ió n de n u e s tro s m á r tir e s
L au ria S u perior - Italia.— Hacía más de cinco
meses que sufría dolores atroces, producidos por
una tromboflebitis aguda en la pierna derecha, sin
esperanzas de mejorar. Ninguna medicina me ali­
viaba los dolores, pese a que las tomé abundan­
temente; tanto que llegué a desalentarme por
completo ante los dolores que no se atenuaban
antes crecían. Estando en uno de esos momentos
de depresión cayó en mis manos el Boletín Sale­
siano que traía unas gracias y milagros conse­
guidos por el protomártir salesiano en China Afonseflor Luis V ersig lia; entre ellos el de una señora
que padecía mi mismo mal. No puedo describir la
emoción que me embargó; mis ojos se llenaron
de lágrimas; tanta fe puse en mi plegaria al
siervo de Dios que inmediatamente conseguí la
gracia. Mis piernas comenzaron a moverse con
normalidad, desapareció la hinchazón y el dolor
cesó como por encanto. Mi gratitud al siervo de
Dios no acabará mientras viva. A na G am m arano.
P icasen t {V alen cia).— Al leer en la prensa que
el Papa Paulo V I se hallaba gravemente enfermo
y que tenían que hacerle una operación, sentí la
inspiración de hacer algo por su restablecimiento.

mido. Habiéndose
se dio cuenta que
al santo salesiano
blicamente. 2^ait»

ya que tanto espera la Iglesia del Padre Santo
en estos tiempos de desconcierto y de alejaniicnto
de Dios. A este fin hice una novena a María Auxi­
liadora, por intercesión del m ártir salesiano Don
Ju a n M artorell, y tuve el consuelo de saber poco
después que la salud del Sumo Pontífice se había
restablecido. Muy agradecido, envío la limosna
prometida.^. M edina.
P icasen t.—Dan también gracias al P. M artorell
y envían una limosna para su beatificación: F a ­
milia Martorell, Lola, Lolita, Amada y María;
Amparo Medina y Paquita Silla.
V illafran ca (C órd ob a).—^Para la causa de bea­
tificación de Don A ntonio T orrero, envío una li­
mosna. Y hago constar que he recibido una gra­
cia por su intercesión. En mi petición ofrecí la
limosna y publicarlo en el Boletín, para que cuen­
te con una gracia más para su Beatificación.
A ntonia Gavilán.

Leí una gracia más que singular
ifiZtín.—^Mi hijo, que tenía un cálculo en la ve­
jiga, se preparaba ya para la operación aconse­
jada por el médico, cuando yo, hojeando el Bole­
tín Salesiano, leí una gracia más que singular
conseguida invocando a Simón Srugi de Nazaret.
Entonces me dirigí a él, pidiéndole que no hubiera
necesidad de operar a mi hijo. Mis plegarias no
cayeron en balde, pues la expulsión del cálculo
se produjo por vía ordinaria con sorpresa y ale­
gría de toda la familia. Doy públicamente gracias
y mantengo mi promesa de fundar una beca con
el nombre de «Simón Srugi». R. B ottaro.

Favores de nuestros siervos de Dios

La simpática figura de Laura Vicuña
Auelíino - Italia.— Dos años llevaba molesta con
un panadizo en el pulgar de la mano izquierda.
Estaba triste porque apenas me mojaba la mano
el dedo se me hinchaba y comenzaba a manar
pus. Me daba el ungüento, m etía la mano en el
guante para los quehaceres de la casa, pero ¿có ­
mo puede un ama de casa desempeñar todas las
labores domésticas con las manos enguantadasUn día vino a mis manos el Boletín Salesiano
y al hojearlo me llamó la atención la simpática
figura de L au ra Vicuña. Mirándola fijamente le
hice esta plegaria: «Querida Laura, pídele al Se­
ñor que me conceda la curación de mi dedo en­
fermo». Con gran alegría la he conseguido.
Desde hace un año hago todos los quehaceres
sin guantes y mi dedo ha tomado su forma na­
tural. Rezo para que pueda subir Laurlta, cuanto
antes, al honor de los altares. C am ila Aloi.

