BS_1930_08

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BS_1930_08
Descripción
Boletín Salesiano. Agosto 1930
extracted text
Año XLV - N. 8.

Agosto, 1950.

BOLETIN SALESIANO
REVISTA DE LAS OBRAS DE DON BOSCO

La Escuela del Beato D. Bosco
El Rvdo. P . José Vespignani, del Capi­
tulo Superior de la Congregación Salesiana,
ha ofrecido a toda la gran familia de D . Bosco,
en este año< de la glorificación del Padre uno
de los tnás valiosos regalos.
En un precioso libriio, de reducida mole,
pero de gran valor histórico, ha recogido
sus impresiones acerca de D. Bosco, con quien
vivió en íntima familiaridad por espacio de
un año, 1876-77, mereciendo del Beato espe­
cial confianza y paternal afecto. Las impre­
siones de aquel año han quedado profundamente
jabadas en el corazón y en la memoria del
Padre José, quien ahora las ofrece a sus
hijos y admiradores de España y América,
para que contribuyan al mejor conocimiento
id Padre, y por consiguiente, a la más per­
fecta imitación de 5«s virtudes y actuacción
ie su espíritu.
Nosotros hemos leído con fruición el pre­
cioso libro, cuya traducción al castellano con­
tribuirá sin duda a dar a conocer muchas
facetas de nuestro Beato Padre, aún inéditas,
y fio podemos resistir al deseo de hacer par­
ticipes a nuestros lectores de algunas de tan
hdlas páginas. He aquí d capítulo X X X , en
que el autor expone en dntesis, sus impresiones
acerca de L a Escuela del Beato D. Bosco.
El año 1876-77 marcó un gran progreso
en la Obra de D. Bosco.
Para nosotros fué un año de escuela feconda en provechosas enseñanzas, en reve­

jaciones sobrenaturales, que llenaban nues­
tra mente, excitaban nuestro sentimiento
y nuestra fantasía, nos conquistaban el
corazón y la voluntad, nos embriagaban,
en una palabra, en dulzuras tales que
nos hacían exclamar que si no tuviéra­
mos otras pruebas de la divinidad de nues­
tra santa Religión, bastaba tan sólo d ver
y el oir a D. Bosco, el pasar
año en su
compañía, para confirmamos en la fe y te­
nemos dispuestos a cualquier sacrificio, por
penoso que fuera, por la salvación de las
almas.
Fué aquel el año de las lecciones clásicas,
en la escuela de D. Bosco.
Habían sido aprobadas poco antes las
Constituciones de la Congregación; se ini­
ciaba en aquel año el Noviciado Regular,
bajo la sabia guía de aquel santo formador
de santos, que se llamó D. Julio Barberis;
nacían como por encanto nuevas obras:
Cooperadores Salesianos, la Tercera Orden
Salesiana, con un Reglamento aprobado
por la Sta. Sede; el Bolelin Salesiano, ór­
gano oficial de los mismoá y que contribuía
a ponerles en relación constante y directa
con el propio D. Bosco, el Padre de todos...
Y tras los Cooperadores se organizaban los
Ex-Alumnos, con los cuales se perpetuaban
los fm tos de su escuela en medio del mundo...
Se acababan de iniciar las Misiones Salesianas en la América del Sur, y a partir de en­
tonces, todos los años partían del pie del al-

-( 226 )-

I.a más anfigua foiograrta del Beato Don Bosco.

tar de la Auxiliadora, numerosas falanges
de jóvenes apóstoles dispuestos a extender
el reino de Cristo... Y para aumentar el nú­
mero de estos generosos jóvenes, y casi
como efecto de aquel generoso adiós de los
que partían, nació la admirable obra de los
Hijos de María dedicada al cultivo de las
vocaciones tardías, organizada con la apro­
bación y el aplauso de la Sede Apostólica.
A l mismo tiempo D. Bosco daba los úl­
timos toques a sus Reglamentos para las Ca­
sas Salesianas, tanto para los Salesianos
como para sus alumnos, con las aúreas pá­
ginas en que expone sus ideas acerca de su
Sistema Preventivo.
En aquel mismo año publicó su Reglamento
de los Oratorios Festivos.
Y i'malmente, como corona y digno re­
mate de obras tan grandes como necesarias,
se celebró el primer Capitulo General, fruto
del cual fueron las Deliberaciones que, con­
solidando la nueva Sociedad, aseguraban
el éxito de la escuela de D. Bosco.
Tal vez alguno me tache de temerario o
'.“'anicloso por haberme atrevido a evocar

tantos recuerdos personales, recuerdos de un
novel sacerdote, mientras tantos y tan an­
tiguos sacerdotes, que por años vivieron
junto al Padre, compartiento con él traba­
jos y fatigas no han dejado memoria de
sus relaciones con el Siervo de. Dios.
Y o, por mi parte, creo que fueron demasia­
do modestos. Unusquisque in sensu sííc abundet. Alguien creerá que es mejor seguir la
norma directiva que dice: Sacramentum Re­
gis abscondere honum est; otros, por el con­
trario, entre los cuales me cuento, creen que
opera Dei magnificare honorificum est.
Y o he expuesto en mis páginas anteriores
lo que he visto y experimentado junto al pa­
dre común. Y he dedicado mis páginas a
mis queridos hermanos y condiscípulos y
también a los que la Divina Providencia
ha querido confiarme como discípulos y
amigos queridísimos.
Son éstos, recuerdos de familia, que la
Sagrada Escritura impone a los padres, a
los ancianos, la obligación de transmitir a
las generaciones futuras.
Es necesario que la escuela de D. Bosco
se extienda siempre más, que se conserven
las genuinas tradiciones de familia, que el
tesoro heredado, en vez de dilapidarse, con­
tribuya al enriquecimiento y bienestar de
nuestros sucesores.
A l poner término a estas páginas, siento
cierto descontento al reconocer que no he
conseguido describir cual merece,, la belleza,
la suave dulzura, la divina eficacia de la
Escuela de D. Bosco que se posesionaba
de toda el alma y ganaba nuestros cora­
zones.
Con todo, intentaré presentar en síntesis
un concepto el más real y exacto que me sea
posible.
Recuerdo que fué precisamente en este
tiempo, cuando a los Oratorios Festi\’os,
Colegios Salesianos y a la misma Sociedad
Salesiana, empezó a dársele el nombre de
Obra de D. Bosco.
E l que no había querido que sus hijt«
tomaran su nombre, sino que les dió el del
santo Obispo de Ginebra, tuvo que resig­
narse a oir su nombre asociado a todas
sus Obras. Y este nombre se hizo popular,
simpático, y fué como la continuación de la
expresión primitiva de los primeros pihuelos
de D. Bosco, que decían: Soy con D. Bosco,
soy de D. Bosco, para expresar que eran de
la familia, o pert^ecían a la casa de D. Bosco

