BS_1971_03

Ficha

Título
BS_1971_03
Descripción
Boletín Salesiano. Marzo 1971
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Don Bosco
UNA PAGINA PARA LOS NiNOS

UNA
PALABRITA
AL
OIDO

Queridos amigos Juanito y Mari:
Creí que habla pasado un siglo
sin recibir noticias vuestras. Pero
Juanito ha querido darme la sor­
presa de una llamada telefónica. El
frío del invierno —pensaba para
mis adentros— les dejó ateridas
la.s manos y heladas las palabras.
Ya veo que no, pues de nuevo he
sentido el calor de la alegría de
buenos amigos. Eso sí, el Invierno
parece que ha hecho más fresca
vuestra risa, más blanca, casi trans­
parente, vuestra franqueza...
También he comprendido vuestra
curiosidad. ¿Qué son las palabritas
al oído? ¿Las palabras mágicas que
Don Bosco decía a sus chicos?
Oíd:
San Juan Bosco conocía a sus
muchachos perfectamente y sabía
lo que necesitaban a cada momen­
to. Por eso les hablaba particular­
mente, pero en el mismo patio,
sin necesidad de echarles sermo­
nes aburridos. De buenas a prime­
ras se encontraba con un chico y
le sorprendía con la pregunta:
—¿Quieres que te diga una pa­
labra? O si no. los mismos chava­
les corrían alegres a su paso: «(Dí­
game una palebrltal>. Entonces el
santo les acariciaba la cabeza y
acercándose al oído, les hablaba en
secreto tapándose la boca con la
mano para que nadie se enterara.
Los efectos eran mágicos y ai
punto. De pronto, un chico rom­
pía ei trapo de la risa: otro se
ponía rojo como un tomate; otro

salía cabizbajo haciendo pucheros...
Unos quedaban serios como bastón
de policía y otros decían «gracias»
y proseguían sus juegos.
Eran, frases breves, pero directas.
Llegaban al corazón sin rodeos.
Hoy se suele hablar con indirectas,
¿eh, Mari...? Y no sé si mis amigos
sabrán contestar también con indi­
rectas desabridas y de mal gusto
a las buenas palabras de los papás... Lo cierto es que Don Bosco
siempre las decía con amor y sus
chicos las acogían deliciosamente.
¿Queréis saber algunas? Ahí van:
—•Bien, sigue así; (a Virgen está
contenta de tí». —«Sé bueno y un
día estaremos juntos en el cielo».
—«¿Te has confesado bien?».—«Ah,
si vieras el estado de tu alma...».
—■No olvides que Dios te ve».
—«¿Podrás dormir tranquilo esta
noche?»...
A veces se entablaba un diálo­
go:
—¿Qué tal estás?
—Estupendamente.
—¿También de alma?
Entonces el chico miraba a Don
Bosco y, confuso, bajaba la cabe­
za:
—Ya comprendo, ya...
— Bueno —proseguía el santo— .
se trata de hacer un buen lavado
y verás cómo llegas a ser un buen
amigo de Dios...
O si no:
—Si te murieras hoy o mañana o
esta noche, ¿estarías contento?

— No del todo.
—Pues entonces, ya sabes, ¿cuán­
do te pondrás en paz con Dios?
— Mañana en misa.
—¿Y por qué no ahora mismo...?
Un día, mientras predicaba, vio
distraído a un chico. Luego lo lla­
mó para decirle al oído:
— Dime, te duelen los dientes,
¿verdad?
—Qué va. menudos dientes ten­
go...
— Pues me !o parecía porque no
masticabas bien la palabra de
Dios...
Pero lo más Importante es esto:
«Don Bosco nunca llamó la atención
a nadie en público y jamás humi­
lló a ningún joven».






No quiero aburriros. Ya sabéis
que acepto todos los buenos con- ^
sejos que me digáis al oído. Hasti
por teléfono. Pero creo que voso­
tros también recibiréis a gusto todo
lo que os digan vuestros papás. Y.
por lo que más queráis, escuchad­
los. No os hagáis sordos y, menos
aún, respondones.
A ver si me contestáis pronto.
Os abraza vuestro amigo.
Padre Rafael

Revista (ie i i o bra de Don Bosco
AAo LXXXV - N.o 3 • M arzo. 1971

Director:
RAFAEL ALFARO
Dirección. Redacción y Admón.:
Alcalá, 1&4
Teléfono 255 20 00
MADRID (2)
(Con censura eclesiásilca)
Imprime; Escueta Gráfica Saleslana
Madríd-Atocha

EN ESTE NUMERO:
Pág.
Detrás de la puerta ...
1
Expo Mundial del Libro.
2
Pero, ¿los niños pecan?
4
Mesa redonda: La feli­
cidad ..........................
8
Madrid-Villaamil: Bodas
de oro .................... 10
Yo acompañé al Papa. 12
Eduquemos como Don
Bosco.— Enseñadles el
sentido del pecado ... 15
Un rico muy pobre que
lo dio todo .............. 16
Panorama salesiano In­
ternacional ............... 20
¿Queréis ayudar al ter­
cer mundo? ............... 22
Natal: Cristo muere en
las aldeas ................ 24
Gracias a María Auxilia­
dora .......................... 28
Becas .......................... 31

NUESTRA PORTADA
^olo: José Luis Usns

Sevilla es el marco esplén­
dido de una Semana Santa
celebrada con fervor y con
arte. La Giralda, esta mara­
villa de torre, y ia catedral,
ese inmenso mundo de oji­
vas y estatuas de piedra
tica, nos hablan de la relí9íosldad de nuestro pueblo.
En este mes, en que conme­
moramos I o s misferíos de
nuestra Redención, los traea la portada de nuestra
revista como un símbolo de
la le española.

DETRAS
DE LA PUERTA
En el Boletín de enero, el Rector Mayor nos comuni­
caba a todos (a noticia: «E l Capítulo General es el acon­
tecimiento más relevante del año 1971 para nuestra Con­
gregación», y añadía: «O s pido la ayuda de vuestra
oración para su feliz éxito».
En este mes de marzo nos comunica la noticia de su
promulgación oficial: «Comienzo con anunciar a toda
la Congregación, conforme al artículo 128 de las Cons­
tituciones, que el Capítulo General Especial se abrirá
el día 10 de mayo de 1971, a las diez de la mañana,
en Roma, en la nueva Casa Generalicia, Vía della Pisana, número 1.111.»
• Invitación a la oración.— Convencido de la im­
portancia y de la delicadeza de la tarea que incumbe al
Capítulo, el Rector Mayor nos invita a la oración. «T e ­
nemos absoluta necesidad — dice— de la asistencia del
Espíritu Santo, que haga presente en medio de nosotros
a Cristo Señor, sin el cual nada podemos hacer.» Y
pide la participación y asociación de nuestros alumnos,
exalumnos y cooperadores.
• Invitación a la renovación.— «L o que debe contar
para nosotros no es el triunfo de nuestro punto de vista
personal, ni menos aún, la defensa de nuestro tranquilo
modo de vivir... L o que importa es que la Congregación
sepa interpretar y vivir el mensaje que Dios le propo­
ne hoy.»
Con estas palabras, el Rector Mayor pide una actitud
de sincera y humilde renovación, de acuerdo con los
signos de los tiempos. Pide asimismo la flexibilidad:
«D ios — dice— no ha concedido a nadie en exclusiva
el privilegio de la verdad.» Todos, sin discriminación
de edad o mentalidad, «deben saber y querer escuchar».
• Invitación al amor.— La consideración de los plu­
rales problemas de la Congregación en los diversos
países nos abrirá simultáneamente a una «visión» uni­
versal.
«E pluribus, unum», reza el lema de los Estados Uni­
dos. Esperamos que la unidad brote de al diversidad.
E l pluralismo no ha de ser motivo de separación, sino
de mutuo enriquecimiento; ha de ser la diversa expre­
sión de un mismo amor. La diversidad de pueblos, de
ideas y de formas de vida nos ha de enriquecer con su
vitalidad.
Y todas estas comunicaciones las oímos como algo
cercano y urgente, porque esperamos con ansia algo que
ya tenemos detrás de la puerta.



1

S A N T O D O M IN G O

IN S P E C T O R IA S A L E S IA N A DE L A S A N T IL L A S
Apartado 222
Santo Domingo, R. D.
23 de diciembre de 1970
Muy reverendo padre inspector.
Dios le guarde:
En ocasión del Año Internacional de la Educación proclamado por la
UNESCO y apoyado por la Iglesia y por nuestra Congregación, se ha ve­
nido celebrando con gran éxito en la República Dominicana, la primera
Expomundial del Libro y Festival Internacional de la Cultura.
En m i cario anterior les indicaba el interés de nuestro venerado Rector
M ayor por la participación de los Salesianos a dicho evento y pedía en su
nombre vuestra cooperación para el éxito de este trabajo encomendado a
nuestra Inspectoría.
Gracias a vuestra cooperación y al interés que habéis mostrado hemos
podido participar en una form a digna de tan magno evento. Se pudo montar
un hermoso pabellón en él cual estaban representadas la mayoría de nues­
tras Editoriales de los cinco continentes y os puedo asegurar que nuestro
pabellón fue visitado y admirado por muchas y muy ilustres personalidades
nacionales y extranjeras quienes ciertamente se habrán llevado una magni­
fica impresión del esfuerzo y la dedicación de los Soíesjanos e Hijas de
María Auxiliadora a la Prensa y especialmente a la divulgación de obras
de form ación y catcquesis en las cuales estamos ciertamente a la van­
guardia.
También cooperamos, en la medida de nuestras posibilidades, al Festival
Internacional de la Cultura, con la presentación de grupos de teatro y coros
de nuestros colegios en la República Dominicana así como también varios
conjuntos musicales de fama que están formados por alumnos o exalumnos
de nuestros colegios captando la simpatía y los aplausos del numeroso pú­
blico gue todos los días por la noche asistía a la sede de la Expolibro para
presenciarlos.
Durante los dos meses que permaneció abierta al público, la Expomundial
fue xHsitado por mrís de 270.000 personas y en el teatro al aire libre se
realizaron más de 200 actos artísticos. Veintidós países, nuynerosas orga­
nizaciones internacionales e incontable número de casas editoras de todo
el mundo participaron en este xxiagno evento que ciertamente dejará pro­
fundas huellas en nuestro querido pueblo Dominicano.
E l día 11 del corriente mes fue clausurada solemnemente, por el Vice­
presidente de la República, en acto licitado a cabo eti la sede de Expolibro.
Adjunto a la presente le enx'iamos unos fotos que muestran el pabellón
de los Salesianos a fin de que las pueda usar para propaganda. L e enviamos
también ei folleto que se repartió durante todo el tiempo que estuvo abierto
la Expomundial en el cuaí se dan algunos datos sobre nxiestra Congregación
y su dedicacidn a lo Prensa.
Augurándole a usted y a todos los hennanos de esa Inspectoría unos
muy felices Navidades y las mejores bendiciones celestiales durante el Año
que txi a comenzar, queda de tistedes.
Atentamente,
p. M A R IO BORGONOVO. SDB.
Inspector

il LIBIO
Sección de Catequesís. Nuestras librerías tienen la especiali­
dad catequética: libros, revistas, fiiminas y diapositivas para
la enseñanza del catecismo.

<?) •

Vista de una sección de la "Expomun*
dial" del Libro, en la que han partici­
pado librerías salesianas de Europa y
América,

Aspecto del “ stand” correspondiente a la Central Catequística
Salesiana de Madrid. También estuvieron representadas las li­
brerías de Barcelona, Sevilla, Pamplona...

7A£S ¿ÑOS BE BISTOm SSLESm
por José Luis Bastarrica y José Mallo (Salesianos)
Librería “ María Auxiliadora”, Primo de Rivera, 25 - MADRID-5
Páginas 512 con ilustraciones.

Con esta obra los autores tratan de informar, de poner
en conocimiento de toda la familia salesiana, las vicisitu­
des pasadas por los salesianos durante los tres años de
la Guerra Civil Española



3

r
^

L sentido del pecado ha
de seguir al sentido de
Dios. * Sensibles al bien y al
mal, sí; pero, ¿capaces de
un juicio moral personal? *
¿No cuenta su irreflexión in­
fantil? * Los padres han de
tener más miedo a los peca­
dos futuros que a los actua­
les. * Su delicada misión de
formadores de conciencia.

LOS GRANDES «PECADOS»
DE VUESTRO HIJO
Los niños piensan, dicen y hacen
cosas que son objetivamente ma*
las: se pelean, faltan a misa, ven
películas de rombos, desobedecen...
Vosotros lo sabéis de sobra. Pero,
¿puede, decirse que con estas cosas
cometen pecado?
Cuando vuestro hijo miente, ¿no
estará usando la mentira como un
arma con la que defíende su debi­
lidad? ¿O como una simple fan­
tasía de esa imaginación que tan
difícilmente separa la frontera de
lo verdadero y lo inventado?
Y cuando se encapricha, ¿no es­
tá satisfaciendo una exigencia de
su edad, que vosotros, con menta­
lidad de adultos, habéis olvidado?

4



Es verdad que hoy ha manchado
su trajecito nuevo, tirándose por
tierra, pero muy probablemente no
lo ha hecho para enfadaros a vos­
otros, sino sencillamente porque
necesitaba observar a las hormi­
gas que desfilaban camino de su
refugio.
Tampoco conviene olvidar que
los mayores, a veces, les exigimos
una constancia, una responsabili­
dad, un silencio..., que en nuestro
mundo de adultos cuadran perfec­
tamente, pero que son impropios
de ellos. ¿Y vamos a considerar
sus pequeños fallos de voluntad o
reflexión como pecado? Nosotros
en seguida acudimos a los ate­
nuantes que nos enseña la moral
para librarnos de un pecado: el
miedo, el temperamento... ¿Y no lo
son, y mucho más fuertes, para el
niño la irreflexión, la curiosidad o
sus otras necesidades infantiles?

“Debemos tener ei
valor de afirmar: ¡Qué
bien que un niño no
pueda o fe n d e r a
Dios!” (Hansemann).

¿Habrá que concluir, entonces,
que los niños nunca pecan? Es lo
que vamos a tratar de aclarar a
continuación.

A N TE TODO,
¿QUE ES PECADO?

Desde pequeños nos han metido
en la cabeza que el pecado es la
transgresión de una ley. Y es cier­
to, pero sólo a medias, porque ha­
blando así se destaca demasiado
la falta, hasta el extremo de co­
locarle sin más la etiqueta de pe­
cado: decir palabrotas es pecado,
y todo el que las dice peca. Como
puede verse, se pone el acento en
la acción y se olvida todo el mun­
do interno de la persona que la
realiza: su ignorancia, debilidad, li­
gereza, intención...
En el pecado no se puede pres­
cindir del elemento personal o su­
jetivo. El sujeto, para hacerse res­
ponsable de su acción, ha de ac­
tuar con conocimiento pleno de lo
que hace y con plena libertad. Si
falla uno de estos dos elementos,
no hay pecado.
Hasta aquí podríamos decir que
hemos estado hablando de trans­

gresiones de leyes puramente hu­
manas. Para nada hemos hecho
referencia a la dimensión religiosa.
El pecado, en sentido teológico, es
algo más: una ofensa a Dios.

ES A DIOS
A QUIEN SE OFENDE

El pecado es doblemente perso­
nal: mirando a la persona que lo
comete y mirando a la persona
ofendida. En el caso del pecado
teológico es una auténtica ruptu­
ra de la relación personal de amor
existente entre la criatura y Dios.
Por eso hemos de buscar defini­
ciones de pecado en las que apa­
rezcan más vivamente las relacio­
nes interpersonales. Por ejemplo:
«Pecar es decir no a Dios.» «Ei
pecado es la negativa del hombre
a dejarse amar por Dios», «Pecar
es no querer crecer como hijo de
Dios»... Esta última está muy en
consonancia con los deseos de
crecimiento físico del niño.
Según esto, no diremos al niño
que con el pecado «el alma queda
negra». Eso le trae sin cuidado.
Lo mismo que el faltar a una ley.
Es olvidar su gran afectividad. To­
do eso le importa bastante menos
que la persona de Dios, a quien
no quiere ofender porque lo ama.
De aquí se sigue una consecuen­
cia inmediata: El niño tendrá que
adquirir antes el sentido de Dios,
y sólo después de esta adquisición
llegará el sentido de pecodo.
Pero encontrar al verdadero Dios
no le va a resultar fácil si nos em­
peñamos en presentarlo con el tris­
te papel de castigador: « ¡Que Dios
te va a castigar...!» Hay que de­
cirle de mil maneras que Dios le
quiere y que está dispuesto a per­
donarle si alguna vez le dice «no».
Quizá lo que ocurra es que nos
resulta más fácil insistir en el as­
pecto negativo, como sí la vida
cristiana consistiera en evitar los
pecados mortales, siendo así que
existe un aspecto positivo mucho


5

más fecundo, que es el vivir la
amistad de Dios, nacida del bau­
tismo.

niño. Los padres y educadores tie­
nen aquí una misión muy delicada
y trascendente.