Reza, se duerme y despierta curada
A lepo (S iria).— E l pasado verano mi hija de
18 años fue atacada por una dolorosa enfermedad
de oídos que le abarcaba desde las sienes hasta la
mejilla. Los remedios que el médico le recetó no
le aliviaron nada y la enfermedad progresaba. En
aquellos días recibí el Boletín Salesiano y por
casualidad leí las gracias de Simón Srugi. Quedé
entusiasmado y conté a mi h ija que yo había te ­
nido la suerte de conocerle durante nueve años
y que era un enfermero santo y lleno de caridad
con todos. Le aconsejé por tanto que se encomen­
dase a él para que la curara. Dejé a m i hija y me
fui a mis quehaceres. Dos horas después me la
veo delante sonriente y me cuenta que, después
de haber rezado al siervo de Dios, se había dor­

ROG U EM OS

POR

despertado, bañada en sudor,
no le dolía nada. Agradecida
de Nazaret le doy gracias pú­
K aloussie.

NU ESTR O S

Doña Estefanía Dehesa Manuel
el 24 de junio,
en Tarragosa (Burgos). Era madre de Jesús Ma­
ría Renedo Dehesa, coadjutor salesiano. Pro­
fundamente cristiana, educó a sus hijos en el
amor y temor de Dios.
Fue muy devota de María Auxiliadora y con
frecuencia enviaba limosnas para su culto. Co­
nocía la vida de San Juan Bcsco que leía con
cariño y amaba todo lo salesiano.
María Auxiliadora quiso premiar el amor y
devoción que la tuvo en esta tierra, llevándo­
sela un 24, día dedicado a su conmemoración.
Don Bonifacio Enrique Benílez
en Cuenca, el
día 28 de junio.
En el elogio que de él tejió la prensa local se
leía: lEn todo quehacer —profesional, patrióti­
co, religioso, político o puramente extraprofe­
sional— brilló su inteligencia, su tesón, y su
eficacia. Ello le valió el aprecio de personali­
dades y del pueblo sencillo, identificados lo­
dos con sus altos ideales de trabajar por los
demás —ofrenda de sí mismo hasta desgastar

D IFU N T O S

sus energías físicas, mas nunca su espíritu de
servicio— en cualquier puesto y esfera.»
Bien apreciaron esto los cooperadores salesianos del Centro de Cuenca, que lo tuvieron co­
mo secretario del Consejo local, miembro acti­
vo de los Hogares Don Bosco y en todo momen­
to entusiasta de la Obra Salesiana, a la que
prestó su ayuda y cooperación a través de sus
múltiples cargos y de su sencilla persona.
Fue un auténtico cooperador salesiano y a su
labor se debe, en gran parte, el florecimiento
del movimiento cooperador salesiano en Cuen­
ca. Estamos seguros que Don Bosco le ha he­
cho una acogida extraordinaria en el Cielo.
Cooperadores difuntos:
Dña. Dolores Lara Peralta, Vda. de Sanz/ de
Lopera (Jaén). D. Antonio Bellido Verdejo/ de
Lopera (Jaén). Dña. María Medina Bellido/ de
Lopera (Jaén)/ fundadora de la Beca «San Juan
Bosco», en la Insp. de Córdoba.
Descansen en paz. Encomendamos sus almas a
los sufragios de nuestros Cooperadores.

— 29

^eca$ fu m á sostenimiento ^
formación éOocaciones
cE] mejor premio que Dios concede a una familia es un hijo sacerdote.» (Don Bosco.)
INSPECTORIA DE BARCELONA

INSPECTORIA DE CORDOBA

P. Provincial: P.* San Juan Bosco, 74 - BarceIona-17

P. Provincial: Calle María Auxiliadora, 14 - Córdoba

BECAS EN FORMACION
Bocu «San José*. N, e.: 100 pts. Total; 16.100 pts.
Beca «Felipe Alcántara». N. e .: 100 pts. Total; 5.100 pts.
Beca «Luis Cutlllas». N. e .; 100 pts. Total; 2.100 pts.
Beca «Don Juan Antal». N. e.; 100 pts. Total; 04.100 pts.
Beca «J. M. y M. C.» Total; 10.000 pts.
Beca «Amigos P. Escurscll en sus 70 años». l.S e .; 40.000.
Beca «Gratitud» por toa amigos de las Vocaciones Saleslanaa. l.B e .: 35.000 pts.
Beca «Nuestra Señora de Montserrat». Total; 80.000 pts.
Beca «Santos Antonio y Sebastián». Total; 15.000 pts.
Beca «José María Valles Plá». Total: 6.000 pts.
Beca «Claudio Garda». Total; 26.000 pts.