'( 227 )Los mismos Gobiernos americanos, que
al amparo de la Constitución no admiten
nuevas Ordenes o Congregaciones religiosas
en sus territorios, cuando supieron que la
Obra de D. Bosco era la obra del Obrero,
no sólo la aceptaron, sino que la favorecie­
ron abiertamente y aún contribuyeron a su
desarrollo con generosas donaciones.
He aquí un aspecto genial de la Escuela
de D. Bosco.
Pero D. Bosco había inculcado en este
cuerpo, en esta Obra, un alma y un espíritu;
había infundido en él una verdadera vida,
que era el santo temor de Dios, por medio
de la piedad ilustrada, y especialmente por
medio de los Sacramentos de la Confesión
y de la Comunión.
Cuando se celebró en Buenos Aires el cin­
cuentenario de nuestras Misiones con un
desfile de doce mil jovencitos de la Obra de
D. Bosco; mientras los gimnastas, los explo­
radores, ios niños y las niñas con sus bri­
llantes uniformes desfilaban al son de ale­
gres marchas, entre los aplausos de la po­
blación, una de las Damas de la A lta Socie­
dad de la Capital, exclamó:
— Encantadora juventud, esta, pura,
alegre, serena. L a juventud de D. Bosco es
esencialmente Eucarística. Seguramente to ­
dos estos jóvenes han recibido esta mañana
la Santa Comunión, antes de empezar la
fiesta.
Yo, que me encontraba allí cerca, junto
al palco oficial, le dije:
— Es cierto. H oy la fiesta es doblemente
eucarística porque viene a ser además la
acción de gracias por cincuenta años de
intensa vida espiritual para tanta juventud,
educada por los hijos de D. Bosco.
En los inicios de nuestras Misiones en la
•Argentina, un Senador que había sido tam­
bién Gobernador de la Provincia de Tucumán
vino a visitar nuestros talleres conduciendo
consigo un elegante joven, hijo suyo; y,
mientras admiraba un grupo de .zapateritos
que trabajaban afanosamente dijo — él
que era liberal — a su hijo:
— ;Ves? Estos jóvenes, en su humilde
oficio, son completamente felices. ¿Y sabes
por qué?
— ¿Por qué? — preguntó el muchacho.
— Porque trabajan para el Paraíso. Así
les ha enseñado D. Bosco.
Y luego, volviéndose a mí, me dijo.
— ;No es verdad que D. Bosco ha pro-

Una fofo de los (iempos qne hisforiamos.

metido a todos los suyos pan, trabajo y
paraíso?
— Es cierto, le repuse; y aquí trabaja­
mos para este fin, según las enseñanzas de
D. Bosco.
— He aquí, concluyó el Senador, lo -que
todos uecesitan: el recuerdo de lo que nos
espera más allá.
Y ahora para terminar, voy a concretar
todas estas características de la Escuela de
D. Bosco en cuatro conceptos (jue vienen a
formar el alma, el espíritu, la vida de .su.s
alumnos y de sus ex-alunmos.
Don Bosco formaba el criterio cristiano
de sus jóvenes con el Catecismo y la Histo­
ria Sagrada y Eclesiástica; sus buenas no­
ches y sus maravillosos sueños tenían de mira
especialmente, enseñar a sus jóvenes, a pen­
sar, a juzgar, a obrar rectamente según las
normas de la razón y de la fe.
Don Bosco trabajaba siempre por formar

•( 228 )
en la juventud la conciencia cristiana, uni­
formándola con la L ey de Dios y de la Iglesia
y obtuvo de sus alumnos y en sus Colegios
una delicadeza tal que, en vez de temer el
castigo, lo que se temía era la ofensa de Dios.
Recuerdo a este propósito una anécdota.
Un jovencito se me acercó cierto día, des­
pués del estudio y me dijo:
— Padre, Fulanito me acusa de haber
dicho una palabra fea; pero en conciencia
le puedo asegurar que yo nunca he dicho
palabras semejantes.
Llamé en seguida al compañero y le re­
prendí, porque estaba cierto de que no podía
/ ser verdadera su acusación. El mucliacho,
sonriendo, me dijo:
— Verá V., Padre, a mi amigo le entró
el hipo, y nos estorbaba a todos sin que pu­
diera evitarlo. Y como yo he oido decir que
el hipo se quita con un susto imprevisto,
pensé cuál sería la cosa que más le asustase
y por eso me acerqué y le dije que le iba a
acusar de haber pronunciado malas palabras.
El pobre palideció, pero el hipo cesó al ins­
tante...
Puede asegurarse además que D. Bosco
ponía sumo empeño en educar el carácter
cristiano de sus jovencitos — aquel carácter
que se imprime con la gracia de Dios por
medio de los Sacramentos del Bautismo y
de la Confirmación. — Esta fortaleza espi­
ritual él sabía cultivarla y desarrollarla con
aquellas palabritas especiales dirigidas al
corazón y tan apropiadas al estado de cada
cual y que se han llamado ■ palabritas má­
gicas de D. Bosco, por el efecto instantá­
neo que producían en todos. Era ciertamente
el fruto de la Primera Misa, en la que pidió
al Señor el inestimable don de la eficacia de
la palabra. Y estos efectos se hacían sensi­
bles en ciertos momentos, cuando era nece­
sario precaver a sus hijos de un peligro indi­
vidual o común. Entonces Dios le otorgaba
luces especiales para ver las conciencias, el
estado de cada uno... El efecto de la escuela
de D. Bosco, en cuanto a la educación del
carácter, se notaba también de un modo
especial en ocasión de las vocaciones o cuando

