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                extracted text                        
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                        Junio, 1929.
 
 Ano XLIV- N. 6.
 
 BOLETIN SALESIANO
 REVISTA DE LAS OBRAS DE DON BOSCO
 BEATE
 
 JO AN N ES
 
 BOSCO
 
 O ra p ro nobis!
 [Sí, gloriosísim o
 Beato Juan Bosco,
 rogad por nosotros!
 Este grito que de
 tanto tiempo resona
 ba en lo más íntimo
 de nuestras almas y
 que nuestros pechos
 eran apenas capaces
 de retener, se eleva
 hoy espontáneo, so
 lemne, de miles de
 corazones, formando
 un himno grandioso
 que de todas las par
 tes del mundo, con
 los acentos de todas
 las lenguas,
 llega
 hasta lo más alto de
 los Cielos, para dar
 gracias al Altísimo,
 rendir homenaje al
 gran Sier\’0 de Dios
 y para invocar su
 celeste protección y
 poderoso valimiento.
 Escribimos a fines de abril, al siguiente
 día de la lectura solemne del Decreto del
 tuto, con que se declara que, sin ningún in
 conveniente, con toda seguridad, se puede
 proceder a la Beatificación del Vble. Juan
 Bosco; no podemos, por tanto, dar detalles
 de fiestas, ni aún de preparativos próximos.
 
 Pero cuando este nú
 mero llegue a manos
 de la mayor parte de
 nuestros lectores, ya
 en la Basílica de San
 Pedro de Roma se
 habrá descubierto la
 gloria del Nuevo Bea
 to; ya Su Santidad,
 como Cabeza de la
 Iglesia, se habrá pos
 trado ante su imagen
 para venerarlo; ya la
 ciudad de Turín le
 habrá tributado su
 homenaje de amor y
 gratitud; ya miles de
 peregrinos proceden
 tes de los más di
 versos países habrán
 asistido a su triunfo
 y lo habrán invo
 cado como celestial
 protector.
 Por eso el Boletín
 Salesiano invita a to
 dos sus lectores, especialmente a aquellos que
 no podrán tomar parte a las fiestas de Ropia
 y Turín, a que se unan en aquellos días
 del 2 al 12 de junio a los salesianos de todo
 el mundo, para invocar y venerar al nuevo
 Beato, diciendo con todoel afecto desús almas:
 ¡B e ATE JOA^*^*ES B osco ORA PRO NOBIS!
 
 IÓ2
 
 Feliz epílogo de la Causa de Beaíificación
 del Siervo de Dios Juan Bosco.
 El día 21 del pasado abril, fiesta del Pa
 trocinio de San José, en el aula Consistorial
 del Palacio Apostólico Vaticano, su Santi
 dad Pío X I ordenó la lectura de dos De
 cretos, el primero de los cuales declara que
 se puede proceder seguramente a la so
 lemne Beatificación del Vble. Siervo de Dios
 Juan Bosco, fundador de la Pía Sociedad
 Salesiana y el segundo reconoce el marti
 rio del Vble. Siervo de Dios, Cosme de Carboniano, sacerdote y párroco armeno.
 A la lectura se hallaban presentes los Emmos. Sres. Cardenales Laurenti, Prefecto de
 la Sagrada Congregación de Ritos; Gasparri,
 Secretario de Estado y protector de la Pía
 Sociedad Salesiana; Sincero, secretario de la
 Sagrada Congregación para la Iglesia Orien
 tal; Ehrle, Ponente de la Causa del Vble.
 Cosme Carboniano y Verde, ponente de la
 Causa del Vble. Don Bosco. Había además
 gran número de obispos y personajes, rela
 cionados o con la Nación armena o con la
 Congregación Salesiana; entre estos últimos
 nuestro Superior General, Rvdmo. D. Felipe
 Rinaldi, la Superiora de las Hijas de María
 Auxiliadora, M. Vaschetti, el Presidente In
 ternacional de los Cooperadores Salesianos,
 ICxcmo. Sr. Conde de Rebaudeiigo y el Pre
 sidente de la Federación Internacional de
 los Exalumnos Salesianos, Comendador Fé
 lix Masera.
 
 E l decreto de\ Tuto.
 Mons. Marinni, Secretario de la Congregación
 de los Ritos dió lectura al sigxiicnte decreto:
 «Para protnover la gloria de Dios y obtener
 la salvacióyi eterna del género humano el Vene
 rable Siervo de Dios Juan Bosco dió cima a
 nobilisimas y admirables empresas.
 Como hombre eniiado por Dios Jara cumplir
 esta doble wiíion, empceó prodigando sus cuidados
 <1 los foveucitos, procurando inculcarles el conoci.
 miento y práctica de los deberes de la Religión,
 adornando su alma de virtudes y dándoles estnerada educación civil, para que el beneficio de la
 Redención se aplicara con gran abundancia.
 Su voluntad de ganar para Dios el mayor nú
 mero poibles de almas no conoció limites y el
 celo apostólico que ardía en su coraxón le hacia
 
 abrazar y atraer a si a todas las Naciones.
 1.a falta de medios; las no pocas contrarie
 dades, aún de parte de personas revestidas de
 autoridad, las mismas dificultades inherentes
 a la ardua empresa, los muchos obstáculos que tuvo
 que vencer, habrían debido quebrantar su constan
 cia. Y en. cambio Don Bosco siguió animoso
 por el camino emprendido y con la ayuda de Dios
 llevó a feliz término las obras empezadas, hacién
 dose acreedor a una fama y admiración inmortal.
 Escribió además y difundió abundantemente
 libros muy aptos para promover la piedad y
 difundir entre el pueblo los preceptos de la vida
 cristiana, libros que aun hoy dia son tenidos en
 grande estima.
 Además si se paragona la falta de auxilios
 humanos que tantas veces le afligía con la mag
 nitud y extensión de las Obras llevadas a cabo
 y el bien hecho a toda clase de personas, se pre
 senta a nuestra consideración un nuevo prodigio.
 Si, un verdadero prodigio; pues.nos parece asistir
 a una porfía entre la generosidad divina por una
 parte y la confianza sin límites y generosidad de su
 Siervo por otra, para aumentar sus fuerzas, mul
 tiplicar sus aptitudes, hacer fructíferas sus fati
 gas. Y el prodigio aumenta al ver a ese hombre
 ocupado en difíciles asuntos, expuesto frecuente
 mente a no pocos peligros, tratando con niños
 y con toda clase de personas, sin jamás desviarse
 de la práctica de ¡as virtudes cristianas, antes
 al contrario alcanzando en ellas las más altas
 cumbres, como fué reconocido y definido después
 de jurídicas y minuciosas discusiones^, con el
 decreto solemnemente publicado el dia 20 fe
 brero de 1927.
 Entre tanto, después de la muerte del Vble.
 Siert'O de Dios, acaecieron muchos prodigios
 dos de los cuales, según exigía la naturaleza de
 la Causa, discutidos y examinados según el
 acostumbrado rigor del Derecho fueron recono
 cidos como milagros con decreto de 19 de marzo
 último. Quedaba sólo un punto por determinar:
 a saber: si se podía con ánimo seguro proceder
 a la soleinne Beatificación del Vble. Juan Bosco.
 Lo cual se hizo en la últitna Congregación
 General tenida a la presencia del Santísimo
 Señor Nuestro Papa Pió X I, en ¡a cual el Rvdmo.
 Cardenal Verde propuso la siguiente pregunta:
 Si dada la aprobación de las virtudes y de los
 milagros, se podía seguramente proceder a la
 solemne Beatificación del Vble. Siervo de Dios.
 Todos los reunidos, tanto los Rvdmos. Sres. Car
 denales como los Padres Consultores, dieron por
 
 T
 
 163
 orden su voto favorable, del cual se alegró el
 Sumo Pontífice, quien sin embargo difirió a otro
 día dar su juicio, para tener tiempo de im
 plorar las luces divinas.
 Habiendo luego determinado manifestar su
 juicio, escogió este dia, domingo tercero después
 de Pascua y después de celebrar fervorosamente
 
 Juan Bosco y dispuso que este Decreto fuese
 publicado e insertado en las actas de la Sagrada
 Congregación de Ritos: con*p también que se
 preparasen las letras apostóíicas en forma de
 Bteve, sobre la beatificación, que habría de cele
 brase solemnemente lo más pronto posible, en
 la patriarcal Basílica Vaticana.
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 ®3
 El RioDomaiio a Don B osco en el inlerior del O rato rio . ínangorado el dia 24 d e abril.
 
 el Santo Sacrificio, llamó a los Rvdmos. Car
 denales Camilo Laurenti, Prefecto de la Sagrada
 Congregación de Ritos y Alejandro Verde, Po
 nente de la Causa, como también al Rvdmo.
 Mons. Carlos Saloíti, promotor General de la Fe
 y al infrascrito Secretario y entrando con ellos
 en la sala noble se sentó en el Solio Pontificio
 y declaró con solemne decreto que se podía pro
 ceder seguramente a la Beatificación del Vbte.
 
 E l Papa habla por tercera vez
 de D on Bosco,
 Después deí Discurso de gracias por am
 bos decretos, pronunciado -poT el postuladoT de la Causa óei Vble. Cosme de Carboniano, Mons. Sergio Der-Abrahamian, el
 Santo Padre pronunció una hermosísima
 alocución, hablando de los dos Siervos de
 
 —
 Dios y de la cual transcribimos los princi
 pales conceptos referentes a nuestro Padre
 y Fundador.
 Dijo el Papa que todos los presentes Ha
 bían acogido como El. con piedad y júbilo,
 con íntimo sentimiento de las cosas santas,
 los decretos que se acababan de leer, uno
 reconociendo el Martirio de Cosme de Carboniano y el otro declarando que se podía
 proceder con toda seguridad a la solemne
 Beatificación del Vble. Siervo de Dios. Sacerdolc Juan Bosco, gloria de Italia y lo que
 vale mucho más, gloria de toda la Iglesia
 Católica.
 Sólo con estas dos enunciaciones es tanto
 el esplendor, la magnificencia, la edificación
 de grandes y santas cosas, que el ánimo se
 inclinaría a dejarlas hablar por sí solas, con
 su inimitable significado. Pero por lo mismo
 que las cosas son grandes en sí, requieren
 algún comentario que responda al deber de
 sacar de estas grandes cosas algún fruto es
 piritual. Y además el Santo Padre quiere
 con ello satisfacer una necesidad de su co
 razón, dada su personal, profunda, cordial
 simpatía hacia los dos héroes del dóble De
 creto. Y su palabra se resumirá en dos con
 ceptos comprensivos de las más variadas y
 grandiosas realidades: Una palabra sobre la
 Fidelidad Divina y otra sobre la incompa
 rable sabiduría de la grande Madre y Maestra
 que es la Iglesia Católica, palabras que sean
 como un himno de admiración a la Infinita
 Bondad, por la finura y elegancia con que
 su Divina Providencia sabe hermosear y
 valorizar las cosas, ya de suyo grandes y
 preciosas.
 Y después de haber aplicado estos con
 ceptos al Beato Mártir de la Armenia, al
 hacer resaltar la fidelidad de Dios, añade el
 Santo Padre refiriéndose a Don Bosco: Y es
 precisamente esto lo que un santo sacer
 dote. un humilde Siervo de Dios decía al
 Santo Padre en los principios de su Sacer
 docio: wTenga bien presente que lo que a
 menudo nos falta es la confianza en la fi
 delidad de Dios, la cual es en verdad sin
 límites y sin medida ».
 Su Santidad quiere dejar a sus oyentes
 el recuerdo que nos viene de la tumba del
 mártir y de las palabras del bueno y hu
 milde Sier\*o de Dios, no sólo porque resul
 tan una útil lección en medio de tan amar
 gas lecciones de cosas, entre las tinieblas
 presentes y las que se vislumbran para el
 
 té4
 provenir, sino también porque en estas
 mismas difíciles circunstancias nos propor
 cionan grande ánimo y consuelo.
 Y precisamente esta confianza inmensa,
 inagotable, elevada a la altura de un con
 tinuado milagro moral, es la que ha dejado
 en herencia un día a sus hijos y hoy po
 demos decir al mundo católico, el Beato
 Juan Bosco. Basta comparar los humildes
 principios de su • obra con los esplendores
 con que hoy día resplandece; basta recor
 dar las dificultades de todo género, materia
 les y morales, promovidas por sus enemigos
 y a veces hasta por sus amigos; los infi
 nitos obstáculos que tuvo que vencer y
 luego la magnificencia y esplendor del triunfo
 mundial que alcanzó aún en vida, para com
 prender cuánto puede la confianza en Dios,
 la confianza en la fidelidad de Dios, cuando
 un alma sabe decir de verdad: «Scio cui
 credidi ».
 Y esta es la impresión que el Santo Pa
 dre conserva todavía viva en su alma y
 que experimentó en sus años juveniles, cuan
 do por divina bondad y disposición pudo
 conocer al Vble. Siervo de Dios, un hombre
 que entonces y después le pareció siempre
 invencible, insuperable, precisamente porque
 estaba firme y sólidamente fundado en una
 confianza plena, absoluta en la Divina Fi
 delidad.
 Y hablando luego de la sabiduría de la
 Iglesia, su Santidad dice que hay también otra imitación que la sabiduría de la Iglesia
 Madre sugiere al proponer a los mártires
 como modelos de los fieles; pues no so
 lamente hay el martirio cruento, con el
 derramamiento de sangre, sino también el
 martirio incruento, de infinita variedad, a
 través de las diversas condiciones y grados
 de la escala social.
 Y también aquí puede aplicarse una her
 mosa frase de un antiguo santo y Doctor
 que dice que celebrationes martyrum sunt
 exhortationes martyriorum: Ea celebración de
 los mártires es exhortación para el martirio;
 ya que existen almas que inflamadas con el
 ejemplo del martirio se consagran volunta
 riamente al meritorio martirio incruento, in
 dispensable para conservar intacta la pu
 reza del alma. Existe el martirio incruento
 de tantas almas que voluntariamente, aún
 cuando tienen a su disposición riquezas y
 bienes materiales, todo lo abandonan y a
 todo renuncian para abrazar las privaciones
 
 i 65
 
 de la pobreza; bay el martirio incruento de
 tantas voluntades que en la plena posesión
 de sus derechos y reconociendo su propia
 dignidad, renuncian a la libertad para so
 meterse enteramente e inviolablemente a la
 obediencia, aún cuando ésta se presente en
 vuelta en las tinieblas de planes desconoci
 dos y cuyo alcance se desconoce. H ay fi
 nalmente tantos y tantos martirios incruen-
 
 mantenerse en los límites de la justicia en
 medio de la carrera desenfrenada hacia los
 bienes materiales, para conservarse humildes,
 con aquella humildad verdadera y cristiana,
 de espíritu y de corazón, en medio de tanta
 soberbia de vida, y de tan loca ambición de
 poder y prepotencia! Y la Iglesia de todos
 sus hijos espera el heroísmo del martirio,
 pues a la verdad ¿quién puede sustraerse
 
 Torio — Piniora moral en ei pórtico que ocopaba la aoligua casa Pinardi, reprodocida en el cuadro.
 
