BS_1963_09

Ficha

Título
BS_1963_09
Descripción
Boletín Salesiano. Septiembre 1963
extracted text
MEOROLOGIA
DOÑA ROSARIO MARTINEZ RAMIREZ
Un añq escaso hacía que era llamado al cielo el
virtuoso caballero don Emilio López Morillo, pa­
dre de crísüanísima familia, bienhechora salesiana, cuando el ángel del Señor llamó de nuevo a
las puertas de la casa para llevar al Paraíso a su
dignísima esposa, doña Rosario. Creemos que el
Señor los ha llamado a la vida eterna para darles
el merecido premio. Los encomendamos a las ora'
ciones de los Cooperadores y Bienhechores de la
Obra Salesiana.

BOLETIN
SALESIANO

ORGANO DE LA PIA UNION DE
COOPERADORES SALESIANOS
R e v is ta d e la O b r a d e D o n B osco

A Ñ O LXXVM
D. FRANCISCO AROMIR BADOSA
En Tossa de Mar (Barcelona), falleció el Coope­
rador salesianq. don Francisco de Paula Aromir
Badosa. el 29 de junio del corriente, a la edad de
ochenta y cuatro años, habiendo recibido el Diplo­
ma de Cooperador el 31 de enero de 1957. Festi­
vidad de San Juan Bosco, en el Centro que las
Hijas de María Auxiliadora tienen en Tossa de
Mdr. Murió cristianamente, como vivió. R. I. P.

lambién encomendamos a las oraciones de los
lectores del Boí.ktín Salesi.sno las almas de D. Vi­
cente Bclengucr Lerma, fallecido en Valencia y
de D. Francisco Roca Soler, fallecido en Figuoras
durante el pasado mes de junio.

(Vi«ne de la página 32)

Bi’cíí *Vi‘f>en del P ilan. Alicante.- -Total- 10.00
pesetas.
Beca lA A . A A .t. Valencia. San Antonio.—Total
2.050 pts.
Beca de •Cooperadore.s de Valencia*.—Total
2.000 pts.
Beca *San Jorge». Alcoy. -T otal: 20.000 pts.
ñeca *D. José Calasanz*. -Total: 14.025 pts.
Beca *Mosen Chusep». Alcoy.—Total: 14.2(X) pts.
Beca *D. Lim- Berengiier». .Alicante. T .: 19.501'
pesetas.
Beca *AA. A A *. Burriana.—2.050 pts.
Beca *Colegio S. Juan Bosco*. Valencia—6.000 pts.
Beca ^Colegio Salcsiano de Burriana ¡fl*. —Total:
16.000 pesetas.
Beca *0. Francisco Serráis*. Valencia. .San Anto
nio. 5.000 pts.
Beca «£>. Silvcrio Maguiera*. Alicante.—20.000 pts.
Beca *Col. San Antonio*. Valencia.—83.509 pts.
Beca tArchicofradia Maria Auxiliadora*. Valencia
San .Antonio.—Total: 22.500 pesetas.
Beca *Perpetuo Socorro* • Valencia. Bótera.—3.000
pesetas.
Beca *Ntra. Sra. del Pilar*. Zaragoza.—16.565 pts.
Beca *Virgen del Pilar*. .Alicante. Una Coopera
dora salesiana. -Total: 5.000 ptas.

Núm. 9

Septiembre 1963

S U M A R I O
P á gs.

DE ESPECIAL INTERES
P ensemos en el C oncilio ...
P aulo VI y la F amilia salesiana .
A mad la I g l e s i a .............................
D on B osco en B ombay ................
I rradiación cristiana , por Cé­

3
7
11
14

sar Castellino, misionero salesiano ................................... 19
E l P adre de la nariz larga, por
el P. Faroni. misionero salesiano del Japón ................... 22
SECCIONES FIJAS

E spaña salesiana ...........................
C rónica de gracias .......................
B ecas ...................................................
N ecrología ........................................

16
26
30
2

DIRECTOR:

JAVIER RUBIO IBAÑEZ
D irección , R edacción

y

Admón.

Alcalá. 164 - Apartado 9134
MADRID-2
Depósito legal: 3044.—1958
(Con censura eclesiástica.)

N uf.str.a portad.a. — Junio a Bang-kok
se alza Wat Po. célebre por sus monu­
mentos a fíuda y a otros personaies cé­
lebres en ¡a historia de Tailandia. El
curioso estilo tai con que están realizado'^
da a la estampa un aire típico oriental,
difícil de superar. Vea en el interior el
fina! de nuestro reportaje sobre le obra
salesiana junio a la ciudad de las pagodas

« P ensemos

en el C oncilio »

I o s acontecimientos, unos dolorosos cual la pérdida del gran Papa, del buen Juan XXI I l ,
L, otros alegres cual la exaltación al trono pontificio del Cadenal MontinK distrajeron la
atención del groji público del hecho del Concilio.
Bastó, no obstante, la decisión, primera entre las
primeras, del nuevo Sumo Pontífice de proseguir el
Vaticano II para que las actividades de las Comisiones conciliares reemprendieran su delicada labor y
permitieran el anuncio del comienzo de la segunda
época del Concilio para el 29 de septiembre.
El Concilio Vaticano II va, pues, a abrir sus puer­
tas este mes, pero con otro Papa. M il preguntas se
vienen a la punta de la pluma ante esta nueva situa­
ción, que se resume en una: — ¿Qué piensa Pablo V I
del Concilio, del cual ahora por disposición del Es­
píritu Santo va a ser el principal protagonista?
Hasta el momento presente, tal vez por la situa­
ción del mundo, pendiente más de sus vacaciones y
veraneo que de cualquier tema serio, Paulo V ! ha
observado un silencio, que imaginamos fecundo,
pues no tardará mucho en darnos su primera encí­
clica. si es que no guarda para el discurso oficial
inaugural de la segunda etapa mostrarnos su pensa­
miento y las directivas de su Pontificado.
Poseemos, no obstante, las líneas maestras de su
pensar, anticipadas por él mismo hace un año cuan­
do aún era Arzobispo de Milán.
E l ConciliOf la hora d e D ios.
Para S. S. Pablo V I el Concilio es la hora de Dios:
«Es necesario, escribía, que nos preparemos a com­
prender la hora de Dios, esforzándonos en compren­
der el sentido, no sólo histórico y exterior del acon­
tecimiento. sino también el interior, espiritual, hu­
mano y religioso del mismo.»
Para el Papa, el sentido interior del nuevo Concilio
-

3

es que a su lado no estará sólo el episco­
pado. la Jerarquía, sino el pueblo fiel, ma­
tiz éste muy destacado en el presente Con­
cilio: aToda la comunidad de los creyentes
está presente en el Concilio; porque allí se
expresa su fe. allí se tratan sus intereses,
allí se reúnen los Pastores que la guían, la
interpretan y la representan. Si el Concilio
estuviera concebido como una reunión de
eclesiásticos separados del resto de la Igle­
sia, no estaría comprendida su naturaleza
de síntesis de la Iglesia: el sacerdocio es
para tos fieles; porque donde está más mar­
cada la composición sacerdotal de una asam­
blea, ahí está más acentuada la presencia
moral del pueblo cristiano. Así, en el Con­
cilio, toda la Iglesia estará presente porque
no se concibe el Papa ni el Episcopado sin
aquélla.*
C oncilio de re fo rm a s positivas.
Mucho se fantaseó y se pusieron excesi­
vas esperanzas de arreglo y cambios, como
si el Concilio fuera un tcüismán mágído.
Pablo V I pone su toque de moderación:
tCreer que el Concilio pondrá remedio a
la fragilidad humana y que llevará de re­
pente a la perfección en la Iglesia y en el
mundo es un sueño ingenuo. Creer que re­
mediará tantos inconvenientes prácticos y
también muchas imperfecciones teóricas de
la vida católica, como cualquiera puede en­
contrar en su experiencia de miembro o de
observador de la sociedad eclesiástica, es
pretender demasiado.*
Sin embargo, las reformas vendrán, no
todas las que se esperan, ni tampoco en el
sentido que algunos esperaban. L o dijo
Juan X XI I I y lo subraya Pablo VI: aHoy
la Iglesia, siempre por gracia de Dios y por
méritos de tantos cristianos buenos y san­
tos, está más en estado de sufrimiento y
debilidad que en condiciones de escándalo
y decadencia. Más heridas que pecados re­

4 -

gistra el aspecto general y exterior de la
Iglesia católica. Más necesidades que infi­
delidad... Será, por tanto, un Concilio de
reformas positivas, más que punitivas; más
de exhortaaciones que de anatemas.*
¿C oncilio d e u n id a d ?
Es algo palpable que se ha operado en
pocos años, y el Concilio lo precipitó, un
cambio radical en el pensar y hablar del
puebló católico respecto a los ^hermanos
separados*, pero de ello al hecho de la uni­
dad hay mucho camino por andar todavía.
Se han puesto, por algunos, demasiadas es­
peranzas sin contar con las verdaderas di­
ficultades, que son grandes y muchas en va­
rios terrenos. A si lo vió el Papa cuando
dejó escrito: «El próximo Concilio no ten­
drá la suerte de ir más allá que el deseo y
más allá que la preparación para la futura
reconciliación ecuménica de la unidad de la
Iglesia; tendrá, por consiguiente, la misión
de ser el preludio para un futuro Concilio,
que pueda celebrar la fiesta de todos los
cristianos finalmente hermanados en un solo
rebaño con un solo Pastor.*
E l a p o sto la d o seglar.
A las puertas del Concilio ha golpeado
reciamente el apostolado seglar.
No hay sacerdote medianamente clarivi­
dente que no sepa y sienta que sin lo., se­
glares la acción apostólica sacerdotal y je­
rárquica queda limitadísima y que solos, los
sacerdotes y la jerarquía, no llegarán nun­
ca ni a cristianizar el ambiente ni a impedir
el actual y constante deslizamiento del mun­
do cristiano hacia la indiferencia religiosa
y el materialismo.
Se impone la participación activa del taicodo en el apostolado jerárquico y con ella
el señalamiento del papel sobrenatural e
intimo de la colaboración seglar. Y esta va

CIUDAD DEL VATICANO.—Entre los conclavistas que se encerraron en el Va
ticano con los Cardenales que eligieron a Pal>lo VI figuró don Luis Bogliolo, como
secretario del Cardenal Cento. Esto le permitió ser el primer salesiano que feli­
citara al nuevo Papa, momento que recoge la> foto.
a ser una. de las decisiones más trascenden­
tales y de mayor proyección histórica y
apostólica en la historia de la Iglesia.
Los seglares dejarán de ser meros apren­
dices, como hasta el presente; serán eleva­
dos e incorporados a la participación y co­
laboración con el apostolado jerárquico. Su
Santidad Pablo V I le expresó y precisó ma­
gistralmente: <íEl laicado apostólico tendrá
en el Concilio explícito y honorífico reco­
nocimiento. La persona del seglar en ¡a
Iglesia será seguramente exaltada al nivel
que le eleva el Bautismo (incorporándolo a
la vida sobrenatural), y la confirmación (lla­
mándolo a la pública profesión de su fe y
a la perfección cristiana). Los términos del
sacerdocio real del simple seglar serán cla­
rificados luminosamente.*
Y especifica dos formas de vida católica
que serán tratadas especialmente: tSu espi­

ritualidad intensa, viril, apropi da y des­
arrollada en una participación siempre más
íntima y corroborante en los misterios litúr­
gicos de la comunidad cristiana, y su voca­
ción, que será oficial del Concilio en
adelante, a la colaboración con el aposto­
lado jerárquico para que también el seglar
sepa infundir nueva vitalidad moral y reli­
giosa en el cuerpo de los fieles, y para que
sepa dar un testimonio propio de Cristo y
de la Iglesia al mundo moderno.
C onclusión.
Todos estos pensamientos extraídos de
una pastoral dirigida a los fieles milaneses
en marzo del 1962 nos permiten conocer
fielmente el pensamiento del Papa acerca
del Concilio no empezado por él, pero que
por disposición de ¡a Divina Providencia
-

5

tendrá que orientar definitivamente, llevar
adelante hasta concluirlo y sancionar sus
conclusiones.
Enorme tarea la que sobre sus espaldas
ha caído. Como hicimos con Juan XXI I l ,
a quien el mundo entero ayudó con sus ora­
ciones al Espíritu Santo a soportar la car­
pa bajo cuyo peso cayó, ahora todas nuestras
oraciones, nuestros sacrificios han de ir en­
caminados a ayudar a nuestro nuevo Papa,
en cuyas manos Dios ha puesto el futuro del
apostolado seglar al que la familia salesiana
aporta dos grandes cuerpos: la Pía Unión
de Cooperadores y el Movimiento mundial
de los Antiguos Alumnos Salesianos.
Buena ocasión para (fite los Salesianos
encaucen la educación y formación de los
millares de muchachos, que en sus colegios

y escuelas se forman, hacia el apostolado
seglar y redoblen sus atenciones con los
Cooperadores y Antiguos Alumnos Salesia­
nos siguiendo las huellas de nuestro Fun­
dador, Don Bosco, que sintió hondamente
¡a necesidad de que ¡os buenos se pusieran
del lado de la Jerarquía para contrarrestar el
mal y extender el bien.
Y buena ocasión ésta asimismo para que
los Cooperadores y Antiguos Alumnos con.soliden su organización y ofrenden a la
Iglesia cristianos que sean como centros de
irradiación apostólica en sus ambientes por
la concordia entre su fe y su vida, por su
rectitud moral en los negocios y carreras
profanos, dando ocasión con su vida y ejem­
plo a que otros vengan atraídos a la misma
vida cristiana, a Cristo y a su Iglesia.

CAEN {Francia)__Jóvenes horticultores, aUimtios de la Escuela Agrícola Jesús
Ohrero, salesiana, en clase de prácticas. Pueden observarse los hermosos viveros
de plantas y la capacidad de los invernaderos.
6 -

MILAN.—S. S. el Papa ama a los jóvenes y a los niños con ternura especial. De
eso saben mucho los salesianos de Roma que atendieron la Ciudad de los Mucha­
chos y los actuales de Milán, a los que visitaba con frecuencia cariñosamente.
La fotografía presente es un poema: las caras de los niños, la sonrisa del Papa,
su mirada penetrante y, sobre todo, ese dedo tan elocuente que apunta derecho
al monaguillo creando un acercamiento que el niño no podrá olvidar.