los jovencitos se alejaban definitivamente del
Oratorio. Aquellos últimos recuerdos, aquellas
recomendaciones paternas, quedaban gra­
badas con caracteres indelebles en los cora­
zones de sus hijos, quienes partían, llevando
consigo, junto con la palabra y con la mi­
rada de su Padre, la existencia de aquel su ver­
dadero ángel del Cielo, y esto les ponía alerta
en los peligros, les incitaba a la asiduidad
a las funciones sagradas y a las prácticas de
piedad, alejándoles de todo peligro de ofen­
der a Dios.
Y he aquí toda la educación cristiana con
sus características, transformarse en vida
cristiana, esto es en los hábitos y en el
espíritu que dan la vida cristiana a todo
nuestro ser, a las palabras y a las acciones,
e influye en nuestro derredor con el ejemplo
con el ardor de la caridad y con la solicitud
por la salvación eterna de nuestros herma­
nos. D. Bosco promovía este ejercicio de la
caridad hacia todos sus alumnos, porque en
el Colegio, en la familia, en los Círculos y
Asociaciones fueran sal et lux, como él decía,
con el consejo, con el buen ejemplo en todo,
especialmente con la piedad y la modestia.
Y he aquí al alumno de D. Bosco preparado
para aquella acción católica que el Santo
Padre quiere que se extienda por todo el
inundo, se organice en toda partes bajo la
dirección de los propios Superiores eclesiás­
ticos para dilatar el Rehio de Jesucristo.
Lo atestiguan las manifestaciones de los
Ex-Alumnos en la Beatificación de D. Bosco.
Ellos han sido los promotores y organiza­
dores de las Comuniones generales, que
han llegado en las Capitales a varios millares,
ofreciendo espectáculos nunca soñados por
su grandiosa elocuencia.
Lo atestigua también la conducta de estos
mismos Ex-Alumnos, su.'constancia en el
trabajo, en ejercitar su profesión con sacri­
ficio, con su activa intervención en todas
las obras y Asociaciones de Acción Católica.
«Somos de ayer y ya llenamos todo el
m undo». Tal es la frase de Tertuliano, que
un eximio ex-Alumno tomó como lema de
un magnífico discurso.

Esperamos con ansia noticias de las iniciativas y resultados obtenidos en España y Amé­
rica por lo que a la Cruzada Misionera se refiere, para darlos a conocer desde las columnas

-( 229 )-

UNDÉCIMO CONGRESO INTERNACIONAL
de Cooperadores Salesianos.
Durante la primera qiiincena del presente
agosto tendrá lugar en la capital de Colombia
el undécimo Congreso Internacional de Coope­
radores Salesianos, Congreso que irá acompa­
ñado de solemnísimos festejos en honor del
Beato Juan Bosco.
El último, que se celebró en Turín el año
1926. con ocasión del cincuentenario de las
Misiones Salesianas, fué un Congreso orientado
especialmente en miras a la cooperación en pro
de las Misiones y de él surgieron conclusiones
prácticas cuyos frutos estamos tocando con las
manos; ya que desde aquella memorable fecha,
se ha dado im empuje extraordinario a nuestra
actiridad Misionera, que culminó en el entu­
siasmo con que todas las Casas Salesianas y sus
Cooperadores han tomado la Obra de las Becas
Jlisioneras, destinadas a la formación del per­
sonal necesario.
El objeto del presente Congreso, que se reúne
a raíz de la Beatificación de nuestro Padre,
lo expone nuestro Venerando Rector Mayor a
S. Santidad, en la carta que le dirige anuncián­
dole esta importante asamblea y pidiéndole su
especial bendición.
Dice así el Rvdo. P. D. Felipe Rinaldi:
Beatísimo Padre:
La Augusta palabra de vuestra Santidad, que
repetidas veces ha exaltado las virtudes y la san­
tidad del Beato Juan Bosco, poniendo de relieve
su gigantesca figura de Apóstol de los tiempos
'•.■ ^demos, ha tenido en todas partes vasta y so­
lar,:-' resonancia.
El mismo soberano y paterno interés de Vues­
tra Santidad a fin de que las funciones que el
año pasado se desarrollaron en la Basílica Vati<'-ma en honor del nuevo Beato fueran rodeadas
de especial esplendor, suscitó en todas partes
general entusiasmo de fe y de piedad, que se
manifestó, especialmente en las innumerables
festas que durante este año se han celebrado en
•:er.or del Beato, en todas las naciones de la tierra.
Todo esto, mientras por una parte nos une
(.lia vez más estrechamente con los lazos de la
f iilidad y de la gratitud hacia la persona de
Vuestra Santidad, constituye, por otra, el más
iiUoso y eficaz estimulo para todos los Hijos de
D. Bosco, a seguir con creciente generosidad las
■ ''■ -.'.is huellas de nuestro Beato Fundador.
V este estimulo, como no podía ser menos, fué
swíi fuerte y poderoso en los beneméritos Cooperi-hres Salesianos. Elias, que constituyen hoy

dia un ejército de más de cuatrocientos mil fer­
vorosos católicos, animados todos de filial devo­
ción a la santa Sede y del espíritu de apostolado
y sacrificio que el Beato les legara en preciada

Bogotá. - Proyecto del Santaarío Saleslano
y Nacional a Nira. Sra. del Carmen.

herencia, sienten el deseo de hacer algo especial
para dar rienda suelta a sus deseos de perfección
y de apostolado.
Y a este fin deliberaron reunirse próximamente
en Congreso Internacional para estudiar y discu­
tir fraternamente algunos temas que se refieren
especialmente a la formación espiritual de los
Cooperadores Salesianos y la ma\or eficacia de
su actividad, en armonía con los ejemplos y las
enseñanzas del Beato D. Bosco y las prescripcio­
nes y normas directivas que emanan de la Sede
Apostólica.

-( 230 )Este Congreso será el X I de la serie de los
Congresos Internacionales de Cooperadores Salesianos. Se reunirá en Bogotá, capital de Co­
lombia, noble Nación, en donde los Hijos de
I). Hosco despliegan su múltiple actividad en doce
Institutos florecientes y además en los Lazaretos
de Agua de Dios, Contratación y Caño de Loro.
Las sesiones tendrán lugar durante los dias
14, 15; 16 y 17 del próximo agosto bajo el alto
patronato del Itvdmo. Sr. Nuncio Apostólico de
aquella Itepública y bajo la presidencia hono­
raria del Exmo. Sr. Arzobispo de la Capital, con­
tando además, con la adhesión concorde de todas
las Autoridades del Estado.
Permitidme, Beatísimo Padre, someter a la
aprobación de Vuestra Santidad el programa de
este solemne Congreso,, que se presenta bajo los
mejores augurios, ya que se celebrará junto con
solemyiisijnos festejos en honor del Beato D. Bosco;
y a fin de que estas esperanzas, se conviertan en
consoladora realidad y el trabajo de la Asamblea
sea verdaderamente fecundo en bien, suplico humilílemonte a V'uestra Santidad se digne conceder
la Bendición Apostólica a todos los beneméritos
Cooperadores Salesianos y a todos los trabajos
del Congreso y la gracia, grande y deseada, de
una palabra vuestra que estimule su voluntad y
afiance sus propósitos en favor del apostolado
Salesiano.
De V. Santidad, humilde hijo,

Turíu, 19 mayo 1930
l^Kurii R ina TvDI, Pbro.
Rector Mayor de la Sociedad Salesiana
del Beato D. Bosco.