 tos en la sencillez de la vida cristiana de
 las humildes familias del pueblo. ¡Cuántos
 martirios se soportan para conservar intacta
 la pureza y la dignidad de las familias!
 ¡Cuántas luchas a veces verdaderamente san
 grientas, pues sangre moral son las priva
 ciones y las lágrimas, para no obtener a
 trueque de la honestidad, ventajas dema
 siado fáciles! ¡Cuántos martirios incruentos
 para mantenerse puros, íntegros, dignos del
 nombre y de la profesión de cristianos, en
 medio de tan profunda depravación, para
 
 a tales martirios incruentos? Doquiera hay
 deberes que cumplir, doquiera surgen difi
 cultades y obstáculos para el cumplimento
 del deber, allí las almas generosas tienen
 que afrontar el martirio para el cumpli
 miento del deber, de una manera digna de
 la gloria de Dios y de la Iglesia. Esto es lo
 que Vían hecho los Santos y de ello nos
 ha dado im luminoso ejemplo el Beato
 D . Bosco, tanto más imitable cuanto más
 (arcano a nosotros y cuanto más su, vida
 se ha desarrollado en las mismas condi-
 
 i66
 ciones de ambiente y de vida social en las
 S. S., el Papa, con visible complacencia, le
 que nosotros vivimos.
 dijo con voz que pudo ser oída por los cir
 Su Santidad quiere terminar recordando cunstantes: \Bien venido, D. Rinaldi, bien
 las fulísimas y elegantes combinaciones de venido! Y al terminarse la ceremonia, antes
 la Providencia Divina, y refiriéndose a su de retirarse a sus habitaciones se detuvo a
 convivencia con el Beato D. Bosco añade
 hablar con nuestro Rector Mayor con gran
 que aquel antiguo conocimiento y bien puede
 des muestras de afectuoso cariño.
 decir antigua amistad, aunque el Santo Pa
 dre se encontrara todavía en el principio d e ’
 su sacerdocio y D. Bosco estuviera ya pró
 GRACIAS
 ximo a su luminoso ocaso, esta amistad sa
 DEL BEATO JUAN B O SC O
 cerdotal que lo hace revivir en su corazón
 con toda la alegría, la dulzura, la edifica
 ción de su recuerdo, vuelve a revivir pre
 BARCEI.I.OS. — El Sr. D. Manuel Frías, re
 cisamente en estos días y en esta hora,
 conocido a D. Bosco por haber alcanzado la
 mientras la figura del gran Siervo de Dios,
 aparece en el horizonte no sólo de toda una salud, ha ofrecido a la Misión Salesiana de
 Barccllos la cantidad de 400 pesos para ayudar
 nación sino del mundo entero, precisamente
 las obras que allí se llevan a cabo.
 en esta hora en que acontecimientos de tan
 i6 Febrero 1929.
 particular y solemne importancia se han
 A ngep Cerrt, Misionero Salesiano,
 verificado en la Historia de la Santa Sede,
 de la Iglesia y de la Nación entera.
 El- S ai-vador . — Hago publica mi gratitud
 al Beato D. Bosco por haberme alcanzado la
 Pues conviene recordar lo que Su Santidad
 gracia de curarme de unos ataques de hemoptisis
 ha ya recordado con conocimiento de causa:
 a saber, cómo D. Bosco haya sido uno de que me atonnentaban con frecuencia. La última
 los jirimeros, más autorizados y más com- vez que me dieron fué el 8 de Septiembre de
 1927, y el ataque duró tres días, y fué tan fuerte,
 Iietentes en deplorar lo que un día sucedía:
 que temí llegada mi última hora. Entonces pro
 tanta manumisión de derechos de la Iglesia
 metí a D. Bosco, que ,si me salvaba y pasaba
 y de la Santa Sede, en deplorar que aquellos un año sin que se repitieran los ataques, haría
 que entonces regían la suerte de la nación, pxiblico su milagro lo qxxe hago hoy con todo el
 no se apartaran de caminos que no se po contento de mi corazón, pidiendo a Dios su
 dían recorrer sin pisotear los más sagrados pronta santificación.
 derechos. Y Don Bosco fue de los primeros
 26 marzo 1929.
 María T eresa A lvarado .
 en implorar de Dios y de los hombres algún
 jjosible remedio a tantos males, algún posible
 BirrijOQUE [Vnu’Zuela- Trujillo). — María
 arreglo para (jue volviese a resplandecer con Josefina Lera, tributa efusivas gracias al Ve
 el sol de la Justicia, la serena paz de los nerable Don Bosco por dos señalados favores
 os¡)íritus.
 conseguidos y envía 2 bolívares para la Causa
 I.a divina Provitlencia lo eleva, lo propone do su Beatificación y para las Misiones
 a la plenitud de los sagrados honores pre Salesianas más necesitadas. Da también pú
 cisamente en esta hora y la Beatificación de blicamente gracias a Doña Dorotea de Chopitea
 D. Bosco será la i>rimera que el Sumo Pon |>or un favor obtenido.
 tífice tendrá el consuelo de proclamar a la
 ¡bid. — Julia Rosa Lera, manifiesta su impe
 faz del mundo, a raíz del fausto aconteci recedero agradecimiento al Beato Don Bosco
 miento por él tan ansiado.
 por haberle concedido varios favores, y en
 No resta sino agradecer y admirar. Cuando vía una pequeña dádiva para los huerfanitos
 nos encontramos con un Dios ta fiel, con la de la Casa Jladre de los Salesianos, en Turín.
 Providencia tan exquisita y elegantemente
 Ibid. — Metida Moniilla, con.siguió su salud
 generosa en sus disposiciones, ¿qué podemos por intercesión del A'enerable Don Bosco, a
 temer? ¿qué no podemos esperar en la quien invocó, y hace ima oferta para los gastos
 seguridad de ser atendidos?
 de su Beatificación.
 Y el Santo Padre, terminaba impartiendo
 Cali {Colombia). — Claudina Olave ma
 a todos la Apostólica Bendición.
 nifiesta su gratitud al Beato Don Bosco por un
 Cuando nuestro Superior General se acercó grande favor que le concedió y manda una
 al trono Pontificio para besar los pies de ofrenda para la Obra Salesiana.
 
 I
 
 1
 
 i 67
 
 D e ¡a Cruzada A\isionera,
 
 LA P A G IN A D E O R O
 destinado a registrar los nombres de las Secas Misioneras que se van formando para
 responder al llamamiento del Sucesor de Don Bosco. He aquí la undécima (2* serie).
 
 84.
 
 B eca D . Alejandro Garberí
 
 fundada por los leprosos del Lazareto de
 Contratación (Colombia).
 
 85. B eca D. M igu el Unía
 fundada por los leprosos del Lazareto de
 Agua de Dios (Colombia).
 
 86. B eca N , Señora de Guadalupe (I)
 87. B eca N. Señora de Guadalupe (II)
 fundadas ambas por los Salesianos, Alum
 nos y Cooperadores de Méjico.
 
 88. B eca Teniente M ario Rocchi
 costeada por su madre, Sra. Dña. Enriqueta
 Vigilante.
 
 89. B eca /?. Antonio Aime
 a cargo de los Salesiamos, Alumnos y
 Cooperadores de Colombia.
 
 90. B eca D. Felipe Rinaidi (III)
 ofrecida por los Salesianos, Alumnos y
 Cooperadores de Medellín (Colombia).
 
 91. B eca S . M iguel
 fundada por un alma generosa.
 
 92. B eca Nicolasa Lachelli
 fundada por la Señorita NicolaSa Lachelli,
 para favorecer las vocaciones misioneras.
 
 93. B eca La Virgen de los Dolores
 costeada por una devota de la isla de Cuba.
 
 94. B eca Mamá Margarita
 ofrecida por la Sra. R. P. U., de Turín,
 en acción de gracias por haber obtenido
 la curación de su única hija.
 
 95. B eca Don Felipe Rinaidi (IV)
 completada entre varios donantes.
 
 E l amor en e l dolor.
 Paréceme tener todavía delante de los
 ojos el cuadro doloroso y desgarrador que
 ofrecían los pobres leprosos. ¡Qué angustia
 se sentía en el corazón al penetrar en aquella
 región del dolor! Se diría que era la atmós
 fera más pesada; se palpaba, se respiraba
 en el ambiente la fatal enfermedad.
 En el rostro de los enfermos que aún pue
 den mantenerse en pie, parece que vaga una
 sombra fúnebre, que deja profundas huellas,
 bajo la acción destructora de la horrible en
 fermedad.
 Pero cuando llega a su colmo la angustia y
 cuando se siente más conmo\*ido el corazón,
 es al atraversar los corredores del Lazareto,
 y recorrer aquellos cementerios de vivos, sí,
 verdaderos cementerios por sus emanaciones
 sepulcrales, por el estado de aquellos cuer
 pos en putrefacción, de los que se desprenden,
 trozo a trozo, los miembros corrompidos.
 
 Y el alma cristiana, que sabe sufrir con
 el sufrimiento de sus hermanos, se siente
 extrañamente subyugada ix>r un sentimiento
 de profunda conmiseración jamás experi
 mentado, y busca en su corazón, el modo
 de remediar tan acerbos dolores.
 Y este sentimiento es el único capaz de
 crear el heroismo del Misionero y de la Re
 ligiosa, que se inmolan generosamente por sus
 hermanos en el reino de la muerte, felices,
 porque gustan las inefables dulzuras que
 por el mero hecho de ser sobrenaturales,
 no tienen comparación con los efímeros y
 falaces placeres de la tierra.
 ¡Honor a esos héroes de la caridad que
 saben inmolarse de una manera tan gloriosa!
 Grande debe ser el premio que Dios les
 tiene preparado, como grande es el amor y
 gratitud que por ellos sienten los infelices des
 graciados, (jue son el objeto de su abnegadóii.
 
 ¿Recordáis, queridos lectores del Boletín,
 el hermoso rasgo de aquel escultor leproso,
 de Agua de Dios? — L a enfermedad había
 reducido sus manos a dos informes muñones;
 con todo, se empeñó en manifestar a los
 salesianos toda la gratitud que hacia ellos
 albergaba su corazón, y el corazón de todos
 los leprosos.
 — Don Bosco, dijo, os ha mandado aquí
 para mitigar nuestras penas y ser nuestros
 ángeles de consuelo en esta larga y terrible
 agonía. Pues bien; yo quiero ofreceros a vo
 sotros, hijos de D. Bosco, la imagen de
 vuestro Padre, esculpida por mí.
 Y con valor sobrehumano, se consagró al
 trabajo. No son para descritos los sufri
 mientos a que tuvo que someterse: cada mar
 tillazo repercutía dolorosamente en su cuerpo
 lacerado; pero el amor venció al dolor. El
 busto de D. Bosco, esculpido por el pobre
 leproso, está aún alK, testificando la grandeza
 de un corazón agradecido, por más que se
 encuentre encerrado en un cuerpo hediondo
 y putrefacto.
 
 Las becas misioneras
 de los leprosos.
 Y esos sentimientos de gratitud no han
 disminuido. E l eco de la Gran Cruzada Mi
 sionera ha llegado hasta ellos y ha prendido la
 idea en tal forma y con tanto entusiasmo
 que verdaderamente, se empañan los ojos
 con tiernas lágrimas al leer lo que nos es
 criben los Salesianos de los lazaretos de
 Contratación y Agua de Dios;
 «Nuestros queridos leprosos quieren tam
 bién manifestar a D. Bosco, en la persona
 de su tercer sucesor, su profunda gratitud.
 Quieren perpetuar, con uua beca misionera,
 la memoria de sus queridos bienhechores,
 los sacerdotes salesianos, que, víctimas de
 su heroísmo inmolaron su vida en estos la
 zaretos, con el único fin de confortar y con
 solar sus penas. Los leprosos de Contrata
 ción, con una generosidad ejemplar, que les
 honra grandemente, han conseguido fundar
 uua beca deilicada a D. Alejandro Gaiberi,
 primer director de la Leprosería.
 lín Agua de Dios, los enfermos van a
 porfía para formar entre ellos la beca que
 lleve el nombre del inolvidable P. Miguel
 Unia, el apóstol de k>s Leprosos ».
 Queridos Cooperadores, amigos todos de
 la obra salesiana, que habéis derramado lá
 grimas de ternura al recorrer estas h'neas que
 
 tienen visos de leyenda, de pié todos y uni
 dos como un sólo hombre, tributemos nues
 tro aplauso, nuestra admiración más pro
 funda a estos generosos hermanos nuestros,
 que bajo un cuerpo deformado por la en
 fermedad, encierran tan nobles sentimientos.
 El generoso rasgo de los leprosos de Con
 tratación y Agua de Dios, será, sin duda,
 uno de los joyeles más preciados de nuestra
 Cruzada Misionera.
 
 Nuestros hermanos de Méjico.
 No son únicamente las penas del cuerpo,
 sino también las que atormentan el alma,
 las que buscan alivio en generosas mani
 festaciones de amor.
 E l mundo entero contempla hoy día el
 prolongado martirio de los católicos mejica
 nos. L a voz de Dios, la voz de su Vicario
 en la tierra, no ha sido escuchada, a pesar
 de ser la voz del amor, la voz del Padre...
 Los hijos de D. Bosco se han visto en
 vueltos en la desventura general. Les han
 arrebatado lo que constituye la llave maestra
 del sistema pedagógico salesiano: la piedad,
 la Sda. Eucaristía. jY qué triste es la vida
 sin la consoladora presencia de Jesús! Les
 está proliibidda la oración, el desahogarse
 íntimamente con Jesús, el ir a contar sus
 cuitas a su buena Madre Jlaría Auxiliadora.
 La casa salesiana, sin capilla, sin Eucaristía,
 es una casa muerta, es la casa del dolor.
 Mas a pesar del angustioso abandono en
 que se encuentran, no decaen de ánimo
 nuestros valerosos hermanos. Han hecho de
 sus corazones un templo inviolable, en donde
 habita Jesús, y en donde es venerada y
 tiernamente amada María Auxiliadora.
 Su esperanza, lejos de entibiarse, se
 muestra más pujante cada día, y quieren
 apresurar el de la victoria, concurriendo con
 todas sus fuerzas a las obras de amor y
 abnegación. La Cmzada Misionera ha en
 contrado cordialísima acogida en sus ma
 gnánimos corazones, y han fundado dos be
 cas Misioneras, dedicadas a su excelsa Patrona la Virgen de Guadalupe.
 Quiera la Excelsa Señora que ha prece
 dido siempre los pasos de la civilización
 de Méjico, que se serene pronto el tempes
 tuoso horizonte que nubla la alegría de aque
 lla noble nación, y la haga encontrar en
 las prácticas de la Religión, la paz y progreso
 \‘erdaderos.
 
