BS_1968_02

Ficha

Título
BS_1968_02
Descripción
Boletín Salesiano. Febrero 1968
extracted text
a #

A ^O L X X X n - N.2 2 - ORGANO DE LOS COOPERAlK)RES SALESIANOS - FEBRERO, 11M>8

NUESTRO RECTOR MAYOR A LA CURIA ROMANA

ROMA.—Dtiranle el recienle Sínodo Pablo VI dio una recepción a los Obispos y Superiores Mayores
de Congregaciones religiosas, miembros del mismo, entre los cuales fíguraban nuestro Rector Mayor,
Don Luis Ricceri, al que la foto recoge al lado del Papa en dicha recepción.

N O T IC IA R IO
S A L E S IA N O

BOLETIN SALESIANO
ORGANO DE LA PIA UNION DE
COOPERADORES
SALESIANOS

PORTUGAL
Revista de la obra de Don Bosco
Año LXXXII • Núm. 2 - Febrero, 1968
DIRECTOR:
JAVIER RUBIO IBAÑEZ

DIRECCION, REDACCION Y ADMON.:

Alcalá, 164-Apartado 9.134
Teléfono; 255 20 00
MADRID-2
Depósito legal: M. 3.044-1958
(Con censura eclesiástica)

ARGENTINA

SUMARIO
NOTICIARIO SALESIANO

. . .

2

QUIERE QUE LE HONREMOS
CON EL TITULO DE AUXILIA­
DORA DE LOS CRISTIANOS . 4
SERVICIO AL HOMBRE . . . . 8
CUANDO LLEGA LA CRISIS . . 12
NOTICIAS G R A FIC A S .......................15
OPERACION iMATO GROSSOi . 16
ESPIRITUALIDAD DE SAN FRAN­
CISCO DE SALES............................19
COOPERADORES EN ACCION

. 20

ESPAÑA S A L E S IA N A .......................21

. 22
LA VIRGEN MANDARA LO NE­
CESARIO.............................................. 25
CRONICA DE GRACIAS . . . .
26
BECAS SACERDOTALES . . . .
31
PARA LOS AMIGOS DE VOFISA

2



INDIA

Por iniciativa del delegado nacional de

cooperadores, don Alvaro dos Santos, la
emisora nacional portuguesa, en su pri­
mer programa, ha estado radiando desde
el 30 de noviembre del año pasado has­
ta el 4 de enero del presente, la Vida de
Don Bosco con el espacio: «El apóstol
de la Juventud». La hora escogida fue
la de las 9,30 de la noche y se repetía
el mismo episodio al siguiente día a las
13,30. De esta suerte se hallaba dos ve­
ces por día en antena la vida de Don
Bosco. Constó la serie de 30 episodios,
preparados por la escritora Odette SaintMaurice. La emisión constituyó un éxi­
to sorprendente; todo el mundo habla­
ba de Don Bosco y lo calificaba como
el serial más interesante radiado en
Portugal desde hacía años.
El ministro de Educación y Cultura Inau­

guró el gabinete de sicoi>edagogía del
colegio salesiano de San José, en Rosa­
rio. Sus instalaciones modernísimas y
el personal especializado, que desempe­
ñará sus funciones, están preparados
para conseguir los siguientes objetivos:
orientación vocacional de los alumnos;
solución de los problemas de aprendiza­
je y de dirección; orientación y asisten­
cia familiar; organización de cursos para
perfeccionamiento del personal docente
a base de las últimas novedades de si­
cología, pedagogía y didáctica. Posee
además una sección médica y otra de
educación física.
Las Escuelas Salesianas de Calcuta, des­
pués de tres años de negociaci<mes, han
conseguido de la caridad del pueblo ale­
mán e italiano ser provistas con unas
cincuenta máquinas para sus talleres,
en los que se forman unos dos mil alum­
nos. De la aceptación que gozan estas
Elscuelas entre los calcutenses basta de­
cir que algunos padres solicitan plaza
para sus hijos recién nacidos. La maqui­
naria recibida: soldadoras, fresas, tor­
nos..., permitirá adiestrar mejor a los
alumnos.

EL RECTOR MAYOR MIEMBRO
DE LA CURIA ROMANA
ITALIA

El corazón de San Francisco de Sales,

llevado a Turín en este año centenario,
fue objeto de férvida veneración en el
Santuario de María Auxiliadora, el 13
de diciembre.
Según comunican de Turín las Hijas de
María Auxiliadora introducirán leves re­
formas en su hábito a partir del 19 de
marzo. El cambio más visible será la
desaparición del pecherín blanco.
En Verona se ha inaugurado el Centro
gráfico, regido por los Salesianos. Els el
primer experimento en Italia de colabo­
ración entre la industria y la escuela.

PERU

Hace 50 años las Hijas de María Auxi­
liadora se instalaban entre los indios
«Campas», que pueblan el Valle del
Ghanchamayo, en la población de La
Merced. Los comienzos fueron penosísi­
mos; hoy gracias al aguante en el sacri­
ficio florece un complejo de obras, tes­
timonio de caridad cristiana: cada año
reciben asistencia médica en el ambu­
latorio y en el hospital unos 10.000 en­
fermos; en la escuela, con secciones tan
variadas como niñas de enseñanza ele­
mental, mujeres analfabetas, escuela ru­
ral y prevocacional, llegan a 500 per­
sonas. Además sostienen en la regalón
ocho catequesis y dos oratorios, uno
masculino y otro femenino. El gobierno
peruano agradecido concedió la Medalla
de oro a las Hijas de María Auxiliadora
que trabajan en el Valle del Chanchamayo.

MEJICO

El Redor Mayor visitó a los salesianos

a principios de diciembre, con ocasión
de celebrarse el 75 aniversario de la lle­
gada a Méjico de los hijos de Don Ros­
co. Impuso la sotana a loe novicios, ha­
bló con los salesianos sobre la renova­
ción que la Congregación está llevando
a cabo en todo el mundo y presidió los
solemnes festejos conmemorativos, que
tuvieron lugar en la basílica de Nues­
tra Señora de Guadalupe.

El £ de enero se hizo público en Roma
el nombramiento de los miembros que
compondrán, en la reformada Curia Ko«vana, la Congregación de Religiosos.
Entre ellos figuran tres Superiores Ma~
yores de Ordenes y Congregaciones re­
ligiosas: él Abad del Cister, el P. Arra­
pe, prepósito general de la Compañía de
Jesús y don Luis Ricceri, rector mayor
de los salesianos.
Ante el nombramiento alguien obser­
vó que él Papa habia querido que figu­
raran los tres máximos representantes
de una Orden de la Edad Media, el del
Cister; de una moderna, él de los Je­
suítas, y el de una contemporánea, el de
los Salesianos.
El nombramiento de Don Ricceri es
una distinción que el Papa le hace no
sólo por ser Rector Mayor de la Con­
gregación religiosa más extendida, na­
cida en esta época, sino por su labor ex­
cepcional durante el Sínodo, dentro de
la comisión de diez .superiores mayores
que estudiaban los puntos de vista de
los religiosos en las cuestiones someti­
das a consulta por el Papa a los sino­
dales.
Como se conoce, las reformas de la
Curia debían entrar en vigor a partir
del 1 de enero, pero la enfermedad y ope­
ración del Papa han retrasado la fecha
hasta el J de marzo. La misión de la Sa­
grada Congregación de Religiosos es re­
gular y orientar todo lo concerniente a
la vida de las comunidades religiosas.
El nuevo cargo que ostenta el Rector
Mayor acelerará, sin duda, el traslado
del Consejo Superior de nuestra Congre­
gación a Roma, dejando Turín, como
está proyectado desde hace algún año.


3

AÑO CENTENARIO DE LA BASILICA DE MARIA AUXILIADORA PE TURIN

QUIERE QUE LA HONRENOS
CON EL TITULO DE

AUXILIO DE LOS CRISTIANOS
En la Casa del Oratorio la devoción a María Inmaculada era la tradicio­
nal. Pero un día, el 8 de diciembre de 1861, Don Bosco anunció que la Virgen
quería que se la honrase con el título de Auxiliadora de los Cristianos. Justa­
mente 20 años antes, en ese mismo día daba comienzo la Obra de Don Bosco.

CUADRO LLAMADO DE LAS APARICIONES. En abril de 1846, Don Bosco estaba descorazo­
nado; llevaba cinco años trabajando con unos cientos de muchachos y todavía no tenía
lugar donde reunirlos los domingos, sin que de buenos o malos modos le echasen. La Vir­
gen se le apareció y le mostró el futuro de su Obra: sucesivamente fue viendo tres capi­
llas o iglesias con pabellones, cada vez mayores. La primera, la capillita Pinardi (pág. 5,
foto superior; interior restaurado). La segunda, la iglesia de San Francisco de Sales (en el
cuadro centro-detrás y en pág. 5, foto central; interior restaurado) y finalmente la que él
llamaba gran iglesia, pero sin darle título. Luego seria la basílica de María Auxiliadora
(pág. 5, foto inferior: fachada).

4—

carta anual a los Cooperadores Sale- liadora en todo lo Salesiano, nos damos cuenta
sianos el Redor Mayor nos recordaba que que es como el impulso vital que nos mueve; si
el 9 de junio próximo se cumplirán los Ella nos falta no nos sentimos salesianos. El amor
cien años de la bendición del Templo de a María Auxiliadora es como un carácter impreso
María Auxiliadora, edificado por Don Boscoenenel alma del Salesiano y de todo lo salesiano.
Si la tenemos presente, si propagamos su devo­
Turín.
La alegría, que el recuerdo de esta fecha trae a ción, si aumentamos hacia Ella nuestro amor, nues­
la Familia Salesiana, se manifiesta en solemnida­ tra acción apostólica gana en fervor y en exten­
des religiosas, en peregrinaciones, en artículos y sión,- parece como si nuestras facultades ganaran
libros sobre María Auxiliadora, en academias y potencia y nuestros recursos naturales aumentaran
en todo aquello que se pone en juego en oca­ en capacidad y eficacia, cual si la Virgen quisiera
siones semejantes.
mantener una justa proporción, la proporción de­
Lo principal, sin embargo, será el himno de gra­ bida, entre su ayuda y nuestro esfuerzo,- al fin y
titud intimo que la Congregación y cada salesiano al cabo quiere que a la hora del premio su Hijo
entonará en honor de María Auxiliadora, Madre nos retribuya como si fuera cosa nuestra, lo que
de la Congregación y de cada salesiano. Junto a a la hora del trabajo fue ayuda y gracia suya.
ellos no quedarán atrás las Hijas de María Auxi­
Por eso, los salesianos, comprendemos muy
liadora y los Cooperadores Salesianos, esto es, la bien la actitud de Don Bosco y su gesto, cuando
Familia Salesiana en pleno.
repasando su obra ingente de apostolado excla­
Difícilmente se puede comprender lo que es la mó —decimos con gesto de humildad, pero hay
Congregación Salesiana, explicar su expansión por que añadir también con gesto inteligente— «Ella
el mundo y el arraigo que ha tomado en mil lo hizo lodo». Don Bosco comprendió que María
ciudades sin pensar en María Auxiliadora.
Auxiliadora lo había hecho todo, pero también
Bajo esta advocación crece el Salesiano desde comprendió esa jugada magistral, digamos mejor,
que pone sus pies en la primera casa de forma­ maternal, de María que, a quien la ama, confía en
ción; a Ella le cuenta sus secretas aspiraciones Ella y trabaja con Ella, le dilata su capacidad de
de santidad y apostolado; en sus manos confía la hacer el bien, no sólo ayudándole con las gra­
vocación recibida, a Ella acude en 'toda ocasión cias que distribuye, sino perfeccionando las dotes
y a Ella se consagra todas las mañanas apenas naturales y las virtudes, o si preferimos, la virtud
nace al día.
de las dotes naturales, con lo que aumenta la efi­
Cuando empieza sus primeros contactos con los cacia del apóstol; vendría a ser como si con su
jovencitos el primer apostolado que se le ocurre ayuda, lo que el pecado y la concupiscencia ha
es hablarles de María Auxiliadora; cuando llega hecho torpe en la voluntad y en la inteligencia
al sacerdocio le dedica sus primeros sermones en quedara restaurado, dando a la inteligencia com­
los que recomienda su devoción.
prensión clara de lo que Dios quiere y cómo lo
Cuando los Salesianos abren una nueva casa quiere, y a la voluntad decisión indomable de no
o una parroquia nueva, si María Auxiliadora no ceder hasta conseguirlo. Y así, conjugada la ayu­
preside el altar mayor de la iglesia no le faltará da de María con la aplicación de las fuerzas, el
un altar distinto de todos, más adornado, más apóstol, multiplica su acción y los frutos.
enriquecido. De entre todos los apostolados, que
Toda esta maravillosa e íntima ayuda que el
esa nueva casa emprenda como complemento a Salesiano y la Congregación hallan en María
su labor educativa de la juventud, antes que los Auxiliadora; toda la devoción que le tienen y pro­
cooperadores, antes que los padres de familia, an­ pagan cuenta con un apoyo visible, un foco de
tes que nada, organizará la Archicofradía de Ma­ irradiación, un centro donde nació y desde donde
ría Auxiliadora para que su imagen vaya de calle se propaga a todo el mundo; centro hacia el que
en calle y de piso en piso, afianzando la fe de todos los devotos de María Auxiliadora tienen
los cristianos y bendiciendo los hogares. Allí va vuelta la mirada y el corazón, aunque tengan
Ella preparando el campo para la completa la­ otros templos y altares al alcance de la mano, y
bor salesiana.
es el Santuario-Basílica turinés, construido por Don
Un critico, un racionalista, que estudiara el fe­ Bosco con ese preciso fin.
El Santuario de María Auxiliadora de Turín
nómeno salesiano de Don Bosco en el mundo,
tropezaría inmediatamente con la presencia influ­ sigue siendo en la actualidad, y no ha dejado de
yente de María Auxiliadora. Su trabajo grande serlo en cien años de existencia, manantial de
le costaría precisar hasta dónde llega la acción 'aguas puras de vida cristiana, de acción salesia­
de la Auxiliadora y hasta dónde la de los sale­ na, cuyo caudal va engrosando a medida que se
propaga por el mundo.
sianos, incluido su Fundador.
Su existencia se debe a una inspiración celeste.
Nosotros, los salesianos, a quienes el amor de
María Auxiliadora nos ciega en parte y nos quita Ya en 1846, Don Bosco, en una visión contempló
la facultad de medir y calibrar su eficaz influencia las diversas etapas del desarrollo de la obra, que
en todo lo nuestro, somos incapaces de llevar a había empezado cinco años antes y para la que,
cabo ese estudio. Mas a poco nos detengamos a rodando de prado en prado, no veía todavía por­
considerar con un tantico de atención durante venir seguro alguno, por carecer de un local pro­
cierto tiempo sobre la actuación de María Auxi­ pio y de una capilla para recoger los domingos

