BS_1906_10.pdf

Medios

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N. 10

O ctubre de 1906

AÑO XXI
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Boletín Salosinno

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Tnrín - Oratorio de S. Francisco de Sales

SUMARIO: Acción c a t ó l i c a ................................. pá.g. 253
Movimiento S alesian o: E n e l P e r ú ....................... * 2 5 7
L a I^Iisióndel Chjibnt . »
259
Tesoro e sp iritu a l............................................................ »
262
De nuestras M ision es: I n d ia : F e é idolairia (2 cartas
del P. T o m a t i s ) ............................................ ....
. . 263
China: 5 /^rtOTtfr O ratorio festiv o (del P. V e rsig lia )» 266
B i b l i o g r a f i a ..............................................................................
Gracias de M aría A u x i li a d o r a ...................................»
268
Por el m undo salesian o: E spañ a: B éja r . M adrid,

A

^ ^ o o ú

^ ^

^

A m érica: B uen os A ir e s , B a rra n ca s, Sah>atierra,
Santa Tecla, Ja rita g u a , T ud u l-S ig sig , Cuzco,
Iquique, L a Paz, S a n t i a g o ................................. •
N ecrología: E l lim o . S r. C arn ario Barros, la S la.
Isabel H ern án d ez....................................................... »
M em orias biográficas de Mons. L asagn a . . . »
G rab ad os: Alum nos del C olegio de l’ iura - Fachada
é interior de la iglesia de M aría A uxiliadora en
M adrid - C olegio León X III de Buenos A ires lim o . Sr. Caraargo Barros -

272

277

279

ACCIÓN CATÓLICA
ADA uno de los acontecimientos
que se van desarrollando en

que se van
torno nuestro es un nuevo
mensajero que nos viene á convencer
de la necesidad de desplegar todas
nuestras energías como católicos, realizar
todas las inspiraciones que en nuestro
corazón excitan el amor á la humanidad,
el celo por la causa de Dios y nuestros
propios intereses. Cada día se aparta
más la sociedad de la fuente de la vida,
talvez á causa de nuestra inacción, quizá
porque á la faz de las masas popu­
lares aparecemos como seres degradados
por el egoísmo. Y llamamos malos á
los tiempos, y quizá haya quien achaque
al progreso la causa de tanjos males,
cuando la verdad es que los tiempos
h.

no son tan pésimos como nos los figu­
ramos, y que el corazón del hombre
todavía da oído á los que le hablan
con verdadero interés y amor, y que
el progreso, lejos de ser remora, es
imán para acercar á Dios, porque de
El viene todo lo bueno que hay en el
mundo. Es tiempo sí que desjjertamos
del letargo, tiempo es de obrar deci­
didamente todos, en favor de nuestros
hermanos que, abandonados, se extra­
vían por sendas apartadas: este siglo
es siglo de movimiento, de agitación,
y por ello, bendito sea el Señor!
Hoy los Salesianos y Cooperadores
formamos una masa de más de medio
millón de individuos, y nos repartimos
todas las zonas del mundo. En todas



254

las naciones europeas hay Cooperadores
Salesianos; los hay en las inmensas
extensiones de la América que, des­
pertando á la vida, se lanza en pos de
sonados ideales, con el ardor brioso
de la juventud; existen en el Africa y
no faltan en el Asia, y aun en la casi
incógnita Oceanía.
Si todos unidos con un mismo espí­
ritu, el espíritu de Dios, movidos por
un solo resorte, el celo de su gloria,
persiguiendo un n^ismo fin, la regene­
ración ó encauce de la sociedad, si
todos, obrásemos de consuno en nues­
tros respectivos campos y en la medida
de nuestras fuerzas, agrupados, estre­
chos como los hilos de un cable, ah!
entonces ejerceríamos invencibile pre­
sión en la atmósfera social, pesaríamos
mucho en la balanza civil y apresura­
ríamos á Jesucristo el reinado, á la
Iglesia la victoria, á la sociedad la paz.
Un demagogo en una ciudad, un caci([ue en un pueblo logran cuanto se
les antoja, porque tienen constancia y
saben formar partido, como se dice ;
y ¿porqué no podrá un escuadrón de
Cooperadores salesianos, ó lo que es
lo mismo, de católicos convencidos,
obtener también grandes ventajas para
la religión y la sociedad? Es difícil,
se nos dirá, nos atraeremos odiosida­
des y debemos luchar. — ¿Pues qué?
¿no es necesaria la lucha en todo y
para todo? en nuestros negocios materiales¿ acaso nos lo hallamos todo he­
cho, sin que muchas dificultades nos
salgan al paso? ^"a que la vida es lu­
cha, luchemos, y luchemos con la se­
guridad de la victoria. ¿ Qué no puede
una convicción profunda? Cuentan de
un hombre de la América que tenía
la convicción de llegar á dominar á su
nación, y tanto hizo que se salió con
su intento, aunque para ello tuvo que
vencer dificultades sin cuento y derra­
mar torrentes de sangre. jY no po­
dremos nosotros alcanzar el triunfo de



Cristo, tanto más noble que el triunfo
de un hombre, cuanto está más alto
el cielo que la tierra? tanto más seguro
cuanto tenemos la justicia de nuestra
parte y las promesas divinas que no
pueden faltar?
Y cuenta que no se trata de una cosa
más ó menos voluntaria, más ó menos
facultativa, sino de una cosa estricta­
mente obligatoria. Para cuantos nos
preciamos del glorioso dictado de cató­
licos, la lucha por la religión y la so­
ciedad es un deber imprescindible y el
Señor nos hace grande honra al esco­
gernos para combatir por su causa,
para vencer sus batallas. Cuando un
ladrón entra en mi casa, y arrebata mis
haberes y despoja mi familia y ultraja
las personas más caras á mi corazón,
yo me creo obligado á intervenir, y
de hecho intervengo y saco fuerzas y
repelo la agresión y venzo. ¿Y no es
esto precisamente lo que está suce­
diendo en el campo de la Iglesia? ¿no
están los enemigos arrebatando la ino­
cencia de los niños, el honor de las
doncellas, la caridad de los ricos y
potentados del mundo, la paciencia
de los desheredados, la fe de todos, el
bienestar del mundo? ¿Y qué hacemos
nosotros? ¿Podremos permanecer indi­
ferentes?
Nuestra indolencia nos hace ver las
cosas más difíciles de lo que en reali­
dad lo son: parécenos que los malos
se lo hallan todo hecho y que no tienen
que vencer dificultades ni atropellar
embarazos; mas no es así: con fre­
cuencia tienen que destruir un orden
de cosas ya establecido, combatir la
conciencia pública, esa fuerza prepo­
tente, y sobre todo tienen que mentir
y disimular, y por lo mismo que jugar
de astucia y discurrir finamente. En
tanto los buenos, ó los que presumi­
mos de tales, fiados en la bondad de
nuestra causa, dormimos y dejamos que
el mal se’agrave, jCuántas veces una



palabra á tiempo, una actitud serena,
pero enérgica, hubieran bastado á con­
tener el mal!
Nuestra misión no es tan ardua como
acaso imaginamos; en primer lugar te­
nemos la justicia de nuestra parte; y
¿qué no puede esta profunda convicción?
En las guerras que para vergüenza de
la humanidad ensangrientan el verde
de los campos y el azul hermoso de
los mares, la convicción de luchar por
una causa justa da casi siempre la vic­
toria. Ejemplos no faltan y quizá los
haya muy recientes.
En segundo lugar, contamos con la
conciencia del hombre. Sí, con la con­
ciencia del hombre. Es verdad que
nuestro sentido y nuestra voluntad están
inclinados al mal; pero no es menos
cierto que en todos brilla la luz de la
razón y clama la voz de la conciencia,
y que la mayor parte se dejan engañar
más por debilidad que por malicia.
Pongamos un ejemplo. Viene un indi­
viduo á aconsejarme el robo ó el ho­
micidio: mi conciencia se revela y el
aconsejante tiene que vencer esta re­
sistencia antes de decidirme á obrar.
Existe además lo que pudiéramos
llamar sentido religioso: por muy ciego
que esté un hombre, siempre tiene al­
gún temor á Dios, algún respeto á sí
mismo, algún miramiento por los demás
hombres, alguna tendencia al bien.
En las poblaciones rurales sobre
todo, donde por dicha, la fe ha sido
menos sacudida, existe todavía un res­
peto profundo por el .sacerdote, una
fe casi ciega en su palabra ¿es acaso
muy fácil arrebatar esa estima? ¿Y lo
consentiremos nosotros, á lo menos sin
luchar? Aquí tiene el enemigo que
pugnar con los sentimientos más hon­
dos del corazón. A la persona del sa­
cerdote , si es digno de su carácter
y no ha renegado de su misión y re­

255

conoce su dignidad y grandeza, van
vinculados los recuerdos más dulces,
los sentimientos más fuertes; él es el
padre que nos dió el nombre y nos
abrió las puertas de la Iglesia y con
ellas, las del cielo; es el amigo que
consuela nuestras penas y alivia nues­
tros dolores, visita nuestra cabaña y
compone nuestras desavenencias; el
ministro que bendice nuestros enlaces
y forma nuestras familias; el ángel (pie
vela nuestros hogares, presencia
alienta nuestra muerte, y nos descorre
el velo, tras el cual está la eternidad
dichosa. ¿Será muy fácil arrebatar ese
sentimiento? ¡Ah! cuánto puede en un
pueblo un sacerdote celoso y un grupo
compacto de católicos de convicción!
Aquí puede embestir el emisario de las
tinieblas, pero le será muy dilícil, im­
posible la victoria. Este campo todavía
no está ganado por el adversario, aun­
que ya lo ha acometido, y si nos des­
cuidamos , caerá en sus manos; de­
fendámoslo pues. Miremos por nuestros
propios intereses.
Otro elemento hay nluy poderoso de
victoria, entre los innumerables con que
contamos, el que acaso valga más á los
ojos de los pequeños é ignorantes, y es
el mal resultado obtenido por los ene­
migos de la verdad en sus ensayos,
sus chascos en sus empresas, su false­
dad convicta en sus promesas, su
perfidia puesta de manifiesto. Prometen
un paraíso de delicias en este mundo,
y luego no dan sino un aumento de
hambre ; predican la frat(?rnidad y luego
empapan el suelo de la madre tierra con
la sangre de sus hermanos; olrecen la
paz y lanzan las multitudes á la revo­
lución, brindan redención y dan cade­
nas, asistencia, y privan de pan á las
viudas y de alimiento á criaturitas ino­
centes. Abrir los ojos del pueblo, ha­
cerle ver, no más que hacerle ver estas
cosas que se desenvuelven á sus ojos;
hé aquí ya un medio seguro de victoria.

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— 2^6 —

Ü* :¡:

Como en las poblaciones campestres,
en la mayor parte de las naciones jó­
venes es más fácil contener el avance del
mal: volemos á ocupar el puesto, seamos
centinelas de la verdad y del bien.
No nos contentemos con una resis­
tencia meramente pasiva, es necesaria la
acción. Nuestras armas no serán, (como
juzgan muchos (pie no conocen el espí­
ritu católico) la violencia y la mentira;
no: no tenemos necesidad de eso: la
verdad, sencillamante la verdad, á ejemI)lo de nuestro Jefe, la caridad y la jus­
ticia; la compasión por las debilidades,
la entereza contra el mal, la condescen­
dencia y hasta la tolerancia con las per­
sonas, el cumplimiento de nuestros de­
beres, poi*([ue el ejemplo gana y atrae.
Debemos preocuparnos seriamente
por la suerte espiritual y material de nues­
tros hermanos: sí, material, porque nues­
tra misión debe abarcar todo el hom­
bre: no solamente el alma, sino tam­
bién el cuerpo, y muchas veces será
necesario comenzar por aquí, ya que el
hambre es mala consejera, y las pruebas
exteriores y palpables sirven más á los
ojos de los hombres para probar la
bondad de una causa, que los mejores
argumentos teóricos. Pero no nos ade­
lantemos. Ya iremos desarrollando al­
gunos de estos puntos en los siguientes
números, si las circunstancias lo con­
sienten.
Por ahora basta que nos persuada­
mos que como católicos y como Coo­
peradores estamos obligados á la acción
social; un derecho de legítima defensa
así lo exige. Nuestra acción no debe,
no puede ser individual: el individuo
es demasiado pequeño, impotente, im­
perceptible; en el inmenso campo que
tenemos delante, desaparece ante la
poderosa organización de los que nos
combaten; nuestro trabajo debe ser co­
lectivo, compacto, bien organizado y

por lo mismo, disciplinado. Ancho campo
tiene la iniciativa privada, antes, (de­
bemos protegerla y estimularla con to­
das nuestras fuerzas; pero si nuestros
esfuerzos, como acción social no son
colectivos, cooperativos, nada haremos.
Nuestros Jefes serán los Obispos, á
quienes ha puesto el Espíritu Santo
para gobernar la grey numerosa dé los
Hijos de Dios, y así lo mandaba
S. S. Pío X al pueblo francés y á las
sociedades católicas italianas. Nuestras
armas serán la fe, la caridad, la dul­
zura y la firmeza reguladas por la pru­
dencia, que estudia el ambiente y pro­
porciona los medios, y disciplinadas por
la obediencia. El Papa será nuestro
fanal: allá, en esa roca inconmovible y
elevada que domina el mundo y donde
se estrellan las tempestades, allá de­
bemos volver la mirada y seguir la di­
rección que nos imprima. Nuestra 'ban­
dera, nuestro lema, será el Corazón de
Jesús; nuestro ideal, nuestro objeto, es­
tablecer su reinado social: ideal sublime,
porque cuando el Cristianismo impere
en el mundo, todo está restaurado.
La obra es ardua, pero el triunfo es
seguro. Basta empezar.
Vasto es nuestro programa: abraza la
juventud, la clase obrera, la clase agricultora, sí, la clase agricultora y de ma­
nera especial, porque en ella está la
esperanza más fundada: en una palabra,
la sociedad entera; el cuerpo y el alma,
el bienestar material y la salud eterna.
Animo y decisión. Tomemos pronto
nuestro puesto: coadyuvemos con el
Pontífice á restaurar la sociedad en
Cristo: « Los que son del Señor jún­
tense á mí, » nos ha dicho en su En­
cíclica Acerbo nimis. Los Hijos de Don
Bosco : Salesianos, Hijas de María Au­
xiliadora y sus Cooperadores, somos de
este número. Cerremos nuestras filas y
marchemos. En estos tiempos de civi­
lización y actividad, el que quiera per­
manecer inmóvil, es arrollado.

En la I^cpública dcl Perú.
(De una carta del P . Santinelli al P . Rúa).
Lim a, Junio de 1906.

^ o n motivo de la nueva fundación en Piura,
de nuestras fiestas centenarias y Congreso,
me permito, amado padre, enviarle algunas no­
ticias que pueden agradar á los Cooperadores.
He aquí las principales:
Nueva fuadacióa. — El año pasado se estableció
la Escuela práiiea de Agricultura y de Aries y Oficios
en el Cuzco ; en este año con la protección de María
Auxiliadora y como homenaje á Santo Toribio de
Mongrovejo, segundo arzobispo de Lima, se ha lle­
vado á cabo una nueva fundación con el título de
Escuela Salesiana de Artes y Oficios en la ciudad de
Piura, capital del Departamento del mismo nom­
bre, cerca de la República del Ecuador.
El contrato se firmó con el Honorable Concejo
Municipal á primeros de Febrero y después fué
reconocido por la nueva Ley de Instrucción pri­
maria. En Piura fuimos recibidos por las autori­
dades locales y los cooperadores con verdadero
afecto y estima. El Sr. Dn. Juan Hilarión Helguero,
que ha sido Director de Beneficencia en esta ciudad
por 12 años, bienhechor insigne de la orfandad y
de los enfermos, se había interesado desde mucho
tiempo para la venida de los salesianos. El fué
quien nos alojó en su casa hasta que tuvimos local
apropiado para la Escuela.
.Aprovechamos esta ocasión para tributar nues­
tra profunda gratitud hacia el Sr. Helguero, el Dr.
Francisco Eguiguren, exministro de Justicia en
Lima y el Sr. Manuel Helguero, Síndico del Con­
sejo de Piura con las demás autoridades locales
por el interés que tomaron por los Salesianos.