 - l
 
 I&9
 
 O irás manifesfaciones de amor,
 L a Cruzada Misionera es eminentemente
 ima manifestación de amor; por eso es tan
 conmovedor el espectáculo que ofrecen tantas
 almas, que agobiadas por el dolor, vienen
 a buscar su consuelo esta fuente de amor.
 Una madre profundamente cristiana busca
 también en las obras de amor un consuelo
 a su inmenso quebranto. Pronto esperamos
 publicar la vida del clérigo salesiano Víctor
 Bini, muerto prematuramente en el Perú,
 a donde había ido cón entusiasmo de após
 tol. Desde pequeño, y más tarde en las filas
 de la Juventud Católica, fué siempre im
 verdadero apóstol.
 Por ahora, su madre, en unión con otros
 miembros de la familia, ha tenido la feliz
 idea de fundar una beca misionera que per
 petúe su recuerdo.
 Madres y familias cristianas, que consa
 gráis a Dios, en sublime holocausto, a vues
 tros queridos hijos; estad seguras que ha
 de ser muy grande la recompensa que Dios
 os tiene preparada en el cielo.
 También el entusiasmo de nuestros be
 neméritos Cooperadores, unido al de los ex
 alumnos y exalumnas, sigue trabajando en
 la formación de nuevas Becas.
 E l lim o. Sr Alfredo Migniui, Obispo de
 Perusa, de acuerdo con el Sr. Director del
 Colegio Salesiano, organizó una conferencia
 Misionera y quiso ser el iniciador de la Beca,
 animando a todos los presentes a cooperar
 a la misma, para que no se pueda decir que
 en esta noble porfía de generosidad, la ciu
 dad de Perusa cede la palma a ninguna otra
 En Malta un piadoso sacerdote trabaja
 incansable hace tiempo jpor la creación de
 una beca que quiere lleve el nombre de
 Pió X , a fin de que, como él mismo escribe,
 el misionero favorecido por ella, sea eminen
 temente eucaríslico, como lo fué el Beato
 Juan Bosco.
 Por su parte la Unión de Exalumnos de
 Udine trabaja con febril actividad por la
 fundación de una beca que lleve el nombre
 de su querido Arzobispo, dando así a to
 dos un magnífico ejemplo de la veneración
 que todo exalumno debe nutrir hacia los
 eximios prelados que con tanta benevolencia
 apoyan la obra salesiana.
 Daremos fin a estos renglones con las no
 bles palabras de una benemérita exalumna
 Maestra de Párvndos, que mandando la se
 
 gunda oferta de sus pequeñuelos, para la
 beca iniciada con el sugestivo, título
 guitos de D. Bosco\, nos escribe:
 « Son felices porque ha sido acogida tan
 benevolmente su propuesta, y de tal modo
 se han enfervorizado en multiplicar sus pe
 queños sacrificios, que todo les parece poco
 con tal de ver realizado, al menos en parte,
 el ardiente anhelo de sus corazones.
 « Sería demasiado largo enumerar los con-
 
 ' f
 
 e
 
 i: *
 
 EJ leproso qae en prueba de gralilud
 esculpió el busto de D. bosco.
 
 movedores episodios que nos ofrecen estos
 pequeñuelos. Contaré uno sólo.
 <
 ■ Una niña de pocos años, no contenta de
 colocar en la hucha misionera sus ahorros,
 aporta también la oferta de sus hermanitos más j>equeños que aún no pueden ir a
 la escuela. No refiero las frases de la pequeña
 donante, porque me siento incapaz de re
 producirlas sin que pierdan toda su gracia
 y espontaneidad.
 ♦ Dios quiera que estos tiernos corazones con
 serven siempre tan hermosos sentimientos ».
 Hagamos también nuestro el voto de esta
 celosa educadora. Ruguemos a fin de que
 la infancia crezca siempre inflamada en estos
 nobles ideales que constituyen la más ri
 sueña esperanza de la Religión y de la Patria,
 P edro R icaldo .v e , Pbro.
 
 170
 
 Un apóstol de la juventud obrera.
 Ha muerto Mosséii Jusep; como había
 vivido: santamente, humildemente.
 Quizá como él hubiera deseado mirir: sin
 que nadie se diera cuenta, sin esas mani
 festaciones de homenaje y simpatía que sue
 len acompañar las últimas horas de los en
 fermos ilustres.
 Y ha muerto entre los suyos, entre los
 obreros, entre los niños que le veneraban
 con aquel amor que él supo erigir en lema
 de su fecundo apostolado social.
 Alcoy, la industriosa ciudad que por lar
 gos años fué el teatro de sus grandiosas obras
 y la palestra de sus ejemplares virtudes, le
 llora hoy como sellora la pérdida de un padre
 Pero le lloran de un modo particular los
 Salesiaiios, porque para ellos lo fué todo
 Mossén Jusep; padre, amigo, consejero; ejem
 plo en el trabajo, consuelo en las penas,
 ayuda y protección en todo momento.
 
 Quién fué M ossén Jusep.
 K1 ejemplar sacerdote Don José Chordá
 y Cantó fué el apóstol de Alcoy. lista pa
 labra es la síntesis y a la vez el elogio más
 cumplido de su fecunda labor sacerdotal.
 Su corazón, modelado conforme al Corazón
 de Je.siís, era un foco de intensa caridad
 para todas las miserias y debilidades huma
 nas; no podía ver sin conmoverse profun
 damente. la masa obrera sin instrucción y
 sin ideales: sentía desgarrársele las entrañas
 al contemplar las turbas infantiles vagando
 por las plazas, sin cuidados, sin cariño, sin
 nadie que les hablara de su alma y les hi
 ciera hombres.
 Consciente de su alta misión de sacerdote,
 de pastor de las almas, lo sacrificó todo por
 entregarse en cuerix> y alma al remedio de
 tan triste situación. Derrochó su fortuna,
 sus energías, su vida toda, en aras del su
 blime ideal de regenerar las masas obreras,
 empezando por educar y dar cristiana di
 rección a los niños abíindonados.
 Mossén Jusep era el padre, y padre amantísiino de los niños de Alcoy, y cuanto más
 pobres y necesitados los veía, tanto más
 extremaba con ellos, su solicitud y cariño.
 Su ^•ida sacerdotal la dedicó por completo
 al cuidado de los niños. A este fin fundó
 
 en la ciudad de Alcoy el «Patronato de la
 Juventud Obrera», en donde reunía a los
 niños más abandonados, entreteniéndoles, a
 ejemplo de D. Bosco, en amenos juegos,
 para luego poder infiltrar en sus almas los
 sentimientos cristianos.
 La labor realizada en el Patronato por
 Mossén Jusep, sólo Dios es capaz de apre
 ciarla como de premiarla. A nuestra consi
 deración sólo trasciende por el cariño y ve
 neración que toda la ciudad sentía hacia
 él; por la gratitud que tanto las autoridades
 como el pueblo han mostrado en el solemne
 acto de sus honras fúnebres, de una espon
 taneidad y magnificencia extraordinarias.
 Imposible esbozar, siquiera torpemente, la
 egregia figura del ilustre finado. Unas pin
 celadas al natural, nos presentarán algunas
 facetas de su alma de apóstol.
 En su Patronato tenía establecido un co
 medor para los niños pobres, que con sólo
 diez céntimos, recibían del abnegado sacer
 dote, abundante alimento para el cuerpo
 y sana educación para las almas.
 Y era frecuente el verlo sentado a la ca
 becera de la mesa con un pequeñuelo en
 cada rodilla, dándoles de comer él mismo,
 cual no lo haría mejor la más solícita de
 las madres. Nunca probaba bocado hasta
 que sus hijitos hubieran quedado completa
 mente satisfechos.
 — ¿Quién quiere más? — preguntaba.
 Y siempre se alzaban varias manos, pi
 diendo quién patatas, el otro un poco de
 arroz, el de más allá un pedacito de carne.
 Y el buen pastor, sonreía dulcemente mien
 tras les atendía con solicitud maternal.
 Cuando todos habían comido, nunca an
 tes, le llegaba el turno a Mossén Jusep.
 Pero sucedía con frecuencia que el apetito
 infantil había dado fin a todo lo sólido del
 puchero, y el mortificado sacerdote tem'a que
 contentarse con sólo el caldo, y algún microsópico pedazo de patata o de carne que
 flotaba en él. Y lo comía con gusto, de prisa
 3* corriendo, porque quería volar otra vez
 al lado de sus pequeñuelos, a jugar con
 ellos, a no perderlos nunca de vista.
 ¿No os parece contemplar el retrato de
 D. Bosco?
 
 T
 
 I
 
 ly i
 ¡Y cuánta humildad necesitaba en sus co
 rrerías cuando iba buscando el pan para sus
 hijos!— Permitid que recuerde un sólo caso.
 En una de sus peregrinaciones en busca
 de limosnas, entró en una casa de campo,
 cuyo dueño se distinguía por su odio feroz
 hacia todo lo que supiera a religión. Mossén
 Jusep pidió por amor de Dios una limosna
 para sus niños, y el rabioso clerófobo, desde
 la terraza en que se hallaba tomando el
 fresco, le arrojó encima, con desprecio, una
 esterilla sucia y destrozada. No se inmutó
 ante tamaña insolencia el santo varón, an
 tes bien, con gran tranquilidad y dominio
 de sí mismo exclamó:
 — Muchas gracias; esto para mí; pero
 para mis hijitos, ¿no me da nada?
 A l día siguiente, recibió, sin que se su
 piera su procedencia, una abundante pro
 visión de legumbres.
 
 Alossé/7 Ju sep y los Salesianos.
 Ultimamente Mossén Jusep, se sentía hon
 damente preocupado. Después de haber sa
 crificado sus energías y su vida entera en
 pro de los niños abandonados, el pasar de
 los años le hacía pensar en el porvenir de
 su obra. L a labor inmensa que realizaba,
 ¿estaría destinada a morir con él? Por eso
 su consuelo y tranquilidad fueron inmensos
 al conocer a los Salesianos, dedicados como
 él a la educación y al bienestar de los niños
 pobres, y al leer la Vida de D. Bosco. —
 ¡Esto es lo que me hace falta! — exclamó.
 Y no paró un instante hasta lograr que
 los Salesianos fueran a A lcoy a encargarse
 de la continuación de su obra. E l removió
 todos los obstáculos, allanó todas las difi
 cultades que se oponían a la fundación de
 unas Escuelas Salesianas en su ciudad querida.
 Y cuando vió cumplidos sus anhelos,
 cuando se aseguró de que sus queridos hijitos, tendrían asegurado para cuando él fal
 tara, su por\*enir y su educación religiosa, pudo
 entonar gozoso y satisfecho el Nunc dimiUis.
 Su \ida últimamente, transcurría por en
 tero en la casa salesiana, su casa; y bien
 suya, porque era él quien la había edificado;
 porque en ella vivían sus hijos, los Sale
 sianos que le consideraban y le amaban
 como a verdadero Padre; porque en ella
 tenía su corazón y a que en ella estaban sus
 queridos niños.
 Y Dios no quiso diferir por más tiempo
 eí premio que sus virtudes y abnegación le
 
 Buenos Aires. — P anirón de los Saleftianos en el
 cemenferio del O esfe. debido a la generosidad de
 una insigne cooperadora y que reproduce en minia
 tura el grandioso Templo saiesiano de S . C arlos de
 la misma ciudad. - Fué 1a última obra del malo
 grado arquitecto saiesiano D. Ernesto Vespignani.
 
 habían merecido, y después de proporcio
 narle grandes consuelos, se lo llevó al cielo
 para que desde allí siga a>*udando y con
 más eficacia aún, a sus amados hijos.
 Es una grave pérdida la que la Congre
 gación ha sufrido con la muerte del vir
 tuoso sacerdote; mucho esperaba la obra de
 Alcoy de sus consejos, de su influencia y
 de su celo. Pero Dios ha dispuesto de otra
 manera y hemos de resignaros a los dicta
 dos de su voluntad.
 Ahora, nuestra obligación es mostrarle
 nuestra gratitud y reconocimiento, y para
 ello invitamos a todos los amantes de la
 Obra Salesiana a elevar al cielo una fer
 vorosa plegaria por el ejemplar sacerdote,
 y a rogar a María Auxiliadora que multi
 plique en todas partes numerosos imitado
 res su5’os, corazones abnegados que lleven
 al alma y al corazón de los niños, el gérmen de la virtud y de la piedad.
 
 DE NUESTRAS MISIONES
 La consagración de Mons. Méderleí
 Arzobispo de Madras (India).
 Superiores a toda espectativa han resul
 tado los solemues festejos celebrados con
 motivo de la consagración Episcopal de
 nuestro querido I\Ions. Méderlet.
 Ea afluencia extraordinaria de Prelados,
 el entusiasmo de la muchedumbre y la es
 plendidez del tiempo, han contribuido a
 hacer de este acto un acontecimiento memo
 rable cuyo recuerdo perdurará dulce y con
 solador en los corazones de todos.
 T.e vieja Catedral ha sido remozada para
 esta ocasión, decorando las paredes, embe
 lleciéndola con preciosas pinturas, y ador
 nándola con profusión de banderas, tapices
 y flores naturales.
 Es de advertir que este trabajo ha sido
 realizado todo no por artistas de profesión,
 sino por los católicos de la ciudad, que en
 esta ocasión han hecho un plausible alarde
 de buen gusto y no menos buena voluntad.
 La catedral, en la que se habían pre
 parado varios estrados para las diversas
 categorías de invitados, estaba ya rebo
 sante de público antes de las 6 de la ma
 ñana. Mucha gente tuvo que asistir al espec
 táculo desde fuera, a cuyo fin se dejaron
 abiertas las puertas y se preparó un amplio
 toldo para defenderla de los ardores del sol.
 A las siete, el Prelado salía de su palacio
 para dirigirse a la Catedral, acompañado
 por doce Obispos y más de sesenta sacer
 dotes de la comarca. Era un magnífico
 espectáculo el que ofrecía aquel brillante
 cortejo, que con la magnificencia de las
 vestiduras y la majestad de su porte cauti
 vaban la atención del pueblo, que se agrupaba
 a su paso con devoción y respeto. Se temía
 
 algún entorpecimiento en el desfile a causa
 de la costumbre que tienen los indígenas de
 besar a toda costa los anillos y vestiduras
 de los Obispos, confiando así alcanzar espe
 ciales bendiciones; pero por fortuna los
 fornidos jóvenes que componen la Solida
 ridad Cristiana, se encargaron de hacer la
 guardia de honor a los Prelados, evitando
 así todo inconveniente.
 En la Catedral, a pesar de la enorme mu
 chedumbre, reinó el orden más perfecto y
 las funciones sagradas se desarrollaron en
 medio de un recogimiento ejemplar.
 Empezó la ceremonia. Los solemnes ritos
 son ya conocidos: eii primer lugar se da
 lectura al Breve Apostólico a la que sigue
 el juramento del nuevo Arzobispo; después,
 mientras se canta el Veni Creator, el Obispo
 consagrante, impone las manos al consa
 grando, y le unge con el santo Crisma el
 pulgar de la mano izquierda, el índice de la
 derecha, y las dos palmas. A continuación
 se le ofrece el anillo y el báculo.
 A l Ofertorio, el nuevo Obispo ofrece dos
 cirios encendidos, dos panecillos y dos
 botellitas de \nuo.
 Continúan la misa juntos el Prelado Con
 sagrante y el consagrado, y al terminar,
 tiene lugar la imposición de la mitra, la
 Bendición solemne, y la vuelta triunfal a
 la sacristía, pasando por medio de la muche
 dumbre, al canto del Te Deum.
 A las cinco de la tarde hay en la Catedral
 otra función solemne. Mons. Mathiás, Pre
 fecto Apostólico del Assam, y Superior de
 los Salesianos de la India, sube al pulpito
 y da lectura a un telegrama, de Roma, en
 
 173
 que el Santo Padre felicita al nuevo Obispo,
 y envía su bendición apostólica a todos ,los
 presentes.
 A continuación empieza un brillante dis
 curso, en el que pone de relieve la misión
 educadora de los Hijos de D. Bosco, y pasa
 detalladamente en reseña todas las obras
 que los salesianos tienen confiadas a su
 cuidado en la India. Actualmente, dice, hay
 en la India 125 salesianos: en Shillong, resi-
 