L A COMPLICADA CONCIENCIA

POR QUE NO PECA
VUESTRO HIJO

DE VUESTRO HIJO

Todavía antes de decir si los ni­
ños pecan o no, vamos a tratar de
ver hasta qué punto se sienten cul­
pables de sus acciones y la posibi­
lidad de una influencia exterior en
este sentimiento de culpabilidad.
Los niños, desde muy pequeños,
tienen conciencia del mal. Los si­
cólogos se atreven a decir que a
partir de los tres o cuatro años.
Sin embargo, una cosa es que sean
sensibles al bien y al mal y otra
que estén capacitrtdos para hacer
un juicio moral personal. Esto les
llegará bastante después.
Entre una y otra etapa se reali­
za un proceso de extraordinaria
importancia pora discernir la cul­
pabilidad del niño. Es el influjo en
su conciencia de 'as personas que
le rodean.
Para llegar a la moral razonable,
el niño pasa antes por lo que po­
dríamos llamar moral emocional.
En este período asimila profunda­
mente lo que padres y maestros
le hacen ver como bueno o malo.
Y así llega a formar en su interior
una conciencia impuesta desde fue­
ra: es lo que Freud llama el «super yo». Más adelante, el niño co­
menzará a independizarse hasta
formar su conciencia propia.
Pero mientras tanto, han ocurri­
do muchas cosas. El niño ha co­
metido multitud de faltas, si se
atiende a esta conciencia propia y
extraña al mismo tiempo. Faltas
que. por un sin número de facto­
res, le resulta imposible evitar. Y
entonces se siente cargado con un
peso superior a sus fuerzas, del
que, por otra parte, no se siente
responsable.
La liberación de esa conciencia,
si no se hace debidamente, puede
tener fatales consecuencias para el

6



Con todos los presupuestos an­
teriores a la vista, vamos a reco­
ger ya la opinión de diversos
autores especialistas en la materia.
Jungman dice: oiDebemos partir del
supuesto que un pecado mortal an­
tes de los diez u once años no es
generalmente posible por falta de
juicio moral personal.»
El límite aproximado de edad
puesto por este autor coincide con
el de otros muchos (Engert, Tilmann, Muncker, Tijsmans, etc.).
Algunos rebajan el límite a los
ocho años (Aragó Mitjans...). To­
dos ellos, sin embargo, admiten la
existencia de casos excepcionales.
Hansemman concluye así: «D e­
bemos tener el valor de afirmar:
¡Qué bien que un niño no pueda
ofender a Dios! Nuestros niños de­
ben saber con toda claridad que el
pecado mortal es algo terrible, pe­
ro que ellos no tienen pecados
mortales.»
Los argumentos que apuntan los
sicólogos para llegar a tales afir­
maciones pueden reducirse a estos:
Siendo tan serias las condicio­
nes que la moral pone para que
se dé el pecado mortal en el adul­
to, ¿cómo nos atreveríamos a ha­
cer responsables de falta grave a
un niño que por su irreflexión y
su dependencia de una sensibili­
dad cambiante no pueden penetran
la malicia de sus actos, por mucha
y grande que ésta sea?
J. M. Aragó, en su «Psicología
religiosa del niño», afirma: «A es­
ta edad el niño no es capaz nor­
malmente de cometer pecados mor­
tales por falta de conocimiento, de
reflexión y de libertad suficiente.»
Aparte de que la conciencia del
niño se encuentra muy condicio­
nada por las personas mayores que
lo forman. Sus faltas, al confesar-

PERO
¿LOS NIÑG

se, son las que continuamente es­
tán oyendo de esas personas.
En cuanto a la conveniencia de
hablarle del pecado grave, casi to­
dos coinciden en que no debe ha­
cerse distinción entre pecado ve­
nial y mortal antes de los diez
años (Drinkwater, Hollander...). Y
si en algún caso hay que hablar
de pecados mortales, que sea como
una posibilidad que existe fuera
del niño, en el mundo del adulto,
evitando siempre que atribuyan a
sus pequeñas faltas los castigos y
terribles consecuencias que se se­
ñalan para el pecado grave.

S PECAN?

Bueno, y si los niños no pecan,
¿para qué hacerles confesar? Se­
gún la doctrina tradicional de San­
to Tomás, no estarían obligados a
confesarse, y de hecho, en algimas
diócesis del extranjero los «obispos
tienen aconsejado hacer la prime­
ra comunión a los siete u ocho
años, dejando la confesión hasta
los diez u once años.
Pero una cosa es que no haya
obligación y otra que no deba ha­
cerse. Por razones sobradamente
conocidas (gracia sacramental, for­
mación de la conciencia, arrepen­
timiento de sus pequeñas faltas...),
la recta práctica de este Sacra­
mento beneficia mucho al niño, que
necesita hacer su vida religiosa y
moral más personal, vigorosa y au­
téntica.

H A Y QUE SABER FORMAR
SUS CONCIENCIAS

Si el pecado es sobre todo la
ofensa a una persona, lo impor­
tante será descubrir a fondo esa
persona para amarla y seguir sus
deseos. Dicho con otras palabras:
el sentido del pecado ha de ser
posterior al sentido de Dios. El ni­
ño tiene primero que saber bien
quién es Dios; después de esto po­
drá saber el significado e importan­
cia que tiene el pecado.

*

claro de la gracia de Dios?

Sentado este principio, la fonnación de la conciencia del niño con­
sistirá en invitarle a seguir a Je­
sucristo en las distintas circunst.'in-

cías de su vida infantil. No
te, vamos a dar una serie
mas prácticas a tener en
en la formación moral de
hijo.

obstan­
de nor­
cuenta
vuestro

Evitar frases tan desafortunadas
c o m o éstas: «Eso es pecado»,
«Dios te va a castigar»... Causan
un fuerte impacto en el niño y de­
forman el concepto de Dios y tam­
bién el de pecado.
No concebir la moral como la fi­
delidad a un conjunto de leyes. Es­
to desemboca en un legalismo de
funestas consecuencias: el niño mi­
rará exclusivamente lo mandado,
la transgresión, el castigo..., olvi­
dándose de su intención y de Dios,
elementos mucho más importantes.
Lo cual no significa que haya que
seguir un sujetivismo exagerado.
Debe mirarse el aspecto positi­
vo de toda ley, centrando la aten­
ción en el mandamiento del amor,
del cual todos reciben significado.
Distinguir entre una acción in­
voluntaria o inconsciente de la que
se sigue un daño y la falta come­
tida a conciencia. En la primera
habrá que reparar el daño, pero
no existe ofensa a Dios.
Ofrecer oportunidad para que el
niño pueda ejercitar su libertad y
de esta manera la eduque con mi­
ras a etapas en las que tendrá que
obrar responsablemente según esa
libertad. Así, al mismo tiempo, se
le va haciendo cada vez más re­
flexivo.
En cuanto a la forma, tener en
cuenta que toda educación dema­
siado autoritaria es contraprodu­
cente, pues hace brotar reacciones
negativas en el niño.
Por lo demás, está en la mente
de todos vosotros que la formación
de la conciencia no se puede ha­
cer en un cursillo intensivo; es tra­
bajo continuado que ha de irse es­
calonando a lo largo de la vida
infantil.
No tengáis miedo a los «grandes
pecados actuales» de vuestro hijo
de siete u ocho años; vuestra mi­
sión es hacer que no existan los
«pecados reales» de vuestro hijo
joven o adulto, por una mala for­
mación moral en su infancia.


7

A felicidad; he ahí el sueño
de todos los hombres. Se
habla de la felicidad, se le buscan
los cuatro pies. Algún día la crei­
mos tener en nuestras manos. Era
“ la forma de su huida” , como dice
el poete.
Veamos lo que unos jóvenes de
hoy piensan acerca de la felicidad.
Los lectores pueden también en­
viarnos su opinión. Y los padres de
familia, por supuesto...
—Bueno, ¿existe la felicidad o
qué?
— Hay que apretarse el cinto,
amigo. La felicidad no se encuen­
tra fócllmente.
—O es más bien como el hu­
mo...
—No tengáis prisa. Vayamos por
puntos. Hay respuestas que mere­
cen una reflexión. Cierto que la fe­
licidad no es ningún objeto para la
ciencia y, por consiguiente, no po­
demos definirla.
—He aquí la primera respuesta
que me ha dado un chico interno
—dieciséis años— : “ La felicidad
es como un tarro de mermelada
que un niño se esfuerza en alcan­
8 —

zar en lo más alto de la alacena,
y cuando la ha conseguido, le cho­
rrea por las manos” .
—Si ha sido un chico interno,
no puede ser optimista, desde lue­
go. A lo mejor es huérfano...
Usa una imagen muy gráfica.
Uno cree que está a punto de al­
canzarla y... ipafl, se te cae de
las manos.
— Puede ser que nos desilusio­
ne, si; pero esa es la realidad, el
hombre siempre esté abocado al
fracaso. Siempre insatisfecho, en
espera de algo.
— Yo puedo aportar muchas res­
puestas de este tipo. Una chica de
segundo de bachillerato me dijo ha­
ce unos dias: “ La felicidad es algo
inalcanzable. Nadie la conseguirá
plenamente. Siempre le faltará al­
go".
—Eso creo yo. Y los jóvenes lo
viven con más sinceridad que los
adultos. Mirad a los mayores;
¿cuándo los habéis visto felices?
Estáis algún tiempo en casa, os
sentáis a la mesa y en seguida os
aburrís. Entonces la tele es la úni­
ca salida; al menos ocupa algo
nuestro espíritu y puebla nuestro
silencio.

EL DINERO, OTRO PUNTO FLACO
DE NUESTRA SOCIEDAD
— ¿Y el dinero? Parece que has­
ta que uno no lo tenga no puede ser
feliz. La culpa es de los que han
hecho la sociedad antes de nos­
otros, ¿no? Cuántos jóvenes quie­
ren prescindir de él. Mirad los hippies, son ios primeros en acusar
la primacía del dinero. Y tienen ra­
zón. Hoy, se compran los testigos,
la prensa y hasta se encubre un
negocio poco limpio. ¡Qué!, se com­
pra al mismo hombre.
"Los jóvenes sueñan” , “ quieren",
“ desean...” . Se trata de algo que
hay que alcanzar.
— Esa es también mi opinión. En
este sentido, creo tener una res­
puesta más completa que las an­
teriores. Es de un chico de segun­
do curso:
“ Es tan difícil — dice— encon­
trar la verdadera felicidad que uno
a penas si se atreve a creer en
ella. Por consiguiente, la felicidad
es algo que se ha de construir y
yo espero encontrarla en la reali­
zación de mi ideal” .
— Construir: ahí está. O sea, lu­
char contra el mal uso del dinero,

— Es verdad. Uno en seguida se
encuentra a sí mismo, se siente a
sus anchas, es sincero. No se ne­
cesita echar mano al disimulo o
al engaño. Se vive plenamente y
se llega a realizar la persona. Sólo
nos encontramos a nosotros mis­
mos cuando estamos en compañía.
— Y todo esto es la felicidad,
¿no? La que decía que sólo era
humo ha salido malparada...
— ¡Alto! Todas estas cosas son
“ partes” de la felicidad, pero no
"la” felicidad.
LA FELICIDAD,
EL EXITO Y LA BURGUESIA

contra la guerra, contra la publi­
cidad.
—Tal vez. Pero la felicidad tam­
bién consiste en dar gusto y no
sólo en "luchar contra” . Conozco
a una chica para quien la felici­
dad consiste en “vivir su vida acti­
vamente, es decir, complacer a ios
demás, ayudarles” . Y otra de quin­
ce años añade: “es necesario sa­
ber sacrificarse” .
—Yo creo también que no pue­
de “encontrarse” la felicidad, pues
nunca se da como una cosa he­
cha. Porque, además, ni es una
Idea ni siquiera una realidad con­
creta. No existe, como decíais; es
preciso construiría.
—Lo mismo creo yo. Todos los
jóvenes insisten en esta idea de
acción, de lucha.
Sin duda; lo que los jóvenes
quieren es actuar. Hasta Marx de­
cía; “Es necesario dejarse de con­
templar el mundo, lo que importa
^ transformarlo” . Y tenia razón;
la contemplación a penas nos sires estéril.
—Déjate de bromas. También hay
que pensar, ¿no? Es muy bonito
actuar; pero si nunca piensas en

lo que tienes que hacer, te enga­
ñas, vas a ciegas.
— ¿Me permites? No es que yo
quiera eliminar la reflexión. Lo que
yo he querido decir es que no es
necesario que seamos intelectua­
les puros. Recuerdo lo que el otro
día dijimos en clase:
"A una base cultural, prefiero
una base humana. Hay personas
que poseen una gran cultura, pero
que cierran sus puertas a ios de­
más. Yo sé que mi puerta siem­
pre estará abierta para todos” .
Para mí, es ésta la acción que
interesa hoy por hoy.
— Es cierto, pero para ello es
preciso no estar solo. El que que­
da solo está perdido. ¿No hemos
subrayado lo feliz que uno se sien­
te al hacer cualquier cosa en com­
pañía de otros?
— Sí. Para realizarse plenamente,
uno debe abrirse hacía afuera. De
lo contrarío, uno quedaría inhibido
y se nos miraría como a eternos
niños.
—^Al menos con los de nuestra
misma edad, uno comparte las mis­
mas ideas, nos apoyamos mutua­
mente..., en fin, uno se siente per­
sona.

—Tengo que aportar algo nuevo.
No hace mucho, hablábamos de
“fracaso” ; pero una chica me ha
confesado: “ La felicidad consiste
en el éxito".
— Si el éxito es sinónimo de di­
nero, ya hemos dicho que la feli­
cidad no está en él.
— No es cuestión de dinero, des­
de luego. Uno tiene éxito, por ejem­
plo, cuando se desenvuelve bien.
— Sí, pero muchos confunden el
éxito con la buena vida.
—A nadie se le obliga que esté
de acuerdo. Pero no cabe la me­
nor duda de que de ninguna ma­
nera puede ser feliz el que fracasa
continuamente.
— Cierto; pero entre eso y dedi­
carse a la vida burguesa hay mu­
cha distancia.
— Escucha, lo que es necesario
es permanecer libres. No sé sí es­
taréis de acuerdo, pero cuando uno
está libre de sf mismo, libre de su
dinero, de su tiempo, de sus lec­
turas. uno es feliz y jamás podrá
aburrirse.
— No comencemos ahora a ha­
blar de la libertad, porque no ter­
minaríamos nunca. Ya es hora de
marcharnos.
— Entonces, ¿en qué quedamos?
No hemos dicho en qué consiste la
felicidad.
— No seas pelma! Pero lo que
hemos dicho es válido, ¿no os pa­
rece? Todas estas cosas son va­
lores y elementos que constituyen
la felicidad.
— Y, sobre todo, json elemen­
tos y valores cristianos!
— Si os parece bien, termina­
mos con la respuesta de un chico
de cuarto año:
“La alegría es pasajera, la feli­
cidad es algo que se debe cons­
truir cada día; no podencos ni de­
finirla ni explicarla, hay que crear­
la.”


9

MADRID• VILLA A M IL

BODAS DE ODO

UN 8 DE DICIEMBRE
Don Bosco comenzó su gran obra en
un 8 de diciembre. El fuego de su celo
apostólico p r e n d i ó en el corazón de
España (Madrid), llevado por tres Hi­
jas de María Auxiliadora y una postu­
lante también en una fiesta de la In­
maculada de 1920. Sus nombres: Sor
Rosario Muñoz, directora; Sor Concep­
ción Lafuerza, perpetua; Sor Juana V i­
cente, recién profesa, y Sor Lorenza Her­
nández, postulante. La fundación estaba
patrocinada por la Excelentísima Conde­
sa de Floridablanca, y contaba con es­
casísimos medios económicos, pero el ce­
lo de la Inspectora, madre Emilia Frachia, entrevió el bien inmenso que esta
obra reportaría.
Entre el ayer humilde y lleno de sen­
cillos encantos: tres hermanas, una pos­
tulante y cuatro alumnas, y el hoy flore­
ciente y prometedor, hay toda una his­
toria en cuyas páginas se lee una sola
frase que hemos hecho lema de nuestro
año cincuentenario:

TODO LO H A HECHO ELLA
Con el fin de hacer vivir a toda la Co­
munidad Educativa la riqueza de estas
celebraciones, las bodas de oro se han
escalonado en j a l o n e s , que hagan de
nuestra vida religiosa renovada un can­
to de gratitud a María y de nuestra ac­
ción educativa el mejor homenaje.
Triduo de apertura: 5, 6 y 7 de diciem­
bre de 1970.
Estreno de la película «Sarmientos de
una tierra fuerte».
Apertura: fiesta de María Inmacula­
da: 8 de diciembre.
La antigua alumna en fraternidad con
sus educadoras: fiesta de Don Bosco,
31 de enero de 1970.
Gratitud de las familias al centro edu­
cativo; fiesta de San José, 19 de marzo.
Clausura del año cincuentenario: 20 y
21 de marzo de 1970.
UNA PE U C U LA
En cinco sesiones de
se proyectó la película
zarello, «Sarmientos de
te» a las Comunidades

10



cine, en las que
de Madre Mazuna tierra fuer­
de Hermanas de

Madrid, antiguas alumnas, padres de fa­
milia, oratorios y alumnas, resumimos
este triduo de apertura como una vuelta
a los orígenes del Instituto, como un
¡Gracias! al Instituto, que se hizo maes­
tro de almas grandes en esta barriada
de Villaamil, siguiendo las enseñanzas de
nuestra Santa Madre Mazzarello. El pú­
blico hizo los mejores elogios, auguran­
do un bien inmenso doquiera se proyec­
tara la vida de nuestra Santa. Particular­
mente, los salesianos, las superioras y
hermanas de las distintas Congregaciones
religiosas que asisten al acto, nos fe­
licitan.
RUEDA DE PRENSA
La celebración comunitaria de la Eu­
caristía abre este día hermoso. A las
ocho, la misa de comunidad para her­
manas y alumnas internas; a las once y
a las doce, para alumnas externas, co­
operadores, antiguas alumnas y padres
de familia. El coro orquestado del cole­
gio expresa su alegría al Señor y ofrece
en un único sacrificio penas, alegrías,
luchas y victorias de estos cincuenta
años, hechos canto y oración.
A continuación, en el salón de actos
se tiene una rueda de prensa, en la que
diez antiguas alumnas de las distintas
generaciones, que han pasado por el co­
legio, responden a interesantes pregun­
tas. Con naturalidad, sencillez y eviden­
te emoción, las primeras alumnas del
año veinte hablan de los difíciles co­
mienzos, la casita pequeña y pobre, la
postulante debía con frecuencia ir en
busca de medios para el sustento de las
hermanas, los primeros intentos de am­
pliación, con la directa intervención de
la Virgen en el pago de los obreros, la
inauguración de un edificio nuevo en el
curso 1926-27 con ocho clases y 400
alumnas y 500 oratorianas. Escuchando
las narraciones de las antiguas alumnas
que vivieron las quemas del colegio el
año 1931 y 1936, el público lo seguía
con sumo interés, aplaudiendo sin cesar
a aquellas heroínas, que supieron dar su
mejor lección, siguiendo las huellas del
Maestro. También entre las participan­
tes de la rueda de prensa había alum-