Datos. — Xo creo fuera de sazón, darle algunos
datos sobre este rico departamento y el porvenir
de la Obra Salesiana en estas repúblicas del Perú
>• Bohvia.
Piura fué fundada en 1532 por Pizarro, quien
viendo tanta vegetación y íertüidad en la ribera

I k

del río la Chira, fundó la primera población, que
llamó San Miguel, donde se erigió también el pri­
mer templo católico en el Perú. Pero más tarde
por la insalubridad del clima se trasladó dicha
población á un valle más salubre y se llamó como
hoy, San Miguel de Piura.
La ciudad está á los 5°, i i ’ i ” de latitud Su ryse
encuentra á 100 Km. del Pacífico, comunicando con
el puerto de Paita por vía férrea. En el verano y
durante las horas de sol, las calles de esta ciudad
son verdaderos hornos de reverbero y casi intnmsitables ; pero en el resto del año. no se siente mucho
calor. En cuanto al cüma, es templado, seco y muy
sano. En Piura no se conocen enfermedades conta­
giosas, como la bubónica, fiebres palúdicas, tifus,
viruelas etc.
La ciudad es de consideración y va progresando;
posee una hermosa plaza. Hospital y el movimiento
general del comercio es notable. Es patria del pintor
Merino. Piura no tiene agua ; el río del mismo nom­
bre que pasa al lado, se seca durante cuatro ó cinco
meses del año y en esta época los habitantes de la
ciudad hacen pozos en el cauce del río. Esta ciudad
con agua en abundancia progresaría nruchísimo y
cambiaría como por encanto. A pocas leguas al
Norte de la ciudad pasa el río Chira, y desde mu­
chos años se están haciendo estudios con este fin.
Parece ya. cercano el día en que verá realizada tan
importante obra.
La población de la ciudad, es de cerca de 8.000
habitantes y en todo el departamento hay 136.000.
Algunas provincias y poblaciones de este departa­
mento son de notable imp>ortancia para las indus­
trias y comercio. Entre éstas Tumbes, puerto de
mar, donde los balleneros conducen las ballenas
pescadas en los mares ecuatoriales.
Paita, puerto con excelente bahía y patria del
almirante Grau, es uno de los puertos más impor­
tantes del Perú. Sullana, regada p>or el Chira es
un pueblo muy floreciente por algodón y agricul­
tura. La población de Sullana, como casi todas de
esta región, parece servir de anillo entre el desierto
y la lujosa vegetación de las regiones tropicales ;
entre la absoluta falta de agua y la abundancia,
entre la vida y la muerte. Sullana se encuentra á
ocho leguas de la ciudad de Piurá á una hora de
tren. Catacaos á dos leguas de Piura, donde acaba
la vía férrea; es una población muy importante y
antigua, dedicada á la agricultura y á la fabricación
de los sombreros de paja, llamados de Guayaquil.
En cuanto á producciones en el departamento de
Piura, es notable la planta de algodón, los preciosos
algarrobos que crecen espontáneamente con cuyos
frutos se cría mucho ganado cabrío. Eft Scchura
las salinas, en Tumbes el petróleo y el tabaco y en
Huanancabamba la cascarilla, etc.
K 3EX

— 2^8 —
achiote; diferentes especies de palmeras, como el
chatnbiro, empleada en la fabricación de hamacas,
la tagua, cuyos granos encierran el marfil vegetal, y
la chonta.
Si de las riquezas vegetales pasamos á las mine­
rales, parece fabuloso lo que estas repúblicas poseen;
la mayor parte de sus minas están sin e.xplotar y
son casi desconocidas. Solamente en Cerro de
Pasco (Perú) en donde por una vía férrea se va en
un día de Lima á la Oroya y con otras ocho horas
á Cerro de Pasco, existe una sociedad Norteame­
ricana que en pocos años ha gastado 25 millones
de soles en la compra de minas v primeros tra­
bajos de explotación de oro, plata, cobre, etc.
millones que según datos seguros,
multiplicarán inmensamente muy
pronto.
Ahora bien, una vez abiertos los
caminos con vías férreas y esta­
blecido el comercio en grande
escala, en esas regiones se impone
necesariamente la inmigración Eu­
ropea.
En el Perú hasta ahora se puede
decir que no ha habido verdadera
corriente inmigratoria. No han
faltado algunos ensayos particu­
lares para colonizar el litoral, pero
desgraciadamente han fracasado,
debido principalmente á la distan­
cia que nos separa de Europa, al
y
clima insalubre de los valles y en
modo especial á la falta de vías
de comunicación para el paso de
P IU R A — Alum nos de prim era Comunión.
los Andes á la montaña en donde
abundan tantas riquezas.
.Muchos escritores nacionales y extrangeros se han
el departamento de Lorcto en donde abundan las
riquezas llorcslales, quedando así en comunica­ ocupado de esta importante materia, pero quien re­
copila cuanto los demás han dicho, y ha escrito con
ción directa con los puertos del Pacífico.
Para dar una ideado las riquezas orientales, ex­ verdadero acierto, sinceridad, criterio práctico y
tracto lo que ha escrito á este propósito Carlos conocimiento dé la materia, es el Dr. Luis Pesco,
Viesse, escritor peruano, en su geografía del Perú. italiano y médico de las facultades de Turín y de
« La exuberante fecundidad de la naturaleza, se Lima. Su obra tiene por título « Indigenas y Emi­
revela en la montaña por millares de especies de grantes en el Perú », publicada por el Ministro de
Fomento. El autor demuestra la necesidad que tiene
árboles que cubren el suelo de inmensas selvas,
donde se encuentran excelentes maderas para cons­ el Perú del aumento y mejoramiento de su pobla­
trucciones navales, ebanistería y carpintería y ción, fomentando todos los medios que conducen
también para la tintorería. Entre otras citaremos á mejorar las poblaciones indígenas y la*inmigrael palo de balsa, el roble, el nogal, el cedro, el palo ción extranjera. Porque sin duda en el Perú, como
de rosa, el facaratida, el sándalo, el palo de cam­ en Colombia y el Ecuador y casi todas las Repúbli­
peche. Otros productos de las selvas de la montaña cas .\mcricanas, la principal fuente de la riqueza y
son la sinfonía elástica y otros árboles.cuya resina prosperidad son las industrias extrativas y expor­
suministra el jebe y el calicho, la quinaquina que tadoras ; y los factores indispensables para el des­
produce el bálsamo del Perú, el copayero, el copal, arrollo de dichas industrias son el número y vigor
la cascarilla v diferentes especies de cinchonas que de sus individuos.
El Perú con i.Soo.ooo kms. cuadrados de super­
producen las quinas. Entre las plantas medicinales
existe el maiieo, la sarzaparilla, la ipecacuana : ficie, apenas tiene 3.000.000 de habitantes; necesita
otras odoríferas y tintóreas, como la vainilla y el pues, con urgencia la inmigración. Así hallará el

Porvenir del Perú. — La unión de los dos océa­
nos, Pacífico, y Atlántico, que permitirá á los
vapores de Europa y Norte América tocar directa­
mente los puertos del Pacífico, será un factor de
progreso comercial é industrial, no sólo para el
departamento de Piura, sino para toda la república
del Perú. Kn estos últimos diez años la república
ha gozado de paz y progresado notablemente, en
todos los ramos. Los poderes públicos se interesan
para fomentar la instrucción en todas las pobla­
ciones de la república, en mejorar la condición de
la raza indígena especialmente construyendo vías
férreas. Se proyecta una de mucha importancia, la
orioniíd que partiendo de Lima ha de llegar hasta

'a i

— 259 —
progreso de sus industrias, la estabilidad de sus
instituciones políticas, y el desenvohimiento de su
poder. Además el Dr. Pesce, expone las causas
porque el Perú no ha sido país de inmigración, sos­
tiene que en la actualidad es apto y se está cada día
preparando más para recibirla. Si los poderes
públicos no pueden todavía dedicarse á la coloni­
zación, ni á la inmigración oficial; pueden favorecer
la inmigración parcial. Según el concepto del Dr.
Pesce, en el Perú hay verdadero cainpo de acción
para los inmigrantes europeos ; él enumera los va­
rios ramos de industrias, comercio y profesiones
en las cuales el inmigrante puede encontrar su porHay favorable elemento para los agricultores,
cualquiera sea el sistema .que quieran adoptar;
se pueden introducir pequeñas empresas industria­
les V comerciales en todo el territorio peruano,
porque abunda el trabajo ; los oficiales y jornaleros
pueden ocuparse ya en las exploraciones agrícolas,
mineras, ya en los grandes trabajos públicos (ferro­
carriles, irrigaciones etc.; ciertas profesiones libe­
rales (médicos, químicos, preceptores, agrónomos
etc.) hallarían buena y provechosa acogida en estas
regiones.
Nuestra Obra. — Los Salesianos del Perú y Bolivia, como en todas partes, nos interesaruos según
nuestros alcances, por los inmigrantes de cualquier
nacionalidad que sean; educamos su juventud, en las
Escuelas de Artes y oficios y Agricultura, al par
que el idioma nacional, el hermoso de Castilla,
enseñamos francés, inglés c italiano.
Con ocasión del Congreso Salesiano de Coope­
radores se han tomado varias disposiciones á este
respecto. En Lima se ha nombrado como secretario
del pueblo á favor de los inmigrantes al Rdo. Carlos
Pane, Sac. Salesiano, y en la República de BolivU
al Rdo. D. José Reyncri en la ciudad de La Paz.
La república de I^livia va progresando cada día
más, y allí también la corriente inmigratoria no
tardará en ocupar esas inmensas regiones ricas en
minas y agricultura.
El gobierno de Bolivia ha formalizado un con­
trato con la Casa Speyer para la construcción de
mil ochocientos Kms. de ferrocarril á Puerto Pando
á Viacha y á Oruro . De esta ciudad se construirá
otra vía á Cochabamba, á Potosí y á Tupíza en el
término de seis meses.
Ya sabe que en homenaje al centenario á Santo
Toribio V como recuerdo del Congreso, además de
la primera piedra para.el templo de María Auxilia­
dora, se ha establecido en Lima una Escuela para
alumnos e.xtemos y en el Callao se está tratando
de adquirir un local para un Oratorio festivo y en
fin, la fundación de la Casa de Piura. A propósito
de esta nueva fundación, apenas terminaron las

ik

fiestas en Lima, pasé en tres días por mar á Piura
para organizar el Colegio y con el designio de ad­
quirir un local propio, apto para Escuela.
Hace apenas tres meses que funciona el colegio
y tenemos 130 alumnos externos. La Escuela está
muy bien encaminada y los alumnos bien disciplina­
dos. Las autoridades y cooperadores de la ciudad,
aprecian la obra y esperan mucho de los Salesianos .
En el Perú y Bolivia los Poderes públicos y los
Bienhechores apoyan y sostienen la obra Salcsiaua
y desean la fundación de otros y otros colegios; pero
la falta de personal nos impide la aceptación. Ku el
Cuzco en estos días se ha fundado \in colegio de las
Hijas de María Auxiliadora. En Bolivia el V. Ueyncri por encargo del Ministro de Instrucción íué á
Cochabamba para escoger un local para una nueva
fundación de un colegio Salesiano. Que Dios y
Maria, .\uxiliadora bendigan nuestra obra y S. R.
no se olvide de mandar refuerzo de personal, por­
que S. R. bien sabe cuánto necesitamos.
Le pedimos una bendición especial, oh amado
Padre, para todos los Cooperadores y Salesianos y
en modo especial para el que más necesita,
De S. R.
aí.m ov ob.mo. lujo,
CIRIACO' SANTINELLI,
Sac. Sal.'

LA M ISIÓN DEL CHUBUT
( Relación del P. B. Vacchina).
R-iw^oii (Chubut), Abril de 1906.

Amadísimo Sr. D. Rúa:
a varias veces, para satisfacer los deseos
impue.sto la tarea de
mandarle una relación detallada del
estado de la Misión; pero nunca he podido llegar
á una conclusión satisfactoria, debido á circun.stancias diversas, .\hora quiero llegar á todo
trance, pero le pido mucha indulgencia y mucha
paciencia : escribo á intervalos, casi á tirones.
Y con el Diario de la Misión á la vista para ser
más exacto y fiel, comienzo ab ovo, como lo he
hecho y a en el Rendimiento Oficial al Vicario
Apostólico, nuestro inolvidable Mons. Cagliero.
(\^J

L a C ruz del S u r — E l o rato rio fe stiv o —
U na nu eva M isa — "Una prueba dolorosa.
Llegamos al campo de nuestras fatigas el 3 de
Diciembre de 1904, día de S. Francisco Javier,
el gran patrono de los Misioneros. Empleamos

— 26o —
un mes en la confusión de arreglos y el
de
Enero del 1905 y a las Escuelas profesionales y
lo demás podía funcionar con perfecto orden y
regularidad.
Los locales no son, á la verdad, espaciosos, no
hay una turba multa de aprendices, ni se oye el
pitar de las máquinas de vapor, ni el chasquido
de las sierras eléctricas, ni el traqueteo del mar­
tillo sobre el yunque, ni siquiera se ve la anima­
ción de nuestras grandes casas de artes y oficios;
pero sí hay lo suficiente para representar una
casa salesiana en los principios de nuestra Pía
Sociedad.
Estudiantes no los hay aún, porque aquí y en
Enero estamos en plenas vacaciones otoñales.
Entre tanto, La Cruz del Sur », esparce á los
cuatro vientos la invitación al Oratorio festivo
y los programas para internado de indios y
niños pobres y externado de cuantos quieran
frecuentarlo en el próximo año escolástico.
Y a el Boletín ha hecho saber que La Cruz
del S u r »es nuestro periódico oficial en el Chubut,
que se escribe y se publica en la Casa central de
la Misión desde Enero de 1905 y añadiré
que ha encontrado muchas simpatías, debido
á lo cual, Dios mediante podrá hacer un gran
bien.
Pero á pesar de tan urgentes invitaciones, los
niños no vienen, todos los domingos y fiestas hay
carreras de caballos : el calor sofocante y las
frescas aguas del cercano mar y del cercanísimo
Chubut, los invitan á zabullir en las ondas. Será
menester inventar alguna bien extraña'. Fabrícanse doce mamarrachos, espantosamente gro­
tescos y se fijan en las calles con grandes letreros
de boticario, invitando á una representación de
muñecos que amaga ser estrepitosa. Acuden en
el acto los niños, ríen hasta reventar y hé aquí
el Oratorio definitivamente inaugurado y nu­
meroso.
Llega entre tanto de Buenos Aires un Maestro
patentado. Un maestro patentado, en el Chubut,
no es cosa ordinaria, y laC r«s del Sur lo anuncia
con bombo. De paso digo que este buen clérigo
es un fruto de nuestra casa de Viedma, donde
se educó desde niño. En marzo se abrían las
clases, con gran temor de no ser correspondidos;
pero estos temores fueron vanos, porque de las
30 escuelas del Chubut, las nuestras son las más
numerosas y florecientes. Buen empuje les dió
nuestro buen hermano el sacerdote D. José
Ciolfi, nativo del Chubut. Y o lo preparé á la pri­
mera comunión en 1893; en 1S95 entró en nuestra
casa de Almagro donde se decidió por el estado
eclesiástico : vino aquí á cantar su primera Misa,
visitar á sus parientes y predicar en el pueblo
donde ]>asó su infancia. Renuncio á describir
el contento y alegría de toda la población, es­

pecialmente de la colonia italiana. Es el primer
sacerdote del C h u b u t!
Pero, como dice la sentencia, extrema ga^ldii
luctus oceupat, al día siguiente se ahogaba en el
ancho Chubut el inolvidable hermano Boninó.
Había ido con el carro á coger agua para los usos
de casa.- Y o estaba ocupadísimo en no sé qué
cosa, cuando oigo la infausta nueva, y así como
estaba, corro al río. Toda la población había
acudido y a y llenaba la playa ; desde ahí pude
ver yo también el caballo y el carro arrastrados
por las ondas. El amado hermano no parecía.
Poco después llegaron los demás de casa, ato­
londrados y llorando. Ninguno permaneció
inerte, pero el hermano no se pudo encontrar;
seis días anduvimos con afán y dolor recorriéndo­
las playas en busca de tan amados despojos,
finalmente se nos dijo que flotaban en las orillas
del mar : corrimos y lo hallamos con el crucifijo
y el Rosario salientes ; el querido hermano había
buscado auxilio en Cristo y su bendita Madre,
su última esperanza. Pronto las campanas em­
pezaron su lúgubre llanto, se reunieron los ami­
gos y, llenadas todas las formalidades, lo lleva­
mos á su última morada. Su cadáver se reco­
nocía perfectamente, no hedía ni inspiraba el
horror de los ahogados.
Y a pues, el apartado Chubut tiene su bautismode sangre : sea fecunda semilla de generosos mi­
sioneros, de que tenemos tanta necesidad......
Bonino era sencillo, laborioso, piadoso y dócil;
se había confesado en el mismo día de su muerte
y aun me había dado cuenta de su conciencia y
de todo, mostrándose decidido y lleno de buena
voluntad. Así lo quiso Dios : E l nos le había
dado y El nos le quitó.
No debo pasar por alto que recibí numero­
sísimas visitas de pésame ; principiando por las
autoridades : mezquino consuelo, es cierto, para
tan cruel desgracia, pero que bien demuestra
el ánimo de la población con nosotros, lo que
nos la aficionó más.
F ie s ta s p a sc u a le s y p a tria s
decoración pontificia.