A fin de (lUc los Cooperadores de otros países
puedan participar en algmia manera a los tra­
bajos del Congreso y hacerse cargo de la orien­
tación dcl mismo, damos a continuación ima
reseña de los temas que se desarrollarán y dis­
cutirán durante las sesiones.

en la propia parroquia como en la Diócesis a
que pertenece, especialmente prestando su coacurso personal o financiero y teniendo particu­
lar cuidado del bienestar espiritual de la ju­
ventud, a la que procurará interesar en las
sagradas ceremonias, fomentando el clero in­
fantil, la escuela de Canto, etc.
c) Recomienda de un modo especial:
1. Las obras que tienen por objeto la ins­
trucción religiosa de la niñez y en primer lugar
los Oratorios Festivos, la acción post-escolar, v
las escuelas destinadas a preparar a los niños
para la Confirmación y Primera Comimión.
2. La devoción al Sagrado Corazón de Jesás y a María Auxiliadora, promoviendo las
Asociaciones piadosas, prácticas de piedad,
fie.stas y conmemoraciones.
3. El amor constante y la más filial devo­
ción al Santo Padre.
d) En toda esta labor, el Cooperador Sale­
siano procure conservar la unión deferente y
completa con el clero local, según inculcaba
D. Bosco, ayudando al párroco en la enseñanza
de la Doctrina Cristiana, y contribuyendo al
esplendor de las sagradas fimciones promovidas
por las autoridades eclesiásticas, etc.
e) No descuide el Cooperador Salesiano la
asistencia y la ayuda a los jovencitos que dan
indicios de vocación eclesiástica o Misionera.
II.
Considerando que en la hora presente
el pensamiento del Vicario de Cristo está fijo
especialmente en la Obra de las Misiones Cató­
licas entre los infieles, obra que era uno de los
más generosos propósitos de D. Bosco.
E l Congreso

invita a los Cooperadores a desplegar todo
su celo y actividad en pro de las Obras misio­
neras Pontificias y a pro.urar eficazmente la
formación de las Becas Misioneras promovidas
por el Boletín Salesiano.

III.
Considerando, en fin, que el Beato Fun­
dador desde los primeros tiempos de su insti­
E r, ESPÍRITU DEE COOPERADOR S a I.P^SIANO,
tución invitó a sus amigos, laicos o eclesiásti­
I.
Considerando que el Beato 1). Bosco fundó cos a cooperar a la publicación de las Lecturas
la l ’ía Unión de los Cooix;radores Salesianos a Católicas y en general, a la buena prensa.
fin de que las almas buenas que abundan en
E l Congreso
el mundo pudiesen promover y ejercitar el
mismo apOvStolado (jue constituye la ocupación invita a todos los Cooperadores:
1. a comjxuicr y difundir obras populares
diaria de los Salesianos,
de índole religiosa y edificante, como son las
P.l Congreso
Lecturas Católicas que se editan en nuestras.
а) hace notar unte todo que todo Coope- TqxDgrafías.
radoi Salesiano del)e preocuixirse por su par­
2. a promover y difundir la buena prensa
ticular progreso espiritual, viviendo como un en las escuelas y entre el pueblo, en todas sus
buen católico.
múltiples formas: libros, opúsculos, diarios,
б) Exhorta a prestar su cooperación a las hojitas e imágenes sagradas, sin descuidar las
Ilojitas Parroquiales y la explicación de los
obras de bien que son propias de la Acción
salesiana, en la medida de sus fuerzas, tanto
Evangelios dominicales.
TEMA I.

'( 231 )'
TEiLA. II.
A cción sociai..
I. Considerando que el Cooperador Salesiano debe imitar la multiforme caridad del
Beato D. Bosco para aliviar en lo posible las
mísera- condiciones en que los tiempos han
conducido a las familias de tantos obreros,
E l Congreso

1. Propone que los Cooperadores Salesianos se empeñen en conocer las ideas recomen­
dadas por los Romanos Pontífices y sostenidas
por la Escuela Católica, respecto al uso de las
riquezas y al ejercicio de la caridad para con
los pobres y los obreros (Véase el Código de
Malinas).
2. Propone que se trabaje en privado y en
corporaciones oportuna y sabiamente consti­
tuidas, por la actuación de los principios socia­
les cristianos, adaptando al propio ambiente
las múltiples iniciativas de la caridad cristiana.
II. Considerando que la Pia Unión de los
Cooperadores Salesianos la dirigió el Beato
principalmente en favor de la juventud,
E l Congreso
1. Propone a los Cooperadores Salesianos
que apoyen con todas sus fuerzas las obras en
favor de la juventud estudiante y obrera que
acude a las Casas Salesianas, promoviendo la
existencia y el desarrollo de las mismas con
su cooperación pecuniaria y con su ayuda per­
sonal y moral.
2. propone además que procuren la fun­
dación de otros institutos o escuelas exigidos
por las necesidades locales, ya sean diurnas o
nocturnas y de instrucción elemental, obrera
o cívica.

TEMA III.
Organización.
Considerando que el Beato Fundador de la
Pía Unión quiso sirviera de remedio contra
el aislamiento de los buenos, tan perjudicial a
la causa de la Religión y de la civilización
cristiana,
E l Congreso

recomienda a todos los Cooperadores Salesia­
nos que procuren la íntima miión de todos los
miembros de la Asociación, de tal modo que la
actividad individual sea sostenida y coadyu­
vada por la de los demás.
Y a este fin propone que:
1. Se estudie y practique a fondo el Regla­
mento de la Pía Unión.
2. Se implanten y organicen debidamente
en todas las Diócesis y regiones los núcleos

activos constituidos por los Decuriones, los
Directores Parroquiales y Diocesanos, Celado­
res y Celadoras.
3. Se establezcan comités de acción, según
las diversas necesidades de las obras salesianas
fundadas o por fundar, destinadas a la asis­
tencia y ayuda en favor de los jóvenes pobres
y abandonados, objeto de los cuidados de la
Obra Salesiana.
4. Se celebren con el mayor cuidado en
cada centro las Conferencias salesianas, pres­
critas por el Reglamento para las principales
solemnidades del año; y jamás falte en el dis­
curso o en las fmiciones acostumbradas, el inter­
cambio de ideas y de impresiones, indispensa­
ble para la actuación del programa religioso y
social propio del Cooperador Salesiano.
5. Se celebren en determinadas circxmstancias, bajo la presidencia del Inspector Salesiano,
en el lugar más conveniente, reuniones de los
Cooperadores más activos, de los Decuriones,
Celadores y Celadoras en las cuales se concre­
ten las propuestas más convenientes al desa­
rrollo de la obra del Beato D. Bosco en los
distintos países.
6. Un hábil propagandista debe visitar los
diversos grupos y animar a cada uno de los
Socios a vivir la vida espiritual y operativa
que quería el Beato D. Bosco en sus Coopera­
dores, y esto no solo debe hacerse con ocasión
de extraordinarios acontecimientos, sino en
cuanto sea posible, todos los años, con escru­
pulosa regularidad.