ñas de las que no conocían a las Hijas
de María Auxiliadora vestidas de seglar,
ejerciendo siempre su acción apostólica,
incluso el Oratorio Festivo, por las ca­
lles de Madrid, al final de la Moncloa.
El famoso 4 de mayo de 1936 fue narra­
do con viva emoción por una querida
antigua alumna, que siguió a las herma­
nas en su viacrucis de una hora de per­
secución, martirizadas, abandonadas, in­
sultadas por las calles de Madrid. El re­
sumen de esta hora de clase lo hace una
de las hermanas perseguidas: «Durante
este tiempo de persecución el Señor nos
hizo mercedes muy grandes, no siendo
la menor, la inmensa compasión sentida
hacia todas aquellas pobres gentes.» Y
la semilla encerrada dio su fruto: los du­
ros tiempos de la generación de la post­
guerra imprimen a la casa un formidable
desarrollo: la nueva iglesia, el edificio de
Bachillerato, la creación de la Escuela
de Magisterio «San Juan Bosco», la nue­
va ampliación de la Enseñanza Primaria,
la inauguración del nuevo y magnífico
salón de actos, son etapas vividas por
estas antipas alumnas, que nos narran
una historia hecha de fe en la Providen­
cia y de amor a la juventud.
Los actos de la tarde, presididos por
nuestra querida madre Inspectora, Sor
María Cándida Ropero, en compañía de
dos de las fundadoras, la inolvidable Ma­
dre Juana Vicente y la querida Sor Lo­
renza Hernández, llevan el sello de la
alegría y de la fraternidad. Una fervo­
rosa celebración de la palabra nos con­
grega en torno a la Eucaristía para dar
gracias en esta tierra santa de la Vir­

gen que, es nuestra casa de Villaamil.
En el salón de actos del colegio, a las
cinco de la tarde, se congregan superioras hermanas, antiguas alumnas, alum­
nas, padres de familia y cooperadores
para agradecer a María en las formas
más variadas las maravillas que aquí ha
obrado por medio de sus hijas. Se suce­
de el canto entusiasta de las alumnas, la
voz agradecida de la primera alumna del
colegio, Eulalia Ranz, el pregón dcl año
cincuentenario, poniendo en escena a la
protagonista de las bodas, Villaamil jo­
ven, esposa y madre. El cuadro artístico
del colegio pone en escena un auto sa­
cramental mariano de nuestro inmortal
Lope de Vega: La puente del mundo, que,
maravillosamente interpretado, resulta un
canto de amor a la Inmaculada. Las pe­
queñas también participan con sus bai­
les expresando la alegría que todas sen­
timos al final de este día tan grande pa­
ra la historia de la casa.
Con estas fiestas se ha abierto el pór­
tico de las celebraciones cincuentenarias.
Se ha entonado el canto de amor a la
Virgen y lo continuaremos cantando con
el silencio del deber cumplido, la reno­
vación en nuestra vida religiosa y au­
nando las voces de todos cuantos en es­
tos jalones de festejos necesitan decir
gracias a la Madre Auxiliadora, que pa­
rece decirnos como a Don Bosco:
«Esta es mi casa, de aquí saldrá mi
gloria.»
Inspectoría «Santa Teresa de Jesús»
Madrid - Villaamil
8 de diciembre de 1970

Sor Juana Vicente, fundadora de la casa, dice que “Todo lo ha hecho Ella”, Son testigos hermanas
y alumnas de la primera hora, que la acompañan.



11

t

DESBE
FILIPINAS

YO ACOMPAÑE
AL PAPA

Desde Filipinas, escribe una crónica para nues­
tro Boletín el salesiano burrjálés don Lázaro Revilla.
E l mismo nos manda también las fotos que publi­
camos.

CINCO MILLONES DE FILIPINOS ACLAMAN AL PAPA
El Papa Pablo VI, el primer Pontífice que ha
visitado el Extremo Oriente, llegó al aeropuerto de
Manila el 27 de noviembre, a las nueve y media
de la mañana, recibiendo la mayor y más calurosa
bienvenida que las Islas Filipinas hayan rendido
jamás a cualquier otro ilustre visitante.
El avión fletado del Papa, un DC-8 Alitalia, lle­
gó con 30 minutos de retraso debido a la visita del
Papa a Dacca, Pakistán, donde expresó su dolor
por la reciente catástrofe ocasionada en dicho país
por un ciclón y maremoto, y en la que murieron
alrededor de 300.000 personas.
Cuando el Pontífice hizo su aparición en la por­
tezuela del avión y dio la bendición «U rbi et Orbi»,
la ingente muchedumbre de personas aglomerada en
el aeropuerto de Manila irrumpió con un estruen­
doso aplauso y fuerte grito «V iva el Papa».
A l bajar del avión, el Papa recibió un ramillete
de floros de Imclda Marcos, hija del Presidente
Marcos. A l pie de la rampa, fue recibido por el Pre­
sidente y la Primera Dama, quienes lo escoltaron
hasta la plataforma ceremonial.
Después de los discursos en la plataforma cere­
monial. el Papa saludó a los miembros del cuerpo
diplomático, altos funcionarios del gobierno, y pre­
lados.

12



SIN IGUAL BIENVENIDA
Si la bienvenida a Su Santidad fue muy cálida en
el aeropuerto, la que le rindió la muchedumbre ali­
neada a lo largo de la ruta hasta la catedral de
Manila y el Parque Rizal, fue desbordante. Se calcu­
la en cinco millones de personas las que se alinea­
ron a lo largo de la ruta para ver al Papa y recibir
su bendición. Era la primera vez en la historia del
país que tanta gente se reunía para rendir tributo
de cariño y lealtad a un visitante extranjero.
Tan grande fue el entusiasmo del público de ver
ai Papa, que el coche papal tuvo que detenerse in­
contables veces para dar oportunidad a los guardias
de seguridad a abrir paso al vehículo del Santo
Padre.

PRIMERA MISA EN LA CATEDRAL
La comitiva papal llegó a la catedral de Manila
a las once y cuarto, donde Pablo V I c e l e b r ó
la primera de tres misas que celebraría en las Islas
Filipinas.
En la catedral se hallaban reunidas unas 5.000
personas incluyendo a los cardenales y obispos que
habían asistido al simposio de los obispos del sudes­
te asiático, sacerdotes, religiosos y religiosas. Cuan­
do el Papa hizo su entrada en la catedral se oyó
de nuevo el grito «V iva el Papa», a la par que la
coral de la catedral manileña interpretaba a voces
mixtas el «Tu es Petrus».
La lengua usada por Pablo V I en su estancia de

tres días en Manila fue la inglesa. Después de la
lectura del Santo Evangelio, Su Santidad dirigió
un sermón en un inglés bastante intelegible al pú­
blico allí presente en el que entre otras ideas expre­
só la siguiente: «Qué alegría es para el Papa veros
a todos vosotros reunidos aquí en este lugar sagra­
do de oración. Nuestro primer deseo es el de rendir
sentido homenaje a las generaciones de misioneros
que, desde los comienzos, han formado esta admi­
rable comunidad cristiana de Filipinas, de la cual
vosotros, sacerdotes, religiosos y religiosas de esta
tierra, sois el mejor testimonio.»
El Papa exhortó a las presentes a «cobrar ánimo.
Es el Señor quien os ha llamado y os manda a su
viña. Vosotros trabajáis por El. "Nosotros somos
trabajadores de Dios” podéis decir con San Pablo».
Su Santidad el Papa terminó el sermón impar­
tiendo su bendición apostólica.

LA UNIVERSIDAD DE SANTO TOMAS
ES HONRADA POR LA VISITA DEL PAPA
Si el día de la llegada a Manila el Papa tuvo un
día agobiado de trabajo, el día siguiente, sábado,
fue todavía más atareado.
A las siete de la mañana dejó la casa de la nun­
ciatura apostólica para dirigirse a la Universidad
de Santo Tomás.
A las ocho fue recibido en los patios de la uni­
versidad por una abigarrada masa de estudiantes
y universitarios de diversos centros y universidades
de Manila.
En su discurso el Papa dijo a los estudiantes y
universitarios que supieran moderar sus críticas,
admitiendo generosamente su error cuando éste es
patente. E l siguiente es un extracto del discurso:
«La juventud de Filipinas, al igual que la de todo
el Asia, está en marcha. ¿Sabéis a qué dirección
vais ? ¿ Tenéis un cuadro claro de los objetivos a
que aspiráis ? Vuestra edad es la edad de la crítica,
y ésta puede ser útil para la sociedad, que no siem­

pre llega a la perfección. Vuestra edad es también
una edad de generosa entrega de si mismo (selfgivin g) y esto es lo que el pueblo filipino espera
de vosotros. Lo que se pide de vosotros es una armo­
nía equilibrada de estas dos actitudes...».
A las nueve el Papa se transladó al edificio de
la facultad de medicina, donde el Cardenal de Co­
rea, Monseñor Esteban Suo Kwan, le dio la bien­
venida en nombre de todos los miembros de la con­
ferencia episcopal asiática.
En esta reunión, en la que se leyeron las conclu­
siones fruto de una semana de conferencias y dis­
cusiones, el Papa instó a todos los obispos y carde­
nales presentes a que ofrecieran la fe católica a
todos «sin distinción o condición, sin ningún liga­
zón privilegiado con una raza, un continente o una
civilización».
Con esta declaración, el Papa implícitamente cri­
ticó la antigua tradición de la Iglesia de enlazar los
esfuerzos misioneros al esfuerzo de imbuir en los
nativos las maneras occidentales.
A las cinco de la tarde el Papa, asistido por los
presidentes de la conferencia episcopal, concelebró
la misa pontificia en ej Luneta Park en la que orde­
nó de sacerdotes alrededor de unos 200 diáconos pro­
venientes de diferentes naciones del Asia. Entre
ellos se encontraba el diácono Demetrio Carmona,
clérigo filipino salesiano. E l Papa distribuyó la pri­
mera comunión a 200 niños procedentes de varias
partes del continente asiático.
La masa de gente que asistió a la concelebración
fue estimada en más de un millón.

ULTIMO DIA DEL PAPA EN FILIPINAS
E l último día del Papa en Manila fue muy agi­
tado.
El Santo Padre empezó su itinerario a las siete y
media de la mañana. De la Nunciatura en la A ve­
nida T a ft se dirigió en automóvil, seguido por una

El Papa visitó el barrio de Tondo, y nuestras escuelas. En el fondo vemos las chabolas; pero el Santo Pa­
dre está rodeado del afecto clamoroso de sus hijos los pobres.

rriada de Tondo cuando Pablo V I visitó a varias fa­
llas pobres, siendo xma de ellas, la de Carlos Na­
varro, un obrero con diez hijos, que vive en una
casa realmente pobre. En esta familia una de las
hijas está tullida, víctima del polio. E l Papa donó
500 dólares americanos a la familia.
Antes de partir el Santo Padre para la Nuncia­
tura, tuvo la gentileza de donar su propia estola a
la parroquia salesiana en las manos del sacerdote
salesiano burgalés, Eduardo Revilla, al mismo tiem­
po que felicitó en privado a la comunidad salesiana
por la labor grandiosa que desarrollan en la barria­
da de Tondo y por lo bien que habían organizado
la ida del Papa.

El Papa conversa con los salesianos que lo han re­
cibido con gran amor en la casa de Don Bosco.
hilera do cochea, casi incontables, al Círculo Memo­
rial de Quezon, en Dlliman, Ciudad Quezon, para
oficiar allí una misa de campaña, la tercera y últi­
ma del Santo Padre en Filipinas.
Se calculó en casi un millón deperaonaa, predomi­
nantemente obreros, las que asistieron al sitio para
oír la misa pontifical.
Después de la misa, la comitiva papal se dirigió
a cRadio Verltas», la mayor en Asia, con excep­
ción tan sólo de la de Pekín. En «Radio Verítas»
el Papa estuvo hasta las once y cuarto de la ma­
ñana, para después dirigirse a Pasig, donde visitó
el barrio Rosarlo en la Avenida Ortigas, que se de­
dicó a su nombre.

EL PAPA VISITA LA ESCUELA SALESIANA DE TONDO
Él mismo día domingo, a las tres cuarenta y cin­
co de la tarde, el Papa encabezó otra comitiva mo­
torizada a Tondo, pasando por los bulevares do Harrlson y Roxas. Su destino era la escuela salesiana
do artes y oficios situada en la barriada de Tondo.
El Santo Padre llegó a las cuatro y diez a la es­
cuela salesiana, donde fue recibido con grande en­
tusiasmo por miles do personas do la barriada y
otras partes de Manila que allí se hablan congre­
gado ansiosas de ver una vez mús al Papa de ojos
azules, tez blanca, y ademán gentil.
El muy reverendo padre Luis Ferrari, Provincial;
el padre Agustín López. Vice-Provincial; el padre
Miguel Solaron, Rector de la casa de Tondo; el pa­
dre Eduardo Revllla, Prefecto; el padre León Barattonl. Párroco, y el padre Juan Andrew, Conseje­
ro, lo dieron la bienvenida en nombre de la Con­
gregación Salesiana.
El Santo Padre dirigió la palabra a la muche­
dumbre aglomerada delante dcl edificio. A conti­
nuación pasó por diferentes partes de la casa donde
encontró a los miembros de la familia salesiana, a
los fundadores de la institución, y a las asociaciones
organizadas por la escuela y la parroquia. En la
capilla el Papa bendijo a un grupo de enfermos y a
los niños de la coral de la parroquia.
Sin duda alguna, el acto más emotivo de la visi­
ta del Santo Padre a Manila tuvo lugar en la ba­

14



Realmente la visita del Papa a la escuela sale­
siana de Tondo ha sido y será una visita histórica
a la par que gloriosa para la familia de Don Bosco
en las Islas Filipinas.
De Tondo el Papa retornó a la Nunciatura para
dar cima a otro programa importante: la conferen­
cia ecuménica con líderes religiosos de diferentes
denominaciones Protestantes y de otras religiones
no cristianas.
Esta conferencia ecuménica se finalizó a las seis
y media para dar tiempo al Papa a prepararse para
la marcha al aeropuerto y la partida para Pago
Pago, Samoa americana.
L A Z A R O R E V IL L A
Salesiano en Filipinas

P E R E G R IN A C IO N A S A N T IA G O DE
COIMIPOSTELA P A R A G A N A R E L
JUBILEO D E L AÑ O SA N TO CON
T O D A L A F A M IL IA S A L E S IA N A
DE E S P A Ñ A
Día S9 de abril.— M A D R ID , salida a primera hora
do la mañana a V A L L A D O L ID , almuerzo. LE O N ,
tiempo libre. P O N F E R R A D A . cena y alojamiento.
Día SO de abril.— P O N F E R R A D A , desayuno y salida
hacia SA N T IA G O , almuerzo. N O YA , cena y alo­
jamiento.
Día 1 de mayo.— L A TOJA, desayuno y salida hacia
L A CORU n A, almuerzo. Tiempo libre. L A TOJA,
cena y alojamiento.
Día t de mayo.— L A TOJA, desayuno y salida hacia
S AN TIAG O , asistencia a los actos de la Peregri­
nación Nacional, almuerzo. Día libre. L A TOJA,
cena y alojamiento.
Din S de mayo.— L A TOJA, desayuno y salida, por las
Rías Bajas a VIGO, almuerzo. O RENSE, cena y
alojamiento.
Dia 4 de nuipo.—O R E N S E , dosaj'uno. S A L A M A N C A ,
almuerzo. M A D R ID , llegada a última hora de la
larde.
Precio por persona: 3.790 pesetas.
Este precio incluye: Transporte en autocar. Alo­
jamiento en hoteles de categoría turista, habita­
ciones dobles sin bajo y en régimen de pensión
completa. Asistencia técnica.
Este precio no incluye; Todo tipo de extras en los
Hoteles y cualquier servicio no especificado en el
programa.
Plazas limitadas.
En colaboración con «\nAJES A L T A M IR A ».— Gru­
po A. TIt. 223.
IN S C R IP C IO N E S : Al Delegado de Cooperadores del
correspondiente, o ;
Blas Calejero. Delegado Provincial Cooperadores.
General Primo de Rivera. 27
M A DR ID-5

ENSEÑADLES EL
SENTIDO DEL PECADO
Llamaba al pequeño transgresor y
le ordenaba desde el sillón:
—Anda, tréeme aquella vara.
—¿Es que va a pegarme?
—Pues claro; acércala—. El chi­
co iba por ella y se la daba.
—Ahora, ven acá—. El tunante
se excusaba:
—Pero .abuela, yo no he des­
obedecido.
—Bien, entonces, en vez de uno,
te daré dos azotes.
—Abuela, perdóname.
—Eso no basta.
—Abuela, hice mal, pero no lo
haré más.
—¿Reconoces tu falta de ver­
dad?
—Sí, abuela.
—Hala, pues deja la vara en su
sitio y no vuelvas a repetir la tra­
vesura.
Casi siempre terminaban así las
cosas. Los chicos reconocían en
seguida sus faltas sabiendo que
era el medio para librarse del cas­
tigo.

EIUQIEMSS COMO DON BOSCO
Ausente Mamá Margarita, cuan(fo alguno de los chicos hacía al­
guna travesura, la misma abuela
la primera en no dejarla pasar.

La corrección es necesaria; pero
lo más importante es que los chi­
cos reconozcan sus errores, y más
aún, que lleguen a darse cuenta
del sentido del pecado. Faltar no
es desobedecer a un mayor, es
“ rechazar al Señor” . El día en que
los muchachos comprendan que
Dios les pide algo que no son ca­
paces de dar, ese día han descu­
bierto el verdadero sentido del pe­
cado. ¿Qué haremos entonces? He
aquí algunas normas:

No exageremos haciéndoles
creer que es pecado cualquier co­
sa: alborotos, excentricidades, tra­
vesuras... Todo esto no puede conv
pararse con una falta al amor de

Dios. Demostremos con nuestra ac­
titud que existe una profunda di­
ferencia entre pecado y travesura.
• Tengamos cuidado en no
centrarlos en un ideal egoísta. Me­
jor orientémoslos hacia esfuerzos
que los libren de si mismos; ense­
ñémosles la atención hacia los de­
más, el espíritu de servicio, el de
responsabilidad. El joven compro­
metido en servir a los demás estará
en las mejores condiciones para
gobernar sus arranques instintivos.

Es de gran importancia que
los jóvenes aprendan a responder
de sus actos, no sólo frente a nues­
tra autoridad, sino ante la voluntad
de Dios. Este principio vate para
todas las edades, pero se impone
más aún a partir de los dieciséis
años. Nuestro papel es el de tra­
ducir esta voluntad del Señor, có­
mo se expresa en la ley de la Igle­
sia, en el deber del estado. Antes
mandábamos: “ Debes hacer es­
to ...” Adoptemos progresivamente
el modo indicativo, testimonios de
nuestra fe: “ He aquí lo que el Se­
ñor pide... Ahora tienes tu concien­
cia...”