U na con-

No tardaron en llegar las fiestas pascuales y
nos esforzamos porque resultaran espléndidas
y provechosas, l^pléndidas fueron, mas prove­
chosas no tanto, por desgracia.
Después de las pascuales vinieron las fiestaspatrias de esta nuestra segunda Patria. Son
espléndidas, aparotosas, de universal alegría y,
afortunadamente, nunca falta la nota reh'^osa.
Este año eran para nosotros más espléndidas,
porque las había escogido para entregar á nues­
tro Gobernador una decoración que S. S. Pío X.



le había benignamente concedido en Setiembre
del 1904.
El 25 de Mayo, principal fiesta civil, á pesar
de lo sombrío de la estación despuntó de esplén­
dida luz y con albores de primavera. L a iglesia
estaba llena de personas de toda edad y condi­
ción ; al frente de todos, en sillas especiales,
estaban las autoridades, los tribunales, los ofi­
ciales, reunidos para el cantó del Te Dewn. Subí
al pulpito para la oración patriótica. El sacer­
dote católico no es extranjero en ningún país del
mundo; donde quiera puede con todo derecho
y con palabras, sentimientos é ideas natura­
les, ensalzar las grandezas de Dios y sus
beneficios á los diversos pueblos. Además, el apa­
rato, la gran multitud, las banderas des­
plegadas, el ambiente todo, saturado de pa­
triotismo, la casa de Dios, son circunstancias
capaces de inflamar los corazones más apáticos,
el temperamento menos entusiasta. Así pude ha­
blarles del sentimiento de la Patria, poniéndoles
delante los beneficios que han recibido del Se­
ñor de las naciones y demostrando que beatus
■ pofulus cujus est Dominus Deus ejus. También
había llegado el momento de hablar de la decora­
ción pontificia y pocos momentos después, la
áurea cruz brillaba sobre el pecho de S. E. el Sr.
Gobernador. Indescriptible fué el entusiasmo y
conmoción de todos : recordaré solamente que
la consorte del condecorado, piadosísima señora,
se puso pálida, y con los ojos inundados de sua­
vísimas lágrimas, apenas podía tenerse en pie.
Bendito sea el Señor, que también en este re­
motísimo jirón del mundo despierta tanto en­
tusiasmo una decoración del Papa.
Después de las fiestas religiosas vienen las
civiles en el palacio del Gobierno y nosotros to­
mamos parte importante con la banda y los
alumnos, que declamaron poesías y discursos :
con esto la Misión ganó inmensamente en amor
y estima de todos.
L a piedad se desp ierta — C la u su ra del año.
Ahora debiera hablarle del mes del Sagrado
Corazón y de sus triunfos sobre las almas, pero
lo omito por brevedad. Concluyóse con las 40
Horas y fué grandísimo el consuelo que experi­
mentamos nosotros y todos los católicos al ver
tan honrado á Jesús en el Sacramento de su
amor en un territorio donde viven tantos herejes.
A esta devota práctica debemos el que no hayan
avanzado tanto las Misiones protestantes.
Llegó el fin del año y á la presencia del Gober­
nador y de otros personajes se desarrolló el pri­
mer certamen catequístico, que tuvo muy feliz
éxito, como lo tuvieron todas las materias, de
modo que esto nos preparó y aseguró un por­

201



venir mejor. En agradecimiento de tan grandes
beneficios, cantamos un solemnísimo Te Deum
al tramontar del 1905, y tomaron parte todas las
Autoridades, nuestra comunidad y un inmenso
pueblo con entusiasmo y compostura dignas de
todo encomio.

Fachada de la Iglesia de María Auxiliadora • Madrid.
E l H o sp ital del B uen P a s to r — E p iso d io s
edificantes.
Mas es ya tiempo de pasar á otras obras, y
ante todo al Hospital del Buen Pastor. Aunque
pequeño y construido p>or el momento para solos
hombres, responde á la necesidad admirable­
mente por sus excelentes condiciones de venti­
lación, higiene y espacio, aun mejor que el de
Viedma. Y aquí merece una alabanza el P. Mario
Migone, que lo edificó, venciendo mil graví.^i ai
dificultades y privaciones y con enormes sacri­
ficios personales. Cúpome á mí el honor de inau­
gurarlo. Una vez abierto, no han faltado enfer­
mos de toda clase y religión, pero todos salen cu­
rados de alma y cuerpo. Merece particular

— 262 —
mención un joven holandés, protestante presbi­
teriano, según el decía. El clérico Cresta, su enfer­
mero desde el primer día, lo cuidó con particu­
lar esmero, tanto en el alma como en el cuerpo,
y como no tenía rancias preocupaciones, en un
mes se convirtió, fué bautizado sub condiiione,
confirmado y recibió los demás Sacramentos con
gran consuelo de su alma y de todos nosotros.
H oy es panegirista entusiasta de la Misión.
Poco después entraron dos indios adultos in­
fieles y en gravísimo estado. Un día, mientras
les explicaba la doctrina con el catecismo indio
del P. Milanesio, uno de ellos se echó á reír es­
trepitosamente : mis disparates en la lengua
tehndche lo alegraban. Este indio es muy in­
teligente y dio pronto cabida á la verdad ; por
él he sabido epi.sodios curiosísimos de Calfucurá,
Kamuncurá, Sayueque y Foyel, los cuatro per­
sonajes históricos de la Patagonia. En el bautis­
mo recibió el nombre de Domingo, en obsequio
de una familia de Nápoles, muy benemérita del
Chubut ; al otro lo llamamos Valentín. Ambos
pudieron recibir la confirmación y la Santa E u­
caristía.
Más tarde las autoridades nos mandaron un
suizo. Algunos individuos lo habían asaltado en
una taberna, y después de amarrarlo y obligarlo
á apurar no sé qué brevaje, lo desvalijaron, de­
jándolo libre de seguida, pero casi loco. Fué
curado diligentemente , descubrimos la trama
y con la ayuda del médico, le hicimos restituir
sus dineros y vestidos.
Otro recuerdo y basta. Un fulano, casi sin mo­
tivo y á sangre fría, le rasgó el vientre á un amigo
suyo con nueve puñaladas. Llevado á la cárcel,
se mostró ajeno á toda disciplina y tanto provocó
á un centinela, que éste le disparó su máuser,
llevándole la mandíbula inferior. La cabeza se
le hinchó monstruosamente y la boca parecía
una sanguinolenta caverna: hubo que arrancarle
á pedazos la lengua empodrecida y así al pre­
sente apenas emite inarticulados sonidos. Es
necesario limpiarlo y desinfectarlo tres veces al
día, operación larga y repugnante, pero que no
espanta al P. Cresta. Después de la operación
le da de comer : como no tiene boca, presenta
su garganta á manera de gigantesco condor y
el enfermero con un embudo ó un tubo, le su­
ministra caldo, huevos batidos, sopas ligeras.
Tantos cuidados le han conservado la vida, y
la caridad lo ha ajuiciado.
Co'uo ve. el Hospital produce sus frutos, pero
nos despoja de todo, nos hace escatimarnos en
todo : economizamos hasta en lo necesaiio para
quitarnas el hambre, la sed, y á pesar de la caridad
(lo los pocos acomodados del lugar, cada día nos
i educimos á mayor penuria y debemos multipli­
car los sacrificictó, tanto más, que pocos como

somos, también este año me será imposible aban­
donar la Misión para ir á mendigar á Buenos
Aires. Pero estamos alegres, que Dios es Dios,
y después de la carestía vendrá la abundancia.
La anhelamos para ampliar los locales, proveer
á lo más indispensable y hacer lugar á mayor
número de enfermos y abandonados.
Pero.... ¿y las Misiones ? Vamos á hablar de
ellas.
[Continuará).

TESORO ESPIRITUAL
Indulgencias plenarias concedidas á los Cooperadores
Salesianos para el mes de Noviembre.
1. ®El 21, Fiesta de la Presentación de María
Sma.
2. ®El 22, Santa Cecilia, virgen y mártir.
3. ®El día que se reúnan en conferencia.
4. ®Un día al arbitrio de cada cual.
5. ® El día del ejercicio de la Buena muerte.
Además nuestros Cooperadores ganan in­
dulgencia plenaria la primera vez que se con­
sagren al Sagrado Corazón de Jesús.
Además (y sobre esto llamamos la atención á
lodos los Cooperadores) todas las veces que los
Cooperadores recen 5 padrejiiiestros, avemarias
y glorias por la paz de la cristiandad y un
Pater, Ave y Gloria, según la intención del
.Sumo Pontífice, podrán ganar todas las indul­
gencias de las estaciones de Roma, de la Porciúncula, de Jerusalén y de Santiago de Compostela, con tal que se observe el decreto de
la Sgda. Congregación de Indulgencias del 7
de Marzo de 1678, que comienza Delatae saepius (i). Estas indulgencias se pueden ganar
en cuahiuier lugar y tiempo y son todas apli­
cables á las almas del Purgatorio.
Recordamos que para ganar estas indulgen­
cias, es preciso rezar todos los días un Paier,
Ave V Gloría en honor de S. Francisco de
Sales rogando según la intención del Sumo
Pontífice.
(i) V. Rt'frlamenio de los Cooperadores, Sumario
de las induígeiicias, ó el Boletín Saksiano de Eiiuro
1905. pág. 8 y sig.

* DE

NUESTRAS

fn d ia
Cuánta fe y cuántos idólatras.
I.
L a S em an a S a n ta en T a n jo re .
T an jore (Sauth India), 17 de A bril de 1906.

Amadísimo Padre Rúa:
Quiero darle algunas noticias nuestras. Gra­
cias á Dios, estamos todos bien, á pesar del
enorme calor, que aumenta cada día. Todo lo
demás va bien.
El P. Biebuyck pasa en las clases casi todo
el tiempo y con frecuencia presta su concurso
para acompañar el canto en las funciones pa­
rroquiales. El P. V i^ eró n comienza á hacer
clase y con frecuencia va á decir Misa fuera de
Tanjore en un carro tirado por vacas, como se
usa por a q u í: excursiones que entran en sus
gustos de Misionero. El clérigo Balestra se ocupa
principalmente de los niños del asilo y se en­
tiende magníficamente con ellos.
Pero como quiero decirle algo de nuevo, le
contaré las funciones de la Semana Santa. Hacia
las 3 de la tarde del Sábado de Pasión vemos
llegar á nuestra parroquia varios grupos de
gente. Eran cristianos que venían de los pueblos
vecinos para confesarse y hacer al día siguiente
la comunión pascual. Los dos celosísimos curas
de la Parroquia comienzan en el momento á oír
las confesiones. El número de los fieles va en
aumento ; de modo que al caer la tarde había
más de doscientos acampados al rededor de la
iglesia. Los dos confesores llevaron los confe­
sonarios á la plaza y allí, á la sombra de un árbol
y á la luz de la luna confesaron hasta la media
noche, ei ultra. Los que se iban confesando, no
se alejaban mucho, sino se distribuían en peque­
ños grupos por familias y tomaban un puesto
en la plaza sin tiendas ni frazadas. Fue para
nosotros un espectáculo nuevo é interesante el
ver tanta gente esparcida acá y acullá y dormir
sabrosamente. Parecíanos un campo de batalla
después de horrible matanza : pero todos dor­
mían á pierna suelta.
A las 5 de la mañana, cuando tocaron el Ave
María, todos se despertaron, y arrodillándose,
vueltos hacia la iglesia, rezaron devotamente sus
oraciones : ¡Qué cuadro estupendo! son estas
las bellezas de nuestra fe, que en su misma sen­

i

MISIONES*

cillez, está llena de sobrehumanos encantos.
A las 6 comenzó la Misa y tuve yo la fortuna de
ser el celebrante. Después de la bendición de
los Ramos, me avancé, como es costumbre, á
distribuirlos al pueblo : dos hombres robustos
apenas lograran abrirme paso á través de aque­
lla masa apretada, arrodillada devotamente en
tierra. Extendían todos la mano para recil>ir
la palma, la besaban y luego se la estrechaban
al pecho con la devoción más grande. Á la co­
munión experimenté otro gran consuelo : las
partículas distribuidas pasaron de 400. Al ver
aquellos hombres robustos, negros, medio des­
nudos, aquellas mujeres vestidas con los más
vivos colores y con las orejas, narices, manos y
brazos sembradas de zarcillos, pendientes, per­
las y anillos, en fin de gente ruda y campesina,
y sin embargo tan llena de fe ^^va, yo pensaba
en la Omnipotencia y Bondad de Dios, que sabe
atraer á su conocimiento y amor aun los corazones
más rudos y semisalvajes, y para todos tiene
abiertos los tesoros de su gracia y su paraíso.
La función terminó con la Bendición del Smo.
Sacramento. L a iglesia estaba requetellena y
más de 500 personas no habían podido entrar;
pero estaban firmes en la plazuela al rayo del sol
asistiendo con ejemplar devoción á la función
que duró cerca de dos horas.
Estas manifestaciones de fe y piedad se reno­
varon durante todos los días de la Semana Santa.
La noche del Jueves al Viernes hubo adoración
y íué muy num erosa; en la del Viernes se re­
presentó la Pasión de Nuestro Señor Jesucristo.
El lugar de la representación fué la vasta plaza
que se encuentra delante de la iglesia. La mul­
titud era inmensa : no estaban solos los cris­
tianos, sino también muchos paganos que sue­
len acudir todos los años en esta circunstancia.
El sagrado drama empezó á las 9 y terminó á
las 2V2 de la mañana. Y no había bancos ni
sillas : todos estaban sentados en tierra y así es­
tuvieron más de seis horas. Terminada la repre­
sentación, muchos hubo que no se movieron de
allí, cambiaron simplemente posición, y de sen­
tados, se tendieron tranquilamente y durmieron
muy deliciosamente en medio de la plaza. Otros
fueron á buscar un puesto más cómodo, pero
siempre en la plaza, que fué de nuevo convertida
en vastísimo dormitorio.
Las funciones del Domingo de Pascua fueron
solemnísimas. A las 3 de la mañana Degó procesionaimente una peregrinación de los lugares


vecinos, precedida de la música y trayendo es»
tatúas, cruces y banderas. A las 4 celebró el
P. Biebuyck en la plaza y en un lugar eminente,
para los peregrinos y los que se hallaban allí
desde la tarde anterior. Por la tarde hubo otra
procesión. A las 9 comenzó la representación
de un drama sobre S. Eustaquio. Habían pre­
parado un palco en la plaza y todos podían asis­
tir gratuitamente. Lo especial de este drama es
que dura varios días. En la tarde de pascua co­
menzó á las 9 y terminó á las 2 de la mañana ;
el lunes hubo vacación. A yer á las 7 de la tarde
se continuó la representación y duró hasta las
2 de esta mañana y no está terminada todavía ;
terminará tal vez esta noche.
El pueblo gusta inmensamente de estos dra­
mas sagrados, que son ciertamente un gran
medio de hacerles mucho bien. Y en efecto se
cuentan muchas conversiones producidas por
haber contemplado estas escenas.
Sin embargo, no todo cuanto vemos en tomo
nuestro es consolador. Ayer llevamos á nuestros
alumnos á una merienda de campo : y á la vuelta
fuimos penosamente sorprendidos á la vista de
tantas pagodas y altares dedicados á las falsas
divinidades. Contamos más de 30. A esa hora
estaban todas abiertas y entraba mucha gente ;
vimos centenares de lámparas encendidas;
oímos las voces y gritos discordes de tantos in­
felices idólatras. Una vez más nos hemos con­
vencido de que estamos rodeados de la idolatría
y el paganismo.
Ruegue, amado Padre, niegue porque sus
hijos de la India tengan el consuelo de arrancar
numerosos adoradores al demonio y extender
en estas tierras el reino de Jesucristo con el
ejemplo y con la palabra, trabajando y enseñan­
do y educando muchos niños á la virtud y á la
verdadera religión.
Con los respetos filiales de nuestros catequis­
tas y alumnos, comprendidos los de las Escuelas
parroquiales, reciba el homenaje reconocido de
nosotros, sus primogénitos y de los Sacerdotes
de la Parroquia.
Su dev.mo hijo in C. J.
JO R G E TOM ATIS Pbro,
Misionero Salesiano.
II.
T e n a c id a d de lo s Indios en su s creencias.
E l bautism o de un niño del A silo .
Taiijore, 3 de Junio.
Amadísimo Padrty
Sentimos la necesidad de escribirle de cuandp
en cuando para darle noticias nuestras y .so­
bre todo para encomendamos á sus oraciones.