Hacia la Canonización.
El 2 de junio del año pasado el Santo Padre
inscribió en el número de los Beatos a nuestro
Bienaventurado Fundador.
Ha pasado apenas im año de fecha tan glo­
riosa y ya se aprestan de nuevo las Sagradas
Congregaciones a emprender la Cau.sa de Ca­
nonización.
El 17 de junio próximo pasado, en el Aula
del Palacio Vaticano, llamada de las Congre­
gaciones, se reunieron varios Cardenales para
tratar de los asimtos referentes a la Sagrada
Congregación de Ritos.
El Cardenal Verdi, Ponente de la Causa de
D. Bosco, presentó a los Cardenales ima de­
manda, propuesta por el P. Tomasetti, Procu­
rador General de los Salesianos y Postulador
de la Causa de Canonización, en la que pedía
a la Congregación de Ritos, decidiese la ini­
ciación de las prácticas preliminares para la

•( 232 )Causa de Canonización del Fundador de los
Salcsianos.
lín la demanda, iban especificadas las razo­
nes de la misma, esto es, el haberse comprobado
los milagros obtenidos por la mediación de Don
Hosco, a partir del día de su beatificación, y
también el indescriptil>le plebiscito de devoción
de Uxlo el mundo católico hacia el gran Apóstol.
Iva Sagrada Congregación de Ritos, oída la
propuesta del Cardenal Verde, dió su parecer
favorable para la apertura del proceso de san­
tificación de D. Bosco.
K 1 Solxírano Pontífice, infonnado el día si­
guiente de la decisión de los Cardenales, firmó
inmediatamente el decreto por el que declara
(jue se vxielve a emprender con miras a la Ca­
nonización, la causa del Beato Juan Bosco.

G R A C IA S
DEL B E A TO JU A N B O S C O

Favorable diagnósíico.

Mi hermana sufría desde hacía algún tiempo
de continuos y peligrosos ataques de tos que
la hacían sufrir terriblemente. El doctor que
la cuidaba creyó que se trataba de tuberculosis
incipiente y para asegurarse mejor ordenó un.
examen de la enferma.
Alarmada yo por las consecuencias de un
fatal diagnóstico, acudí llena de fe al Beato
D. Bosco prometiéndole que en caso de ser fa­
vorable la sentencia de los especialistas, envía
ría como prenda de mi gratitud una oferta para
las Obras y Misiones Salesianas. Con indecible
alegría el doctor nos dijo, acabado el análisis,
(jue no había |jeligro alguno de tuberculosis,
sino q\ie se trataba tan solo de xma tos perti­
naz que iría desapareciendo con un tratamiento
adecuado. Así sucedió; por lo cual tanto mi
hennana como yo damos infinitas gracias al
Beato D. Bosco porque estamos seguras de su
intervención sobrenatural. Con la oferta que
hoy mismo enviamos al Rector Mayor de los
Salcsianos, deseamos hacer pública nuestra gra­
titud al señalado favor recibido.
Tampico (Méjico)
mayo 1930.
María Cárdenas dií R oberts, Coop. Sa/.
A p cn d iciíis curada.

Desde hacía seis años venía padeciendo de
una apeudicitis crónica, con ataques seguidos
siendo el último de mucha gravedad. La ra­
diografía en diez placas constató el estado i>eligixjso de mi salud y era consejo de los niwlicos
(|ue hiciera un viaje a Rochester, Estados
Unidcís. para ser ojvrada jxir los célebres her­
manos Mayo.

En esos momentos angustiosos, porque sov
casada y con hijos, recibí la visita del director
del Colegio <Don Bosco » de esta capital, el
cual me aconsejó que acudiera al Beato Don
Bosco. En la misma tarde me envió una reli­
quia del Beato, que me apliqué a la parte dolo­
rida. Los dolores y las angustias fueron aumeatando en intensidad hasta las nueve de la no­
che y cuando pensaba haber llegado para mí
la última hora, he aquí que de repente me hallo
aliviada y paso la noche tranquila. Sin embargo,
antes de reconocer xma gracia del Beato quise
esperar irnos días, hice ejercicios, fui a los ba­
ños de mar, comencé a comer de todo lo que
me había sido prohibido..; y hoy, a los cuatro
meses de haber recobrado mi salud, doy publi­
cidad al milagro obtenido por la intercesión
del Beato y mando una limosna.
San Salvador, 24 de abril de 1930.
María de B aratta .
M a nifíesfan fam bién su g r a fifu d a l Beato:
AGUASCALIENTES (Méjico ). — Baudelia Díaz y J. L. A. por la curación de sus
seres queridos, Julia y Sara.
BUENOS-AIRES (Argentina). — Josefina
Hechart, por un especial beneficio recibido. —
Angela Pangare de Zato por haber alcanzado
del Beato un señalado favor.
CANANEA (MÉJICO). — Guadalupe Franco
por haber alcanzado la salud y envía una oferta.
f Ón TIVEROS (España ). — N. N., emía
10 pesetas, agradecido al Beato por una gracia.
MÁLAGA (España ). — Emilia López por
un favor recibido envía una limosna.
MÉJICO. — Beatriz Castañeda y Guyard,
María Aldrete, Refugio Reza, Eugenio Mendoza,
María Cumming, Familia Arana, Carmen Gue­
vara, Catalina A. vda. de Guyard, y María
A. vda. de Castañeda, agradecidas al Beato por
varios favores que les alcanzó manifiestan pú­
blicamente su gratitud y envían una limosna
RIO GAIvLEGOS (Argentina ). — Una fa­
milia consolada por haber alcanzado la salud
de uno de sus miembros, envía una oferta.
ROCIL'V (Uruguay ). — Emilia G. de Ru­
bio, por haber alcanzado la salud de su esposa
RONDA (E spaña). — Miguel Serrato García
da gracias al Beato por haberle conseguido
cuanto deseaba.
ROSARIO (Argentina). — Magdalena R^
petto da gracias al Beato por haberle obtenido
la salud de una hija.
SAN LEANDRO (EsT. U nid .). — M. Avellar por un favor recibido envía una oferta.
SANTA TECLA (El, S alvador).— María N.
Ruiz.por haber alcanzado la salud de su hermana-

( 233 )