E

6



n

su

a los muchachos, a los que no querían los párro­
cos en iglesia alguna. Las tres primeras etapas es­
taban marcadas por tres iglesias: la primera, la
que unas semanas después de la visión se llamaría
Capilla Pinardi, baja, estrecha, de muy poca capa­
cidad; la segunda, la iglesia de San Francisco de
Sales, más amplia, más digna, que desde el 1852
sería el centro de vida de la Casa de Don Bosco;
la tercera, una iglesia espaciosa, artística, capaz
para muchos cientos de personas... sería la Basílica
de María Auxiliadora.
La realidad iba año tras año dando a Don Bosco
confirmación de que lo que había visto en sue­
ños, esos sueños que estuvieron a punto de ence­
rrarlo en un manicomio.
Sin embargo, el año 1861 nadie se acordaba y®
de la iglesia que Don Bosco había profetizado;
incluso había vendido a los rosminianos el terre­
no en donde había visto emplazada la famosa
iglesia soñada. Nadie en el Oratorio había oído
hablar con especial relieve de María Auxiliadora.
Se la invocaba a diario en las letanías con el
título «Auxilio de los cristianos», pero para lodos
era uno más en la larga lista de invocaciones.
Por eso causó sorpresa que un día apareciera
Don Bosco hablando de que iba a construir una
gran iglesia, dedicada a María Auxiliadora, en un
terreno que no era suyo, que difícilmente podría
recuperar; y sin contar con medios.
Este anuncio se produjo exactamente el 6 de di­
ciembre de 1861, durante la novena a María In­
maculada, la fiesta por excelencia del Oratorio.
Después de haberse pasado confesando desde las
3 de la tarde a las 11 de la noche, fue al comedor
a lomar un bocado y se encontró aguardándole a
Pablo Albera. «Estoy tan mareado —le dijo— que
al fin ya no sabía ni lo que decía ni lo que hacía».
El mareo, al parecer no provenía del cansancio,
como lógicamente cabría suponer, sino de una
obsesión: «Durante toda la tarde, precisó, no se
me iba de la mente una idea fija: ¿Cuándo cons­
truiremos una gran iglesia para dedicársela a Ma­
ría Auxiliadora?»
¿Qué había acontecido en esa otra vida miste­
riosa, donde Don Bosco recibía instrucciones del
Cielo? No lo sabremos nunca. Lo cierto es que dos
días después, el mismo día de la Inmaculada, co­
mentando lo bien que había salido la función reli­
giosa de la tarde en honor de María Inmaculada
dijo a Juan Cagliero: «La función ha salido muy
bien y estoy muy contento; sin embargo (nótese
este «sin embargo» y el «ahora» que sigue) la San­
tísima Virgen quiere ahora que la honremos con
el título de María Auxiliadora de los Cristianos y
a Ella, bajo este título, es a quien tengo que de­
dicar un templo. María Auxiliadora será la fun­
dadora y el sostén de todas nuestras obras de
ahora en adelante», concluyó Don Bosco.
Y esto principalmente lo que se quiere poner
de relieve este año con el centenario inaugural:
la acción de María Auxiliadora con la Congrega­
ción, con sus hijos y la entera Familia Salesiana.

Todos a ANNECY-TÜRIN y COLLE D. BOSCO
lugares santos salesianos con la

PEREGRINACION SALESIANA
MAYO, 1968

organizada con motivo del I Centenario de la Basí­
lica de María Auxiliadora y del IV Centenario de
San Francisco de Sales.
El 17 de mayo,
día de España en la Basílica de Marín Auxiliadora
ITINERARIOS
Desde BARCELONA

Desde M ADRID

Mayo
12 Salida-AviArnon
IS Valence-Annecy
14 Ginebra
15 Ginebra-Turín
16 Turln
17 Turln
18 Milán-Génova
19 Costa Azul-Marsella
20 Barcelona
Combinados ron la de
Barcelona
• Salida de SE V IL L A

Mayo
9 Salida-Zarag. Seo de
Urgcl
10 Andorra-Narbona
11 Aimecy
12 Annecy
13 Ginebra
14 Lausana-Bcrna-Zurich
15 Milán
16 Mllén-Turin
17 Turln.
18 Níza-Montpellcr
19 Toulousc-Lourdcs
20 San Sebastián
21 Madrid

Y CORDOBA
Día 10 a Madrid
Día 11 a Barcelona.
Solida de VALENCIA
Día 11 de mayo
-

0

CONDICIONES
Alojamiento en Hote­
les de 2.* Servicios de
guía y entradas a mu­
seos pagadas.
Viaje en auto-pullman.
PRECIOS
Desde Barcelona 6.700
pesetas.
Desde Sevüla-Córdoba
8.500 pesetas.
Desde Valencia 7.600
pesetas.
INFORMACION E
INSCRIPCION;
Dirigirse a; P. PEDRO
ESCURSELL
Escuelas Salesianas
Rocafort, 42 - Barcelo­
na (15)
Teléfono 223 95 92 (De
5 a 8 tarde)

CONDICIONES
Alojamiento en Hote­
les de 2.* Categoría,
tasas e impuestos de
los mismos y una pó­
liza de seguro de 2.000
pesetas por persona.
Viaje en auto-pullman.
PRECIO 7.600 pesetas.
INFORMACION E
INSCRIPCION:
P. Laurentino Martí­
nez - Salesianos
Francos Rodríguez, 5
Madrid (20)
Teléfono 233 32 08

NOTA BBNB.—Los precios y Horario» podrían sufrir,
en caso de necesidad, pequeñas alteraciones.


7

LA IGLESIA EN CAMINO Y LA HI MANIDAD

SERVICIO AL HOMBRE

La Iglesia y la Humanidad están hechas la una para la otra. El Concilio
ha \Tielto a poner de relieve esta íntima relación mutua. Los cristianos
hemos de comprender esta nueva actitud de servicio de la Iglesia para
secundarla en todas sus iniciativas.
mentalidad de los cristianos necesita
grandes dosis de renovación conciliar. To­
davía el Concilio no ha entrado en el
pensamiento de muchos cristianos. La pri­
mera mentalización ha de realizarse en lo refe­
rente a la actitud nueva y necesaria de la Iglesia
frente al mundo, que ha pasado, como alguien
dijo, de una Iglesia estátioa, parada y quieta a
otra Iglesia dinámica, en movimiento.
A la Iglesia ya no se la puede concebir como
algo anclado en los tiempos,- no lo fue nunca
aunque las apariencias exteriores pudieran dar
sensación de lo contrario. Siempre tuvo un carác­
ter exisíencial, de vida adaptada a las necesida­
des de los tiempos, aunque predominara más en
ella lo quieto, lo estático, sobre lo dinámico.
La condición existencial de la Iglesia está pun­
tualizada por dos coordenadas,- una, que, por na­
turaleza, está de camino hacia la plenitud escatólogica, otra, que, por vocación, está hecha toda
entera para el hombre.
Por ser peregrina la Iglesia es eminentemente
dinámica,- y por tener que llevar la humanidad
a Dios se penetra de humanismo.

L

a

LA IGLESIA
ES PEREGRINA
El concilio abandonó la visión triunfalista de
la Iglesia militante e insistió en la visión más

humilde y más real de Iglesia peregrinante, su­
mergida en las vicisitudes del devenir del tiem­
po humano/ siempre en tensión entre dos polos:
por un lado, la eternidad a la que tiende/ y por
otro, el tiempo en que vive. La Iglesia no puede
desentenderse de ninguno de los dos polos y se
ve precisada a servir a los hombres, que viven
en lo temporal, en función de eternidad.
£1 Pueblo de Dios se reviste en la tierra con
todas las caracleríslicas del tiempo humano y,
por tanto, sujeto a evolución, a cambio y a refor­
ma. De ahí que el Concilio hable de una Iglesia
peregrinante, llamada a una continua reforma.
Si se añade que en todas las vicisitudes huma­
nas hay también infidelidades y retrocesos, se
verá claro porqué la Iglesia debe ser también
penitente, y es santa precisamente porque es pe­
nitente. Una de las experiencias más conmove­
doras del Concilio fue el momento aquel que Pa­
blo VI pidió perdón a los hermanos separados.
La Iglesia de la tierra está hecha de historia y
de historicidad, por<que se halla inmersa en el
devenir humano, y así da testimonio verdadero
de la encarnación de Dios.
La Iglesia peregrina está hecha de «historia»,
porque se funda sobre acontecimientos, Encarna­
ción, Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús, etc.,
que tiene el poder de reactualizar sacramentalmen­
te para consagrar los demás acontecimientos de la
vida. Su dinamismo no se mueve sobre ideolo­
gías/ no es una filosofía ni un sistema de concep­
tos ni una biblioteca sagrada.
La Iglesia, en definitiva, es un acontecimiento,
o mejor la organización sacramental de una serie
de acontecimientos, que van desde los orígenes
a la Pascua del Señor, que asume todos los acon­
tecimientos posteriores en la salvación.

Esta sonriente hermana de la Sociedad de San Pablo, que maneja las teclas de la
linotipia con la misma facilidad que pasa las cuentas de su rosario, sirve a la
Buena Prensa en Africa. Podría ser un símbolo de la Iglesia actual, preocupada
por descubrir a Cristo en las necesidades y en los problemas de los hombres
para llevar a todos al Reino de Dios.
*

— 9

La Iglesia peregrina eslá hecha además de (his­
toricidad!, porque ni es estática ni definitivamen­
te perfecta; sino que se mueve y vive según la
evolución del tiempo humano con sus avances
Y retrocesos; lanzada siempre hacia una meta,
que va mucho más allá de la historicidad, aun­
que esta sea inherente.
Así la Iglesia es luna —santa—católica—apos­
tólica! no en el sentido estático de una posesión
perfecta e inmutable, sino en el sentido dinámico
de continua conquista. Su unidad, su santidad, su
catolicidad y apostolicidad son una «misión!, una
responsabilidad, una inquietud permanente, un
esfuerzo, una busca, un progreso y hasta un arre­
pentimiento continuo.
La Iglesia peregrina, en este sentido, no está
acababa nunca, sino que se está haciendo; no ha
llegado a la meta sino que siempre está en cami­
no hacia ella... igual que la historia del hombre,
que no eslá acabada y se irá haciendo mientras
no desaparezca la tierra.
Es, pues, muy explicable su exigencia de desa­
rrollo, de progreso, su verdadera necesidad de
penitencia, su empuje misionero, su adaptabilidad
pastoral y sus iniciativas ecuménicas.
Este sentido de la peregrinación, tan realista,
puesto ante los ojos por el Concilio, dará siem­
pre a la Iglesia de la tierra una actitud pronta
Y alegre de servicio, una humildad que enrique­
cerá enormemente su eficacia pastoral Efectiva­
mente la Iglesia ahora está interesadísima por san­
tificar las mismas preocupaciones de los hombres
Y deseosa de influir en la orientación misma de
la historia.

to, a servir al hombre. Al hombre en toda su con­
dición, en toda la enfermedad, en toda su nece­
sidad. La Iglesia casi se ha declarado sierva de
la humanidad, precisamente en un momento en
que lo mismo su magisterio que su gobierno pas­
toral ha adquirido mayor esplendor y mayor vi­
gor, mediante la solemnidad conciliar: la idea
de ministerio ha ocupado un lugar central».

LA IGLESIA SIRVE AL HOMBRE Y AL MUNDO
Este servicio al Hombre y al Mundo —dado que
el Mundo se resume en el Hombre— implica un
reconocimiento especial de la obra de Dios Pa­
dre en la creación, que debe ser conducida por
la Iglesia a la salvación. Lo cual exige a los cris­
tianos todos el cultivo cuidadoso de la verdade­
ra estimación por la dignidad de la persona hu­
mana, un auténtico respeto y un empeño por la
autonomía de los valores temporales.
La Iglesia al realizar este aspecto de la renova­
ción, que busca en sí misma y en los cristianos,
ofrecerá a las generaciones de hoy la visión de
que la religión cristiana es el único Humanismo
integral, el más realista y el más exaltador del
hombre en su destino y en todo su múltiple di­
namismo.
Decía el Papa en el discurso citado: aDadle, al
menos, este mérito al Concilio, vosotros humanis­
tas modernos, renunciadores a la trascendencia
de las cosas supremas, y reconoceréis nuestro
nuevo humanismo: también nosotros, y más que
nadie, consideramos al hombre.
Fue Dios Padre quien nos dio el ejemplo, pues
amó tanto al hombre que envió al mundo a su
Hijo para salvarlo.
La Iglesia trabaja por la salvación de este mun­
do, para que haya «nuevos cielos y mundos nue­
vos!; no lo abandona, como si se hallase enfer­
HUMANISMO
mo incurable, para ir a otra parte a construirse
uno nuevo en otro astillero: transforma éste. Los
DE LA IGLESIA
cielos nuevos y los mundos nuevos, no son una
nave distinta que la Iglesia espera hallar constru­
ida como por milagro; es esta misma nave de hoy,
ésta que navega y que la Iglesia ayuda a reajus­
la transforme profundamente.
La acción de la Iglesia en la tierra es una acti­ tar hasta que
afirmar que la Iglesia es para el Mun­
vidad da servicio y exactamente de servicio al do;Se epuede
cabe afirmar, aunque en otro
hombre. £1 protagonista de la historia, el objeto sentido,igualmente
que el Mundo es para la Iglesia. Para
del amor de Dios y del amor de la Iglesia es el comprender
esto convenientemente precisaremos
Hombre. £1 centro de atención de la «institución algunos puntos.
eclesiai! no es, como parecía lógico, la Iglesia
sino la humanidad. El amor siempre hace pensar
en otro.
EL MUNDO «REINO DE DIOS»
Un observador del Concilio dijo de la alocu­
En primer lugar, se ha de tener bien presente
ción de Pablo VI, pronunciada el día 7 de diciem­
bre de 1965, en San Pedro, que había sido la que, en principio, el Mundo fue hecho —«de mo­
más bella que había escuchado: en ella el Papa do admirable!— para ser el Reino de Dios; por
desarrolla magníficamente el aspecto del huma­ eso su dinamismo intrínseco, producido por el
nismo, propio de la condición exístencial de la misterio de la creación, tiende históricamente a
colaborar en la construcción de este Reino.
Iglesia peregrina.
Si después el pecado del hombre arruinó esta
Dijo el Papa: «Es algo que hemos de resaltar:
toda esta riquesa doctrinal tiende a un solo pun­ modalidad y trajo el dominio del Maligno, la
10

ledención del Señor Irajo el Reino de Ciislo, que
conduce al Mundo —fde modo más admirable»—
a ser Reino de Dios, según su más auténtico pen­
samiento inicial.
En segundo lugar, conviene distinguir en la
Iglesia dos aspectos diversos y complementarios:
el aspecto de la Iglesia en cuanto cinstitución salvífica», como Madre de los hombres a los que
lleva a ser hijos de Dios,- y el aspecto de la Igle­
sia en cuanto «Comunión de los Santos», como
Hija de Dios, que empieza ya en esta tierra, en
la historia, «la nueva Creación».
La Iglesia en cuanto «Institución salvííica» es
un servicio para el mundo. Por el contrario como
«nueva Creación» es la meta de la historia: en
este caso se debe decir que el Mundo es para
la Iglesia.