PAULO VI
Y LA FAMILIA SALESIANA
“Cor Pauli. cor Christi”. Pablo VI fue
elegido Vicario de Cristo el día que la Igle­
sia honra con una solemne fiesta litúrgica
al Corazón de Jesús. El se ha escogido su
Vicario y le ha entregado su Corazón. El
corazón generoso e intrépido del gran
Apóstol de las Gentes.
Apenas habían pasado dieciocho días de
la muerte del bondadosísimo Juan XXIII.
aún no se habían extinguido las muestras de
dolor por tan enorme pérdida ni el luto pro­
fundo y conmovedor de la Iglesia y del
mundo entero, cuando, he aquí que se cam­

bia en alegría por el anuncio faustísimo:
“habemus Papam Paulum VI”. Una alegría
que ha encontrado, después, su expresión
más universal y solemne en el inolvidable
rito de la coronación la tarde del 30 de junio.
¡Ha muerto el Papa! ¡Viva el Papa!
En este grito popular, que suena rudamente
y de un modo desconcertante, más que una
humana experiencia, es la expresión genuina de una fe robusta. El Papa ng muere,
no puede morir. Se muere el Hombre que
ha tenido la autoridad y el solemne minis­
terio de Pontífice, pero el Papa como insti-

tución divina no muere, porque ha recibido
un mandato perenne, válido mientras exis­
tan almas sobre la faz de la tierra.
Pablo VI ha sustituido a Juan XXIII
como un hijo sucede a un padre; porque
El era verdaderamente como un hijo primo­
génito y amado: el primero, encabezando
la lista de los 23 Cardenales que el “Papa
bueno” creó a los dos meses de su eleva­
ción al Pontificado. La gran virtud religio­
sa, la gran experiencia vaticana, el conoci­
miento pastoral en una insigne Archidiócesis, el conocimiento doctrinal, la inspirada
elocuencia penetradora y convincente, el es­
píritu de caridad, la misma dignidad hierática y humilde de la persona, indicaban en
el Cardenal Montini que era como casi pre­
destinado por su virtud y por su preparación.
La n o tic ia e n la C a s a M a d re .

La expectación por la elección del Sumo
Pontífice fue temerosa y religiosamente viva
aún en la Casa Madre de los Salesianos en
Turín. Cuando en pleno mediodía del 21
de junio la faustísima noticia fue difundida
por la RAI-TV, las campanas de la Basílica
de María Auxiliadora unieron sus notas de
alegría al concierto de las campanas de la
ciudad.
El Rector Mayor envió de seguida el si­
guiente telegrama: “Familia Salesiana, H i­
jas de María Auxiliadora. Cooperadores,
alumnos y ex-Olumnos gozosos entonan
alleluia implorando augidsta bendición .—
Don Ziggiotti.”
Por la tarde, toda la Familia Salesiana se
reunió en el Santuario de María Auxiliado­
ra para cantar un “Te Deum” en acción de
gracias. Estaban presentes los miembros del
Capítulo Superior Salesiano. el Consejo Gencralicio de las Hijas de María Auxiliado­
ra. Salesianos, Hermanas, alumnos...
El Rector Mayor, vivamente emocionado,
presentó la excelsa personalidad del nuevo
Sumo Pontífice, recordando las no pocas
muestras de paternal benevolencia y de es­
tima que el Cardenal Montini, en más de
una ocasión, dió a la Familia de Don Bosco.
8 -

D on B osco e n la f a m ilia M o n tin i.

En el guión biográfico del Cardenal Mon­
tini, que la RAI-TV presentó poco después
del anuncio de la elección de Pablo VI, los
Salesianos pudieron ver con alegría algo que
era como de familia. El film, después de ha­
ber presentado el pueblecito de Concesio
(Brescia), en donde nació el Papa, y haber
proyectado la casa de los Montini, en Bres­
cia, presentó también una serie de cuadros y
fotos de las personas más queridas y de los
recuerdos primeros y más profundos de su
vida: su padre, el doctor Jorge; su madre,
doña Julia AIghisi, una foto de Mons. Mon­
tini con Pío XII, otra siendo Cardenal, con
Juan XXIII. y después una fotografía de
Don Bosco un poco descolorida, pero mi­
rada quizás tantas veces por los familiares
y por el pequeño Juan Bautista. Y al pie
de ella el autógrafo de Don Bosco: “Al fin
de la vida se recoge el fruto de las buenas
obras”.
L a “ C iu d a d d e los m u c h a c h o s " .

Muestras más grandes y más claras de es­
tima y afecto dio Monseñor Montini, cuando
era Sustituto en la Secretaría de Estado,
juntamente con Monseñor Tardini, a los
Hijos de Don Bosco. Era el año 1945, en los
tremendos años de la postguerra. Roma es­
taba sumida en hambre y en infinitas mi­
serias después de los bombardeos, los ra­
cionamientos. las invasiones de los ejércitos:
familias arruinadas y jóvenes que caían so­
bre la ciudad en busca de quién sabe qué
fortuna... Los Salesianos de vía Marsala
MILAN.—Siendo Pablo VI, arzobispo
de Milán desbordó su celo en favor dr
todas las clases sociales y no perdonó
fatiga para sacudir las fibras cristia- *
nos de todos sus fieles. Cuando trató
de movilizar a todos los niños y ado- i
lescentes y jovencitos müaneses pidió ||
a los salesianos de Turin la urna con
el cuerpo de Santo Domingo Savio:
les preparó un recibimiento imponen­
te en la plaza mundialmente famosa
del Dtiomo y señalando al pequeño
gran Santo les dijo: Este es vuestro
modelo, este es vuestro guia.

-

9

iniciaron una obra de socorro y refugio en
favor de los muchachos que vagabundeaban
por las calles. Allí, junto a la estación Termini se encontraban por docenas, en pandi­
lla, de día y de noche, pendencieros, andra­
josos, prontos a todas las truhanerías del
tristísimo ambiente moral en el que se des­
arrollaba su adolescencia. Eran los famosos
“sciuscih” (limpiabotas).
Monseñor Montini tomó a pechos, desde
el principio, aquella iniciativa, que creció
poco a poco hasta transferirla a la periferia,
en Forte Prenestino, donde dio vida a la
“Ciudad de los Muchachos Don Bosco”
Durante todo el tiempo que permaneció en
Roma. Monp. Montini consideró siempre
esta simpática obra en favor de los jóvenes
como su pupila. La visitaba con frecuencia
llevando personalmente a aquellos pobres
los obsequios de Pío XII y los suyos perso­
nales, se entretenía amablemente con ellos,
y cuando tenía que ayudar a algún mucha­
cho en condiciones morales y materiales las­
timosas. lo dirigía a la Ciudad de los Mu­
chachos y se in te re s a b a personalmente
por él.
T r e s g e s to s d e l A rz o b is p o d e M ilá n .

En 1954. Pío XII nombraba a Monseñor
Montini Arzobispo de Milán. Después de su
ingreso, realizado solemnemente en la Epi­
fanía de 1955, fue en el mismo mes a la
Iglesia parroquial y al Instituto Salesiano
anejo tres veces, primero para la visita pas­
toral y luego para la fiesta de Don Bosco.
Las visitas a las diversas Obras Salesianas
de la Archidiócesis se sucedieron luego pun­
tualmente.
Pero no se pueden olvidar tres gestos de
gran afecto y confianza del Cardenal Mon­
tini con respecto a los Salesianos de Milán;
1) Les confió el Reformatorio de Arese,
hoy llamado “Centro Santo Domingo Savio“. ¡Cuántas atenciones y solicitudes ha­
cia aquellos jóvenes desheredados y qué
paternales ánimos dados a los educadores
metidos en una obra tan difícil!
2) Tuvo en Milán la urna con el cuerpo
de Santo Domingo Savio en abril de 1955.
para mostrarle a la juventud milanesa un
modelo y un protector. Salió al encuentro
10 -

del Muchacho Santo a las puertas de la ca­
tedral y cantó sus glorias en el gran templo
ante millares de jóvenes.
3)
Confió a los Salesianos la nueva pa­
rroquia que se iba a levantar en honor de
Santo Domingo Savio, en Via Rovigo, junto
a la residencia obrera ya en construcción.
C e n te n a r io d e l a C o n g re g a c ió n .

Otra magnífiiea muestra de afecto dio a
los Hijos de Don Bosco cuando se celebró
el “centenario” de las Obras Salesianas en
1960, en la Universidad Católica. El estuvo
presente y manifestó su gratitud a los Sale­
sianos que trabajan en su Archidiócesis.
mostrando el doble testimonio dado al mun­
do por Don Bosoo: el primero que “la
Iglesia, que parecía haber agotado su capa­
cidad instructiva, mediante este milagro de
la Sociedad Salesiana se torna maestra de
inmensas multitudes juveniles”, la segunda
vez que “este fenómeno se ha dirigido pre­
ferentemente a la clase obrera, a los hijos
del pueblo, dando al mundo la lección de
que la Iglesia es Madre”.
Y aún más todavía. Todos los años de
su permanencia en Milán el Cardenal Mon­
tini, no obstante sus trabajos, no faltó nunca
a su compromiso con Don Bosco el 31 de
enero de cada año.
Su presencia en la Casa de Don Bosco y
de las Hijas de María Auxiliadora, ya tra­
dicional. era recordada por los asistentes,
jóvenes y no jóvenes, debido a sus atrayentes
sermones, adaptados a las circunstancias,
ricos de sabiduría humana y divina, llenos de
afectos hacia la juventud y movidos por su
gratitud y amor hacia Don Bosco.
Mientras el mundo entero se alegra en
torno al nuevo Pontífice de la Iglesia, la
humilde Familia de Don Bosco renueva a
Su Santidad los sentimientos de filial y ab­
soluta adhesión a sus directivas y se une a
las oraciones de todos los cristianos para
que sus deseos y sus proyectos lleguen a ser
una consoladora realidad. Los proyectos y
deseos de Pablo VI están encerrados en cua­
tro breves palabras en su discurso de la Co­
ronación; “Con la ayuda de Dios, tendre­
mos corazón para todos”. El corazón de
Pablo VI es el Corazón de Cristo.

«Amad la Iglesia»
El 31 de enero del presente año, el Cardenal ^4onIini.
hoy su Santidad Pablo VI, celebró ¡a misa en la parroquia
salesiana de San Agustín, en Milán. Durante la misma pro­
nunció un discurso cuyo argumento es una admirable ilus­
tración del tema, propuesto a los Cooperadores sales'anos
para su estudio y meditación en la campaña de ¡963:
Vivir la Iglesia. Hoy que el autor de estas líneas ha llegado
a ser Cabeza de la Iglesia, sus palabras constituyen para
la triple familia salesiana un toque de atención elocuente
al amor y adhesión filiales a ¡a Iglesia y al Papa que Don
Bosco nos dejó cual preciosa herencia.

La Iglesia somos nosotros; nosotros so­
El entonces Cardenal Moníini empezaba
su alocución manifestando su satisfacción mos Jesucristo; nosotros somos cristianos:
de celebrar la fiesta de Don Bosco en medio si somos cristianos de verdad somos una re­
de los jóvenes del Colegio Salesiano. Y re­ producción vital, en cierta manera, de Nues­
cordó el significativo episodio del óbolo d 2 tro Señor, somos su Cuerpo, el Cuerpo mís­
las 33 liras recogidas por el Santo y envia­ tico de Cristo. Y por consiguiente tenemos
das a Pío IX desterrado en Gaeta. “Aquel ante nosotros esta inmensa sociedad que se
episodio, dijo, caracteriza todo el resto de llama “católica”.
¿Qué quiere decir católica? Quiere decir
su vida y da a la obra de Don Bosco una
nota especial que me parece sería el tema universal, quiere decir esparcida por toda
del sermón, del bellísimo sermón, que Don la tierra. Tenemos delante la sociedad más
grande que existe en la historia del mundo
Bosco os diría si estuviese aquí. Os diría;
porque quiere llegar a todos los confines de
“Jóvenes, amad la Iglesia”.
En 1870, cuando se celebró en Roma el la tierra, a todos los hombres. Tenemos
Concilio Vaticano I, Don
Bosco estuvo al lado del
Papa, se metió entre los Pa­
dres Conciliares para tratar
de las grandes cosas y de los
problemas que entonces pre­
ocupaban. Ahora Don Bos­
co tornaría a deciros la mis­
ma cosa que dijo tantas y
tantas veces a sus alumnos,
esto es, que hay que amar la
Iglesia”.
¿Sabéis qué es la Iglesia?
¿La conocéis? ¿Sabríais dar­
me su definición? ¿Tenéis
su concepto? ¿Sabéis que la
Iglesia es la derivación de
Jesucristo, su continuación
en el tiempo y que su dilata­
MILAN.—El actual Papa se entretiene afablemente con una
ción por toda la faz de la cooperadora salesiana, insigne bienhechora del Centro de
Readavtación salesiano de Arese.
tierra es Jesucristo viviente?
-

M

ante nosotros esta sociedad que podríamos
Jlamar la humanidad, la humanidad redimi­
da. la humanidad bendita: la humanidad
en vías de salvación. la humanidad que vive
del espíritu de Cristo, animada por su gra­
cia. de su savia, que pasa a través de las
venas de la humanidad; pues bien, este
Cuerpo, esta sociedad es la Iglesia.
Yo os digo en nombre de Don Bosco:
Hijos queridísimos, amad la Iglesia. Acaso
vosotros notéis en mi recomendación como
un eco de un poco de tristeza; mi voz se
torna un tanto triste cuando recomiendo es­
pecialmente a niños, a estudiantes, a jóve­
nes, a aprendices y a muchachos como vos­
otros el amor a la Iglesia. Es porque en el
mundo hay muy poco amor a la Iglesia, y
lo que es más triste, hay poco de este amor
en los países cristianos, incluso en nuestra
Italia, que debería ser católica por defini­
ción, por historia, por misión, por destino,
por su gloria.
¿Encontráis vosotros el amor a la Iglesia
fuera de esta aula, de este ambiente que se
llama “iglesia”, quiero decir, fuera de este
campo de educación católica en el que vos­
otros tenéis la fortuna de vivir?
G en ia lid a d y m o d e rn id a d
d e D on Bosco.