El Instituto Teológico Internacional “D. Bosco”
La necesidad de formar buenos sacerdotes,
preparados por su ciencia y ^’i^tud para cmnplir en medio del mxmdo la misión confiada al
Ministro de Cristo, decidió a los Superiores de
la Congregación a fundar un centro de piedad
Vestudio, en donde los teólogos pudiesen dedi­
carse con la tranquilidad y recogimiento nece­
sarios al estudio de tan elevadas disciplinas, y
al mismo tiempo, tuviesen ocasión de seguir
SQ formación religiosa y salesiana.

frente a frente en el campo de batalla, pero
que hoy se unían en fraternal abrazo como hijos
de un mismo padre y adalides del mismo ideal.
Pero aumentando siempre más el número de
los alumnos, los Superiores determinaron que
el Instituto fuera trasladado a Turm, y en 1923
se inauguró merced a la generosidad del Rvdo.
P. Tomquist, la hermosa Casa situada en el
barrio llamado la Crocetta.
Y con el número parece a\nneutar el buen

Turln. - Vísia general del Insühiio Teológico Iniernacional “ Don Bosco

En 1904, se inició en la casa salesiana de
Foglizzo este centro de estudios, bajo la di­
rección inmediata de los Superiores, quienes le
prodigaron siempre su cariño y sus desvelos,
y cou frecuentes visitas y conferencias, infun­
dían en los jóvenes alumnos el genuino espíritu
del sistema salesiano.
A los diez años de su fimdación, en 1914
contaba ya con 120 alumnos, procedentes de
dh'ersas naciones, pero precisamente en aquel
Jnism<i año, al desencadenarse la guerra euro­
pea tu^*ie^on que abandonar el Instituto para
ir a defender sus patrias respectivas. El insti­
tuto fué naturalmente decayendo hasta que
tuvo que clausurarse en 1917.
Dos años más tarde, al terminar la guerra,
llamó a sus moradores dispersos, y volvieron
^ encontrarse en sus muros im buen número
de jóvenes, que ayer se encontraban tal vez

espíritu: el ambiente que reiua en e.se Instituto
es ejemplar. A pesar de la babel de lenguas
y diferencia de caracteres, de gustos y de aspi­
raciones, la caridad más exquisita reina por
doquier. Es admirable el espíritu de solidariedad que se aprecia en tantas circimstancias,
como por ejemplo, en la enseñanza mútua de
idiomas.
Los estudios se realizan en el plazo de cua­
tro años, de estudio regular, en conformidad
con las disposiciones canónicas.
Los profesores, de fama reconocida en toda
Italia, saben sachar provecho de la buena dispo­
sición de sus aliimnos para inculcar no sólo la
letra, sino el espíritu de las sagrados estudios.
Fama universal tiene el eximio profesor de
Escritura, D. Santiago ilezzacasa, cuyo re­
cuerdo perdura simpático en todos cuantos han
tenido la dicha de tratarle.

-( 234 )La enseñanza del Dogma está a cargo del
P. Kusebio Vismara, como asimismo la de Li­
turgia. Con tal maestro, huelga decir que los
alumnos salen del Instituto con un espíritu
sacerdotal muy depurado.
I.as lecciones de Moral son impartidas ^ r
el Rvdo. P. D. Andrés Gemiaro, quien en imión
con el Inolvidable P. Piscetta ha redactado los
libros de texto, obra de gran valor científico
y jKíflagógico que ha merecido unánimes ala­
banzas de los entendidos en la materia y calu­
rosos elogios de las más prestigiosas Revistas
líclesiásticas.
Una nota característica del Instituto es el
espíritu Misionero que reina en él. Los Teólogos
están en comunicación^ directa con las diversas
Misiones Salesianas a las que ayudan en la
medida de sus posibilidades, manteniendo con­
tinua córrespondcncia con todas ellas y coope­
rando a la redacción de las diversas Revistas
Misioneras de varios países, mediante artículos
en que dan a conocer nuestras Misiones.
Fruto de este espíritu es la abundante cose­
cha de misioneros (lue cada año se recoge en
el Instituto. Actualmente el Japón, el Siam,
la India, Clüna, etc., cuentan un grupo de ce­
losos Misioneros salidos de las aulas de la Crocetta.
Pero cuando se puede apreciar en todo su
valor el bien inmenso que realiza esta obra
admirable, es en la primera quincena de julio,
en que, terminado el curso escolar, tiene lugar
la solemne y emocionante función de las Or­
denaciones.
liu el ]>resente año son más de setenta lo
jóvenes, que terminados sus estudios, han
llegado a la cima de sus aspiraciones. Era un
esi)ectáculo maravilloso el que ofrecía la gran
Basílica de María Auxiliadora el día 6 de julio.
A la llamada del Prelado se iban presentando
los jóvenes levitas para recibir la unción sa­
cerdotal, trémulos por la emoción, reflejando
en sus rostros el gozo indescriptible del Apóstol
a quien se le acaba de abrir las puertas del
mundo para que en él derrame las riquezas de
su corazón sacerdotal.
Y no menos gozoso se hallaba el Padre de
todos, el Rvdo. Rector Mayor, al ver el conso­
lador escuadrón de Sacerdotes Sale.siunos, des­
tinados a extender y robustecer en el mundo
la gloriasa Obra de D. Bosco.
Beneméritos Cooperadores y piadosas CooI>erndoras. De sobra nos es conocida vuestra
generosidad y vuestro desprendimiento; pero
si tuvierais el placer de asistir a una función
semejante q\;etlaríais convencidos de una gran
verdad: cosa grande y meritoria es el abrir
asilos, fundar Colegios, sostener pensiones....
jK'ro contribuir a la formación de buenos sai'erdotes, es mucho más importante, más fe­
cundo. más meritorio.