 Bendición con S. D. M., terminada la cual,
 todos se dirigieron a la plaza, y después de
 tomar asiento las autoridades en un magní
 fico estrado, se dió comienzo a una brillante
 velada.
 Las alumnas del Convento de la Presen
 tación entonan un hermoso himno en honor
 de Mons. Mederlet. Sigue a continuación el
 saludo del clero de la archidiócesis de Madrás,
 leído por Mons. Vander Burg, luego el de
 
 M ons. M éderlet visitando a los cristianos de s a Archidiócesis.
 
 deuda del Prefecto Apostólico, hay 60
 jóvenes que se preparan a su misión, estu
 diando con entusiasmo las lenguas, inglés
 y khasi, y procurando adaptarse en cuerpo
 y alma al país en el cual deberán derrochar
 sus energías, su juventud, y su vida entera.
 Termina su discurso pidiendo a María
 Auxiliadora, a la que, según palabras de
 D. Bosco, debemos todo lo que hacemos,
 todo lo que somos, que se digne bendecir al
 nuevo Arzobispo de Madrás, y le conceda
 su ayuda en la difícil misión que desde hoy
 grava sobre sus hombros.
 Después de la brillante peroración de
 Mons. Mathiás, el nuevo Arzobispo dió la
 
 .J..
 
 los seglares de la misma capital. Ambos son
 en inglés; pero después se levanta un Profesor
 Indú para traducir el saludo en tamil. Acto
 seguido se presenta el delegado de los cató
 licos de Tanjore, la parroquia que rigió
 Mons. Mederlet antes de su elevación al
 Episcopado. En nombre de todos los fieles
 de la antigua parroquia, de los cuales se
 hallan presentes al acto más de un centenar
 felicita a su celoso párroco y le agradece
 inmensa labor realizada entre sus paisanos
 por espacio de veinte años.
 L u ^ o tiene lugar el ofrecimiento de los
 regálete. E l clero de Madrás ofrece al Arzo
 bispo el mobiliario de su nueva residencia:
 
 174
 los seglares de la ciudad, una mitra y la
 cruz pectoral con una riquísima cadena; los
 delegados de Tanjore un valioso anillo, un
 báculo y una beca.
 Por último, en medio de una delirante
 ovación se levanta Mons. Mederlet, y en un
 sentido discurso agradece tantas atenciones
 de parte de todos y felicita tanto al clero
 como al pueblo por la fraternal unión de
 que han dado ejemplo.
 Tiene un recuerdo especial para sus an
 tiguos feligreses de Tanjore y termina expli
 cando el mote que ostenta en su escudo,
 ({ue no es otro que el de la Congregación
 Salesiana: Da mihi animas cadera tolle.
 Dame almas; lo demds no me interesa.
 Conserva la imagen de vS. Francisco, no
 sólo por ser el Patrón de los Hijos de D. Bosco,
 sino también porque el santo Obispo de Gi
 nebra es el modelo que se propone imitar,
 por su dulzura, su caridad y su celo. En
 
 cuanto al áncora, la estrella y el corazón sim
 bolizan la Fe, la Esperanza y la Caridad.
 A las 8 tuvo lugar en el Palacio Episcopal
 una comida íntima, a la que participaron
 los Prelados y Sacerdotes, haciendo corona
 a Mons. Mederlet. Con este motivo se repi
 tieron las muestras de afecto y simpatía.
 Mons Mathiás, se levantó el primero para
 felicitar al Arzobispo en nombre de los 8000
 Salesianos esparcidos en todo el mundo.
 Hablaron a continuación otros varios Pre
 lados, reiterando los mismos sentimientos
 y finalmente Mons. Mederlet tuvo palabras
 de gratitud y afecto para todos y especial
 mente recordó a su antecesor Mons. Aden,
 modelo de Prelados y de quien conser\^a
 tan gratas impresiones.
 Así se puso término a la inolvidable fiesta
 de la consagración de este nuevo Obispo
 Salesiano cuya visita a Europa se espera
 en está primavera.
 
 Visita del primer Obispo Japonés
 a nuestra residencia de Miyasaki.
 Myasaki, 6 noviembre 1928.
 Amadísimo Padre,
 Desde hace mucho tiempo deseábamos
 proporcionar a nuestros cristianos la conso
 ladora visita del primer Obispo del Japón.
 Nuestras ansias se vieron colmadas el día
 30 de octxibre pasado.
 Fácil le será imaginarse el entusiasta
 recibimiento que hicieron a su Obispo, al
 Obispo compatriota, que por su virtud y
 su ciencia ha merecido ser elevado a la alta
 dignidad de Prelado de la Iglesia. Es de
 notar que los Japoneses, aunque correctos
 siempre con todos, no pueden disimular la
 íntima alegría que les produce el triunfo de
 sus hombres, de sus cosas propias. Por eso,
 al entusiasmo que sentían como cristianos,
 se añadió el que como buenos japoneses les
 producía la honrosa visita.
 *^ as mismas autoridades no se recataron
 de manifestar su simpatía; y unos en persona,
 otros por carta, todos demostraron su admi
 ración y se sintieron orgullosos del ilustre
 visitante.
 
 En la iglesia tuvieron lugar magníficas y
 devotas funciones con ocasión de la fiesta
 de Todos Santos y la administración del
 Sacramento de la Confirmación.
 Le agasajamos del mejor modo posible
 en una veladita que tuvo lugar en nuestro
 teatro, y de la que quedó altamente satis
 fecho.
 También se celebró un banquete en su
 honor, al que asistieron las principales au
 toridades civiles y escolásticas, y nutrida
 representación de la prensa.
 Pero el acto de más trascendencia fué la
 grau afirmación católica que tuvo lugar en
 el gran salón público de Myasaki. Ante un
 numeroso y selecto auditorio, que le escu
 chaba con atención y respeto, el ilustre
 huésped desarrolló con verdadera maestría
 el sugestivo tema: E l Japón frente al Cato
 licismo.
 Quiera Dios que la ardiente palabra del
 primer Obispo Japonés encuentre eco favo
 rable en el corazón de sus oyentes, y fructi
 fique abundantemente.
 L a Conmemoración de los Fieles Difuntos
 
 175
 reunió en el nuevo cementerio católico a
 Después de las fiestas
 todos los cristianos. Celebrada la misa en
 la solitaria capillita, S. E. dirigió a los pre
 de la coronación.
 sentes unas sentidas frases, invitándoles a
 sufragar las almas de los finados, y les animó
 ( D e n u estra s m isio n e s d e l J a p ó n ).
 en la fe, con la esperanza de nuestra futura
 Miyasaki, 21 Noviembre, 1928.
 resurrección. Con este acto de caridad con
 Amadísimo D. Felipe Rinaldi:
 los Difuntos se puso término al ciclo de
 nuestras fiestas.
 En una de mis cartas anteriores le resumí
 Estos son, amado padre, los puntos sa las fiestas que tuvieron lugar con motivo
 lientes de la cróni
 de la Coronación
 ca; pero breves y
 del nuevo Empera
 todo, encierran en
 dor del Japón. Hoy
 sí grandes prome
 le v o y a dar cuenta
 sas.
 de algunas curiosas
 Despertar de acticeremonias que pu
 \"idades en nuestros
 de observar duran
 cristianos, que em
 te la semana del 10
 piezan a contarse, y
 al 17 del corriente,
 a comprender, que,
 semana en que los
 unidos, pueden re
 Japoneses han v i
 presentar una fuer
 vido su vida de an
 za: la buena semilla
 taño, con las arcáiva esparciéndose y
 cas reminiscencias
 creciendo por me
 de sus viejas tra
 diciones.
 dio de los discursos,
 Nosotros, desde
 los escritos y opús
 culos de ocasión; y
 el lejano Kyusku,
 no hemos podido
 entre tanto se va
 asistir a las solem
 conociendo más y
 nes manifestaciones
 más la Misión, el
 Cristianismo y la
 que revisten un es
 plendor y solem
 obra salesiana de
 nidad extraordina
 Don Bosco.
 ria en Tokio, Kyo¡Ah, si fuésemos
 to y demás grandes
 más numerosos, si
 capitales.
 pudiésemos contar
 Pero con todo,
 con abundantes me
 El primer O isp o Jap o n és M ons. Hayasaka
 entre naesiros misioneros de M iyasaki.
 también en nues
 dios ! ¡ Si pudiése
 tro apartado rincón
 mos inundar esta
 nos hemos sumado a la alegría y entusiasmo
 grande nación de sacerdotes indígenas! Bien
 pronto el reino de Dios tomaría posesión general, y si hemos de juzgar por lo que
 aquí vimos, puedo asegurar que en todo el
 del Imperio.
 L a realización de estos deseos depende, Japón no hubo ciudad, aldea o familia,
 es verdad, de la Pro\4 dencia de Dios; pero que no se sintiese solidaria y como conta
 E l se sirve como instrumento de V . y de giada por la alegría general.
 Con ima precisión admirable, fueron eje
 nuestros queridos bienhechores: de V., para
 el personal; de nuestros bienhechores para cutadas todas las órdenes emanadas.
 A las tres de la tarde del día lO de noviem
 los medios materiales.
 Si V . no \-iene en nuestra a>-uda, la semilla bre, el Emperador proclamaba a la faz del
 se diseca, y no fructifica, el escaso personal mtmdo su subida al trono de sus mayores;
 se debilita, y, a pesar de sus sacrificios, a en el mismo instante los presentes al acto,
 penas puede cumplir con sus más indispen le saludaron con un triple ¡Viva!, grito que
 sincrónicamente, (merced a las minuciosas
 sables deberes.
 medidas tomadas y fielmente ejecutadas).
 D. V icen te C im atti , S. S.
 
 176
 se repitió en todo el Imperio. El pueblo, reu Padre en semejantes circunstancias, esa con
 nido en las plazas, o en las oficinas, talleres,
 ducta que le valía el aprecio de hombres
 escuelas, mercados; o las familias agrupadas eminentes de todos los partidos polínicos.
 ante sus propias casas, unidos todos en los
 Aparte de esto, la comunidad católica tuvo
 mismos' sentimientos de devota reverencia y
 sus funciones especiales. Eos Sres. Obispos
 sincero cariño, prorrum
 pieron en el triple ¡viva!
 Es una alegría, un en
 tusiasmo inenarrable: to
 dos saben que su grito
 va unido al de todos los
 Japoneses, se sienten en
 aquel momento como for
 mando un solo corazón,
 el corazón del Japón,
 que saluda con júbilo el
 advenimiento del nuevo
 Emperador.
 Acreciéntase la alegría
 con el disparo de las sal
 vas, el estridente silbido
 de las sirenas, y otros mil
 confusos, pero agradables
 sonidos, a los que la gri
 tería y entusiasmo de la
 multitud, comunica ese
 no sé qué de sublime
 emoción, que sin ser po
 derosos a otra cosa, nos
 hace vibrar intensamente
 las fibras todas del co
 razón.
 También nosotros, los
 hijos de D. Bosco nos
 unimos a esta alegría ge
 neral de nuestra segunda
 patria. Confundidos entre
 la multitud, elevamos
 también nuestro reve
 rente saludo, y luego, en
 la solemne recepción que
 tuvo lugar en el gran
 salón del palacio de la
 Ciudad, brindamos a la
 salud del Emperador.
 Huelga decir cuán del
 agrado de los Japoneses
 fué esta nuestra sincera
 adhesión a su fiesta. No
 hay duda que este acto
 atrajo grandes simpatías
 a los hijos de T). Bosco,
 que al fin y al cabo‘ no
 T arín (T(alta). — D oranle la ceremonia Intima de la Inauguración del Monomenfo > ^
 hicimos otra cosa que
 himno al P a d re haciendo corona a las {HÍmeras autoridades de la ciudad y a o ae# a
 Turtn. 4) P o d esth '(A lcald el. 5) Je fe fascista, 6 ) C onde Rebaodeogo. 7) Com . M i ^
 imitar la conducta d d
 
 Fidel G irandi. 12) D . P ed ro Tirone. 13) D. Antonio C a ad e k 1
 
 177
 algo imponente: me place recordar entre
 otros actos, la distribución de un valioso
 regalo del Emperador a todos los ancianos
 de ochenta años para arriba, como también
 el banquete a los beneméritos de la Provincia
 (dos mil comensales) y so
 bre todo el vistoso desfile*
 de banderitas y farolillos.
 Las autoridades, los es
 tudiantes con sus Profe
 sores, las Asociaciones y
 representaciones de toda
 la provincia, recorrían
 las calles de la ciudad
 llevando todos sendas
 banderitas de los colo
 res nacionales. Cantando
 himnos patrióticos, se di
 rigieron al palacio del
 Gobernador, y llegados
 allí, lanzaron a los aires
 con todo entusiasmo el
 triple ¡viva!
 Aún más sugestivo y
 pintoresco resultó por la
 noche el desfile de los
 farolillos al cual toma
 mos parte también no
 sotros, con una nutrida
 representación de nues
 tros cristianos.
 Las calles estaban vis
 tosamente engalanadas e
 iluminadas, todas de di
 ferente estilo y riqueza,
 según la capacidad ar
 tística y económica de
 los vecinos.
 Pasaban lentamente los
 adultos, los jóvenes, las
 distintas Asociaciones, y
 entre cantos y músi
 cas desfilaban insignias y
 banderas, y junto a la
 Cruz Roja de la Asocia
 ción homónima, se eleva
 ba la verdadera Cruz de
 Cristo,enarbolada por uno
 de nuestros jóvenes, pre
 cisamente el primero que
 recibió en nuestra Misión
 las agrias del Bautismo.
 Contemplando aquella
 • D. Bosco en d pa8o d d O rafoi'ío. los 700 alam nos inferaos canUo coa enfosiasmo d
 vigorosa y alegre juven
 c * ^ SnpfTÍores: 1) C a rd . G am h a, 2) D. FeKpe Rinaldi. 3) P re fe d o (G obernadot) de
 UKra, 8) CeUíBÍ (escoHor), 9) D . P edro R kaldooe. 10) D . J o s é V espigaaiii, 11) D oa
 tud , decía para m í:
 invitaron a todos sus súbditos al solemne
 Te Deum del día 14, implorando del Señor
 toda suerte de bendiciones y gracias para
 el nuevo Emperador y su egregia Familia.
 En Miyasaki los públicos festejos fueron
 
 da 14) D . Ju a n Fraoccaia (91 afrM ). 1 ') D. C a ló je ro G osm aao.
 
 ¿Cuándo oh Jesús, serán todos vuestros?
 ¿Cuándo llegará el día en que hagan un
 desfile semejante para honraros a Vos, Rey
 de Reyes?
 Han pasado ya las fiestas: su recuerdo
 se perpetuará en alguna obra de utilidad
 pública o privada. L a vida ha vuelto a sus
 ordinarios cauces, y con ella el trabajo del
 Misionero, que, pensando en las consecuen
 cias de este estado de cosas, anhela con ansia
 el día de la Redención para este gran Pueblo.
 Para ello le pido una ferviente oración,
 amado Padre, y que encargite a los buenos
 Cooperadores se unan todos para pedir al
 Divino Redentor que alcance también un
 rayo de su divina gracia a esta generosa y
 grande Nación.
 V. CiMA'm, S. S.
 