2Ó4



Cuando pensamos que allá en Turín, en el San­
tuario de María Auxiliadora, nuestros Supe­
riores, hermanos y tantos niños ruegan por nos­
otros, nos sentimos más animados y más fuer­
tes para llevar con valor los trabajos y sufri­
mientos anejos á la vida apostólica en estos
climas ardientes. Hace más de un mes que te­
nemos 38 y 40 grados de calor : ahora que escribo
debo tener el papel secante bajo la mano para que
el sudor no moje el pliego. L a tierra está reseca
y abrasadora, y los árboles sufren la sequía. He­
mos pasado la primavera sin advertirlo: no vi­
mos árboles florecidos, ni rosas ni violetas, nada
de cuanto en Europa hace esta estación la más
bella del año. En marzo algunos árboles dejaban
caer sus hojas todavía verdes, empujadas por
atras que salían; algunos estaban completamente
desprovistos de yemas, mientras el tamarindo
brindaba y a sus bacas llenas de carne. Cerezas,
duraznos, peras, manzanas, uvas, son frutas
completamente desconocidas en estas regiones.
En uno que otro jardín se cultiva una vid por cu­
riosidad, pero sus racimos no maduran. No hay
pues, vino ; pero en cuanto á esto, paciencia : lo
peor es que ni siquiera hay agua buena, ya que
la única es la que se recoge de las lluvias en
grandes pozos, y sirve no sólo para beber, sino
para cocinar y bañarse, lo que hacen los Indios
con muchísima frecuencia. El agua es, pues,
turbia, y para bebería, es preciso ó filtrarla ó
dejarla depositar una hora antes de servirse.
Pero no es esto lo que amedrenta al Misionero:
lo que le apena es verse en medio del paganismo
triunfante.
Cuán diferente es nuestra misión de las de
los Salesianos de América ! Allá el Misionero
corre en pos del salvaje, lo encuentra, le habla,
y él escucha y se convierte : así leemos con gran
edificación los hechos de estos apóstoles en medio
de los salvajes. Aquí en la India no encontra­
mos pobres y sencillos hijos de la floresta, sino
los más obstinados adoradores de los dioses
falsos y mentirosos. H ay más de 250 millones
en pueblos y ciudades enteramente paganos.
No ha mucho tuve que hacer un viaje por
las costas del Golfo de Bengala. Pasé en tren
por varios lugares, pero no vi dondequiera-sino
pagodas y mezquitas de musulmanes. La gente
llena la estación, pero son todos paganos y
llevan sobre la frente la marca de su religión y
su casta. Mi compañero de viaje me decía que
en muchos pueblos de esos no hay ni un cristiano,
son todos Brahmines ó Musulmanes : y era un
viejo misionero. Antes de llegar á la populosa
ciudad de Nayore, \imos blanquear cuatro
torres desde lejos : eran las de una mezquita y
no e.xiste en la ciudad ni un cristiano siquiera.
Y estos idólatras, especialmente los Brahmines



25 Í

son muy celosos de su casta y religión y ¡ay del
que osara abandonarla ! perdería la casta y sería
considerado como paria. Pobre gente ! se creen
los más civilizados del mundo, y su religión la
más perfecta de todas ; por esto desprecian al
Europeo y al M^ionero. Por esto las conversio­
nes entre los Brahmines son rarísimas ; ya menos
raras entre las clases inferiores y frecuentes en­
tre los parias, pueblo infeliz que se considera
como el esclavo de las clases superiores.



y \’a estábamos todos reunidas en la iglesia para
la ceremonia, cuando de improviso sobrevino
un nuevo contratiempo, que nos oliligó á diferir :
el pobre muchacho estaba desolado, é implo­
raba á gritos el bautism o: claro es que desde
aquel día tuvo el de deseo !
H oy finalmente, 5 de Mayo, pudo satisfacer
sus ardentísimos anhelos. Es el primer pagano
que hemos tenido la fortuna de bautizar: y si
viese, cuán contento está; no .-^abe cómo mani-

In terior de la Ig le s ia de M aría A u x ilia d o ra en M adrid.
Pero si bien raras, de cuando en cuando se
o!)tienen algunas convei'siones por la miseri­
cordia del Señor, y nosotros, amadísimo Padre,
hemos ya tenido el consuelo de anunciarle el
¡mutismo para el día de Pentecostés, de uno
de nuestros asilados, joven de 12 años, per­
teneciente á la casta de los Callers (que significa
ladrones), casta la más alta después de los Brah­
mines, á la cual pertenecen los príncipes tam­
bién. Hacía cuatro meses que lo habíamos reci­
bido ; estudió seriamente el catecismo y hacía
:ilgún tiempo que apenas me veía, decíame ha­
ciéndose en la frente la señal de la cruz: ¿Cuándo
me bautizarás ? Xo pocas fueron las dificultaues. Debía ser bautizado el día de Pentecostés

feátar su gratitud. Se le puso el nombre de Pedro,
en honor del Príncipe de los Apó.stoles, í}ue en
Pentecostés comenzó su fructuosa predicación.
Ah ! que el Primer Jefe de la Iglesia nos alcance
del Señor repetir con frecuencia estas conmove­
doras ceremonias !
H oy también hemos recibido un joven de
20 años, que nos recomendaron encarecida­
mente los Misionero.s de S. Calógero de Milán,
los cuales atienden la diócesis de Hyderabad.
Este joven mozo desea continuar sus estudios y
hacerse hijo de D. Bosco. Que sus votos sean
pronto coronados, tanto más que sabe muy
bien el talmud y el inglés y podría ayudarnos
mucho.
* *

— 266 —

El Sr. Cura presenta á V , R . sus obsequios.
con sus oraciones, y dígnese encomendarnos
iCuántas ocupaciones no pesan sobre é l ! Pasa
también á las de nuestros cooperadores.
todo el día confesando y pacificando los conten­
Bendígame junto con estos hermanos, coo­
dientes, pues éste es uno de los trabajos del Mi­ peradores y alumnos y créame
sionero de la India. Todos los días llega un grupo
Su devmo. hijo in C. J.
de paisanos en pleito, se presentan al párroco
JORG E TOMATIS.Pbro.
exponiendo á gritos y todos á un tiempo, sus ra­
Misionero Salesiann.
zones, y 61 para hacerse oír, tiene que gritar más
que todos. Y á veces esta ocupación dura tres y
cuatro horas ; no es raro que vengan á las manos
&
y á 61 toca ponerlos en paz. Y cuando esto dura
todo el santo día !.... Aquí en lugar de ir al juez,
van al párroco, cuesta menos y es más ventajoso
entre los cristianos.
Desde hace dos meses no cesa la multitud en
la plaza de la iglesia. Es el tiempo de los matri­
monios. De los lugares vecinos vienen familia.s
El I " Oratorio festivo en la China.
enteras y se acampan, como y a dije, alrededor
(Carta del P. Versiglia al Sr. D . Rúa).
de la iglesia, durante 15 ó 20 días, y en todo este
tiempo toda la familia acude al catecismo ; padre,
madre, hermanos. Cada día son 30 ó 40 y repiten
Macao, 6 de M ayo de 190S.
el catecismo todo el día y esto dura á lo menos 15.
Cuando están suficientemente instruidos, el
Amadísimo Padre,
párroco fija el día del matrimonio, en el cual re­
^^Vuisiera que la presente tuviera la rapidez
ciben los Sacramentos y se bendicen las nupcias.
del telégrafo para comunicarle una no­
Las fiestas nupciales son sencillísimas : el día
solemne suelen comprar dos ó tres perras de ticia consoladora el día de su Santo. Pero el
flores, que los novios se acdmodan en el som­ no poderle dar la nueva para tal día, no quita la
brero y ahí me los tiene preparados. Un buen 'realidad del hecho, y es que ayer, primer do­
plato de arroz constituye el almuerzo, pero mingo de Mayo, hemos podido añadir á la pe­
aun en este día los hombres comen separados de queña obra del asilo, un Oratorio festivo para
las mujeres, las cuales lo hacen siempre después los portugueses y macaenses, en la vecina pa­
y en un lugar posiblemente apartado. Los algún rroquia de S. Lorenzo.
Los principios han sido muy humildes ; lo
tanto acomodados hacen en tal día ostentación
hemos inaugurado apenas con 21 niños, pero
do sus joyas. He visto algunas novias cargadas
de brazaletes y zarcillos y aun con graciosos no es poca cosa, teniendo en cuenta los obstácu­
los que se nos pusieran delante, el primero de
adornos en la nariz, donde tenían un verdadero
los cuales es que nadie tiene idea de lo que sea
sartal de perlas y diamantes.
Amado padre: ¿podré añadir todavía algunas un oratorio festivo, y de aquí la natural descon­
líneas sin temor de hacerle perder tiempo que es fianza y el deseo de observar mejor antes de
tan precioso, especialm enteáS. R.? Debo decirle prestarnos ayuda. El segundo es la poca práctica
que tenemos del portugués, lo que nos impide
que dos de los nuestros han debido partir para
la montaña. El limo. Sr. Obispo ha querido presentarnos con desembarazo. En tercer lugar
ofrecerles un clima algo más fresco, donde pu­ (y quisiera equivocarme) el habernos dedicado á
dieran restablecerse de una indisposición pro­ los Chinos, hace que sobre nosotros reverbere
ducida por el calor; afortunadamente no es cosa la indiferencia 5'desprecio con que los Europeos
grave, pero como ve, nuestro personal es dé­ de nacimiento ú origen miran á los Chinos. A
bil, no sólo en número, sino también en ro­ esto se añade la calamidad del tiempo, que desde
bustez. Créame que nos hallamos en verda­ la mañana hasta las 3^2 de la tarde se mantiene
dera necesidad de un refuerzo para hacer frente lluvioso, impidiendo venir á muchos.
De todos modos, los primeros obstáculos están
á tanto trabajo, y no vernos en peligro de
no jx)der ir adelante. Se necesitarían algunos afrontados, y afrontados bajo los auspicios de
clérigos, inteligentes y robustos y prontos al María Auxiliadora en cuyo mes estamos y á
sacrificio; ésta es una disposición indispensable quien pedimos este favor : esj>eramos, pues, que
l>ara poder luchar con el clima y habituarse la obra tendrá pronto desarrollo.
á los alimentos y afrontar las fatigas que nos
El Instituto procede bien: 34 son los huérfanos
aguardan.
asilados y después de solo un mes de aprendizaje,
Entretanto, sosténganos, amadísimo Padre, saben hacer alguna cosa. Por ejemplo, entre



207

los sastres hay 3 que hacen un par de pantalones
sin que el maestro intervenga : los zapateros
echan una suela con media renionta, y en ge­
neral estarían más adelantados si la falta total
de instrumentos no se opusiera á su adelanto.
Instrumentos de calzado á la europea, no se
encuentran aquí, aunque se paguen con un ojo
de la cara. Por esto he escrito al Rvmo. P. Rocca
j'idiéndole una provisión que confío esté ya en
viaje, porque así es imposible continuar. Figúrele
que por leznas tenemos clavos ensartados en un
pedazo de palo. Intentamos mandar hacer al­
gunas, pero los cerrajeros no saben tempÍM el
acero. Todo el calzado no chino, se importa de
la América y no hay zapateros á la europea.
Por la misma falta absoluta de material, no
hemos podido abrir el taller de cerrajería... con­
fiamos, sin embargo, que dentro de algunas se­
manas se hayan vencido las dificultades.
Y basta por a h o ra : todos estamos bien, sólo
que el calor ya se hace sentir : ahora hay 32 gra­
dos á la sombra.
Bendíganos, amado padre, y créame
Su ob.mo hijo in C. J.
LU IS V E R S IG L IA , Pbro.

B iioteca Agraria Solariana
PU BLICACIÓN M E N SU A L

dedicada al fomento de la Agricultura moderna
Dirección y Admiaístracióo; ARREBOLERA,

18-SEVILLA

Tomos X X IX y X X X . — V iticu ltu ra , (se­
gundo volumen) por Don M i g u e l S á n c h e z .
Un tomo de 202 páginas, ilustrado. Kn
rústica 3,25 pesetas. Encuadernado 4,75.
Tomo X X X I. — E stu d io s A gro n ó m ico s.
F ija c ió n del nitrógeno aéreo por la aven a,
por Don B e r n a r d o G i n e r A l i ñ o . Un
tomo de 69 páginas. En rústica, 1,25 pesetas. Encuadernado. 2,50.

L





BIBLIOGRAFIA.
Nociones de Derecho usual por D. Mariano Rodrí­
guez Miguel, editado en la Casa de Hijos de San­
tiago Rodríguez. — Es un curioso librito en 8", cuyo
ameno estilo, sencillo lenguaje, limpia impresión é
interesante ilustración, declaran un gran talento
pedagógico y educador de la infancia, que demuestra
en práctica que hasta en la escuela elemental se
puede (y debe) introducir el Derecho.— 4,50 ptas.
la docena, en España.
Desde leíanos tierras. Galerías de Narraciones ilus­
tradas para la Juventud, coleccionadas por un 1*.
de la Comp. de J. {Herdcr ib.). — Hemos reci­
bido: Tomo III Los Hijos de Matia, cuento del
Cáucaso, traducción del P. J. Spillmann S. j., 4
grabados. — Tomo VII, E l Cautivo del Corsario,
por F. S., 4 grabados. — Tomo VIH, Los Her­
manos Coreanos, por el P. J. Spillmann S. J., 4
grabados. Recomendamos galerías tan bellas é in­
teresantes.
Herder. Las Buenas Novelas. Una víctima del se­
creto de la Confesión por el P. J. Spillmann S. J. con
12 ilustraciones. En 12® (VIII y 378 pág.) 2» edic.
En rúst. Fr. 3 ; encuad. lujosam. en media tela 3.75.
Nubes y Rayos del sol por el nii.smo autor, 13 ilus­
traciones; 2* ed. En 12 (VI y 372 pág. Fr 3 y 3.75.
Oficio del Sgdo. Cor. de Jes. por Fr. Luis Moreno^
En 24. 13 por 8 cm. (VIII y 394 pág). En rúst.
Fr. 1.50. En tela, cortes encarnados, 2 ; badana
acolchonada, cortes dorados 3.75.
Lecturas católicas de Sarria N"* 145 y 146 Jul. y
Ag. de 1906: Cuentos Morales por M. Cherull'.
Biblioteca Agraria Solariana. Los Encalíptus. Acli­
matación y desarrollo, especiulmeiite en la.s clases
glóbulos y resiníferos, por D. M. J. 0,50 pías.
Tomos XL y XLI Guía para elevar las tierras á
gran fertilidad y conservarlas en ella por el Cuv. i ). j ua ti
Bonsignori, Director de la Colonia Agrícola <le
Remedello .Sofia ÍBrescía-Italia) 2“ volumen. I'iec.
Rúst. 3.50. Encuadernado 5.00 pts.

GRACIAS
d e M ^ r i a A u x ilia d o r a .
NÓ9 ten em o s la p ersuasió n de qu e, en la s v icisitu d e s d olorosas d e lo s tie m p o s que
atra vesa m o s, no nos quedan m ás co n su elo s que lo s d el C ielo , y en tre e s to s , la pod erosa
p rotecció n d e la V irg e n b en d ita, qu e fu é en tod o tiem p o el A u x ilio d e lo s C ristian os.
P ío X.