LLUVIA DE G RA CIA S
atribuidas a la intercesión de la Sierva de Dios
DOROTEA DE CHOPITEA.
Teniendo un asunto de intereses casi impo.
sible de solucionar, supliqué a la Sierva de
Dios Doña Dorotea de Chopitea interpusiese
su valiosa mediación con el fin de obtenerme
de María Auxiliadora ima pronta solución. Y
la gracia no se hizo esperar, siendo tan favora­
ble como rápida. Agradecida cumplo mi pro­
mesa de remitir lo pesetas para la causa de
la Beatificación de la Sierva de Dios y otras
limosnas para las obras salesianas;- suplicando
publique esta gracia en el Boletín Salesiano
para estímulo de los fieles.
Valencia (España) mayo de 1930.
C. M.
Atravesando nuestro país una difícil situa­
ción económica, nos era imposible arrendar un
rancho propiedad de mi papá, que nos origi­
naba muchos gastos y grandes contrariedades.
Iveyendo el Boletín Salesiano, como Coopera­
dora que soy, tropecé cou la novena de Doña
Dorotea, y movida por ima fe y devoción que
de momento sentí, me arrodillé y le prometí
cou todo mi cora^n hacerle tres novenas se­
guidas, para que nos concediera la solución de
nuestra crisis económica. Al mismo tiempo le
prometí publicar la gracia en el Boletín y que
a mis expensas reimprimiría novenas para pro­
pagar su devoción.
Terminé las dos primeras novenas sin con­
seguir lo que pedía; por lo que comenzó a des­
mayar mi fe; de modo que la tercera novena
la hice con desaliento y tentada estuve de
abandonarla; pero a pesar de todo seguí ade­
lante. La sier\'a de Dios quiso premiar mi cons­
tancia y a los pocos días llegaron unos señores
que deseaban tomar en arriendo el rancho y
el último día de la novena el trato quedó
cerrado a satisfacción de todos.
Sumamente agradecida, cumplo mis pro­
mesas recomendando a los Cooperadores pidan
gracias por intercesión de la Sieiva de Dios,
seguros de que las obtendrán.
iiiiadalajara (Méjico) 28 mayo 19^0.
A na M. G onzález, cx-Alumua.
A iónifíesfon también su gratitud a Doña
D orotea:
GUATEMALA. — Ana C. de Fren, agra­
decida a la Sierva de Dios por haberla librado
de varias enfermedades, envía una limosna.
LOS YEB E N ES (España ). — Epifanio
pez Martínez, agradecido por varios beneficios
recibidos, envía 25 pesetas para la Causa de
Beatificación.

Sarriá-Barcelona — Visila de S . A. el Infante Don Jaime, hijo del Rey de España, a las Escuelas
Salesianas, de cuya perfecta organización quedó altamente sorprendido y agradablemente impresionado.

Turín — S S . AA. RR. los Priocipes de Piamonfe en d teatro del Oratorio
escocbaodo ia elocaenie conferencia d d Prof. Caviglia. S.S .

11

D e nuestras M isiones
Eníre los Jíbaros del Ecuador
(Reloción del P. Conrado Dordé).

K1 trabajo entre estos indios es realmente
penoso y duro, pero no deja de ofrecer de

vez en cuando consoladoras compensaciones,
pues en general corresponden al trabajo del
misionero.
Kn casa tenemos siempre un buen
número de jibaritos que trabajan
en sus huertitos y luego en la huer­
ta grande de la Misión. En las horas
más calurosas del día, en que es más
penoso el trabajo del campo, acuden
a la Misión en donde reciben la ins­
trucción elemental, alternando los
estudios con juegos al aire libre.
H ay que ver el entusiasmo que
despierta tanto en chicos como en
grandes el juego del foot-ball.

Consoladores resulfados.

Ecuador — Grupo de niBoa jibaros, alumaos de la Misióa.

Durante el año pasado hemos
tenido la dicha de administrar 34
bautismos de jibaritos, dos matri­
monios cristianos y 18 primeras
Comuniones. Varios jíbaros han
tenido el consuelo ...de morir cris­
tianamente y hasta han consentido
en ser sepultados en el cementerio
de la Misión, cosa rara y suma­
mente difícil, por el empeño que
siempre han mostrado en que les
entierren bajo su toldo, para evitar
que las lluvias torrenciales, propias
de esta región, les mojen.
Actualmente estamos preparan­
do otros seis matrimonios, que se­
rán bendecidos por ^lons. Coniín,
apenas llegue a la Misión, donde
le esperamos con tantas ansias.

•( 237 )•

M uerte ediScaníe.
A mediados de noviembre vinieron a avi­
samos que había caido gravemente enferma
Rosario Chingamei, una de las tres esposas
del indio Cayapa. E l P. Juan Chimassi se
dirigió sin pérdida de tiempo a la choza de
la enferma, acompañado por los dos hijos
de la misma, que se hallan en nuestra
Misión. Después de proporcionar a la en­
ferma algunos remedios, empezó a hablarle

de la colina a cuyas faldas se levanta la
Misión.
E l Padre, adivinando la causa, corre a la
iglesia, y acompañado por Antonio y Fran­
cisco, los dos hijos de la enferma, después
de tomar la cajita con las Sagradas Formas,
se pone inmediatamente en camino. Ea mar­
cha es sumamente fatigosa, ya que hay que
abrirse paso por entre los arbustos y espinos,
por no haber senda alguna. E l misionero tuvo
que caer varias veces al suelo y con él el

Méndez (bcaador) — Tres jibaritos bautizados d dta 15 de asosto del pasado afio.

de Dios, de su bondad infinita y de la mise­
ricordia con que perdona y olvida nuestras
faltas para llevamos a todos al cielo.
Después de esta explicación la enferma pi­
dió espontáneamente hacer la confesión ge­
neral quedándose completamente tranquila.
El Padre avisó a todos los parientes, que
apenas notaran que la cosa se agravaba,
le avisasen inmediatamente para poder llevar
a la enferma el Santo Viático, y a que eUa
misma lo había pedido con insistencia..
Al día siguiente, a eso de las cinco de
la tarde empiezan a oirse desgarradores
lamentos, que provenían de la cumbre
,

Buen Jesús, por los muchos pecados, de los
hombres. Por fin, ya de noche, llegó a la
choza y al instante pudo darse cuenta de
que la enferma se hallaba en las últimas
y había perdido el conocimiento, por lo que
no creyó conveniente darle la sagrada Co­
munión.
Y vienen las dificultades: regresar no se
podía a aquellas horas, con la oscuridad que
reinaba y por el peligro que ofrece el camino
a causa de las culebras numerosísimas y pe­
ligrosas. No hubo otro remedio que quedarse
a dormir en la choza, y el Padre, después
de colocar sobre el pecho la cajita que con-

-( í 38 )■
tierro del cadáver de la que fué Rosario Chingamei.
La familia, aunque anegada en llanto,
está resignada, porque la enferma se confesó
con tanta piedad y esperan por consiguiente
que ya vivirá allá arriba con el Dios %ranii.

