BS_1945_06

Ficha

Título
BS_1945_06
Descripción
Boletín Salesiano. Junio 1945
extracted text
C A T O L I C O S
inscribios» en la Pía Unión de los Cooperadores Salesíanos
Es un m e d io prácU cu ;y fa c ilís im o d e salvai- m iic h a s í a lm a s , d e le g e iie j'iir la ju v e n t u d y e n r iq u e c e rs e d e m érit,os p a ra la; o t r a v id a . .

La Pía Unión e s , una libre asociación de ñeles de cualquier clase', y - condición, «lue se oldigan'de un modo especial a hácer el bien a la sociedad
por medio de obras de be|ieflcericia en favor de la juventud pobre y^ab.nn(ionudu.
'
'
. s
^
in g r e s a n d o en e lla no se c o n t r a e , n in g u n a o b lig a c ió n d e con cien cü í', y
p o r lo m is m o p u e d e n stjr c o o p era d o res, fa in ili.r s e n tera s, (> > m u n íd a d ra 'R é V '
;

lig io s a s , C o le g io s ,- e t c .
'•
•.
.
r
E l n ú m e ro d e los C o o p e r a d o r e s jm sa a c lu id in e n le . d e los q u in ie u td s m il.

CONDICIONES R EQ U ER ID A S:
I.
b.
'.3.

■* <

Tenor dieciséis años cumplidos.
; , .
'
Gozar de buena reputación religiosa y social.
-■*
_
.
Hallarse en condiciones^ do poder ayudar, por .<t.o. pór otros,
(dones, donativos, limosnas ó traliajos/'las-Obras de' Congregación
lesiana o del Inslitnto de las Hijas de IViín’íá ÁuxiliadoriC ' .
r

,

CEN TR O S D E IN SCRIPCIO N :

T E Z S O R O

E S P IR IT U A L -

Los Cooperadores que, habiendo confesa-.
y c(»nuIgado, visiten una iglesia u ora­
torio público <Ios religiosos y religiosas la
suya privada >. y receií allí segim la inten­
ción del Sumo Pontífice, pueden ganar:
INDU1X3ENCIA P L E N A R IA
l _ E i día en que dan su nombre a la Pía
Unión de los C oi^ m d ores.
i —El día en que por primera vez se con­
sagran al Sagnvdo Coi'azón de Jesi'is.
3.—Todas las veces que durante ocho días
hagan Ejercicios Espirituales.
• 4.-~En punto de muerte si confesados y
comulgados, o al menos con corazón con-

o o r ^

trito. -invbcai'en devotamente el Nombrdf
Jesús c o n 'la boca, "y. si no pueden,_ ’c « j . ^
corazón.
Cada mes:.'
1. —
dí a - a ' s ( ^l e c c i ó n, —
;* --5
2. —El día ¿n qué" hacen él E jó rc i(^ dé
Buena Muerte.
. . ’ , .
3. - - E l día én que asisten a iá..-eonfcréncia
Mensual Salesiana.
^.

Jun io: 8. Sagrado Goi^zón de Jesús:
Sagmdo Corazón, de. M aría: 24, San Juan
Bautista; 29. San Ptóro, y 30, Conmemo­
ración de San Pablo.
;
J u lio : 1, P reciosísin » Sangre" de Nueáfco
Señor Jesucristo; 2. Visitación de Nuestra
Señora, y 16. Nuestra Señora del Cam rai.

í5 0 5 ^ c :o

ORGANO O FIC IA L DE LA FED ERA CIO N NACIONAL DE
ANTIGUOS ALUMNOS SA LESIA N O S
Direcoión y Administración:

Fernanflor, 8 • MADRID

R E V I S T A DE
LAS OBRAS DE
DON BOSCO
Redacción

y

8 0 l ETI N
AlESIANO
Administración: .Alcalá,

164.

Apartado

A N O LV I I I
J U N I O 1945
N U M E R O

9134. • M A D R ID

S U M A R IO :
“ Tibí dabo” . — Efem érides'seculaxes: D on Sosco en 1845... — Noticiario. — La
Sierva de Dios doña Dorotea de Chopitea.— ^La madre de San Juan Sosco.—
Crónica de gracias.—In memoriam.

í

í

Tíbi

ON insistencia muy intencionada
venimos desde hace unos meses
recordando a nuestros lectores, ya
una manera, ya de otra, la Obra del
Tem plo Nacional Expiatorio al Sa­
grado Corazón de Jesús en el Tibidabo.
A fin de explicar el p o r q u é de
nuestra insistencia, y c o n objeto de
honrar en este mes de junio al Sacra­
tísimo Corazón de Jesús con las pági­
nas de h o n o r de nuestra revista,
vamos a permitirnos una extensión
mayor que la ordinaria sobre dicho
argumento.
El origen del Templo Nacional Ex­
piatorio del Tibidabo es harto cono­
cido por nuestros lectores para que
precisemos tejer con detalle su histo­
ria, que se resume recordando cómo,
viniendo d o n Bosco a España el
año 1886, le parecía oír úna voz que
le decía: «T ib i dabo» (palabras lati­
nas que significan «te daré»), y cómo,
al mes de estar en nuestra Patria, fué
el Santo a postrarse a los pies de la
Santísima Virgen de la Merced, Patrona de Barcelona, y allí, los señores
propietarios de la cumbre del monte
que doftiina la Ciudad Condal, le hi­
cieron donación de dicha cumbre pa­
ra que en ella levantara una capilla

C

dabo^^
al Sagrado Corazón de Jesús. «Cató­
licos barceloneses— exclamó conmovi­
do don Bosco,— vosotros sois en estos
de
instantes instrumento de la Divina
Misericordia. Sobre el Tibidabo se al­
zará no una ermita, sino un templo
que dará mucha gloria a Dios y velará
por la recia y tradicional fe del cató­
lico pueblo español.»
Comencemos por estas palabras del
Santo la meditación que intentamos
hacer a la par con nuestros lectores...
«Vosotros sois instrumento de la M i­
sericordia Divina.» Es decir, q u e el
Tem plo del Tibidabo es una miseri­
cordia de Dios sobre España. ¿ P o r
qué? LfO dice el mismo don Bosco con
las palabras que siguen: Primero:
« S o b r e el Tibidabo se alzará... un
suntuoso templo que dará mucha glo­
ria a Dios.» ¿Lo oís, lectores?... Es una
misericordia de Dios, es una bondad
de su Corazón la que concede a nues­
tra Patria de poderle dar «mucha glo­
ria». «Omnia propter seipsum operatus est Deus: Dios creó todas las co­
sas para su gloria». El simple hecho
de ser creada es un honor para toda
criatura.
Ahora bien, este h o n o r sube de
punto cuando Dios quiere que un ser
(individual o colectivo) contribuya de
— 103