LA IGLESIA Y EL MUNDO
HECHOS EL UNO
PARA EL OTRO
Cuando se dice que la Iglesia es para el Mun­
do, se pone de relieve un aspecto del humanis­
mo de la Iglesia, que resalta en primer plano al
Hombre con sus necesidades, su angustia, sus li­
mitaciones, sus pecados, su muerte.
Cuando se dice que el Mundo es para la Igle­
sia, afírmase otro aspecto bien distinto del Hu­
manismo de la Iglesia, la cual resalta en primer
plano las grandezas, el dinamismo, los valores pe­
rennes y la deificación del Mundo y del Hom­
bre.
Y de la misma manera que los dos aspectos di­
ferentes señalados en la Iglesia; «Institución salvífica» y «comunión de los Santos», son absoluta­
mente inseparables, porque constituyen una mis­
ma y única realidad/ de igual manera son insepa­
rables los dos aspectos del humanismo: la Iglesia
es para el Mundo y el Mundo para la Iglesia.
De ahí su triple preocupación que contrasta con
actitudes anteriores: antes le preocupaba más su
propia dignidad e importancia, ahora descubrir
a Cristo en las necesidades humanas y en los pro­
blemas actuales de la humanidad. Antes la or­
todoxia de la doctrina y los derechos de la ver­
dad, ahora el hombre, la persona, y sus derechos
religiosos. Antes se situaba en posición de defen­
sa y de lucha contra el error, ahora le preocupa el
modo de salvar las barreras y las distancias que le
separan de los hombres que no han entrado en
el Pueblo de Dios; de ahí el diálogo.
Estas actitudes de la Iglesia han de ser las de
los cristianos. No se puede considerar hoy nadie
cristiano moderno, consciente, cooperador de la
Iglesia si adopta posturas contrarias.

TURIN.—Tres muslimes iraníes en viaje por Euro­
pa, visitando ofícialmerüe entidades sociales y edu­
cativas, se detuvieron en diversas instituciones salesianas tuiinesas, donde fueron acogidos con cor­
dialidad Y en las que se les mostró detenidamente
cnanto deseaban ver. En la foto interior, jóvenes
del grupo salesiano de Waldwinkel coronan la
cumbre en una excursión.

« li

ADOLESCENCIA Y FE

GUANDO LLEGA LA CRISIS
NA vajilla preciosa de
cristal tallado colocada
sobre ur\a mesa de equi­
librio inestable es un
riesgo constante.
La adolescencia es la mesa de
inestable equilibrio sobre la que
descansan, con riesgo da esfu­
marse, todos los frutos de edu­
cación humana, moral y cristia­
na, acumulados en el alma de
los niños desde que el amor de
los padres y la paciencia de
sacerdotes y educadores empe­
zaron a tallarlos para preparar­
los a la vida.
La adolescencia es esa edad
que va, aproximadamente, de
los 12 a los 16 años. No es nues­
tra intención hablar de ella; eso
queda reservado a los libros de
sicología y pedagogía. Pero una
idea, aunque sea muy general,
debemos darla para ambientar
el tema concreto que vamos a
tocar.

U

muy
acusadas de la adoles­
cencia son la actitud de
liberación que adoptan
los chicos en su afán de afian­
zar su personalidad. La adoles­
cencia es un paso hacia la ma­
duración de la persona, hacia la
adquisición de la propia per­
sonalidad, la cual no se con­
sigue sin cierta liberación de la
niñez y sin la reolaboración per­
sonal, que los niños deben ha­
cer, de todo cuanto durante la
niñez adquieren en materia de
principios y criterios de con­
ducta.
Los adolescentes quieren pen­
sar por sí mismos, valorar las co-

C

12

a r a c t e r íst ic a s

”Lo que yo reprocho a mis padres es
que me traten aún como un niño de
tres o cuatro años. Por ejemplo, siem­
pre creen que no voy abrigado, que no
he comido bastante... h\e gustaría que
me dejaran un poco más tranquilo y
no me sermonearan tanto. Además son
hipócritas. Nos imponen una discipli­
na en nombre de un ideal en el que ni
ellos mismos creen."

(Un chico de
15 años.)

sas con juicios propios, ordenar
su vida, sus amistades, diversio­
nes..., a su gusto, que es el gus­
to que impera en la calle, pues
se da la curiosa paradoja que
los adolescentes cuanto más li­
bres e independientes quieren
ser, más victimas son del tborreguismo». Su voluntad choca
frecuentemente con la de sus pa­
dres; durante años y años el ni­
ño recibía todo lo que sus pa­
dres le decían y como se lo de­

cían,- a los padres no les costa­
ba gran cosa moldear el gusto
de los hijos y sus conciencias.
De pronto el chico empieza a
no estar conforme, a discutir lo
que se le manda, a discutir el
modo de vida llevado en casa,
las costumbres hogareñas, los
planes de distracción o trabajo
que los padres fijan. Comienza
una ruptura con el pasado y se
crean situaciones que a más de
un padre le hacen exclamar:
liNo entiendo a mi hijo, no sé
que le pasa a mi hija!>
Estas señales, someramente ex­
puestas, son los indicios de la
evolución interior que se está
operando en el adolescente: se
siente impulsado con fuerza fue­
ra del hogar familiar; siente fu­
ror por vivir, prefiere lo llama­
tivo, lo chillón, busca sensacio­
nes nuevas, se apasiona por los
personajes triunfantes en los que
ve la meta donde secretamente
quisiera llegar; mas quiere llegar
sin ayuda de sus padres, quiere
descubrirse a si mismo sin in­
tervención de ellos.
Todo lo que hasta esa edad
se le inculcó entra en crisis. En
unos la crisis evoluciona pací­
ficamente y va reelaborando el
caudal de ideas y normas adqui­
rido, suavemente sin estriden­
cias; en los más alcanza tonos
vivos, en otros violentos. El ado­
lescente somete a critica el mo­
do cómo le han enseñado a com­
portarse en familia y en socie­
dad, los principios morales que
le han inculcado; juzga de ma­
nera tajante las conductas de
todos, incluso de sus padres, y
no suele tener pelillos en la len­
gua. Descubre fácilmente la hi­
pocresía de los mayores, lo que
aumenta la ruptura con ese
mundo...

esta crisis no se libra
la fe cristiana en que fue
educado. Al principio de
la crisis Dios sigue ge*
neralmeníe ocupando su sitio en
la consideración del niño; lo
que entran en el vaivén de las
dudas Y
severos exáme­
nes son las formas de la religión
que ha venido practicando has­
ta que la adolescencia le des­
pertó: ya no le gustan las ora­
ciones infantiles; le molesta te­
ner que ir a Misa, tanto más si
no la comprende,- la confesión se
les hace costosa, porque ha co­
menzado a sentir los impulsos de
la sexualidad, llena para él de
oscuridades y se siente turbado
e inseguro.
Esta crisis de la fe se manifies­
ta también en criticas a la Igle­
sia, a los sacerdotes, a la censu­
ra eclesiástica de las películas
Y del baile,- y a otros muchos
temas, provocados por conversa-

D

e

normas:
1.
El adolescente quiere
una religión más reflexi­
va; intenta comprender.
No es que rechace la religión o
quiera desprenderse de su fe si­
no lo contrario: poseerla mejor,
más personalmente.
Por tanto, de esta edad en ade­
lante, hay que razonarle cuanto
se pueda; reflexionar sobre el
porqué de las costumbres y man­
damientos cristianos.
2. El adolescente es todo ojos
para ver como se portan los que
ejercen autoridad sobre él. Nin­
guno escapa: padres, profesores,
autoridades académicas, religio­
sas. Luego denuncia las deficien­
cias, i Y con qué expresiones!
A este modo de actuar le mue­
ve su idealismo que cree que las
autoridades no deben tener fa­
llos. Cuando oigamos a los ado­
lescentes denunciar tales defi­
ciencias mejor que negar o an-

A

/

r - .- .
/
V

S

c ■
"Cuando mamá me trata como una
amiga y me hace algunas confidencias,
me siento muy feliz y orgulloso. ¡Cuán­
to me gusta oírle contar lo que hacía
cuando tenía mi edad! Sin embargo
esos momentos siento una especie de
recelo que me obliga a disimular mi
pensamiento: me da miedo que adi­
vine que quiero a un chico."

adolescente de 15 años.)

lgunas

(Una

clones Y lecturas a las que antes
no daba oídos.
Esta crisis en sí no es mala y
además es necesaria, pues gra­
cias a ella, una vez superada, la
religión deja de ser algo im­
puesto Y aceptado pasivamente
Y se convierte en acto personal
—Y 1^0 se debe olvidar que la
fe cristiana exige radicalmente
a todo individuo la Ubre acepta­
ción, de Dios Y de las verdades
por El reveladas.
Pero, aunque no es mala, es
peligrosa para el chico, porque
está expuesto a solucionarla mal.
Aumenta el peligro la tendencia
"Mis padres me corrompen a menudo
del adolescente a no escuchar a
con si he rezado o no he rezado. El
los mayores y actuar por cuenta
domingo al volver de Misa me pre­
propia. De ahí que es una etapa
guntan que ha dicho el cura en el ser­
en la que los padres y educado­
món; de buena gana no iría para que
res han de poner en juego los
no se metieran en lo que no les impor­
recursos psicológicos y pedagó­
ta: ¿Acaso estoy obligado a rezar cuan­
gicos con que cuentan. De ellos
do ellos quieran? Yo rezo cuando me
unos los ofrecen los mismos ado­
apetece y no creo que lo haga mal,
lescentes, otros son de los pa­
aunque muchas veces no sé que de­
dres.
cirle a Dios." (Un dúco de 14 años.)

"Yo tengo suerte con mis padres; son
mis mejores amigos, aunque lo mismo
a mí que a mis siete hermanos nos
exigen mucho y ¡ay de ellos, si no lo
hicieran! ¡Somos siete fieras! Pero no
me importa que me hagan estudiar y
que me exijan, porque ellos nos dan
un ejemplo a todos que nos quitan las
ganas de protestar. Cuando veo rezar
a mi padre me doy cuenta que hay
Dios.”

(Un chico de 15 años.)

— 13

dar con tapujos es preferible, si
son ciertas, admitirlas sin más,
reconocer que existen, incluso
en la Iglesia, en sus hombres, en
sus ministros... Pero también re­
conocer al mismo tiempo que el
Señor querría que no fuera asi
Y de ahí pasar a ver si en nos­
otros, si en él, existe el mismo
fallo Y reflexionar juntos sobre
la manera de evitarlo.
Supongamos que la denuncia
versa sobre la riqueza de las
iglesias/ riquezas que sería me­
jor se distribuYoran entre los po­
bres... ¿Qué decir? Se admite
con ellos que es asi/ se le cuen­
tan casos de obispos sudameri­
canos han repartido todas las
tierras de la Iglesia entre colo­
nos necesitados / se le indica que
es una tendencia de la Iglesia
actual, muY acentuada, hacia la
se va
pobreza evangélica y
realizando tomándose el tiempo
que estas cosas requieren... y se

acaba haciéndole una reflexión
sobre el uso que hace él del di­
nero poco o mucho que recibe
de sus padres, lo que Cristo le
pide que haga con el...
3. El adolescente reconoce y
admira los valores cristianos
cuando los ve encarnados en un
compañero, en un hombre: ad­
mira a los misioneros, admira a
los héroes del cristianismo, már­
tires Y santos.
Los padres, por consiguiente,
destacarán ante sus hijos los va­
lores positivos de la Iglesia, de
la religión cristiana.
Pero, ante todo y sobre todo,
el mejor remedio para las dudas
Y crisis de la fe en los adoles­
centes es ver en su propia casa,
en sus propios padres, el testi­
monio verdadero del cristianis­
mo. IQué pocos chicos superan
la crisis de su fe, cuando en
casa los padres son ejemplo de
vida cristiana I

Por tanto que nos vean a los
padres amarnos, buscar la per­
fección de la vida cristiana conYugal Y familiar/ que nos vean
obedecer a Dios con sinceridad/
que vean que en nosotros no
hay hipocresía, que les manda­
mos una cosa y nosotros hace­
mos lo contrario.

ios padres com­
prenden que la fe incul­
cada a sus hijos es la
parte mejor del patrimo­
nio que les dejan para la vida,
porque es lo que da a ia vida
del hombre sabor de autentici­
dad y esperanza de eternidad.
Por eso mismo, cuando llega la
adolescencia de los hijos, vigi­
larán los síntomas de la crisis de
fe para ayudarles cautamente a
irla superando.

T

odos

N U E V A S D IR E C C IO N E S
Y
C A M B IO D E D IR E C C IO N E N EL B O L E T IN
Rogamos a nuestros lectores tengan presentes las siguientes notas para todo lo que
se refiere a altas y bajas y cambio de dirección en el «Boletín Salesiano».
1.5 DIRUANSE TODAS LAS NOTIFICACIONES DE ALTAS, BAJAS Y CAMBIO DE
DIRECCION A: ADMINISTRACION DE «BOLETIN SALESIANO». Alcalá, 164. MADRID-2.
2.5 Las altas o nuevas direcciones han de estar en la Administración antes del 5 de
cada mes. De lo contrario, su envío ordinariamente no tendrá efecto hasta el segundo mes
después de recibidas.
3.^ Los cambios de dirección, además de atenerse a las notas anteriores, deben soli­
citarse mandando preferiblemente el recorte de la bolsa con que les llega desde Madrid
el «Boletín»/ caso contrario, envíen siempre la dirección antigua y la nueva.
AQUELLOS QUE RECIBEN EL BOLETIN DIRECTAMENTE DESDE UN COLEGIO SALESIANO, EN CASO DE ALTAS O BAJAS O CAMBIOS DE DIRECCION, DIRUANSE EXCLU­
SIVAMENTE A DICHO COLEGIO.
14

VIENA. — Es costumbre
austríaca que, al llegar
las navidades, grupos
de niños, precedidos de
una estrella y vestidos
a lo oriental vayan por
calles y casas cantando
y pidiendo para alguni.
obra buena. £1 grupo
del colegio salesiano
dedicó su entusiasmo a
las misiones.

CALCUTA.—~Las escue­
las profesionales salesianas reciben de Ale­
mania e Italia maquina­
ria para sus talleres.
(Véase más información
en página 2.)

MONCUCCO (Italia).—
El ex rector mayor Don
Renato Ziggiotti cele­
bra misa en el caserío
donde, hace 140 años,
sirvió Juanito Bosco co­
mo peón. En él se ha
colocado un busto de
nuestro Sanio, como re­
cuerdo.