INSPECTORIA DE BILBAO
P. Provincial: Escuelas Salesianas • Deusto-Bilbao
BECAS COMPLETAS
Beca «Srtas. Ramona y Jo-sefa de Felipe». T . ; 100.000 pts.
BECAS EN FORMACION
Boca «Mamá Margarita». L. Cañada. Pamplona. N. e.; 250
pesetas. Total; 20.500 pts.
Beca «Srta. María Luisa de Felipe». l.S entrega: 50.000 pts.
Beca «Restitución-Gratitud». J . G. Total; 25.000 pts.
Beca «San José». J . G. Total: 25.000 pts.
Beca «María Auxiliadora». J . G. Total: 25.000 pts.
Beca «Inmaculada Concepción». J . L . M. Total: 11.500 pts.
Beca «Marta Auxiliadora». D. R. G. R. Total: 25.000 pts.
Beca «Marta Auxiliadora». 2.9 Arcb. Baracaldo. T . : 21.500.
Boca «D. Ramón Zabalo». Baracaldo. M. Fernández. To­
tal; 30.000 pts.
Beca «Doña Carmen Aguirre». Total: 10.000 pts.
Beca «Marta Angeles Postigo Labrador». Total: 20.000 pts.
Beca «Conchita Diez Noza». T o tal: 20.000 pts.
Beca perpetua «San Cosme y Sta. Magdalena». T . : 80.000.
Beca «D. José Díaz de Cerlo Valle y Petra Gastón Ventosa».
Total; 9.000 pts.
Beca «Sra. de Vidarrázaga». Total: 5.000 pts.
Beca «Familia Imbert». Total: 10.000 pts.
Beca «Virgen del Castillo*. E l Royo. Total; 9.800 pts.
Beca «F. Canales». Total: 14.000 pts.
Beca «María Auxiliadora». Zuazo. Total: 5.600 pts.
Beca «Don Jo sé Santos». Deusto (Colegio). Total: 17.000 pts.
Beca «Sr. Juatl». Deusto (Colegio). Total: 20.000 pts.
Beca «Don Jo sé Puertas» AA AA. Deusto. Total: 10.500 pts.
Beca «Don Bosco». Ciudad Labora). Pa.sajes. Total: 5.7á).
Beca «Sagrada Familia». San Sebastián. Total; 10.000 pts.
Beca «Francisco Tierra». Burcpña. Total: 8.500 pts.
Beca «San Juan Bosco». Santander. Total; 5.000 pts.
Beca «Santo Domingo Savio». Santander. Total; 19.600 pts.
Beca «San Jo sé Obrero». Indstriales. Santander. T . : 10.000.
Beca «Marta Auxiliadora». Archteof. Santander. T . : 6.000.
Beca «Sres. Udaetxe». Bilbao. Total: 34.000 pts.
Beca «San Andrés» Burgos, Total: l.S27'S6 pts.
Beca «Nuestros Mártires». Znaxo. Total: 18.509 pts.
Beca «Marta Auxiliadora» TI Total: 20.000 pts.
Beca «Anfonso Gómez Pineda*. Pamplona. Total; 5.000 pts.
Bw-a «San Paulino». Baracaldo Total: 3S.ni*' pts
Beca «Eduardo Caprani» Baracaldo. Total fi 000 pts
Beca «Jesós .Aznar». pron»ovi«|f. por Doña María Salmerón.
Vda. de Amar. Total; 7.000 pts.