e

Por nuestra salvación bajó del Cielo
un modo especial a la g l o r i a del
a la tierra».
Creador.
»
Para gloria de Dios ha de ser el
T al es el caso de España. Sobre ese
Templo Nacional Expiatorio del T ib i­
m o n t e del Tibidabo «se alzará un
templo q u e dará mucha gloria* a dabo, y para «velar la recia y tradi­
cional fe del católico pueblo español».
Dios».
Que el Sacratísimo Corazón de Je­
Y ved cuán bueno es el Señor, que
s ú s ha prometido reinar en España
ha hecho que mucho antes de que se
con más predilección es cosa que no
cumpliera la primera parte de la pro­
podemos dudar; y de que su promesa
fecía (cumplimiento que pende y de­
se e s t á cumpliendo, tampoco. Y no
pende en gran manera de nuestra vo­
se traigan a cuento para afirmar lo
luntad) ha comenzado El a cumplir la
contrario sucesos pasados, presentes
segunda, es decir, que ya el Templo
, en la memoria de muchos, pues si
en construcción ha dado mucha glo­
ahondamos en su consideración, ve­
ria al Sacratísimo Corazón de Jesús.
remos que el Señor, en el peor de los
Porque a la mayor gloria de Dios son
casos, nos ha tratado como trataba al
esos cientos ’y esos miles de sacrifi­
pueblo hebreo cuando e r a «su pue­
cios, grandes u n o s , pequeños otros,
blo»; es decir, ha venido «in virga fé­
todos hechos enormes por la hum il­
rrea» a corregirnos para despertarnos
dad y por la intensidad del amor con
del letargo, para castigar nuestras in­
que los han llevado a cabo toda suer­ gratitudes, para quemar «aquí» y no
te de personas: ricos, acomodados, po­ tener, que quemar «allá». Y así como
bres y aun pobrísimos; aristócratas y
1a Escritura sigue llamando pueblo
gente del pueblo; celebridades del ar­ escogido de Dios al pueblo hebreo aun
te y de ia ciencia, y sencillos e igno­ después de s u s infidelidades, así el
rantes; ancianos que declinan rápidos
Corazón de Jesús reina en España a
hacia el ocaso de su vida y candorosos
pesar de las nuestras, cumpliendo su
e inocentes niños... ¡Todo cuanto se
generosísima promesa.
diga acerca de la grandeza del sacri­
P o r lo demás, hemos de recordar
ficio hecho por Dios es poco! ¡Oh y
que Cristo fué Rey coronado de espi­
qué grandeza la de ese Templo colo­
nas... ¿Qué mucho si de cuando en.
sal hecho de sacrificios por amor a cuando nos asemejamos un p o c o a
Dios!...
nuestro Rey?
Cristo, Rey de pueblos y naciones,
El Sagrado Corazón de Jesús vela­
puede mostrar a todos sus enemigos
rá desde el Templo Nacional Expia­
su trono y alcázar del Tibidabo y de­
torio del Tibidabo por la recia y tra­
cirles: — ¿Quién de vosotros p o d r á
dicional fe del católico pueblo espa­
ufanarse de tener por pedestal de su
ñol. Este es, lectores, el reinado que
gloria un palacio cuyas piedras se han
debemos pedir y anhelar: la conser­
tallado a golpes de mortificación ocul­
vación y aumento de la Fe, de las
ta para trabarse luego con cemento
virtudes cristianas de nuestro pueblo.
amasado con sangre de corazones ren­
En esto consiste la felicidad y la ver­
didos?
dadera grandeza de 1o s pueblos, y
Segundo: «...vela rá — sigue diciendo
más la felicidad y la grandeza d e l
don Hosco—por la recia y tradicional
pueblo español, cuya misión es dar al
fe del católico pueblo español.» He
mundo una lección constante de hom­
aquí otra gran misericordia de Dios.
bría, de honradez, de sano idealismo.
Nos creó para su gloria y... ¡para
«T ib i dabo»: Te daré... Estas pala­
nuestra felicidad! «Todas las cosas las
bras las pronunció el demonio al ten­
hizo Dios para su gloria». Esto es de tar a Cristo por tercera vez mostrán­
dole desde la cumbre de un elevado
Fe. Pero también lo es que «Propter
monte los reinos de la tierra. Estas
noslram saiutem descendit de coelis:
104 —

Estado de las obras del Tem plo NaciOTial Expiatorio dél Tibidabo- en él año 1936. A la
derecha puede verse la prim era capilUta i X ) coTistruida poco después de la partida
de San Juan Bosco de Barcelona.

palabras las digniñcó el Señor al su­
surrarlas al oído de San Juan Bosco
y prometerle a él, a su Congregación
y al pueblo español esta misericordia
de un magnífico Templo, foco de glo­
ria, manantial de sus bendiciones.
¿Y nosotros? ¿No deberemos acaso
pronunciar también e s t a s palabras:
«T e daré»? Sí, también. Y a han sido
muchos los españoles que las han di­
cho y cumplido: «T e d a r é , ¡oh Se­
ñor!, el grano de arena de mi sacri­
ficio oculto, abnegado, humilde, in­
tenso... para tu trono, para tu alcázar

regio del Tem plo Nacional Expiato­
rio del Tibidabo.» Sus nombres están
escritos con letras de oro en el Cora­
zón Sacratísimo de Jesús.
Otros han ya pronunciado con re­
solución la promesa: «T e daré.» ¡Ani­
mo! ¡A cumplirla tocan! Dios n o 'se
deja ganar en generosidad por nadie.
Intesifiquemos de un modo especial
en este mes de junio nuestras súpli­
cas al Corazón Divino de Jesús para
que se digne apresurar su triunfo de­
finitivo y completo en la alta curnlire
del Tibidabo.

— 105

EFEMERIDES SECULARES
D o n

B o s c o

pesar de que el Municipio no dio gran
crédito a las acusaciones lanzadas por
don Tesio contra don Bosco y sus mucha­
chos, no permitió, sin embargo, que volvie­
ran a reunirse más en el Cementerio de
San Pedro.

A

Acudió entonces el Santo a su gran ami­
go y protector el Arzobispo Mons. Pi-ansoni,
y por recomendación de éste se le otorgó li­
cencia para llevar a sus jóvenes a los lla­
mados Molassi o Molinos, situados en la pla­
za Manuel Filiberto, junto al río Dora. Había
en dichos Molinos ima iglesia dedicada a
San M artín para uso de los molineros y em­
pleados, y en ella podría don Bosco cele­
brar las sagradas funciones para los oratorianos.

e n

1 8 4

5 . , .

El domingo I X después de Pascua, 13 de
julio de 1845, los muchachos de don Bosco
se reunieron por últim a vez en la capilla
de San Francisco de Sales para oír la San­
ta Misa, terminada la cual, el Santo Ies
dió la noticia del traslado, recomendándo­
les que después de comer acudieran todos
puntuales para trasladar a la nueva iglesia
los juegos y los objete» para el culto di­
vino.
Antes de partir, hablóles el Teólogo Borel
en los siguientes térm inos: —^Ei lugar que
vamos a abandonai* tiene que ser para nos­
otros como las hospederías en que el pere­
grino reposa durante el viaje para a p r e n ­
der en seguida de nuevo su camino. ¡ Animo,
pues, y en m archa! Seguid por doquiera y
constantemente a vuestro Oratorio en su
errante e incierto viajar... N o c » canséis. L a
Providencia hallará por fin rma sede esta­
ble para el Oratorio. Pero antes debéis vos­
otros hacerle una sede fija en vuestros co­
razones, sede sobre la que no puedan influir
las vicisitudes externas... Amad y practicad
la oración de la mañana y de la noche;
amad y frecuentad el catecism o; oíd la
Santa Misa todos los domingos...; id con
gusto a confesaros bien y a comulgar. Huid
de los que blasfeman, de los escandalosos,
dé los malhablados, que quisieran con sus
burlas alejam os de las cosas de iglesia. Si
asi lo hacéis, tendréis el Oratorio estable
en vuestro corazón. ¿Qué más?... ¡Adiós,
mis queridos hijos I
El Teólogo Borel se hallaba profundamen­
te conmovido, y tras ima breve pausa, ex­
clamó con energía: —Pero antes demos gra­
cias al Señor, que nos ha preparado en lo »
Molinos un nuevo asilo. Te Deum laudamus)
Calló el Teólogo, y a tma señal de don
Bosco, comenzó un movimiento indescripti­
ble y encantador a un tiempo. Quien echa
mano a un banco, quien a un reclinatorio;
éste carga scáire las espaldas u n a silla y
aquél un cuadro; uno lleva un candelero
y otro la cruz. Un muchacho tiene bajo el
brazo los manteles del altar, otro las vina­
jeras en la mano... Se ponen en marcha en
caravana como im pueblo emigrante y van
a plantar sus tiendas junto al Dora. L a cu­
riosidad producida por este movimiento sir­
vió para dar a conocer más y m ejor al Ora­
torio y atraerle más jovencitos.

Astado lamentable en que' quedó la Cripta
del Tem plo Nacional Expiatorio después de
la Revolución. El sacrificio de los buenos
ha reparado tantos estragos.
106 —

Llegados a los Molinos, entraron todos en
la iglesia, y don Bosco, con su seicillez y
« u buen donaire, más únicos que raros, le »
dirigió la palabra para decirles: —Las co­

les, amados hijos, no adquieren completo
desarrollo sino después de trasplantadas. Es­
to es lo que ha- sucedido con nuestro Ora­
torio. Hemos to iid o que ti^ ^ la n ta rlo varias
veces; pero en cada ocasión ha arraigado
con mayor fuerza. N o ha sido inútil el tiem­
po que habéis pasado en e l R efiigio; allí,
asi como en la iglesia de San Francisco de
Asís, nada os h a faltad o: Asistíais a vues­
tro Catecismo, teníais vuestros sermoncitos
y cuantas diversicmes pudierais desear; sin
contar con la gran comodidad de p o d e r
atender a vuestras prácticas de piedad. En
el R e fir ió poseíamos un verdadero Orato­
rio : teníamos a n u e ' s t r a disposición una
magnífica iglesia en un lugar conveniente­
mente retirado. Creíamos haber encontrado
un sitio del que podríamos disfrutar largo
tiempo y con paz y tranquilidad. Pero el
hombre propone y Dios dispone. Hace algún
tiempo que no tenemos sede estable. ¿Du­
rará mucho tiempo esta situación? N o lo sá­
beme». D e todos modos, es de esperar que,
como las coles trasplantadas, nuestro Ora­
torio vaya m ejorando; aumentará el núme­
ro de niños amantes de la virtud; crecerá
en vosotros e l amor s i canto, a la música,
y m uy pronto las clases, que ahora son tan
sólo dominicales, comenzarán a ser diarias.
N o debemos, por consiguiente, pasar pena.
Pongamos toda nuestra confianza en la bon­
dad del Señor. E l n<» bendice. El nos ayu­
da y nos socorre. El nos dará a su tiempo
un lugar en que podamos promover su ma­
yor gloria y atender al bien de nuestras al­
mas. Pero permitidme que os recuerde, hi­
jos míos, que las gracias del Señor son como
anillos de una hermosa cadena: están en­
lazadas rmas a otras. N o rompamos nos
otros esta cadena; aprovechémonos de las
primeras gracias y Dios nos concederá otras
muchas. Corresponded, por tanto, a los fi­
nes de este O ratorio; frecuentadlo, apren­

ded mucho. De este nmdo caminaréis de vir­
tud en virtud, y, con la gracia de Dios, lle­
garéis a ser buenos cristianos y hoiuados
ciudadanos.
(De las Memorias Biográficas,
Tom o I I , cap. X X X II,)

La reconstrucción de las ruinas ocasiOTiadas
por la Revolución ha retrasado la term ina­
ción total del grandioso templo del Ttbidabo.