Entre las cosas grandes, entre las cosas,
diría, originales, entre las cosas estupendas
que nosotros encontramos en la vida de
Don Bosco, encontramos ésta; él ha resuel­
to anticipadamente una de las objeciones, de
las dificultades más extrañas, más graves, y
quizás también más ridiculas, que atormen­
tan el alma del pueblo italiano: concordó
la italianidad con la catolicidad e hizo ver
cómo se puede ser buenos ciudadanos y
buenos católicos, aún antes que existiese el
concordato, es decir, la paz entre la Iglesia
y el Estado, entre nuestra nación, constitui­
da en estado independiente y libre y la
Santa Iglesia Católica; entre nuestra alma
de creyentes y de fieles de Cristo y nuestro
espíritu de fieles ciudadanos y de buenos ita­
lianos,
Don Bosco comprendió también esto, que
llamaría casi milagro. Tuvo la previsión de
comprender, de poner en práctica la paz que
debe existir entre el alma de un católico y
el alma de un ciudadano.
12

-

El la vivió siempre y es una de las ca­
racterísticas que notamos en todos sus Ora­
torios, en sus obras, en Italia y en el extran­
jero: la lealtad de quien se profesa ciuda­
dano de esta otra Sociedad, que está un
poco en la tierra y un poco en el cielo, que
se llama Iglesia.
N o u n tra b a jo reb eld e.

Encontraréis en tres campos, hijos míos,
las dificultades para allimentar y profesar
esta paz. La encontraréis en el campo del
trabajo, ahora, hoy, incluso en esta nuestra
ciudad de Milán, porque el trabajo ha es­
tado casi siempre matizado por un instinto
de rebelión, de anticlericalismo, es fácil en
expresiones, incluso blasfemas, y lleva en
sí algo de inquieto y de rebeldía a la profe­
sión cristiana.
Acordaos de Don Bosco que os dic«: “no,
no, el trabajo debe ser santificado, el traba­
jo puede ser cristiano, la Iglesia ama a aque­
llos que se fatigan y sudan', a los que son
menos ricos y menos libres, a los que están
en nuestras oficinas y en nuestros campos.
Es una equivocación, es un acto, diría, de
falta de inteligencia, no ver cómo la Iglesia
es la Iglesia de los pobres, la Iglesia de los
trabajadores, la Iglesia de los que se fatigan,
la Iglesia de aquellos que tienen el deseo de
ganarse el santo pan del que todos los días
y a cada momento hace argumento la ora­
ción “el pan nuestro de cada día dánosle
hoy”.
Establecer enemistad entre el trabajo y la
Iglesia, es decir, entre el trabajo y la Reli­
gión, es una necedad que no tiene funda­
mento. Y no creáis tanto a mis palabras
cuanto a la afirmación, a la garantía que de
esto os da vuestro Maestro y Padre San
Juan Bosco. Si miráis a él, todo anticlmcalismo, toda inquietud, toda duda sobre
este pimto cae, y entrará muy dentro de
vuestro corazón la certeza de que la Iglesia
trabaja por colocar al trabajador a una gran
altura, a una dignidad no sólo humana sino
cristiana, que es bastante más grande y más
completa.
N o una c u ltu ra sin fe.

Encontraréis el obstáculo de la oposición
a la Iglesia en el campo de la cultura. Bajo
este nombre se intenta a veces esconder.

como contrabando, las blas­
femias y los sentimientos más
bajos desencadenados contra
la Iglesia, contra Cristo, con­
tra aquellos que le siguen
siendo fieles.
Desconfiad, hijos míos,
desconfiad de la oposición
que tantas escuelas, tantos
maestros, tantos libros quie­
ren poner entre la fe y la
ciencia, entre la profesión
cristiana y la cultura, entre
la escuela y la Iglesia, entre
el libro de ciencia y el libro
de Catecismo. Son oposicio­
nes falsas.
Don Bosco nos ensena, por MILAN.—Desde el 1955 al 1963 el Papa no dejó de acudir
puntualmente al Colegio Salesiano de Milán para celebrar
el contrario, que para estu­ el 31 de enero la fiesta de San Juan Bosco. Toda la familia
diar bien es necesario que salesiana de Milán se daba cita para aclamar a su Pastor,
esté colocada sobre la mesa quien nunca les negó las pruebas de sus mejores simpatías.
la lámpara de la Luz divina,
de la Revelación, de la Fe en la palabra de ternidad entre los hombres, y, por tanto,
Dios, bajada del cielo, que viene a iluminar, Jesucristo ha sido el primero que la ha en­
para hacer gustar, comprender y hacer útil señado y nos garantiza que la hermandad
la vida.
no es una lucha continua y desencadenada
La Fe es una luz que se lleva en la vida, entre ciudadanos y ciudadanos, ni una lu­
no un obstáculo. Y si queremos, realmente, cha de clases, ni una lucha de hijos de la
ennoblecer nuestro estudio, la búsqueda de misma tierra y de la misma cultura. Debe­
las verdades que el Señor ha diseminado en mos ser ciudadanos que se aman entre sí.
el Universo en el que vivimos, debemos re­ que se comprenden, que se ayudan, que
zar, debemos pedir a Cristo la última pala­ colaboran, que buscan la justicia, que bus­
bra y debemos saber que Cristo no en vano can la libertad común; y todo esto lo en­
se ha llamado el Unico Maestro del Mun­ seña por encima de todos y con palabra
do, porque sólo en El se pueden aprender penetrante e infalible Nuestro Señor Jesucris­
verdaderamente los secretos y los destinos to. quiero decir, nos enseña nuestra fe de
quien la Iglesia es Madre y Maestra.
de nuestra vida.
Este tema que encontraréis a lo largo de
No una so c ie d a d laica.
la vida y que es tan grave, tan grande y
siempre tan fecundo de consideraciones y
Encontraréis también la oposición en un aún de dificultades, ha sido tratado para
cierto contraste real en la vida civil. Son vosotros por San Juan Bosco, Maestro y
oposiciones necias, porque crean dificulta­ Educador, el cual enseñó a todos a encon­
des inútiles, atormentan nuestra vida so­ trar la concordia. la colaboración y la paz.
cial, dividiendo en manera casi irreduc­
Es esta una de las cosas más hermosas
tible.
que Don Bosco hizo y enseñó para educa­
Cristo nos enseña el orden, aún social, ción de nuestra nación y del mundo entero;
de este mundo. Nos enseña el por qué y el y es una de las cosas más hermosas que nos
cómo debemos obedecer y nos enseña que introduce en el espíritu del Concilio, y pone
debemos vivir como ciudadanos libres, ami­ en nuestro corazón una comprensión, una
gos, democráticos si queréis, ya que la de­ exaltación, un amor nuevo a la Santa Igle­
mocracia verdadera no es más que la fra­ sia de Dios.
-

13

NOTICIARIO SALESIANO MUNDIAL

Da*i Badea e»i Hamíay.
Los Salesianos tienen en Bombay. en el
barrio de Matunga, una Obra estupenda. Es
un grande edificio, el Khalsa College, o Co­
legio universitario do los Shlkh. En la mitad
del edificio se levanta una iglesia, desde cuya
torre reina María Auxiliadora. No hace mu­
chos años el solar ocupado por el College
era una laguna pantanosa y malsana. Hoy
es uno de los barrios más hermosos de Bom­
bay, y la Don Bosco Hihg School, con sus
tres mil alumnos, es la más renombrada de
toda la zona.
Los Salesianos se establecieron en Bombay
en 1928 tras la invitación del «Patronato
Portugués*, que entonces tenia jurisdicción
personal sobre todos los goaneses católicos,
muy numerosos en la diócesis de Bombay.
Su llegada pasó Inadvertida. Peor aún, fue
causa de un malentendldOi porque precisa­
mente por aquellos dias el «Patronato Por­
tugués» cesó y los Salesia
nos se hallaron en Bom­
bay sin una base jurídica.
Suerte que por aquellos
días el Arzobispo de la ciu­
dad. Mons. Lima, a la sa­
zón en Roma, que había
conocido a los Salesianos
en Portugal, se apresuró a
darles su permiso con una
amplia bendición.
Como tantas veces...
...María Auxiliadora les
había precedido. Es una de
las tantas floréenlas, bro­
tadas en todos los caminos
del mundo y que sólo espe­
ran una mano que las re
coja para formar con ella.«:
un buen volumen. La cosa
sucedió así. Algunos meses
antes de la llegada de los
Salesianos a Bombay. el
Director de una de las es­
cuelas de la ciudad escri­
bió al Prefecto católico del
Assam, Mons. Luis Mathlas, pidiéndole una ima­
gen de María Auxiliadora
para ponerla en un estan­
darte. Recibió varias, en­
tre ellas una estampada
14 --

sobre tela a propósito para el estandarte.
El Director se lo agradeció mucho, pero es ­
cribió a Mons. Mathias anunciándole que
la imagen estampada en tela la devolvía
por ser demasiado grande. Se le contestó
que la retuvier.a pues pasaría un Salesiano
a recogerla. Efectivamente, poco después el
Padre Hauber, primer Director que fue de
Bombay, pasaba a retirar la preciosa ima­
gen de la Madre y la exponía, jubiloso, en
un amplio salón de la Escuela de la Inmacu­
lada, confiada a los Salesianos.
Mas habían de pasar diez años más para
que los hijos de Don Bosco pudieran asen­
tarse en una zona más amplia e iniciar una
expansión que tiene 'caracteres de prodi
glosa.
El joven Director, don Aurelio Maschio,
abrigaba planes muy parecidos a los que
Don Bosco había tenido un siglo antes en
los prados de Valdocco.
Previendo que la ciudad
se extendía cada vez más
hacia el interior de la isla,
compró 60.000 metros de
terreno en Matunga. De
todo ese terreno sólo una
faja a lo largo de la calle
era buena para poder edlcar. El resto era una In­
mensa laguna, paraíso de
ranas y mosquitos. No ha­
bía más remedio que redi­
mir aquel terreno, pero ello
suponía un esfuerzo de ci­
clopes, cosa en verdad su­
perior a las fuerzas y a los
medios de los pobres Sale­
sianos. Pero la Divina Pro­
videncia tiene sus caminos,
que no siempre son lo«
nuestros. Esta vez se sir­
vió de dos barcos cargados
de explosivos, que un mal
día saltaron por el aire en
el puerto de Bombay de
ASSAM.—Las inundaciones to ­ rrumbando varios edificios
rrenciales del pasado año han adyacentes. Nos hallába­
producido una gran carestía; mos en plena guerra.
Y ahora otra florecilla
centenares de hombres acuden
a la misión salesiana en busca salesiana. El P. Maschio,
de alimentos, como este sacer­ italiano, se presenta con
toda sencillez a las autorldote de Bhrama.

mármoles preciosos y raros, se han dado
cita en él. Domina el ónice. Es una verda­
dera joya por su riqueza y arte.
El Padre Aurelio, que se halla desde hace
treinta años en Bombay, es el alma de esta
colosal obra. Cuando se le pregunta cómo
construyó tal preciosidad se encoge de hom­
bros y dice: «Ni yo mismo lo sé. Sólo sé que
la Santísima Virgen se construyó su morada
y la quiso artística y atractiva. Por otra
parte. Ella ya le había mostrado a Don Bosco
una zona luminosa que desde el centro de
Africa llegaba a Pekin, pasando precisa­
mente por Bombay».
Es increíble cómo ha cundido la devo­
ción a María Auxiliadora, conocida aquí por
la Virgen de Don Bosco. Los sábados y do­
mingos acuden numerosos devotos a escu­
char la Misa y frecuentar los sacramentos:
se calculan en unos diez mil.
La cripta es asimismo bellísima. Tiene
cinco altares de mármoles preciosos y
diez grandes mosaicos con escenas evangé­
licas.
Posee numerosas reliquias ordenadas be­
Un trono para la «maharaní»
llamente en sus correspondientes relicarios
a lo largo de las paredes.
La verdadera joya de la Escuela Superior
Los alumnos internos, en su mayoría ca­
de Don Bosco es el santua­
tólicos, tienen sus funcio­
rio de María Auxiliadora.
nes religiosas en la cripta,
El arquitecto que la cons­
pues la iglesia se reserva
truyó dijo: «Una iglesia
para los peregrinos y pe
regrinaciones, que son mu­
como ésta no se la encuen­
chas, llegando desde muy
tra fácilmente ni en Orien­
lejos a veces.
te ni en Occidente». La
Cuando el próximo año
afirmación pareció exage­
se celebre en Bombay el
rada. La fachada princi­
Congreso Eucarístico in­
pal. a excepción del gran
ternacional, la iglesia de
mosaico, no es gran cosa.
María
Auxiliadora será es­
Da la i mpresión de una
cenario de varios actos y
mezquita. Pero después de
atraerá grandes masas de
visitarla por dentro hay
congresistas.
que dar la razón- al arqui­
Para entonces estará
tecto en gran parte. Las
también terminada otra
paredes están revestidas
gran obra, por la que el
de mármol. Las estaciones
Cardenal Gracias, Arzo­
del Vía Crucis son de mo­
bispo de Bombay, siente
saico, muy artísticas y d e­
gran predilección: las E s­
votas. Las vidrieras, de co­
c u e l a s Profesionales de
lores, con motivos salesiaKurla, zona industrial, si­
nos, dan al sagrado edificio
tuada a dos o tres kilóme­
un ambiente sereno y ale­
tros de Matunga. Con ellas
gre. El altar central ha TARLAC (Filipinas). — Los e x ­ Don Bosco dará a la In­
sido construido con gran ploradores de la Academia Don dia técnicos y obreros cua­
arte y mucho amor. Es el Bosco aprovechan las manifes­ lificados, con lo que con­
de la «maharaní». o sea, el taciones patrióticas para desfi­ tribuirá indudablemente al
de María Auxiliadora, la lar gallardamente con sus ban­ progreso material de esta
gran reina, la gloriosa Vir­ deras y estandartes por las ca­ nación, que necesita de
todo.
gen de Don Bosco. Los
lles de la ciudad.
dades militares inglesas y les pide permiso
para llevarse todo el material derribado y
rellenar el pantano. Y además a costa del
ejército Inglés. La petición parecía absurda
y, sin embargo, la aceptaron. Desde el puerto
a Matunga hay diez o doce kilómetros. A las
autoridades les interesaba muchísimo dejar
pronto libre el puerto de todo- obstáculo. Del
descombro y acarreo hasta nuestra casa fue­
ron encargados los numerosos prisioneros
italianos retenidos en la India. En cuestión
de pocas semanas cuarenta mil camiories de
tierra y cascotes cambiaron completamente
la faz del barrio. Nuestro terreno se convir­
tió en un inmenso patio con numerosos
campos de juego. Aún hoy continúa siendo
el más vasto de toda laciudad, y tres mil
alumnos juegan en ellos a sus anchas. En
los campeonatos escolares, organizados con
cierta profusión, los muchachos de la Don
Bosco Hihg School acaparan copas y trofeos.
Pero no está en los triunfos deportivos la
base de la fama del Colegio, sino en la se­
riedad de los estudios y en la disciplina amo­
rosa. Las familias se disputan las plazas.