50 —

BECAS COMPLETAS
Beca «San Juan Bosco». Lopera. N. e .: 10.000. T .; 30.000 pts.
Beca «Familia Ansorena». N. e.: 4.000 pts. Total: 30.000 pts.
BECAS RN FORMACION
Beca «Santa Catalina» II. Las Palmas. N. e.: 1.000 pts.
Total: 3.000 pts.
Beca «Familia Navarro». N. e.: 3.000 pts. Total: 7.100 pts.
Beca «Nlra. Sra. de Luna». Pozoblanco. N. e.: 35.000 pts.
Total: 75.000 pts.
Beca «Sania Ana». Alcalá la Real. l.S E . : 20.000 pts.
Beca «Familia Lago». Total: 6.400 pts.
Beca «E. Chacón de Hernández». Total: 7.900 pts.
Beca «Familia Lara Padin». Total: 6.300 pts.
Beca «Familia Naranjo». Total: 3.900 pts.
Beca «Virgen del Pino». Las Palmas. Total: 2.000 pts.
Beca «Miguel Magone». Las Palmas. Total: 1.500 pts.
Beca «Don Vicente Reyes». Total: 2.700 pts.
Beca «María Auxiliadora». Antonio Royán. Total: 28.800 pts.
Beca «María Auxiliadora». Coop. Antequera. Total: 11.500.
Beca «San Juan Bautista». Fte. Piedra. Total: 16.000 pts.
Beca «Sagrado Corazón de Jesús». Las Palmas. T . : 37.756.
Beca «D. Antonio Espinosei». Tenerife. Total: 106.800 pts
Beca «Familia Torre». Las Palmas. Total: 4.100 pts.
Beca «Sto. D. Savio». Cías. Las Palmas. Total: 34.300 pts.
Beca «Familia del Pino Muñoz». Jaén. Total: 10.000 pts.
Beca «Domingo Savio». Santa Teresa-Ronda. Total: 4.700 pts.
Beca «Santa Isabel». Granada. Total: 34.000 pts.
Beca «Sto. Domingo Savio». (Jlas. Relig. Ronda. Total:
13.000 pts.
Beca «S. Jo sé y Ntra. Sra. de Monserrat». Granada. Total:
18.200 pts.
Beca «Utrera y Deherves». Córdoba. Total: 10.000 pts.
Beca «San José». Pozoblanco. T o tal: 4.000 pts.
Beca «Sta. Teresa». Granada. T o tal: 16.150 pts.
Beca «Moisés Redondo Tirado», Pozoblanco. T . ; 40.000 pts.
Beca «San Rafael». Córdoba Total: 17.737 pts.
Beca «San Miguel». Montilla. Total: 21.300 pts.
Beca «Manuel Hernández*. Las Palmas. Total; 6.000 pts.
Beca «D. Sebastián M.S Pastor». Córdoba. Total; 4.016 pts.
Beca «Rafael Moure Ríos». 2.1 Córdoba. Total: 8.760 pts.
Beca «Sra. F . Peña». Málaga. Total: 12.000 pts.
Beca «Montilla». Montilla. Total; ^.000 pts.
Beca «Romero-Martínez». Málaga, promovida por Doña Do­
lores Martínez. Vda. de Romero. 1.9 e. 30.000 pts.
Beca «Escuelas Externas». Montilla. Total: Ó.Of'o pts.
Beca «Nuestra Señora de la Consolación». Toiredcmjimeno.
Total: 25.000 pts.
Beca «Baldomcro Pagán». Pozoblanco. Total. 17.600 pts.
Beca «Ntra. Sra. de Luna». Pozoblanco. Tota! 40.000 pts.
Beca «Marta Auxiliadora». Málaga. Total: 18.3(Ki pts.
Beca «M.* Aux.» Fam ilia (Jómea Briasco. Totai .39 no pts.
Beca «Ntra. Sra. del Carmen». Pozoblanco. Total 36.000 pts.
Boca «Cfas. Juventud Saleslana». La Orotava. T . : 40.000 pts.
Beca «Santa Cruz de Tenerife». Tenerife. Total; 32.000 pts.
Beca «Santo Domingo Savio*. Cias. Tenerife. T .. 21.000 pts.
Beca «Virgen del Pino». Teror. Total: 47.000 pts.
Beca «Familia Atilio Ley». Las Palmas. Total; l.5(X) pts.
Beca «Juan X X III». Montilla. Total: 14.350 pts.
Beca «Familia Espejo Gómez». Montilla. Total. 13.000 pts.
Beca «Familia Muñoz». Total: 18.000 pts.
Beca perpetua «Troya Gozálvez». Ubeda. Total- 24.000 pts.
Beca «Vireen del R n o *. Las Palmas. Total. 1.000 pts.
Beca «D. Bernardo López Baena». (ílórdoba. T . : 12.000 pts.
Peca «Pitra Bermildcz*. Málaea Total; 26.000 pfs.
Beca «N. Rodríguez». Las Palmas. Total: 2.100 pts.