SEÑ O R ES CO O PERAD O RES:
Entre las actividades ap>ostólicas llevadas a cabo con más entusias­
mo y tesón, y más recomendadas p>or San Juan Bosco, se hallan las

L E C T U R A S C A TO LICA S.
Leerlas, sostenerlas y propagarlas es una obra eminentemente so­
cial, benéfica y cristiana.
Consúltense las páginas tercera y cuarta de las cubiertas del BOLE­
T ÍN 3ALESIANO.
— 107

NOTI CI ARI O
Z a r a g o z a : Conferencia a los C oop e­
radores Salesianos.
(Entresacamos de una extensa crónica pu­
blicada por el diario de Zaragoza “E l N o ti­
ciero” en su número del lO-IV-45):
El pasado domingo, 8 de abril, a las once
y media de la mañana, y en el Teatro Prin­
cipal, tuvo lugar un acto-homenaje ofrecí-,
do por la Obra Salesiana en Zaragoza a sus
beneméritos Cooperadores.
Ocuparon la presidencia, entre otras, las
siguientes personalidades: lim o. Sr. Vicario
Oeneral del Arzobispado, doctor D. Hernán
Cortés, que ostentaba además la represen­
tación del Excmo. y Revmo. Sr. Arzobispo;
el Excmo. Sr. Alcalde de la ciudad, D. Fran­
cisco Caballero, y el lim o. Sr. Vicerrector de
la Universidad, doctor Iñiguez Almech.
Numerosísimo y selecto público llenaba to­
das las localidades del vasto salón.
Constituyó la parte central y más impor­
tante del acto la conferencia dada por el
Vocal de la Junta Técnica Nacional de Ac­
ción Católica y ex alcalde de Avila, d o n
Aresio González de la Vega, cuya presenta­
ción hizo el Director de la Casa Salesiana,
Rdo. D. Pedro EscurseU.
El ilustre conferenciante describió al au­
ditorio, en sus rasgos más esenciales, el per­
fil humano y la figura de apóstol de San
Juan Bosco y sus trabajos en favor de la
juventud o b r e r a , salpicando su peroración
con ejemplos y anécdotas de la vida del San­
to y con citas sumamente oportunas de los
últimos Romanos Pontífices. Presentó a don
Bosco como el hombre providencial, en or­
den a la cuestión obrera, de los tiempos
modernos, puesto que en las Escuelas por
él fxmdadas se form a la Juventud no sólo
moral y religiosamente, sino profesionalmen­
te también.
Habló a continuación con brevedad, pero
con gran elocuencia, el doctor D. Hernán
Cortés, quien, después de dedicar sentidas
alabanzas al conferenciante por su labor en
pro de la Religión y de la Patria, y glosar
algunas de las ideas por é l vertidas en la
conferencia, manifestó su firme esperanza
de que la Obra Salesiana, bajo la protec­
ción de la Santísima Vh^en del Pilar, será
fecimda en bienes de toda su suerte.
Finalmente, los niños del Oratorio Festi­
vo evocaron escénicamente momentos de la
vida de esta genial creación de San Juan
Bosco, y un grupo de Antiguos Ahimnos Sa­
lesianos puso en escena el cuadro misional
tit\ilado "E l llanto de un ángd".
108 —

El público aplaudió con ^ tu sia smo los
varios puntos del p rc ^ a m a y quedó com­
placidísimo del acto, a l que dió fin un him ­
no salesiano c o n acompañamiento de or­
questa.

R o n d a : L o s Antiguos Alum nos, G>operadores Salesianos.
El periódico local “Ronda” , en su número
del 22 de abril p. p., dedicaba un magnífico
•elogio al rasgo hermoso y digno de aplau­
so llevado a cabo por los Antiguos Alumnos
de aquella ciudad en favor de los niños que
se educan en las Escuelas Popxilares Salesianas de Santa Teresa.
En efecto , el día 9 de abril más de tres­
cientos escolares, 'vivarachos a l par que dis­
ciplinados, desfilaron por las calles de Ran­
da cantando alegres marchas infantiles y ai
son marcial de una muy acreditada banda
de trompetas. Iban a pasar -un día de cam­
po, generosamente costeado por la Asociar
ción local de Antiguos Alumnos Salesianos.
M eta de la excursión lo fué el Camijamento, galantanente cedido por el presti­
gioso Teniente Coronel D. José Gómez.
Los pequeños excursionistas fueron acogi­
dos con gran amabilidad p o r el Sargento
del Campamento y los soldados a sus ór­
denes, y después de la abundante y apeti­
tosa comida, fueron obsequiados además con
■un valioso regalo del acreditado industrial
D. Antonio Gómez Cabrera, a quien secxmdaron los Sres. D. Juan Peña, Pérez Urruti, Ortiz y Narváez.

A z c o it IA : Ciases Nocturnas de O rien­
tación Profesional.
E l 26 del pasado abril tuvo lugar en las
Escuelas Salesianas de Azcoltia im acto sen­
cillo, pero altamente significativo, como clau­
sura del Curso de las Clases Nocturnas de
Orientación Profesional.
Dichas clases hablan venido funcionando
con toda normalidad desde el mes de octu­
bre del pasado año en que se inaugiuaron;
y hay que decir, en honor de la verdad, que
la prueba h a dado los más halagüeños re­
sultados.
Los cincuenta y cinco jóvenes, cmnprendidos entre los dieciséis y veintiséis años,
fueran divididos, previo examen, en dos sec­
ciones dmominadas Curso Preparatorio y
Prim er Curso.

¡Qué hermoso era el verlos, después de
ocho horas de duro ta:abajo en sus respec­
tivos talleres o fábricas, asistir a las clases
con im a puntualidad y constancia admira­
bles, y tomar con verdadero interés el es­
tudio de las lecciones teóricas y las corres­
pondientes prácticas de taller!
T a l aplicación merecía una recompensa.
Por lo mismo, e l Utre. Ayuntamiento de la
Noble y Leal V illa de Azcoitia, queriaido
premiar la aplicación y constancia de esps
jóvenes, instituyó una serie de premios pa­
ra los alumnos que en los exámenes obtu­
vieran m ayor puntuación.
El 26 de abril el salón de actos de las
Escuelas Salesianas se hallaba profusamen­
te engalanado y en él se veían expuestos
los trabajos, dibujos y piezas de cada alum­
no, índice del trabajo realizado en el pre­
sente curso.
Los miembros del Iltre. Ayimtamiento y
demás personalidades invitadas examinaron
con gran detención los trabajos, y pudie­
ron comprobar e l adelanto realizado por los
alumnos.
En el mismo salón, y ante la numerosa
cxmcurr^icia, tomó la palabra e l Rdo. se­
ñor Director de las Escuelas Salesianas, don
Joaquín González, para m anifestar su sa­
tisfacción por el éxito alcanzado y agrade­
cer a l Iltre. Ayuntamiento el apoyo mate­
rial y moral prestado desde e l primer mo­
mento a la obra de las mencionadas Cla­
ses Nocturnas.
Uno de los alumnos leyó imas cuartillas
mostrando su gratitud a los Profesores y a
todos cuantos apoyan tan benéfica o b r a .

Fueron luego nombrados los alumnos que
habían obtenido mayor puntuación, los cua1^ fueron recibiendo de manos del señor
Alcalde e l correspondiente premio.
N o se p u e d e dejar de mencionar, por
gratitud y p>ara estímulo de todos, la simp>atia mostrada por algunos de los indus­
triales de la V illa hacia la obra al instituir
premios costeados, por la entidad que di­
rigen.