 I.OS Sres. Cooperadores salesianos, además
 de las indulgencias ordinarias que se detallan
 en el Reglamento, pueden ganar, cumpliendo
 los requisitos de costumbre, indulgencia plenaría, los siguientes días:
 Mes de Junio.
 8. El Irunaculado Corazón de María.
 24. S. Juan Bautista.
 30. Conmemoración de S. Pablo.'
 Mes de Julio.
 1. Preciosísima Sangre.
 2. Fiesta de la Visitación.
 16. Nuestra Señora del Carmen.
 
 S eis M isos diarias perpéfuas.
 
 ] Cooperadores Salesianos Españoles!
 En Astitdillo {Palencia-España) funciona
 desde hace dos año un Colegio Salesiano de
 Misiones, que cucnia ya con unos yo alumnos,
 aspiranles misioneros y que ha de licuar a
 albergar de 150 a 200.
 Entre todos ¡os Cooperadores y amantes de
 la Obra Salesiana de España, es necesario
 que se propongan dotar a esta Casa del corres
 pondiente número de B E C A S M IS IO X E K A S ,
 respondiendo al llamamiento que a todo el
 mupuio salesiano ha dirigido el Sucesor de
 Don Bosco, Kvdfno. Don Felipe Rinaldi. Es
 paña debe figurar en el LIBR O D E ORO,
 de ««n wumrrtf digna de su historia y de su
 religiosid<hÍ.
 Cada Beca supone 10.000 ptas. y las becas
 que se necesitan so» de 150 a 200. Conviene
 que se retinan durante el año 1929 como ho
 menaje al nuevo Beato Juan Bosco.
 ¡Por Dios y por las almas, manos a la
 obra!
 
 Recordamos a nuestros lectores el privilegio
 extraordinario concedido por el Papa León X III
 (d. f. m.) a nuestro Vble. P. Don Bosco en favor
 de todos los que contribuyeron con sus limosnas
 a levantar la Basílica del Sagrado Corazón de
 Jesús en Roma o cooperen en lo porvenir al
 sostenimiento de aquella Iglesia e internado
 de Artes y Oficios para niños pobres.
 Basta entregar una sola vez la limosna de
 I peseta (20 centavos de dólar más o menos)
 para tener derecho, en vida y después de muerte'
 a la aplicación diaria de 6 mtio.?, que se celebran
 en el altar mayor de dicha Basílica; como tam
 bién, de todas las prácticas de piedad que en
 ella se practican. Pueden también ser inscritas,
 entregando por cada una de ellas la misma li
 mosna, las personas ausentes o fallecidas, las
 cuales gozan igualmente de dicha aplicación.
 Para gozar de esta gracia tan extraordinaria
 basta remiir en una lista los nombres de los
 que desean inscribirse y enviarla, jimto con la
 limosna correspondiente, al Rector Mayor de
 los Salesianos - Via Cottolexigo 3-2 - Turín (109)
 Italia - y apenas inscritos en los registros, em
 piezan a gozar de la aplicación de dichas 6
 misas. Como testimonio de la inscripción cada
 uno de los inscritos recibe ima cédula con su
 nombre y con la explicación detallada de este
 pri\nlegio.
 I.os que ya conocéis este privilegio dadlo a
 conocer a todos vuestros anügos y conocidos
 y veréis como no queda ni uno que no se ins
 criba y que no haga inscribir a sus difuntos.
 
 EL CULTO DE MARIA AUXILIADORA
 Solemne coronación de María Auxiliadora
 y Congreso Mariano en la Colonia Vignaud (Arg.).
 La voz del Rector Mayor de la Congregación
 Salesiana que había designado el año 1928 para
 honrar de un modo especial a María Auxilia
 dora, halló eco entusiasta en Vignaud, la Casa
 de formación de la Inspectoría « S. Francisco
 Solano », donde se celebró con consolador re
 sultado un grandioso Congreso durante los
 días II , i 2 y i 3 d e octubre, siendo el broche de
 oro la coronación de la imagen de María Auxi
 liadora venerada en la Basílica del Sdo. Co
 razón de Jesús.
 El Congreso. — Sus organizadores fueron el
 Rvdmo. P. Luis Vaula, actual maestro de No
 vicios, y el Rvdo. P. Tomás Geiat, director del
 Colegio. La preparación, en que con tanto en
 tusiasmo trabajaron las distintas comisiones,
 duró varios meses, logrando participaran al
 grandioso acto que se jireparaba, divereas
 parroquias circunvecinas.
 Presidió el Congreso el Rvdmo. e Illmo. Sr.
 Dr. Fermín Lafitte. En\*iaron tel^;ramas de
 adhesión muchos señores Obispos e ilustres
 personajes de la nación, entre los cuales merece
 consignarse en primera línea el nombre del Vice
 Presidente de la República, Dr. Enrique Mar
 tínez.
 En la primera sesión, después del himno del
 Congreso compuesto por el P. Pedrolini, se
 leyeron las a<¿iesiones. tributándose im calu
 roso aplauso al Sto. Padre, quien al mismo
 tiempo que en\-iaba su bendición al Congreso,
 concedía Indulgencia Plenaria a todc« los Con
 gresistas. Ocupó la tribima el P. Massa, quien
 en un brillante discurso desarrolló con admirable
 maestría el tema: * Reinado social de Jesu
 cristo por medio de María ».
 Uno de los actos más bellos y memorables del
 Congreso fue la Hora Santa seguida de Misa
 
 solemne y Comimión general que tuvo lugar a
 media noche entre el i i y el 12. En el corazón
 de la noche veíanse Il^ar los autoinóxiles, que
 se alineaban alrededor del templo, ricamente
 ilmninado; su alta torre, perdiéndose entre las
 tinieblas de la noche sin luna, parecía una en
 cantada escalinata que unía al cielo con la
 tierra; las suaves melodías de la música se
 unieron a la íntima alegría de las conciencias
 tranquilas, jiara dejar un recuerdo imborrable
 en los dos mil comulgantes, cuyos corazone.s
 gozaron por breves minutos las glorias del
 Tabor. Ultimo acto de tan simpática ceremonia
 fué la conmovedora jirocesión, seguida de la
 Bendición con S. D. M.
 Por la mañana del día 12 se celebró la se
 gunda sesión, a la que participaron unos 500
 congresistas. El tema de la discusión Juventud
 y Acción », fué explayado con palabras llenas
 de unción y entusiasmo por el Sr. Marciano de
 la Sema, venido de la ciudad de Córdoba.
 Por la tarde, tercera sesión del Congrí so.
 Orador el Rvdo. P. C. Borello, cura párroco de
 S. Francisco, que disertó raagistralmente sobre
 la Sda. Eucaristía.
 Por la noche se puso en escena el drama ale
 górico ♦ Culpa y Perdón *, que interpretado
 con toda propiedad, cautivó la admiración del
 ntuneroso público, cosechando los actores me
 recidos aplausos.
 La mañana del 13 fué dedicada p>or completo
 a conferir el Sacramento de la Confirmación a
 más de nn millar de p>er9onas. Por la tarde se
 celebró la última sesión del Congreso, de ca
 rácter eminentemente práctico, ya que se reunienm todas las propuestas anteriores, para
 estudiar su realizad ^ y asegurar su éxito.
 Clausuró en Cemgreso la cálida palabra de
 Mons. Lafitte.
 
 i8o
 La Coronación - 14 de Octubre. — En la vida
 íntima de cada pueblo, hay días que quedan
 grabados con caracteres indelebles por repre
 sentar una de las más puras glorias de sus hijos.
 Tambi(^u llegó para Vignaud ese día, sobre el
 cual jamás echará su negro manto el fantasma
 del olvido. Eué una verdadera apoteosis que
 redundó en la mayor gloria de Dios, en honra
 de María Auxiliadora y en frutos de bendición
 para los hombres.
 Digno de admiración fué el espectáculo que
 ofrecía aquel pueblo, colonia de pocas casas;
 sus caminos, generalmente desiertos, se habían
 transformado como por encanto, en calles con
 curridas de populosa ciudad; y a lo largo de las
 mismas, en perfecta simetría, se hallaban ali
 neados más de 500 automóviles, que habían
 traído al Congreso una ingente multitud que
 no bajaría de 5000 personas.
 I,as cinco naves de la amplia basílica, estaban
 completamente abarrotadas de fieles cuando
 se dió principio a la Misa Solemne con Asisten
 cia pontifical, y una numerosa representación
 del clero infantil, de más de 120 niños.
 Alrededor de la imagen de María Auxiliadora,
 y fonnándole guardia de honor, se hallaban
 los pajecitos de la Virgen, vestidos de már
 tires, los niños, y las niñas de ángeles. Los E x
 ploradores de D. Bosco hacían vistosa y nutrida
 escolta.
 Después de la Misa, el Augusto Prelado se
 dirigió procesionalmente al palco donde se
 hallaba la sagrada imagen, y tomando en sus
 manos la corona de oro, la colocó, en medio del
 más fervoroso entusiasmo, y las lágrimas de
 no pocos fieles, en la augusta cabeza de María
 Auxiliadora.
 Al mismo tiempo se esparcieron por el templo
 las melodiosas notas dcl órgano, se echaron a
 vuelo las campanas, la banda lanzó al aire sus
 inspiradas melodías, y la multitud, presa de
 entusiasmo delirante, prorumpió en estruen
 dosos vivas y aplausos. Fué un momento sen
 cillamente sublime; parecía que la Madre de
 Dios, había descendido en persona en medio
 de la multitud, consolando con su divina son
 risa los corazones de todos.
 Clausuró tan memorable acto la solemne pro
 cesión, en que flamearon en tomo de la \'irgen,
 las banderas de todas las naciones a donde los
 Salesianos haji llevado su culto y su devoción.
 Han terminado los días del Congreso; pasó
 también el glorioso día de la Coronación; pero
 quedarán grabados eternamente en los fastos
 de la población, porque tautos homenajes de
 sincero amor y veneración hacia María Auxilia
 dora, se transformarán en abundante lluvia
 de gracias que desde su nxievo y excelso trono
 nos derramará la Virgen de D. Bosco.
 
 GRACIAS
 DE MARÍA AUXILIADORA
 
 BARCELONA (EsPAñA). — Estando mi
 madre muy delicada de salud, tuve la desgra
 cia de darle un fuerte disgusto, exponiendo de
 esta manera muy seriamente su vida.
 En trance tan apurado, me acordé de María
 Auxiliadora, Madre de pecadores, de la cual he
 recibido muchos favores, pero casi no me atre
 vía a pedirle su ayuda, a causa de mi ingratitud
 para con ella; pues ya en otra ocasión, habién
 dole hecho una promesa, una vez conseguida
 la gracia, dejé de cumplirla. Le pedí perdón
 de mis muchas culpas y de mi ingratitud, com
 prometiéndome a ofrecer la limosna que tenía
 prometida para las obras del Tibidabo, purificar
 mi conciencia y publicar la gracia. Puse por
 intercesores delante de Dios a D. Bosco, y Do
 mingo Savio, suplicándoles que por sus muchas
 virtudes me obtuvieran tan señalado beneficio.
 Obtenido el favor cumplo lo* ofrecido y
 exhorto a todos a acudir en sus necesidades a
 María Auxiliadora, Madre de misericordia.
 12 abril 1929.
 E. C.
 VALENCIA (EsPAñA). — Hallándome gra
 vemente enfenna de tifoidea y estando mi fa
 milia sumida en el mayor desconsuelo, les vino
 la feliz idea de hacer una novena a nuestra
 celestial Madre María Auxiliadora prometiendo
 al mismo tiempo una pequeña limosna para el
 culto de tan buena Madre y publicar la gracia
 si me obtenía la deseada salud.
 Desde aquel mismo día disminuyó el mal y
 hoy me encuentro completamente restable
 cida, por lo que no cesamos de ensalzar a María
 Auxilio de los Cristianos.
 I febrero 1929.
 Concha Soler.
 RAWSON (Re p . ARGENTiNA-Chubut).— En
 el mes de agosto* del año pasado, hallándome
 enferma de bastante gravedad y teniendo por
 prescripción médica que realizar im viaje a la
 capital federal y deber así abandonar a mis tres
 hijitos, pues temía no volverlos a ver más, in
 voqué a nuestra celestial Madre « Auxilio de
 los Cristianos *, prometiendo que, si regresaba
 curada al lado de mis queridos hijos, ofrecería
 \ma limosna para los hueríanitos del Beato
 D. Bosco. La Sma. Virgen escuchó bondadosa
 mente mis ruegos, y hoy cumplo con lo prome
 tido, deseando se publique mi gratitud para
 mayor ^oria de la Virgen de Don Bosco y para
 
 lÉa
 
 i8i
 que todos acudan con entera confianza a su
 maternal protección, seguros que serán aten
 didas sus necesidades.
 Febrero 24 de 1929.
 María H. de Castro.
 OLOl A (España ). — En la mañana del 18
 de octubre del año pasado, me disixjnía a una
 excursión de caza con varios otros amigos, y
 hallándome sentado, con la escopeta sobre las
 rodillas, se me deslizó el anua, que al dispararse
 me hirió en diversas partes del cuerpo. Pero
 casi en el mismo instante apareció el médico
 — que ordinariamente habita a más de hora y
 media de distancia — y pudo atenderme con
 urgencia, evitando así fatales complicaciones.
 Si hoy me encuentro ya completamente curado,
 lo debo, sin duda alguna, a María Auxiliadora,
 a la que invoqué con toda fé y confianza.
 5-x n -i928.
 Pedro Massana Noguás.
 SANTA ANA (Rep. de Er. S alvador .— Sufrí
 casi 30 años una terrible asma, que me atacó
 desde niña; diez y ocho médicos me asistierom
 con varias y múltiples medicinás; pero todos
 declaraban icnurable la enfermedad.
 Desesperada, imploré ei 5 de septiembre de
 1922, una oración del bondadoso Padre Felipe
 Rinaldi, dignísimo tercer sucesor del Beato
 Don Bosco, a fin de conseguir por mediación
 de María Sma. Auxiliadora, el alivio de tantos
 sufrimientos.
 Aquí se demostró patente la bondad de María,
 porque, después de haber sufrido varios ataques,
 empecé a experimentar una sensible y conso
 ladora mejoría, que se acentuó poco a poco,
 hasta hallarme hoy complétamete sana, no
 obstante el largo tiempio transcurrido.
 Como lo habí.a prometido, me dispongo hoy
 hacer pública la maternal bondad de la Virgen
 de Don Bosco, en cuyo honor me propuse
 mandar celebrar cada ano en el mes de Mayo,
 una Mija y ayudar las Obras y Misiones Salesianas.
 1® de Abril 1929.
 Rosaura Pinto.
 
 Dan fambiétt gracias a María Auxilia
 dora y envían una limosna:
 B uenos A ires {Argentina). — José di Pasqua,
 por varios favores recibidos.
 Carmen {Argentina). — Eusebia Freytes, por
 por haber encontrado trabajo, y Adolfo Botachine por haberse librado de una grave enfermedad-
 
 Cali {Colombia) . .— Claudio Filigrana, Mer
 cedes Aragón de Penis, Filomena Isquierdo de
 Ospina, Rosa Jiménez, Juana Aragón de Aragón,
 Emperatriz Caicedo y Julia Chamorro, por fa
 vores recibidos.
 Cart.ago {Costa Rica). — Francisca G., vda.
 de Domizi, agradece la protección de María
 Auxiliadora y envía una limosna.
 H uesca {España). — Jacinta Florences, por
 haber obtenido la curación de una amiga suya
 desliauciada por los médicas. Eugenia Lander,
 por haber alcanzado la salud.
 