-

)5

ESPAÑA SALESIANA
Coronas de plata para
María Auxiliadora en Córdoba
Al celebrarse las bodas de oro de la Aso­
ciación de Antiguos Alumnos Salesianos de
la capital cordobesa brotó la idea de coro-

pasar Don Modesto Bellido, del Capítulo
Superior, por Córdoba, tuvo la satisfacción
de colocar sobre las sienes de María el ob­
sequio de sus hijos.
Ello dio ocasión a una hermosa fiesta en
la que se desbordó el amor a María Auxi­
liadora.
Acto de la Pía Unión
en Puebla de la Calzada
P uebla

\

nar con coronas de fino metal la imagen
de María Auxiliadora y el Niño, como agra­
decimiento a la Santísima Virgen de su pro­
tección durante tantos años.
La idea, acogida con fervor por los nu­
merosos devotos de la Virgen de Don Bosco, se tradujo prontamente en práctica y al
16 -

C alzada.— En el Colegio

Salesiano de esta villa, celebraron los Coope­
radores salesianos su segunda conferencia
reglamentaria. Comenzó el acto con la in­
terpretación, por la rondalla del Seminario,
de varias piezas musicales. El Director del
Seminario Salesiano hizo la presentación del
conferenciante.
La conferencia estuvo a cargo del coad­
jutor de la parroquia de Santa María la
Mayor, de Mérida. R. P. Basilio Peribáñez,
joven sacerdote que cautivó al auditorio con
su verbo cálido. Seguidamente se hizo en­
trega de los diplomas y distintivos a los
nuevos Cooperadores.
Cerró el acto la rondalla. Los Coopera­
dores quedaron complacidos y animados a
proseguir su labor formativa y apostólica.

'..ijír,

l

de la

Primera convivencia de los
Cooperadores salesianos de la
Inspectoría de María Amdliadora (Sevilla)
Sevilla.— Una jornada de gran provecho
para la Pía Unión fue la que se vivió en el
Noviciado-Estudiantado Filosófico Salesia­
no de San José del Valle (Jerez) el día 9 de
junio próximo pasado.
Allí se dieron cita los diversos Centros
de Cooperadores de la Inspectoría de María
Auxiliadora, de Sevilla.

Sus representantes, en nú­
mero superior a 150, dieron
fe de vida activa de los res­
pectivos Centros.
A las once la Misa, con
numerosas comuniones, tes­
timonió la vitalidad espiri­
tual de la Pía Unión.
En el acto del teatro los
representantes de los diver­
sos Centros comunicaron sus
entusiasmos emulando a to­
dos en la tarea apostólica.
El Rvdo. señor Inspector,
don José Ruiz Olmo cerró el
acto con calurosas palabras
de felicitación y aliento.
Una comida campestre y
una velada literario-musícal
de sobremesa, a cargo de los
filósofos salesianos, pusieron
una nota de alegría y santa
hermandad.
No se puede pasar por alto
la esplendidez de las Hijas
de María Auxiliadora en ob­
sequiar a los Cooperadores
que visitaron su Noviciado.
Estas líneas sirvan de grati­
tud a la Rvda. Madre Juana.
Un acto eucarístico cerró
esta jornada inolvidable. An­
tes de partir, los Cooperado­
res pusieron en manos del
señor Director del Estudian­
tado un generoso obsequio,

Las dos fotos superiores nos
muestran dos aspectos de la
jomada de convivencia de los
Cooperadores de la Inspecto­
ría de Sevilla. La inferior, un
grupo de jóvenes Cooperado­
ras valencianas que, fieles a
su tradición, también este año
han practicada sus ejercicios
espirituales cerrados.
-

17

agradeciéndole vivamente su generosidad en
acogerlos y las facilidades que dio para ce­
lebrar los diverso actos.
Uno de los frutos de esta primera convi­
vencia fue el organizar una Peregrinación

a Fátima para los primeros días de sep­
tiembre.
Al despedirse, todos manifestaron su com­
placencia y sus deseos de que estas convi­
vencias tengan lugar todos los años.

PRO PAGANDISTAS DE LA DEVOCION A M A R IA A U X ILIA D O R A

v-i3

f i

NI

Desde hace dos años vienen organizándose en Valencia diversos gruvos de
Capillas domiciliarias dirigidas por el entusiasta grupo de devotas de María
Auxiladora, todas ellas del personal encargado de la sección de comedores y co­
cina de esta institución.
Empezaron las íres Hermanas salesianas que dirigen este grupo ccw¿ tres ca­
pillas y en la actualidad son ya doce las que mensualmente hacen el recorrido
de visita a 360 familias valencianas., que aman de veras a María Auxiliadora.
No se da abasto a las peticiones y en octubre comenzarán a circular otras tres
más, que están ya preparadas esperando su hora.
De común acuerde han querido estas celosas organizadoras que todo lo que
se obtenga de las limos7ias de estas capillas se dedique a formar una beca titulada
^Azul y Rosa*, los colores de la Reina Auxiliadora, que permita llegar a escalar
la cumbre del sacerdocio a un joven sin medios económicos que haya sentido
dentro de sf la voz de la tx)cación.
Felicitamos de corazón a este grupo de la Institución Sindical de Valencia y
les anima7nos a seguir trabajando con el mismo amor e ilusión en este trabajo
apostólico de pasear por las familias la so77risa matertial de 7iuestra Madre del
cielo.
8 -

DE NUESTRAS MISIONES

IRRADIACION CRISTIANA
( C o n tin ú a ia c r ó n ic a m is io n e r a
^^Junto a ia m e c a b u tiis ta d e Taitandia*^)m

La primitiva y modesta escuela-capilla,
minada por los termites, tuvimos que des­
truirla para dar lugar a la nueva escuela.
Y entonces el mayor y mejor salón fue trans­
formado en capilla provisional en espera de
que, aumentando el número de los cristia­
nos y las posibilidades económicas, fuese po­
sible levantar un templo digno del Señor para
no ser menos ante las soberbias pagodas
paganas.
Un día la pequeña grey de Ban Pong, que
contaba cerca de quinientos habitantes, tuvo
un único sentimiento. Pasamos de casa en
casa y todos dieron su contribución generosa.
Don Alejandro Terpín, director de la Es­
cuela, que ya había trazado los diseños para
la misma, trazó también los planos para la
iglesia a construir y dirigió los trabajos. El
26 de octubre de 1935 el Prefecto Apostóli­
co Monseñor G. Pasotti, tenía la alegría de
abrir al culto la nueva casa de Dios, bella
y grandiosa en sus líneas románicas. Pero
la verdadera fiesta de la bendición del nuevo
templo tuvo lugar el 26 de mayo del año
siguiente, 1936, al ser ordenados en el mis­
mo ocho noveles sacerdotes salesianos. Era
aquel grupo de los ocho novicios venidos de
la China el año 1927. El extraordinario acon­
tecimiento fue preparado por tres días de
fiestas, en las que tomaron parte, además
de los jóvenes, una gran representación de
fieles de la Misión. Confería las Ordenes el
venerando Monseñor R. Perros, M. E. P..
el mismo que en el 1927 había recibido pa­
ternalmente a los primeros salesianos a
quienes había cedido parte de su inmensa
Misión y que en aquel año 1936 celebraba
sus Bodas de Plata episcopales.
Hubo la coincidencia feliz del paso por
Ban Pong del primer Ministro S. E. Praja
Phahol, que siendo huésped por algunas
horas de su amigo el Comm. íleon, aceptó
la invitación de ver la nueva iglesia y sa­

ludar a los neo-sacerdotes. A éstos les habló
de su simpatía por la Obra Salesiana y por
la Iglesia Católica, cuya libertad había que­
rido garantizar mediante un artículo de la
Constitución, que por obra suya se había
dado al país después del golpe de estado
dirigido por él mismo.
En este mismo año 1962, comenzarán en
Ban Pong los trabajos para la construcción
de una nueva y más amplia iglesia, con ca­
pacidad para mil fieles, mientras la antigua
servirá como salón parroquial.
E l C o le g io «S arasithD .

Sucedió como en Valdocco en los prime­
ros años del Oratorio. Un día un muchacho
cristiano, procedente de un lejano pueblo,
inteligente y de buena voluntad, pidió un
puesto para poder ir a la escuela y estudiar.
Más tarde hubo que aceptar un huérfano y
otros más. Todos eran casos especiales a
los cuales Don Bosco no habría dicho que
no, y tampoco lo dijeron sus hijos de Ban
Pong. Así tuvieron el primer grupo de in­
ternos.
Se dieron cuenta entonces de que estaban
como las abejas en la colmena. Era necesa­
rio disponer de un dormitorio, de un estudio,
de un comedor, tanto más por cuanto que
la vida alegre y familiar de los primeros y
sus éxitos en los exámenes arrastraban a
otros. De este modo, en 1936, se construyó
un pequeño edificio de dos pisos junto a la
iglesia nueva y se tuvo la primera sede del
“Colegio San José”. Más tarde hubo que
agrandar el colegio con una moderna cons­
trucción, que permitió aumentar el número
de internos hasta ochenta. En 1940 Don
Terpín engrandeció la primera sede del co­
legio logrando un dormitorio más amplio,
una luminosa sala de estudio y un magnífi­
co comedor.
-

19

En febrero de 1948 un de­
creto ministerial autorizaba
al Colegio “Sarasith” para
los cursos pre-univcrsitarios.
Era el primer colegio fuera
W J
de la capital que obtenía tal
privilegio que daba la opor­
tunidad a los Misioneros Salesianos para preparar- a los
0
jóvenes de la Misión y a
otros muchos para su entra­
da inmediata en la Univer­
sidad. De este modo aumen­
taron más aún los alumnos,
que llegaron al millar, de los
cuales cerca de trescientos
internos.
Se imponía la necesidad de
TAILANDIA.—La banda del Colegio sálesiano Don Bosco
actuando el dia de la inauguración de la amplia iglesia construir una nueva sede más
levantada en honor de Don Bosco en la ciudad de las amplia y más moderna. Co­
pagodas.
menzados los trabajos en fe­
brero de 1951, en febrero del
1953 el nuevo colegio estaba
Llegaron a 120 los internos. A todo esto se repleto de jóvenes y un año más tarde, el
añadió un teatro y una casa para los Sale- “Sarasith” vivía sus fechas más gloriosas
sianos. En 1941, debido a las directrices gu­ con la solemne bendición dada por el mismo
bernativas <jue pretendían nacionalizarlo Rector Mayor.
todo, el colegio de San José cambió su nom­
Al nuevo gran colegio “Sarasith” se unie­
bre por el de “Sarasith” (= perfección de ron en seguida otras construccciones com­
las cosas literarias), nombre que más tarde plementarias : comedor para los externos,
se divulgó con honor y con amor por toda campos de deportes, etc. Hoy alberga un
Tailandia por los fieles y exalumnos.
conjunto de 1.500 alumnos, de los cuales
4(W internos, en su mayor parte budistas.
A l v é r tic e d e la g u e r ra .
Digna de mención es la iglesia, verdadera
joya de arte thai, rica en sus decoraciones, de
Cuando tuvo lugar la invasión de los ja­ flor de loto estilizado, en oro sobre fondo de
poneses, precisamente en las cercanías de fuertes vivos colores, con un hermoso altar
Ban Pong, reunieron millares de prisioneros de puro estilo thai, obra magistral de la
civiles que emplearon más tarde en la cons­ Escuela Profesional “Don Bosco”, de Bang­
trucción del famoso “ferrocarril de la muer­ kok. Una estatua de Cristo Rey domina en
te”, entre Ban Pong y Birmania, a través de lo más alto bendiciendo a todos los alumnos
la jungla, “el puente sobre el río Kwai”. El que aun siendo budistas la visitan con
colegio “Sarasith” tuvo entonces primera­ agrado.
mente una vida lánguida y más tarde tuvo
que cerrar las puertas temporalmente. Pero L a s H ija s d e M a r ía A u x ilia d o r a
en su reapertura, el año 1945, acudieron an­ y la ju v e n tu d fe m e n in a .
tiguos y nuevos alumnos.
Para satisfacer el deseo de los habitantes
Merecido premio a tantos sacrificios fue de Ban Pong, de enviar a sus hijas a la Es­
el reconocimiento por parte del Gobierno cuela Católica, desde los primeros tiempos
del colegio el 2 de marzo de 1956, siendo los Salesianos abrieron una sección feme­
director don Pedro Carretto, que fue nom­ nina. Pero aumentando el número de las
brado inspector en 1948 y en 1951 sucedió alumnas, se hizo necesaria la presencia de
al llorado Monseñor Pasotti, como segundo las Hermanas para poder abrir un colegio
Vicario Apostólico de Ratburi.
femenino aparte.
20