G ra c ia insigne de M aría A u x ilia d o ra .
Durante catorce años tuve la desgracia de
periler seis niños, por causas que los Sres. Mé­
dicos nunca pudieron puntualizar: unos morían
al nacer, otros á los pocos días, hasta que al
fin. poniendo toda mi confianza en la Virgen
milagrosa de Don Hosco, le ofrecí que, si la
séptima criatura (pie Dio.s me concediera, huIm'sr toiiitlo prós[)cra vida, visitaría su San­
tuario de Santa Tecla, dejando • una limosna
pai a las Obras Salesianas; publicaría ese mi­
lagro en el Boletín Salesiano, para honra y
gUiria de María Auxiliadora, y me haría tam­
bién Cooperadora Salesiana. A su debido tiempo
e:ii[)ecé una Novena en honor de la misma
\ irgen, y calxilmente en el último día se veriiicü ai nacimiento de una lindísima niña, que
ahora está gozando éptima salud. En agrade­
cimiento á tan bondadosa Madre Celestial, le
lii- [Hiesto á .mi niñita el nombre de « María
lid Milagro. »
Sirva este portentoso suceso á todas las
personas (pie se sientan atribuladas ó necesi­
tadas, para (pie pongan toda su confianza en
nuestra amaiUísima Madre, María Auxiliadora,
3’ acudan siempre con fe á la que es Salud de
los enfermos y Esferansa de sus hijos devotos.
COMCKI’CIÓN VlL.\NOV.\ DE CoRTÉS.
TunaCiUepwjuc (Méjico), Kiioro 7 de 1906.

el cual la dejó sin habla y paralizada la mitad
del cuerpo, y fué declarada, al instante de llegar
los médicos, perdida. Recurrimos á instancias
de una amiga nuestra á María A uxiliadora:
prometimos publicar la gracia en el Boletín
Salesiano que la misma amiga nos hizo co­
nocer, si devolvía la salud á la enferma. Y con
sorpresa de todos los que la rodeaban y de
los mismos médicos, los cuales habían dicho
que no llegaría á pasar la noche con vida,
seguía día á día mejorando ; pero á los quince
días de enfermedad una fuerte complicación
volvió á poner á la enferma en los últimos
extremos. Fué requerida una hueva consulta y
los médicos deciaron el caso perdido y volvieron
á decir que no había esperanza de salvarla.
Entonces invocamos con toda fe á la que
es salud de los enfermos, María Auxiliadora
nuestra buena madre, y nos escuchó. Esta fué
una nueva sorpresa para los médicos y cuantos
la vieron. Ahora camina, habla y está resta­
blecida.
Con el corazón lleno de gratitud y recono­
cimiento hacia una madre tan poderosa pu­
blicamos esta gracia en honor y gloria de tan
bondadosa madre, como lo [irometímos y adjun­
tamos una pequeña limosna.
PR Ó .SPERO S C H I.\ F F IN O

É H iJ A .

Buenos Aires, 10 de Marzo de 1906.

G ra c ia sin gular.

G ra c ia de M aría A u x ilia d o ra .

El día 27 de Febrero del año pasado fué
atacada repentinamente la señora Luisa H. de
Schiatfino, de un ataque cerebral fulminante.

Después de dos años de cruel enfermedad
al estómago, durante la cual fui visitada por
cuatro de los más afamados médicos de la Ca-



2Ó9

pital, especialistas en esa enfermedad, sin éxito
alguno, por fin el último de los doctores deli­
bera ser necesaria una operación.
Mis queridos Padres no pueden resignarse
á que me someta á ella sin antes acudir á la
querida Virgen de Don B osco; en el solo caso
de que esta benditísima Madre no se dignara
eschuchar nuestros ruegos, se someterían con
iiiuchísimo pesar al mandato del médico.
Hacemos todos ios de la familia la promesa
de enviar una pequeña limosna al Santuario
de la Sma. Virgen en Turín, y hacer pública
la gracia en el BoleHii Salesiano.
Además prometo hacer la Sma. Comunión
todos los 24 de cada mes, en honor de María
Auxiliadora.
Pronto me vi mejorada de mi grave do­
lencia, y hoy, completamente restablecida, sin
necesidad de operación alguna, cumplo con
grandísimo júbilo y gratitud de mi alma todas
las promesas hechas á esa dulcísima Madre..
J o s e f i n a L. V o l p i .
Las Piedras, julio 24, 906.

Las Palmas. — Habiendo sufrido una dolorosa
operación, se me fijó un dolor muy grande á
un lado de la cintura, que no me dejaba mover
los pies; y á pesar de haber cicatrizado muy
bien la parte operada, el dolor permanecía con
la misma intensidad; recurrí á las medicinas,
pero pasaban semanas y semanas y el dolor
siempre fijo sin dejarme mover; en tan doloroso
estado, llegaron á mi noticia los grandes favores
dispensados por María Auxiliadora á los que á
su amparo se acogen; aplicándome entonces á
la parte dolorida una medalla de dicha Señora,
empecé un novenario, prometiéndola, si curaba,
dar publicidad á tan gran favor; no se hizo
esperar el tiernisimo corazón de tan bondadosa
Señora, pues, al fin de la novena, ya podía
pasear por la habitación , con admiración de
cuantos me veian; hice un segundo novenario
y entonces la cura fué radical. ¡Gracias, bon­
dadosa Madre!
F l o r e n t in a R o d r íg u e z d e G il e .
M a yo d e 1906.

Chosmalal. — Habiendo yo sido quebrado
en tres costillas de mi cuerpo, que me creí á
las puertas de la muerte, y habiendo invocado
con todo corazón á María Auxiliadora por que
en el término de veinte dias pudiese trabajar;
efectivamente en el término predicho he sido
capaz de gobernarme por mí mismo; ofrezco á



esta dignísima Madre Inmaculada cinco pesos:
los cuales remito con los Padres Misioneros Salesianos: y mil gracias a María Auxiliadora.
J o s é S.anto s S e p ú l v e d a .
M a yo 3 d e 1906.

Asuncióa. — En diferentes circunstancias asistía
á dos enfermos de gravedad y no era fácil re­
cibieran el Sacramento de la Penitencia; sentí
que el corazón se me oprimía de pena con el
temor de que aquellas almas se presentaran ante
el Juez Supremo sin que antes se hubiesen re­
conciliado con É l ; entonces acudí con la mayor
confianza á la poderosa Auxiliadora de los Cris­
tianos, pidiéndole que no abandonara á aquellos
hijos suyos en sus desgracias, prometiéndole
que en su obsequio había de oír una Misa en
la que comulgaría, como también dar como li­
mosna diez pesos á la Congregación que la
tiene por su patrona. La milagrosa Virgen no
desoyó mis humildes ruegos y ambas personas
recibieron los auxilios espirituales y murieron
santamente edificando así á todos los que las
rodeábamos.
Agradecidas á tantos favores, hago pública
esta manifestación, cumpliendo con las demás
promesas y exhortando á los fieles á que en
sus tribulaciones acudan á María Auxiliadora,
pues esta bondadosa Madre no deja de consolar
á sus hijos en todas sus necesidadesi
R am o .n a G o n z á l e z .
Julio 6 d e 1906.

Guatemala. — Encontrándome con síntomas
de una enfermedad grave y penosa, recurrí con
toda confianza á la protección de la Santísima
Virgen bajo la advocación de María Auxiliadora:
recé la novena en obsequio suyo, me puse al
cuello su bendita medalla y santo escapulario,
prometiéndola si me alcanzaba la salud, publicar
esta gracia por medio del Boletín Salesiano.
Hoy han desaparecido estos sintoma.s, estoy
curada, y el doctor (que ignoraba la promesa
que yo hiciera á la Virgen Santísima) afirmó ser
obra de un milagro esta curación.
¡ Bendita sea María Auxiliadora!
Jesús G o n z á l e z .
Julio d e 1906.

Sarriá (Barcelona), — Por mucha devoción que
profesemos á la Augusta Madre de Dios, María
Auxiliadora, nunca llegaremos á profesar la que
ella se merece.
¡Oh si todos los hombres conociesen la bondad
del Corazón de María, con cuánto mayor ardor
lo amarían y con cuánta más confianza lo invo­
carían en todos sus necesidades!
María es verdaderamente el Auxilio de los
cristianos, ó más bien su Santa Madre; María es

— 270 —
infinitamente misericordiosa para con los peca­
dores, y esto muchas cosas lo prueban y una
de ellas entre tantas es que, en la historia de
19 sip^los no se ha oído nunca que haya desa­
tendido, ni siquiera una sola vez, las fervorosas
súplicas de los que recurren á ella con verda­
dera devoción y firme confianza de obtener de
ella lo que le piden si les conviene para el bien
de sus almas.
lista RTan verdad la experimenté yo mismo
no hace mucho tiempo. Pues me hallaba grave­
mente enfermo, aunque sin permanecer en ca­
ma no obstante sufría con gravedad.
Y en efecto : Me encontraba con tan pocas
fuerzas, que apenas me podía mover sin hacer
grandes esfuerzos.
Pero yo no desmayando por esto, me aconsejé
con el Padre confesor y acordándome de la gran
misericordia de nuestra gran Madre, María Au­
xiliadora. me propuse hacer una novena en su
honor durante nueve días y ofrecerla durante los
mismos, una comunión en los dias que tenía el
permiso para comulgar.
Al concluir la susodicha novena, no es para
decir la mejoría que sentía en mí; pues ya podía
ir al estudio y participar de la vida común como
los demás.
A hí i)ues le suplico, se digne publicarla en el
Rolctln SafesianOy á fin de que se aumente cada
•<lia más y más la devoción hacia tan buena
Madre.
F. M.
Las Palmas (Oran Canaria). — Mt esposo se
•encuentra ausente y me he visto en grandes
necesidades. En mi aflicción me dirigía María,
prometiendo que si á los pocos días me socorría,
luirla publicar dicha gracia. No se invoca en
vano á María, pues recibí la cantidad que pedía,
y .cumplo lo prometido, dando á la vez una pe­
seta para su fundación en Las Palmas de Gran
Canaria.
L. C. M.

g de 111H0 d e igofi.

**
Mercedes Llorcns da 5 pesetas á María Auxi­
liadora y 2.50 para una mi.sa á la misma Virgen
por un favor recibido, deseando se publique la
gracia,

** *
Encontrándose mi padre gravemente enfermo
recurrí á Marta .Auxiliadora ofreciéndole cinco
pesetas y publicar la gracia en el Boletúi si ob­
tenía la salud : otorgada la gracia cumplo la
promesa.
F r .\n cisc .\ P é r e z .

•'!«

ífí
Prometí á María Auxiliadora si me ponía
buena de un sarampión muy fuerte que he te­
nido, publicar la gracia en el Boletín Salesiano
y dar dos pesetas en acción de gracias, lo que
hoy cumplo muy gustosa, por estar completa­
mente bien.
P.^^z R o b le s Ig l e s ia .

4 d e ágoslo d e 1906.

Quedo agradecido á María Auxiliadora por
dos favores recibidos y entrego 3 pesetas para
cooperar al esplendor del culto que se le tributa.

**»

H e r m in io M o t o s .

Entrego 25 pe.setas en testimonio de gratitud
á fa siempre auxilio de los Cristianos por va­
rios favores recibidos por su mediación.

***

Q u it e r ia A l ia g a .

Da una limosna por una gracia señalada que
alcanzó de nuestra Santísima Madre,

*

J o sé A l ia g a M o t o s .

*

*

Remito 46 pesetas producto de limo.snas en­
tregadas por Dn. José Aliaga, Dn. Juan P. Pérez.
Dña. María Pérez Motos agradecidos por varios
favores recibidos.
H e r m in io M o t o s .

Ciudadela (Menorca). — Una niña de esta pobla­
ción tuvo la mala .suerte de dislocarse una
pierna. El médico representó á la familia el
peligro que corría la paciente de quedarse coja
y defectuosa, por la dificuldad que ofrecía llevar
el hueso á su propio sitio.
En su devoción á María Auxiliadora comenzó
la familia de la niña una novena á tan bonda­
dosa Madre, y precisamente el día último, por
una operación .sencilla del facultativo, se le hizo
la cura que salió maravillosamente bien.
La familia desea que se haga constar en el
Boletín Salesiano su gratitud á la Madre de Dios,
que intercedió sin duda para el buen éxito de
la perfecta salud.
Junio

13 d e

igo€.

Un Cooperador.

Las Palmas (Gran Canaria). — Teniendo un
asunto muy complicado que me traía disgusta­
dísimo. lo puse en manos de mi buena Madre
María Auxiliadora, prometiéndole que si el asunto
se arreglaba, daría una limosna de veinticinco
pesetas para la fundación saleslana en Gran
Canaria y haría publicar la gracia en el Boletín
Salesiano.

IW
— 271 —
Doy gracias á María Auxiliadora por haberme
concedido lo que pedia y cumplo mi promesa.
B ernardo D o r este.

***

— Mi madre Dña. M* del C. Alemán se
hallaba gravemente enferma y abandonada por
lo tanto de la ciencia médica; como buena cris­
tiana le fueron administrados los Santos Sacra­
mentos. En tan supremo trance recurrí á la que
es salud y auxilio de los que la invocan, pidién­
dole que me ayudara y ofreciéndole veinticinco
pesetas para la fundación Salesiana en la Gran
Canaria. Apenas hice la oferta, comenzó á me­
jorar, y á los pocos días puede abandonar el lecho.
A n to n io A l v a r e z A l e m .\n (Pbro.).
La Mesa (Colombia). — A María Sma. debo
multitud de favores, entre los cuales el haberme
salvado varias veces de gravísimos peligros, ha­
berme procurado buenos negocios, y sobre todo
el haber sanado á mi esposa de un agudísimo
é incurable dolor en un brazo. Además, hallá­
base en mi casa una pobre mujer, manca de un
brazo y con una pierna tan bárbaramente he­
rida, que la infeliz lloraba y casi se desespe­
raba de verse inútil, pues los remedios no le
hacían. Aconsejárnosle encomendarse á María
Aux. y rezamos por nueve dias tres avemarias,
credos y salves. ¡ Santo remedio! curó comple­
tamente del mal de la pierna.
S evero Mo n ro y.
M ayo 9 d e 1906.

Valencia (España). — Había puesto al cuello
de mi hijo de tres años una medalla de María
Aux., suplicándole lo defendiera de todo mal.
Un día cayó desde un segundo piso, quedando
intacto, con asombro de lodos

*
* *

M a r ía M o n z a n e t .

— Remedios Bendido padecía de un cáncer.
Hizo una novena á M. A, y ofreció una limosna
y publicar la gracia, y de pronto se halló com­
pletamente sana y sin señal ninguna, con estupor
del médico.

**

En la misma ciudad á V. F. le cayó una
chispa en un ojo. que le dañó la pupila y le
produjo inflamación y graves dolores; era j>recisa la operación : acudió con fe á .M. A. y Ella
la curó sin necesidad de tal operación.
Asuacíóa (Paraguay). — En un trance fatal
Joaquima .A. de Saiabarrieta se hallaba á las
puertas del sepulcro; invocamos á María Aux. y
Ella la salvó. (10 pesos).
Ju

an

P.

d e

A

r .m o a

.

Dan también, con toda la efusión de su alma, gracias
á María Auxiliadora y envían una limosna:
Arrecife (Gran Canaria). — Lorenza Lasso Del­
gado: por su eficaz auxilio en un trance apurado.
— Raquel Gonzáles por haber librado á su
querida sobrinita de una cruel enfermedad.
Barcelona (España). — José Marca : por graye.s
dificultades creía el curso perdido. Por intercesión
de María Sma. pude presentarme al examen y ser
aprobado — Ll. M. G.-, por haber sacado bien de
exámenes, contra toda esperanza — Una Coope­
radora por el feliz arreglo de un intrincado asunto
— /)/, C , por un señalado favor: envía 5 pts. para
el Tibidabo — Adelaida Caballé, por uiv favor.
Bogotá (Colombia). — M. T., por haber obte­
nido destino á un hermano suyo — Una Coopera­
dora Salesiana, por un favor señalado — Cannen
Fonseca de Medrana, por vario.s favores — Domingo
C. de Sarmiento, por haber obtenido la salud.
B uenos A ires. — Un esiudianlc de medicina, [>or
el feliz é x ito en un e.xamen dudoso.