 La primera imagen de ta V irgen venerada
 por D. B osco en la capilla Pinardí; repre
 senta la C o n so la ía , patruna de Torín.
 
 J amundi {Colombia). — Manuel S. Bonill.i,
 Rafaela M ., de Bonilla, Cristina de Llanos y
 Arsenia R. de Medina, por señalados favores
 recibidos.
 JUNIN {Ectíodor, Manabi). — Yolanda de Fer
 nández, por una gracia en favor de su esposo.
 Mendoza {Argeniina). — B. T. A., por un
 favor recibido.
 BETijo<nuE {Venezuela). — Griselda de Darán
 y Saivadora Duran, por varios favores recibidos.
 V alencla {España). — Doña María Gregaria
 de Salcedo envía 100 pesetas en acción de gra
 das por un favor alcanzado por intercesión de
 D, Bosco.
 Los Angeles {California). — Rafaela Escobtdo, por im favor señalado, hallándose en una
 grave necesidad.
 Medellin {Jl-olombia). — María L. Rivera,
 por una grada redbida.
 
 T
 
 Por el mundo
 Salesiano
 TURÍN (Italia).
 Ecos de la Casa Madre.
 Inauguración del Monumento a Don Bosco en
 el patio del Oratorio.
 
 Con este {grandioso neto el día 24 de abril
 se dió j)rinci])io a los solemnes festejos con
 que en Roma y en Turín se celebrará la Bea
 tificación de nuestro Padre.
 Ivl monumento es obra del insigne es
 cultor Cellini, autor del ya conocido que se
 alza frente a la Basílica de María Auxiliadora.
 La estátua, fundida en bronce, es de tamaño
 algo mayor que el natural, y se yergue sobre
 artístico y severo pedestal de mármol. El
 l'imdador de la Obra Salesiana no tiene nece
 sidad de inscripciones... para ser identificado.
 A las 4 y media el Card. Gamba, y el Prefecto
 Maggioui, acom])añados por todos los Superiores
 Mayores, el Podestá o Alcalde de Turín, el Se
 cretario Pcderal, pl Conde de Rebairdengo, el
 Comendador Masera y otras distinguidas perso
 nalidades, pasaron al teatro, recibidos a los
 acordes de la Marcha Real. La Schola Cantonim del Instituto Internacional de la Crocetta, dirigida por el Maestro Don Grosso,
 ejecutó con la maestría que la caracteriza, un
 madrigal de Palestrina qiie fue muy aplaudido.
 Se adelanta luego lui niño del Colegio, quien
 con gracia y desenvoltura tía la bienvenida y
 las más sinceras gracias a las }>ersouajes invi
 tados, para quienes invoca las bendiciones
 del Siervo de IMas. A continuación el Coro de
 la Crocetta ejecuta el canto de los Soldados
 de Paust, que cosecha merecidos aplausi>s.
 Invitmlo el Cardenal a dirigir dos palabras
 a la coucurreucia, lo hace con su fervor caracte
 rístico; y aludiendo a una de las visitas que
 hizo a 1). Basco, recuerda cómo lo vió varias
 veces en el mismo lugar en que ahora se levanta
 el monumento, ro<leado de niños, y miima a estos
 a acastumbrarse a tenerle siempre presente
 cu sus juegos y en su vida entera, seguros de
 que bajo su paternal asistencia se conservarán
 sieiu])re dignos hijos suyos. El discurso de
 S. Kmma. os vivamente aplaudido.
 lluego ¡Kísaron todos a visitar los lugares
 smdificados por la presencia de D. Bosco en
 los que \mas placas de mármol recuerdan los
 sucesos nuls salientes de su vida: el lugar en
 donde so levantaba la easa IHnardi, el huerto
 de Mivmá Margarita, devastado por las entu
 
 siasmadas huestes del « Bersagliere », el rincón
 donde ref>osaba el «G ris» cuando volvía de
 acompañar a D. Bosco en mía de las noclies
 peligrosas.
 La visita terminó delante del monumento,
 a cuyo alrededor se encontraban ya los milla
 res de jovencitos que se educan en las Casas
 Salesianas de Turín. A la llegada de las auto
 ridades, se desprende el velo que ocultaba la
 estátua, y mientras la Banda acompaña el
 nuevo himno a D. Bosco, cantado por más de
 700 niños, la multitud prorrumpe en estruen
 dosos aplausos y entusiastas aclamaciones.
 Los fotógrafos aprovechan la ocasión para
 sacar sus fotogafías, y asedian especialmente
 al venerando D. Francesia, que sonriendo
 paternalmente, deja hacer.
 A continuación las Autoridades pasan a
 visitar el cuartito de D. Bosco que encierra tan
 conmovedores recuerdos, dando luego im rájjido vistazo a las talleras en febril actividad,
 y después de tomar mi refresco, el Prefecto,
 dirigiendo la palabra a los jóvenes reimidos
 en el patio hace vibrar, con un entusiasta
 discurso, todos los corazones en sentimientos
 de fe y de amor patrio. Al despedirse las auto
 ridades, fueron calurosamente ovacionadas por
 la concurrencia, mientras la Banda interpre
 taba alegres marchas.
 —
 
 Peregrinos franceses.
 
 Con motivo de la reciente peregrinación de
 la J uventud Católica Francesa a Roma, la Casa
 Madre hospedó los días 28 de Marzo y i° de
 abril por breves horas varios centenares de
 jieregrinos, que no quisieron pasar por Turñi,
 sin rendir ferviente homenaje de admiración
 y cariño al gran educador de la Juventud.
 Fueron recibidos por el Capítulo Superior
 de la Congregación y por todos los Superiores
 y alumnos de la Casa, que rexmidos en los vastos
 patios, Ies saludaron con una cariñosa ovación,
 mientras la banda interpretaba los himnos na
 cionales italiano y francés.
 Después de la comida, ser\ñda en los
 comedores de la Casa y demás dependencias
 habilitadas para el caso, pasaron los peregrinos
 a la Basílica de María Auxiliadora, donde
 oraron fervorosamente ante la tamnaturga
 imagen, cantando a continuación algunas can
 ciones eucaristicas.
 A ccaitinuación, uno de los jóvenes, en nom-
 
 1
 
 i 83
 
 bre de todos los peregrinos, dió las gracias más
 sinceras por el afectuoso recibimento y hospi
 talidad de que fueron objeto prometiendo llevar
 siempre en sus corazones, el recuerdo de la
 hospitalidad salesiana.
 
 a la histórica casa Pinardi. Al erigir la capillita
 primitiva, D. Bosco colocó en un nicho abierto
 en el muro, una estatuíta de la Virgen de la
 Consolación, patrona de Turín. Cuando seis
 años después se inauguró la Iglesia de San Pran-
 
 i
 
 La V irgen de la capilla Pinardi con los pajecilos qne tríaofalm ente la volvieron a su primUivo lugar.
 
 — La primera imagea de la Virgeo a que Don
 Bosco dió culto regresa al Oratorio.
 
 Otra simpática fiiesta tuvo lugar en la Casa
 Madre el día 12 de abril, aniversario de la
 traslación del primer Oratorio de Don Bosco
 
 cisco de Sales, la primitiva capilla fué empleada
 para otros servidos, y la estatuíta fué a parar
 a pioder de D. Giaccomelli, condisdpulo y con
 fesor de D. Bosco. A la muerte de D. Giacco
 melli, su familia conser\'ó la predosa reliquia
 
 184
 con suma veneración, como recuerdo de Don
 Bosco. A pesar de las numerosas tentativas
 hechas por los Salesianos para recuperar el pre
 cioso tesoro, han transcurrido 72 años sin que
 vieran cumplidos sus deseos. Finalmente, gra
 cias a la actividad del Ecónomo General D. Fidel
 Giraudi, la familia de D. Giacomelli, ha cedido
 la estatufta a los hijos de D. Bosco.
 El recibimiento tributadó a esa imagen, ante
 la cual oró D. Bosco en los tiempos más aza
 rosos de su vida, fué cariuo.so y triunfal. Todos
 los Sui)eriores Mayores, con los alunmos del
 Oratorio la esperaban a la puerta, y cuando
 entró, llevada por cuatro pajecitos, vistosa
 mente ataviados, la banda interpretó el Himno
 I’ontificio, en medio de entusiastas aclamacio
 nes. Un niño del Oratorio le dirigió un conmo
 vedor saludo, y a continuación el ancianito
 D. í ’rancesia, cuya mente aún conserva todo
 su vigor juvenil, leyó una inspiradísima y evo
 cadora poesía, llena de dulcísimos recuerdos.
 A continuación habló el Rector Mayor, re
 cordando el tiemísimo amor de D. Bosco hacia
 la Virgen, amor que infiltraba en cuantos le
 rodeaban, y que iba evolucionando a medida
 que progresaban sus maravillosas obras. Al
 jjrhicipio, fué bajo la advocación de María In
 maculada, cuando empezaba su obra en la sa
 cristía de S. Francisco de Asís; luego, en la
 Capilla Pinardi, la Virgen de la Consolación:
 imVs tarde, la del Rosario, para fijarse defini
 tivamente en el ya universal título de María
 Auxiliadora.
 — Nuevo Obispo Salesiano.
 
 Ha sido nombrado ObisiK> titular de Filnmelio y Au.xiliar del Cardenal Sbarretti, en la
 sede suburbicaria de Sabina, el Director del
 Colegio Salesiano de Borgo San Martillo,
 D. P'cderico Kmanuel. Nació el nuevo Übisjxj
 en Bussolino; estudió en Turín. doctorándose
 en Tetras y es un prestigioso educador de la
 juventud. Digno hijo de D. Bosco por su acti
 vidad, celo y pi('dad. sabrá llevar a su nueva
 dignidad el más vivo y fecundo espíritu de
 tti>óstol y celoso pastor.
 El Boleiin Salfñano tiene la honra de en
 viarle des*.le sus columnas el más afectuoso
 saludo y las felicitaciones más cordiales.
 PALESTIN.4.
 El templo del perdón cristiano.
 W o.TW oo/e efe tos S a h s ítito s <h Tierra Sania a S a
 S a olid a d P fo X í, coa motivo d e s e fubi/eo sa~
 cerxhfaí.
 
 También los Salesianos de Tierra Santa han
 ideado im modo práctico de manifestar al
 Santo Padre sus sentimientos de inquebran
 table adhesión y filial gratitud, con una hermos;i iniciativa, de cuya importancia juzgarán
 
 nuestros lectores por los documentos que publi
 camos y que no dudamos será a todos suma
 mente simpática y que cuantos puedan se
 harán un deber de ayudar a su realización
 con sus generosas limosnas.
 Ta idea fué expuesta al Santo Padre por
 nuestro mismo Superior General, en la siguiente
 forma:
 Beatísimo Padre:
 También los salesianos de Tierra Santa parti
 cipan intensamente a la alegría con que todo
 el mundo católico saluda el fausto acontecimeinto
 del cincuentenario de Vuestra ordenación sacer
 dotal y en todas las Casas se hacen especiales
 oraciones.
 En Beitgemal, además, precisamente encima
 del primitivo sepulcro de San Esteban Frotomártir, donde ya desde 1923 con la soberana
 aprobación de Vuestra Santidad surgió la Pía
 Obra del Perdón Cristiano, que se va difundiendo
 providencialmente en muchas Naciones, ha sido
 ya abierta al culto una Cripta y ahora se está
 reconstruyendo el antiguo Martyrium, según
 proyecto y bajo la dirección del arquitecto benedicdiciino P. Mauricio Gisler.
 Este Mart>TÍum, que formará el ábside del
 nuevo Templo del Perdón Cristiano, será, D. m.
 solemnemente inaugurado el 19 del próximo
 diciembre y una oportuna inscripción en el
 arca 'triunfal recordará perennemente la fausa
 fecha que celebramos, de tan gratos recuerdos
 Para Vuestra Santidad y que tanta alegría
 causa al Orbe Católico por los faustísimos acon
 tecimientos que para esta sazón ha dispuesto la
 Divina Providencia.
 Y como hoy en la Cripta, también en el recon
 struido Martyrium y luego en el grandioso
 Templo, se harán perpétuamente diarias ora
 ciones para que el ideal evangélico del perdón
 cristiano se extienda siempre más por todo el
 mundo, enlazando todos los corazones en la paz
 del Reino de Cristo.
 Postrado al beso del Sagrado Pie,
 de Vuestra Santidad
 humildismo hijo in C. J.
 F elipe R ixaldi, Pbro.
 Y su Santidad se dignaba responder por
 medio del Emmo. Cardenal SeCTetario de
 Estado con la siguiente carta que agradecidos
 publicamos:
 Rvdrao. Sr:
 El tributo filial que los Salesianos de Tierra
 Santa desean afectuosamente ofrecer al Santo
 Padre con ocasión de sus Bodas de Oro Sacer
 dotales es para su Santidad tanto más grato, en
 cuanto se desarrolla en el silencio de la Oración
 y en la feliz actuación de una inicitaiva tan
 hermosa cual es la del nuevo Templo de la Obra
 del Perdón Cristiano.
 
 i 85
 
 A l dar las gracias a V. S. Rvma. y por medio
 suyo a sus buenos hijos lejanos. Su Santidad
 aprovecha esiajeliz ocasión para manifestar una
 vez más su complacencia por la incesante acti
 vidad cristiana y educativa que despliegan los
 Hijos de Don Bosco y a la par que hace votos
 para que sus Obras de Palestina, como todas las
 demás, prosperen y den abundantes frutos corres
 pondientes a los incesantes trabajos, imparte
 de corazón a V. S. Rvma., a los Salesianos de
 Tierra Santa y a todos los miembros de la Congre
 gación, la consoladora bendición Apostólica.
 Con sentimientos de la más distinguida y
 devota estimación me es sumamente grato pro
 fesarme
 de V. S. Rvma. affmo. in C. J.
 Pedro Card. Gasparri.
 
 Dice así el citado periódico:
 « De vez en vez presenciamos heclios que no
 son meras coincidencias, sino demostración
 evidente de que el premio de las buenas acciones
 no se hace esperar en muclios casos.
 Fué en el día de ayer cuando un pobre niño,
 huérfano y necesitado, llamó a las puertas de
 una casa de Cádiz, casa que tiene sus puertas
 siempre abiertas para hacer el bien y ejercer
 la caridad: nos referimos al Colegio Salesiano.
 Apurada es la situación económica de esta
 casa; grandes sus necesidades, muy grandes sus
 atrasos: pero mayores aún son los sentimientos
 de caridad cristiana que albergan en sus pechos
 los hijos de Don Bosco. Por eso, a p>esar de no
 tener beca disponible, a pesar de no tener posi
 bilidad de admitir al huérfano, el P. Superior,
 
 Beitgemal (PalesBna) — Proyecto del Templo del Perdón Críaliano. que >e está levantando
 sobre el primitivo sepulcro de S a n Esteban.
 
 Como ven nuestros lectores la idea no puede
 ser más simpática. Todo el mundo salesiano ha
 de contribuir a que esta iniciativa sea rma
 consoladora realidad.
 CÁDIZ (Españs). —
 
 Cooperación eficaz.
 