M á l a g a : En honor del Excm o y R e ­
verendísimo Sr. Obispo.
Con ocasión del onomástico del Excelen­
tísimo Sr. Obispo de la Diócesis de Málaga,
la Fam ilia Salesiana de aquella ciudad hlzole objeto de un sentido homenaje de gra­
titud y cariño.
Dicho homenaje tuvo lugar el día 25 de
abril, a las seis de la tarde, en el hermoso
patio del colegio.
Tom aron asiento en la presidencia, junto
al amadísimo Prelado, el Rdo. D. Luis Pe­
ña, Director de la Casa Salesiana; el Su­
perior de l o s Hermanos Hospitalarios de
San Juan de Dios, el Secretario del señor
Obispo, e l Presidente de los Antiguos Alxunnos Salesianos, D. Francisco Escassi, con va­
rios miembros de la Junta de la Asociación,
etcétera. Ocupaba también puesto de honor
la Junta en pleno de la Archicofradía de
María Auxiliadora.
El Excmo. y Re\mio. Sr. Obispo hizo su
entrada en el patio enti*e los aplausos del

G erona. — N utrido grupo de jóvenes Salesianos, estudiantes de Filosofía, que se prepa­
ran a comenzar en breve su apostolado en medio de los niños. Pidamos al Señor que
les conserve su vocación entusiasta y que aumente su número.

100

nm nerow publico y a l son de un pasodoble
ejecutado por la Banda de música, mien­
tras repicaban alegrem aite las campanas
Cantado el himno del Colegio, el Salesiáno D. R afael Ureña pronimció entusiastas
palabras de ofrecimiento y glosó el lema del
^ u d o de armas dei Sr. Obispo: Om m ia et
in ommibus Christus, trazando
parale­
lo con el lema salesiano:. D a m ih i animas
caetera talle. A continuación desarrollóse mí
selecto programa cuyos números principa­
l e s fu eron: “ M i cantar de Andalucía” y
“ Sentires” , diálc^os; “ Pescaero” , p r e g ó n
cantado por el alumno Enrique Naranjo, y
Saludo”, por D. Ramón M artín en nom­
bre de la Asociación de Antiguos Alumnos.
El Excmo. y Revmo. Sr. Obispo, después
de dirigir emocionadas palabras de afecto a
t o d o s los presentes, impartió su pastoral
bendición abandonando la Casa Salesiana a
los. b o rd e s de la banda y entre los aplau­
sos de toda la concurrencia.

G e r o n a : Trid u o de Preparación al
M es de María.
Los días 27, 28 y 29 del mes de abril, a
las siete y media de la tarde, tuvo lugar
en la antigua Colegiata de San FéUx de Ge­
rona un solemne Triduo de preparación al
Mes de M a r í a Auxiliadora. Corrieron los
sermones a cargo del Rdo. D. Manuel Almazán, S. S. Asistieron al piadoso ejercicio
m anano la Comunidad Salesiana, alumnos
y Antiguos Alumnos del Colegio, Archicofradía de M aría Auxiliadora y numerosos
fieles en general, que quisieron así honrar
a la Virgen de don Bosco en im a ciudad y
provincia donde cuenta ya desde hace años
c<m muchos y fervientes devotos.
L a misa de Comunión celebrada el día 27
para pedir por el Papa y por la Iglesia se
vió grandemente concurrida.

A l ic a n t e : Nuevos Oratorios Festivo s.
(f?e ía hoja m ensm l "O ra torio de San
M iguel", de Orihuela, marzo de 1945):
A spe. — El Rvdo. Sr. Cura Párroco d o n
Tomás Rocamora ha fundado en la mencio­
nada e Industrial villa un Oratorio Festivo.
Los proyectos del Rvdo. Rocamora son her­
mosísimos. y Junto con la sección dominical
quiere establecer escuelas diurnas y noctur­
nas. (A n im o y no desfallezca!
C allosa de SEotmA.—También en esta in­
dustriosa ciudad será inaugurado en el pró­
xim o mayo el Oratorio Festivo de San Tarslclo. Los fimdadores de este Oratorio son
los ex alumnos salesianos señores Aragonés

lio —

l- v

concluido el Mes de María Auxi
desde el trono de su camarín, 1»
homenaje de sus fieles hijos, y sob
diciones.

H

a

Una vez más, con todo, debemos n
ñas que la devoción a María Auxiliador
revelada de un modo especial en estos
la Fe y la Religión de Jesucristo. Ho
necesita el pueblo cristiano del auxilio
Fe y salir victorioso de los ena\nados al
hijos de las tinieblas.
No debemos, pues, limitarnos, en m
nales del mes de mayo, sino que deben
nuestras necesidades y en las necesidad
nuestro .Auxilio. Propaguemos esta deve
tos que hablan de Ella, aconsejemos su
fermos y la conversión de los pecadores
remos— como decía don Roseo— qué co

y Lloret, maestros nacionales de la mencio­
nada localidad.
Tam bién se va a constituir la Asociación
de los Devotos de M aría Auxiladora.
El Oratorio Festivo es necesario en todo
pueblo. En nuestra Diócesis no debe haber
pueblo sin esta institución, con la que se
consiguen tantos beneficios para las almas,
para la sociedad y para la Iglesia.

A r g e n t in a : L a labor Salesiana en la
República del Plata.
P o r c a r t a particular sabemos que las
Obras Salesianas en la República Argenti­
n a siguen su floreciente desarrollo en bien
de muchas almas. El actual Presidente de
la República es antiguo alumno del Orato­
rio Festivo, hacia cuyo apostolado ha dado
muestras recientes de gratitud y admira­
ción.
Ccm ocasión de la Ley de Enseñanza (ley
estrucUirada por e l CJooperador Salesiano y
biógrafo de don Bosco, Hugo Wast) el 87
por 100 de los niños argentinos pidieron
la supresión de la enseñanza laica. Las Edi­
toriales salesianas se apresiiraron a proveer
de abundante material didáctico a las es­
cuelas gubernamentales. El 50 por 100 de
los sacerdotes profesores de Religión en Bue­
nos Aires son Salesianos.
En estos años se nota un gran incre­
mento en las vocaciones del país, y son nu­
merosos los jóvenes argentinos que abrazan
con entusiasmo la vida religiosa.

A r ÉVALO : L a s vocaciones Salesianas
ifi. La X^irgen Santísima ha recii)ido, bien
14 su paso triunfal por nuestras calles, el
eiéabrá dejado caer sus más escogidas benw y recordar desde estas modestas págiíique no es nueva en la Iglesia, ha sido
3 K)s en que, como nunca, es combatida
[o! is que en época alguna de su Historia,
o aria para poderse conservar firme en su
ai 5 que contra él dirigen el infierno y los
ni devoción a María, a los‘ festejos ocasio!ii inrarla de continuo y acudir a Ella en
ó lerales de la Iglesia llamándola con amor
ro salvadora, difundamos los libros y folleu la, encomendémosle la salud de los enjs si tenemos fe en María Auxiliadora, ven \ milagros.

y el Seminario Salesiano.
Sigue con toda intensidad en la Inspec­
toría Céltica la campaña a favor de las vo­
caciones y Seminarlo de Arévalo. A l llama­
miento lanzado por el M. Rdo. señor Inspec­
tor van respondiendo con toda generosidad
las diversas ramas de la Fam ilia Salesiana.
Se ha logrado la formación de varias be­
cas perpetuas. Son bastantes numerosas las
becas parciales. Puede decirse que ya no
hay Asociación de Antiguos Alumnos Salesidnos y Archicofradla de M aría Auxiliado­
ra que no tenga su becario entre los jovencitos y latinistas. L a misma labor e s t á n
realizando numersosos Cooperadores Salesianos.
Se organizan en los Colegios rifas, festi­
vales y otros actos para Incrementar los
ingresos en favor de las vocaciones y del
Seminario. Las obras de éste prosiguen con
rapidez. H aga el Señor sea pronto el pro­
yecto ccmsoladora realidad.