15

RRIMERA;^ EXPEDICION

MU

OPERACION I
En febrero celebramos el DOMISAL o Domingo de las Mi­
siones Salesianas dedicado a sensibilizar nuestros ambientes
hacia las actividades salesianas en las misiones. Queremos
contribuir a él con la narración de una experiencia, única
por ahora en los anales de las misiones salesianas, llevada a
cabo por un grupo de jóvenes italianos en la misión salesiana
de Poxoreu, en Mato Grosso, Brasil. Esperamos en algún Bo­
letín posterior ampliar las noticias que nos han llegado in­
completas.
puede permanecer
indifereníe ante le suer­
te de sus hermanos su­
midos en la miseria, pre­
sas de la ignorancia, víclimas
de la inseguridad... La regla, que
antes regia de ayudar a los ve­
cinos, debe hoy aplicarse a la
totalidad de los necesitados de
todo el mundo.»
Estas palabras de la iPopulorum Progressio» de Pablo VI es­
taban siendo meditadas por un
grupo de jóvenes acampados du­
rante el verano en Val Formazza. Pertenecían al Centro Salesiano de Arese. Se pregunta­
ban cómo podrían ellos llevar a
cabo los deseos, que bullían en
sus corazones, de ayuaar a los
necesitados del mundo cuando
llegó hasta ellos el misionero saIcsiano, P. Molesi, destc.cado en
la misión salesiana de Malo
Grosso (Brasil). .Vonía el misio­
nero derrotado; su campaña en
favor de su misión de Poxoreu se

N

16



a d ie

había extinguido entre la apatía
general. Les habló de su misión,
de la pobreza, de la miseria en
que vivían sus feligreses. Fue
la chispa que provocó el incen­
dio. ¿Por qué no vamos nosotros
a Poxoreu, se dijeron, a prestar
nuestro trabajo? Construiremos
el hospital, la escuela, la igle­
sia y las casitas, que necesitan
aquellos hombres para vivir co­
mo humanos.
Es fácil en un rapto de entu­
siasmo abrazar una idea y más
si es sugestiva y un tanto román­
tica. La lOperación Malo Gros­
so», como la denominaron desde
el primer momento, había co­
menzado. Con ella las enormes
dificultades. Se trataba de hallar
un arquitecto, que hiciera los
planos; de encontrar el dinero
para financiar la empresar cada
casita cien mil pesetas, el hospi­
tal millón y medio, la escuela, la
iglesia y el centro parroquial dos
millones de pesetas y a eso aña-

Cinco de los treinta compon
Pe

BIONERA SALESIANA

SEGLAR

U T O GROSSO

II

entes de la Operación Mato Grosso que ha dado como resultado la gratuita construcción para la misión de
ixoreu, de edificios para viviendas, una escuela, un ambulatorio y una capilla.


17

dir los gastos del viaje de trein­
ta personas.
Pese a todos los cálculos no
cedieron. Si en Italia, se decían,
se gastan setenta mil millones de
pesetas en tabaco, treinta y dos
mil en diversiones y treinta mil
millones en dulces y golosinas,
¿no habrá cinco millones o seis
para una empresa tan humana y
tan cristiana? Y se convirtieron
en misioneros entusiastas de la
idea. Ganaron a fus padres, ami­
gos y parientes, desoyeron a los
que les criticaban, los eternos
criticones, zánganos de toda obra
buena, que ni hacen ni dejan ha­
cer, que les echaban en cara se
íueran a Brasil, cuando tenían a
mano tanta miseria que remediar
en la misma Italia.
Cada uno empezó a solucio­
nar su propio caso: la «Opera­
ción Mato Grosso» se hizo céle­
bre entre los industriales milaneses, a los que acudieron en bus­
ca de fondos, entre los mejores
pintores de Italia a los que pi­
dieron el regalo de un cuadro
que subastar en favor del pobla­
do, que surgiría allá en Poxoreu.
La inteligencia puesta al servi­
cio de unos corazones intrépi­
dos y ganados por la idea con­
siguió el propósito y llevando
consigo los medios necesarios
fueron llegando hasta la lejana
misión en tres etapas sucesivas
treinta jóvenes, entre ellos tres
muchachas, un médico, un es­
tudiante de teología, un sacerdo­
te, varios albañiles, estudiantes
universitarios, un taxista, un co­
merciante, un operador de la
RAI, estudiantes de ingenieros...
Toda la gama de oficios y cla­
ses sociales unidos con un ideal
común: levantar un poblado pa­
ra los indios de Poxoreu.
Antes de partir fueron entre­
vistados por la prensa y la ra­
dio de Milán/ sus respuestas sen­
cillas revelan su convicción y
su entusiasmo.
Uno declaró: «Estoy metido en
la «Operación Mato Grosso» has­
ta el cuello desde hace cuatro
meses. Me gusta muchísimo, por­
que quiero hacer algo por aque­
lla pobre gente: nosotros aquí
estamos bien, aunque nos crea­
mos pobres».
Un tercero: «Soy universita­
18



rio. Estudio Físicas. Tengo nece­
sidad de hacer algo por los po­
bres».
Una muchacha dijo ante los
micrófonos: «Soy enfermera del
Policlínico de Roma. Conocí la
«Operación Mato Grosso» por
medio de amigos.
No he parado hasta conseguir
un sitio en la expedición. Creo
que seré muy útil al lado del
módico, que vendrá con nos­
otros».
Lo bueno era que el médico
faltaba, pero se hallaba presen­
te en la entrevista el doctor Teppati. Este doctor, vuelto a casa,
no se daba paz pensando que él
también debía ir, pero necesita­
ba que otro médico lo sustituye­
ra. Tanto habló, y con tal entu­
siasmo, de su necesidad de ir al
Mato Grosso que en dos días
convirtió a todos sus compañe­
ros a su causa: uno de ellos se
ofreció a sustituirle y los demás
médicos, farmacéuticos y enfer­
meros del Centro le colmaron de
medios y medicinas, que tan úti­
les serían en el punto de des­
tino.
La vanguardia de la Operación
zarpó de Génova el 8 de julio.
Acudió a despedirlos el Rector
Mayor, don Luis Ricceri. Y me­
recía la pena, porque era la pri­
mera expedición misionera salesiana seglar. Quién sabe si es­
tá llamada a tener la misma re­
sonancia y trascendencia que la
primera, que despidió Don Bosco en el mismo puerto hace no­
venta y dos años.
PRIMERAS IMPRESIONES
Los expedicionarios 11 e g a n
bien/ a los pocos días escriben:
«Poxoreu os un pueblecito todo
color, rodeado por una naturale­
za que me gusta muchísimo, pe­
ro también de una miseria que
no podemos ni siquiera imagi­
nar en Italia. El terreno puesto
a nuestra disposición se halla en
posición bellísima a lo largo de
la calle principal».
«La gente es sencilla, hospita­
laria, generosa, querría esconder
una miseria evidente. Nos invi­
ta a entrar en sus chozas de ba­
rre Y madera, nos sonríe, nos

estrecha las manos. Miramos los
niños con el vientre hinchado/
salen de todas parles y vienen a
darnos la mano: rostros bellísi­
mos, ojos negros y límpidos, na­
rices que en su vida han cono­
cido el pañuelo/ todos giran en
derredor respetuosos y diverti­
dos... Impresionan esos vientres:
se ríe y bromea con ellos, pero
sabemos que la subalimentación
los hace morir y nos sentimos
impotentes para ayudarles.»
«Entramos en las casas. No se
las puede uno imaginar. Hay
que verlas hechas de barro y
unos cuantos palos, el techo de
hojas/ en total cuatro metros por
cinco Y dentro de ocho a diez
personas y encima tienen que
pagar alquiler.»
«Pese a tanta pobreza quieren
ofrecernos algo: un cafeciño.»
«Nuestra comida, le escribe
uno a sus padres, consiste en
caza, serpientes, coco, ananás,
alubias y un poco de arroz.»
«Trabajamos a todo gas. Las
obras proceden a buen ritmo
frenados únicamente, porque los
materiales no llegan con la pun­
tualidad debida. Hemos termina­
do también los cimientos de la
escuela con la ayuda de 23 in­
dios xavantes, son muy simpáti­
cos Y buenos/ en seguida he­
mos trabado amistad. Pasamos
unas tardes muy buenas con
ellos/ la primera larde improvi­
saron cantos Y danzas en honor
nuestro, la segunda hemos can­
tado juntos.»
La operación «Mato Grosso» ha
despertado en muchos un inte­
rés por las misiones, que nunca
había conocido. No ha sido úni­
camente los treinta que han ido/
han sido también sus familias,
hospitales, empresas, revistas, la
radio y otras muchas entidades
que con sus oraciones, con su
aportación de medios, con su
propaganda, han removido la
atención en torno a una activi­
dad misionera salesiana, que ha
dejado en un rincón del Brasil
la obra material de un barrio,
una iglesia y unas escuelas, pero
también un ejemplo de amor y
caridad cristiana que aquellas
pobres gentes no olvidarán en
su vida.

ESPIRITUALIDAD DE SAN FRANCISCO DE SALES

PENSAMIENTOS
Por la influencia del sol fructifican los árboles, unos antes que otros; éstos cada
año; aquéllc» cada tres años, y ninguno de ig;ual manera que los otros. ¡Dichosos nos­
otros que podemos estar en la presencia de Dios! Ella, tarde o temprano, dará sus
frutos. (Frag. 178.)
Hay que ver lo que Dios quiere y, convencidos de ello, procurarlo alegremente.
Pero no basta; hay que amar esa voluntad divina y la obligación que do ella se des­
prende, aunque se trate de guardar cerdos toda la vida y de hacer las cosas n\ás des­
preciables del mundo, pues ha de darnos lo mismo que Dios nos ponga en un aliño o
en otro. La meta a la que hemos de acercarnos es la blancura de la perfección y el que
más se le aproxime será quien se lleve mayor premio. (Frag. 166.)
Esforzaos por calar bien el espíritu de este senífmienío; Dios quiere que le sirváis
tal como sois, por medio de prácticas adecuadas a vttestra condición. (Fray. 155.J
Manteneos vencedora de las pequeñas contrariedades cotidianas que sufrís, y cifrando en eso lo mejor de vuestros deseos. Es lo único por ahora que el Señor desea de
vos. No sembréis vuestros deseos en jardín ajeno; limitaos a cultivar bien el vuestro.
No queráis ser distinta de lo que sois, antes procurad seguir siendo Ja que sois; ocupad
en esto él pensamiento y recoged todas las cruces, grandes o pequeñas, que encontréis
por el camino. Este es el lema fundamental y el más difícil en la vida del espíritu.
Cada cual ama a su gusto; pocos son Jos que aman según el deber y gusto del Se­
ñor. ¿De qué sirve levantar castillos en el aire si hay que vivir en la tierra f Tal es
mi vieja enseñanza, que vos habéis oído bien. (Fr. H7.)

Dice Salomón que la criada que pasa en un instante a señora es como un animal
muy insolente. Una repentina conversión seria muy peligrosa para el que ha vivido
mucho tiempo al servicio de sus pasiones y gustos; se volvería orgulloso y vano.
(Fragmento 139.)
Si no fuera porque hay quien acepta plenamente someterse a la voluntad divina,
todos querrían cambiar su condición por la del prójimo: los casados no querrían ser
casados, los solteros no querrían ser solteros. ¿Cuál es la causa de tal inquietud gene­
ral de los espíritus, sino cierta rebeldía a lo que se nos impone y cierta disposición a
pensar que los demás se hallan mejor que nosotros? Los que se hallan en estado febril
nunca encuentran adecuada posición; al cabo de un cuarto de hora de estar en un le­
cho querrían ser cambiados a otro; pero no es cuestión del lecho, sino de la fiebre que
les atormenta en todas partes. (Fr. 138.)
La palabra muerte es espantosa cuando la pronuncia quien viene a deciros: «Vues­
tro padre ha muerto'» o tvuestro hijo ha muerto». Pero eso no es hablar con propie­
dad entre nosotros, cristianos, pues habría que decir: *Vttestro hijo, vuestro padre,
se ha ido a su país y vuestro, pasando por la muerte». No comprendo que podamos

juiciosamente estimar como patria a este mundo donde estamos para tan poco tiempo,
en comparación del cielo, donde estaremos eternamente. (Fr. 129.)
Hará dos años que, estando en Turín mostrando a una gran muchedumbre la sába­
na santa, cayeron \>arias gotas del sudor de mi rostro sobre el mismo santo sudario.
El príncipe cardenal se enojó al ver que mi sudor goteaba sobre el santo lienzo; pero
el corazón me inspiró le dijera que Nuestro Señor no era tan aprensivo, puesto que
no había derramado su sangre y su sudor sino para mezclarlos a los nuestros, a fin de
darles el precio de la vida eterna. (Fr. 58.)

— X'í

20



ESPA:SA SALESIANA

Un salesiano español en Essen-Alemania
«La gran labor del P. Castejón».
Así titula el Diario de los espa­
ñoles en Europa, «La Región» el
trabajo que el P. Carlos Castejón,
salesiano, viene desarrollando en
Essen, entre los emigrantes espa­
ñoles.
Essen es una ciudad industrial
y minera entre las primeras de
Alemania. Por razones de trabajo
han acudido a ella cientos de tra­
bajadores, especialmente familias
asturianas. La gravedad de los
problemas que se les planteaba a
estas familias, en todo terreno,
movió a los obispos alemanes a
solicitar la ayuda de sacerdotes
españoles para al menos resol­
ver los de orden religioso.
Entre los que secundaron la acu­
ciante llamada cuenta el Padre
Castejón, que se instaló en Essen.
Su labor no se redujo a lo mera­
mente religioso: fundó o dio su
aliento vital al Centro Español.
Además de ayudar a los emi­
grantes en sus primeros pasos por
un ambiente extraño en el que el
desconocimiento de la lengua hace
todo más difícil y de atenderles
espiritualmente como si fuera su
párroco, la sensibilidad salesiana
del Padre le hizo advertir la gra­
vísima preocupación de las fami­
lias por el hecho de que cientos de
niños españoles en edad escolar no
podían frecuentar las escuelas ale­
manas por no saber el idioma; y
el inconveniente de que los niños
españoles no aprendieran el ale­
mán, cosa que los condicionaba
notablemente en comparación con
los niños alemanes.
La solución eran unas escuelas
propias para los niños españoles.
El P. Castejón consiguió de los
gerentes de las minas unos loca­
les, en los que instalaron las pri­
meras escuelas. Elsto era en el
año 1961. Elsta solución de emer­
gencia no era del todo satisfacto­
ria, por lo que no paró hasta con­

seguir el Centro Español, que for­
ma parte de la Misión Católica de
la diócesis de Essen. En él fun­
cionan varias aulas, atendidas por
maestros y maestras españolas
convenientemente retribuidos.
Del P. Carlos dice el citado pe­
riódico: «Desde hace muchos años

atiende la colonia española de
Essen y ha desarrollado entre los
niños emigrantes una labor edu­
cativa. callada, tenaz y tan ex­
traordinaria y efectiva que po­
dríamos catalogarla, sin temor al­
guno a duda, como obra única en
la emigración.

PARROQUIA DEDICADA A STO DOMINGO SAVIO
«Vamos a crear entre todos esta
nueva familia, que será nuestra
parroquia». Nuestra parroquia, en
esta ocasión, es la dedicada recien­
temente a Santo Domingo Savio
en una barriada madrileña.
Dentro del plan de creación de
nuevas parroquias, que desconges­
tionaran las superpobladas, y do­
tación de las mismas a los barrios
nuevos de la capital de España,

el arzobispado asignó a los salesianos la de María Auxiliadora,
en Atocha, la de San Francisco
de Sales, en Estrecho y la de San­
to Domingo Savio, en el barrio
de San Blas.
Esta última ha comenzado a
funcionar el 19 de noviembre de
1967. La inauguró con toda solem­
nidad el arzobispo de Madrid,
Mons. Casimiro Morcillo, ante nu-

MADRID.—El arzobispo de Madrid, Mons. Casimiro Morcillo, dicien­
do la misa inaagoral de la nneva parroquia salesiana madrileña
dedicada a Santo Domingo Savio. £l artístico sagrario es ofrenda
de las archicofrades de María Auxiliadora.