Beca
Beca
Beca
Beca
Beca

cFamilia Vargas». Ronda. Total: 10.000 pts.
cDoña María». Las Pabxkas. Total: S.700 pts.
«Manuel Moreno». Las Palmas. Total: 1.600 pts.
«H&rtlres de Pozoblanco». Total: 8.736 pts.
«Matrimonio CLM-SCB.» Málaga. Total: 46.060 pts.

INSPECTORIA DE MADRID - «DESAMA»
F. Provincial: Paseo General Primo de Rivera, 25
Madrid (5) . Teléf. 227 56 91
Recordamos a todos los participantes en BBSAMA las
dos categarías de Becas Completas:
— Beca O R D IN A R IA : 50.000 pesetas.
— Beca M A Y O R : 100.000 pesetas.
Siempre pueden enviar donativos para ir completando
las becas eBESAMA*.

Beca «M.6 Auxiliadora» por A. R. Revilla. N. e .: 600 pese­
tas. Total: 11.000 pts.
Beca «Corpus Christi». J . Quintana. Sevilla. N. e.: 100 pe­
setas. Total: 11.030 pts.
Beca «Ntra. Sra. de la Piedad». Almendralejo. iniciada poi
Familia Rafael Martínez Cordón e Isabel Martínez Asuar.
en memoria de doña Crescencia Asuar. Total: 36.106 pts..
Beca «Clemente Guede». Cádiz. Total: 8.775 pts.
Beca «P. Agustín Nofre». Utrera. Total: 27.210 pts.
Beca «V. Esperanza». Sevilla. Total: 1,850 pts.
Beca «S. Pedro Apóstol». Cooperadores. Alcalá. T ,: 2.000 uta.
Beca «Mártires Salesianos de Morón». Morón, l . i e ,: 1.816.
Beca «Ntra. Sra. Sgdo. Corazón». Morón. Total: 30.000 ptt.
Beca «Stella Maris». Huelva. Total: 28.100 pts.
Beca «Virgen Victoria». Mérida. T o tal: 55.6u0 pts.