Carabanchel (España). — Dña. Murcia Arijiia,
por un favor recibido y otro que desea obtener,
pts. 5.
^Calella (España). — J . M., por haber escucliado
mis súplicas.
Ciudadela (España). — Una devota de María Aux.
por haber salvado milagrosamente á su hijo inge­
niero el día de la explosión de la bomba en Ma­
drid — E. O., por dos portentosas curaciones en
la persona de dos de sus hijos.
Ciudad Real (España). — Ricardo Anón Morena^
por un favor señalado.
Car. de Calatrava (España). — J . R. O., por ha­
berle sacado bien de un -negocio muy difícil —
José Rodríguez Vidal, por haber arreglado una em­
presa en que se perjudicaban sus intereses. — N .
M., por haberle dado eficaz aocorro á él y á su
atribulada familia — Milagro Ramírez Quirica, por
un gran favor á una amiga mía.
Colta (Ecuador). — Bernardo Oleas, por una gracia
obtenida.
Coruña (España). — B. M. S-, por la salud de
un querido enfermo de gravedad de cuerpo y alma
y pide oraciones por su completa conversión —
José Milldn, por haber ayudado á su esposa en
crítico.s momentos.
Chimbo (Santiago de Ecuador). — Vicente Lucio,
por uii gran favor.
Choachí (Colombia). ~ Edelmira M. Pardo y her­
manos. Hallándose nuestra madre desahuciada ya
de los médicos, acudimos á María Aux. y le de­
volvió la salud.
Chosmalal (Argentina). — Milagros Beliráu, por
un favor muy señalado, 5 pesos.
Daimiel (España). — M. F. C., por haberle sa­
nado de molestas enfermedades.
G erona (E sp añ a). — Luisa AL de Burgueio, por
la curación de una so brin ita. — María Pujadas,
por un fav o r recibido — JoseJa Risec, por gran d es
favores recibidos — María Esa, p or id. — C. P.
de E., p o r la curación d e su herm ana — Concep­
ción Amatler, por la curación d e una hija su y a de
gravísim a enferm edad.

Las Palmas (Gran Cañaría). — Soledad Sánchez,
por varias gracias concedidas á ella y á personas de

— 272 —
su amistad — Una Cooperadora de Fuenleveníura,
por un favor concedido d su parroquia, 15 pts. —
Un sacerdote, por haberse visto líbre de una grave
enfermedad que estuvo á punto de contraer ; 25 pts.
para ia Obra salesiana en la Isla — Ag. Fernández,
por varios favores.
Laguna (Tenerife, Canarias). — Manuel Alfonso
Mantesa,
por la milagrosa curación de una hija
suya; 2® por haberlo salvado en un mortal acci­
dente ; 30 por haber devuelto la salud á su amiga
Kulogía de León: su marido y su liijo la lloraban
ya por muerta. <t Yo les di una imagencitade María
Auxiliadora y rogamos todos juntos y la enferma
sanó milagrosamente. »
Loiro (Orense). — David Alonso, Párroco, por
haber obtenido de tan buena Madre la curación de
un padecimiento cartlíaco mensual, causa de neu­
rastenias, tristezas, tedios y demás accidentes.
Motavita (Colombia). — J. Martín Landinez.
Atacótne un cólera asiático (así dicen los médicos)
con tal violencia, que ya me daban por muerto :
armiió mi familia á Maria Auxiliadora y curé com­
pletamente.
Puerto de Cabras (España). — Isabel López, por
favores recibido 4,40 pts.
Rosellón (España). — Belén B. Mir, por la salud
de mi nietecita.
.

POR

El i

S. Vicents del Horts (España). — José Rigol, por
la curación prodigiosa de un pie que temía perder.
S. Jacinto (Venezuela). — José Francisco Jons,
Pbro. Vi prodigiosamente volver de muerte á vida
por la intercesión de María Aux. á mi hermano
Pedro después de larga y penosa agonía. Gracias
mil á la gran Reina.
Valencia (España). — V. S., da gracias á María
Aux. por un gran favor recibido. Francisca Alba
por dos favores. Josefa Mollar por un gran favor.
Vigo (España). — Un Cooperador sal. por haberle
sacado de un grave apuro pecuniario — Una reli­
giosa por un señalado favor — Concepción Gonzá­
lez, por un señalado favor. — David Triviño, Pbro.
por la pronta solución de un intricado asunto.
Vüatorrada (España). — D. F., por la portentosa
curación de Félix Torres, que casi deja en mísera
orfandad á su familia.
Yaritagna (Venezuela). — Cenón Salcedo, por ha­
berle sanado de un atroz reumatismo — Lelis Gon­
zález y un Cooperador, por muchos favores recibidos.
Piden oraciones Manuel Alfonso Marreso ; J. 5 .
L . ; F. B. L. y R. F. para obtener favores que ne­
cesitan. Un niño enfermo las pide por la .salud para
si y la conversión para su padre. Una Comunitiad.
religiosa por la salud de la Madre, gravisimamente
enferma.

NLfiDO

Por España.
BEJAR. — Fiestas de María Auxiliadora y S. Luis.
{Relación de A. M. S. antiguo alumno).
La fiesta de María Auxiliadora se celebró este
año el día 27 de Mayo. La precedió un solemne
triduo en la Iglesia de Sta. María la Mayor de Béjar.
Para cantar las glorias de Marta íué invitado el
M. Rdo. Sr.Cura Párroco de Serradilla, D. Francisco
Gómez Martín.
La concurrencia de los tres días fué muy nume­
rosa.
Del orador no se sabe que admirar más, si su
tierna devoción á la Madre de Dios, ó su elocuencia
y fácil decir ; cautivaba de tal modo al auditorio,
que lo tenía pendiente todas las noches casi una
hora, que parecía pocos minutos. Edificante era
la animación de los niños y de las Señoras que for­
man la pía Unión de Cooperadores Salesianos.
Los primeros manifestaron su devoción especial­
mente en frecuentes Comuniones, cantos v música.
I Qué hermosos espectáculos presenciábamos en
aquellos días l Todo armónicamente unido nos
transportaba. L í\s Señoras desplegaron grande
actividad para honrar á María .Auxiliadora. El altar
mayor donde estaba colocada la devota y artística
imagen bajo riquísimo dosel de seda, rodeada de
un jardín de flores , ponía de manifiesto el trabajo
de las devotas Señoras.

SaLESianO

A los 5 de la mañana del día 27 }'a los 300 niños
con sus vivas á M. A. habían despertado á todo
el vecindario. La pequeña banda de música con
número de 30 niños dirigidos por el Salesiano Carlos
Perelló recorrió las calles por donde debía pasar
la procesión. A las 7 ^ la plaza frente al Colegio es­
taba llena de niños mezclados con sus parientes,
deseosos de acompoñar á sus hijos en la Sta. Co­
munión, ála que 53 de entre ellos se acercaban por
la primera vez.
Terminada la misa de Comunión, los niños que
comulgaron por primera vez acompañados de la
banda se dirigieron al Colegio donde las Señoras les
sirvieron un abundante desayuno. — A las 10 íué
la misa solemne y ocupó la cátedra del Espíritu
Santo el mismo predicador del Triduo. A las 4 de
la tarde tuvieron los Cooperadores Salesianos su
reglamentaria conferencia y á las 5 fué llevada
procesionalmcnte por las calles de Béjar la ima­
gen de María Auxiliadora. Cada año nos parece
más hermosa la benditísima Virgen de D. Bosco.
Llevada en triunfo parecía bendecir á las numero­
sísimas señoras que luciendo su medalla acompaña­
ban á la imagen, á las dos interminables filas de
niños y niñas y á todo el. pueblo de Béjar que por
doquiera que pasaba la honraba con vistosas colga­
duras con que adornaban los balcones de sus casas.
Fiesta de S. Luis Gonzaga. Constituida la com­
pañía de S. Luis Gonzaga en este colegio, los pe-

!F
— 273 —
queños congregantes mediante sus ahorros reu­
nieron lo suficiente para adquirir una hermosa
estatua de talla del Santo, la cual llegaba al
colegio pocos días antes del triduo, recibida entre
atronadores vivas.
El triduo que precedió á la fiesta dió principio
el día 26 de Junio. La junta directiva con un ele­
gante programa-invitación, participaba á los fieles
los cultos que se tributarían al Santo. El día seña­
lado para la fiesta íué el 27 de Junio.
Por la mañana, numerosos niños se unieron á los
Congregantes para la Comunión general. Después
del piadoso acto, la junta directiva sirvió un abun­
dante desayuno á los Congregantes. ¡Cuánta ale­
gría, cuánta caridad reinaba en aquellos infantiles
comensales!
A la misa solemne cantó las glorias del Santo el
M. R. S. Ecónomo de S. Juan. D. Ramón Pérez
Crespo, quien presentó á S. Luis, como modelo
de los niños, pero lo supo hacer de un modo tan
fácil y ameno, que tuvo al infantil y numeroso audi­
torio pendiente de sus labios por más de una hora
sin cansarlo.
A las 5 de la tarde, los niños no contentos de
haber honrado á su santo en el colegio, quisieron
manifestarle públicamente su devoción organi­
zando una solemne procesión, que recorrió las calles
próximas del colegio. Qué cuadro edificante fué
aquel! Hermoso cuadro presentaban las filas lar­
guísimas de niños, muchos de ellos revestidos de
sotana y roquete. ¡ Cuántos padres, y entre ellosmuchos indiferentes en creencias religiosas, con­
templando á sus hijos tan recogidos y devotos llo­
raban bendiciendo al Señor que se dignó traer tanto
bien á sus hijos en la persona de los hijos de Don
Bosco!
MADRID. — No dudamos que la Obra Salesiana tomará vuelo en la capital, dadas las
simpatías con que ha sido mirada. Por ahora
no existe internado, pero sí clases externas,
Oratorio festivo y una bellísima iglesia dedicada
á María Auxiliadora, cuya fachada é interior
reproducen los grabados de las páginas 261 y
265.

Por América,
BUENOS AIRES — {Argentina). — Bendición y colocación de la primera piedra del Colegio León XIII
para los Huerfanitos de D. Bosco (Borrego 2116).
El 26 de Julio tuvo lugar esta simpática é im­
ponente ceremonia que inaugura un nuevo centro
de educación y regeneración moral de la juventud
menesterosa de la gran metrópoli hispano-americana.
Bendijo la piedra S. Sía. Urna, y Rvma. el Dr.
D. Mariano A. Espinosa, dignísimo Arzobispo de
Buenos Aires. Fueron padrinos el Dr. Teófilo Lacroze y la Sra. Dña. María L. de Belloca. Hizo uso
de la paabra el Sr. Ingeniero D. Juan A. Briano,
antiguo alumno de los PP. Salesianos.

Todos cuantos quisieron, pudieron visitar lasescuelas profesionales y naturalmente admiraron
los adelantos realizados. El limo. Prelado y los
Sres. padrinos fueron recibidos por los alumnos al
són de la música y con gran cordialidad, y después
de la colocación de la piedra fueron obsequiados por
los mismos con un acto músico-literario en que
campeó el arte y el buen gusto.
E cos de las fiesta^
en honor de M a ría H uxiliadora.
BARRANCAS {Argentina). — Nos escribe Sor
A. O. Hija de María .Auxiliadora ; Una circuns­
tancia singular me obliga en esto año á enviarle la
relación de la fiesta de María Auxiliadora.
El año pasado (1905) en el mes de Mayo se nos
comunicó la grave enfermedad de una piadosa Se­
ñora, pidiéndonos oraciones al mismo tiempo. In­
mediatamente empezamos un Novenario á nuestra
Poderosa Madre M. Auxiliadora.
En aquel trance la familia, temerosa de perder
un sér tan querido, prometió á la Sma. Virgen Auxi­
liadora una Corona de oro si escuchaba sus ruegos.
La Sma. Virgen concedió la gracia: la Señora había
mejorado, la familia era feliz.
Nosotras ignorábamos la promessa, y así el re­
galo nos sorprendió muy agradablemente. En vista
de este obsequio, se engrandeció la fiesta con el
extraordinario acontecimiento de la Coronación.
El honroso acto fué cumplido por el R.mo P. Ins­
pector José Vespignani. A pesar de haber guardadogran silencio, la COpilla estaba repleta de personas..
En el momento solemne un imponente (¿loria re­
sonó en la espaciosa bóveda y coro selecto seguía
cantando el Corona Aurea del M.® Dogliani. Esa
multitud formaba un corazón solo, ardiente, con­
movido al ver las glorias de M. Auxiliadora.
Digno de notarse fué el número de hombres que
asistieron con ejemplar piedad. Al distribuirles
las medallas (obsequios délos Padrinos), todos las
llevaron espontáneamente á los labios, besándolas
con fe y amor. Acabada la ceremonia, el Rdo. Padre
Vespignani dirigió su elocuente palabra á los pre­
sentes. Citó los datos memorables de la fundación
de esta Casa Salesiana. Hizo notar la pobreza que
la acompañaron en sus primeros años y el progreso
eridente debido á la protección de M. Auxiliadora
y á la caridad de los insignes (Cooperadores nuestros.
Terminado este acto, empezó la Misa cantada. A
las II terminó la sagrada función dejando en todos
los ánimos una alegría indescriptible.
Me es grato poner en su conocimiento los nom­
bres de los Padrinos y Madrinas de las dos Coronas,
siendo al mismo tiempo los generosos donadores
de las mismas. Sr. Juan Onagaity y Sra. Magda­
lena M. Salaberry, de la Corona de M. Auxiliadora;
Sr. Víctor Onagoity y Sra. María S. Onagoity, de
la Corona del Niño Jesús.
SALVATIERRA (México) — Fiesta de María Auxíl.
El 24 de Mayo celebramos con toda solemnidad
y entusiasmo en el espacioso templo de San Fran-

— 274 —
cisco de Asís, la festividad de nuestra celestial Patrona, María Auxiliadora, cuya imagen destacábase
en el centro del altar mayor, en medio de luces y
elegantes adornos.
Como para esta función religiosa circularon
previamente las respectivas invitaciones , diéronse
cita en el sagrado recinto todos los cooperadores
salesianos y numerosísimos fieles.
A las nueve y inedia de la mañana se descubrió
ásu D. .M.; siguiéndose la misa que cantó el M. R. P.
Guardián Fray Miguel Romero ; diaconando Fray
Francisco Manríquez, y subdiaconando Fray Ber­
nardo Arias.
Después del Evangelio, ocupó la Cátedra Sagrada
el ilustrado Sr. Pbro. Don Cayetano Núñez, quien,
con palabra amena, robusta dicción y calor ora­
torio, hizo el panegírico de la Santísima Virgen,
bajo su poética advocación de Auxilio de los Cris­
tianos en relación á la benemérita Obra de Don
Bosco.
La parle coral á cargo de un reputado profesor,
desempeñó á satisfacción su cometido y con estricta
sujeción al Motu Proprio de S. S. Pío X.
Con la reserva y bendición dcl Santísimo Sacra­
mento, concluyó esta solemnidad, quedando todos
muy enfervorizados y complacidos y con la firme
esperanza de que esta función religiosa sea un pre­
ludio de lasque en años subsecuentes celebraremos
los Cooperadores Salesianos de esta ciudad de Sal­
vatierra, en honor de nuestra augusta Madre,
María Auxiliadora, á cuya mayor gloria y á la de
su Divino Hijo, cedan estos cultos.
El Decurión,
JOSE TRINIDAD NiNO.
STA. TECL.A (S. Salvador). — ¿Quién lo creyera,
venoradísimo Padre ? En un lugar solitario, sepa­
rado tlcl centro de esta ciudad, en donde hace pocos
años no había más que unos palos de café, y en
donde reinaba un silencio sepulcral, existe hoy
nuestra bellísima Iglesia, llevada á cabo con todas
las reglas dcl arte, en donde se tributa un culto
sublime á nuestra excelsa Patrona y Madre, María
Auxiliadora, siendo en número muy considerable
los Teeleños de ambos sexos, que nos acompañaron
en nuestros actos de piedad, solicitando en nuestro
Templo el alimento para sus almas y que nosotros
distribuimos, inspirándonos siempre en la caridad
que como en testamento, nos ha legado nuestro
Fundador y Padre Don Bosco.
Un mes entero nos sirvió de preparación, du­
rante el cual las numerosas comuniones nos recor<laban lo que se verifica en Turín. La concurrencia
á todas las funciones, grande yselecta. El 23 estalló
nuestro entusiasmo en una magnífica velada. Llega
el \ con indecible gozo y entusiasmo de parte de
todos. La Misa fué cantada coralmente por todos
los alumnos, y gustamos lo soberanamente bello del
cauto gregoriano, cuando es bien ejecutado. Ofi­
ciaba un nuevo sacerdote, acreciendo así la so­
lemnidad y el regocijo. Uno de los mejores oradores
de la l^pública. el R. P. Falcón, pronunció un ad­
mirable discurso, en que interesó sobremauera al
auditorio, hablando del amor inmenso de Dios á