-

De este modo, en diciembre de 1936 lle­
garon a Ban Pong las dos primeras Hijas
de María Auxiliadora. Pronto se unieron
otras que condividieron con ellas fatigas y
consuelos. No había transcurrido un año de
su llegada a Ban Pong, cuando el Prefecto
Apostólico Mons. Pasotti les cedió un te­
rreno situado no lejos del colegio salesiano
para construir sus obras. Bendecido solem­
nemente el terreno el 8 de diciembre de 1937,
comenzaron los trabajos de construcción de
un moderno colegio y de la casa para las
Hermanas. La Virgen bendijo la nueva obra
enviando a las Hermanas numerosas alumnas y buenas vocaciones nativas. S. E. Mon­
señor Carretto, con nuevas donaciones de
terreno, les dio a las Hermanas posibilidad
de un mayor desarrollo de su obra. En 1950
levantaron un amplio edificio de tres plantas
en el que pudieron recibir un mayor núme­
ro de alumnas e incluso un buen grupo de
internas. El colegio “Narivut” (= forma­
ción femenina), con clases de enseñanza pri­
maria, media y superior, tiene 800 alumnas,
goza de gran prestigio ante las autoridades
escolásticas y también es reconocido.
Bon Pong es asimismo sede del Aspirantado, Postulantado y Noviciado para las
Hijas de María Auxiliadora en Tailandia.
O ra c ió n y p e n ite n c ia
p o r la c o n v e rs ió n d e lo s ta i.

ras de oración al día con la recitación co­
ral del oficio divino, breve reposo durante la
noche sobre tablas duras, interrumpido a
media noche por la recitación de Maitines
y Laudes, silencio y abstinencia perpetuos,
capítulo de faltas, numerosos días de ayu­
nos y diversas mortificaciones. He aquí, en
breve, la regla y la vida de estas religiosas
de clausura llamadas a fecundar el duro sur­
co. Si a esto se une el clima tórrido, ener­
vante, se creería que jamás podrían encon­
trarse en la Tailandia de la vida muelle y
fácil jóvenes siamesas que desearan profesar
la primitiva regla dada por San Francisco
de Asís a Santa Clara. Y por el contrario,
ha habido que agrandar el convento varias
veces para dar cabida a las numerosas jó­
venes atraídas por el deseo de inmolación
y de santidad. En 1959 Monseñor Carretto
reconstruyó parte del primitivo convento,
dotándolo de una iglesia recogida en la que
almas generosas hacen el holocausto de sí
mismas por la conversión del pueblo thai.
P or Jesús
q u e s u f r e e n los h e rm a n o s .

El llorado Monseñor Pasotti, cuyo lema
era "ómnibus omnia” (todos para todos),
quiso extender la caridad cristiana incluso a
los enfermos budistas, para poder salvar sus
almas curando los cuerpos. A este fin invitó
a los hijos de San Camilo de Lelis a tra­
bajar en un modesto hospital que el señor
León había construido en 1949 en Ban Pong,
junto a las obras de la Misión. Monseñor

Convertir significa echar fuera del san­
tuario del alma al enemigo usurpador. Este
enemigo, dijo Jesús a sus Apóstoles, "sólo
se expulsa con la oración y
el ayuno”. Por eso el Supe­
rior de la Misión Mons. Pa­
sotti, vistas las especiales di­
ficultades de conversión del
pueblo tai, quiso unir a los
instrumentos del apostolado
misionero almas entreg|adas
exclusivamente a la oración
y a la penitencia.
En 1936 llamó a las mon­
jas capuchinas de clausura
de FIorencia-Montughi, para
las cuales fundó junto a las
mismas obras misioneras salesianas de Ban Pong un mo­ TAILANDIA.—CuatTO obispos asisten a la primera misa
desto convento de madera celebrada en la espaciosa y bella iglesia levantada en
honor de Don Bosco en Bang-fcok.
de un sólo piso. Ocho ho­
-

21

EL
PADRE
DE LA
NARIZ LARGA
Cómo nació una residencia
misionera en Japón
Por o# P . J U A N F A R O N !
M isionero Sa/esíono

Pasotti no pudo, sin embargo, ver realizado
su proyecto; lo bendijo desde el cielo y le
tocó a su sucesor Monseñor Carretto llevarlo
a feliz término.
En 1951 llegaba a Tailandia el primer
grupo de sacerdotes y hermanos Camilos,
seguidos, tras corto intervalo, de otros Her­
manos suyos que tomaron la dirección del
hospital solemnemente inaugurado el 23 de
agosto de 1953. En el año 1957 el viejo hos­
pital de madera fue sustituido por otro de
mampostería. más moderno y más amplio,
dotado de una completísima sala de opera­
ciones. El Hospital de San Camilo es actual­
mente atendido por óptimos doctores, en
gran parte antiguos alumnos sálesenos del
colegio de “Sarasith".
« C iu d a d d e D o n B osco».

Al margen de las obras salesianas cató­
licas de Bun Pong se levanta también la
“Ciudad de Don Bosco”. Son bellísimas ca­
sitas. sumergidas entre el verde espesor de
■)■) _

VISTA la manera como había transíonnado
mi misión, m i P. Inspector, no sé si en
premio o castigo, me mandó a fundar otra
nueva en la ciudad de Tsiikiimi, isla de
Kiusiii.
Esta ciudad está por una parte bañada por
el mar, que la acaricia o golpea según los
dias, y por la otra sólidamente asentada so­
bre una cadena montañosa.
Apenas llegué a Tsukumi me puse a bus­
car un terreno. Sabia que me costaría mu­
chísimo hallar uno aceptable, ya que los
precios eran prohibitivos. Pese a todo, .se­
guía buscando: en mis oídos resonaban .siem­
pre las últimas palabras de mi Superior:
^Piense, Padre Faroni. que no podré dar­
le mucho para el terreno.»
Parecía el gitano errante por las vueltas
que día tras día daba por la ciudad. El al­
calde me mandó llamar varias veces para
ofrecerme unos terrenos, pero yo. conocido
el precio que me pensaba pedir, prefería no
dejarme ver.
Alquilé una buhardilla ideal para un
«bohemio» de mi especie. Dentro de «mi

palmeras, bananos, cocoteros y tamarindos
que albergan a los numerosos profesores
de las escuelas masculinas y femeninas de
las Misiones, con sus respectivas familias y
otros muchos cristianos que viven allí para
estar más cerca de la iglesia.
El hecho de que, desde hace varios años,
el alcalde y la mayor parte de los concejales
de Ban Pong sean católicos, no obstante el
escaso número de cristianos, dice claramen­
te cómo los cristianos de Ban Pong han sa­
bido atraerse la estima y la confianza de
toda la población y cómo las previsiones y
los sacrificios de los fundadores del Centro
Católico de Ban Pong hayan tenido pleno
cumplimiento.
En el horizonte el brillo de oro reflejado
por la gran pagoda Chedi. no podrá nunca
nublar estí conjunto de obras católicas, cuyo
benéfico influjo se irradia cada vez más. lo
podemos decir, sobre toda la “Península de
Oro”.
Sac. CÉSAR C astellino . S. D. B.

alojamientos veía las estrellas también de
día porque infinidad de veces, olvidado de
la escasa altura del techo, sacudía sus vigas
con mi cabeza. Cuando decía misa no podía
alzar la Hostia y el Cáliz más arriba de mi
cabeza porque las bóvedas de mi catedral
no se permitían los lujos de una catedral
gótica.
Con los yens que me mandaban mis leja­
nos bienhechores compré los primeros uten­
silios: unos platos, unos muebles y una es­
tufa... los que me alquilaron la. buhardilla
comentaban con sus vecinos: «Dentro de
poco el bonzo católico se caso, porque está
comprando muchos muebles'o.

Finalmente, después de tanto buscar, lo­
gré que me alquilaran una casita de ma­
dera. ¡Cuántas veces, al llamar de puerta
en puerta, me dieron con ellas en las na­
rices, asustadas las dueñas de oír a un ex­
tranjero hablar su lengua!
Incluso los niños, las primeras veces al
verme pasar decían entre si: «mira, es un
e.xtrofijerort. Y o me volvía muy sonriente
hacia ellos y les respondía:
«Un extranjero, no; un japonés». Na­
turalmente se quedaban de piedra al compro­
bar que les había entendido y hablaba su
lengua. Ellos seguían su camino riendo.
«¡Vaya plancha, era un japonés! ¡Pero
como tenía la nariz tan larga...! ¡Además
sits ojos no son como los nuestros! Ex­
traño!»
Alquilada la casa empecé el traslado: día
tras día trasportaba en dos tnaletas todo mi
ajuar: libros, vestidos, clavos, hierros...
Cuando llegaba a puerto un barco europeo
o americano, subía a pedir limosna, aunque
mi primera visita era para la cocina a fin
de poner un poco al día mi pobre estómago
con algún plato guisado estilo europeo.
Cuando bajaba del barco iba cargado de
vituallas, ropas y otras cosas.

Mis frecuentes visitas a las naves extran­
jeras levantaron sospechas en la policía, que
se preguntó si yo no sería un contrabandista
disfrazado de cura. Una tarde llegaron dos

policías a visitarme. Comprendido el moti­
vo de su visita, con la excusa de que admi­
raran unos cuadros pintados por m í les
acompañé por toda la casa. Miraron aten­
tamente y escudriñaron mi alcoba. Ja sólita
que me servia de capilla, la cocina... Por
cierto que en el fogón se estaba cociendo
mi cena: unas patatas con cebolla. A l no
ver a nadie en la cocina y que, sin embargo,
el fuego estaba encendido, me preguntaron:
— Y su señora, ¡dónde está?
— ¿Mi señora? Los banzos católicos no se
casan.
— ¿No se casan? Pues entonces, ¿quién le
limpia la ropa, quién lava, quién friega?
—Por ahora, me arreglo solo. Más vale
solo que nuil acompañado.
Rieron la ocurrencia.
Les acompañé a la salita de estar y les
ofrecí un vcsito de saké. Mientras lo p a n ­
deaban les dije:
— Estén tranquilos, que soy un viejo ami­
go de la policía, porque yo en Tokio di caza
a dos ladrones. Uno de ellos era buscado
desde hacía, dos años y precisamente una
semana antes había roto el cráneo a un hom­
bre. Gracias a esta intervención la policía
me otorgó un diploma y una cantidad de
dinero que me vino muy bien. La radio y
¡a televisión dieron la noticia.
Les saqué los diarios y revistas que hablabati de mi hazaña y quedaron satisfechos.
Aún más. desde aquel momento fueron mis
amigos.
* * *
Dos veces por semana volvía a mi primi­
tiva misión, distante de Tsukumi quince mi­
nutos de tren.
Como en los años que había vivido en ella
continuaba prestando mis servicios de so­
corro en los incendios, tan frecuentes en es­
tas ciudades de casas de madera y papel,
durante el otoño y el invierno.
A l primer aullido de la sirena saltaba so­
bre m i moto en dirección al lugar del de­
sastre. Si por el camino encontraba algún
bombero lo montaba a la grupa, siendo
siempre los primeros en llegar y el último
en abandonar el lugar del siniestro.
Los japoneses al ver al «extranjero», que
arriesgaba su vida por ellos, un día. durante
-

23

una fiesta en honor de los bomberos, me lución: me senté sobre el acapot» y con dos
confirieron una medalla al mérito delante linternas de bo'sillo nos las arreglamos sin
de mil cien hombres de toda la provincia incidentes.
formados ante las autoridades.
El Señor me había regalado dos casas
De esta suerte, cuando volvía a la ciudad antes que el terreno; pero sabía que también
me lo mandaría, aunque desconocía el cómo
Tsukumi, la gente a mi paso comentaba:
y el cuándo.
ixMira. por ahí voí el bonzo bombero.jy
Oíros a quienes la policía había contado
En la ciudad de Tsukumi había una gran
mi hazaña al detener a dos ladrones, excla- fábrica de cemento, cuyo propietario lo era
maban: tEse es el sacerdote de los ladro- asi mismo de muchos terrenos, destinados
nesr>. Los comentarios corrían de boca en a casas para sus obreros. Se me ocurrió que
boca y pronto me convertí en un héroe de podía ser la solución y fui a visitarle. Me
novelas iluslrtjdas.
recibió el director de la fábrica que me pro­
Otros decían que yo era muy fuerte, por­ metió su ayuda y que informaría al propie­
que por trabar conversación con los mozos tario cuando fuese a Tokio.
los invitaba a una prueba de fuerza. Ninguno
La vigilia de Navidad, a ¡as diez de la
logró jamás torcer mi brazo.
mañana, pude comprar los terrenos.
Un día un fontanero, muy hábil en su
Me pedían 10.000 yens por cada 1,80 me­
oficio, me espetó:
tros cuadrados. A última hora me lo reba­
—Padre, todos dicen que es usted muy jaron a 5.500. Me quedé sin un céntimo.
fuerte y que a todos les gana. Le desafío.
M i compañero de la misión vecina, el
Acepté el reto y le gané.
Padre Sechi, me llamó cien veces loco, por­
— Pruebe ahora con los dos brazos\_ le que me vio dispuesto a comenzar los tra­
dije.
bajos sin un mísero yen. Se ve que le dio
El fontanero, casi humillado por mi pro­ miedo la aventura en que me iba a embarcar
posición apretó con toda su gima contra mi y me regaló cien mil yens.
brazo. Su rostro se puso colorado como un
El terreno conseguido era muy bajo y
tomate por el esfuerzo, las venas del cuello
cuando llovía se inundaba. Con piedra y
se le hincharon. En secreto pedí al buen Dios
que diera el triunfo a su matachín. Luego tierra lo elevamos, pero se necesitaron 150
camiones de material y un tractor, que me
miré con algo de picardía a mi contrario y
prestó la fábrica, para nivelarlo.
levantando un poco sus dos brazos se los
Desde aquel día salía de casa vestido con
d 0blé completamente hasta la mesa. Todos
los presentes gritaron: «Banzai. ¡Viva el mono con un crucifijo al pecho como dis­
tintivo de mi sacerdocio. Para los japone­
Padre!»
El hielo quedó roto. Desde aquel momen­ ses yo era un americano excéntrico, pues
to me consideraron como uno de los suyos según pensaban, tenía los bolsillos llenos de
y me hice el amigo de todos, a pesar de dólares. Pero para el Señor era un pobre
que mi nariz seguía siendo la más larga de obrero de su viña que encallecía sus mo­
todas. Desde entonces los que me encon­ nos haciendo de albañil, peón, electricista
carpintero y mecánico.
traban por la calle me saludaban.
Levanté casi solo el esqueleto de la caso.
Cuando terminé de poner las vigas del te­
cho las piernas me temblaban del esfuerzo
y me hallaba casi desfallecido. A l día si­
Un día los americanos se retiraron de sus guiente un señor japonés, que llegó a saber
bases militares, no sin antes regalarme dos mi situación, me mandó dos carpinteros y
casas de madera muy espaciosas. Me pasé dos albañiles.
un verano entero desmontándolas. Con un
Era el día primero de marzo, del mes
camión destartalado trasporté todo a la mi­ dedicado a San José, patrono de los obre­
sión. que distaba doscientos kilómetros.
ros. A l ver el gesto del Señor, tan delicado
Viajaba de noche y trabajaba de día. Una conmigo, me entusiasmé de nuevo y volvie­
noche me quedé sin luz en los faros. La so­ ron las juerzas.