INSPECTORIA DE VALENCIA
P. Provincial: Calle de Sagunto, 212 . Valencia

BECAS EN FORMACION
Beca «Besama» I II . L . Limia, 100; Angeles Val. Vda. de
Gutiérrez, 2.500. Total: 18.725 pts.
Beca «Casimiro Ramiro». A. A. Atocha. N. e .: 3.000 pts.
Total: 40.000 pts.
Beca «El Salesíano Coadjutor». Cías. Paloma. N. e.: 10.000
pesetas. Total: 20.000 pts.
Beca «Mercedes Cruzado». N. e .: 3.000 pts. T o tal: 27.000 pts.
Beca «Doña Dorotea». Madrid-Don Bosco. N, e .: 2.000 pts.
Total: 25.500 pts.
Beca «María Auxiliadora» I I. Atocha. Total: 39.825 pts.
Beca «Don Félix González». Fam ilia Pardo. Total: 22.500.
Beca «San José». Arch. M.& Aux. Pizarrales. T .: 15.000 pts.
Beca «San Ricardo». Total: 11.000 pts.
Beca «San Francisco de Sales». Estrecho. Total: 17.816 pts.
Beca «Fam. Mesonero Rodríguez». Total: 14.000 pts.
Beca «Arch. de Maria Auxiliadora». P.S Extremadura. To­
tal: 22.000 pts.
Beca «El Salesiano Coadjutor». Cías. Paloma. Total: 10.000.
Beca «Mercedes Cruzado». Total: 24.000 pts.
Beca Mayor «Salesianos Don Bosco». Total: 40.350 pts.
Beca «Casimiro Ramiro». A. A. Atocha. Total: 37.000 pts.
Beca «Maria Atudliadora». Total: 21.300 pts.
Beca «Caitro Juvenil». P.S Extremadura. Total: 28.600 pts.
Beca «M. A. L .» Total: 26.000 pts.
Beca Mayor «Nuestros Mártires». Gral. López de Letona.
Total: 85.000 pts.
Beca «San Antonio». A. Angulo. Total: 10.000 pts.
Beca «San V ieoite Ferrer». Total: 10.000 pts.
Beca «José Félix». Total: 26.000 pts.
Beca «Antonio Durán». Total: 26.000 pts.
Beca «Vda. de Pujadas». Total: 14.000 pts.
Beca «Padre Esteban». AA. AA. Paloma. Total: 19.305 pts.
Beca «Don Juan», n . Total: 15.000 pts.
Beca «Don Manuel Nicolás». Total: 18.000 pts.
Beca «Ntra. Sra. del Carmen y S. Lucas». Total: 34.000 pts.
Beca «Sto. Domingo Savio». C.fi M.ft Aux.-Atocha. T . : 16.000
Beca «Familia D. Antonio Miranda, salesiano». T . : 15.000.
Beca «Josefa A. Roldán y Familia». Total: 30.600 pts.
Beca «Vda. Casanovas». Total: 6.000 pts.

INSPECTORIA DE SEVILLA - «BESASE»
P. Provincial: Calle Maria Auxiliadora, 17 - Sevilla
Teléfonos 35 04 86 . 35 01 00
BECAS EN FORMACION
Beca «M.6 Aux.» Archlcofradla. Cádiz. N. e .; 1.000 pts
Total: 11.000 pts.

BOLETIN

BECAS COMPLETAS
Beca perpetua «María Auxiliadora» por Srta, Enriqueta
Curt. Alicante. 100.000 pts.
Beca perpetua «Dolores Éerenguer Cerdá» por el alma de'
su hija Remedios Albert Berenguer. Alicante. 100.000 pts.
BECAS EN FORMACION
Beca perpetua «Santa Teresa». 2.6 entrega: 30.000 pts.
Beca «San Cayetano». Crevlllente. Total; 63.000 pts.
Beca «Ramón Guerrero» por un empleado de la Casa da
Albacete. Total; 10.000 pts.
Beca «Cooperadores de Valencia». Total; 13.000 pts.
Beca «Archicofradía M.6 Auxil.» Valencia. Total: 16.000 ptsBeca 2.6 «Rvdo. D. Manuel Pérez». Total: 1.000 pts.
Beca «Maria Peire». en memoria de su esposo. T . : 10.000 pts.
Beca «Circulo Domingo Savio». Total: 1.600 pts.
Beca perpetua «Juan Manuel», por D.6 Carmen Gómez de
Tortosa. Alcoy. Total: 60.00p pts.
Beca «Rvdo. Don Mariano Alsa». Burrlana. Total: 17.600 pts.
Beca «Nuestra Señora del Pilar». Zaragoza. Total: 43.500 pts-

INSPECTORIA DE ZAMORA
P. Provincial: Universidad Laboral - Zamora
BECA COMPLETA
Beca «Ntra. Sra. Covadonga». Oviedo-Naranco. T . : 60.000BECAS EN FORMACION
Beca «M.6 Auxiliadora». Oviedo-Naranco. Total: 36.611 ptsBeca «P. Miguel Salgado». Vigo. San Matías. T . : 67.460 pts.
Beca «Don Felipe García». Cooperadores. Coruña - Hogar.
Total: 6.000 pts.
Beca «María Auxiliadora». Arch. Vigo. Total: 34.000 pts.
Beca «D. Pedro Olivazzo». Astudillo. Total: 12.576 pts.
Beca «D. Ernesto Armelles». Coruña. Colegio. T .: 38.260.
Beca «D. Jo sé S ' urido». Orense. Total: 22.800 pts.
Beca «San José». Vigo. S. Matías. Total: 59.000 pts.
Beca «M.S Auxil.» Zamora. Rey Fernando. Total: 10.000 pts
Beca «Domingo Savio». León. Total: 16.665 pts.
Beca «Virgen de Vülonueva». Allarlz. Total; 21.125 pts.
Beca «Ntra. Sra. de Covadonga». Tudcla Veguln. T .; 19.346.
Beca «Maria Auxiliadora». Allariz. Total; 25.000 pts.
Beca «José Sabaté». Vigo. Total: 31.000 pts.
Beca «Don Emilio Montero». Orense. Total: 22.000 pts.
Beca «María Auxiliadora». Celanova, Total: 32.000 pts.