- 21

Lü m m i ñ BE OAOBE V IL IE M Jl LOS SJILESIMOS
Le fue impuesta a D. Modesto Sellido. catequista general
de la Congregación Salesiana

El domingo, 19 de noviembre,
Vlllcna vivió un día de adhesión
plena a la Obra Salesiana. Se
cumplía el Cincuentenario de la
venida de los Salcslanos a la Ciu-

dad. Un grupo de Antiguos Alum­
nos y Cooperadores sumaron una
vez más esfuerzos y aunaron in­
fluencias para hacer del final del
mismo un día grande.
Su espíritu emprendedor hizo
realidad la participación de la
TVE, que transmitió en direc­
to, por gentileza del Director Ge­
neral de Radio y Televisión, la so­
lemne Misa Concelebrada. Muchí­
simas cartas nos atestiguaron la
resonancia nacional que tuvo el
acto salesiano.
En el teatro Chapí, rebosante
de público, se procedió a la entre­
ga de la Medalla de Oro de la ciu­
dad a la Congregación. El acto lo
realizó el alcalde en la persona
del Rvdmo. don Modesto Bellido,
del Consejo Superior de la Con­
gregación Salesiana.
Cerró el acto el Inspector de
Enseñanza Media, don Angel De
Benito, representante del Minis­
tro de Educación y Ciencia.

V

n

yiLLENA.—Tres momentos de la celebración del Centenario. El
alcalde impone la medalla de oro de la ciudad a Don Modesto Be­
llido; la presidencia del acto celebrado en el teatro Chapí y las
cámaras de TVE retransmitiendo la Misa, que concelebró el obispo
de Orihuela-Alicante con numerosos sacerdotes salesianos.
22

merosa presencia de fieles, a los
que durante la homilía de la Misa,
sirviéndose del símil del grano de
mostaza, que el Evangelio del do­
mingo le ofrecía, les anunció que
eso mismo acontecía con el gra­
nito de semilla de la nueva pa­
rroquia salesiana.
Acompañaban al Señor Arzobis­
po, el provincial salesiano, D. Emi­
lio Alonso, los párrocos de las fe­
ligresías limítrofes y los párrocos
salesianos de Madrid. El vicario
de la zona leyó al final de la Misa
los nombramientos de los coadju­
tores y del nuevo párroco, Don Mi­
guel Rivilla. El novel equipo pa­
rroquial se ha dirigido ya a sus
fieles y entre otras cosas bonitas
les ha dicho: «Deseamos vivamen­
te que esta parroquia sea para
todos vosotros vuestro propio ho­
gar. Es nuestro anhelo hacer de
ella una comunidad de vida, de
culto y de amor, donde todos nos
sintamos hermanos, nos conozca­
mos, nos queramos y nos ayude­
mos».
Y para que quedara bien rubri­
cado este matiz evangélico han
añadido: «Y si ha de haber pre­
dilectos entre nosotros, estos han
de ser los pobres, los que sufren,
los enfermos y todos los que sien­
tan mayor necesidad de paz y con­
suelo».
La parroquia Santo Domingo
Savio tiene su iglesia y oficinas
instaladas en el edificio de las Es­
cuelas Profesionales Salesianas, en
las que se educan un millar de
jovencitos. En su circunscripción
están enclavados los colegios fe­
meninos de Jesús y María y de
las Hijas de María Auxiliadora.
Existe también el Grupo Escolar
«Francisco Vilatela».
La parroquia reúne en torno un
barrio de construcción muy re­
ciente; la mitad de sus edificios
no existía hace diez años. Esto
indica que los feligreses son toda­
vía algo no conjuntado y, por tan­
to, la labor que aguarda al párro­
co y su equipo de coadjutores con
sus colaboradores seglares: los co­
operadores salesianos, las archicofrades de María Auxiliadora,
Acción Católica, Cursillistas y de­
más, hasta conseguir ese hogar,
a que aspiran, será algo hermoso
y digno de ser vivido.

Para los amigos de Vocaciones Filipinas SAlesianas

EL SEMINARIO SALESIANO
DE FILIPINAS TERMINADO
Ese gran misionero y salesiano que es Don José Carroño recibi«) pocos
días antes de Navidad la noticia que soñaba: El Seminario que estaba
construyendo en Canlubang con las aportaciones que recaudaba en España
y Estados Unidos ha quedado listo para su uso. Con alegría y nostalgia
ha escrito estas líneas para los amigos de VOFISA.
CANLUBANG, Filipinas.—El seminario «Don Bosco» a vista de pájaro.

de enviarme desde Filipinas esta
vista aérea de nuestro «Seminario Don Bos­
co» en Canlubang (Laguna, Filipinas).
Y la misma mano gentil que me la envía añade
piadosamente: «Para su consuelo*.
Y lo fue en verdad. Me ha consolado ver, gracias
a ese objetivo que se asomó desde una avioneta,
cómo han crecido los árboles: los pinos, en las hile­
ras elípticas, muy rápidamente; los cocoteros, más

A

caban

cautos, claro, pero con reciedumbre. Y es que, como
no había por allí árbol alguno cuando yo lleg^Jé en
1962, casi los miro como a hijos. Pero..., digámoslo
todo, aunque sea con tristeza, el que transplanta­
mos a aqueUa hoya profunda que me costó una se­
mana y buenos callos cavarla, se murió de tristeza
a los pocos meses. (Se ve que ni a los árboles ni a
los hombres se nos puede transplantar tan fácilmen­
te a cierta edad.) Pero aún distingo, en frente de
23

la ventana de mi despacho, otro árbol bastante vis­
toso que ocupa la misma hoya que yo cavé, y es
que la piedad de nuestros salesianitos filipinos ha
querido que sobreviviera el recuerdo, igual que la
madre de Lamartine había plantado una yedra en
la casa de la infancia de su hijo, sencillamente por­
que Lamartine la había cantado, aunque en verdad
aquella yedra no había existido nunca más que en
la imaginación y en los versos del poeta: piedad ma­
terna.
Me ha consolado ver ya en pie el ala de poniente
del edificio que hoy alberga el Colegio Mayor de
nuestro Seminario, afiliado a la Universidad, y que
no existía aún cuando salí de Filipinas.
Pero lo que más me ha consolado es lo que no se
ve en la foto: ese centenar de jóvenes seminaristas
salesianos, vestidos de sotana blanca, que, a la hora
en que la avioneta sobrevolaba sus lares (lo deduz­
co de que ni los árboles proyectan sombra alguna, ni
hay todavía chiquillos merodeando por los aledaños,
y eso que en Filipinas se encuentran chiquillos has­
ta en la sopa), debían de estar en oración matinal
dentro de su espaciosa iglesia.
Hay algo más aún que nos consuela, y que no se
puede ver ni siquiera despegando en avioneta: se
necesitan para ello las alturas de la historia: ese
centenar de jóvenes salesianos que en ese Semina­
rio de Canlubang se preparan a conservar el cris­
tianismo en la única nación cristiana del Asia, lle­
van, casi todos, nombres españoles. Precisamente
unos días antes de llegarme la foto había aterrizado
sobre mi mesa su mensaje de felicitaciones navide­
ñas, firmado por todos ellos, y es una gloria desgra­
nar la eufonía de nuestros nombres hispánicos, tan
gallardamente ostentados por nuestra juventud saleslana filipina: Torres, Ferrer, Pifión, Santos, Za­
mora, Laurel, Carmena, Ochoa, Ooampo, Ezpeleta,
Torrijos, Arellano, Solís, Varela, Cabrera, Ledesma,
Reyes..., así hasta sesenta y tantos; los voy leyen­
do conforme me van saltando desde la vistosa tar­
jeta tagala navideña que me los trae. Y es que, aun­
que esos jóvenes apóstoles no tengan, en general,
sangre española en las arterias, se ufanan en pro­
clamar, con la sonoridad de sus apellidos, que el oro
de la Fe y de la civilización cristiana se lo llevaron
allí unos Reyes Magos vestidos de frailes misione­
ros españoles, que arribaban periódicamente con los
alisios en un galeón español que zarpaba de Mé­
jico.
Ni esos árboles, ni esa iglesia, ni esos edificios,
ni esos jóvenes seminaristas estaban allí hace cinco
años. Eso ha sido un verdadero milagro..., y, al me­
nos en parte, también algo de milagro español, pues
la pi'esencia española que ahí se proyecta viene de
la ayuda que nos dieron muchos amigos de aquí por
medio de VOFISA (Vocaciones Filipinas Salesianas).
Don Sosco vio una vez en uno de sus famosos «sue­
ños» cómo el señor Garibaldl se iba un día con su
escopeta a cazar cuervos (léase ccuras»). Cuervo
que veía (léase «curas» otra vez), cuervo que derri­
baba de un perdigonazo. Pero hete aquí que mien­
tras volvía a cargar la escopeta anticlerical, so le
ocurrió echar un vistazo alrededor, tal vez para re­
godearse con el espectáculo de tantos cuervos aba­
tidos. Y... ¡caso extraño!, por el suelo no se veía
yacer cuervo desplumado alguno: lo que se divisaba
era una cantidad de hongos que brotaban del suelo
tomando la forma de sombreros de cura.
Por tierras filipinas se dedicó la masonería en
tiempos bien idos a desalojar sacerdotes: primero la
24

expulsión de centenares de misioneros, al arriarse
la bandera española en el Fuerte de Santiago; lue­
go, la propaganda anticatólica, los Seminarios va­
cíos, la enseñanza laicizada, las iglesias derruidas
en dos guerras y en dos mil penurias... Y, a pesar
de los pesares, la Iglesia en Filipinas está hoy vi­
gorosamente en marcha. Ese Seminario es un indicio
de ello.
Don Bosco llegó a Filipinas escasamente tres lus­
tros hace, pero inmediatamente arremetió con su ta­
rea predilecta: las vocaciones, las magníficas voca­
ciones que brotan en el seno de aquellas magníficas
familias cristianas filipinas. Algo tarde es; pero nun­
ca lo es del todo, y aunque la escasez de clero trae
hoy consigo todavía que unos doscientos mil bebés
filipinos se queden sin bautismo cada año, sin em­
bargo, los numerosos Seminarios para vocaciones
del país, que en el país están surgiendo como hon­
gos, igual que éste nuestro de Canlubang, nos dan
una muestra de la pujanza del árbol del Cristianis­
mo, que hace cuatrocientos años plantaron allí nues­
tros padres.

NOTA IMPORTANTE
tos Cooperadores Salesianos
los lectores del Boletín, que deseen serlo,
residentes en poblaciones donde no hay
Casa Salesiana.
— pueden recibir, si así lo desean, la
HOJA DEL COOOPERADOR
SALESIANO
— que se envía gratis, mensualmente
a quien la solicita.
Contiene pensamientos, sugerencias, en­
cuestas y una conferencia (este año
sobre la FE).
Inscripciones:
Delegado Nacional de Cooperadores
Alcalá. 164
Madrid (2)
CUI.TIVEMOS NUESTRO ESPIRITU
SIEMPRE PODEMOS SER MEJORES

Foto histórica del primer proyecto de la fachada de la
iglesia de María Auxiliadora.

LA VIRGEN
MANDARA
LO N E C E S A R I O
L

verdad, Don Bosco, me parece una lo­
cura.
—Se traía de edificar un templo a la San­
tísima Virgen. Ella proveerá.
—Si se tratase de una capillita, Pero es un tem­
plo.
—He visto los planos y son algo maravillo­
so, pero imposible, dados nuestros recursos eco­
nómicos... Mire, Don Bosco, hoy no podrá salir la
correspondencia, porque no tenemos ni para sellos
de correos.
—Cierto, pero dime, ¿Cuándo hemos empezado
una obra teniendo el dinero?
—¿Qué se le podía responder, si era la pura
verdad?
Al día siguiente el empresario Carlos Buzzetti
iniciaba las obras. Se abrieron las zanjas para los
cimientos. La empresa estaba en marcha, pero na­
turalmente la economía se complicaba cada vez
más.
Se colocó la primera piedra y sobre las manos
del contratista Don Bosco depositó el primer di­
nero. Ante sus ojos atónitos vió brillar ...40 cén­
timos.
La admiración, no reprimida, de Buzzetti me­
recía una explicación.
—No le preocupes, la Virgen mandará lo nece­
sario. ¡Ya lo veréis!
Don Bosco pronunció estas palabras para des­
hacer todas las dudas. Era como un reto a los des­
confiados, que por cierto no eran pocos. Pero él
sabia las matemáticas de Dios. Aquellos cuaren­
ta céntimos le parecían demasiado. La nada o
los ceros, dicho en términos aritméticos, coloca­
dos detrás de ese uno —la Virgen— produci­
rían la maravillosa realidad de una basílica de
mármoles.
Se iban a cumplir los quince días de obras.
Buzzetti pagó los primeros gastos, pero ahora era
necesario pagar los obreros. Y como no había di­
nero en casa, Don Bosco se dispuso a salir. En­
caminó sus pasos hacia la casa de una enferma.
Mientras caminaba repasaba lo sucedido con
ella días antes.
Se trataba de una enferma de gravedad que
llevaba tres meses en cama, con tos, fiebre y do­
lores de estómago. Desahogándose le dijo:
—Si a lo menos pudiera dejar la cama unas
horas durante el día para dar unos pasos por la
habitación.
a

P ro rn to
—¿Qué haría para alcanzar la curación?
—ICualquier cosa!
—Haga la novena de María Auxiliadora.
—¿Qué es eso?
—Rezar durante nueve días: tres padrenues­
tros, avemarias y glorias al Smo. Sacramento y
tres salves a la Santísima Virgen.
—¡Esto es fácil! ¿Algo más?
—Si mejora, prometa hacer una limosna en fa­
vor de la iglesia que se está construyendo en Valdocco.
—Si consigo poder dar unos pasos por la habi­
tación cuente con mi ayuda.
Ahora D. Bosco iba a comprobar si realmente
podía contar con la limosna prometida oara pa­
gar las obras. Al verle la criada le recibió son­
riendo y empezó a hablarle del estado de su se­
ñora, pero antes de que terminara se personó ella
misma, al oír la voz de D. Bosco, para decirle:
—Me encuentro magníficamente. Imagínese ya
he salido dos veces de paseo y he ido a la igle­
sia a dar gracias a la Santísima Virgen. Tenga,
aquí tiene la ayuda prometida para su templo,
es la primera, pero no será la última.
Al llegar al Oratorio miró el dinero que le ha­
bía entogado. Exactamente: 1.000 liras. Ni más
ni menos lo que necesitaba para pagar la prime­
ra quincena.
Don Bosco confiaba en la Virgen, p^ro todos
creían que aquello era una locura, un imposible.
Algunos, muy pocos, se lo dijeron personalmente.
Entre los que se lo dijeron de un modo más grá­
fico había un sacerdote que se atrevió a decir:
—^E1 día que Don Bosco termine la iglesia, yo
me como un perro muerto.
Y se lo comió. Vaya si se lo comió. El mismo
Don Bosco se encargo de que no le faltara. Cier­
tamente el sacerdote no las tenía todas consigo
conforme avanzaban las obras. En mala hora
había prometido...
Pero, por aquello de que lo prometido es deuda,
había que cumplir. No había otro remedio.
Llegó el fin de las obras. Y Don Bosco, que
tenía buena memoria, se acordaba de la prome­
sa. Se reía sin duda del mal rato que estaba pa­
sando el cura desconfiado y obsesionado con
náuseas a carne de perro muerto... Llegada la
hora le mandó un ejemplar bien tapado, pero,
¡cosas de los santos! ... lera de chocolate!
25