Cuando tengamos que preci­
sar tales aplicaciones concretas del
deber cotidiano, las remitiremos sin
cesar a esos grandes fundamentos
que no admiten discusión: el amor
fraterno, la lealtad, el respeto a las
personas, el perdón.

No hay que creer tampoco
que nuestra vigilancia preservará
infaliblemente a nuestros jóvenes
de toda forma de mal; que nunca
darán un paso en falso. Es nece­
sario aconsejar, orientar. Pero es
preciso aceptar también algunos
riesgos: no se aprende a ser un
hombre libre, como ocurre en la
natación, sin algunos movimientos
falsos. Pero si no siempre se pue­
de impedir una herida, siempre se
deben evitar los golpes que pu%
dan herir mortalmente.

Que el testimonio de los pa­
dres vaya a la'par de sus consejos.
Que sean por lo menos esos cris­
tianos que muestran el camino de
una ley mora! vivida en la alegría,
de una ley que aporte la expan­
sión y que libere. El ejemplo por
delante, como el pastor.


15

PADRE

«ZA N TO QUE NO ZÚA...»



Dios me ha tratado siempre (^on mu­
ellísimo cariño...
«¡duaiiito Torres, Juanito Torres!, ¡qué
apellío tan bien peiisao!», le dijo una
S;itana.
Sus obras de Orihuela y Jerez de la
Frontera, frutos de un gran celo apos­
tólico con sello marcadamente popular.

Curro es un viejecillo amigo, l'j
viejecillo «embebió». (Es suyo
adjetivo.) «Embebió» por ese c»
tinuo azacanarse de la gente
bre, ganosa siempre de un pedia
de pan limpio y sabroso. De - ,
bios de este anciano hortelano 0^
aparte algunas mínimas traicioM
de la memoria goza de eso <i*!
llaman los médicos agerasia
mi la quisiera), he escuchado
lijas explicaciones llenas de
duria. El ha aprendido por cur
propia que zanahoria tiene h in
calada.
«Zanto que no zúa, zu a;
que lo zacúa.» Curro explica
en las parroquias suele haber t
santo cuyo cepillo se llena de c «
tarinas monedas devotas... Es 4
santo que suda... A estos sana
el sacristán ios cuida esmerad
mente, les repasa la pintura, <
sacude el polvo, los mantiene pr
sentables y decentes. A los otrt
a los santos que n u n c a logn
atraer a sus pies el reguero de:
frecuentes iimosnitas, a esos... <!■
les sacuda su abuela.
Bien. Pues os presento, qu®
dos lectores del Boletín Salesitf
a un «zanto que zúa». Se trata í
Padre Juan TORRES SILVA

________________________
16



JUAN TORRES SILVA

He transpuesto la puerta del aside las Hermanitas de los Pode Jerez de la Frontera. Un
desmazalado en cielo muy alto,
iuy gélido, no es excepción en
sta Navidad-70 de España, blan■dsima de muchas nieves, aterit con grados negativos de riguKo estreno.
ííta casa es enorme, y por sus
'lOs pasillos, de altísimos te. una hoja de cuchillo, fría y
da, corta el resuello. El santo
*rtn José tiene a sus pies — co­
jo ya es tradicional— en el vesWo del asilo, tres tarritos con
arroz y alubias. Una relide acento catalanísimo me
que nunca las abandona
Providencia ni el patrocinio de
an José.
Don Juan Torres está pacificá­
bate recluido en su cuarto, traiMo de prestar a su cuerpo ven^ el calor de la cama, siempre
y limpia. Goza de una lullena de optimismo, de graque a ratos y a días desapadejando en su mente una
*tusa calma, que no le consien• re«)nocer heclK>s ni personas.
' conversación con el Padre ToSilva es siempre fácil.

— Don Juan, vengo a sacarlo en
la prensa.
— ¿Prensao me vas a sacar?...
— ¿No se enfadará usted?
— ¡Huuuy! Yo siempre he queri­
do a todo el mundo.
A mediados del pasado mes de
diciembre, el « A B C » de Sevilla
publicó una fotografía en la que
los s e ñ o r e s componentes de la
Junta de Gobierno de la Orden del
Catavino de Oro rodeaban a Don
Juan Torres, miembro de esta ¡lus­
tre y singular cofradía... El pie de
foto aseguraba que Don Juan era
salesiano. A l recordarle yo al oc­
togenario sacerdote, la equivoca­
ción, reacciona fulminante:
— Es una equivocación que me
honra.
Efectivamente: él cantó su pri­
mera misa en la sevillana casa de
la Santísima Trinidad, donde re­
cibió su primera formación. Una
formación ambiciosa que picoteaba
en los libros, en las partituras, en
los t a II e r e s de encuademación.
Tiempos del Padre Ricaldone, de
Don Joaquín Dalmau, del Maestro
Pía...
— ¿Se acuerda de Don Pedro Ricaidone?
— ¡Huuuy! Fue un padre, im pa­

dre, para mí. Siempre tenía a Juanito en los labios.
Don Juan tuvo que abandonar
la Congregación. Hijo único, no
quiso dejar desamparada a su sa­
lerosa mamafta. Tuvo que force­
jear, porque la menudita vieja re­
petía que la Providencia no la
abandonaría. A pesar de este for­
zado trompan filas» que el Padre
Torres dio en su juventud salesiana, muy dentro del corazón lleva
la huella.
— La devoción a María Auxilia­
dora y el buen humor son las co­
sas que más debo a los salesianos.
No concibo a una persona triste.
Y se comprende. A pesar de su
andar pasicorto y torpísimo y de
los dolores de huesos que recorren
su generosa estatura, el Padre To­
rres Silva no para de lanzar chiri­
gotas y de tomarse suavemente el
pelo a sí mismo. Ya San Francis­
co de Sales afirmaba que la tris­
teza es como un invierno malo que
todo lo marchita.
UN CABALLO Y UNA TORRE
El Oratorio Festivo jerezano es­
tá ya sufriendo en sus macizas en­
trañas el prurito de la albañilería.
Se ampliarán y levantarán nuevas
plantas. Sus centenares de alumnos
de Enseñanza Básica y de Bachille-

Don Juan Torres siempre estuvo
con su madre. La alegre y buenísima anciana era una fuerza que
lo alentaba en sus obras.

rato se verán incrementados con
nuevos elementos.
El 5 de febrero de 1939, fecha de
la bención de la primera piedra, su
fundador gozaba con un alegrón in­
finito, coronándose así tretas eco­
nómicas y esfuerzos incontables. Es
verdad que esta casa que se levan­
tó cerca de donde hoy Jerez ex­
tiende sus últimos tentáculos, fue
costeada por todo el pueblo, cada
cual según la condición del propio
bolsillo, acaudalado o atribulado...
Pero hay lotes que bodegas, casas
y familias pudientes levantaron por
iniciativa propia.

con las ganas de asistir a ella...
Eran tiempos de severas prohibi­
ciones. ¿Recuerdan la anécdota que
Pemán cuenta en el libro de sus
almuerzos?... Un torerillo de ma­
nos aún inocentes, aguardaba en
la maestrante plaza de Sevilla la
salida de su marrajo. Cuando apa­
reció el bicho, las piernas del mu­
chacho temblaban sensiblemente, a
ojos vista. Una voz sonó desde la
andanada;
— ¡No bailes, muchacho, que lo
ha prohibido el Cardenal!
El pildorazo que una gitana le
soltó a Don Juan un buen día, te­
nía razón que le sobraba;
— jJuanito Torres, Juanito To­
rres, que apellío tan bien pensao!...»
Por estas tierras hubo un gltanazo, formidable seguiriyero, que
acabó llamándose Manuel «Torre»
— sin plurales— , porque su proge­
nitor fue grande y macizo.
Con la torre y el caballo, cada
uno saltando a su aire por los es­
caques de un ajedrez de la caridad
en el que la mano del Señor pro­
porcionaba todos los mates, el Ora­
torio Festivo de Jerez llegó a su
término, pasando, por voluntad de
su Fundador, a manos salesianas.
PERDONA QUE NO PODAMOS
BRINDAR...
— ¿Le gusta el vino, Don Juan?
— ¡Huuuy! Siempre me ha gus­
tado. Pero prudentemente. Porque

hay dos formas de abusar del vino:
tomándolo con demasiada frecuen­
cia o no tomándolo nunca...
Está convencidísimo de que su
salud, sus buenas condiciones, se
deben casi totalmente a él. Don
Manuel María González Cordón re­
mató hace tiempo una especie de
Biblia del vino, voluminosa, ame­
nísima, en la que nos cuenta el
milagrito de equella cucharada de
vino que le devolvió la vida cuan­
do aún era un pipiolillo pertene­
ciente a los santos inocentes.
Llega el almuerzo. El anciano
padre Torres goza de un apetito
escalofriante.
— Ya no puedo masticar. No me
queda ni uno: ni en el piso bajo ni
en el alto. Tiene que suplir la bue­
na voluntad.
— Don Juan, diga usted: institucionalización.
— Institucio... ¡Huuuy!
Uno de los ancianos acogidos en
el asilo trata de quitarle ropas de
abrigo.
—^ y e , pero el apetito no me lo
quites.
— Está usted hecho todo un mo­
cito.
— ^Tan mocito que parezco un
niño chico. Y o soy fuerte y valien­
te y padezco una enfermedad que
no tiene ciua: me he quedado sin
cabeza.
— ¿Y de dinero qué, Don Juan?
— Nunca he s i d o aficionado a
eso. A pesar de los miles que han
pasado por mis manos. Porque las

1

Uno de estos bien dispuestos
bienhechores fue don Alvaro Domecq. Aquella jaca de sus glorias
y de lua lágrimas, cabrioleó por
muchos elberos de España tren­
zando toda una historia del rejo­
neo, ya imposible de ignorar. En
buena cerámica sevillana, consta
en el patio del colegio una cuádru­
ple estampa de aquellas soberanas
lecciones.
Don Juan se valía de sus famo­
sas multa^ publicadas en un sa­
leroso periodiquillo. muchas veces
redactado a altas horas de la no­
che, para sacarle los cuartos al
lucero del alba. En una corrida de
toros organizada en beneficio del
Oratorio, de la que queda constan­
cia en una de las fotos el propio pa­
dre T o it m Silva hubo de quedarse

18

El patio del Oratorio Festivo y sus alegres aulas se han quedado peque­
ños para los centenares de alumnos que llaman a sus puertas. Esto, en
su ancianidad, llena de alegría profunda a su Fundador.

PEREGRINACION NACIO­
NAL
DE A N T I G U O S
ALUMNOS SALESIANOS A
SANTIAGO.
28 abril a 6 mayo, 1971

Con las manos en los bolsillos del abrigo, nada menos que MANOLETE.
Junto a Alvaro Domecq y uno de los Belmente que tras él se esconde,
muchos señores del toreo grande de entonces, dispuestos a ayudar a
la obra benéfica en favor de los niños pobres, emprendida por el padre
Torres Silva.

manos las tengo grandes, no sólo
para dar, sino también para reci­
bir. Tengo solamente lo puesto. Mis
millones están bien asegurados allá
arriba.
—¿Es usted feliz?
—Tengo muchas gracias que dar
a Dios Nuestro Señor que, aunque
yo no he movido más que el azú­
car dentro del café, siempre me
trató con muchísimo cariño.
—¿Y dice usted que no tiene ca­
beza?
—Me doy cuenta de las cosas,
pero con retraso.
—¿Le gusta que lo saquemos en
los papeles?
—Me gusta que lo hagan cuan­
do vale la pena y alguien puede
sacar de su lectura algún provecho
espiritual.
Don Juan está preocupado por
no poder brindar conmigo. Los mé­
dicos han dicho que de morapio,
nada. ¡Este vino jerezano del que
decía Marañón que estaba hecho
pera ser meditado en el paladar!
—^Vamos a rezar un Avemaria.
£>e esto no se libra ningún visi^ t e . Don Juan se echa sus gran^
parrafadas con la V i r g e n ,
Nuestra Señora. A los pies de la
preciosa y antigua estatuilla está
la foto de la madre de Don Juan,
arrebujada en su negro mantoncillo.
Me marcho, cantando ai unísono
con él un Aleluya que hace años

nació de su puño y letra y que le
hace saltar la emoción a los ojos.
Detrás del músico, del canóni­
go, del apóstol, del enfermo, hay
un hombre todo él en carne viva
de sensibilidad y de bondad humil­
dísima. Me pregunto cuál será el
resorte de su alegría, la palanca
de este invencible b u e n humor.
Aparte la razón de que nació en
la ciudad de la Giralda, se vienen
a las teclas de la máquina ios ver­
sos del malogrado Julián Pemartín:
Id a Jerez, allí mana
una prodigiosa fuente
que al mundo torna elocuente,
al melancólico sana
y al cobarde hace valiente.
El padre Torres Silva lleva a la
letra aquel consejito de Teresa de
J e s ú s : «Cosa imperfectísima me
parece este aullar y quejar siem­
pre y enflaquecer el habla, hacién­
dola de enfermo; aunque lo estéis,
si podéis más, no lo hagáis, por
amor de Dios.»
Cuando llego al Oratorio y ter­
mino de poner en orden estas no­
tas, una caída solemne por una de
las escaleras, me sitúa como por
arte de birlibirloque frente a uno
de los avisitos que, extractados de
los libros santos, salpican de tre­
cho en trecho las cenefas del zó­
calo. £1 susto, que es bastante
grande, me deja todavía leer estas
palabras: «El que ama el peligro
caerá en él.»

Dia id abril: Sulidn do Huroclona, para Lt'rldH, Znnit;o»u.
AUnuorro. Contimiitclón d«l
viaje por Tudola.Oalaliorra y
Logroño. VlsUa a la ciudad.
Cena y alojamiento.
Dia es abril: Desayuno y sali­
da hacia Slo. Domingo y Bur­
gos. Visita a la ciudad y a la
Cartuja d e MiraHores. A l­
muerzo y salida para León,
breve visita, y Astorga. Ce­
na y alojamiento.
Ola SO abril: Desayuno, vlaiia
al Palacio Episcopal, salida
para Ponferrada y Lugo. A l­
muerzo. breve visita. l'ro.;rcución h a c i a Santiago do
Compostcla. Cena y aloja­
miento.
Dia 1 mayo: Desayuno. Salida
para L a Coruñn. visita a la
ciudad. Almuerzo. Regreso a
Coinposteia. Visita a la cluuad. Cena y alojamiento.
Dia t mayo: Desayuno. Parti­
cipación a los actos del Ju­
bileo. Almuerzo. Salida para
Pontevedra, la Toja y Vigo.
Cena y alojamiento.
Dia S mayo: Desayuno, salida
en dirección a Orense. Vcrin.
Puebla de Sanabria, almuer­
zo en el parador nacional.
Continuación hacia Zamora.
Breve visita, y Salamanca.
Cena y alojamiento.
Día 4 mayo: Desayuno, visita a
la ciudad de Salamanca. A l­
muerzo. Fie.<!ta campera {be­
cerrada) en la finca Santari^n do los señores Rodero.
Cena y alojamiento.
D!a 5 mayo: Desayuno, salida
para Avila, breve visita, tú­
nel del Guadarrama y Ma­
drid. Almuerzo. Tiempo libre
para visitar la ciudad, o bien.
Toledo, el Escorial... (visitas
facultativas). Cena y aloja­
miento.
Día € mayo: Desayuno. Salida
para Guadalajara. Medinaceli.
Calatayud y Zarago?-.. A l­
muerzo y continuación h"""'"
Barcelona donde ::r espera
llegar liada las 22 ho— -.
Kotaa:
1. Precio dcl viaje por p«-frvna: 6.250 pesetas.
2. Este precio incluye: viaje en
autopullman. hospedaje en
hoteles de segunda catego­
ría. visitas programadas,
guro de accidentes dentro
del autocar.
3. N o comprende: extrae ir,
hoteles, la risita facultativa,
seguro de accidentes fuera
del autocar.
4. Organización a cargo de la
Agencia de viales «C E L T O U R » - Barcelona.
Para inscripcíemes; 8ecretaria4a
Regional de Antiguo» A lu n noa Saleeiano» <o bien, reverendo don Batebam Caaaia)
Paseo Valle Hebrón. 3S8. B ar­
celona. 16 - Teléis. 229 18 73
y 220 13 75.

Juan Manuel Espinosa, SDB.


19

PANORAMA
IN TER N A C IO N A L
S A L E S IA N O
MADRE CANTA VIAJA A ORIENTE
La Madre General de las Hijas de María Auxiliadora
ha hecho un recorrido por las misiones de la India
y Tailandia. Ha visitado la obra de ias misiones saiestanas en ias ciudades de Calcuta, Gauhati, Shillong
y Mawlay donde habló con las hermanas y palpó los
horizontes misioneros de aquellas tierras. Del norte
de la India pasó al sur, visitando las obras de Madrás
y Bangalore. Luego visitó la Universidad Salesiana de
Katpadl y las misiones de Vellore y Polur, ios laza­
retos de Madrás y Vyasarpadi. Desde la India voló a
Bangkok donde visitó la escuela para ciegos; de alU
se dirigió ai sur, casi a los confines de Malasia para
visitar las obras de Hatyai. La última casa visitada fue
la de Banpong. Por todas partes ha recibido ei ho­
menaje de agradecimiento por la obra masionera y
eclesial de las Salesianas.
LOS SALESIANOS DE HONG KONG POR EL PAPA
Hong Kong.— El ambiente salesiano de Hong Kong
ha vibrado de entusiasmo en la visita que hizo el
Santo Padre. El inspector salesiano padre Machuy y
los sacerdotes padre Chung y padre Zen, los tres de
nacionalidad china, participaron en la concelebración
con el Papa. El padre Machuy fue elegido como re­
presentante de todos los religiosos de Hong Kong
para dirigirle el saludo de todos. Aprovechó la opor­
tunidad para ofrecerle ai Papa un álbum que conte­
nía las floréenlas espirituales, oraciones y sacrificios
que por el Santo Padre hablan hecho los niños de
la vastísima inspectoría de Hong Kong que compren­
de a Macau, Formosa y Vietnam. Un coro de 3.000 can­
tores dirigido por el salesiano padre Juan Leh y acom­
pañado al órgano por el téologo Antonio Lee aclamó
al Papa con la frescura de sus voces blancas. Una
alumna de las Hijas de María Auxiliadora ganó el
concurso de redacción promovido en la diócesis para
dirigir un saludo al Sumo Pontífice. El mismo Santo
Padre le entregó el premio.
PANAMA: UNA ESCUELA DE COLORES
Panamá.— En esta fotografía se está colocando la
primera piedra de una nueva Escuela Primaria junto
al Templo de Don Bosco. De izquierda a derecha: el
padre Marino Morlin, director; ei doctor don José
Joaquín Vallarino, exambajador en Estados Unidos y
en el Vaticano: y monseñor Ambrosio Lewis V. D.,
obispo auxiliar de Panamá. Pero se trata de una autén­
tica escuela cristiana en la que, desde el primer día,
los blancos se sientan ai lado de los negros y mesti­
zos. sin distinción de razas. Hasta hace pocos años,
en las escuelas privadas no se admitía esta clase de
colores de piel. La escuela salesiana siempre ha sido
un centro de colores
Lo mismo puede decirse del templo de Don Bosco.
Acuden, sobre todo para ia fiesta del santo y su pro­
cesión varias decenas de millares que hacen de las
calles de Panamá un caudaloso río de gente. Don Bos­
co ha bendecido a la ciudad con infinitas gracias que
concede a sus devotos panameños, que lo a c id a n
con calor y sudor; sí, un sofocante calor tropical...