S A LES IA N O

CAMBIOS DE DOMICILIO

DUPLICADOS

1.? Cuando cambie de domicilio avísenos mandando la dirección antigua recortándola de la
bolsa con que le llega desde Madrid - Alcalá, 164.
Caso de no serle posible envíenos la dirección
antigua completa y la nueva.
2.9 De ordinario el cambio no es efectivo has­
ta pasados dos meses del aviso. Es muy conve­
niente tener presente este detalle para no hacer
reclamaciones intempestivas.

Si usted recibe dos o más boletines salesianos
por correo y desea anular alguno, cerciórese antes
de que los recibe de la misma procedencia. Sí lo
recibe directamente de esta Dirección, cosa que
se conoce por la bolsa típica con que llega, aví­
senos ?*guiendo la pauta de los Cambios de Do­
micilio.

OBRA PIA DEL SAGRADO CORAZON
San Juan Bosco, antes de su muezte, tundo con la aprobación del Papa
León XIII la Pía Obra del Sagrado Corazón para que se celebraran SEIS MI­
SAS DIARIAS Y PERPETUAS en la Basílica del mismo nombre, en Roma, a
intención de cuantos se inscribieran en ella.

BENEFICIOS
ESPIRITUALES
de que gozan los inscritos
en la Pía Obra.
1. Participación en los frutos
da las SEIS MISAS DIARIAS Y
PERPETUAS, poniendo la inten­
ción que se desea conseguir,
bien en provecho propio, bien
en el de una persona querida o
amiga, viva o difunta.
2. Participación, asimismo, en
los frutos del Santo Rosario que
los alumnos de las Casas Salesianas obtienen con el rezo dia­
rio del mismo.
3. Participación, igualmente,
en las oraciones y buenas obras
de los Salesianos y de las Hijas
de María Auxiliadora.
Puede apreciarse que los be­
neficios son muchos y muy in­
teresantes.

INSCRIPCION
1. Puede inscribirse uno a sí mismo y a otras
personas, vivas o difuntas, por las que quiere pe­
dir o sufragar.
2.

Puede inscribirse una o más veces la mis­

ma persona para aumentar su participación en
los beneficios espirituales.
3.

La inscripción, que es nominal, se efectúa

tras la aportación de una limosna superior a
25 pesetas o de esa cantidad (que se puede en­
viar por giro postal o en sellos de correos de
cualqier valor). La inscripción se acredita con
una Cédula artística.
4.

Para inscribirse: Envíe con letra bien clara

el nombre o nombres y apellidos de la persona
que se inscribe, indicando si es viva o difunta
(no olvide este detalle) a:

FINES DE LA OBRA PIA
Las limosnas recogidas se em­
plean en el culto al Sagrado Co­
razón, pero principalmente para
el Sostenimiento de las Vocacio­
nes Salesianas. Por tanto, quien
se inscribe, además de disfru­
tar del tesoro salesiano, hace la
obra buena, tan necesaria hoy,
de ayudar a que haya muchos,
buenos y celosos sacerdotes sa­
lesianos.

OBRA VOCACIONAL DE LOS COOPERADORES
SALESIANOS - Alcalá, 164 - MADRID (2)

INSCRIBIR A UNA PERSONA EN LA OBRA DEL
SAGRADO CORAZON PUEDE SER UN DELI­
CADO OBSEQUIO EN EL DIA DE SU SANTO.

Bscueia Gráfica Saleeiana: láadrid - Atocha

Sr. D.