los hombres, probado de un modo especial en la
institución del Sacerdocio. Encomiando la gran­
deza del sacerdocio católico, hizo un espléndio pa­
negírico del sacerdote salesiano, atribuyéndole \irtudes excelsas. El mismo pronunció después la Con­
ferencia de Regla. ¡Cuán gigante nos pareció la
figura del gran Apóstol de la niñez; cuán colosal
su obra ; cuán divina la misión de los Cooperadores
salesianos !
Fantástica iluminación dió remate á la poética
fiesta. {De una caria al R. P. Rúa).
YARITAGUA (Venezuela). — Promovida por el
celoso Sr. Cura, director de los Cooperadores, ce­
lebróse por primera vez la fiesta de María Auxilia­
dora con el entusiasmo que es íácü imaginar.
Colocada en lo más alto del Altar Mayor, bajo
un pabellón de armiño sombreado por otro de púr­
pura, coronada de blancos lirios, se destacaba la
bella Imagen de nuestra amada Madre María Auxi­
liadora, y desde la mesa del Altar, millares de luces
y flores, formando figuras alegóricas, ascendían
graciosamente hasta colocarse las iiltimas á los
pies de la Santísima Virgen, que parecía sonreír
amorosa á sus hijos. El 24 la solemnidad revistió
todo su encanto. Cantó la Misa el R. Sr. Cura
D. Francisco Corcll Almeda, verdadero amante
de María Auxiliadora, y por la tarde hizo la confe­
rencia de Regla. El panegírico fué pronunciado por
el Pbro. Sr. D. Federico G. Siez. Las comuniones
fueron muy numerosas.
La procesión se efectuó el 3 de Junio, día en que
también comulgó por primera vez un grupo de
niños, que era el obsequio del Sr. Cura á la Virgen
D. Bosco.
También en Barquisimeto celebraron los Coope­
radores con gran devoción la fiesta de María .Auxi­
liadora. En todo presididos por el Sr. Cura.
TUDUL-SIQSIQ (Ecuador). — Presididos por
el celoso Misionero el P. Mattana, los Cooperadores
de estas localidades celebraron con el ardor de la
juventud y el entusiasmo de lo nuevo, la fiesta de
nuestra celestial Protectora. La víspera de la fiesta
ostentábase un magnífico « Bazar de María Auxi­
liadora, ^ mientras los globos cruzaban el espacio
y los fuegos pirotécnicos matizaban el horizonte.
.A la mañana siguiente, y en la primera Misa cele­
brada en el Oratorio pro\’isorio, de la casa nueva
de Tudul, que tienen los RR. PP. Salesianos, con­
tigua á la fábrica del Santuario gótico-moderno que
se está erigiendo en honor de la Virgen de Don
Bosco, recibieron el Pan de los .Angeles numerosas
personas.
A las 12 m. en un altar portátil y con el acompa­
ñamiento de los venerables Sacerdotes y muchos
fieles, se verificó la ceremonia del bautismo de las
campanas destinadas al Santuario. — Concluido
este solemne acto, dió principio la Santa Misa, can­
tada por el R, P. Francisco Mattana, durante la
cual lució el brillante discurso pronunciado por el
ilustre sacerdote Dr. Emilio Morales F. á encomio
de la grandeza y los portentosos milagros obrados
por María Auxiliadora, en favor de sus devotos,
interesados en acrecentar y difundir su culto.

liadora ha echado hondas raíces en el corazón de
Por la noche, con los beneméritos cooperadores, y
lo más granado del pueblo tuvo lugar la espléndida los cuzqueños, principalmente de las señoras. Esta
procesióncon la imagen déla Virgen de D. Bosco, que celestial Reina ha escogido para su trono un sitio
parecía sonreír, y tomar parte en el justo regocijo entre las ruinas de la antigua fortaleza incaica de
Sacsayhuamán; y mostrando que es el Auxilio ds
que inundaba el corazón de sus predilectos hijos.
En seguida, y en el mismo Oratorio, el Superior los Cristianos, también quiso manifestar que es
Turris Davidica, para servir de escudo y defensa
del Vicariato Salesiano, R. P. Mattana, dió una be­
llísima Conferencia, en la que recordaba á los de­ á la juventud cuzqueña.
El 27 de mayo pudimos celebrar su fiesta, aunque
votos de la Virgen de Don Bosco la necesidad de
la constancia, la paz y la unión, para obrar el bien faltos de recursos, ayudados eficazmente por los
y trabajar de consuno por la prosperidad y el’ Cooperadores.
El Mes de María se celebró con mucha piedad ix>r
engrandecimiento de la asociación.

Colegio León X III — Maldonado - Buenos A ires.
Los hueríaniíos saludando al Dr. Teófilo Lacroze, padrino de la piedra fundamental.
La función terminó con la bendición de María
Auxiliadora, v después de dar infinitas gracias á
tan benigna Señora, y ofrecerle nuestra hum i^ ,
pero eterna adoración, todos los beneméritos coo­
peradores se separaron á las once de la noche,
ofreciendo volver al siguiente año, si el Cielo les
permitía, á ese mismo sitio que por hoy se halla
en fábrica, para celebrar igual fiesta en honor de
nuestra portentosa Virgen, la Virgen de D. Bosco.
BENIGXO M. ZAV.ALA
Presidente de los Cooperadores del Sig-sig.
CUZCO (Perú) — Resta y Confereada de María
Auxiliadora.
Cuando apenas ha transcurrido un año desde la
fundación de esta Casa, la devoción á María Auxi-

parte de nuestros niños. La novena que precedió
íué fervorosa, durante la cual hemos recibido gra­
cias extraordinarias de nuestra Madre Auxiliadora;
pues en esos dias, debido á la caridad de nuestros
bienhechores, se pagó en gran parle la casa que
aun no era del todo nuestra. Mil gracias sean
dadas á María !
La mañana del 27, en la Misa de Comunión ge­
neral, se acercaron doce niños á recibir por vez pri­
mera á Jesús en la Eucaristía. La Misa solemne
fué celebrada por el señor Canónigo Dr. F. Pacheco,
nuestro grande bienhechor.
Por la tarde, después de un pequeño sermón de
ocasión y de la bendición con S. D. M., se realizó
la Conferencia á los Cooperadores. El elocuente
orador¡señor Canónigo, Pedro P. Farfán, antedistínguidas personas del clero y de todos nuestros coope-

— 276 —
radores, habló con, palabra persuasiva sobre la efi­
cacia de la educación que los salesianos dan á los
niños y la necesidad de cooperar á las obras de Don
Dosco. Siguió un pequeño acto lírico-dramático en
honor de María, tuvo éxito feliz, y fué un medio
poderoso para dar á conocer en esta ciudad la Obra
Shlcsíana y atraernos la simpatía de nuevos amigos.
En la noche hubo iluminación de globos y fuegos
pirotécnicos, pagados por varios cooperadores.
Estas son las primicias de esta nueva Casa que se
levanta entre románticos encantos, y espero en
Míiría Auxiliadora, que, con el Oratorio Festivo y
los talleres, será de grande provecho para el Cuzco.
(Carla del P. Santinelli).
IQlilQUE — La fiesta de María Auxiliadora.
De año en año se viene repitiendo.en este puerto,
y cada vez con mayor esplendor, la escena conmo­
vedora y sujesliva de un pueblo que lleno de fe y de
amor, se congrega en el templo y recorre las calles
de la población para tributar públicos y solemnes
homenajes á la Inmaculada Virgen María, Madre
de Dios y Auxilio de los cristianos. Este pueblo,
esencialmente comercial, y que no hace muchos
años tal vez se hubiera escandalizado al ver re­
correr sus calles por una procesión religiosa, hoy
so siente entusiasmado y feliz al presenciar y to­
mar parle en las solemnidades del culto católico.
¿Cuál es el secreto de un cambio tan radical ? Sin
duda alguna que el amor á la Reina del Cielo, que
que ha prendido en todos los corazones para hacer
llevadera la existencia y agradables los dolores.
El pueblo do Iquique está libando con las deli­
cias del niño el néctar del amor á María Santísima,
fin mes de edificante preparación ha sido coronado
con los solemnes cultos que han sobrepujado á todí\s las esperanzas por la magnificencia y piedad
c<m que se han llevado á cabo. Bello fué asistir á las
numerosísimas comuniones de personas de uno y
otro sexo, y de todas las clases sociales ; á las
del Colegio en masa, á la tierna y sublime la de
los que por ver primera se acercacaban al Ban­
quete Eucarístico ; á la misa pontifical del limo.
Señor Obispo, Monseñor Cárter, y sobre
todo al brillante discurso del Presbítero español,
Don Juan López Hernández, renombrado orador
de esta ciudad, electrizando todos los corazones con
la elocuencia que le distingue, para traer á los pies
de la Virgen y formar con ellos la invencible milicia
de Cristo, capitaneada por los Hijos de Don Bosco,
para curar las profundas heridas que la indiferencia
religiosa ha abierto en las visceras de la moderna
sociedad. El canto, la música, la iluminación, todo
era digno del inmenso amor que palpitaba en nues­
tros pechos.
M. C. V.
LA PAZ (Bolivia) — Conferencia Salesiana.
Se efectuó la noche dcl 24 de Mayo en la Capilla
del Colegio, convertida provisionalmente en salón
con la asistencia de S. S. I. y R. Monseñor Sebastián
Pifíeri Arzobispo electo de La P la ta : dcl Exmo.

Señor Aníbal Capriles Ministro de Gobierno y Fomentó ; del Exemo. Señor Manuel V. Balliríán
Ministro de Colonias y Agricultura, del Señor Juan
Torti Cónsul de S.' M. el Rey de Italia, del Señor
Manuel B. Mariaco, Rector de la Universidad y
de varias señoras y caballeros de lo más selecto de
la Sociedad Pacense. Cantado por la Schola caniorum del Colegio el Himno Saepe dum Christi de
Monseñor Cagliero, tomó la palabra el Dr. Wences. lao B. Mariaca, haciendo tema de su discurso las
últimas palabras de D. Bosco á los Cooperadores
al sentir próximo su finí
Al terminar fué repetidamente aplaudido.
Antes de cerrarse el acto, el Señor Rector de la
Universidad y Presidente de la Sociedad de Coo­
peradores en nombre del Señor Ministro de Justicia
c Instrucción, impedido de venir, con adecuadas y
lisonjeras palabras entregó al Director del Colegió
un Diploma de Honor con medalla de oro que el
Supremo Gobierno había otorgado al Colegio por
los trabajos exhibidos en la Exposición de Lima y
por haber este Colegio alcanzado el primer Diploma
en dicha Exposición.
El Señor Director del Colegio D. JoséM. Reyneri
contestó agradeciendo al Supremo Gobierno por
distinción tan honorífica y prometiendo que los
Salesianos procurarán corresponder á las espe­
ranzas que la República de Bolivia tiene puestas
en ellos.
Al salir, todos recibieron un precioso fotograbado,
.recuerdo del 4° Congreso de Cooperadores.
Una artística iluminación eléctrica amenizada
con escogidas piezas de música de la banda del
Colegio, puso término á tan grata fiesta.
Fiesta de María Auxiliadora.
Se celebró el día 29 de Mayo.
Por la mañana Misa de Comunión general cele­
brada por el R. P. Próspero Malzieu, Superior de
los PP. Jesuítas.
A las 10, misa pontifical oficiada por el I. y Rmo.
Monseñor Sebastián Pifien, Arzobispo electo de
La Plata.
Injra missatn ocupó la Cátedra del Espíritu Santo
el R. P. Marcelino Serrano de la Compañía de Jesús,
quien con palabra fácil y galana desarrolló con un­
ción particular el tema « María verdadero auxilio
de los cristianos. »
En la tarde tuvo lugar la Procesión de la Ima­
gen de María .Auxiliadora la que recorrió el Paseo
púftlico de la ciudad.
El limo, y Rmo. Señor .Arzobispo, con la bondad
que le caracteriza, quiso damos una muestra más
de su adhesión, presidendo la Procesión re\-estido
pontificalmentc y llevando una Reliquia.
Varias cofradías de Caballeros y Señoras de la
ciudad y algunos colegios de varones y niñas con
sus estandarte.*;, dieron más brillo á la procesión.
El cuerpo de Cooperadores y Cooperadoras con
sus insignias ocuparon un lugar preferente.
La función se terminó con la Bendición de S. D.
M. impartida por el limo, y Rmo. Señor Arzobispo.
¡Que María .Auxiliadora sea siempre propicia para

á

— 277 Después de un ¡Viva S. Ingenuo! que espontáneo
brotó de los labios de todos y del canto del liimno
empezó á desfilar por las calles, que rodean los edi­
ficios de la escuela la procesión, que debía acom­
SANTIAGO (Chile) — Fiesta de María Auxiliadora.
pañar nel templo las preciosas reliquias.
Con entusiasmo y verdadera devoción se celebró
Fué una bella y conmovedora procesión, que hirió
la fiesta. Las comuniones fueron numerosísimas y
las fibras más íntimas del corazón y obligó á de­
la afluencia de devotos muy crecida. Además déla rramar lágrimas de consuelo á muchos. De muchas
misa solemne, y panegírico á la mañana, tuvo lugar casas llovieron las flores y varias veces hubo que
á la tarde la Conferencia de los Cooperadores. Des­ parar á fin de dar campo al desahogo de la devo­
pués del canto del AveMariayáe la lectura de una ción de varias familias, en cuyas casas coros de \’0parte del reglamento, subió á la cátedra el R. Sr.
ces hacían resonar en los aires bellas melodías.
Prebendado Bartolomé Grossi, conocido en Chile Una vez en el templo, un sacerdote salesiano habló
por sus prendas dratorias. Fué compañero del de los mártires de nuestra religión é hizo resaltar
inohúdable Ortúzar, conoce perfectamente la obra el heroísmo cristiano en las primeras persecuciones.
salesiana y nuestras mismas casas de Europa, Concluida la función con la exposición de S. D. M.
incluso el Oratorio de Turín, de modo que pudo fué necesario colocar cuanto antes el Santito en
hablar con verdadera maestría de la caridad cris­ la urna preparada con anticipación, pues todos
tiana y de la manera de llevar á la práctica esta querían besar aquella santa reliquia....; Dios quiera
caridad por los cooperadores según el espíritu de sea S. Ingenuo un nuevo protector para tantos
S. Francisco de Sales, tan rectamente interpretado niños, que hoy día corren tanto riesgo de perder
por D. Bosco. El orador se mostró verdadero ad­ su fe !
mirador de la obra salesiana y entusiasta por el
progreso de la misma. No se podía pretender cosa
mejor. Ahora se trabaja para constituir el Comité de
señoras y se espera poder reunirlo ya por primera
vez en el próximo mes de Junio.
Las fiestas y solemnidades no se actuaron el 24,
sino que se postergó para el Domingo 27 la con­
clusión de los cultos en honor de nuestra Madre.
En aquel día cerca de 50 niños se acercaron por
primera vez á recibir á Jésús en la sarita comunión
y el mismo Sr. Delegado Apostólico limo. Pedro
Martí, Arzobispo de Antioquía asistió pontifical­
mente á la Misa solemne, estrenándose por pri­ El limo. S r. D. José de Camorgo Barros
mera vez un magnífico trono, regalo de la señorita
Obispo de S . P ablo en el B rasil.
Herminia Solari á María Auxiliadora. Fué un día
precioso y de indelebles recuerdos, en el que antes
¡Cuán incomprensibles son los adorables
aun de pedir á Jesús su bendición por la tarde, se
cantó el Adiós á la ^ürgen y desde el púlpito se designos del S eñ o r! Lleno de vida y entu­
impartió con solemnidad la bendición de M. Auxi­ siasmo, el celosísimo Pastor de S. Pablo visi­
liadora. — ¡Ojalá siga triunfando y extendiéndose taba la Italia, aprovechando útilmente de su
siempre más el amor y el afecto á María !
visita ad limina, para conseguir, entre muchos
SANTIAGO (Chile). — El día 29 de AbrU que­ otros fines á favor de su diócesis, algunos
dará grabado en el corazón de los alumnos de la sacerdotes italianos para la asistencia espiritual
Gratitud Nacional por la conmovedora función
de la numerosa colonia italiana, que los datos
religiosa, que se llevó á efecto en ocasión de llev'ar
al templo el cuerpo del joven mártir S. Ingenuo. elevan á un millón de almas. A este objeto
Desde días atrás se estaban preparando los niños visitó Prelados, conferenció íntimamente, se
y muchas personas devotas, de modo que á la hora movió con actividad vertiginosa.
indicada, se encontraba mucha concurrencia reunida
Am igo y admirador de los Salesianos, apenas
en uno de los patios del Colegio, deseosa de con­
llegó
á Turín el 21 de Julio, se hospedó en
templar por primera vez al Santito. A dar mayor
realce á la función se encontraba presidiéndola el Oratorio de S. Francisco de Sales, y fué
Mons. Cirilo Mogabgab, obispo de Zalhé con sus immediatamenle á Valsalice á orar sobre la
ornamentos de rito griego. Cuando ya todo estaba tumba de D. Bosco. El 22 celebró en el San­
preparado, después de unas breves palabras del
Director del Colegio, se descubrió la imagen del tuario de María Auxiliadora y luego subió á
Santo, que se hallaba recostado sobre unos almoha­ la basílica de Superga y visitó las tumbas de
dones primorosamente arreglados sobre unas andas, la Casa Real de Saboya. A mediodía presidió
adornadas con las banderas chilenas. Pendían va­ el ágape fraterno de los antiguos alumnos del
rias cintas de raso, sostenidas por varias distingui­ Oratorio y alzó su copa para elevar un himno
das bienhechoras de la Obra salesiana, las que ha­
á sus amados Salesianos de S. Pablo.
bían aceptado ser madrinas en la dicha función.

con todas aquellas personas que de algún modo
procuraron honrarla en su fiesta!