111

K
j A

si

E R V a

d

e

o í o s

Doña Dorotea de Chopitea
C O O P E IB A D O JB A

S - a L E S I A > 'A

rramar el bien, sino que pasó haciendo el
bien como dice el Evangelio.
H e aquí imo de los distintivos caracterís­
o d o s ios años acostumbraba doña Do­
ticos de la caridad cristiana frente al filanrotea a retü-arse a l Colegio del Sagra­
tropismo pagano antiguo y m oderno: éste
do Corazón de Sarriá para hacer los Ejerci­
da\ aquélla se da.
cios Espirituales dui-ante ocho días. De per­
Y vaya un ejem plo más para cerrar este
mitírnoslo el espacio traeríamos aquí para
capítulo. Padecía doña Dorotea una afec­
espiritual solaz y ediñcación de nuestros lec­
ción en los bronquios. Después de muchos
tores los ápimtes escritos por la Sierva de
consejos lograron convencerla que para sa­
Dios en semejantes ocasiones. Basten como
lir a la calle se cubriera el cu ¿lo con unas
muestra los propósitos que tomó en el
pieles. A l ir a comprarlas le pidieron por
año 1878. Dicen a s í:
ellas 25 pesetas. Quédase un momento pen­
Resoluciones tomadas durante los E jerci­
sativa y luego marcha sin hacer la com­
cios QV-e dió ei R. P. Cosía en él Sagrado
p ra; dirígese a una determinada casa, sube
Corazón de Jesús el año 1878: 1.* Será m i
a uno de los pisos altos, donde vive un
prim er cuidado él purificar m i intención en
enfermo pobre y le da de limosna los cin­
iodos mis actos. 2.» Abandonarme entera­
co duros y aun añade otros tres.
mente en los brazos del Señor poza que dis­
ponga de m i como le plazca. 3.» Tendré un
particular cuidado en hacer el examen dos
IX
veces al día. 4.» Procuraré, en cuanto me
sea posible, el bien tem poral y espiritual del
AM OS a referir sucintamente tres muer.
prójim o.—Sarriá, 30 de marzo de 1878.—Do­
tes ocurridas en el breve espacio de
rotea Chopitea de Serra.— Las cuatro rue­
dos años en el hc^ar de la Sierva de Dios,
das del coche que nos ha de llevar al Cielo
muertes que doña Dorotea sintió según la
son: la meditación, él examen, la confesión
medida de su sensibilísimo corazón, pero
y la comunión. Las cinco virtudes que Nues­
que sufrió con la resignación y conformi­
tro Señor Jesucristo ejerció en su vida ocul­
dad de quien en todas las cosas ve y quie­
ta fueron la Humildad, la Obediencia, la
re la volrmtad amorosa del S eñ or.'
Pobreza, la M ortificación y la Caridad.
Y fué la primera la de su hermana la
Sucedió en este mismo año un hecho que
religiosa de Nuestra Señora de los Angeles,
no podemos menos que dejar consignado.
Sor Juana, acaecida el 9 de marzo de 1880.
Hallándose con ocasión de la fiesta del Cor­
A l año siguiente murió de improviso don
pus en un pueblo de la costa. viÓ un mon­
Gustavo Gisbert, dejando a su esposa, hija
tón de escombros en una de las calles por
de doña Dorotea, viuda con seis hijos.
donde debía pasar la procesión, y como se
Aquel dechado de padres y esposos, digno
llegase la hora de ésta y ni las autorida­
consorte de la Sierva de D i o s , y que se
des ni el vecindario tomaran providencia
llamó don José M aría Serra. sintió a prin­
alguna para quitar aquel obstáculo, doña
cipios de 1882 im presentimiento tan claro
Dorotea pidió una azada y una espuerta y,
de su próximo fin, que a pesar de no ex­
ayudada por algunas de sus hijas, comen­
perimentar novedad alguna - notable en el
zó a quitar los escombros y a trasladarlos
estado de su salud, quiso prepararse con
a otro punto. Los vecinos entendieron la
tranquilidad y espacio al gran momento.
lección que. sin intención de ofenderles, sino
Para ello, dando xm admirable ejem plo de
con grande humildad y por puro amor al
prudencia y. más que de prudencia, de con­
Santísimo Sacramento, les daban aquellas
ciencia delicadísima, buscó xm sacerdote que
señoras de tanta posición y forasteras; y
a la virtud añadiese los conocimientos ne­
en un santiamén, con la cooperación de to­
cesarios para jxizgar en materia de contra­
dos. quedó la calle limpia.
taciones mercantiles, y dxirante muchos días
Con esta y con otras m il industrias cum­
celebró largas conferencias con él, repasan­
plía doña Dorotea su propósito de cuidar
do cuidadosamente los negocios llevados a
del bien espiritual del prójim o: poniendo
cabo por ver si en algxmo había tal vez po­
siempre de su parte la obra personal, ab­
dido perjudicar injxistamente l o s intereses
negada. hximilde. Imitando al divino Mode­
ajenos, si bien su conciencia no le reprolo. Jesucristo, que no se conformó con de{Continuación.)

T

V

112



i

chaba de haber procedido nimca c o n la
más mfnimfl. m ala fe.
Una vez hubo puesto en claro este asun­
to, habiéndose agravado sus ordinarias do­
lencias, y como quien ya nada tiene que
hacer en esta tierra, pidió y recibió con
grandísima devoción y recogimiento el Viá­
tico y la Extremaunción. Finalmente, asis­
tido por el sacerdote su consultor, y rodea­
do de su esposa, de sus hijos y nietos, en­
tregó' don José M aría su alma a Dios en
Sarriá el 29 de agosto de 1882.
Pué don José M aría Serra un gran cató­
lico y un ejemplarísimo ciudadano. Escoge­
mos entre m il dos hechos que demaestiun
con harta evidetícia nuestro aserto.
Durante el cólera que afligió a Barcelo­
na en 1854, no sólo contribuyó a remediar
tanto mal con sus cuantiosas limosnas, sino
que se ofreció a llevar personalmente so­
corros a los puntos más infestados por la
terrible enfermedad, y tal como lo ofreció
lo cumplió con abnegación sin límites, mereciaido con ello los plácemes tnás caluro­
sos del pueblo, de las autoridades y aun
del Gobierno de la nación.
A n te el serio problema planteado a éste
por la guerra .de A frica de 1859 y las v i ­
gencias abusivas de una potencia europea,
don José M aría fué im o de los más entu­
siastas •iniciadores d e l préstamo de cinco
millones de reales que, sin interés alguno,
hizo al B a n c o de Barcelona: nobilísimo

Doña Dorotea aprovechaba escrupulosamen­
te él tiempo...
ejem plo que, seguido por otros Bancos de
provincia, sacó al Gobierno de apuros y le
permitió llevar a cabo con gloria aquella
•expedición militar.
N o es de extrañar, pues, que una de las
últimas y más ardientes recomendaciones
hechas por este varón tan virtuoso a su es­
posa doña Dorotea poco antes de morir fue­
ra é s ta : “ Haz, esposa mía, todo ei bien
que puedas sin hacer caso de los dichos de
los. hombres.”
{Continuará.^

La madre de don Bosco
CONFERENCIA
dada por D.* Josefina Alvarez de Cánovas en la V II Asainl)lea Diocesana
Catequística de Sevilla
(Coníintwción.)
M argarita Occhiena, se casa; su mariuo
tiene im hijo, Antonio, muy bueno en el
fo n d o ; pero tropieza con el inconveniente
de no ser h ijo de aquella buena madre, y
M argarita sufre con aquel hijo, noble en el
fondo, pero a l que era muy difícil encon­
trarle el corazón. Y lo sufre mirando hacia
arriba y m ira a la Cruz, y sigue siendo rei­
na dei hogar, aimque en su corona figuren
docenas de espinas.
M argarita m u jer fuerte. — M argarita se
queda viuda cuando Juanito B<^co tiene
dos años, y se encuentra ante un serio pro­
blem a: el problema de sus dos hijos, un hi­
jastro, una suegra.
¡ Cuántos problemas
enunciados a l pasar I Dos hijos, xmo de los
cuales, Juanito, traía un mensaje dentro,

lo que veía M argarita con la intuición de
una madr e y no podía destacarlo, e incluso
daba siempre la razón contra su h ijo Jiaanito. Unan ustedes a todos esos problemas
íntimos, tremendcffi, imán ustedes el proble­
ma del pan. M argarita tenía qiU; .segar la
sementera, tenía que trabajar y atender a
la educación de sus hijos. Ayer leía yo en
im periódico que en los epitá'ics de las M a­
tronas Romanas se decía: “ C;udó de casa
e hiló la lana.” Y o nensaba en m i heroína,
y ella ha hecho m ás: Cuidó su casa, hiló
la lana, ganó su pan, educó a sus hijos de
una manera perfecta. M a "garita acompaña
su cosecha desde la sementera hasta las tro­
jes. Pero el trabajo del campo la aceicaba
a Dios y a su Madre Santísima, a la que
— 113