20

UN SALESIANO DENTISTA
EN FORMOSA
En Formosa somos 14 salesianos — escribe el padre Alfre­
do Faisst a sus paisanos de
Austria— . Todos son chinos
menos yo. Pero, desde 1938
aquí me encuentro comiendo el
arroz chino. Junto a la iglesia
tengo mi ambulatorio que me
han regalado los jóvenes de Estiria (Austria). Todos los sába­
dos reparto medicinas gratuitas
a los pobres. Desde hace un
año llevo mi clínica de dentista
y atiendo a los chicos de nues­
tra escuela y a los pobres. To­
das las tardes las dedico a mi
profesión de dentista. Por las
mañanas doy clases de Inglés.
Por el campo tengo otros cua­
tro ambulatorios y voy a ellos
en moto. Me ayudan muchos
bienhechores de Europa y de
América. En 1932 había ejer­
citado la odontología en Linz
(Austria). Para poder ejercerla
en Formosa, he tenido que des­
empolvar muchos libros. La ma­
yoría de nuestros chicos son bu­
distas; sólo tenemos 100 católi­
cos. En nuestra parroquia serán
unos 150 católicos. A nuestro
lado trabajan con celo las Salesianas.
LO LLAMAN
“PEDRO EL BAUTISTA”
Saigón (Vietncmi).— El tenien­
te americano Peter J. Heistand,
exalumno del colegio salesiano
de Ramsey (New Jersey), jefe
del Point Olear, detuvo en el
golfo de Tonkin a una nave
que llevaba a bordo a un viet­
namita moribundo afectado por
la peste bubónica. Subió a la
nave y le habló al moribundo de
Dios y de Jesús. Luego lo bau­
tizó. “ He aprendido esto en el
colegio de Don Bosco” , dijo a
los periodistas. Hoy todos sus
compañeros del ejército lo llafnan cariñosamente “ Peter the
Baptist” , "Pedro el Bautista".
JOVENES Y EDUCADORES
BN UN CURSO DE
ORIENTACION VOCACIONAL
Helenenberg (Alemania Occítíentri).— En Helenenberg se ha
celebrado recientemente un se­
minario de orientación y de pas­
toral. Lo componían jóvenes que

buscaban orientación vocacional
y profesional y pedagogos dis­
puestos a colaborar con ellos.
Hubo conferencias, discusiones,
grupos de estudio, visitas a ios
talleres de las Escuelas Profe­
sionales y Agrícolas de Hele­
nenberg. Los jóvenes siempre
tenían a su disposición a un
psicólogo. Estos días han sido
da gran importancia para los
jóvenes que asistieron. Al final,
los participantes escribieron una
carta al Padre Provincial en es­
tos términos; “ Le damos las
más expresivas gracias por la
generosa acogida de los Salesianos y por los temas sólidos
y concretos que se han podido
tratar, tanto en la práctica como
en la teoría, referentes a los
jóvenes” .
JOVENES INDIOS
SE CUALIFICAN COMO
AGRICULTORES
Carrasquero (Venezuela).— En
el Centro Agrícola Don Bosco,
10 salesianos y 22 instructores
seglares preparan a unos 300
jóvenes indios guajiros para ha­
cer de ellos modernos capa­
taces agrícolas de la zona. Des­
arrollan sus enseñanzas en una
extensión de 450 hectáreas de
terreno. El ministro de agricul­
tura de Venezuela está prepa­
rando un plan para distribuir
en 1975 más de un millón de
hectáreas de regadío. Faltan téc­
nicos. El Centro de Carrasquero
prepara a los jóvenes más pro­
metedores para ello. El curso
dura unos 10 meses. El fin de
los salesianos es triple: hacer
de ellos jóvenes cristianos prác­
ticos; darles una apertura hu­
mana y social; y prepararlos a
que formen una familia cristiana.
UNA SALESIANA,
DIACONISA OFICIALMENTE
Belo Horizonte (Brasil).— La
salesiana Sor Antonieta Assumpcao, de Barriero-Belo Horizon­
te ha comenzado su nueva mi­
sión como diaconisa. En una so­
lemne concelebración, su obis­
po, Mons. Resende le dio la or­
den de “ distribuir a los herma­
nos el Cuerpo del Señor” . En
la misma misa. Sor Antonieta
distribuyó la comunión a los fie­
les asistentes.

PANORAM A
IN TER N AC IO NA L
S A L E S IA N O

I N D I A : Monseñor Roberto Kcrkctta,
nuevo obispo salesiano de Dibrugarh
que tiene S.500.0Q0 ?uib{(antes y unos
60.000 católicos.

A R G E N T IN A : Monseñor Mario Picchi,
nuevo obispo salesiano, Ausiliar de
Comodoro do Rivadavia. Ha sido di­
rector en varios colegios de América
e inspector salesiano de Buenos Aires.

B O N O K O N O : E l coadjutor salesiano
señor Yu es famoso por su trompeta.
Ha conseguido el segundo puesto en
el concurso nacional de Hong Kong.



21

T
UNA CARTA
AL PADRE ROHNEN
A mediados de enero recibimos la siguiente carta, que no nos re
sistimos a publicar. Es de unos aspirantes salesianos, que con sus grr
tos y sus juegos, con su piedad y sus ilusiones llenan la casita ¿
Mohernando (Guadalajara), y sus amplios espacios circundantes.
Dice así:

A sus ojos se asoma
un alma blonca, blanca...
Es como una paloma
mensajera, que arranca
oro de compasión:
¡ábrele,
ábrele el corazón...!

COOPERADORES
SALESIANOS

Somos cuarenta alumnos de primer curso de este seminario y este
mos aquí para ser un día salesianos sacerdotes.
Antes de irnos de vacaciones de Navidad, nos propusimos guarde
todo el dinero que nos dieran estas vacaciones de Navidad para b
negritos de Haití del padre Bohnen, porque ellos lo necesitan mudi
más que nosotros.
Hemos podido juntar 1.284 pesetas y se las damos con mucha oJf
gria y amor para que puedan pasar otras Navidades más alegres ?•
éstas que han pasado de 1970.
Esperamos que con este dinero puedan comer algo mejor que
que han comido hasta ahora y sean tan alegres como nosotros,
somos muy /ellees en este seminario salesiano.
Queremos que les haga llegar a esos negritos nuestro cariño y est
carta, si es posible, y esperamos en el futuro ayudarles alguna otf
vez. También nos gustaría que algún negrito nos contestara, si se
algo de español, y que nos cuente cómo lo pasan allí.
En nombre de todos mis compañeros,
Roque Antonio Diez
Esta es una carta que se comenta por sí sola. Hemos querido:
producirla para que los cooperadores salesianos vean y conozcan
sentimientos de estos aspirantes, que hacen concebir halagüeñas •:
peranzas de comprensión humana y apostolado.
Como ésta recibimos todos los meses cartas de cooperadores
cooperadoras, que nos mandan sus limosnas, expresando su pena •
que haya en el mundo tantos niños sin pan, y alegrándose de que
padre Bohnen haya emprendido una obra tan grata a Dios y beií
ciosa para unos cuantos millares de niños.
Por cierto, a primeros de febrero nos llegó la carta del Padre Botó
en la que nos decía que los mil primeros dólares que le envíastet^
habían llegado justo antes de Navidad, por lo que en esos días 1-^
algún postre de leche frita — la delicia de los chiquillos— más.
Cuando comunicó a los negritos que aquel extraordinario narió '
se debía a sus amigos de España hubo en vuestro honor palmas y
espontáneo, pues, como sabéis, los negros suelen expresar su alef '
bailando.
No seria de extrañar que alguna bendición extraordinaria, ver-^
sobre vosotros durante las fiestas, haya sido fruto de la caridad
esos pequeños que creen en El.
También hemos mandado al Padre Bohnen otros mil dólares a í
meros de febrero, y esperamos enivarle otros mil para Pascua de
surrección.

22



D O NATIVO S
Recibidos en enero
Consuelo de la Torre, Madrid,
300 pesetas; Francisca Squclla,
Cindadela, 3.000; Juan Beatlle, Ge*
roña, 300; Montserrat Valcárcel,
Hellín, 175; Mariana Ruiz, Valen­
cia, 200; María Antonia García,
Salamanca, 300; Centro Coopera­
dores Don Bosco, Madrid, 1.217;
Amalia Martínez, Barcelona, 200;
Cooperadoras de Torre Cárdela,
400; Carmen Asenjo, Madrid, 300;
Carmen Rico, La Coruña, 300; Ma­
ría A. Pérez López, Granada, 600;
Agapita Martín, Betancuria, 100;
María Morató, Paiafrugell, 100;
Euniciano Muñoz, Melgar de F.,
I. 000; Luis Elíes, Arbeca, 1.000;
Consuelo Aledón, Cuenca, 1.000;
J. Badell, San Juan Despí, 100; Se­

PUERTO PRINCIPE. HAITI: De los 3.000 niños y niñas que empiezan
primeras letras en las míniescuelas del padre Bohnen sólo mil acce>
<Kn a enseñanza más completa en las escuelas salesíanas de la capital,
y de esos mil sólo doscientos pasan a la escuela de artes y oficios.
Dado que en Haiti la industria no existe, prácticamente los oficios se
reducen al arte de la cerámica y a la artesanía de objetos típicos para
wnder a los turistas. Las fotos nos muestran a los alumnos mayores
decoradores de objetos de barro y un grupo de chicos que exhiben el
fruto artístico de sus esfuerzos.

En las fotos que acompañan este artículo pueden ver otra faceta
del padre Bohnen: la escuela de artes y oficios instalada para abrir canuDos a los chicos que tienen habilidades.
Como veis, el padre no descansa, y el bien que está derramando es
^go maravilloso.
JAVIER RUBIO

minario Salesiano, Mohernando,
1284; J o a q u í n Trullás, Tarrasa,
1.200; Virtudes Vizcaíno, 100; A l­
berto Andréu, San Vicente, 250;
una cooperadora. Valencia, 300;
María Teresa Díaz, Vigo, 300; Te­
resa Ocampo, Redondela, 300; Mi­
guel Torrecilla, Salamanca, 1.000;
A. V i d a l Quadras, Barcelona,
3.000; Anónimos diversos, 9.450;
Aurora Ibáfiez, Madrid, 300; Ma­
ría y Candelaria Pérez, Orotava,
200; Manuel Cruz, Salamanca, 100;
Anónimos diversos, 3.450; Ana
Ayala, Madrid, 300; Atanasio Ro­
dríguez, Alba de T. 300; V .D, G.,
Málaga, 3.000; Ramiro Armesto,
Vigo, 400 pesetas.

1. ° Cooperadores Salesianos. Alcalá, 164 - Madrid (2).
Indicando siempre detrás del
giro las palabras: Padre Boh­
nen o Haití.
2. ' A cuenta corriente.
Cooperadores Salesianos Sucursal Banco H í s p a n o
Americano. Plaza de Roma.
Madrid (2).



23

NmiL n
Hoy he tenido el encuentro más
estremecedor desde que estoy en
el Brasil, Agachándome, he logra­
do entrar en una barraca de pa­
redes de barro y ramas secas. Sen­
tado en un taburete, enormes sus
pies hinchados, un negro viejísimo
respiraba afanosamente. Un cuer­
po pequeño, seco. Parecía talla­
do en madera. Entre respiro y res­
piro me ha dicho con frases en­
trecortadas que tiene más de cien
años. Que hace ochenta era un
esclavo. Me ha llevado a los tiem­
pos en que llevaba sobre la cabe­
za un saco de azúcar, desde el in­
genio hasta el puerto de Natal
— 25 kilómetros— , en fila con los
otros esclavos negros bajo la guía
del látigo del negrero.
Han pasado 82 años desde la
abolición de la esclavitud en el
Brasil. La nación ha marchado ver­
tiginosamente por los caminos del
progreso. Sin embargo, las cosas
han cambiado poco para éste que,
en cada respiración parece que se
agarra con los dientes a la vida que
se le escapa. Cien años viviendo en
una choza de barro, remendada
tras cada vendaval, y un puchero
donde ha salcochado infinitas ve­
ces un puñado de habichuelas. Así
a la espera de un mañana sin es­
peranzas. Le he estrechado la ma­
no en el umbral de su cabaña y
me ha dicho cinco palabras: «Sou
ñas maos de Deus» («Estoy en
las manos de Dios»).
AQUI, DE CIEN NIÑOS,
MUEREN SESENTA

El mitlonero salesiano con sus cha>
vales vestidos de tiesta...
He contemplado una gran can­
tidad de padres de familia senta­
dos a la puerta de la iglesia, con
unos ojos lánguidos. Les he pre­
guntado: «¿Qué hacéis aqui?» Uno
me ha respondido: «Morimos poco
a poco.» Narro aqui la dramática
experiencia del misionero saleslano en un suburbio de al ciudad
de Natal, donde 60 niños —sobre
100— están condenados a muerte.

24

El padre Guido me ha desper­
tado temprano esta mañana. Me
ha hecho subir a un camión y me
ha dicho: «Vamos a hacer una vi­
sita a mi parroquia». Hemos sa­
lido de Natal y nos hemos diri­
gido a la zona agrícola de San
Gonzalo. Hemos tenido que cru­
zar el puente sobre un río. Es del
ferrocarril, pero cuando no pasa el
tren, pueden cruzarlo los coches.
Pasamos lentamente: dos ruedas
rozan la vía izquierda y las otras
dos caminan a pocos centímetros
del borde del puente. No sin esca­


lofrío, me asomo al vértigo de la
corriente fangosa de las aguas.
Ahora vamos p o r un camino *"
abierto sobre la tierra rojiza. Con­
forme avanzamos, el padre Guido
me da en pocas cifras las dintensiones humanas de su parroquia.
«Es un latifundio de unos 15 ki­
lómetros. Los h a b i t a n t e s son
25.000; 4.000 viven en el poblado
central y los otros 21.000 están
repartidos por 46 pueblos aldeanos.
El 90 por 100 de los habitantes son
analfabetos. De cada cien niños
que nacen ,mueren sesenta. No hay
asistencia médica. Las enfermeda­
des que acaban con las criaturas
son tracoma, sarna, disentería, tu- ,
berculosis y, sobre todo, verminosis. Ya verá cómo casi todos los
pequeños tienen el vientre hincha­
do. El agua está infectada y llena
de gérmenes y lombrices. Siempre
habría que hervirla. La gente no
nos cree, pero aunque nos creye­
ra, ¿dónde encontraría leña para
hervir toda el agua?
Pero la enfermedad más común
en niños, adultos y viejos es el
hambre. El 90 por ciento de mis
feligreses no logra ni siquiera el
mínimo de la alimentación que ne­
cesita. La cena es algo descono­
cido por estas tierras. Sdlo se co­
me una vez al día y la comida con.
siste en una taza de café o en
una raíz de mandioca. Cierto día
tuve la visita de un cónsul de Recife. Quedó helado: «Nunca creí
— me dijo— que pudiera existir
una miseria semejante».
TRES CANGREJOS
EN EL PUCHERO
Atravesamos la primera aldea. Un
agitado nevar de pañuelos al «pa­
dre Guido» que saluda desde In
ventanilla. A la orilla de una po­
za de agua hay un grupo de mu­
jeres lavando. En el agua se zam­
bullen los paños, los patos y los
niños. Estos tienen el vientre hin­
chado. «¿Ves? — me dice el padre
Guido— : es un agua sucia, pero .
decir a las mujeres que no dejen
a sus hijos jugar con el cieno es
hablar al viento».

l EN Lili IIIEIS
Bajamos en la segunda aldea.
Entramos en una choza de pare­
des de tierra y techo de ramajes.
El padre Guido saluda y se diri­
ge al puchero que hierve en la
lumbre. «¿Qué comida tenemos
hoy?», pregunta. Levanta la tapa.
En el puchero hay tres cangrejos.
Cuento por encima a los compo­
nentes de la familia: ocho crios,
papá y mamá. Con tres congrejos
habrá hambre para todos. El mi­
sionero señala al padre de familia
que permanece sentado con un ros­
tro lacio y las manos caídas, y me
dice: «Y para pescarlos, este pobre
hombre ha hecho 24 kilómetros a
pie hasta el río». No han desayuna­
do y tampoco cenarán.
Alrededor de la aldea hay un in­
menso latifundio con grandes plan­
taciones de coco y terrenos baldíos.
El dueño de estos enormes terri­
torios está dispuesto a hacer pe­
queñas viviendas baratas. Pero, aún
así, estas pobres gentes deberán
hacer milagros para pagarlas. A
veces, con las inundaciones o las
plagas, no consiguen ni siquiera
la cosecha de mandioca, y las deu­
das gravan como una maldición.
Este año ha sido de horrible se­
quía. A l ñn llegó una lluvia tar­
día, pero con la lluvia vino una
invasión de parásitos. Y como los
insecticidas son demasiado caros
para estas gentes, se han puesto
a exterminarlos con la mano. Era
como un juego cruel: mataban diez
y nacian mil. Las orugas devora­
ron todo vestigio de verdor. «Con
frecuencia — me dice el misione­
ro— he visto a los hombres llorar
de desesperación, ante un deseo
impotente de destruir todo. Un día
me encuentro a una gran canti­
dad de padres de familia sentados
a la puerta de la iglesia con unos
ojos lánguidos. ¿Qué hacéis aquí?,
•es pregunto, «Morimos poco a po­
co*. responde uno por todos.
El padre Guido va hacia una
baja. V oy tras él. Ensegui­
da nos encontramos frente a una
'dejecita. No tiene edad. Una son­
risa asoma entre mil arrugas. Me
^trecha la mano y me ofrece un
taburete. Conversa en portugués