24 -

Hubo obreros que después de su trabajo
venían a ayudarme, otros lo hacían en sus
días Ubres y hasta hubo quienes dejaron
sus trabajos para venir a trabajar conmigo
gratis.
Un día, mientras me hallaba clavando con
entusiasmo unas vigas, bajé a toda prisa del
andamio y me marché a m i casita. Cuando
volví, el hombre que me ayudaba me pre­
guntó extrañado qué había pasado.
Le contesté que me había acordado de
repente que m i comida se estaría queman­
do >’ ejectivamente se había quemado no
sólo la comida sino hasta el mango de la
cacerola. El buen hombre rió a gusto, pero
cuando por la noche llegué a casa me en­
contré con que su mujer salía a m i encuen­
tro ofreciéndome mi cena caliente. Cansa­
do como estaba me pareció un regalo del
cielo. Su marido le había contado la cosa.
Se marchó ofreciéndose para guisarme la
cena cuantas veces lo deseara.

Pora continuar mis trabajos necesitaba
la ayuda de una persona muy influyente en
la ciudad: un farmacéutico, marido de una
mujer cuya tnadre era cristiana. Un sacer­
dote de otra ffiisión me había advertido que
el tal era muy buena persona y que gusto­
so me habría ayudado.
Pasé muchas veces por delante de su far­
macia con el deseo de entrar, pero siempre
me fallaban los ánimos. Un día entré con
¡a exci4sa de comprar treinta céntimos de
naftalina. Pero no conseguí decir una pala­
bra de lo que me interesaba.
Varias otras veces entré a comprar lo
mismo. Aquella persona sabía que yo que­
ría hablarle porque su suegra se lo había
advertido. El farmacéutico comentó con su
mujer: vEl misionero debe tener muchos
vestidos porque está comprando siempre
naftalina-a.
Un día, cansado de comprar naftalina
para los vestidos, que no tenía, me decidí
y hablé. Trabamos en seguida amistad ver­
dadera. También su mujer se mostró muy
gentil conmigo y ambos me ayudaron un
sin fin de ocasiones. Cuántas veces con una
simple llamada telefónica me arreglaba
asuntos y me abría todas las puertas.

Un día los bonzos, viendo que me ayu­
daba tanto, se reunieron para estudiar el
modo de ganárselo a su causa. Me hizo sa­
ber que su ayuda y prestación no me falta­
rían nunca, y estaría de parte del «padre
de los treinta céntimos de naftalina*, como
me llamaba en broma.
Una vez me regalaron una gran cantidad
de leña y con un camión prestado fui por
ella. Conmigo vino también el farmacéutico
y entre los dos nos cargamos dos camiones.
Fue un trabajo superior a sus fuerzas. Por
la tarde, cuando fui a darle las gracias, lo
encontré sentado en su tatamí. A l verme, es­
bozó una sonrisa en la que dejaba entre­
ver todo su cansancio. Me dio compasión.

• * *
Poco a poco los trabajos terminaron y la
misión quedaba a punto de ser inaugurada.
Faltaban solo tres días. Vinieron muchachas
a limpiar los cristales. El farmacéutico y un
empleado suyo fregaron los suelos; este
último me decía:
—Padre, usted ha conseguido lo que mi
mujer no logró en veinticinco años de ma­
trimonio.
Algunas señoras trajeron tantas flores que
convirtieron la casa en un florido jardín.
El concejal de obras públicas del ayunta­
miento vino dos días antes de la inaugura­
ción con doce obreros para ultimar detalles.
Por fin llegó el día tan soñado. El obispo
de Oita, japonés, celebró la primera misa
en la capilla. Desde la puerta de la sacris­
tía contemplab'~ yo la capilla llena de gente.
Durante la elevación, emocionado y con los
ojos llenos de lágrimas, recordé cuánto ha­
bía navegado en los dos últimos años para
llegar a este puerto, para poder dar una
casa a Jesucristo en una ciudad donde Suda
contaba por decenas sus suntuosas pagodas.
Después de la ceremonia, ciertos paganos
me dijeron:
— Si usted ha conseguido hacer todo esto
sin contar con nada, quiere decir que su
Dios es poderoso.
Queridos amigos: plantar una cruz cuesta
mucho en Japón, pero nos damos por sa­
tisfechos. pese a tanto esfuerzo y fatiga,
porque siempre Dios guía nuestro trabajo
y lo conduce a buen pierio.
-

25

MARIA AUXILIADORA
/

SALI BIEN DE ENFERMEDAD
Y OPERACION
A studillo (Falencia).—Desde varios años
me venia sintiendo mal. Acudí a varios mé­
dicos. A pesar de medicinas y tratamientos,
la enfermedad seguía agravándose. Me en­
comendé muy de corazón a mis amados san­
tos protectores: María Auxiliadora, San Juan
Bosco y Domingo Savio. Los médicos me pro­
pusieron una muy difícil operación. Hice una
Novena a María Auxiliadora, confiándole a
Ella el éxito de la operación. Larga y muy
difícil fue la intervención quirúrgica. Como
me había confiado enteramente llena de fe
y confianza a mi amada Madre celestial, es
peraba un feliz éxito. Y asi fue. Ahora me
encuentro bastante bien, y puedo afirmar
que el excelente resultado de la operación
se lo debo a Ella.
Deseo que se publique la gracia para es­
timulo y aliento de cuantos se encuentran
en trances apurados sepan a quién acudir,
y envío una limosna para su culto.—Irene
Quintero.

NO TENIA LESION CEREBRAL
B arcelona.— Debido a ciertas circunstan­
cias, mi hijo nació con el cráneo hundido
y con asfixia. El médico indicó la posibilidad
de muerte durante las siguientes cuarenta
y ocho horas, o de lo contrario el niño que­
daría mentalmente retrasado,
Mis otros hijos y yo encomendamos el
asunto a María Auxiliadora, rogándole por
la salud y estado normal del recién nacido.
Después de seis meses se le efectuó al niño
la encefalografía electrónica para compro­
bar su estado mental, y dio por resultado
la más completa normalidad sin ninguna
lesión cerebral. Doy gracias a Dios y a la
Virgen Mana por tan señalada gracia y
cumplo con mi promesa de publicarlo en el
B oletín S alesiano y enviar una limosna.-M. Folch.
UBRADA DE UNA OPERACION
Habiendo enfermado una sobrina con
una peritonitis aguda y siendo conduci­
da al sanatarlo muy grave la víspera de
26

comenzar el mes a la Santísima Virgen, so­
licitamos la bendición de María Auxiliadora,
que le fue dada. La encomendamos con toda
confianza a su protección, pidiéndole por la
salud de la enferma. Se vió patente su ayu­
da, pues sin necesidad de operación se ha
restablecido, siendo, según los médicos, un
caso milagroso.
Como prometimos, lo publicamos en el B o­
letín S alesiano y enviamos una limosna.—
Señoritas de Ramiro.
CURA DE UNA PARALISIS TOTAL
(Francia).—Un de­
sastre económico me habla obligado a salir
fuera de la patria, y dada mi edad, de cua­
renta y ocho años, no me dejaban entrar
nada más que en Francia.
Después de varias vicisitudes pude encon­
trar trabajo: pero he aquí que me-entra un
extraño mal que, poco a poco, me paralizó
casi todo el cuerpo. Los médicos hicieron
de todo para frenar el mal, que avanzaba
inexorablemente, paralizando todo, aun las
vías respiratorias. La asfixia era inminente.
Llevado a medianoche a la Cruz Roja de
Lyon, llegué con estertor y se me practicó la
traqueotomía con respiración artificial. Pasé
asi varios días, entre la vida y la muerte.
Desde Italia vino mi hermano. Párroco de
Vlttorlo Veneto, que antes quiso pasar por
Turín y celebrar Misa en el altar de Don
Bosco para recomendarme a María Auxilia­
dora. Llegado junto a mi lecho (yo no podía
hablar, ni moverme, pero entendía todo), me
colocó sobre el corazón una estampa de Ma­
ría Auxiliadora y me dio su bendición. Des­
pués tuvo que marchar. Pero desde aquella
visita yo comencé a mejorarme. Me dormí
mirando la bella estampa. Mi sueño fue lige­
ro, confortador y. después de tanto tiempo,
sin pesadillas. Me desperté con esta oración
en mis labios: «Te saludo, oh María:^.
El restablecimiento fue doloroso. Pero el
terrible mal había desaparecido y pronto
pude dedicarme a mi oficio de albañil. Han
pasado varios meses y yo trabajo como an­
tes, y aún más que antes, pues a veces em­
pleo jornadas de doce horas al día. Y por
la tarde, antes de acostarme, doy gracias a
la Santísima Virgen Auxiliadora, que me
mira y me bendice.—Luciano Braido.
V illart -B onnot - I sére

-

i

OTROS

CORAZONES AGRADEGIDOS
J P. Pugán, de Allariz (Orense), manifies­ dre del matador de toros José María Montita su gratitud a María Auxiliadora por ha­ 11a, agradece a María Auxiliadora la protec­
berle concedido la salud a una persona ción dispensada a su hijo en la Maestranza
de Sevilla, que salió ileso y triunfante. En­
amiga.
vía una limosna.
María de la Paz Afaíeos Ríos,, de Sevilla,
■Francisca Cañero, de Córdoba, da gracias
da gracias a María Auxiliadora por haberle a María Auxiliadora por haber dado negati­
dado la certeza de que no padecía del cora­ vo los análisis que se efectuaron a su hijo,
zón pese a los síntomas que ella sentía, y después de un pronóstico que aseguraba la
cumple la promesa de publicarlo en el B o ­ existencia de piedrEis en el riñón. Envía una
letín S alesiano .
limosna.
Sor Adolfina Silvera, H. de M. A., de Pam­
Carmen ilí.» del Castillo, de Córdoba ma­
plona manifiesta su gratitud a María Auxi­ nifiesta su inmensa gratitud a María Auxi­
liadora por el éxito experimentado en las liadora por los numerosos beneficios que re •
oposiciones a maestra de una sobrina suya cibe casi constantemente de Ella y última­
y por una gracia espiritual grande obtenida mente por haber conseguido que uno de sus
sn favor de una persona muy querida.
hijos entrara en la Academia Militar y otro
M. M., de Vigo, agradece a María Auxilia­ terminara bien su carrera de Perito Mer­
dora la curación de una molesta enfermedad cantil.
que padecía desde hacía tiemiw y envía una
Dan gracias a María Auxiliadora, envian
limosna deseando que se publique la gracia
una limosna y desean vnblicar su gratitud
en el B oletín S alesiano .
en el B oletín S alesiano ;
V. Dv de Guadalajara, da infinitas gracias
Ramona Conde, de Allariz (Orense); se­
a María Auxiliadora por ser varias las en­
fermedades de que la ha librado, y ser va­ ñor Martínez, de Guijuelo (Salamanca); An­
nos los asuntos familiares que Ella le ha so­ tonio Ortega, de Madrid; Dolores Diéguez,
lucionado de una forma maravillosa. Envía viuda de Luque, de Córdoba; A. V., de Fuenuna limosna y desea que se publique en el teginaldo (Salamanca); José Costa y Rosa
Miranda, de Vigo; María Pepa Blanco, de
B oletín S alesiano su gratitud.
Puerto Real (Cádiz) Carlos Díaz de ValverM. Martin, de Zamora, no sabe cómo ma­ de del Camino (Huelva); Teresa Pascual, de
nifestar su gratitud a María Auxiliadora por Alcoy; Consuelo Carreño, de El Tiemblo; Il­
haber sido curado su padre de una grave defonso Martín Gracia, de Salamanca; Ma­
dolencia que los médicos daban de imposible ría Sambrlna, de Zamora; Amelia Hernán­
curación. Y desea que su gratitud quede im­ dez, de Salamanca; Francisca Luís, de Cipresa en el B oletín S alesiano .
llamayor (Palencia); R. C., de Barcelona y
Amalia Alvarez Rincón, de Córdoba, ma­ M. G.

De San Ju an B o sc o
Santo Domingo Savio
UNA voz LE MANDO LEVANTARSE
Y ANDAR
GcBBio (Perusa).—En agosto del pasado
año mi pequeña Maríai Gracia, de diez anos,
fue acometida del terrible virus de la polio­
mielitis. En la angustia más desesperante
que se puede causar al corazón de unos pa­
dres apareció la única tabla de salvación; la
fe en Dios, la esperanza en la intercesión de

San Juan Bosco, a quien estoy tan ligado
por ser ex-lumno y (Xtoperador Salesiano.
Invitamos a la pequeña a comenzar una
novena a San Juan Bosco. y ella, desde su
lecho de dolor lo Invocaba todos los días con
mucha fe. Su cuerpo estaba medio paraliza­
do y la pierna derecha, del todo fláccida, no
presentaba signo de reacción. Llegado al no­
veno día la nina afirma de haber oído en, su
interior una voz que con Insistencia le man_ 07

daba que se levantara y que caminase. Se
levantó, en efecto, y anduvo entre el estupor
de todos los presentes, asistentes y yacentes
del mismo mal.
María Orada, después de siete meses de
estar en el Centro Poliomielítlco de Perusa.
ha sido Incorporada a nuestra familia con la
recuperación de un 80 por 100 de la pierna
que no presenta ni señales de atrofiamiento
muscular ni deformidad y con la esperanza
del médico que añrma que en breve se le
quitará ese déflclt que le ha quedado. Doy
gracias a Dios por la grada obtenida y ma­
nifiesto mi sempiterna gratitud a Don Hos­
co.—Mario Ledda.
Dan gracias a San Juan Bosco:
N. N., de Montilla, por haber salido bien
en las últimas oposiciones de Magisterio.
AL CONTACTO CON EL ESCAPULARIO
EMPEZO A MEJORAR
P avía (Italia).—Nuestra pequeña alumna
de tres años del asilo Isabel Barbisotti fue
atacada de pronto de agudísimos dolores de
vientre. Llevada con urgenda al polldlnlco,
el doctor Donatl, jefe de la secdón de ciru­
gía, le encontró una obstruedón intestinal.
Por lo que fue inmediatamente operada bajo
un pronóstico de suma gravedad. El doctor
que operaba y los médicos ayudantes afir ­
maron que se trataba de un caso gravísimo,
del que suelen salir felizmente un 5 por 100.