mansediunb^'e se convierten los niños en
mansos corl'>'útos. Entonces Juanito, algo
medroso, preguntó al Personaje: -S eñ o r,
¿quién sois? Y o soy e l P.ijo de Aquélla a
quien tu madre te ha enseñado a saludar
tres veces al día.” Entonces se apareció la
Señora y le dijo a Juanito: " ¡ M i r a í ” , y los
golfillos que antes jugaban eran ahora pe­
rros, cabritos, gatos. “Este es el campo don­
de tú deberás trabajar. Hazte humilde, fuer­
te y robusto y harás con mis hijos lo que
ahora verás que sucede con estos animales.”
Y los animalejos quedaron convertidos al
punto en mansos corderitos.
P o r la noche, en esas horas hogareñas,
el pobre Juanito refiere ingenuamente su
sueño. Antonio interpreta despectivo: “ Eso
quiere decir que vas a ser capitán de ban­
didos.” Sólo un alma herida de odio y de
celos puede interpretar asi e l sueño mara­
villoso de im niño de nueve años, Y madre
Margarita, tragándose las lágrimas, d ijo :
“ ¡ N o 1 Eso no quiere decir que vas a ser capitám de bandidos; eso quiere decir que tú
vas a ser Sacerdote.” Porque el sueño ter­
mina con que la V i r g ^ se aparece y le
dice; “ Mira, esos niños blasfemos se con­
vierten en perros” ; y al final, cuando se los
ha tratado con caridad y hablado de Dios,
se convierten en c o r d er i tos de D ios;
en los niños tan amados de M aría Auxilia­
dora, que todos conocemos en los Oratorios
Festivos, que, como himnos de amor a la
Virgen, están esparcidos por todos los ám­
bitos de España.
Así, pues, Juanito Bc»co se destacaba ca­
da día más, y Antonio Sosco se lo perdo­
naba cada dia menos. ¿ Y qué hace la po­
bre M ai^arita? A ver si alguno de los que
me escuchan resuelve su problema de esta
manera: “ Esto no puede seguir así, porque
Antonio está cada día más herido, m i h ijo
Juanito se destaca cada día más." Y puso
a Juanito a servir a im amo. i Es xma seño• ra madrastraI A l que ella más quería. ¿Sa­
ben ustedes lo que ha hecho M afgarita?
Arrancar un m ilagro del cielo. ¿Siguen us­
tedes el hilo de la vida de esta mujer? ¡C ó ­
mo se arrancaría el corazón aquella madre
en el h ijo que pensaba ser sacerdote 1 L a
pobre madre le dice: “ H ijo mío, vas a mar­
char de casa, vas a colocarte a servir a un
amo...” Pero como e l Señor sabe escribir
derecho en renglones torcidos, llevó a Jua­
nito al Seminario y M argarita respiró. El
principal paso estaba dado. El h ijo estudia;
la madre de lejos vela y ora. Dios aprieta
pero no ahoga, y permite que a través de la
vida respiremos unos minutillos.
Estudia San Juan Sosco y va a hacerse
sacerdote; y yo me fijaba cómo a esta ma­
dre, señores, la vemos siempre que San Juan
Hosco va a sufrir y siempre sola cuando
se queda üfuda cuando Juanito
ella va a a sufrir. Como aquélla Madre del
tiene dos años...

ella habla consagrado sus nijos y enseñado
a saludar tres veces a l día. Tenemos, pues,
ahora a M argarita la mujer fuerte del Evan­
gelio. Amaba apasionadamente el trabajo,
y aun siendo muy pobre, jamás el pobre lla­
mó a su puerta sin ser socr'rrido., Margarita
supo convertir el trabajo en oración, lo
mismo que Santa Teresa, que decía: “ El
Señor anda también entre los pucheros” ; su­
po hacer del trabajo oración y fué la mane­
ra como fué reina del hopar. M argarita
mujer cariátide, m ujer fuerte, que al mis­
mo tiempo educaba a sus hijos d<ciéndoles
desde chiquititos: “ Que Dios te ve, no ha­
gas llorar al Niño Jesús, H ijo mío, que eso
no agrada a Papá-Dios. Quiere mucho a la
Virgen.” Y así fueron introducidos ea la
bendita costumbre de la presencia de Dios
y la doctrina de Cristo fué conocida muy
pronto por los hijos de eeta gran catequista,
modelo de madres cristianas.
Los hijos de M argarita fueron creciendo:
Jtianito se fué destacando más cada dia y
Antonio perdonándos'»lo cada día menos, y
M argarita sufriendo cada día más...
Juanito era soñador; tenía nueve años
cuando soñó im dia cite estaba en lUi pra­
do, en el cual jugaban niños pendencieros,
que gritaban hrcta blasfemar. El quería re­
mediar esto V trató de remediarlo a puñe­
tazos... Se le presentó un Personaje y le
d ijo : “ No con gol.ies. súio con caridad y

Margarita
114 —

Cielo que la vemos aparecer en los momen­
gre por pobres golfiUos abandonados? Don
Bosco piensa y piensa; por fin se decide:
tos de dolor Junto a la Cruz, y escondida
en los de gloriñcación. M ai^arita no pudo
“M i madre es una santa y puedo hacerle
esta proposición.”
asistir a su primera Misa. ¡Cuánto sufrió
a l no ver a su h ijo celebráis la primera Misa {
Y un día se la hace y triunfa, porque ma­
Pasan los afios, el dulce seminarista Juan
dre M argarita no sólo renuncia, sino que .
renuncia con alegría : “ Inmediatamente,
Bosco está para concluir su carrera. Su ma­
hijo mío, vámonos...” Y allá va la primera
dre le visita y sigue siendo su confidente.
“H ijo mío— le dice,— al nacer te consagré a
cooperadora salesiana camino dcl apostola­
la V irgen ; cuando has empezado a estudiar,
do, caminando y hablando de Dios. ¡Qué
a la Virgen te he consagrado; a la Vhgen
dulce cam inar! ¡Cóm o la tiifa e l corazón de
la m adre! V iaja con su hijo, viajan los
quiero consagrarte ahora y te recomiendo
al comienzo de tu sacerdocio que propa­
dos a la apostólica; camino de la pobreza,
gues su devoción.”
dei renimciamiento... P o r eso camina tan
El h ijo duda entre hacerse franciscano
ligera y tan alegre. Don Bosco con el Bre­
o sacerdote secular. M argarita le aconseja:
viario bajo el brazo, madre Margarita' con
“H ijo de m i alma, sé sacerdote secular;
un cestillo de ropa con lo más indispensa­
pero con una condición: la de que me pro­
ble... Llegan a Valdocco, llamado “ valle de
metas ser siempre pobre.” Y a g reg ó : “ Si
los muertos", porque allí derramaron su
algiina vez llegas a ser rico, tu madre no pisangre los primeros mártires de Turto. ¡C ó­
mo se alegrarían al verlos llegar! M argari­
será nunca los umbrales de tu casa, que pota entra en el pobre cuartucho anejo al Ora^
^ e he nacido y pobre quiero morir.” ] Cómo
torio y lo encuentra vacío... ¡Qué triste
sabía M argarita que la santa pobreza es la
m ejor coraza!...
golpe para ama mujer amante de su casita,
pobre, sí, pero con lo preciso para vivir aus­
Para Juan Bosco llega un momento en
teramente ! M argarita jovialmente se puso
que va a consagrarse al S ^ o r en firme. Era
a tararear una canción:
en diciembre de 1841, rm domingo; era un
día que la Catequesis haría muy bien en seña­
" ¡ Ay de mi
larlo con piedra blanca, cuando empezó San
“Guai ai mondo
si alguien se entera
se ci sente
Juan Bosco sus Oratorios Festivos. (¿ V er­
que soy forastera
forestieñ
dad que todos conocéis los Oratorios Festi­
y no tengo d in ero!...”
sema niente...”
vos?) M adre M argarita le vuelve a reco­
mendar a su h ijo que sea pobre. Las madres
que ven que sus hijos van por buen cami­
no les gusta ser machaconas... Empieza San
Juan Bosco su Oratorio en la Sacristía de
la Iglesia de San Francisco de Asís, en Tu­
rto ; Bartolomé G arelli fué e l primer piUuelo que don Bosco acogió en su Orato­
rio. Tras él vinieron a montones y vinieron
tal como don Bosco los soñó tm d ía : perros,
cabritos... ¡niños abandonados! ,¡Pobrecitos m íos!, “ 1(^ golflUos de don Bosco” , co­
mo les llamaban los que pretendían desha­
cerse de ellos diciendo que eran un peligro
para la salud pública, cuando lo que los
Oratorios hacen es convertir en mansos corderitos a los que un día pudieron ser lobos
feroces...
Don Bosco se instala en im sotechado, en
una pobre habitación, en el cobertizo de
Valdocco, pero necesita muchas manos que
vengan en su asuida; ' necesita alguien que
comparta con él este su amor encendido
por los niños, y piensa; "¿Quién me asolda­
rá?” “ ¡ T u madre, hom bre!” “ ¿M i madre...?
¿CJon lo que ha trabajado m i madre? ¿Cuán­
do la ilusión de 1<b hijos es colocar bien a
BUS madres? ¿Cómo la voy a arrancar de
BUS nietos, cómo la voy a arrancar de ellos?”
Madre M argarita es hoy abuela y vive en
Castelnuovo rodeada del cíuiño de sus nleM argarita entra en el pobre cuartucho ane­
tecillos, los hijos de José. ¿Cómo p ro p «ierjo al Oratorio y lo encuentra vacío...
le que cambie los p eq u ^ u ^ os de su san­
— 115