Gracias de María íluxiliadora
y de su íípóstoi S. Juan Sosco
Con los síntomas de parálisis

Sevilla.—El día 6 de noviembre de 1967, la niña
Teresa Guerrero Seijo, de trece años de edad,
alumna de 4.3 Curso de Bachillerato sintió un
malestar grande en las piernas que le producía
dolor y casi le imposibilitaba estar de pie. La
Hermana enfermera la mandó a la cama, creyen­
do sería un dolor reumático. Al día sig^iiente,
como viera que la niña tenía gran dlñcultad en
andar, llamó al médico del Colegio, Sr. D. Antonio
Gallardo, el cual, al reconocerla, notó síntomas de
parálisis, aconsejando llamaran a los padres de
la niña. Llegaron éstos a las doce horas de haber
sido avisados.
El doctor Gallardo les aconsejó llamaran al
neurólogo, Sr. D. Víctor Jos, para que le hiciera
un detenido reconocimiento y le pusiera el tra­
tamiento que creyera oportuno. Este médico vino
al Colegio en la noche de ese mismo día 7. Los
dos médicos aconsejeron que la niña no fuera
trasladada a su pueblo (Montellano) sino que
debería quedar en Sevilla, para ser conveniente­
mente seguida por ellos, hasta ver el giro que
tomaba la enfermedad.
La madre de la niña, desde el primer día, re­
zaba con gran fervor y confianza a María Auxi­
liadora, para que curara a su hija. Ella no perdía
de vista la escena evangélica en la que el Señor
dijo al paralítico: «Levántate y anda». La niña
no pedia nada; sólo decía: «Que se cumpla la
voluntad de Dios; si El quiere que yo esté así,
¿para qué voy yo a querer otra cosa?»
Teresa fue visitada todos los días por los mé­
dicos, que no escatimaron esfuerzo ni sacrificio
con tal de detener el curso de la enfermedad y
devolverle la salud perdida. Los primeros días no­
taban que la enfermedad, al menos, no avanzaba,
pero el cuarto día les pareció que avanzaba algo
en extensión. Mientras tanto, la niña recibía car­
tas de sus amigas y se entretenía en contestarlas,
poco a poco, alegrándose mucho de recibir noti­
cias de las niñas y visitas de las Hnas. La madre
se turnaba con su hermana constantemente.
La Hna. Sor Isabel García Berni, le llevó, uno
de los días que la visitó, unas pastillas de la
Virgen traídas de Lourdes y se las dejó encima
de la mesita de noche.
El domingo, día 12. la Hna. Enfermera, antes
de bajar a Misa, le dio un poco de desajmno y la
tuvo que estar sosteniendo, pues ella no se tenía
por si misma. Cuando la tía de la niña regresó
de Misa, sin saber cómo, se fijó en el paquetito
que tenia las pastillas y dijo a la sobrina: «Te­
26

resa, tómate con fe una pastilla de éstas». La
niña, entonces, la cogió y dijo: «Madre mía, si
Tú quieres, cúrame». Todo fue ponerse la pastilla
en la lengua y decir: «¡Ay, tía!, qué mala me
estoy poniendo, qué calor tan grande me está
subiendo por las piernas». Y al minuto siguiente
exclamó: «¡Sí las puedo mover! ¡Levántame, tía,
levántame! Y dice que le entraron unos deseos te­
rribles de levantarse y de salir corriendo. La tía
asustada no quería hacerle caso, pero la niña se
bajó un momento al suelo; sin salir de su asom­
bro vio que la niña andaba por la habitación
y que se puso detrás de ella con una rapidez
asombrosa. La madre de Teresa estaba también
ese día en el Colegio, no presenció el «hecho
milagroso», porque estaba hablando por teléfono
con su marido. Al volver a la enfermería y ver
todo lo ocurrido, salió rápida para comunicar de
nuevo a su esposo la feliz nueva, el milagro de
la Virgen. La madre decía que María Auxiliadora
la había curado y la niña, que la Virgen de Lour­
des; fue una nota cómica que nos divertía en
medio de la fuerte impresión que todas sentimos,
ante la sucedido.
Los médicos quedaron asombrados. El Sr. Jos
le puso un tratamiento disminuyendo las medici­
nas de manera progresiva y le aconsejó se fuera
a su casa para hacer algún descanso, hasta los
primeros días de diciembre. El día 15 se marchó
a su pueblo. Hoy, día 28 de noviembre vuelve a
su Colegio para comenzar mañana, día 29, la
novena de la Inmaculada junto con sus compañe­
ras y para ser ante todas un luminoso testimonio
de todo lo que puede María Santísima, nuestra
Madre, cuando encuentra almas sencillas y llenas
de fe. Sor Marta Luisa Reina, Di)-ectora.
Cadáver viviente

Orense.—Tenía a mi hija enferma y sin saber la
causa real, pues recurrí a muchos médicos y cada
uno daba su opinión, pero ninguna era cierta, ya
que cada vez se encontraba peor, hasta el punto
que un médico la llamó cadáver viviente. Por
último la visitó otro doctor muy afamado, con
tan mala suerte, que al aplicarle su medicación
perdió el conocimiento y aunque pronto lo recu­
peró, tardaba en reaccionar, pues le era imposible
hablar. Por este motivo y ante esta trágica situa­
ción imploré a María Auxiliadora para que no se
muriera y al mismo tiempo iluminara al médico
para que pudiera salvarla.
Al cabo de seis meses estaba completamente

restablecida. Doy infinitas gracias a la Virgen y
cumplo mi promesa de mandar una limosna para
las Obras Salesianas. Invito a todos, especialmen­
te a los más necesitados, que recurran a la San­
tísima Virgen, pues no defrauda a nadie. P. T.
Estaba sumamente grave
San José del Valle.—Doy gracias a nuestra Ma­

dre, María Auxiliadora, por muchísimos favores
recibidos, pero en especial por la curación de mi
hermano. Se encontraba éste recién operado de
apendicitis y surgió a los ocho días una grave
complicación. El especialista nos dijo que no se
explicaba lo que ocurría, pero que era cosa de
suma gravedad y que se debía intervenir urgen­
temente. Puse el caso en manos de María Auxilia­
dora y todo salió bien, con asombro de los mismos
doctores. Hoy se encuentra perfectamente bien.
Muy agradecido envío la limosna que prometí y
cumplo la promesa de que se publique en el Bole­
tín. Animo a todos a confiar en la que es poderoso
Auxilio de los Cristianos. Joaqxdn Pineda.
Trágica prueba
Cádiz.—Hace algún tiempo pasamos por una

prueba terrible al ver que un hermano nuestro sin
saber como, pues era un chico extraordinario, se
vio complicado en un asunto teniendo que ser
conducido a la cárcel hasta que se aclarasen los
hechos. El sufrimiento y la angustia que embar­
gaba a toda la familia era terrible. Sólo la con­
fianza en Dios aliviaba un poco aquella trágica
prueba. Desde el primer instante nos encomenda­
mos con toda nuestra fe a nuestra Madre del
Cielo, María Auxiliadora, poniendo por intercesor
a San Juan Bosco, para que se arreglasen las co­
sas de manera que volviese a casa cuanto antes
este ser querido.
Pasamos varios meses que sólo Dios lo sabe y
máxime cuando veíamos que pasaba el tiempo
y las cosas se complicaban. Sin embargo en medio
de esta tempestad siempre nos quedaba la espe­
ranza de la que todo lo puede. Y así sin desfalle­
cer en nuestras oraciones que eran continuas, y
cuando más sumidos estábamos en el dolor, pues
se acercaban días de acontecimientos familiares
—y esto lo veíamos tan perdido— cual sería nues­
tra sorpresa ante una llamada telefónica anun­
ciándonos que aquel día (precisamente era 24, día
dedicado a la Virgen), llegaría a nuestro hogar
el ser querido. Por este gran favor, que lo consi­
deramos milagroso, llenos de agradecimiento ha­
cia nuestra Madre, envío una limosna para las
Obras Salesianas. Una familia agradecida.

Con peligro de quedarse sin vista

VaZeticia.—Encontrándose una persona de mi
familia aquejada de una grave afección en los
ojos, con peligro de quedarse sin vista, y tenién­
dose que exponer a una delicada operación con
pocas probabilidades de éxito, la encomendamos
con una Novena a María Auxiliadora y todo se
resolvió de la manera más satisfactoria. Hasta la
fecha se encuentra perfectamente. Muy agradeci­
da a tan buena Madre, ruego se publique esto fa­
vor y envío una limosna. Catalina Pantera.
Cayó de un segundo piso

Madrid.—Doy gracias a María Auxiliadora, a
quien siempre he encomendado mis hijos y nietos,
porque me ha escuchado salvando la vida a un
nieto de 2 años, que cayó de un segundo piso,
siete metros. Seguiré invocando a la mejor de las
madres y cumplo mi promesa enviándolo un do­
nativo para su culto. J. López.
¡María Auxiliadora, salva a los Salesianos!
El Guacamayo.—Así gritaban los profesores y
alumnos de El Guacamayo, el 29 de julio, cuando
el terremoto destruía aquel establecimiento.
Allí se hizo patente, de una manera maravillo­
sa, la Bondad de Dios por intercesión de María
Auxiliadora; pues la mayoría de Salesianos esta­
ban dentro del edificio, si así se podía llamar,
cuando vino el terremoto y al intentar salir co­
rriendo fue imposible abrir las puertas. Cada uno
se vio obligado a permanecer en donde estaba y,
abandonado en las manos de la Divina Providen­
cia, esperar el fin. Los profesores y alumnos de
rodillas en el patio, al ver que el edificio se des­
plomaba y nadie salía, gritaban conmovidos: «Ma­
ría Auxiliadora, Salva a los Salesianos». «Llegada
la calma, unos salesianos aparecieron en el suelo,
entre las ruinas, serenos, sintiéndose salvos, sin
heridas; otros fueros descendiendo entre el albo­
rozo de los demás, habiendo quedado sostenidos
milagrosamente en donde se quedaron esperando
el desenlace. Los pisos de los cuartos se hundían,
las paredes se desplomaban, el techo parecía opri­
mirlos, nada se veía por la inmensa nube de polvo
que se levantó mientras la mano de la Divina Pro­
videncia favorecía a aquellos que confiados la in­
vocaban con toda calma. Esto fue lo más curioso:
donde estaba el cuadro de María Auxiliadora, no
se cayó, quedando Intacto los restos de paredes y
puertas.

O t r o s c o r a z o n e s a g r a d e c id o s

Zamora.—Hace años hice la promesa a María
Auxiliadora de publicar en el Boletín un favor
concedido. Consistió en ayudarme a salir de una
larga crisis nerviosa por la que atravesé durante
un año y de la que me encuentro totalmente res­
tablecida. Durante este período de tiempo me
ayudó a salir con felices resultados de una inquie­
tante situación de la que temía malas consecuen­
cias. En agradecimiento a tan excelsa madre.

siempre atenta a nuestra llamada, le envío una
limosna. N. N.
Sevilla .—Habiendo sufrido una delicada inter­
vención quirúrgica y saliendo con bien de ella,
quiero cumplir la prom^a que hice de publicar
en el Boletín Salesiano el favor recibido. Me en­
comendé a María Auxiliadora haciendo la novena
y repitiendo sin interrupción su jaculatoria. María
del Carmen Otero.

~

27

Madrid.—Doy gracias a María Auxiliadora por
un gran favor recibido. Hace poco tiempo mi hijo
hizo un viaje con mucho peligro, cuando supe esto
no dejé de encomendarle a la Santísima Virgen.
Como pasaron días sin tener noticias suyas redo­
blé mis súplicas a nuestra Madre Auxiliadora,
que no se hizo esperar. No habían pasado ni
cinco minutos cuando nos llamaron por teléfono.
Se encontraba bien y contento a mucha distancia.
Envío un donativo y doy gracias por este gran
favor y por otros muchos recibidos en distintas
ocasiones. Celia Caeanova.
Fontanales.—Hacía dos meses que pedía un
favor a la Santísima Virgen Auxiliadora. Hice la
novena y a los dos meses y medio ya me lo había
concedido. Prometí publicarla. Agradecida cumplo
mi promesa y envío una limosna para las obras
salcslanas. Pido siempre que nos ayude en nues­
tras necesidades del alma y del cuerpo y que reine
siempre en nuestro hogar. Familia Delgado.
Alicante.—Inmensamente agradecida por los
muchos favores recibidos de María Auxiliadora,
Don Bosco y Santo Domingo Savio entrego una
limosna para las obras salesianas y desearía pu­
blicarla para animar a todos a confiar en el va­
limiento de estos santos protectores. J. P.
Bellmunt de Ciurana.—Gracias, María Auxilia­
dora y Domingo Savio, porque al acudir a vuestra
protección nació mi cuarta hija, y luego nos salvastéis a la pequeña, cuando ya la dábamos por
perdida. Cumplo mi promesa de publicarlo y os
pido que nunca dejéis de protejernos. Mando lo
prometido para las vocaciones salesianas. A. M.
de Mateu.
Elche.—Estando nuestro hijo muy enfermo,
pues se deshidrató, llamamos al médico que le
puso dos sueros y nos comunicó que le veía bas­
tante mal. Prometió volver a las diez de la noche.
Mi marido y yo apuradísimos acudimos a María
Auxiliadora prometiendo hacer un donativo y pu­
blicarlo en el Boletín Salesiano si no había que
ponerle más suero. El médico lo encontró mucho
mejor y prescindió del mismo. Dando las gracias
a tan excelsa Madre cumplimos nuestra prome­
sa. Joaquín Sempere y Asunción Macia.
Reus.—Soy un devoto de María Auxiliadora y
ful escuchado una vez más por tan buena Madre.
Me concedió un gran favor, muy importante y
decisivo para mí, mediante la novena. En acción
de gracias y en cumplimiento de mi promesa re­
ciba un donativo en favor de las Obras Salesia­
nas. J. M. S.
Córdoba.—Afectado gravemente por una infec­
ción bucal me encomendé a San Juan Bosco y a
María Auxiliadora haciendo una novena. Hallán­
dome bastante mejorado envío la limosna ofi’eclda. Juan Agtistin Martines.
Deusto-Bilbao.—Muy agradecida por una gra­
cia especiallsima recibida de María Auxiliadora
envío una limosna para las Vocaciones Salesia­
nas. Concepción Zamarripa.
Ascoitia. —Era el día de San Juan Bosco y fui
a un especialista. El médico me comunicó que me
quedarla paralítica. Le dije a Don Bosco que él
era mejor médico que el especialista. Pasados
unos dos meses tuve la parálisis. Otra vez invo­
qué a Don Bosco prometiendo publicar la gracia.
Actualmente hago algunas cosas por casa y pue­
do salir para ir a Misa. Mando una limosna como
gratitud a Don Bosco. María Auxiliadora y Do­
mingo Savio. J/aría /turbe.
28