La niña estuvo entre la muerte y la vida du­
rante varios días. Uevamos a la madre des
esperada el escapulario de Santo Domingo
Savio y le prometimos que pediríamos por
su hija. Al contacto con el escapulario, la
niña comenzó a mejorar y actualmente se
encuentra en vía de curación. Los padres,
agradecidos a tan pequeño y gran protector
de su hija, envían una limosna a Sto. Do­
mingo Savio siga protegiendo a Isabelita.—
La Directora de las Hijas de María Axixiliadora.
TODO SALIO BIEN
A zcoitia .—Estaba para dar a luz. Y ante
el temor de que hubiese alguna complica­
ción una amiga mía me proporcionó un es­
capulario de Santo Domingo Savio, me hizo
que invocara a este joven santo que protege
a la juventud y prometiera publicar el favor
obtenido si al tener que cumplir este deber
penoso de la maternidad todo salía bien. Y
en efecto, el Señor me regaló una hermosa
niña sin ninguna complicación. Cumplo mi
promesa y envío una limosna.—Ana Puyadena.
Dan gracias...
N. N. de Salamanca, por haber dado a luz
felizmente su tercer hijo, después de invocar
a Domingo Savio, pues se encontraba en cir­
cunstancias difíciles.

F A V O R E S D E S A N T A M A R IA M A Z Z A R E L L O
DOBLE GRATITUD
El poder de la Santa no quedó aquí. Mi
hija regresó al Noviciado en cuanto estuvo
T orrente (Valencia).—Las Navidades de
fuera de peligro, llevándose de nuevo la
1961 fueron muy dolorosas para mi familia reliquia, ante mi Insistecia, para que fuese
por haber yo enfermado con una Infección su protectora como lo había sido para mí.
estomacal que me llevó hasta el trance de Al término del viaje iba a intervenir la San­
los últimos Sacramentos.
ta de nuevo. El tren en el cual viajaba, es­
En tan apurado estado vino mi hija, que tando ya muy cerca de Barcelona, tuvo un
era novicia de las Hijas de María Auxiliado­ catastrófico choque con otro de mercancías,
ra. Consigo trajo una reliquia de Santa Ma­ siguiendo el descarrilamiento general y el
ría Mazzarello, que me puso al llegar. En incendio de la máquina, produedendo la
nuestra Santa pusimos toda esperanza de muerte a la mayoría de los viajeros de los
curación, ya que la ciencia me había desahu­ dos primeros vagones y parte del tercero,
ciado, dándome muy poco tiempo de vida. en el cual iba ella. En su mismo departa­
La mejoría no se hizo esperar, y a los pocos mento hubieron heridos graves, pero ella
días me hallaba casi restablecido, sin que salló sin d menor rasguño, pudlendo auxi­
los médicos se explicaran el motivo. Ahora liar eficazmente en los primeros momentos
hago vida normal, si bien me ha quedado un hasta que llegaron los servicios de socorro.
insistente hipo, al que los médicos han ata­
Por estos dos señaladísimos favores damos
cado titánicamente y no han ixKildo cortar. toda la familia las más expresivas gracias a
Presiento que no habrá total curación mien­ nuestra Santa y animamos a todos sus de­
tras no quede publicada en el B oletín esta votos a que aumenten su confianza.—Joaquín
gracia, cosa que había prometido.
Catalá.
F A V O R E S D E N U E S T R O S S IE R V O S D E D IO S
LA REUQUIA DE DON RUA
L a O rotava (Tenerife).—La señora Enri­
queta Linares. Vda. de Díaz, de sesenta y

28

-

dos años de edad, sufrió una trombosis cali­
ficada de grave, perdiendo el movimiento
del lado derecho. Su hija al verse en el apuro
y comprobado la gravedad del caso por el

médico, corrió al colegio salesiano para ro­
gar al Director acudiese a darle la bendición
de María Auxiliadora.
En aquellos momentos se hallaba de visita
el Rvmo. D. Modesto BelUdo y el P. Direc­
tor bajaba de su despacho llevando en la
mano xma reliquia de Don Rúa que el señor
Visitador le daba como recuerdo. Ante el
apuro que demostraba la hija de la enferma
y no pudiendo en aquel momento ir a darle
la bendición de María Auxiliadora no se le
ocurrió otra cosa que entregarle la reliquia y
decirle: «mire, tenga esta reliquia que es de
un santo que necesita hacer milagros, pón­
gasela a la enferma y no me la pierda, pues
es im recuerdo. Con la mayor fe pasaron
la estampa por el cuerpo de la enferma y
no habría pasado un cuarto de hora cuando
empezó a moverse y encontrarse bien, pro­
vocando una alegría indecible en todos los
presentes. Siguió mejorando y hoy se en­
cuentra completamente bien. Lo publico
gustosa en el B oletín para que sirva de es­
tímulo a otras personas. Envío una limosna
para su beatificación.—Genoveva Díaz Lina­
res.
CADA MOMENTO PODIA SER EL ULTIMO
PODSUED (Yugoslavia). — Mi condición era
muy crítica. El médico, especialista en en­
fermedades cardiacas, me había dicho que
la operación era urgente. El músculo car­
díaco estaba muy débil y en cualquier mo­
mento se podía esperar un fatal desenlace.
Y aún se asombró ante mi temeridad de ir
sola por todas partes. Me dijo que cada paso
podrí% ser el último... Me llevaron al hospi­
tal mientras mis niños comenzaban una no­
vena al querido Don Rúa, porque habíamos
oído decir que él socorre también en los ca •
sos más desesperados y críticos. Y he aquí la
gracia: mi salud mejoró, la operación salió
muy bien y ahora me encuentro sana, gra­
cias al buen Dios y al venerable Don l^guel
Rúa. Publico la gracia en el B oletín S alesiANO animando a sus devotos a acudir a él
con el fin de que. mediante sus favores, le
veamos pronto en los altares.—Finika Curkovic.
Dan gracias a Don Miguel Rúa :
Nicolás Marqulna, de Madrid.
FINEZAS DE DOÑA DOROTEA
S alamanca.— Después de siete años de con­
tinuos rezos y promesas a varios santos, pi­
diéndoles una g r ^ a muy necesaria para
mi y para una hija mia, cuando ya estába­
mos desalentadas, llegó a nuestra noticia la
fama de santidad y milagros de Doña Do­
rotea, por lo que, llenas de fe, acudimos a
ella con varias novenas muy fervorosas y la
Sierva de Dios no nos abandonó, pues conse­

guimos lo que en vano hablamos pedido du­
rante siete años. Y no paró ahí la cosa. De •
seando vender una casa y encontrando mu­
chas dificultades para ello, empecé una no
vena a la Sierva de Dios y ella lo arregló todo
de manera tan admirable que, sin corredo­
res, ni apenas hacer gestión alguna, le pude
vender sin pérdida ninguna, y en la cantidad
que pedía. Muy agradecida a tantas finezas,
le envío una limosna para su beatificación
y le ruego publique la grada en el B oletín .
E. M.
F a v o r OS ti o
n u o s ir o s m á r t ir e s
PiCASENT (Valenda).—En repetidas oca­
siones quedaron frustrados mis anhelos de
tener hijos. Los médicos, por su parte, me
quitaban toda esperanza. Por fin, viendo que
sólo del cielo podía esperar remedio a mi
situadón, acudí con viva fe al mártir sale­
siano don Juan Martorell, y llegada la oca­
sión, me puse su estampa sobre el pecho y
junto con mi esposo comenzamos a rogar
que nos concediera el hijo tan deseado. Y no
quedamos defraudados, porque a poco nadó
una hermosa nina que ha llenado de alegría
nuestro humilde hogar. Como prometí pu­
blicar la grada en el B o letín , lo hago gus­
tosa, mientras envío una limosna para la
causa de beatificadón del siervo de Dios.—
M. Antonia Chama y Francisco Carhonell.
PiCASENT (Valencia).—Dan también gradas
a don Juan Martorell y envía una limosna
por gradas redbidas: Carmen Martorell,
Dolores Aguado, Ami>aro Medina, Francisco
Javier, Cristóbal y LoUta.
B arcelona.—Agradedda a los favores que
me dispensa el Padre José Calasanz. le en­
vío una limosna, rogándole publique mi gra­
titud en el B o letín S alesiano .
—Un antiguo alumno del Padre Calasanz,
agradeddo a los muchos favores del santo
mártir, envía una limosna para la causa de
beatificadón.—N. N.
ViLLENA.— Habiendo obtenido una gracia
del mártir salesiano don Julián Rodríguez,
le envío una limosna para su causa de beatiflcadón, rogándole publique mi gratitud en
el B oletín S alesiano .
S evilla .— Habiendo perdido una alhaja y
no encontrando manera de recuperarla, me
acordé del sanüto salesiano y mártir don
Jaime Ortiz, que en varias ocasiones se ha
mostrado tan espedalizado en estas gradas,
y le supliqué me ayudara. No se hizo esperar
su intervendón, porque a poco hallé la al­
haja perdida, por lo que públicamente le doy
gracias y le envío una limosna para su bea­
tificación.—Señora de Charlo.

-

29

d3ocaé- paMi imca(>i(me4- SaloManaa«El mejor premio que Dios concede o uno famiiio es un hijo sacerdote:» (Don Bosco)

Beca «María Auxiliadora» (Archicofradía-Santan-

do. d S a A c e ía 'K a

der).—Total: 6.000 pesetas.

P. P r o v in c lo li P a t e o S a n J u a n B osco , 7A. B a rc e lo n a .

D. luán Gonzalo).—Total: 15.000 pesetas

BECAS EN FORMACIÓN

Bt'ca *l\ MiulU'l Riera». Colegio Tarrasa.

18.698 pesetas.

Beca «Francisco Tierra». Burceña.—T.: 6.500 pts.
Beca «San Juan Bosco*. Baracaldo (promovida por

Total:

Beca tM u y Rvdo. D. Florencio Sánchez». Total:

Beca «Sres. de Uda Etye». Bilbao.—T.: 12.000 pts.
Beca «Inmaculada Concepción». Bilbao. J. L. M

500 pesetas.

7.600 pesetas.
Beca .sacerdotal *Mar¡a Antonia Porta de Darán»

da Qáfvd^ía

Total: 6.000 pesetas.
Beca »Doña Dorotea de Chopitea». AA. SS. de

Rocafort.- Total: 27.000 pesetas.
»Sta. Emilia». Total: 25.000 pesetas.
tSan Juan Bosco». Total: 15.050 pesetas.
fRoselló Estela». Total: 20.000 pesetas.
itSan Fernando». Residencia de Huesca.—To­
tal: 25.000 pesetas.
Beca *Maria Francisca». Total: 10.000 pesetas.
Beca ^Domingo Savio», de los Círculos de la Ins­
pectoría.—Total: 15.000 pesetas.
Beca «¿).“ Bibiana Sodas». —Total: 6.000 pesetas.
Beca tMaría /l«.v/7ía</ora». Sarriá.—T.: 5.000 pts.
Beca «£). Rafael Cerdá». Mataró.—T.: 2.000 pts.
Beca <^D. José Recasens».- T otal: 4.199.60 pesetas.
Beca <>Cooperadores salesianos» de Horta. Primera
entrega: 5.000 pesetas.
Beca
Beca
Beca
Beca

P. P ro v in c ia l: C a lla M . " A u x ilia d o r a , 14. C ó r d o b a .

BECAS EN FORMACIÓN

Beca «D. Vicente Reyes». Córdoba.—Total; 2.00o

pesetas.

Beca «Familia D. Francisco Aneas». Granada.—

Total: 64.528 pesetas.

Beca «Nicolás Rodríguez». Las Palmas (G. C.).-

Total; 2.100 pesetas.

Beca «Familia Lara».—Total: 800 pesetas.
Beca «Ntra. Sra. del Pino». (Por las Compañías

de la J. Salesiana.) Teror.—Total; 25.000 pts.
Beca «D. Antonio Espinosa». Sta. Cruz de Teneri­

fe.—^Total: 25.000 pesetas.
Seca «S. José y Ntra. Sra. de Montserrat». Gra­

nada.- Total: 4.500 pesetas.
Beca «San José», iniciada por doña Carmen Cabre­

JMpacéafíía dU álilíao
P. P r o v ín c ia li E sc u e la s S a le s ia n o s . D e u sto B ilb a o .

BECAS EN FORMACIÓN

Beca *Mamá Margarita». Leandro Cañada.—To­

tal : 3.500 pesetas.
Beca «San Andrés». Escuela de Agricultura (Bur­

gos).—Total: 1.327,35 pesetas.
Beca «Nuestros mártires». Zuazo.—T .: 18.409 pts.
Beca «María Afixiliadora». D. R. G. R.—Total:

10.000 pesetas.
Beca «San Paulino». Baracaldo.- T.: 20.175 pts
Beca «Archicofradia de María Au.xiliadora». Ba­

racaldo. -Total: 19.650 pesetas.
Beca «D. Pedro Olivazzo». Baracaldo.