NECROLOGIA
4 11=

— 278 —
Hijo del pueblo, amaba al pueblo con el
caiiño de un apóstol, y dotado de grande in­
teligencia, corazón ardiente y actividad pasmosa,
estaba en la plenitud de la vida y en su pe­
ríodo más fecundo: mucho se prometían de él
la Santa Sede y su amadísima grey. Contaba
apenas 48 años.
Elegido Obispo de Curytiba en 1894, en
dos lustros levantó el nivel de la moral, hizo
florecer la disciplina y los estudios eclesiásticos
y promovió la buena prensa. Así surgió la
Estrella y un Semanario Religioso, y princi-

el ilustre Obispo desapareció en las ondas
practicando un acto de heroísmo y caridad
bendiciendo y confortando á los náufragos.
A bordo del vapor se hallaba también elllmo.
Señor José Marcondes, recién consagrado en
Roma, Arzobispo de Para, y por un milagro
escapó del terrible naufragio. El Boleiin SaUsiano se felicita por el acontecimiento y desea
al Pastor, largo y fecundo apostolado.
Nuestro Superior General, no bien tuvo co­
nocimiento de la catástrofe, * ordenó telegráfi­
camente al Revino. Sr. D. Pedro Ricaldone,
que los Institutos Salesianos de España reco­
gieran algunos niños de los que dejaba huér­
fanos el desastre; también telegrafió á la Di­
rección de la Navigazione Generale Italiana,
diciéndole que las puertas del Oratorio de
Valdocco estaban abiertas con el mismo fin.

Sta. Isabel Hernández.
(Colombia).
la desaparición de esta virtuosa matrona,
acaecida en su hacienda de Quito (FunzaColombia) á principios del pasado Junio, ha per­
dido la sociedad un ejemplo, su parroquia un
modelo y el pequeño noviciado salesiano una
gran bienhechora; pero el cielo ha ganado un
ángel más.
Hija de próceres y dueña de cuantiosa for­
tuna, vivió sólo para Dios y el bien de sus se­
mejantes : modesta y religiosa, ni dió cabida al
lujo, ni aceptó vanidades, ni descuidó sus de­
beres, aunque para ello tuvo que sufrir ; vale­
rosa y enérgica, no desmintió de la sangre que
circulaba por sus venas ni transigió jamás con
llmo. Sr. D. José de Camargo Barros
O bispo de S . Pablo
, lo que menoscabara su piedad ó atentara de
Duerlo en el naulraKlo del ,, Sirio “ el 6 de Afoslo de 1906.
algún modo á la rectitud de su conciencia. En
su casa de campo hospedaba con verdadera
pálmente el
Paulo, poderoso diario cató­ complaciencia á los sacerdotes y religiosos y fre­
lico, político, comercial, literario, en donde
cuentemente á los Obispos y al Exmo. Sr. De­
con amplia libertad se ventilan los intereses legado Apostólico.
de la Religión y de la Patria.
Distribuyó gran parte de sus bienes en
El 23 de Julio dejaba á Tarín, y el 3 de
obras pías y su vida entera fué un tejido de pie­
Agosto, mandó al R. D. Rúa un afectuoso dad y caridad.
saludo en estos términos: « Al Revino. Señor
Apresuremos con nuestras oraciones, si es que
Dom Miguel Rúa. — Agradecimentos, saudatodavía lo necesita, el descanso eterno de su
i;Óes, desj)edidas, — Harcellona, 3-8-1906. —
alma, y pidamos á Dios Nuestro Señor consuele
Mons. J. C. Barros, Bispo de San Paulo ». la familia de la extinta y envíe á la Sociedad
. . . Agradecimientos, añoranzas (gratísimos
muchas personas como la Sta. Hernández.
recuerdos), adiós! . . .
R. I. P.
Y la despedida fué para la eternidad. Todo
el mundo sabe el desastre del Sirio v cómo



279



íDeitioria$ biográficas be ÍDon$. Luis Lasagna
( Continuaciófi) (r)
CAPITULO X X VI
Así comenzó el colegio de Sta. Rosa de Nietheroy.
Está situado en una suave colina que se retrata en
la encantada bahía de Río Janeiro, en cuyas ondas
tranquilas se ven flotar ciento á ciento los bajeles
de todo tamaño y nacionalidad que allí acuden en
busca de azúcar, café, tabaco y otros productos
en que son fértilísimas aquellas tierras tropicales.
La coronan y rodean vistosas casas-quintas y ele­
gantes palacetes, prueba del aire sanísimo que allí
se respira. Sin embargo la iglesia parroquial está
muy distante y no hay por aquellos contornos nin­
guna capilla donde los habitantes puedan cumplir
sus deberes religiosos. Empero no falta (mal pe­
cado!) una escuela protestante para niñas y varones,
lo que constituye un peligro permanente para las
familias católicas. Viendo esto el Padre Lasagna,
dió gracias á Dios, que había enviado allí á los hijos
de Don Bosco para que pusieran coto á aquella
mortífera propaganda. Trató desde los primeros
días de que los niños no bebiesen en aquel manantial
-infecto una educación herética y envenenada,
abriendo luego un oratorio festivo donde los do­
mingos recogía considerable número de chicos á
quienes instruía en las verdades de nuestra santa
religión, dándoles toda comodidad de cumplir las
prácticas piadosas y de pasar alegremente el día
del Señor lejos de peligros de alma y de cuerpo.
Mas ¿ cómo mirar por las niñas ? Habría podido
llamar incontinenti una corta falange de Hijas
de María Auxiliadora, y aun se empeñó con tesón
en apercibirles desde luego la casa; pero sus ten­
tativas salieroit vanas. El Señor bendijo y prosperó
el Instituto de los Salesianos, mas dispuso que las
hermanas de D. Bosco fueren á sentar sus reales en
otros puntos del Brasil, donde acaso había de ser
más abundante la mies y donde más apremiaba
la necesidad.
Le pareció conveniente al P. Lasagna visitar ai
emperador D. Pedro II para enterarle de la entrada
de los Salesianos en el imperio. Acogióle el monarca
con extraordinaria amabilidad y liasta le pre­
sentó á la Princesa Isabel, presunta heredera del
trono, y al esposo de ésta, Gastón de Orleans, Conde
de Eu, quienes tuvieron palabras encomiásticas
para los Salesianos y auguraron que renovasen en
el Brasil el bien que habían hecho en varias repú­
blicas de la América Meridional.
Entretanto llegaba hasta las apartadas regiones
del Xuevo Mundo el eco del acogimiento entusiasta
hecho á D. Bosco en París, Lila y varias otras gran­
des ciudades de Francia. Ni en .América ni en Eu­
ropa alcanzaba nadie á explicarse, hablando de tejas
(1) V éase Boletín de Setiem bre pag. 252.

abajo, tan prodigioso movimiento en derredor de
un sacerdote extranjero, de nada extraordiario en
su exterior apariencia, é incapaz, predicando en
francés, de cautivar los ánimos de las muchedum­
bres con el hechizo de la elocuencia. Las personas
de todas las creencias y matices convenían en atri­
buirlo á la santidad que se trasparentaba en el ros­
tro, y se reflejaba en todos los actos, 6 inspiraban
todas las palabras del buen sacerdote. Y esta fama
de la santidad del padre, universalmcnte difundida
por los diarios de Francia, avivó más en las jóvenes
naciones de América el deseo de poseer á los hijos
de D. Bosco. En efecto, el 6 de Setiembre de 1883
escribía el P. Lasagna á su antiguo Director Don
Juan Bautista Lemoyene, notificándole que en.
aquellos momentos tenía entre manos hasta veinti­
cinco solicitudes de altos porSonajes eclesiásticos
y seglares, que-de diversas ciudades y provincias,
le suplicaban con encarecidas instancias les en­
viase misioneros salesianos para fundar colegios
y hospicios en pro de la juventud. Mas á pesar de
su buen corazón y ardiente celo, remitió á D. Bosco
una sola de aquellas urgentes propuestas, y íué
la derla ciudad de S. Pablo. Le pareció que se debía
dar preferencia á dicha ciudad porque es capital de
un vastísimo Estado, goza de excelente clima y
suelo feracísimo; porque, situada á poca distancia
del puerto de Santos, y entregada con febril acti­
vidad á la industria y al comercio, en sólo diez años
había doblado su población ; y porque desde en­
tonces encerraba en su recinto á más de veinte mil
inmigrantés italianos, amén de las florecientes co­
lonias agrícolas que estos tenían fundadas en los
alrededores.
Y a desde el año 1882 el venerable Obispo de
S. Pablo, limo. Sr. Lino Diodato Rodríguez de
Carvallo había suplicado encarecidamente al P. La­
sagna que se trasladase á aquel punto y viese por
sí mismo la urgencia de fundar allí un colegio de
artes y oficios para niños de.svalidos. No es para
dicho el trasporte de alegría y entusiasmo, cen que
íué acogido nuestro misionero cuando el 1° do Se­
tiembre de 1883 pudo corresponder finalmente á la
caritativa invitación. Los numerosos admiradores
de las obras salesianas ansiaban ponerle en seguida
en las manos el fruto de sus sacrificios para que
fundase un colegió de estudios y talleres y diese
principio al Oratorio festivo; mas el P. La­
sagna hubo de rehusar sus ofertas y exhortarlos á
esperar con paciencia y constancia, asegurándoles
que trabajaría con verdadero ahínco para obtener
que al año siguiente D. Bosco Ies enviase algunos
misioneros.
'
Después visitó varios parajes dentro y fuera de la
ciudad con el objeto de elegir el más oportuno para
la nueva casa salesiana. Todos convinieron en que-

— 280 —
•el más á propósito era el solar anejo á la iglesia que
se estaba construyendo en honor del Sagrado Cora­
zón de Jesús. El área bien situada y amplia se juzgó
suficiente para contener un vasto hospicio y la
iglesia, que había sido iniciada como voto nacional,
por empeño especialmente de un joven ingeniero,
el Dr. Saladino, de corazón generoso, celosísimo y
pasmosa de actividad. No pudiendo aventurarse á
la construcción de todo el templo, que á juzgar por
•el plano debía ser una verdadera joya de arquitec­
tura, el ingeniero había erigido el presbiterio y el
coro con una fachada provisional: de ello resultó
una hermosa capilla que presto se debía franquear
al culto con gran solemnidad. El Obispo manifestó
su firme esperanza de que los Salesianos, fijando allí
.su demora, y gracias al espíritu emprendedor que
los distingue, en pocos años darían cima al grandio­
so templo, y de que el nuevo santuario vendría á
ser el centro de la devoción al Sagrado Corazón de
Jesús en su diócesis. De tal suerte Mons. Lino Ro­
dríguez imitaba el ejemplo de León X III, que po­
cos años antes había confiado á D. Bosco la cons­
trucción de la iglesia del Corazón Deífico en Roma.
Las dos empresas,, extremadamente arduas, im­
pusieron á D. Eoscq y á sus hijos muy graves sacri­
ficios ; poro con la ayuda del Señor se llevaron á
cabo, y así no quedaron frustradas las esperanzas
que en ellos habían cifrado el Pontífice y el Obispo
de S. Pablo.
Aunque más bien que un viaje fué una rápida
•carrera el paso del P. Lasagna por la provincia de
San Pablo, adonde no le llevaba otro intento que
el do fundar el Colegio de artes y oficios, sin em­
bargo no se olvidó un solo instante del bien de
las almas y, como verdadero apóstol, logró todas
las ocasiones de procurarlo. Nos lo prueba un hecho
que acaeció el 3 de Setiembre. Celebrada bien tem­
prano la santa Misa, dos excelentes sacerdotes de
S. Pablo le llevaron en coche afuera de la ciudad
para que se diera cuenta exacta de la región. Desde
lo alto de la colina que circunscribía el panorama
de San Pablo por la banda de Occidente, le seña­
laron á los lejos una capilla coronada por un pe­
queño campanario, y luego algunas cabañas , y por
fin más allá, de.sparramadas entre los bambués y
los bananos, algunas blancas casitas.
— ¿ Qué casas son estas ? preguntó maravivillado el Padre Lasagna.
— Son, le respondieron, las primeras casucas de
Tina colonia italiana qtie, hace obra de siete años,
fué traída á esta tierra por especuladores codiciosos,
y que bregando con mil dificultades, comienza á
medrar un tantico.
— ¿Y son numerosos esos italianos ?
— .Mgunos centenares de familias : gozan de
mucha estimación, porque son muy buenos.
Cuando el coche se hubo acercado lo bastante,
el P. Lasagna saltó á tierra y se dirigió á la
casa más cercana: los niños que estaban divir­
tiéndose. escaparon á esconderse y las mujeres,
agolpadas á las ventanas, los miraban absortas
Y en sflencio. No se imaginaban que entre aque­
llos sacerdotes hubiera un compatriota suyo : mas
•cuando le oyeron hablar no sólo en italiano, sino

en su mismo dialecto, salieron aprisa de las ca­
sucas, y á voces y con ademanes y con los pañuelos llamaron á los maridos derramados p>or la
campaña ; los chiquillos que habían huido llenos
de susto, se asomaron de nuevo á la puerta y al
cabo de pocos instantes el misionero se rió rodeado de una muchedumbre de personas que se
iba engrosando por momentos y le seguían v le
atajaba el paso. Un sacerdote de nuestro país!
exclamaban. ¡Oh, quédese con nosotros/
Entretanto un hombre corrió exhalado á abrir
la capilla de Santa Ana, y todos entraron en ella.
Hecha una breve oración, el P. Lasagna Ies dirigió
un afectuosísimo saludo y palabras llenas de ca­
riño. Luego les preguntó si habían guardado in­
tacta la fe, si no habían prestado algún crédito á
las supercherías de los ministros protestantes,
si habían conservado la costumbre de la plegaria,
y si había quien enseñase el catecismo á los niños.
Y no satisfecho aun con sus afirmaciones y pro­
testas, quiso cerciorarse haciéndoles preguntas á
todos, grandes y pequeños. Entonces fué cuando
una mujerzuela, para facilitar aquella improvisada
catcquesis, corrió á buscar su viejo catecismo de
la diócesis de Vicencia ; á las preguntas del sacer­
dote los chicos recitaban las respuestas sin trope­
zar en una sílaba. Y este catecismo, enseñado por
algunas pobres mujeres era toda la instrucción re­
ligiosa que recibía aquella colonia. Los más dichosos
que tenían caballo, podían ir á la ciudad y asistir
á la santa Misa; pero no se atrevían á acercarse al
confesonario porque ignoraban él portugués. Loa
demás hacía siete años que vivían sin sacerdote,
sin sacramentos y sin palabra de Dios. Su estado
conmovió hasta las lágrimas al misionero que ha­
biéndoles distribuido cuantas medallas é imágenes
tenía consigo y repetídoles mil recomendaciones,
se retiró llorando con la promesa de volver en
breve ó de mandarles un sacerdote que mirase por
el bien de sus almas. Y a veremos cómo los Salesia­
nos cumplieron su palabra.
¿Qué mucho que después de escenas tan desga­
rradoras, que se repitieron á menudo, el buen mi­
sionero tomase la pluma y escribiese cartas que
arr¿\ncaban lágrimas á D. Bosco? ¿Qué mucho que
le pidiese encarecidamente misioneros é Hijas de
María Auxiliadora para procurar la salvación de
tantas almas? Y por otra parte, ¿qué extraño es
que el celo de D. Bosco puesto á cada paso en tales
trances, multiplicase tanto las expediciones de sus
misioneros? El uno y el otro eran fieles á su grito
de guerrra : Da mihi animas; caetera tolle!

Con aprobación de la Autoridad Eclesiástica;
Gerente: JOSÉ GAMBINO.
Turin, Tip. Salesiana (B. S.) — Via Cottolengo, 32-