Así canta M argarita al verse tan pobre.
M argarita vuelve a Castelnuovo en busca
de su pobre ajuar. Tenia sus sábanas de no­
via, sus prendas queridas que de vez en cuan­
do sacaba para ordenar y guardar de nuevo...
Tenia algunas Joyas de sus antepasados. Todo
lo saca con un poquito de tristeza: pero se
consuela diciendo: “ ¿Pues qué m ejor desti­
no puedo yo esperar que el de que sirvan de
ornamento a la Casa de Dios y de vestido a
los pobres niños que nada tienen?” ¡T o d o lo
entregó I ¡ De todo se desprendió I ...
Era ima noche oscura como boca de lobo;
llovía a mares. A la puerta del Oratorio se
oyeron unos golpecitos tímidos. Abre M ar­

garita y se encuentra con iin pobre niño caladito hasta los huesos y descalzo; le acoge,
le da de cenar, le prepara una cama, quitan­
do mantas de la suya y de la de don Bosco,
y cuando ya el niño entró en calor y se acos­
tó, madre Margarita, antes de dejarle, le ha­
bló de Dios y de M aría Auxiliadora. Aqui t ^
néis las primeras “ Buenas noches” y la pri­
mera Cooperadora Salesiana. Las primeras
“ Buenas noches” con las que desde entonces
los Directores de todas las Casas Salesianas
despiden a sus alumnos antes que éstos se re­
tiren a descansar.
iContiTUiará.)

Crónica de gracias
BARCELO NA.— ^Habiendo pedido con in­
sistencia a la Santísima Virgen Auxiliadora
la gracia de la sucesión para mis hijos, como
también el verme libre de cierta enfermedad
que me venia aquejando desde hacía tres
inviernos, he sido largamente escuchado por
tan bondadosa Madre. En acción de gracias
hago pública níi gratitud en el B oletín y
envió 25 pesetas de limosna para Misas.— Ju­
lián Miralles.
BARCELO NA.—Cuando más necesitaba,
para el desempeño de mis ocupaciones, de
claridad mental, me hallé tan débil de ca­
beza que con diñcultad podía seguir xm ra­
zonamiento o retener una idea. Empecé en­
tonces xma novena a M aría Axucilíadora y
a San Juan Bosco, piometi&idoles publi­
car la gracia, y casi instantáneamente ob­
tuve lo que deseaba. Lleno de gratitud, cum­
plo m i promesa.— E. C.
R O N D A (.Málaga).— Sumamente agradeci­
da a M aría Auxiliadora por una gracia que
me h a obtenido con su intercesión podero­
sa, envío luia limosna para su Santuario
y hago público m i agradecimiento.— Ange­
les Durán de Benitez.
V IG O .— Agradecida a M aría Auxiliadora
por un favor obtenido, envío una limosna y
ruego se publique la gracia en el B oletín .—
R ita MoUns.
V IG O .— Un antiguo alumno del Colegio
Saleslano de la Ronda don Bosco, agradeci­
do por un favor recibido de M aría Auxilia­
dora. envía un donativo de 25 pesetas para
su templo y hace publicar la gracia en el
B olbtI n .
V IG O .—Una devota de San Juan Bosco
recibió hace ya algún tiempo un favor de
este gran Santo, y en prueba de gratitud
hace publicar la gracia y envía un dona­
tivo.
V IG O .—Doña Luz Pérez de Agrasar envía
un donativo de 55 pesetas por gracias reci­
116 —

bidas de M aría Auxiliadora. Hace también
pública su gratitud a tan buena Madre por
dos favores alcanzados.— P ila r Ch. Arias.
S A N T IA G O .—Doy gracias a M aría Auxi­
liadora por haberme obtenido la curación
de mi madre.— Rosalía A . Ruibal.
M A D R ID .— ^La Sra. de Dalmáu Alecha da
gracias a San Juan Bosco por un favor re­
cibido y envía diez pesetas de limosna.
L A CORUNA.— Doy gracias a M aría Au­
xiliadora porque en un asunto particular
recurrí a Ella y pronto fu l escuchada por
tan bondadosa Madre.—A uria A.
A S T U D IL L O (PoZeTicta).— ^Viendo poco me­
nos que imposible la solución de im asimto
importantísimo, me encomendé a M aría Au­
xiliadora prometiendo ima limosna para la
Casa de Aspirantes Salesianos de esta villa.
A los pocos días, y contra toda previsión, se
resolvieron todas las dificultades y vi satis­
fechos mis deseos. Agradecido, cumplo mi
promesa.— Teodoro Gómez.
A S T U D IL L O (Falencia).— A consecuencia
de un susto recibido, enfermó gravemente
una h ija mía de corta edad, produciéndosele
una infección en la sangre. El m al progresó
rápidamente, tanto, que llegamos a dar por
segura su muerte. Acudí entonces a la Santí­
sima Virgen Auxiliadora, cuya devoción ha­
bía aprendido en el Colegio Salesiano, comen­
cé con la fam ilia im a fervorosa novena e hice
imponer a la enferm a una medalla de la V ir­
gen de don Bosco. A l día siguiente comen­
zó lina rápida mejoría, y la niña no tardó en
quedar completamente restablecida. Suma­
mente agradecido cumplo m i promesa de pu­
blicar la gracia y entrego una limosna.— N ico­
lás Bartolomé.
SUECA
(Valencia).— Hallándose grave­
mente enferma la a l u m n a de nuestro
Colegio Pepita Portea, de catorce años de
edad, a causa de un ataque de apendicl-

i

1

tis, y sin esperanza de poderla salvar por
ser imposible la operación, aplicamos a la
^ fe r m a im a reliquia de San Juan Bosco y
acudimos con fe a M aría Auxiliadora, cuya
bendición le impartió a la niña im Padre Saleslano. Después de lo cual comenzó la me­
joría y fueron cesando poco a poco los dolo­
res, hasta que, fortalecida suficientemente,
púdosele practicar la operación. Mas habiéndo% agravado de nuevo por una complica­
ción de bronconeumonia, recurrimos otra vez
a nuestra c^estial M adre y a San Juan Bos­
co. que no tardaron en escuchar nuestras sú­
plicas. Agradecida, cumplo la promesa de pu­
blicar la gracia y rem ito la limosna de 100
pesetas, que la fam ilia de la niña ofrece ge­
nerosamente para la Obra Salesiana.— Sor
J. C., D irectora del Colegio de las Hijas de
M aría Auxiliadora.
pidiéndole con fervor su curación, caso de
CORDOBA.— Encontrándose im a de mis
hijas enferm a con fuertes ataques, empecé
una novena a la Beata M aría Mazzarello
ser para m ayor ^ o ria de Dios y bien de su
alma, prometiendo publicar la gracia en el
B oletín y enviar una limosna. Tam bién
quiero hacer pública m i gratitud a mis
celestiales Protectorés, M aría Auxiliadora y
San Juan i^sco, a quienes recurrí pidién­
doles me resolviesen un asunto, si me con­
venía, y a los tres días de comenzar ima
novena fu i escuchada. P o r todo lo cual,
cumplo gustosa lo prometido, pidiéndoles me
sigan protegiendo como hasto e l presente.—
Una devota.
M A D R ID ,—^Por una gracia que pedí y ob­
tuve de M aría Auxiliadora, cumplo m i pro­
mesa de publicarla y donar 100 pesetas para
la Obra Salesiana.— M . A. de F.
TO R D E R A (Barcelona).— Doy las más exv-osivas gracias a la Sierva de Dios doña
Dorotea de Chopitea por el favor que, des­
pués de hacer una novena pidiendo por su
Causa de Beatificación, me ha alcanzado del
Señor, resolviéndome im problema fam iliar
de importancia trascendental.— Encarnación
Moreü.
ALO O Y.—Recurrí a San Juan Bosco para
que con su intercesión me alcanzara de la
Santísima Virgen Auxiliadora la curacite
de m i h ija enferma. Habiendo sido escu­
chada, cumplo m i promesa de dar una limosna para la Obra Salesiana y de publicar
la gracia.— C/na devota.
B ARCELO NA.— Me encomendé al Sacra­
tísimo C o r ^ n de Jesús en im ^ difícil y
grave enfermedad, y m e devolvió la salud.
Puse bajo su protección a m i hijo, soldado,
herido en Alemania, y pude abrazarlo sano
y salvo. Devolvióme a ima h ija mía, pereeguida y alejada de mi hogar. Con el Alma
rebosando de consuelo y gratitud, subo, a
pies descalzos, al Tem plo Nacional Expiato­

rio del Tibidabo para agradecer al Sagrado
Corazón de Jesús sus favores y ofrecerle mi
humilde limosna.— Catalina Roca Vilanova.