 Tenemos el gusto de ofrecer a nuestros lecto
 res estas líneas que el Diario de Cádiz « Infor
 mación » dedica a nuestro Colegio de aquella
 ciudad. Pero para mayor inteligencia recorda
 remos antes la benemérita labor de nuestro
 querido amigo y Cooperador D. José M. Pemán,
 quien en im pleno de la Asamblea Nacional,
 defendió con valentía la necesidad de soajrrer
 la en<f>ñanza privada, llevada a cabo por los
 establecimientos religiosos gratuitos, y citaba
 como ejemplo la obra salesiana de Cádiz, que
 a pesar de no recibir ninguna subvención
 oficial, alberga en sus muros, proveyéndoles
 de pan y de cristiana educación, a varios cen
 tenares de niños pobres.
 
 con esa sublime y santa irreflexión que en nada
 mira cuando de hacer el bien se trata, con esa
 admirable confianza en la Providencia que ca
 racteriza a los buenos, abrió magnánimo las
 puertas de su casa al huerfamto, y éste encontró
 im hogar, unos maestros y la esperanza de un
 f)or\'enir tranquilo y seguro.
 Pero Dios no ha querido que el pobrecito niño
 grave más la carga no pequeña que pesa sobre
 la ea.«ta salesiana. La beca de ese niño ha sido
 ya pagada, y en el día de ayer precisamente, casi
 a la vez que el niño era admitido en el Colegio.
 El ministro de Instrucción Pública escribió
 ayer al jefe de la U. P. D. José Ma. Pemán y en
 lino de los párrafos de su carta le dice lo si
 guiente: « I.e incluyo el traslado de la R. O. por
 la que se concede la subvención a las Escuelas
 Salesianas de la Barriada de San José de esa
 población y Vd. perdonará que no haya soste
 nido mi oferta de las diez núl pesetas que Vd.
 me pidió... porque me ha parecido mejor con
 
 iS6
 ceder doce mil, atendiendo a lo mucho que Vd.
 se interesaba en el asunto y a ([ue fué el origen
 de su hermoso discurso en la Asamblea que dió
 tan fecundo resultado *.
 I*'eIicitíimos al niño, a los Salesiauos y a
 D. José
 Pemán y tenninamos, mas no sin
 añadir, que dió la casualidad, o mejor dicho,
 que Dios quiso, que la misma persona que llevó
 al huerfanito a las puertas del Colegio y solicitó
 que fuese acogido, fué la que poco después era
 portadora de la R. O. en que se concedía acre
 cida la subvención deseada.
 Y hacemos punto final, porque esto no nece
 sita comentarios. Ciego ha de estar quien no vea,
 cada día muchas veces, la mano de la Provi
 dencia, igual en los sucesos adversos que en los
 prósperos.
 LAS PALMAS (España). — Excursión escolar.
 
 Iinjierecederos recuerdos dejará en todos los
 alunmo.s del Colegio Salesiano de Las Palmas,
 la lienno.sa excursión realizada el 17 del pasado
 marzo. A iirimeras horas de la mauaiia, en her
 mosos y cómodos autobu-ses, precedidos por el
 de la Banda, iniciaron la gira, dirigiéndose al
 pueblo de Cardona.
 líl jnieblo en masa los esperaba a la entrada
 de la ]>oblación, recibiéndoles con un entu
 siasmo inde.scriptible, entre alegre repique de
 campanas y disparo de cohetes, mientras no
 cesaban las aclamaciones y los vivas. Por su
 parte nuestros músicos correspondieron al en
 tusiasmo popular, obsequiándolos con las
 piezas más selectas de su repertorio.
 líl Sr. Cura Párroco, D José Denís, les dió
 la bienvenida en una hermosa alocución, invi
 tándoles después al templo, que, vistosamente
 engalanado resonó bien pronto con las pre
 ciosas melodías de nuestros cantores al inter
 pretar una Misa Solemne. Líl sermón estuvo a
 cargo del Cura Párroco, quien aprovechó la
 ocasión para enaltecer la excelsa figura del
 santo fundador de lixs Salesiauos, y la obra que
 sus hijas llevm a calx>.
 .•Veabada la función religiasa, los niñas se
 desparramaron ix>r las cercanías, para gozar
 del deliciaso panorama que j)or Unías partes
 se ofrece a las ojas atónitas de los visitantes,
 A ta lo esto el celaso Párrix'o, no se descuidalni y les había ¡ireinirado un panorama no
 menos agrailable en una huerta cercana, a donde
 acudieron talas a las iz, a dar cuenta de un
 suculento banquete, al ipie nuestras niños hi
 cieron los honores en medio del mayor entu
 siasmo y desbordiuite alegría.
 Tenuinada la comida nuestras músicos, antes
 de desiKHlirse y en agradecimiento a la cariñosa
 acogida del pueblo, pusieron todo su afecto y
 jx-ricia en las escogidas piezas con que les de
 leitaron.
 Poco después tomaban de nuevo asiento en
 
 los autobuses para proseguir el paseo, llegando
 a la pintoresca ciudad de Arucas, en donde
 tuvieron ocasión de admirar la magnífica igle
 sia — mejor diría Catedral — de que justa
 mente se enorgullece aquel pueblo, y saludaron
 a la Virgen con el canto de la Salve, pidiéndole
 su protección para el resto del viaje.
 Puestos otra vez en marcha, pronto llegaron
 a la pintoresca villa de Teror, en donde tiene
 su sede y egregio trono la milagrosa Virgen del
 Pino, Patrona de Canarias.
 A la llegada, les esperaba la población entera,
 con el Sr. Párroco D. Antonio Socorro, quienes
 Ies dispensaron una acogida entusiasta y fra
 ternal, dirigiéndose de.spués todos jimtos al
 Santuario, en donde se dió la Bendición con
 S. D. M., terminada la cual, quisieron pasar
 todos por el Camarín, para ver de cerca y sa
 ludar una vez más a la Reina de la Isla, Ntra.
 Sra. del Pino.
 A la salida, les esperaba una grata sorpresa:
 el buen cura párroco, en im rasgo de exquisita
 delicadeza, quiso obsequiar a sus visitantes
 con una espléndida merienda. Y luego, entre
 el entusiasmo de la población, emprendieron
 de nuevo la marclia hacia el colegio, a donde
 llegaron, cansados, si, pero con el alma rebo
 sante de las más tiernas emociones.
 RODEO DEL MEDIO (Argentina). — Mes de
 entusiasmo Mariano.
 
 Octubre ha sido un mes fecmido para el culto
 de María Auxiliadora en Rodeo del Medio -y
 Mendoza. Hubiérase dicho que así como la pri
 mavera nos anuncia el alegre despertar de la
 naturaleza en una magnífica explosión de hojas
 y de fragrantés flores; así también Octubre nos
 ha traído un risueño fiorecimiento de devoción
 a María Auxiliadora con todos los encantos
 propios de ese culto suavísimo.
 Todas las fiestas del me.s han convergido
 hacia la principal que fué la dol 7 de octubre en
 que se detlicó al culto de María Auxdiadora el
 nuevo Camarín, verdadera joya de arte, pe
 queña miniatura del Paraíso, suntuosa sala
 de honor de las almas devotas de nuestra ce
 lestial Madre, accesible no sólo a los poderosos
 de la tierra como son de ordinario las salas re
 gias de los paladas humanos, sino también a las
 I>ersonas humildes y menesterosas y a cuantas
 gimen bajo el yugo del dolor y de la pobreza.
 A la del 7 de octubre siguió la festividad del
 día siguiente en el cual se recordó el tz° ani
 versario de la coronación, se ofidó la Primera
 Mi.sa en el Camarín y se realizó la Primera Jor
 nada Mariana con asistenda del limo. Prelado
 y de numerosas damas.
 líl 12 de octubre prestó su homenaje a María
 Auxiliadora la colectiddad española llevando
 solemnemente la Virgen del Pilar a su nueva
 sede de Prav Luis Beltrán.
 
 i
 
 187
 El 14 cúpole a los libaneses el honor de feste
 jar a la Virgen de D. Bosco, efectuando en ese
 día la primera peregrinación colectiva que fué
 todo un éxito.
 El 21 los hombres y jóvenes efectuaron la
 2®. Jomada Mariana que resultó muy brillante
 y provechosa.
 El 24 los alumnos de la Escuela Don Bosco
 celebraron la 3®Jomada Mariana que dió mar
 gen a una simpática Asamblea.
 Finalmente el 4 de noviembre cerraron con
 
 de la colecti\ddad española de Rodeo del Medio
 y de Fray Luis Beltrán. lU homenaje consistió
 en la bendición de la artística imagen de la
 Virgen del Pilar por ellas adquirida.
 A las 9 y 30 en un gran üutomó\-il profusa
 mente engalanado fué colocada la imagen en
 medio de las banderas argentina y española;
 escoltada por cuatro pajecitos y ¡>or las cornetas
 del batallón de ex]>loradores.
 El carruaje comenzó a avanzar con marcha
 lenta y majestuosa camino de Fray Luis Bel-
 
 G ranada (N icaragua) — N iños que merecieron premio especial por su buena conducía.
 
 broche de oro este ciclo de fiestas los católicos
 italianos honrando solemnemente a la Virgen
 del Rosario como saben hacerlo los hijos de esa
 tierra privilegiada.
 Las resoluciones prácticas que se han tomado
 en las tres asambleas de señoras, de hombres y
 de niños aseguran los frutos de estas fiestas y
 señalarán una nueva etapa de más mtenso
 fervor y de mayor acercamiento a María Auxi
 liadora.
 Dios quiera que así sea.
 Hotmnaje de la Colonia Española.
 El 12 de octubre ofreciercm su homenaje de
 adhesión a los festejos los numerosos miembros
 
 trán seguido de numerosas personas que acom
 pañaban la estátua a pie, o en carruaje.s
 A su llegada a Fray Luis Beltrán fué saludada
 la Virgen con las armonías de la banda, el estam
 pido de las bombas y el aplauso de la muche
 dumbre; recorrió las principales calles de la
 -sdlla (xmio para tomar posesión de ella y luego
 se detuvo al lado de la pequeña capilla. Entre
 los distinguidos acompañantes figuraban el
 Cónsul de Esptaña Sr. Reina y su consorte, el
 Dr. Matías Torrontegui, presidente de la Co
 misión. d Sr. Ceferino Alonso que facilitó el
 automó^-il, el Sr. Ciríaco Martín y otros.
 Ejecutado el Himno Nacional p>or la banda
 de la Escuela, el R. F. Director de la misma
 
 --------
 
 i88
 
 bendijo solemnemente la sagrada imagen prorrijm])iendo luego la muchedumbre en un pro
 longado aplauso.
 líjecutada la Marcha Real Española, subió
 a la tribuna el R. P. líligio Moreiro, Cura de
 Rodeo de la Cruz, quien con acento poderoso
 y casi diriamos atronador habló a sus compatriota.s de las grandezas de España cristiana,
 de sus empresas titánicas en el nuevo mundb
 cuyo descubrimiento se festejaba también en
 ese día; habló de la Virgen del Pilar, de la pro
 tección que dispensa a sus hijos y de la que dis
 pensará u los fieles de Fray Euis Beltrán que
 la honrcii de verdad, no sólo de palabra sino
 también con la santidad de la vida.
 vHiguuóle en el uso de la palabra el Dr. Matías
 Torrontegui, expresando líennosos concepto.^
 sobre la confraternidad hispano argentina y
 aplaudiendo el noble gesto del gobierno argen
 tino al declarar fiesta nacional el I2 de octubre
 como homenaje a la madre patria.
 Finalmente habló el R. P. Director agrade
 ciendo en nombre del Cura Vicario y de la
 Escuela Don Hosco el regalo que la colonia
 española hacia a la Parroquia y prometiendo
 el apoyo de la Obra Salesiana a favor de los
 intereses espirituales de los buenos españolea
 y de sus hijos.
 Como recuerdo del acto repartióse a todos
 los i>resentes una estampa grande de la Virgen
 del Pilar.
 Por la tarde en el local de la Bodega <• Res
 plandor» gentilmente concedido por sus dueños
 tuvo lugar una velada músico-teatral cu la que
 el cuadro de líx Alumnos rei)resentó el chisto
 sísimo sainete español « Que viene el General »
 y la banda ejecutó la característica Jota que
 tanto agradó a los presentes.
 Dieron lucimiento a totlos estos actos los
 alumnos de la lívScuela Don Bosco que pasaron
 el día en Fray Luis Beltrán y el batallón de
 Exploradores de la misma Escuela.
 La Virgen del Pilar se halla, pues, entre sus
 hijos los españoles que forman mayoría en Fr.
 Luis Beltrán: que Ella los conserven en la fe
 de sus padres y cu la práctica de esa religión
 que hizo de España una de las naciones más
 grandes y gloriosas de la tierra.
 BARCELONA (Esp.) —
 
 Ejercidos Espirituales.
 
 Dignos de aplauso e imitación han sido los
 Aiitiguos Alumnos Salesianos de los Colegios
 de Sarriá, Barcelona y Mataró, que, a pesar del
 agobiante trabajo del día. han sabido encontrar
 durante una semana algunas horas para asistir
 con edificante piedad a la tanda de Ejercicios
 F^pirituales a que les habían invitado sus antigu<á Educadores. Este año han acudido en
 mayor número, fieles a la palabra empeñada el
 año anterior de buscar cada uno nuevos com
 pañeros, que sienten también como ellos la
 
 necesidad de oir de nuevo la voz alentadora de
 sus antiguos profesores, que siempre saben en
 dulzarles las penas y animarles en la áspera
 lucha de la vida. Los ejercicios, este año fueron
 predicados por los Rvdos. PP. Julián Massana
 y Francisco Bandrés; la Bendición y las « Bue
 nas Noche.® », estuvieron a cargo de los Directo
 res de Sarriá y Barcelona, P. Guillermo Viñas
 y P. Antonio Martín.
 El día de clausura, 17 de marzo, dejó en todos
 recuerdos indelebles. Reunidos en la capilla
 de D. Bosco, de Sarriá, se celebró la Misa de
 Comunión General, tomando parte al banquete
 eucarístico todos lo 5 ejercitantes, en tan gran
 número, que hubieron de ayudar al celebrante
 a repartir la Sda. Comunión.
 A continuación el P. Viñas les recordó al
 próximo Beato y pidió a sus antiguos alumnos
 la promesa de mostrarse en todo momento
 dignos hijos suyos, alentándoles a ser siempre
 y en todas partes, sin cobardía ni claudicaciones,
 fervientes católicos.
 Acto seguido, en el patio del Colegio, tuvo
 lugar un simpático acto de confraternidad
 entre los actuales y los Antiguos alumnos. Un
 artesano saludó a los veteranos, pidiéndoles
 fueran siempre a la vanguardia, en honrar a
 D. Bosco, a lo que contestó el Antiguo alimiuo
 D. Francisco Pérez, mostrándole el elocuente
 immero de Ejercitantes allí reunido.
 Altamente satisfechos de la herniosa clausura
 de sus Ejercicios, se separaron nuevamente,
 prometiéndose juntarse todos el año venidero,
 pero aún más numerosos.
 