Cádiz.—Después de larga enfermedad los médi­
cos le comunicaron a mi marido que necesitaba
operarse. Le encomendé a María Auxiliadora ha­
ciendo su novena. En tan buena hora la invoqué
que gracias a Dios actualmente se encuentra bien.
Le envío una limosna por este y otros favores re­
cibidos. Anunciación del Bey.
Osorno.—Hacemos patente nuestro agradeci­
miento por los inumerables favores que por me­
diación de nuestra excelsa Madre, María Auxi­
liadora, a diario recibimos, a la vez que pedimos
nos siga dispensando su proteccón. Félix Tovar.
Morón de la Frontera.—Dando gracias a Ma­
ría Auxiliadora por un favor y esperando recibir
otro, envío una limosna para las obras salesia­
nas. A. P.
Alcoy.—Doy gracias a María Auxiliadora por el
feliz resultado de una difícil operación, y por
otros favores concedidos. Mando una limosna para
su culto. Carmen Beltrán.
Ecija.—Me encontraba en vísperas de exami­
narme de un grupo, que me habían suspendido de
reválida, con el riesgo que si me suspendían tenía
que estudiar 5.Q y 6.5 Acudí con confianza a la
Virgen pidiéndole, que me aprobaran la reválida y
me pudieran eximinar de ingreso de Magfisterio.
Ambas gracias me las concedió. Cumplo mi pro­
mesa de publicar la gracia. Af. V.
Sevilla.—Con ocasión del alumbramiento de
nuestra primera nieta encomendamos el caso a
María Auxiliadora prometiendo la publicación y
una limosna. Todo sucedió felizmente y hoy con­
tamos con una preciosa niña por lo que cumpli­
mos gustosos la promesa. Igualmente encomen­
damos a la Virgen el éxito en los exámenes de
Preuniversitario de uno de mis hijos. Ella nos ha
dado la satisfacción de que saliera bien por cuyo
motivo le estamos infinitamente agradecidos. Ella
nunca desampara a quienes acuden a su auxilio
con fe y confianza. A. Martínez y Familia.
Móstoles.—Doy gracias a María Auxiliadora
por el feliz éxito de mi hijo en los exámenes y por
la concesión de una beca. Sagrario López.
Salamanca.—En los exámenes de una hija mía
me encomendé a María Auxiliadora. Todo salió
como deseábamos. Agradecida envío una limosna
y deseo se haga público. M.® Carmen de la Fuente.
— En agradecimiento a numerosos favores re­
cibidos de María Auxiliadora les mando una li­
mosna con destino a sus obras. A. Galofré.
— Le mando una lismosna en acción de gra­
cias por la curación de una enferma. Af. Gisbert.
Barcelona.—Por gracia recibida de María Auxi­
liadora entrego una limosna para las Vocaciones
Salesianas. Una devota.
Alicante.—Por la protección recibida de María
Auxiliadora durante el 1967, envío una limos­
na. J. F. F.
Dan gracias a María Auxiliadora
y a San Juan Bosco y envían una limosna
Dolores Carcereny, Pastora Rifó y una Devota,
de Manlleu; E. Q., de Gerona; Ana Gallego y Ma­
ría Josefa Andreu, de Cádiz; AÍ.S Dolores Rodri­
gues, de Madrid; Benedicta Bayón y José Armenteras, de Barcelona; Petra Rodríguez, de Sala­
manca; J. U. B. y A. S. L., de Córdoba; M. M., de
Salamanca; L. R. C., de Barcelona; Guadalupe
Ferreiro; M.S Auxiliadora Martín, de Zamora.

Favores de STO. DOMINGO SAVIO
Protector de las madres y de las cunas
Lagos.—^Hace tres años esperaba un hijo y mi
hermana, que tenia referencias de este santo me
hizo Uegar un escapulario, para ver si éste llega­
ba a su tiempo. Tengo dos hijos mayorcitos que
llegaron prematuros y aunque viven al principio
estábamos apurados, porque no se veían normales
y además porque el primero murió. Como los an­
teriores el niño que era esperado para Reyes llegó
el cuatro de diciembre. El niño aunque un poco
débil se ha ido criando y está monísimo. Yo diría
que santo Domingo Savio me lo ha salvado por­
que le faltó más tiempo que a los otros, pero no
sólo fue esto, sino que además yo padecía una
diabetis crónica y lo ignoraba. Así que a los tres

o cuatro meses de nacer el niño fui al médico y
entonces comprendí el peligro en que había estado.
Nos salvó a los dos, poi'que yo estaba fatal. Al
principio creía que le debía la vida de mi hijo,
pero ahora estoy convencida que salvó la suya y
la mia. J. Portillo.
GRACIAS DE SANTA MARIA MAZARELLO
Salamanca.—Considero que ha sido oñcacíslma

la intercesión de Sta. María Mnzzarcllo para la
solución de una situación muy complicada, ya que
entraba en juego la voluntad de varias personas.
No sólo se produjeron las graves consecuencias
que se preveían, sino que todo se ha resuelto favorabilísimamente tras un nuevo o inesperado
planteamiento de la situación.
Agradecido a la Santa prometo seguir exten­
diendo su devoción. Afi.uud Herrero, Sacerdote
Salesiano.

G r a c ia s de D oñ a D orotea de C h op itea
C o o p m r a d o r a sm lB a lm n a

Barcelona.—He de agradecer a Doña Dorotea
diversos favores. Hallándose mi madre enferma
y en circunstancias especiales de someterse a una
delicada y peligrosa operación, dado lo avanzado
de su edad. Encomendamos el asunto a Doña Do­
rotea y todo se resolvió sin tener que recurrir a
ello.
Un miembro de mi familia se hallaba en difi­
cultades para encontrar ima colocación. Temía­
mos por su salud, por el natural abatimiento pro­
ducido por tantas tentativas infructuosas, que
podían producirle una terrible enfermedad moral.
Como siempre, acudí a Doña Dorotea prometien­
do una limosna. Y lo que parecía imposible, se
resolvió favorablemente y el asunto se halla en
vías de solución satisfactoria. Agradecida publico
las gracias y envío la limosna prometida. M. A. E.
Barcelona.—Le mando una limosna para la bea­
tificación de Doña Dorotea, pues le pedí la cura­
ción de mis rodillas, que a consecuencia de una
caída habían quedado muy estropeadas. Le pro­
metí que si la cosa no se complicaba, le mandaría
una limosna y haría publicar la gracia, lo que
hago gustosa pues ya me encuentro perfectamen­
te restablecida. Joaquina Mayo.
Madrid.—Tenía grandísimos deseos de que un
niño de mi familia pudiera seguir estudios en un
colegio religioso: pero los medios de que dispo­
níamos no permitían el ingreso en dicho estable­
cimiento. Pero confiando en la intercesión de
Doña Dorotea, se lo pedí con verdadera confianza

de ser oída, y afortunadamente ya se encuentra
el niño estudiando en el ansiado Colegio. Luisa
Sánchez.
Reinosa (Santander).—Distaba muy preocupada
por unas oposiciones que tenía que hacer al Mi­
nisterio, y en vista de las dificultades que se pre­
sentaban, acudí con viva fe a Doña Dorotea su­
plicándole su ayuda y prometiéndole a mi vez una
limosna para la causa de beatificación, y gracias
a ella, conseguí aprobar dichas oposiciones y
agradecida cumplo mi promesa. M.? Ahíohw Gu­
tiérrez.
Bstepona.—^Un sobrinito de once meses no podía
andar por enfermedad en la cadera. Le encomendé
a Doña Dorotea y ofrecí una limosna cuando pu­
diera andar. Actualmente anda muy bien, üíarto
y Pedro José.
Madrid.—Suelo leer todos los Boletines Salesiaanos y, como es natural, la Sección de gracias
y favores, por lo que me decidí a pedir una muy
especial relativa al trabajo de mi esposo por in­
tercesión de Doña Dorotea de Chopitea, que como
madre de familia sabría interpretar mis deseos.
Agradecida por haber escuchado mi petición, hago
presente ésta, enviando una limosna para su cau­
sa de beatificación, con el ruego de que publiquen
dicho favor en el Boletín por haberlo así prome­
tido. Angelita Rojo.
Por favores recibidos de Doña Dorotea envío
una limosna: Una Detjota, de Cádiz; idem, de Te-

Favores de nuestros siervos de Dios y mártires

San Fernando.—Encontrándome en unos exá­
menes que para mí eran muy difíciles y decisivos
invoqué al siervo de Dios D. Felipe Rinaldi que
me ayudara. Agradecido por su ayuda deseo que
lo publiquen para que todos los jóvenes que ten­
gan irnos problemas trascendentales para su vida
no olviden de recurrir al siendo de Dios D. Felipe
RinaldL Velupi.

Barcelona.—Agradecida a D. Felipe Rinaldi por
su protección manifiesta envío una limosna. Ro­
sario Sarrxó.
Salamanca.—Estando mi hija con un gran dolor

de cabeza, que no desaparecía ni con pastillas de
las que resultó hallarse afectada de sinusitis, por
-

29

lo que había que operarla, ya que había complica­
ciones en el tabique y cornetes. Entonces recurrí,
como siempre al Mártir Salesiano Don Julián Ro­
dríguez, pidiéndole librara a mi hija de la opera­
ción de sinusitis, lo que me concedió, ya que si
bien la intervención en lo del tabique y un corne­
te, no fue necesario proceder más adelante y al
presente mi hija se encuentra perfectamente, por
lo que doy públicas gracias al Siervo de Dios y
envío una limosna para su Causa. Baltasara Rodrlffuez.
Salamanca.-- Teniendo urgente necesidad de una
vivienda, ya que mi casa se encontraba en ruinas,
me encomendé al Siervo de Dios D. Julián Rodrí­
guez y en menos en un mes me fue concedida una
vivienda de nueva construcción y muy bien de
renta, en la cual me da todo el día el sol. Envío
una limosna para la Causa rogando publique la
gracia recibida. J. Sánchez.
Dan también gracias al Siervo de Dios y envían
una limosna para su Causa: Teresa Rodríguez,

Angelines Arias, Mari-Tere Martin Ingelmo, Solé
González Varillas, Aurora de Pizarra, Toñita Mén­
dez, Josefa Crego, Caridad Acosfa, Teresa Brufau, Inés González, Domi Ingelmo Varillas.
Picasent (Valencia).—Hace tiempo me salió un

eczema por todo el cuerpo, y tras prolongado tra­
tamiento médico, el mal, no desaparecía. En vista
de ello el doctor me aconsejó cambiar de aires y
me trasladé a Madrid y a otros varios lugares,

sin conseguir mejoría adguna. En vista de ello
me aconsejó sacarme la dentadura por si fuera el
origen del mal. Así lo empecé a hacer; pero el
dentista me aconsejó que no siguiera, porque la
dentadura estaba muy sana y sería una lástima
que me privara de ella. Entonces, agotados todos
los recursos, acudí a mi protector el P. Juan Martorell, mártir salesiano, haciéndole una novena y
prometiendo publicar la gracia. A los pocos días
toda manifestación del mal había desaparecido,
por lo que, agradecida, cumplo mi promesa de
publicar la gracia y envío una limosna para su
causa de beatificación. Teresita M. Albert.
Picasent (Valencia).—Hace días una nietecita
mía debía presentarse a unos exámenes de mucha
importancia para su porvenir, y encomendé el
asunto al P. Juan Martorell, prometiéndole una
limosna si aprobaba mi nieta. Y como sacó sobre­
saliente, muy agradecida cumplo mi promesa. Pe­
pita Silla.
Barcelona.—Para la Causa del mártir salesiano
D. Jaime Ortiz, Sor. M. O., envía una limosna.
Bercelona.—Agradecido a los favores obtenidos
por medio del P. Calasanz, A. Af., envía una
oferta.
-- Por un favor muy especial concedido por el
mártir D. Félix González Tejedor, mando una
limosna para su causa de beatificación. Amalia

Ramírez.

R a g u e m o s p o r n u e s t r o s d ifu n to s

Salesianos difuntos. Falleció el director de la
Casa de Rota, Don Luis Peña y coadjutor
de Medina del Campo, Sr. Alcalde.
Doña Isabel Rodríguez de Andreu En Engue­
ra (Valencia), el día 1 de noviembre, confor­
tada con los santos sacramentos y la bendi­
ción de María Auxiliadora. Durante su vida
fue siempre devotísima propagadora de la
Virgen de Don Bosco, especialmente en Se­
villa, donde vivió los principales años de su
vida. Ella regaló a la imagen sevillana de
María Auxiliadora, los pendientes de oro y
joyas que ostenta.
En los años más difíciles de hambre y ca­
restías, fue proveedora incansable de los
niños internos más necesitados del Colegio
Salesiano de la Stma. Trinidad y siempre se
distinguió por sus finezas con los salesianos,
sintiéndose orgullosa de formar parte de la
Tercera Familia Salesiana.
Don Agustín Fernández Melián el 26 de no­
viembre de 1967, en Las Palmas de Gran Ca­
naria, a los 91 años de edad. Cooperador Sa­
lesiano de primera hora, antes qpie los Sale­
sianos fundaran en esta ciudad, el año 1923
ya Don Agustín formaba parte de los diri­
gentes de la Pía Unión y mantenía frecuentes
relaciones epistolares con nuestros Superiores
de Turín y de la Península. Entregó a los
Salesianos muchas libretas de actas que se
remontan al año 1905 y hasta cartas archi­
vadas por él de Don Miguel Rúa y otros
beneméritos salesianos de entonces.
30



Su vida fue santa, verdaderamente ejemplar,
como correspondía a la familia, a que perte­
necía, de profunda raigambre religiosa. Todos
•los meses un Padre salesiano le asistía admi­
nistrándole los sacramentos de la confesión
y la comunión, que recibió con verdadera
fruicción.
Doña Isabel Pérez Rovira el 24 de noviembre,
En Barcelona, a los 67 años de edad. Gran
devota de María Auxiliadora, fiel en honrarla
en sus novenas y fiestas. De cristiana ejem­
plar vida consideraba una honra y una gra­
cia inestimable del Señor que hubiera esco­
gido para sacerdote uno de sus hijos, el Pa­
dre Juan García.
Doña Isabel María Casanovas, Vda. de Ripoll en Sóller, el 26 de noviembre. Fervo­
rosa cooperadora salesiana, entregó una de
sus hijas Sor Catalina Ripoll, a las Salesíanas.
Su amor a todo lo salesiano destacó de modo
particular en la ayuda a las misiones salesianas con las que cooperó con oraciones, sa­
crificadas y generosas limosnas.
Boguemos también por las cooperadoras di­
funtas: Doña María Escala de Font y Doña
María Casasempere, ambas de San Vicente
deis HortSj Doña María Concepción Alíbés,
Doña María Colomer y el Rvdo. Don José
María Ribas, de Gerona^ y la madre del sa­
lesiano Don Absalón Cuevas.
Por estos y por todos los cooperadores difun­
tos apliquemos sufragios para que el Señor
les conceda el eterno descanso.