■’M

Las salesíanas dispuestas a evangelizar con prisa, a lomo de muía.
con el misionero. En sus rudimen­
tarios aparatos, la viejecita está
bordando a mano una fina punti­
lla de encaje. Se queja con el mi­
sionero: «nadie compra mis bor­
dados». Después de todo no les
pone un precio exagerado: 10 me­
tros, un cruzeiro (catorce pesetas).
El misionero le pregunta por su
salud, por sus parientes y termina
por comprarle todo el encaje, 20
metros, y le mete en el bolsillo
un billete de 10 cruzeiros. Una
sonrisa desdentada le dice agrade­
cida: «Siempre me resultas el me­
jor comprador». Cuando el padre
Guido le indica que va a volver a
su patria, la viejecita murmura:

«N o sé dónde está; pero que Dios
lo acompañe y bendiga a su ma­
dre».
Salimos. Junto a la puerta, un
pelotón de chavales nos mira con
curiosidad. Los hay rubios, more­
nos, negros como el carbón. To­
dos tienen el vientre hinchado.
Subimos a! camión y otra vez
al distrito central. ¿Has visto a
los chicos? — me dice el padre Gui­
do— . Es desolador pensar que la
mayor parte de ellos morirá rápi­
damente. Aquí lo normal es que
una madre tenga doce o trece hi­
jos y que se quede sólo con dos
o tres


25

L A HISTORIA DE LOS
45.000 LADRILLOS
Llegamos a la plaza. Aparece la
iglesia con su tejado de visera.
Llegan a nuestro encuentro cua­
tro hermanas todo sonrisas. «Ellas
son el verdadero párroco de esta
zona» — me dice el misionero— .
«Y o sólo puedo dedicar a la parro­
quia el sábado y el domingo. Ven­
go los sábados, digo la misa, con­
fieso y visito los enfermos. Los
domingos voy por turno a una de
las dieciséis aldeas y visito las fa­
milias. Así logro dirigir una pala­
bra a mis feligreses una vez cada
cuatro meses. Las hermanas son
las que bautizan, dan la comunión,
predican, visitan enfermos, prepa­
ran matrimonios, dan catecismo y
están siempre a disposición de to­
dos.»
Junto a la casita de las herma­
nas hay un edificio en construc­
ción. Un edificio modesto, apenas
saliendo del primer piso. El anda­
miaje es rudimentario y se ve que
los albañiles tienen orden de aho­
rrar cemento y cal. Al lado se ve
un rimero de ladrillos bien amon­
tonados. Algunos tienen el sello
de una mano, de unos dedos. «Los
han fabricado los hombres de la
aldea a mano — me dice el padre
Guido— . Un sábado invité a los
padres de familia a una reunión.
Vinieron más de cien. Nos senta­
mos en la escalinata de la iglesia
y nos pusimos a hablar de los pro­
blemas de la comunidad. Muchos
se quejaban, pero no sabían qué
hacer. Uno de los más jóvenes
dijo: «A sí no podemos continuar.
Nuestros hijos mueren como mos­
cas. No tenemos médico, no tene­
mos medicinas, no contamos con
un hospital. Apenas nacidos han
muerto dos de mis hijos. Nuestras
mujeres no entienden de higiene
y desinfección. El médico más cer­
cano está en la capital y lo que
es aquí no viene ni aunque vaya­

26



t'..|

,1

Un paseo por las calles de la aldea. Los edificios no son muy lujosos.

mos a buscarlo con un coche. Por
lo menos debemos construir un
ambulatorio y una maternidad
donde nuestras mujeres den a luz
a los hijos sin peligro de muerte».
CONCIENCIA SOCIAL
La propuesta fue aceptada. Se
dividieron en seis grupos de once
hombres cada uno. Cada grupo se
comprometió a trabajar gratis un
día por semana. Por mi parte me
comprometí a traer de Europa di­
nero y el hierro necesario. Cuando
tuvimos listos los 45.000 ladrillos
y hechos los cimientos, comenza­
mos la construcción. La Córltas
nos regaló muchos alimentos para
los trabajadores. En ayunas no hu­
bieran podido trabajar.
Ahora ya funciona el ambulato­
rio. Un médico amigo se ha ofre­
cido a visitar a los enfermos una
vez por semana. Para este año es­
peramos terminar e inaugurar el
edificio. Necesitamos una enferme­
ra fija y un médico que venga si­
quiera dos días por semana.
A veces me pregunto por la
verdad de la empresa. Pero más
importante es que haya sido cosa

de ellos y que ellos mismos la
estén realizando. Procuramos no
darles todo hecho como si se tra­
tara de chiquillos. «Les ayudamos
a ayudarse».
El sueño del misionero es el de
poder dedicarse toda la semana a
sus pobres feligreses. Por ahora es
imposible. Es director, administrador y consejero del colegio salesiano de San José con 570 alumnos de primera y segunda enseñan­
za. Es profesor y cargado con 24
horas semanales de clase. Con S
sólo trabajan otros tres salesianos.
Aunque en Natal se hayan crea­
do muchos colegios, el salesiano
es el preferido por todos. Las femillas más distinguidas de la ciu­
dad quieren llevar a sus hijos a!
colegio conocedoras de la fonna^
ción humana y - cristiana que aDi
reciben.
«Todos los años — me dice d
padre Guido— me veo en la ne­
cesidad de rechazar más de cíe*
peticiones. Es una desgracia qp*
cuando los muchachos cumplen dic;
ciséis años tengan que salir ^
colegio. Si tuviéramos el bachiUerato superior podríamos consolidan

;

;

j

^

^


A pesar de su vientre hinchado, los chicos no han perdido su alegría.

su formación en los años decisi­
vos. de los 16 a los 19. Pero,
dónde sacamos el personal salesiano?»
En un salón contemplo el brillo
de los instrumentos de un conjun­
to juvenil; guitarras, baterías, órpno eléctrico. Hay mesas de bi­
llar, futbolines... «Los chicos que
vienen al colegio — me dice— son
tMos de familias acomodadas y
algunos de las más ricas de la ciu^d. ¿Por qué dedico cinco días
de la semana a estos chavales y
sólo dos a los que mueren en los
alrededores? Contesto:
El sábado pasado, cuando fui a
las aldeas, no iba solo. Iba acom­
pañado de seis chicos de estos. Y o
entraba en las barracas, pero ellos
quedaban fuera apuntando en sus
cittdemos la conversación que en­
tablaba con cada familia. En sus
apuntes anotaban las personas que
Vivían en la barraca, su edad y
sp posibilidades de trabajo, qué
jumentos tomaban, las enfermeda^ de los pequeños y al número
de muertos.
El lunes siguiente nos encontrá“jtmos de nuevo en clase. Y o les
doy a todos clase de religión y

!
;
¡
¡

de educación cívica. En la clase de
religión cada uno leyó los apuntes
que había tomado y después, todos los chicos trataron y discutie­
ron las diversas situaciones. Jun­
tos, indagamos las causas de tan­
ta miseria y las posibilidades que
nos sugería la caridad cristiana pa­
ra ayudar a aquella pobre gente.
Esto no sólo lo he hecho un lunes...
Por turno, me acompañan todos
los chicos de secundaria de mane­
ra que todos pueden tomar parte
: en las discusiones con conocímien; to de la materia. Recuerdo un
, cálculo de sumo interés. Un chico
había preguntado a su papá, mé­
dico, cuántas calorías necesitaba
un hombre para vivir. 2750, le res­
pondió. Calculamos que un papá
para alimentar a tres hijos de­
bería ganar por lo menos unos
600 cruceiros al mes. Sin em­
bargo, en sus apuntes leían que
la gran mayoría de las personas
de las aldeas sólo ganaban 20 cru­
zeiros para mantener a una me­
dia de diez hijos.
Recuerdo que más de uno hizo
y repitió sus cálculos. Les pare­
cían equivocados. Bajo los efectos
de esta üspresión llegó uno a de­

cirme: «Mañana cargaremos un ca­
mión de víveres para llevárselos.»
Le contesté: «N o es la solución.
Los consumirán en una semana y
después quedarán como estaban.
Es necesario cambiar las estruc­
turas, el sistema que permite que
estos hombres mueran diariamen­
te en la miseria. De sobra sabéis
que existen leyes para proteger a
los obreros de los explotadores.
Pero, ¿quién protege a estas po­
bres gentes de los fazendeiros? Ma­
ñana os tocará a vosotros reem­
plazar a los que gobiernan el país,
la región. A vosotros os toca cam­
biarlo.»
«El hijo del asesor agrícola ha
llevado a su padre a las aldeas.
Desde entonces está comenzando
a actuar. Veinticinco de los mu­
chachos mayores dedican su do­
mingo a la juventud de las aldeas
y han organizado unas clases ves­
pertinas con cursos de higiene y
de puericultura y llevan un club
juvenil con toda clase de atracti­
vos. Para dedicarse a esta activi­
dad, renuncian con gusto a la pla­
ya, al cine y al coche.
Un día, al jefe del Servicio de
Información le solté a quemarropa:
«Sin duda, que su hijo le habrá
informado lo que hacemos en cla­
se. ¿Me juzga tal vez un subver­
sivo?» «No — me respondió— . Nos­
otros no queremos ni revolución ni
destrucción. Pero deseamos que
nuestra juventud adquiera una sen­
sibilidad de los problemas del país
y que aprenda a resolverlos.»
Y así será. Mañana por la ma­
ñana tomaré el autobús para Recife y bordearé las interminables
playas del Atlántico. El P. Guido
me despide afectuosamente, dándo­
me saludos para todos. Sus últimas
palabras son: «El día en que me
dé cuenta de que no puedo formar
así a estos jóvenes, pediré a los
superiores que cierren el colegio
de Natal.»
TERESIO BOSCO


27

y de
su A p ó sto l
S an J u a n
B o sco

G ra c ia s
de
M aría
A u xiliad o ra
PUDE VER A Mi MADRE
Teror (Gran Canaria).— El mes de
abril del año pasado, mi madre en­
fermó de extraña gravedad. Yo,
reilgiosa de clausura, sufría ante
ia perspectiva de una muerte segu­
ra, ya que no habla nada que ha­
cer, según decían los médicos. Con
todo el fervor de mi alma pedi a
María Auxiliadora me concediera
la gracia de poder volver a ver a
mi querida madre en la tierra. Mi
familia se unió a mi súplica y co­
menzaron una novena con la mis­
ma Intención. La Señora no se
hizo de esperar. El mismo día 24
de mayo, día de su fiesta, se ini­
ció la mejoría y continuó felizmen­
te hasta su total curación. Gracias
a María Auxiliadora he recuperado
a mi madre y he tenido el consue­
lo de verla varias veces en el locu­
torio, radiante y feliz. Sor María C. V.

mendó fervorosamente pidiéndole
al Señor, por su medio, la cura­
ción de su esposo. Hoy, después
de un año, constatamos con gran
alegría la total curación y damos
gracias a la Santísima Virgen invi­
tando a todos a encomendarse a
Ella. Como agradecimiento envío
una limosna para ia extensión de
su devoción. Rosario Cantador.
ESTABA SIN TRABAJO
Barcelona.— Estando sin trabajo,
acudí a María Auxiliadora confia­
damente y prometiendo publicar la
gracia para estímulo de cuantos se
hallan en parecidas circunstancias.
Pronto fui atendido, encontrando
un puesto de acuerdo con mis de­
seos. Agradecido, envío una limos­
na para las obras salesianas. R. Or­
tega.
NOS SALVA DE UN INCENDIO

AYUDA EFICAZ
Zaragoza.—Viéndome en trance
muy apurado para empezar mis es­
tudios de Medicina en Zarazoga, y
habiendo leído muchas veces las
gracias que concede María Auxilia­
dora, le rogué se acordase un po­
co de mí. Empecé una novena y.
antes de terminarla, ya estaba todo
solucionado. Agradezco su inter­
vención y. como prometí, mando
una limosna para obras salesianas. B.
SUFRIO
UN GRAVISIMO ACCIDENTE
Puente Nuevo (Córdoba).— Hace
un año que un obrero de la Cen­
tral Termonuclear de Puente Nue­
vo en Viilaharta de Córdoba sufrió
un gravísimo accidente. Un venti­
lador de ia termonuclear se des­
prendió cogiendo a don Donato
Cabanilias y produciéndole entre
otras heridas, abertura craneal, con
derrame de masa encefálica, rotu­
ra de oído interno, etc. Se dio el
caso por perdido desde un princi­
pio, su esposa, muy devota de Ma­
ría Auxiliadora y Celadora de un
coro en Puente Nuevo, se enco-

28



Posadas (Córdoba). — Desde la
llegada de los Padres Salesianos a
Posadas la que suscribe y toda la
familia nos vimos dulcemente atraí­
dos a la devoción de ia Santísima
Virgen, bajo el título de "María
Auxiliadora” . Ella nos lo ha paga­
do con creces, salvándonos de una
muerte segura debido a un incen­
dio que se declaró en nuestra ca­
sa a las cuatro de la madrugada.
Mi hija, mi yerno, mis dos nietos
y yo nos vimos sorprendidos cuan­
do ya ei fuego había invadido par­
te de la casa, impidiéndonos salir.
La invocación a María Auxiliadora
salió de nuestras gargantas y con
esta especial protección pudimos
salir y, poco después, apagar el
fuego. Como recuerdo, conserva­
remos la imagen, muy deteriorada
por el fuego, pero que nos recor­
dará su especial protección. Gra­
cias. Madre mía. Teresa Santiago,
viuda de Sorríbas.
OTROS CORAZONES
AGRADECIDOS
Arévalo.— Estoy sumamente agra­
decido a nuestra Madre María Au­
lladora por los muchos favores re­

cibidos y especialmente por éste:
"Estaba mi madre enferma y le*
miendo una operación, íe pedí su
curación sin necesidad de inter­
vención quirúrgica. Así fue: a los
pocos días estaba en casa casi
recuperada. Hago público mi agra­
decimiento. J. C.
Madrid.— Tenían que hacer a mi
hijo una operación muy difícil, a
corazón abierto, no nos daban nin­
guna esperanza de salvación. Acu­
dí como siempre a la Santísima Vir­
gen Auxiliadora a través de Santo
Domingo Savio y mi hijo ha salido
muy bien y con gran rapidez. Una
madre agradecida.
Tarraza. — Encontrábase mi pro­
metido sin trabajo y necesitándolo
con urgencia acudí a María Auxi­
liadora prometiéndole un donativo
para tas obras salesianas si acudía
en nuestro favor. Hoy, agradecida,
cumplo mi promesa. D. M. G.
Oviedo.— Me vi muy angustiada
y en esos momentos me encomen­
dé a María Auxiliadora pidiéndole
me concediera tener noticias de mi
hijo. Le agradezco su protección
pues en seguida fui escuchada. En­
vío un donativo. María Dolores Muñiz.
Madrid.— Doy gracias a María
Auxiliadora, San Juan Bosco y San­
to Domingo Savio por favores re­
cibidos en diversas circunstancias
y envío un donativo para las obras
salesianas. M. L. M.
Barcelona. — Envío un donativo
pidiendo a los santos de la fami­
lia salesiana la solución de una fcuestión urgente para mi familia. EHerrera de Pisuerga.— Hago
bllco mi agradecimiento a Marta
Auxiliadora por una gracia recibi­
da de mucho interés para esta fa*
milia. Antonia Andrés.
Valladoiid.— El pasado noviembre
envié un donativo por un favor recíbido de San Juan Bosco y Ma­
ría Auxiliadora. Hoy envío otra IF
mosna por un nuevo favor. Agrá-

decido quiero se publique en el
‘ Boletín Salesiano". Manuel ibáñez Gutiérrez.
Baracaldo. — Envío un donativo
por un favor recibido de San Juan
Bosco, Santo Domingo Savio y Ma­
ría Auxiliadora. Hago público mi
agradecimiento en el “ Boletín Sa­
lesiano” . R. R. C.
Barcelona.— Por favores alcanza­
dos del Señor por intercesión de
María Auxiliadora, dan gracias y
envían una limosna. M. A. y M. G.
Barcelona.— Pedí a María Auxi­
liadora dos favores muy señalados
el buen éxito en los exámenes de
un hijo mío y el otro, para que sa­
liera aprobada en su reválida otra
hija mía. Habiendo sido escuchada
mi súplica, entrego un donativo pa­
ra las vocaciones salesianas en ac­
ción de gracias, pidiendo se publi­
que en el “ Boletín Salesiano” . L. E.
Fuenllana (Ciudad Real).— Envío
una limosna para las obras sale­
sianas en agradecimiento a nues­
tra Madre María Auxiliadora por
haber aprobado un hijo mío un
examen de bachillerato. Francisco
Benito Henares.
Villovela de Esquera. — Damos
gracias a María Auxiliadora y a
San Juan Bosco por varios favores
recibidos, deseando se publique en
el "Boletín Salesiano". Esperamos
seguir recibiendo su protección y
enviamos una limosna. Familia Royuela H.
Barcelona.—Agradezco a María
Auxiliadora unas gracias recibidas
y envío una limosna para las vo­
caciones salesianas. Pilar Vila.
Madrid. — Preocupada por una
grave necesidad recurrí a María
Auxiliadoar y rápidamene me vi so­
corrida por Ella. Por ello deseo se
publique este favor y envío una li^tHisna para las obras salesianas.
••• A- C.
Allariz.— Quiero hacer público mi
agradecimiento a María Auxiliado­
ra pues a Ella atribuyo el que ha­
biéndose provocado un incendio en
*rii casa con peligro de explosión
la bombona de gas; todo pudo
r^lv e rs e sin ninguna consecuenoa de gran importancia y con unos
®ños mínimos. Agradecido a Ma­
na Auxiliadora entrego una limoslis y deseo lo publiquen en el Bo*tín. Juan Alvarez.