 CAR M ON A (España). Fiesta de San Franciscú de Sales. - - í^lemnísünos resultaron los
 cultos celebrados en honor del Patrono de la
 Congregación Salesiana.
 Los sermones del triduo fueron predicados
 jK>r los RR. PP. Teodomiro Ronda y Miguel
 García Alonso, Superior de los Redentoristas
 que cautivaron la atención del piadoso audito
 rio, siendo admirable la Conferencia sobre la
 Congregación Salesiana que con la elocuencia
 que le distingue, pronunció el ya citado P.
 Sujierior.
 La misa de comimión general fué celebrada
 por el M Rdo. Sr. Dr. D. Juan CoroiiÜ, Párroco
 de Sta. María prommeiando mi caluroso fervoriu antes de la comunión.
 
 i Sq
 
 S(a. Rosa (Pampa-Argenfioa) — Numeroso grupo de alumnos del C o le r o “ Domingo Savío.’
 
 C orrieates (A rgeatíoa) — Colocación de U P riiae ra P íctira d d nuevo C o i e ^ Salesiano.
 
 igo
 Veinte y seis niños de nuestras Kscuelas re
 cibieron por primera vez el Pan de los Angeles.
 A las lo y media se celebró la función solemne
 oficiada por el Sr. Director del Colegio.
 A las ocho de la noche dió comienzo la fun
 ción de teatro dedicada a los Sres. Cooperadores.
 líl Gnipo Artístico de los Antiguos Alumnos
 ])u,so en escena la graciosa zarzuela en un acto
 Almas en pena, del reputado salesiano D. Felipe
 Alcántara y el pasillo cómico Roncar Despierto.
 Los autores fueron muy ajjlaudidos por el
 selecto público que llenaba el salón de actos.
 GENERAL R O C A (Argentina). Misión en
 Zapala. — Nos escribe el Rvdo P. Juan Vaira:
 De regreso de Chos-Malnl, después de un largo
 y pesado viaje, llegué a Zapala, en donde me
 esperaba una grata sorjjresa. Una buena señora,
 ayudada de alg\mas señoritas, habían prepa
 rado 35 niños para la Primera Comimión.
 Después de un detenido examen en que me pude
 convencer de la concienzuda preparación de
 todos los niños, les di algunas instrucciones
 más sobre el Sacramento de la Confesión, y me
 dispuse a confesarlos a todos, preparándoles
 jmra la Comunión, que habían de tomar el día
 siguiente. La capilla se improvisó en la casa
 de una buena familia, que preparó con todo
 esmero un artístico altar, adornando la sala
 con magnificencia regia. A pesar de que el
 acto estaba anunciado para las 7, aquellas almitas privilegiadas, ávidas de recibir en sus
 corazones al amado Jesú^, se encontraban ya
 u las seis en la capilla, esjierando ansiosamente
 la hora sonada. A las 7 en ]nmto se cmj)ezó la
 Sta Misa, y al acercarse la hora de la Comunión,
 la emoción de lodos los ]ircscntes era tan in
 tensa, que obligaba a derramar tiernas lágrimas
 de consuelo, viendo la felicidad de sus tiernos
 hijitos. Vo me sentí profundamente conmovido
 al ver cjue en una región, que el sacerdote sólo
 logra visitar de tarde en tarde, hubiese tan
 elevado espíritu cristiano y reina.sen tan pro
 fundos sentiniientos do jiietlad.
 GUAYAQUIL (Kcuador).
 l'll día 13 de Huero, se tdectuaron los exdmenes públicos, ]>residÍeitdo la mesa exami
 nadora la Srta. Celia Mora, en nombre de la
 Dirección do Hstudios.
 La fonuu adoptada para estas pniebas finales
 fué la de luia clase ordinaria, en la que en fonna
 dialogada y expositiva cada alunina contes
 taba a cuanto la l^ofesora de cada Grado le
 iba i>rcg\mtando.
 P\ié muy del agrado general el examen
 práctico de gimnasia.
 l ’ln la Ex^sicix'n de Labores figuraban tratrabajos do verdadero mérito. Notábase, sobre
 todo, la gradación según los años de apren
 dizaje, en los varios ramos de dibujo, pintura,
 
 bordados ordinarios y en brocado, confecciones
 de ropa blanca, de almohadones, y demás útiles
 de salón y de dormitorio.
 Había tal variedad de objetos y estaban
 distribuidos con tanto gusto que efectivamente
 daban la idea de una Exposición de Labores.
 La repartición de premios se efectuó el .día
 13 por la mañana, con la asistencia de casi
 todos los padres de las educandos. Notábase
 un ambiente de distinción, estando represen
 tada la sociedad en sus mas destacados ele
 mentos, Mons, Domingo Comin y el Vicario
 General de le: Diócesis.
 K1 programa fué muy ameno, y todos los
 números bien ejecutados.
 M AGALLANES {Chüe). Despedida del exiniendente. — La partida del Coronel D. Javier
 Palacios Hurtado, ex-intendente del Territorio,
 ha dado lugar' a múltiples manifestaciones de
 estima y gratitud, tanto por parte del pueblo
 como de diversas instituciones. Entre estas
 figuran en primera línea los varios Colegios
 salesianos de la ciudad.
 Los hijos de D. Bosco quisieron exteriorizar
 una vez más su grande agradecimiento hacia
 el Sr. Palacios por los mimerosos actos de bene
 volencia con que siempre les ha distinguido.
 Así, el Colegio D. Bosco, el Batallón-Explora
 dores y el Colegio San José, rindieron al exIntendente el homenaje del más vivo cariño
 y sincera gratitud.
 Parte el Coronel Palacios muy bien impre
 sionado de la magna labor de los Salesianos en
 Magallanes, declarándose, no sólo admirador,
 sino Cooperador de la Obra de D. Bosco. Le
 acompañan los Salesianos y sus alumnos con
 el afecto y el agradecimiento.
 PAM PLONA (Navarra-España). Festividad
 de San José. — Con ocasión de la fiesta del Glo
 rioso Patriarca quisieron los Salesianos demos
 trar su gratitud a los beneméritos cooperadores
 que tan eficaz ayuda les prestan en el desarro
 llo de las grandiosas Escuelas Profesionales en
 construcción.
 A este fin prepararon una hermosa velada tea
 tral, en la que los pequeños artistas lograron
 satisfacer y conmover al numeroso y selecto
 auditorio, con la perfecta representación del
 hermoso drama « Como la Tumba », labor ar
 tística, para la que los diarios locales no encon
 traban digna alabanza. Los espectadores aplau
 dieron de corazón a los artistas, felicitando a
 los Padres Salesianos que tan bien consiguen
 su lema de educar deleitando.
 SANTA TECLA (Salvador). Oratorios.Luis.
 — El último de noviembre se verificó la rifa
 con que se premia a los oratorianos asiduos.
 Estuvo muy surtida, especialmente en géneros
 y útiles de clase. Asistieron algunas Coopera-
 
 I
 rgi
 doras. L,os niños quedaron muy satisfechos,
 siendo los premiados unos 200. La Junta Direc
 tiva encabezada por la entusiasta Cooperadora
 Doña Emma de Sol envió muy buenos prepiios.
 Con mucha solemnidad se celebró el 8 de di
 ciembre el feliz aniversario de la fimdación,
 por el Ven. Juan Bosco, de la obra providencial
 de los Oratorios Festivos, que si no es la prin
 cipal, es de las principales instituciones sociales.
 Por la mañana se celebró la misa de comunión,
 recibiendo al Divino Prisionero del Taberná
 culo más de 125 oratorianos. Luego se Ies sirvió
 un suculento desayuno. A las 9 se cantó la misa
 solemne, oficiada por la Schola Cantorum de
 Ayagualo, con hermoso panegírico de la festi-
 
 un apóstol cuya voz se oiga siempre donde más
 se necesite.
 Deseamos al nuevo preriodiquito largos años
 de fecunda labor.
 TURIN (Italia), Un Monumento a María
 Anxiliadora.
 El día 21 del pasado abril tuvo lugar en nues
 tro Estudiantado Teológico Internacional de la
 Crocetta (Turín), con motivo de la fiesta del
 Director, D. Ludovico Costa, la inauguración
 del monumeníc a María Auxiliadora, erigido
 en el hermoso jardín del Instituto.
 La estátua que se alza airosa sobre artístico
 pedestal de mármol, es obra del insigue escuT
 
 Coruña (Esp.) — Poyecfo en consíracción de las Escuelas de Artes y Oficios para cuya actuación
 se solicita el concurso de todos los buenos.
 vidad del día por el conocido y fecundo orador
 R. P. José Córdoba, S. S, A las 3 p. m. se im
 partió la bendición eucarística, y a las 8 hubo
 una bonita función de teatro, poniéndose en
 escena la comedia en dos actos «El onomástico
 del coronel >, muy bien interpretada por la
 Compañía Dramática del Oratorio.
 TALCA (Chile), Nuevo órgano de la devoción
 a María Auxiliadora. — lia llegado a nuestra
 redacción la nueva hojita que con el título
 ‘ María Auxiliadora en Talca », se propone di
 fundir más y más la devoción a la Gran Rema
 de los 5 ale^ianos, María Auxiliadora. Encabeza
 el primer número la paternal bendición del Sr.
 Obispo de la ciudad, que después de animar a
 las beneméritas Hijas de María Auxiliadora
 n seguir siempre fieles a su espíritu de aposto
 lado, las desea que hagan de la nueva hojita
 
 tor Vigna y ha sido costeada por el gran
 bienhechor de la Crocetta D. Adolfo Tomquist
 y por el Sr. Inspector de Colombia, quien, ya
 que no tiene en el Instituto ningún rejiresentante. hace ese obsequio, esperando que María
 Auxiliadora le mande numerosas vocaciones
 para enviar a ese prestigioso centro de formación
 salesiana, muchos hijos de la noble república
 de Colombia.
 VALENCIA (Venezuela). Fiesta de S. Fran
 cisco de Sales. — Con la acostumbrada solemni
 dad se celebró este año en el C o l^ o D. Bosco
 la Fiesta de San Francisco de Sales y el aniver
 sario de la Coronación de Su Santidad él Papa.
 Los Alumnos y la Archicofradía de María Auxi
 liadora, cada cual en sus respectivas horas, se
 prepararcai con un triduo. La comunión fué
 numerosísima en todas la Misas. La solemne
 
 fué a laa 9, siendo celebrante el Revdmo. Padre
 Rafael Torres Coronel. Pronunció el panegírico
 que a la vez hizo servir de Conferencia salesiana, el M. R. P. Fierro, Director del Colegio,
 lístudió magistralmente la figura de San Fran
 cisco de Sales como Modelo de Estudiantes y
 Modelo da Apóstol en el Magisterio y el Minis
 terio, deteniéndose, particularmente en el
 espíritu o alma con que el Santo los ejerció,
 que no es otro que la caridad exquisita de Cristo,
 benigna, paciente, esperanzada, optimista siem
 pre; y explicando cómo ese fué el motivo para
 que ese otro grande Hombre, el Venerable Juan
 ¿oseo, le tomara por modelo y Protector en
 su obra educativa y social. Terminó trazando
 el programa de actividad salesiana de este año.
 El martes, aniversario de la Coronación Pon
 tificia del Padre Santo Pío XI, hubo Misa can
 tada, Exposición, Hora de Adoración y después
 de recibir la Bendición Solemne, se entregaron
 los alumnos y sus profesores a la inocente di
 versión de las piñatas y ejercicios de deporte.
 La Velada de la noche fué bellísima: pocos
 númeras, pero selectos y bien ejecutados.
 Número muy llamativo fué la proclamación
 de los a'iminos que se han distinguido en el
 iHtirao mes, por su conducta y aplicación: entre
 los aplauso.s de sus compañeros y el encanto
 de sus padres, salieron a ocupar los asientos de
 honor que la Dirección les había hedió preparar.
 
 necrología
 La Exema. Sra. Marquesa De Mos,
 Vda. De Mochales.
 Los Salesiauos y sus niños de la Comña han
 perdido una verdadera madre, con la muerte de
 la señora Marquesa. Su caridad no tenía límites
 tratándose de los pobres, y en especial de los
 niños, para los que siempre tuvo caritativos
 recuerdos. La casa de la Coruüa tiene mudio
 que agradecer a tan bondadoso corazón, aparte
 muchas limosnas, pues no sabía su mano iz
 quierda lo que daba la deredia. Lo veía Dios, por
 El lo hacía todo y así habrá recibido el premio.
 Pasó por este mundo sufriendo mudúsimo
 y demunaudo el bien, y Dios la habrá recibido
 en el seno de los justos, esperando que desde
 allá se recuerde de nosotros como se recordaba
 durante la vida. Mientras iuiploramos de nues
 tros lectores una oración por su alma, queremos
 hacer llegar a todos sus parientes nuestro pésame,
 uniéndonos a ellos en la pena que les afiije.
 
 Un modelo de Cooperadoras.
 El día 4 del corriente marzo entregaba su
 alma a Dios la Exema. Sra. Marquesa de La
 Hermida, doña Mariana Moreno y Pérez de
 Vargas. Con su falleciento pierde la Obra Sale
 siana de Alicante la que fué una de sus pri
 meras cooperadoras.
 Llevada del celo que infiamó siempre su
 bondadoso corazón, donó, en vida de su primer
 esposo el Exemo. Señor Marqués del Bosch
 de Ares, un solar en la calle de Castaños esquina
 a la del Empecinado, a fin de que los Salesianos
 edificaran en él y lo convirtieran en un flore
 ciente Oratorio Festivo para educación e in
 strucción de la niñez, por aquella fechas tan
 necesitada.
 Graves dificultades se opusieron a la reali
 zación de la obra que acariciaba la caritativa
 dama: y no era la menor el juzgarse escaso el
 terreno donado para el proyecto planeado, a
 pesar de que alcanzaba casi los 1.500 metros
 cuadrados.
 Por aquel entonces vióse probada la Mar
 quesa con un doloroso golpe, el fallecimiento
 de su esposo, acaecido en julio de 1908. En
 octubre del año siguiente contraía segundas
 nupcias con el Exemo. Sr. Marqués de la Her
 mida; y los nuevos esposos, perseverando en
 el noble camino trazado, no tuvieron inconve
 niente en permutar el solar antes cedido, por
 otro de mayores dimensiones: y al efecto cedie
 ron el amplio terreno en que se levantan hoy
 las Escuelas Salesianas de aquella ciudad.
 Los salesianos no podrán nunca olvidar
 a la que fué su primera Cooperadora en Ali
 cante: y al hacer presente su pésame más
 sincero a toda su distinguida familia, piden a
 la celestial Auxiliadora, de quien fué siempre
 devotísima la ilustre finada, le conceda el des
 canso eterno.
 
 Recordad en vuesfros sufragios a:
 C a r t a g o (Costa Rica). — Emperatriz Bueno
 y Mercedes Delgado de A rogón.
 Ma d r id (E.spaña). — Rvda. M. Sor María
 Felisa de Pagasartundria.
 Tx'KSOK (Estados Unidos) Candelaria de Cos.
 VAI.DEC01.MENAS DE A b a jo (España). — Lu
 cia Martin, Victoria Martin, Gonzalo de la
 Fuente y Hermenegildo Aliaga.
 ViiJ,A. DE D o n F a d r iq u E (España). — María
 Izquierdo.
 R. I. P .
 
 Coa aprobm etóa
 
 d e le e e io r id td e c k sié s lic a .
 
 G erM tet D . D O .U E N I C O G A R N & R I .
 Estableclaicm to T ip . de la S o cied ad E ditora la tcraacioaal - T aria
 C o r a e R e ^ 'e e M argAenYa. ¡7 1 ,
 
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