^ecas i¡m el sostenimiento
formacidn^eocaciones

_

cEl mejor premio que Dios concede a una familia es un hijo sacerdote.» (Don Sosco.)
BECAS EN FORMACION
INSPECTORIA DE BARCELONA

«Ntra. Sra. de Consolación*. Torrcdonjlmcno. N. e.:
P. Provincia: P.* San Juan Bosco, 74 - BarceIona-17 Beca
5.000 pts. Total: 35.000 pts.
Beca «Baldomcro Pagán». Poxoblanco. Total: 17.500 pts.

BECAS COMPLETAS
Beca «José Basa García». Barcelona-Bocafort. 50.000 pesetas.
Beca «Florencio Sánchez». N. e.: 10.000. Total: S0.()00 pts.
BECAS EN FORMACION
Beca «Nuestra Señora de Montserrat». Total: 60.000 pts.
Beca «Don Juan Antal». Total: 94.000 pts.
Beca «Florencio Sánchez». Total: 20.000 pts.
Beca «Santos Antonio y Sebastián». Total: 10.000 pts.
Beca «José María Valles F^á». Total; 6.000 pts.
Beca «Claudio García». Total: 26.000 pts.

INSPECTORIA DE BILBAO

P. Provincial: Escuelas Salesianas - Deusto-Bilbao
BECAS COMPLETAS
Beca «San Juan Bosco». J. Alvarez. 100.000 pesetas.
Beca «D. Pedro Olivazzo». Total: 30.000 pesetas.
BECAS EN FORMACION
Beca «Mamá Margarita». L. Cañada. Pamplona. N. e.: 250
pesetas. Total: 18.250 pts.
Beca «Restitución-Gratitud». J. G. 10.000 pts.
Beca «San José». J. G. 10.000 pts.
Beca «María Auxiliadora». J. G. 10.000 pts.
Beca «Doña Carmen Aguirre». 5.000 pts.
Beca «Sra. Vda. de Vidaurrázaga». 5.000 pts.
Beca «Familia Imbert». 10.000 pts.
Beca «Virgen del Castillo». El Royo. Total: 9.800 pts.
Beca «M.S de los Angeles Postigo Labrador». Total: 16.000.
Beca «Conchita Diez Noza». Total: 15.000 pts.
Beca «Srtas. Ramona y Josefina de Felipe». T .: 60.000 pts.
Beca «D. Cirilo Sagastagoitia», promovida por los AA. AA.
de Baracaldo. Total: 15.000 pesetas.
Beca «D. José Díaz de Cerio Valle y Petra Gastón Ventosa».
Total: 4.000 ptas.
Beca «Santísima Trinidad». Total: 27.000 ptas.
Beca «Carmina Gutiérrez». Total: 29.000 pts.
Beca «Agustina Alonso». Total: 28.000 pts.
Beca «Piedad Ramos». Total: 28.000 pts.
Beca «Natividad Postigo». Total: 29.000 pts.
Beca «Paquito Gutiérrez». Total: 28.000 pts.
Beca «Rosario Gutiérrez». Total: 29.000 pts.
Beca «Femando y Rufina». Total: 28.000 pts.
Beca perpetua «San Cosme y Sta Magdalena». T .: 75.000 pts.
Beca «María Auxiliadora». 2.* Arch. Baracaldo. T .: 13.000
Beca «F. Canales». Total: 14.000 pts.
Beca «Matilde Pelayo». Pamplona. Total: 5.000 pts.
Beca «D. Ramón Zabalo». Baracaldo. M. Fernández. To­
tal: 25.000 pts.
Beca «María Auxiliadora». Zuazo. Total: 5.500 pts.

INSPECTORIA DE CORDOBA

P. Provincial: Calle Maria Auxiliadora, 14 • Córdoba

BECAS COMPLETAS
Beca «Maria Atixiliadora». Santa Cruz de Tenerife. 100.000
pesetas, fimdada por la Srta. Maria Gracia P. R.
Beca «J. M. Manfredini». Granada. Total: 100.000 pesetas.

Beca «Ntra. Sra. de Luna». Poxoblanco. Total: 40.000 pts.
Beca «Sagrado Corazón de Jesús». Las Palmas. T.: SO.wS.
Beca «Marta Auxiliadora». Málaga. Total: 18.300 pts.
Beca «Familia Ansorena». Total: 19.000 pts.
Beca «M.t Aux.» Familia Gómez Brlasco. Total; 39.000 pts.
Beca «Ntra. Sra. del Carmen». Pozoblanco. Total: 36.000 pts.
Beca «Cias. Juventud Salcsiana». La Orotava. T .: 40.000
Beca «Escuelas Externas». Montllla. Total: 6.000 pts.
Beca «Don Antonio Espinosa». Tenerife. T.: 42.800 ptas.
Beca «Santa Cruz de Tenerife». Tenerife. T.: 32.000 ptas.
Beca «Sto. Domingo Savio». Cías. Tenerife. T.t 21.000 ptas.
Beca «Virgen del Pino». Teror. Total: 47.000 pts.
Beca «Familia Atllio Ley». Las Palmas. Total: 1.500 pts.
Beca «Familia Naranjo». Las Palmas. Total: 2.900 pts.
Beca «Familia Lago». Las Palmas. Total; 4.800 pts.
Beca «Familia E. de Chacón Hdez.» Las Palmas. T. 5.100.
Beca «Familia Torre». Las Palmas. Total: 3.800 pts.
Beca «Familia Feo. León Navarro». Las Palmas. T.: 2.900.
Beca «Familia Lara Padín» Las Palmas. Total; 6.100 pts.
Beca «Sto. Domingo Savio». Cias. Las Palmas. T.: 30.800.
Beca «Juan XXIII». Montilla. Total: 14.350 pts.
Beca «Maria Aux.» Cooperadores. Antequera. T.; 6.600 pts.
Beca «S. Juan Bosco». Lopera (Jaén). Total; 20.000 pts.
Beca «Familia Espejo Gómez». Montllla. Total: 12.000 pts.
Beca «D. Salvador Rosés». Ronda. Total; 99.000 pts.
Beca «Familia Muñoz». Total: 18.000 pts.
Beca «María Atixiliadora». Antonio Royén. Total: 36.200 pts.
Beca perpetua «Troya (Jozálvez». Ubeda. Total: 24.000 pts.
Beca «Familia Franchis». Las Palmas l.S e.: 600 pts.
Beca «Virgen del Pino». Las Palmas l.t e.: 1.000 pts.
Beca «D. Bernardo López Baena». Córdoba. T .: 12.000 pts.
Beca «Pura Bermúdez». Mált^a. Total: 26.000 pts.
Beca «P. Santa Catalina». 2.S Las Pelmas. Total: 1.000 pts.
Beca «N. Rodríguez». Las Palmas. Total: 2.100 pts.
Beca «Familia Vargas». Ronda. Total: 10.000 pts.
Beca «Doña María». Las Palmas. Total; 3.700 pts.
Beca «Manuel Moreno». Las Palmas. Total; l.oÓO pts.
Beca «Mártires de Pozoblanco». Total: 8.726 pts.
Beca «Matrimonio CLM-SC6 ». Málaga. Total: 46.060 pts.

INSPECTORIA DE MADRID - «BESAMA»

P. Provincial: Paseo del General Primo de Rivera, 25
Madrid (5) . Teléf. 227 56 91
participantes

Recordamos a todos los
en BB8AMA las
tres categorías de Becas Completas:
—Beca O R D IN A R IA : SO.OOO pesetas.
—Beca U A Y O R : 100.000
—Beca P E R P E T U A : tOO.OOO pesetas.
Siempre pueden enviar donativos para ir completando
las becas sBSSAMA».

pesetas.

BECAS COMPLETAS
Beca «Don Higinio Arce». Para Coadjutor Saleslano. N. e.:
25.000 pts. Total: 60.000 pts.
Beca «Sánchez Blanco» II. N. e.: 41.000. ToUl: 50.000 pts.
BECAS EN FORMACION
Beca «Besama» III. C. P. del Pulgar. 500. Total: 1.000 pts.
Beca <M. A. L.» N. e.: 2.000 pts. Total: 20.000 pts.
Beca Mayor «Nuestros Mártires». Gral. López de Lettma.
N. e.: 4.000 pts. Total: 71.000 pts.
31

Beca
«Casimiro
Ramiro». A. A. Atocha. N. e.: 2.000 ots
Total:
34.000 pts.
Beca «El Coadjutor Salesiano». Cías. Paloma. N. e.: 5.000
pesetas. Total: 45.000 pts.
Beca
«Ntra.
Sra.pts.
del Carmen y S. Lucas». N. e.: 10.000 pts.
Total:
34.000
Boca
Mayor
«Sta.pts.Teresa y S. Vicente». N. e.; 10.000 pts.
Total:
108.000
Beca «Vda. de Pujadas». N. e.: 2.000 pts. Total: 14.000 pts.
Beca «D.S Mercedes Cruzado». N. e.: 3.000. Total: 18.000 pts.
Beca «Archk'ofradía María Auxiliadora». P.5 Extremadura
N. e.: 2.000 pts. Total: 17.000 pts.
Beca Mayor «V. S.» P.Q Extremadura. Total: 75.000 pts.
Beco «D.8 Dorotea». Madrid-Don Bosco. Total: 21.000 pts.
Beca «Sto. Domiripo Savio». C.9 M.S Aux.-Atocha. T.; 16.000.
Beca «D. Félix González». Familia Pardo. Total: 21.500 pts.
Beca «San Ricardo». Total: 5.000 pts.
Beca «María Auxiliadora» II. Atocha. Total: 34.325 pts.
Beca «B’amllla D. Antonio Miranda, salesiano». T .: 15.000.
Beca «Josefa A. Roldán y Familia». Total: 30.600 pts.
Beca «Familia Mesonero Rodrlgruez». Total: 11.000 pts.
Beca «Padre Esteban». AA. AA. Paloma. Total: 19.305 pts.
Beca «Marta Auxiliadora». Salamanca. Total: 16.300 pts.
Beca «Don Juan». II. Total: 10.000 pts.
Beca
Estanislao».
Total:«S. 30.000
pts. Familia López Alvarez. Salamanca.
Beca «S. Francisco de Sales». Estrecho. Total: 9.645 pts.
Beca «Padre Esteban». AA. AA. Paloma. Total: 9.800 pts.
Beca «Vda. Casanovas». Total: 5.000 pts.
Beca «F. de B.». Béjar. Total: 25.000 pts.
Beca «Centro Juvenil». P.fi Extremadura. Total: 13.600 pts
Beca «Ntra. Sra. de las Angustias». Arévalo». T .: 26.500 pts
Beca «Doña Carmen Olalla». Total: 35.000 pts.
Beca «Manuel Nicolás». Total: 10.000 pts.

INSVECTOUIA DE SEVILLA - «BESASE»

P. Provincial: Calle María Auxiliadora 18 - Sevilla
reléfs. S5 04 86 . 35 01 00
BECAS EN FORMACION
Beca «Corpus Chrlstl*. J. Quintana. Sevilla. N. e.: 100 pe­
setas. Total: 10.130 pts.
Beca
tas. «M.S
Total:Auxiliadora»
5,500 pts. por A. R.. Sevilla. N. e.: 500 pese­
Beca «Mártires Saleslanos de Morón». Morón. l.S e.: 1.816.
Beca «Ntra. Sra. Sgdo. Corazón». Morón. Total: 20.000 pts.
Beca «Stella Maris». Huelva. Total: 28.100 pts.
Beca «Virgen Victoria*. Mérida. Total: 55.500 pts.

Beca «Clemente Quede». Cádiz. Total: 6.775 pts.
Beca «Colegio Salesiano». Sevilla, f-i'i A. R. ’ 000 pts.

INSPECTORIA DE VALENCIA

P. Provincial; Calle de Sagunto, 212 - Valencia

BECAS COMPLETAS
Beca 2.8 «Rvdo. D. Manuel Pérez». P. e.: 1.000 pts.
Beca «D.S Carmen Tortosa Vda. de Vicens». P. e.: 50.000 pts.
Becas Perpetuas «D. Francisco y D.S Pilar», lod sepcpunj
D.S Hilaria y D.S Pilar Romañá. en memoria de sus pa­
dres. Total: 250.000 pesetas.
Beca
«D.S Josefa
tal: 100.000
pts. M.S Canelles Patuel Vda. de Llop». To­
Beca «Santo Domingo Savio» en memoria de Doña Ana Ma­
ría González Llach. Total: 100.000 pts.
Beca «Niño Jesús del Milagro». Total: 30.000 pts.
BECAS EN FORMACION
Beca «María Peire» en memoria de su esposo, p. e. 10.000.
Beca «San Cayetano». Total: 38.000 pts.
Beca «Cooperadores de Valencia». Total: 8.500 pts.
Beca «Azul y Rosa». Total: 27.500 pts.
Beca «Círculo Domingo Savio». l.S e.: 1.500 pts.
Beca perpetua «Juan Manuel», por D.S Carmen Gómez de
Tortosa. Alcoy. 1.8 e.: 50.000 pts.
Beca «Rvdo. D. Mariano Aisa». Burriana. Total: 17.500 pts.
Beca «San Bernardo». Villana. Total; 22.000 pts.
Beca «Nuestra Señora del Pilar». Zaragoza. Total: 43.500 pts.

INSPECTORIA DE ZAMORA

P. Provincial: Universidad Laboral - Zamora

BECAS EN FORMACION
Beca «P. Miguel Salgado». Vigo. S. Matías. T.: 49.150 pts.
Beca «San José». Vigo. S. Matías. Total: 59.000 pts.
Beca «M.S Auxil.» Zamora. Rey Fernando. l.S e.: 10.000 pts.
Beca «María Auxiliadora». Oviedo-Naranco. Total; 17.390.
Beca «D. Pedro Olivazzo». Astudillo. Total: 12.376 pts.
Beca «Domingo Savio». León. Total: 16.665 pts.
Beca «Virgen de Villanueva». Allariz. Total: 21.125 pts.
Beca «Ntra. Sra. de Covadonga». Tudela Veguln. T.: 19.346.
Beca «María Auxiliadora». Allariz. l.S e.: 25.000 pts.
Beca «José Sabaté». Vigo. Total: 31.000 pts.
Beca «Don Emilio Montero*. Orense. Total; 22.800 pts.
Beca «D. José Saburido». Orense. Total: 22.000 pts.
Beca «María Auxiliadora». Celanova. Total; 32.000 pts.

Escuda Gráflca Salesiana; Madrid-Atocha

Fecha
1968.02