Falencia.— Doy gracias a María
Auxiliadora y envío una limosna
porque ha ayudado a mi hija en
unos exámenes, que le permiten
acceder a un puesto de trabajo,
que le hacía mucha ilusión. Piedad
Milán.
Guipúzcoa.— Hallándose mi mari­
do en un apurado y crucial momen­
to de su vida profesional, enco­
mendé el asunto a María Auxilia­
dora por la intercesión de San An­
tonio, gracias a Dios todo se ha
solucionado favorablemente. Pro­
fundamente agradecida, cumplo pro­
mesa y limosna.
Velílla de Valderaduey (León).—
Doy infinitas gracias a María Auxi­
liadora por repetidos favores con­
cedidos a nuestra familia y muy en
particular, por uno reciente. En­
vío una limosna, como prometí, y
le pido a tan buena Madre, nos
siga protegiendo en lo sucesivo.
Guadalupe Bartolomé de Pacho.
Fontanales.— Doy gracias a María
Auxiliadora por la curación de ner­
vios. Hice la novena repetidas ve­
ces y fui escuchada. Cumplo la
promesa de publicarlo en el “ Bo­
letín Salesiano y envío una limosna.
Gracias Madre mía Auxiliadora. Se­
rafín García Díaz.
Fontanales.— Por gracias recibi­
das de María Auxiliadora envío una
limosna reconocida a la bondad de
la Virgen. Juana Vera.
Elche (Alicante).—Muy agradeci­
da a María Auxiliadora por un fa­
vor recibido entrego una limosna
y deseo que se publique dicha gra­
cia. Asunción Vicente.
Elche (Alicante).— Por un favor
recibido de María Auxiliadora man­
do una limosna para su culto. An­
tonia Martínez.
Elche (Alicante). — Pedida u n a
gracia a María Auxiliadora y ha­
biéndomela concedido h a g o mi
agradecimiento públicamente y man­
do una limosna. N. N.
Barcelona.— Mí hijo estaba muy
apenado y triste ante la situación
de encontrarse sin trabajo. Le pedí
a la Virgen Auxiliadora que le abrie­
ra camino y a ios pocos días le llo­
vió trabajo para los empleados que
tenía, arreglándole así la situación
engorrosa por que atravesaba. Berv
dita sea la Virgen Auxiliadora de
los Cristianos que siempre atiende
mis peticiones. Montserrat Font.

Allariz.— Deseo hacer pública mí
gratitud a María Auxiliadora en el
"Boletín Salesiano” por el feliz na­
cimiento de mi nieto; asi como
otras muchas gracias y favores con
que me veo agraciada por tan bue­
na Madre. Entrego una limosna.
O. S. A.
Zaragoza.—Doy gracias al Señor
que por intercesión de María Auxi­
liadora ha hecho que mi sobrino
saliera bien de una operación muy
difícil. Por esta y otras gracias ob­
tenidas de María Auxiliadora envío
un donativo para los pobres de las
Misiones Salesianas de Madrás.
Ascensión Peco.
Puerto Real.— Un vecino mío de
diez años, Juanito, tuvo un ataque
de meningitis. Tan grave estaba
que lo llevaron a Cádiz, a la Re­
sidencia. Los médicos dijeron a
sus padres que no podría ponerse
bien pues le dio una parálisis. Pre­
gunté por él en su casa, Ies di una
medalla de María Auxiliadora y les
recomendé acudieran a la Virgen.
A la mañana siguiente, me dijo la
madre que por la noche había mo­
vido las piernas. Los médicos le
dijeron que sería un milagro por­
que ellos no podían hacer nada.
Hoy, el chico está completamente
bien de salud. Los padres están
convencidos de que todo es obra
de María Auxiliadora.
Agradecida, publico la gracia en
el "Boletín Salesiano". Dolores Gar­
da Andrade.
Torre Cárdela.—Habiéndome sa­
lido unos cardenales en las pier­
nas, fui al médico y me diagnosti­
có una cosa grave, mandándome
hacer un análisis de sangre. Me
encomendé con mucha fe a María
Auxiliadora y a San Juan Bosco,
pidiéndoles saliera el análisis ne­
gativo. Y así fue. Los cardenales
me han desaparecido y me encuen­
tro perfectamente bien. Cumplo la
promesa de publicarlo en el "Bole­
tín Salesiano” y envío una limosna
para las obras salesianas. Isabel
Justicia.
Madrid.— Encontrándonos en una
situación apurada y muy preocupa­
dos por la necesidad de resolver
un problema de importancia y de
difícil solución en nuestro negocio,
me encomendé a María Auxiliado­
ra, poniendo como intercesores a
San Juan Bosco y a Doña Doro­
tea.
Muy agradecida por haberrre re­
suelto satisfactoriamente mi petl—

29

1
ción, a la vez que haberme con­
cedido otra gracia muy importante,
cumplo mi promesa de enviar una
limosna, rogando a la Santísima
Virgen escuche mis oraciones. Una
madre agradecida, C. Vázquez.

DAN GRACIAS
A MARIA AUXILIADORA
Y A SAN JUAN SOSCO
Y ENTREGAN UNA LIMOSNA
Enrique Martínez Caballero, de
Ceuta, por superar un examen du­
rísimo; Mercedes Domínguez, de
Allariz, por haber curado de una
infección; C. C., de Barcelona; por
un favor de la Virgen y de Santo

vores; una devota, de Herrera de
Pisuerga; Pedro Biázquez y Car­
men García, de Fuente Dueñas, por
favores recibidos y esperando su
protección; D. Z. C., de Béjar, por ‘
superar varios contratiempos; M. FL
C., de Villa del Río, por una protec­
ción constante y ayuda en los exá­
menes; A. Martínez, de Barcelona;
A. Arlas, de Madrid; Patrocinio
Alonso, de Madrid; Lucía Villa, de
Madrid; Ignacia Pinilla, de Zamora;
Teodoro Alvarez, de Ciguera (León);
María Angustias Roca, de Granada,
por la curación de su esposo; Sor
Carmen Márcate, de Toledo; Miguel Santamaría, de Oviedo; María
del Carmen Rodríguez, de Santa
Colomba de las Carabias (Zamora);
Carmen Jiménez, de Puerlollano;
Josefa Fernández, de Madrid.

Domingo Savio; J. de P., de Ponferrada; Una devota, de Allariz; Domi Arranz, de Oviedo, por haber sa­
lido bien su esposo de una opera­
ción de varices; Lola Pintado, de
Allariz, por una gracia obtenida;
Francisca Ruiz Monroy, de Puertollano, por favores recibidos en su
salud; M. C., de Madrid, por un fa­
vor recibido; dos devotas, F. E., de
Zamora, por un gran favor recibido;
Alejandro Moraga Ortega, de Ali­
cante por una gracia alcanzada;
Eustaquía Peinador, de Valeria del
Alcor (Falencia), por varios favores
recibidos; A. Atzet y familia, de Badalona, por la curación de A. Atzet
Morralla; Familia Suárez, de Puerto
Real (Cádiz), por varios favores re­
cibidos; Antonio y Juana Mari, de
Herrera de Pisuerga, por varios fa­

G ra c ia s
d e n u e s tro s
s ie rv o s
d e D ios
Ibi (Alicante). — Doy gracias a
Dios que, por la intercesión de
Santo Domingo Savio, me ha con­
cedido un favor. Por ello, envío
una limosna. F. I. 1.
Madrid.— Llena de agradecimien­
to a Santo Domingo Savio, envío
una limosna. Se me infectó una in­
yección que me puse en un brazo.
Me puse el escapulario del Santo
y en seguida comencé a mejorar.
Pilar Gutiérrez.
Jerez de la Frontera.— Por una
gracia obtenida de Santo Domingo
Savio. envío una limosna. Isabel
Margarita Romero.
V I g o (Pontevedra). — Habiendo
quedado cesante de empleo un her­
mano mío. por cierre de la empresa

Tened
y

30



fe

r e e é is

en
lo

Jesús

que

son

donde prestaba sus servicios, in­
voqué a la Sierva de Dios Doña
Dorotea, rogándole la proporciona­
ra otro similar al que tenia. Y co­
mo he sido atendida en breve pla­
zo, deseo hacer constar mi agra­
decimiento y envío una limosna.
R. B.

un sitio adecuado para su trata­
miento, puse el caso en manos de
Doña Dorotea y a los pocos días,
se solucionó el problema, por lo
que doy públicas gracias a la sier*
va de Dios y envío una llmosm
para su Causa de Beatificación.
M. M.

Barcelona.— Por una gracia obte­
nida por mediación del mártir salesiano don Julián Rodríguez, cum­
plo mi promesa de publicar mi gra­
titud al par que envío una limosna
para su causa de beatificación. Ma­
ría Fomells de G.

Aldearrodrigo (Salamanca).—Para
ayuda de la causa de beatificación j
del mártir salesiano don Pedro Me­
sonero, y pidiéndole su protecci^
le mando una modesta limosna. Pie"
dad Mesonero.

Barcelona.— Tengo unos familia­
res que se encontraban en una si­
tuación un poco delicada, por cau­
sa de una enfermedad mental de
uno de sus hermanos; y no encon­
trando solución para internarlo en

Salamanca.— Por varios favor» I
recibidos por mediación del mártir
salesiano don Julián Rodríguez, y
para ayuda a su causa de beatili' j
cación, varias personas agraded-j
das envían unos donativos.

S n e ra m e n ta d o
n t iia y e o s .

y

en

U fa r ía

(s. J u a n Oaa^o)

^ u o r tlta d o r a

BECAS PARA
LAS VOCACIONES
SALESIANAS
“El mejor premio que Dios concede a
una familia es un hijo sacerdote."
(Don Bosco.)
INSPECTORIA DE BARCELONA
P. Provincial: Paseo San Juan Bosco, 74 - Barceiona*17
BECA S E N FO R M A C IO N
Beca «Familia Baraut-Obiols». N . e .: 500. T otal: 47.500.
Beca «Familia Marti Codolar». Primera entrega: 1.000 pts.
Beca «Sr. Mas». Colegio Mataró. Prim era entrega: 30.000 pts.
Beca «María Auxiliadora». Prim era entrega: 1.000 pts.
Beca «Ntra. Sra. de la Merced». Primera entrega: 1.000 pts.
Beca «Vocaciones Salesianas». Prim era entrega: 1.000 pts.
Beca «Misiones Salesianas». Prim era entrega: 1.000 pts.
Beca «Templo del Tibidabo». Prim era entrega: 1.000 pts.
Beca «Cooperadores Salesianos». Primera entrega: 1.000 pts.
Beca «Antiguos Alumnos Salesianos». Prim era ent.; 1.000 pts.
Beca «Obra de S. Pablo Apóstol». Prim era entrega: 1.000 pts.
Beca «Don Miguel Rúa». Prim era entrega: 1.000 pts.
Beca «San José Cafasso». Prim era entrega: 1.000 pts.
Beca «Mamá M argarita». Prim era entrega: 1.000 pts.
Beca «Don Andrés Beltrami». Prim era entrega; 1.000 pts.
Beca «Ceferino Namimcurá». Primera entrega: 1.000 pts.
Beca «Don Juan Cagliero». Prim era entrega: 1.000 pts.
Beca «Miguel Magone». Prim era entrega: 1.000 pts.
Beca «Don Sergio Cid». Prim era entrega: 1.000 pts.
Beca «Don José Calasanz». Prim era entrega: 1.000 pts.
Beca «Don Rodolfo Fierro*. Prim era entrega: 1.000 pts.
Beca «Don José Luis Carreño». Prim era entrega: 1.000 pts.
Beca «Don Manuel B ars». Primera entrega: 1.000 pts.
Beca «Don Eduardo Gutiérrez». Prim era entrega; 1.000 pts.
Beca «Don Conrado Dardé». Prim era entrega: 1.000 pts.
Beca «Don Ignacio Rubio». Prim era entrega: 1.000 pts.
Beca «Don Eugenio Ojer». Primera entrega: 1.000 pts.
Beca «Sr. Francisco Fernández». Primera entrega: 1.000 pts.
Beca «Pilar». Total: 30.000 pts.
Beca «Monseñor Olaechea». Prim era entrega: 1.000 pts.
Beca «Monseñor Pintado». Primera entrega: 1.000 pts.
Beca «Daniel Conde». Prim era entrega: 86.000 pts.
Beca «Nuestra Señora de Montserrat». Total: 98.000 pts.
Beca «Don Luis Cutillas». Total: 8.000 pts.
Beca «San José». Total: 22.000 pts.
Beca «Felipe Alcántara». Total: 6.000 pts.
Beca «Don Juan Antal». Total: 95.000 pts.
w a «Juan Alberto». A. A. de Rocafort. Total: 13.000 pts.
Beca «San Cosme y Santa Magdalena». Total: 90.000 pts.
Beca «San Pedro*. Total: 50.000 pts.
Beca «Sagrado Corazón de Jesús». Prim era ent.: 1.000 pts.
Beca «San Juan Bosco». Prim era entrega: 1.000 pts.
Beca «San Francisco de Sales». Primera entrega: 1.000 pts.
Beca «Santo Domingo Savio». Primera entrega: 1.000 pts.
Beca «Santa María Mazzarello». Primera entrega: 1.000 pts.
Beca «Don Felipe Rinaldi». Prim era entrega: 1.000 pts.
Beca «Doña Dorotea». Prim era entrega: 1.000 pts.
Beca «Mártires Salesianos». Prim era entrega: 1.000 pts.
B ^ «Don José Binelli». Prim era entrega: 1.000 pts.
5 ^ *Don Martin Goicoechea». Prim era entrega: 1.000 pts.
«Don Antonio Aime». Prim era entrega: 1.000 pts.
«Don Manuel Hermida». Prim era entrega: 1.000 pts.
2 ^ ^ o n Julián Massana». Primera entrega; 1.000 pts.
B « a «Padre Viñas». Prim era entrega: 1.000 pts.
2 ^ *5°*’ Luis Cid». Prim era entrega: 1.000 pts.
b t o « ^ n José Martí». Primera entrega: 1.000 pts.
Beca «Don Federico Jordana». Prim era entrega: 1.000 pts.

INSPECTORIA DE BILBAO
Provincial: Escuelas Salesianas - Deusto>Bilbao
BECA S E N F O R M A C IO N
«Mamá M argarita». L . Cañada. Pamplona. N . e.: 250.
Total: 26.750 pts.
B ^ «Don. José María Taibó». Tercera entrega: 6.000 pts.
Beca «Don Ramón Zabalo». Baracaldo. M. Fernández. To45.000 pts.
Beca «Doña Carmen Aguirre». Total: 21.000 pts.

Beca «Don Eladio Pérez». Total: 2.5,000 jils.
Beca «Don José Díaz de Corlo Vallo y Potra Gastón Vento­
sa*. Total: 23.000 pts.
Beca «M aría Auxiliadora». Arch. Dcuslo. Total: 21.000 pts.
Beca «Don José Puertas». A. A. Dousto. Total: 15.000 pía.
Beca «Señor Justi». Dousto (Colegio). Total: 22.000 pt.i.
Beca «P . Beobide». Fam. Salesiana. Guipúzcoa. T . : 131.776.
Beca «M aría Auxiliadora». II. Arch. Baracaldo. T,; 51.500.
Beca «Fam ilia Imbert». Total: 30.000 pt.s.
Beca «M aría Auxiliadora». D. R. G. R. Total; 30.000 pts.
Beca perpetua II «Señoritas de Felipe». Primera m t.: 50.000.
Beca «Don José Santos». Dnuato (C’olegio). Total: 23.000 pts.
Beca «Señorita María Luisa de Felipe». Total: 50.000 pts.
Beca «Inmaculada Concepción». J. L. M. Total: 11.600 pts.
Beca «M aría Angeles Postigo Labrador». Total; 30.000 pts.
Beca «Conchita Diez Noza». Total; 30.000 pts.
Beca «Virgen del Castillo». El Royo. Total; 9.800 pts.
Beca «F . Canales». Total: 14.000 pts.
Beca «M aría Auxiliadora». Zuazo. Total; 5.500 pts.
Beca «Don Bosco». Ciudad Laboral. Pasajes. Total: 5.720 pts.
Beca «Sagrada Familia». San Sebastián. Total: 10.000 pts.
Beca «Francisco Tierra». Burceña. Total: 8.500 pts.
Beca «San Juan Bosco». Total: 5.000 pts.
Beca «Santo Domingo Savio». Santander. Total; 19.500 pts.
Beca «San José Obrero». Industriales. Santander. T .: 10.000.
Beca «M aria Auxiliadora». Arch. Santander. Total: 6.000 pts.
Beca «Señores de Udaetxe». Bilbao. Total: 34.000 pts.
Beca «San Andrés». Burgos. Total; 1.327,35 pts.
Beca «Nuestros Mártires». Zuazo. Total: 18.509 pts.
Beca «M aría Atixiliadora». II. Total; 20.000 pts.
Beca «Alfonso Gómez Pineda». Pamplona. Total: 5.000 pts.
Boca «San Paulino». Baracaldo. Total: 6.000 pts.
Beca «Eduardo Capranl». Baracaldo. Total: 6.000 pt.«.
Beca «Jesús Aznar».. promovido por Doña María Salmerón.
Vda. de Aznar. Total: 7.000 pts.