IN MEMORiAM

limo. Sr. D.
T r in id a d D e l g a d o C is n e r o s
A la avanzada edad de ochenta y cuatro
años ha fallecido en Madrid este insigne
cooperador salesiano.
Nació D. Trinidad Delgado en Sevilla. De
los albores de siglo data su intima unión
a la Obra Salesiana. Trató durante varios
años a nuestro amadísimo Rector Mayor,
D. Pedro Ricaldone. A l celebrar éste, en
plena guerra, sus Bodas de Oro Sacerdotales,
envió a D. Trinidad una preciosa carta au­
tógrafa, cual delicada prueba de su gran
afecto y gratitud.
Como Secretario Relator del Tribunal Su­
premo prestó a la Congregación Salesiana
señaladísimos servicios con motivo de cier­
tas pretensiones sobre los terrenos en que
hoy se levanta el Tem plo al Sagrado Co­
razón en el Tibidabo.
Pué Presidente Nacional del Centro Eucaristico de España, despertando admira­
ción por su gran piedad y exquisita pru­
dencia.
Se m o s t r ó siempre caballero profunda­
mente cristiano y de conciencia delicadísi­
ma. De gran caridad, socorría multitud de
necesidades en el silencio más ^solu to.
Con todo, tuvo su predilección para las
Obras de don Bosco, cuyo desarrollo y ac­
tividades seguía ccoi e l mayor interés.
A mediados del pasado marzo se le pre­
sentó una dolorosa enfermedad; la prime­
ra y última en su larga vida. La llevó el
paciente D. Trinidad con t o d a resigna— in

clón. Durante varios días celebró en su do­
micilio el Muy Rdo. Sr. Insi>ector y otros
salesianos, con gran consuelo para su alma.
Quiso recibir los Santos Sacramentos so­
lemnemente, aun cuando no se veía en pe­
ligro extremo. Fué edificante su f e r v o r .
Suplicaba al sacerdote pronunciara con l a ­
titud las oraciones para m ejor seguir su
significado. Horas antes de su fallecimiento
recibió la visita del Excmo. iSr. Obispo de
Pamplona, D. Marcelino Olaechea, Salesiano, a quien le im ia gran amistad. Recibida
la bendición episcopal, invitó a sus fam ilia­
res y al salesiano que lo acompañaba a re­
zar el santo Rosario y Trisagio como todos
los dias. Pocos instantes después, cual si en*
trai-a en plácido sueño, entregaba su alma
al Señor.
En la capilla ardiente célebraron muy de
mañana e¡ Muy Rdo. Sr, Inspector y su se­
cretario, mientras en t o d o s los Ck)legios
Salesianos y en los del Instituto de las H i­
jas de M a ^ Auxiliadora de la capital se
elevaban por su alma fervórelas oraciones.
Solemnes resiütaron los funerales, presi­
didos por el Excmo. Sr, Obispo de Pam ­
plona, q u i e n ofició en e l responso final.
A sus familiares y numerosos amigos, acom­
pañaban el M uy Rdo. Sr. Inspector, la R e­
verenda señora Inspectora de las H ijas de
M aría Auxiliadora, los Rdc«. Sres. Direc­
tores de los Colegios Salesianos de M adrid
y las H ijas de Maria Auxiliadora. Se ha­
llaban también nutridas representaciones de
niños y niñas.
Entre el crecido número de personas que
acompañaban por la tarde sus restos mor­
tales al cementerio, ocupó puesto de honor
un grupo de niños de los Colegios Salesia­
nos. De esta mmiera quisieron testimoniar
su gratitud al que tanto los habla amado en
vida, y en los que había pensado para des­
pués de su muerte.
M aria Auxiliadora y don B o s c o habrán
acogido con fiesta en el Cielo a l que tanto
trabajó por sus hijos en la tierra.
Descanse en paz este gran amante de las
Obras Salesianas. A su hermana, religiosa
Esclava del Sagrado Corazón, y a sus fam i­
liares, nuestro más sentido pésame. Pedimos
a todos los lectores del Bo letín S alesiano
una fervorosa oración por el eterno descan­
so de su alma.

Don Lorenzo Gómez Barés. Falleció este
gran caballero cristiano el 19 de noviembre

p. p., en Madrid, en el católico hogar ,de la
Exema. S.* D.» M aría M aniique de Lai-a,
viuda del Excmo. Sr. General D. Adolfo
Giménez-Castellanos. Don Lorenzo Gómez
era Cooperador Salesiano desde e l año 1903,
y, como tal, trabajó siempre con entusiasmo
i ainor por la gloria de -Dios y en bien de
las almas. Durante muchos años dirigió y
alentó a l grupo de Cooperadores por él sus­
citado y del que era decurión. Cumpliendo
uno de los artículos básico del Reglamento
de los Cooperadores Salesianos, fué siempre
el brazo derecho de su párroco, el Rdo. don
Jesús Rodi'iguez Cadarso (q. s. g. h.), a quien
ayudó de un modo especial en la fundación
e incremente! de la Acción Católica en su
pueblo de Cambados (Pontevedra). Grande
era su devoción a M aría Auxiliadora, de­
voción que propagó por todos los medios a
su alcance. Dedicó a la Virgen de don Bos­
co im altar con una hermosa imagen de ta­
lla en la iglesia parroquial, y hacía celebrar
todos los años su fiesta con el esplendor con
que se suele celebrar ^
los Colegios Sa­
lesianos, precedida de solemne novena y colonada con devota procesión pública. T a l
era su amor y confianza en la Santísima
Virgen, que cuando hace dos años enfer­
mó gravemente, no qifiso que Jlamaran al
médico, sino sólo a l sacerdote para que le
administrara los Santos Saaam entos, in­
vocó con fervor a la Virgen haciéndole una
promesa, que cumplió al pie de la letra, y
no tardó en quedar fuera de peligro. A l mo­
rir fué envuelto, por deseo suyo manifiesto,
en la bandera azul-rosa de M aría Auxilia­
dora. Quiera esta bondadosísima M adre ob­
tenerle cuanto antes el descanso eterno. A su
hijo, heredero de sus virtudes; a su sobrino,
el coadjutor salesiano D. Eugenio Yáñez, y
demás familia, nuestro sentido pésame.

Rvdx). Sr. D. Sixto Santólino Casado. Fa­
lleció este sacerdote salesiano en nuestra
Casa de Morón el día 23 de marzo último.
Con él se ha malogrado una halagüeña es­
peranza en el campo del apostolado salesia­
no y sacerdotal, pues las virtudes, especial­
mente la humildad y el espíritu de traba­
jo, del joven sacerdote, prometían mucho
bien para las almas y mucha gloria de
Dios. A su padre y hermanos la expresión
de nuestro más sentido pésame con la pro­
mesa de fervorosos y abundantes sufragios.

NOTA IMPORTANTE
El próximo número del Boletín Salesiano constará de 32 páginos
de texto y corresponde^’ó a los meses de julio y Agosto.
U8 —

KIAESTHü S

y

1*ADKE8 1)E FAMILIA;

¡Queráis uñ.tratátío breve, sencillo y práctico
donde apréiíder a educar a vuestros alumnos
t a vuestros hijos?
LEED Y ESTUDIAD
4l Sistema Preventivo siguiendo al Rdo. don
Tomás M.* Baraut, S. S., en su obra

II ESCeai DE DONsosco
recienlenienle public^ida por la
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*

Suciedad Editora Ibérica
Alcalá. 164. Madrid
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Recuerdo de una peregrinación a Fáliina, San­
tiago de Compostela y el Cerro de los Angeles,
por S. A. R. la Serenísima Infanta D. Meijcesólas de Baviera .y Borbón.
*

*

«

liibrilo ameno y atractivo, (pie logra unir ee
sencillez e intimidad de la narración un sngesr
tlvü inlerés en todas,sus páginas.
Sociedad Editora Ibérica
Alcalá, 1 6 4 - MADHID

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Católicas y año de 1045. Su importe de i'Hi.'^tas................... remite por giro
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Apartado 9134-MADRIO

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Ijeer, recomendar, difundir los opúsculos de
las LECTU RAS CATO LICAS DE SAN JUAN
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placer al gran Apóstol de la juventud del si­
glo XIX, que tan a pechos tuvo siempre la pro­
paganda de la buena Prensji. Cada tomito, de
las FjECTURAS CATO LICAS dfesarrolla un ar­
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la biografía de hombres modelo de virtud,
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caridad, ideas y procedimientos que se apartan
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BOLETIN S A L E S I A N O

A f' A

14

1 it o o

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M A la R 1 1*

Cr.

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TiPoeuiriA

di

Lá S. B. 1. • A max JI, ><4. • IC 4 >it»

Fecha
1945.06