Total
12.000 pesetas.
Beca I O. Eduardo Caprani». Baracaldo.—Total
4.925 pesetas.
Beca «D. Enrique Sáiz». A.
(Burgos).—Total
17.779 pesetas.
Beca «María Auxiliadora II». Asociaciones y Archicofradías de Pamplona.—T .: 20.000 pesetas.
Beca «Alfonso Gómez Pineda». Pamplona.—Total.
5.000 pesetas.
Beca «Virgen del Castillo». El Royo.—T.: 6.000 pts.
Beca «Santo Domingo Savio». (Santander-Compañfas.)—Total: 13.500 pesetas.
Beca «San José Obrero». (Industriales-Santander.)
Total: 10.000 pesetas.

.^0 -

ra Bueno en nombre de sus nietos. Pozoblanco.
Total: 4.000 pesetas.
Beca «Mártires de Pozoblanco». Total; 6.500 pts.
Beca «Ntra. Sra. de Luna». Pozoblanco. -Total;
5.000 pesetas.
Beca perpetua «D. José María Manfredini». Gra­
nada.--Tota!: 32.000 pesetas.
Beca «D. Sebastián María Pastor». Córdoba.—To­
tal : 3.765 pesetas.
Beca «María Auxiliadora», por don Antonio Royán A. A.—Total: 10.800 pesetas
Beca «Familia Muñoz». Córdoba.—T.: 9.000 pts
Beca «San Rafael». Córdoba.- -Total: 16.737 pts.
Beca «Rafael Moure Ríos». Escuelas Populares
Saicsianas. -Total: 7.000 pesetas.
Beca «S. Juan Bautista». Córdoba.—T .: 5.000 pts
Beca «María Auxiliadora», por la familia Góme?
Briasco. Granada.—Total: 8.000 pesetas.
Beca «Sra. F. Peña». Málaga.—T.: 12.000 pts.
Beca «María Auxiliadora». Por un Cooperador
Málaga.—Total: 2.000 pesetas.
Beca «Montilla». Montilla (Córdoba).—Total
25.000 pesetas.
Beca «San Miguel». Montilla (Córdoba).—Total
21.300 pesetas.
Beca «Familia Vargas». Ronda (Málaga).—^Total
10.000 pesetas.
Beca «Sto. Domingo Savio» (Escuelas Sta. Teresa).
Ronda (Málaga).—^Total: 2.700 pesetas.
Beca «Doña .María». Las Palmas (Gran Canaria).
Total: 3.700 pesetas.

Beca uSgdo. Corazón». Las Palmas (Gran Canaria)

Total: 13.000 pesetas.
Beca ^Manuel Marrero». Las Palmas (Gran Ca­

naria).—Total: 1.500 pesetas.
Beca fSanro Domingo Savio». Compañías Salesia

ñas. Sta. Cruz de Tenerife.—T .: 12.000 pts.
Beca *Sta. Cruz de Tenerife» (Primera). Sta. Cruz

de Tenerife.—Total: 25.000 pesetas.
Beca <iSía. Cruz de Tenerife» (Segunda). Sta. Cruz
de Tenerife.—Total: 25.000 pesetas.
Beca «5/a. Cruz de Tenerife» (Casa). Sta. Cruz de
Tenerife.—Total: 6.800.
Beca «Sania Teresa de Jesús». Granada.—Total:
4.500 pesetas.
Beca «D. José Marta Doblado», por un sacerdote
antiguo alumno.—Total: 5.000 pesetas.
Beca «Parroquia Sta. Catalina». Las Palmas—To­
tal: 24.720 ptas.
Beca «Sto Domingo Savio». Compañías J. S. Las
Palmas.—^Total: 2.500 pesetas.
Beca «D. Bernardo López». Córdoba.—Total:
3.000 ptas.
Beca «C. L. M.-S. C. B.» Málaga.—Total: 40.00<^
pesetas.
Beca «Manuel Hernández».—Total: 6.000 pesetas.
Beca «Doña Pura Bermúdez». Málaga.—Total:
17.500 pesetas.

Beca «Vicente travedra».—^T.: 5.000 pts.
Beca «A. y G .»—T .: 5.000 pts.
Beca «D. Felipe Hernández». AA. de La Paloma

(Madrid).—Total: 8.328 pesetas.
Beca «Pío X¡¡». Padres de familia. Villaami!. Ma

drid.—T.: 5.500 pts.
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca

«Sta. Teresa y S. Vicente».—T.: 43.000 pts.
«Viuda de Pujadas».—Total: 4.000 pesetas.
«Fuentes Bajo».—T.: 28.000 pts.
«N. N.» —T .: 6.000 pts.
«Sánchez Blanco»,—T .: 10.000 pts.
«D. Félix González». Dofia Isabel López di-

Pardo.--Total: 2.000 pesetas.
Beca «F. de B.» Béjar.—T.: 5.000 pts.
Beca «D. Francisco Fuentes». AA. de Ubeda -T o ­

tal : 36.000 pesetas.

Beca «Niño Jesús y María Auxiliadora».—Total’

16.509,50 pts.
Beca de «San Luis Gonzaga».—Total: 25.000 pts.
Beca «Vitgen de Vilna». Total: 4.500 pesetas.
Beca «María Auxiliadora». Guadalajara.—^Total;

500 ptas.
Beca «Ludezu». Nueva entrega: 29.000.—Total:

40.000 pesetas.

J'pié/pecix^ia do. SodUlta
P. P ro v in c ia l: C a lle M.° A u x ilia d o r a , 18. S e v illa .

Inápacicma d& Wladh.id
P. P ro v in c ia l: P a s e o G r a l. P rim o d e R iv e ra , 2 5 . M a d r id

BECAS COMPLETAS

Beca «Familia de D. José M árquez »-—Tota!:

30.000 pesetas.

BECAS COMPLETAS

Una devota de María Auxiliadora, de Atocha:

30.000 pesetas.

BECAS EN FORMACIÓN

Beca «D. Juan Torres*. Jerez.—^Total; 20.000 pts
Beca «D. Antonio Marcolungo». Sevilla.—^Tota!.

25.770 pesetas.
BECAS EN FORMACIÓN

Beca «Corpus Christi». Srta. Joaquina Quintana.

Beca sacerdotal «Don Juan».—T.: 15.000 pts.
Beca «D. Anastasio Garzón». Atocha AA. AA.--

Beca «D. Pedro Ricaldone». Sevilla.—Total: 2.5'0

Sevilla.—Total. 4.530 pesetas.
T.: 10.055 pts.
Beca «Ntra. Sra. de las Angustias». Arévalo.-

T.: 21.000 pts.
Beca «Cuarta Beca del Sagrado Corazón». De va­

rios.—T.: 21.987 pts.
Beca «Santo Domingo Savio». Oratorio .Sto. Do­

mingo Savio (San Blas).—T .: 15.306 pts.
Beca «María Auxiliadora» Salamanca. Colegio.T.: 6.300 pts.
Beca «San Juan Bosco». A. G.—T .: 350 pts.
Beca «Doña Carmen Olalla».—T .: 20.000 pts.
Beca «Sierva de Dios Doña Laura Vicuña». Carabanchel y Teologado Salesiano.—T .: 22.000 pts.
Beca «María Auxiliadora». Segunda. Atocha.r.: 15.000 pts.
Beca «San José Obrero». Colegio de S. Femando
y .Aspirantes Coadjutores.—T.: 7.500 pts.
Beca «Escuela Automovilismo».—T.: 20.000 pts.
Beca «Saniisima Trinidad». Escuela de Automovi­
lismo.—T .: 15.000 pts.
Beca «D. Buenaventura Roca». Béjar.—T .: 5.000
pesetas.
Beca «Santiago Apóstol». La Paloma. Un A. A.—
T.: U.OOO'pts.
Beca «A. Roldan v Familia».—^T.: 20.000 pesetas.

pesetas.
Beca «Colegio Salesiano de Ecija». Entrega, I.OO!’

pesetas.
Beca *D. José Canal». Universidad Laboral. Sevi­

lla.--Total: I5.(W0 pesetas.
Beca «Sagrado Corazón». Una Cooperadora. Utre­

ra.—Total: 63.000 pesetas.
Beca «Santiago Apóstol». Cádiz.—T .: 12.500 pts.
Beca «Sgdo. Corazón de Jesús». Herederos de doña

Salvadora García.—Total: 10.000 pesetas.
Beca «D. Rafael Romero». San José de! Valle.-

Total: 5.913 pesetas.
Beca
Beca
Beca
Beca

«Dona Josefa Rodríguez».—T .; 2.000 pts.
«D. Gregorio Ferro». Total: 25.000 pesetas
«D. Andrés Yun». Algcciras.—T.: 5.000 pts.
«Virgen del Carmen». Puerto Real.—T o ¿ l:

16.000 pesetas.
Beca «P. Agustín Nofre». Utrera.—T.: 21.810 pts
Beca «Colegio Salesiano San Pedro». Sevilla.—To­

tal : 1.CKX) pesetas.
Beca «Francisco Alcalá Viva». Morón.—Total:

5.000 pesetas.
Beca «Virgen del Rocío». Sevilla.—Total: 15.000

pesetas.
Beca «Ntra. Sra. del Sagrado Corazón». Mofón.-

Total: 2.000 pesetas.

-

3)

Beca tConsejo ¡fxspecwñal de Cooperadores». To­

tal: 15.000 ptas.
Beca tVirgen N. S. de la Esperanza, de la Trinidad»

Sevilla.—T otal: 750 pesetas.
Beca •Colegio Salesiano de Mérida».—T : 20.000

pesetas.
Beca •Archicofradía María Auxiliadora». Puerto

Real.—Total 3.000 pesetas.
Beca •Maestro Pagés». Cádiz.—-Total: 13.295,30
pesetas.
Beca •?■ Clemente Cuede». Cádiz.—Total: 3.95'^
pesetas.
Beca •D. Fermín Molpeceres», de Carmona. Nue­
va entrega: 500 pesetas.—Total: 6.600 pesetas.
Beca •S. Juan Basco». Cáceres. Nueva entrega:
2.000 ptas. -Total: 12.000 pesetas.
Beca •Inmaculada Concepción». La Línea (Cádiz).
Primera entrega: 500 pesetas.

Beca aMaria Auxiliadora». Vigo. Hogar.—Total:

5.000 pesetas.
Beca aD. Ernesto Armelles». La Coruña. Colegio.

Total: 10.500 pesetas.
Beca aSan Benito». Allariz.—Total: 22.100 ptas
Beca aD. Pedro Olivazzo». Astudillo.—Total; 7.939

pesetas.
Beca aDoña Lucía Bechade». Cambados.—Total;

12.250 pesetas.
Beca aSanto Domingo Savio». Cambados.—Total:

14.500 pesetas.
Beca aD. Emilio Montero». Orense. Nueva entrega.

500.—Total: 11.000 pesetas.
Beca aD. José Saburido». Orense.—Total; 15.929

pesetas.
Beca aDomingo Savio». León.—Total: 11.355 pts.
Beca aNtra. Sra. de Covadonga». Tudcla. Veguín.

Total: 3.000 pesetas.
Beca tSan José». Compañías de Zamora. Nueva

entrega, 1.250.—Total: 11.000 pesetas.
Beca aJorge Irisarri». Estudiantes de Zamora.—To­
P. P ro v in c ia l! U n lv o r t id a d L a b o ra l. Z a m o ra .
Br.CAS PERPETUAS

Beca perpetua •María Auxiliadora». Una señora,

bienhechora de las Obras salesianas. Portonovo.
Total: 50.000 pesetas.
Beca perpetua «5. Juan Bosco». Una bienhechora
de las vocaciones salesianas. Portonovo.—Total:
50.000 pesetas.

tal : 7.250 pesetas.
Beca aMaria Auxiliadora». Archicofradía de Za­

mora. N. e .: 1.000.—Total: 7.500 pesetas.
Beca aCirculo Domingo Savio». Zamora.—Total'

14.000 pesetas.
Beca aSan León Magno». Jubileo Oro D. L. Car-

tosio. Zamora.—^Total: 22.500 pesetas.
Beca aMaria Auxiliadora». Celanova.—T.; 2.000

pesetas.
Beca aSanto Domingo Savio». Aviles.—Total:

4.600 pesetas.
BECAS EN FORMACIÓN

Beca •Santa Lucía». Vigo-San Matías.—Total:

34.000 pesetas.
Beca «P. Miguel Salgado». Vigo. San Matías. Nue­

va entrega, 900 ptas.—Total: 16.050 pesetas.
ñeca •S. José». Vigo. San Matías. Primera entre­
ga. 5.000 pesetas.
Beca •Santo Domingo Savio». Vigo. San Matías.
Nueva entrega. 4.000 ptas.—-Total: 8.500 ptas.
Beca «£). Tomás Bussons». Vigo. San Matías.Total: 10.000 pesetas.
Beca aMaria Auxiliadora». Vigo. San Matías.—
Total: 28.135 pesetas.
Beca tCooperadores Cánido». Vigo. San Matfas.Total: 4.000 pesetas.
Beca aSan Pedro», por María y María. Vigo. San
Matías.—^Total; 30.000 pesetas.
Beca aSan Cristóbal». Vigo. San Matías. -Total:
3.000 pesetas.
Beca •San Juan Bosco». Vigo. Hogar. Nueva en­
trega. 3.000.- -Total: 7.000 pesetas.
Beca aCeferino Namuncuró». Vigo. Hogar.- -Total:
8.000 pesetas^

ln é ^ 2 0 c i( P i,ia dU U a l d n d a
P. P ro v in c ia l! C a lle d e S a g u n t o , 212. V a le n e lo .

BECAS COMPLETAS

Beca aVirgen de las Virtudes». Colegio de Villena.

Total: 30.000 pesetas.
BECAS EN FORMACIÓN

Beca tJesús Mendivil», de Valencia. Nueva entrega.

5.000 ptas.—Total: 10.000 pesetas.
Beca aAzul .v Rosa». Institución Sindical de For­

mación Profesional San Vicente Ferrer. de Va­
lencia. Primera entrega Capillas Domiciliarias:
1.200 pesetas.
Beca aClrculo Domingo Savio». Valencia. San
Antonio. -T otal; 10.703 pesetas.
Beca aSan José». Alicante.—Total: 10.000 pts.
( S ig u e e n la p á g in a 2)

Fecha
1963.09