INSPECTORIA DE CORDOBA
P. Provincial: Calle María Auxiliadora, 14 • Córdoba
BECAS E N FO R M ACIO N

r.
Beca «Ntra. Sra. Consulación», Torrodojlmcno. N'. “
Total: 40.000 pts.
Beca «San Juan Bosco». AA. A A .;
B. F.. Cádiz. Prime­
ra entrega; ^.000 pts.
Beca "M. Courtoy de la Torre y fnmilí..~. Total; lOG— -J pts.
Beca «A . Maria Rubio Castillejo y famllí;.-. Totr/- ’ -'.onn.
Beca «Santo Tomás Apóstol». T. li, Las Palmas;
n».
Beca «Arch. María Auxiliadora». Sta. C. Tenerife. T .; 22.'//;.
Beca Misionera «Don Dionisio Ilíe*. Total; 1.” ' -7 pt«.
Beca «S. José y Ntra. Sra. Montserrat». Granada. T. • *'■ •'
Beca «S. Juan Bosco». AA. AA. Las Palmas- T . ’ '0
,
Beca «J. H. S.» La.s Palmas. Total: 21.000 pts.
Beca «Fam ilia Lago». Las Palmas. Total: 11.200 pts.
Beca «Miguel Magone». Las Palmas. Total: 2 "'O
Beca «-E. (jhacón de Hernández». Las Palmas. T . : 15.i,j p»«.
Beca «Sagrado Corazón». Las Palmas. Total' 6.5.356
Beca «Fam ilia Lllnarcs». Las Palmas. Total; 3.700 p’ «.
Beca «Virgen del Pino». Las Palmas. Total: 5.700 pt«Beca «Fam ilia Naranjo». Las Palmas. Total; 6.S00 r ‘
Beca «M aria Auxiliadora». Málaga. Total: 32.800 pts.
Beca «M aría Auxiliadora». Ronda. J. Troya Z. T. 25 •’ .< pt«.
Beca «Baldomero Pagán». Pozoblanoo. Total: 25.C70 r 'r .
Beca «Fam ilia Torre». Las Palmas. Total: 4.700 p?«Beca «Cías. Juventud Salesiana». L a Orotava. T ^‘ s” 43.000.
Beca «Francisco León Navarro». Las Palma;:. T .; 3.600 pts.
Beca «D . Sebastián M.S Pastor». Córdoba.
^.Oí' pts.
Beca «Sto. D. Savio». Cías. Juventud Salesiana. Las P al­
mas. Total: 44.300 pts.
___
Beca «P u ra Bermúdez*. Málaga. Total; 28.600 j ‘
Beca «Fam ilia Muñoz». Total: 21.000 pts.
Beca «Santa Isabel». Granada. Total; 40.200 pts.
Beca «San Juan Bautista». Tota!; 21.000 pts.
Beca «Rscuelas Externas*. Monfilla. Total; 12.000 ;
Beca «Ntra. Sra. del Carmen». Pozoblanco. T .; 40,Ck>.j pi
Beca «Don Bernardo López Baena». Córdoba. T . . 16 «V»


31

Beca «Santa Catalina». II. Las Palmas. Total: 3.000 pts.
Beca «Fam ilia Navarro». Total: 7.100 pts.
Beca «Santa Ana». Alcalá la Real. Total: 20.000 pts.
Beca «Don Vicente Reyes». Total: 2.700 pts.
Beca «M aría Auxiliadora». Antonio Koyán. Total: 28.800 pts.
Beca «M aría Auxiliadora». Coop. Antequera. T . : 11.500 pts.
Beca «Fam ilia del Pino Muñoz». Jaén. Total: 10.000 pts.
Beca «Romero-Martínez». Málaga, promovida por Doña D o­
lores Martínez. Vda. de Romero. Total: 30.000 pts.
Beca «Santa Cruz de Tenerife». Tenerife. Total: 32.000 pts.
Beca «Santo Domingo Savio». Cías. Tenerife. T . : 21.000 pts.
Beca «Fam ilia Atillo Loy». Las Palmas. Total: 1.500 pts.
Boca «Juan X X III». Montllla. Total: 14.350 pts.
Beca «Fam ilia Espejo Oómez». Montllla. Total: 12.000 pts.
Beca perpetua «T raya Gozálvez*. Ronda. Total: 24.000 pts.

INSPECTORIA DE MADRID - ‘DESAMA”
P. Provincial: Paseo del General Primo de Rivera, 27
Madrid (5) • Teléfono 227 56 91
Recordam os a todos los participantes en D E SA SÍA las
dos catefforías de Decas Completas.

Beca O R D I N A R I A : 50000 pesetas.

Beca M A Y O R : 100.000 pesetas.
Siem pre pueden enviar donativos para i r completando
las becas «BESAMAx^.
BECAS E N FO R M A C IO N
Broa «San José». Archlcofradía. Pizarrales. Total: 29.000 pts.
Beca «Corazón duro*. C. S. Total: 5.000 pts.
Beca «Coadjutor Salesiano». Paloma. Total; 34.000 pts.
Beca «Ntra. Sra. del Carmen y S. Lucas» II. P. e.: 15.000.
Beca Perpetua «Mercedes Cruzado». N. e.: 3.000 pts. To­
tal; 54.000 pts.
Beca Perpetua «Besama». N. e .: 500 pts. Herranz: 2.000 pts.
L. Lim ia: 300 pts. Total: 27.400 pts.
Boca Perpetua «Salcslanos D. Bosco». N. e .: 71.050 pts.
Total; 113.825 pts.
Beca «Arch. María Auxiliadora». Carabanchel: 6.000 pts.
Total: 36.000 pts.
Beca M. «Sgdo. Corazón». N. e.: 2.000 pts. Total; 21.000 pts.
Boca «Féliz González». Familia Pardo: 5.000 pts. Total:
41.000 pts.
Beca «S. Francisco de Sales». Coop. Estrecho. N . e .: 2.650.
Total: 56.500 pts.
Boca «A . Ignotas*. N. e.: 12.500 pts. Total; 37.500 pts.
Beca «M . A. L .». N. e.: 2.000 pts. Total: 42.000 pts.
Besa Mayor «Sta. Teresa y S. Vicente». N . e.: 12.000 pts.
Total: 40.000 pts.
Beca «Viuda de Pujadas». N. e.: 2.000. Total: 20.000 pts.
Beca «Don José A guilar». Ciudad Real. Prim era ent.: 20.000.
Beca «M, A. Carasco*. Primera entrega: 45.000 pts.
Beca «M aría Auxiliadora». III. Arch. Atocha. T . : 8.025 pts.
Beca «Josefa A. Roldán y familia». Total: 36.100 pts.
Beca «San Antonio». A. Angulo. Total: 30.000 pts.
Beca «S. Ricardo». Total: 5.000 pts.
Beca «M aría Auxiliadora». Salamanca. Total: 11.000 pts.
Beca «F . Canales». Total: 24.000 pts.
Beca «Familia A. Miranda». Total: 20.000 pts.
Beca «Familia Mesonero R.». Total: 27.000 pts.
Beca «Domingo Savio». Colegio de Atocha. Total: 17.000 pts.
Beca «Santa Rosa». Total: 35.000 pts.
Beca «Arch. M.* Auxil.» P.9 Extremadura. Total: 37.000 pts.
Beia «Don Juan». Total: 20.000 pts.

INSPECTORIA DE SEVILLA - "BESASE”
P. Provincial: Calle Maria Auxiliadora, 18 - Sevilla
Teléfonos 35 04 86 y 30 01 00
BECAS C O M P LE T A S
Beca «Don Francisco Javier Montero». Donativo de sus Antigtios Alumnos. Total: 100.000 pts.
BECAS E N FO R M A C IO N
Alcalá. Bt'ca «Ntra. Sra. del Aguila». Total: 25.200 pts.
Alcalá. Beca «San Pedro». Coop. N. o.; 2.000. T .; 6.000 pts.
Alcalá. Beca «.Arch. Maria Auxiliadora». Total: 5.000 pts.
Algecim ». B w a «Don Andrés Yün». Total: 5.000 pts.
Almcndralejo. Beca «Ntra. Sra. de la Piedad». Iniciada por
Familia Rafael Martínez Cordón e Isabel Martínez Asuar.
en memoria do doña Crcscencla Asuar. Total: 32.100 pts.
Cildiz. Beca «M.fi A uxil.» Arch. N . e.: 1.000. Total: 36.000.
Cádiz. Beca «Don Clemente Cuede». Total: 11.175 pts.
Cádiz. Beca «Maestro Pagés». Total: 13.295 pts.
Cádiz. Beca «Rvdo. D. José Montserrat». N . e.: 1.000 pts.
Total: 13.000 pts.
Cídiz. Beca «Santiago Apóstol». Total; 70.000 pts.
Cádiz. Boca «San José». N. c.: 2.000 pts. Total: 6.000 pts.
27.500 pts.
Campano. Beca «Bertem ali». Total: 5.000 pts.

32

Carmena. Beca «Don Fermín Molpeceres». Total: 13.000 pts.
Cáceres. Beca «San Juan Bosco». Total: 16.750 pts.
Jerez. Beca «Don Juan Torres». Total: 2.500 pts.
Jerez. Beca «Escuela de Maestría». Total: 20.000 pts.
L a Línea. Beca «Inmaculada Concepción». Total: 500 pts.
L a Palma. «San Andrés». Total: 5.000 pts.
Mérida. Beca «Don Javier Montero». Total: 12.500 pts.
Morón. Beca «Ntra. Sra. del Sagrado Corazón». T .; 26.000.
Morón. Beca «Mártires Salesianos de Morón». T . : 2.000 pts.
Puerto Real. Beca «M aría Auxiliadora». Total; 18.000 pts.
Rota. Beca «Ntra. Sra. del Rosario». Total: 14.000 pts.
Sevilla. Beca «M aría Auxiliadora». A. R. N. e .: 500. Total:
23.000 pts.
Sevilla. Beca «Corpus Christi». Srta. J. Quintana. N. e.:
100 pts. Total: 13.650 pts.
Sevilla. Beca «D. Antonio Marcolungo». Donación de Doña
Carmen Hidalgo, Vda, de Cortés de Bienvenida Badajoz.
Sovllla-Trinidad. Beca «M .a A uxil.» Arch. Total: 21.000 pts.
Sevilla-Trinidad Beca «Stma. Trinidad». Total; 15.000 pti.
Sevilla-Trinidad. Beca «D . Tomás González». T . : 30.000 pts.
Sevilla-Residencia. Beca «S. Juan Bosco» III. T . : 15.000 pts.
Sevilla. Beca «Ntra. Sra. de la Piedad». Total: 31.106 pts.
Utrera. Beca «D. Agustín Nofre». N . e .: 790. T . : 30.000 pts.
Sevllla-Trlnidad. Beca «D . Feo. de la Hoz». P. e.: 1.000 pts.
Utrera. Beca «Bodas de Oro, D. José Novoa». P . e.: 1.000.

INSPECTORIA DE VALENCIA
P. Provincial: Calle de Sagunto, 212 • Valencia
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
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Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
Boca
Boca
Beca

BECA S E N F O R M A C IO N
«Francisco Gil Esteve». Total: 24.000 pts.
«Arch. María Auxiliadora». Valencia. Total: 24.000 pts.
«Fam ilia Gómez Baldoví», perpetua. T .: 150.000 pts.
«Romero Amorós», perpetua. Ultima entrega: 25.000.
«José Carbonel», perpetua. Prim era entrega: 82.000 pts.
«D.S Dolores Berenguer», perpetua. Alicante. T . ; 10.000.
«Rvdo. Francisco Serrats». Valencia. Total: 8.000 pts.
«San Agustín». Alcoy. Total: 18.000 pts.
«Don Recadero de los Ríos». Alicante. Total: 8.000 pts.
«M uy Rvdo. Don José Calasanz». Total: 20.915 pts.
«Rvdo. D . Luis Berenguer*. Alicante. Total; 20.000 pts.
«Ramón Guerrero». Albacete. Total: 22.550 pts.
«Círculo Domingo Savio». Total: 2.000 pts.
«Don Andrés Tari Navarro». Elche. Total; 100.000 pts.
«San Cayetano». Crevillente. Total: 89.000 pts.
perpetua «A . B. A .». Valencia. Total: 150.000 pts.
«San Bernardo». Villena. Total: 46.000 pts.
«D. Vicente Galván». Alicante. Total: 100.000 pts.
«D . Manuel Pérez». Valencia. Total: 250.000 pts.
«Niño Jesús». Total: 20.000 pts.
«Doña Antonia Cabot*. Albacete. Total: 20.000 pts.
perpetua «San Patricio*. Ibi. Total: 60.000 pts.
«M aría Pcire* en memoria de su esposo. Total: 20.000.
«Cooperadores de Valencia». Total; 13.000 pts.
«Rvdo. D. Manuel Pérez* II. Total: 7.500 pts.
«Rvdo. D. Mariano Aisa». Burriana. Total: 17.500 pts.
«Misiones Saleslanas» de Alcoy. Primera ent.: 6.000 pls-

INSPECTORIA DE LEON
P. Provincial: Apartado 425 - León
BECAS C O M P LE T A S
Beca «Don Rafael Castclls y Doña Valentina Cuadra». To­
tal: 100.000 pts.
Beca «M aría Auxiliadora». 0\'iedo-Naranco. Total: 50.000 ptsBECAS E N FO R M A C IO N
Beca «Fam ilia R. D. Victoriano Rodríguez». Valsalabro».
100.000 pts.
_
Beca «Fam ilia Damián Fernández y Sra.» Vigo. P. e.: l O^
Beca «D . José Saburido». Allariz. N. e.: 1.000. T .: 37.^
Beca «Univers. Laboral». Zamora. N . e.: 10.000. T .: 37.30CBcca «M aria Auxiliadora». Allariz. N. e .: 2.000. T . : 30.0^
Beca «P . Miguel Salgado». Vigo. S. Matías. Total: 85.7Sá
Beca «Angel Valverde». Vigo. Total; 75.000 pts.
Beca «José Sabaté». Vigo. Total: 41.500 pts.
Beca «San Juan Bosco». Oviedo-Naranco. Total: 26.000 ptsBoca «Don Pedro Masaveu». 0%'icdo Total: 20.000 pts.
Beca «P . Manuel Lino*. L a Coruña. Total; 16.700 pts.^
Beca «Don Felipe García». Coop. Coruña. Total: 17.135
Boca «San José». Vigo. San Matías. Total: 72.000 pts.
Beca «D eñ a P ilar Gago». V igo Total 30.000 pts.
Beca «Doña María del Carmen Oliveros». Total: 30.000 ptsBeca «Don Pedro Olivazzo». Astudillo. Total; 18.700 pt*Beca «Virgen de Villanueva». Allariz. Total; 22.725 pts.
Beca «M aría Auxiliadora». Celanova. Total: 82.000 pts.
Beca «M aría Auxiladora*. Arch. Vigo. Total: 34.000 pts.
Beca «Don Ernesto Armelles». Coruña. Colegio. Total: 3S.^
Beca «M aría A uxil.» Zamora. Rey Femando. Total 10.
Beca «Domingo Sa\io». León. Total: 16.665 pts.
Beca «Ntra. Sra. de Covadonga». Tudela Vegufn. T .: 19.3^
Beca «Don Emilio Montero». Orense. Total; 22.000 pts.

PIA OBRA DEL SAGRADO CORAZON
San Juan Bosco. antes de su muerte, fundó con la aprobación
del Papa León X lli la- Pía Obra del Sagrado Corazón para que se
celebraran SEIS MISAS DIARIAS Y PERPETUAS en la BMÍlIca del
mismo nombre, en Roma, a intención de cuantos se inscribieran
en ella. Todos los inscritos participan a su vez del fruto aplicable
^ las oraciones de los niños de los Colegios Saleslanos y de las
oraciones y buenas obras de los Saleslanos e Hijas de María Auxl*
liadora.

LIBROS
QUE PUEDEN
INTERESARLE
COLECCION «MUNDO Y FE»
Los jóvenes de nuestro tiem­
po sé hallan inmersos en un
mundo cuyas dimensiones Ili­
mitadas y cuyos valores em­
piezan a descubrir, se entu­
siasman y se esfuerzan de­
nodadamente por tener parte
activa en él. Por tanto la
palabra de Dios deberá lle­
gar hasta ellos- en esta si­
tuación en la que se en­
cuentran enfrentados con el
mundo, si queremos que seat
también para ellos, la nueva
noticia de la salvación.

INSCRIPCION
1. * Puede inscribirse uno a sí mismo y a otras personas, vivas
o difuntas, por las que quiere pedir o sufragár.
2. La inscripción, que es nominal, se efectúa tras la aportación
por una sola vez de una limosna superior a 25 pesetas, o de esa
cantidad (que se puede enviar por giro postal o en sellos de co*
rreos de cualquier valor). La inscripción se acredita con una Cédula.
3. Para inscribirse: Envíe con letra bien clara el nombre o nom­
bres y apellidos de la persona que se inscribe, indicando si es viva
o difunta (no olvíde este detalle) a:
OBRA VOCACiONAL DE LOS COOPERADORES SALESIANOS
Alcalá, 164 - MADRID (2)

Algunos de los títulos publicados:

1.

para la educación de los ado­
lescentes en la fe.

¿QUE PUEDE HACER CON
ESTE TESORO ESPIRITUAL?

2.

APROVECHELO PARA USTED MISMO

3.

Tiene sin duda asuntos que le preocupan; quizás dificultades
en su familia; tai vez desea perfeccionarse en su vida cristiana o
asegurarse sufragios para su alma... Inscribiéndose en la Pía Obra
seis sacerdotes intercederán todos los días por usted.
HAGA PARTICIPES DE EL A LOS SUYOS

METODOLOGIA
para la educación de los ado­
lescentes en la fe.

AMISTAD
...manual para el educador.
...cuaderno para el alumno.

4.

PUREZA
...manual para el educador.
...cuaderno para el alumno.

5.

Usted desea para (os suyos lo mejor: unos están estudiando,
otros abriéndose camino en la vida, tal vez haya algún enfermo...
Una ayuda positiva es encomendarlos al Señor; si usted no puede
pedir bastante, los miles de niños y salesianos lo harán por
usted.

OPCIONES ACTUALES

PUNTOS DE VISTA
LOS JOVENES (I)

DE

PUNTOS DE VISTA
LOS JOVENES (II)

DE

CAMINOS DEL CRISTIANO
...manual para el educador
...cuaderno para el alumno

APLIOUELO A LOS DIFUNTOS
Nada alivia a los difuntos: ni las flores,
mismo recuerdo. Sólo las oraciones y los
almas un alivio. Inscribiéndolas en la Pía
parte cada día el mejor recuerdo: el tesoro
y de las oraciones de millares de niños.

ni fas esquelas, ni su
sufragios llevan a las
Obra recibirán de su
infinito de seis misas,

NOTA: La cédula artística en la que se acredita la Inscripción
en Obra Pia contiene dos nombres: el de la persona Inscrita y
el de la persona que hace el obsequio. Este detalle la hace muy
epta para hacer un delicado presente en una fecha familiar:
sanio, cumpleaños, fin de carrera... Asi también las cédulas de
los difuntos pueden ser muy oportunas para dar el pésame o
recordar un aniversario.

LA IGLESIA Y EL
MUNDO DE HOY
...manual para el educador
...cuaderno para el alumno

PEDIDOS:
Central Catequística Salealana.
Alcalá, 164 - MADRID (2).

Fecha
1971.03