Un bailo rasgo de piedad ülial
Pocos días después, explicando el catecismo
e insistiendo en la existencia del Purgatorio,
decía a mis jibaritos cómo podemos aliviar
los sufrimientos de nuestros seres queridos
y para esto les puse el ejemplo de S. Pedro
Anionio Cayapa (a la izqoicrcio) el Tarsicio jibaro
Damián. Al terminar la clase, el pequeño
a quien alude el Padre Dardé en su narración.
Cayapa pide penniso para ir al dormitorio y
después de registrar todos sus bolsillos en­
tenía las Sagradas Formas, se acostó en cuentra la suma dé un sucre y noventa y
tierra. Los dos niños que le acompañaban, cinco céntimos.
Con aquella cantidad en la mano y ra­
se tumbaron a su lado.
diante de alegría viene a mi encuentro y me
pregunta cuánto hay que dar para mandar
Un Tarsicio jíbaro. celebrar una Misa.
A l responderle yo que la limosna que se
A eso de la media noche, el pequeño An­ acostumbra es de dos sucres, el pequeño
tonio se despierta sobresaltado y dice:
Antonio se entristeció porque aún le falta­
— Padre, Padrito, Jesús tuim pujuá? ban cinco centimitos.
{l’adre, ¿dónde tienes a Jesús?).
No faltó quien se los regalara y entonces,
— Aquí sobre mi pecho, dice el Padre.
fuera de sí por la alegría, corrió-de nuevo
— • Déjamelo tener a mí, exclamó el in- a mi encuentro y depositando en mis manos
diecito.
su pequeño capital me dijo:
El Padre, que conocía bien la bondad del
— Mañana reza una Misa por mi mamá
corazón de aquel angelito de la floresta, que jy por el eterno descanso del alma de mi comhace ya más de dos años que comulga casi pañerito Juan-un indiecito que había muerto
diariamente, creyó oportuno acceder a sus pocos días antes.
deseos y le colocó sobre el pecho el preciado
Y en el registro de Misas de la Misión Satesoro.
lesiana de Méndez, se halla esta partida:
Y así quedó dormido hasta la mañana, en
1929 — Dia 28 de diciembre — M isa rezada
que despertó al sentirse acariciado por los pro dejunctis Rosario Changanei y Juan Sa­
primeros rayos del sol y el alegre canto de quean; ofercnie de la limosna: Antonio Cayapa.
las avecillas del bosque.
C onrado D arde
Después de una breve y devota prepara­
Misionero
Salesiam.
ción, recibió allí mismo la sagrada Comunión,
rogando por la salvación de su querida madre.
¡Qué angelitos se ocultan bajo la piel co­
briza de estos indiecitos!
Luego bajaron a la Misión para que el
Padre pudiera celebrar la Santa Misa.
A eso de las nueve de la mañana una grite­
ría ensordecedora nos anunciaba que la en­
ferma había dejado de existir. E l Padre en­
tonces, acompañado por los dos indios, por
una Hija de María Auxiliadora y algunos
hambres, fué de nuevo a la choza y como se
Dos baeAos ¡íbariíos recogidos por nneslro*
hallaba ausente el marido, procedió al en­
misioneros del Ecuador.

- ( 239 )

La fiesta de Pascua entre los Khasis.
Si el corazón del creyente se siente con fre­
cuencia oprimido por la tristeza en estos paí­
ses, al ver a las almas tan alejadas de las
doctrinas redentoras de nuestra santa Re­
ligión, también experimenta extraordina­
rios consuelos cuando le es dado admirar
el vigor de la vida cristiana en estos católi-

f / Viernes Sanio,
Muchos forasteros acuden de diversos pue­
blos de la Misión, para asistir a las funciones
del día. Estos nuevos cristianos tienen una
devoción al Misterio de nuestra Redención
que conmueve y edifica.

Shillotig. - NiRos indios qoe represeníaron el dramifa " Tarsicio

eos, que, si bien son pocos en número: sien­
ten y viven su religión con un fervor que re­
cuerda el de los primeros cristianos.
Vna de estas manifestaciones de vida cris­
tiana fué sin duda la fiesta de Pascua en
Shilong, centro y capital de la Misión del
Assám.
Eas funciones de Semana Santa, presididas
por Mons. Matliias y ejecutadas por los jóve­
nes salesianos que se preparan para el apos­
tolado en el j:ampo mismo de la misión, se
desarrollan con la gravedad y pompa edi­
ficantes del ceremonial, preparando las al
mas que participan en ellas con edificante
piedad, a la celebración del gran día de
Pascua.
Merece mención especial el Viernes Santo.

¡Con qué recogimiento y devoción se acer­
caban a imprimir su ósculo de amor a los
pies del Crucifijo! Un grupo compacto de
hombres, mujeres y niños en imponente si­
lencio y con Ids ojos arrasados en lágrimas
se agolpaban ante las gradas del altar donde
se adoraba a Jesús y después de depositar
la ofrenda de su amor, levantaban la ca­
beza radiantes de esa alegría que sólo el
catolicismo sabe sacar de las lágrimas.
Edificante fué también el fervor con que
siguieron las estaciones del Via-Crucis, des­
pués de haber escuchado con el mayor reco­
gimiento el sermón de Pasión de labios de
su celoso párroco. Pero el punto culminante
del día fué sin duda la solemne procesión
de la reliquia de la Vera Cruz.

•( 240 )El sol había ocultado sus ardientes rayos:
la noche había empezado a envolver en su
negro manto las montañas khasis cuyas ne­
gras siluetas dibujándose en un cielo cuajado
de estrellas recordaban las montañas que
rodeaban el Huerto de los Olivos, testigo de
la agonía del Salvador.
El fuerte viento dominante en este tiempo,
al mover las ramas de los árboles producía
ese misterioso gemido que hace creer que
la naturaleza se anima y se asocia a nues­
tro dolor. Una escena de fe venía a llenar
de vida y vida celestial este cuadro que con
frecuencia contemplamos en estos parajes:
era la procesión, grandiosa en su sencillez
y evocadora en su típico aspecto.
Componíanla largas filas de fieles con ha­
chones encendidos, que parpadeando en la
oscuridad de la noche, iluminaban aquellos
hombres de tez negruzca y paso grave;
aquellos niños, que olvidados de su natural
viveza, caminaban en compacto grupo con
las manecitas juntas y las cabezas incli­
nadas como bajo el peso de graves ideas
y recuerdos salvadores, que van formando
su conciencia cristiana; aquellas mujeres de
aspecto liierático, que, arrebujadas en sus
mantos, asoman unas caras ovaladas que en
su forma y gravedad parecen arrancadas de
los cuadros del Beato Angélico.
Aquellas caras morenas, aquellos trajes de
gusto oriental, iluminados por la tímida luz
de las hachas recuerda aquel cortejo de sa­
cerdotes y soldados que venían a prender
a Jesús; pero los cánticos que pueblan el
ambiente, cánticos de adoración y amor, per­
suaden de que no van a prender a Jesús sino
con los dulces lazos del amor.
Ea reliquia de la Cruz del Salvador, lle­
vada solemnemente por el sacerdote en me­
dio de aquellos grupos, dice que Jesús está
allí rodeado por el amor de un pueblo que
parece querer compensar con su fervor la
frialdad de tantos paganos y herejes, herma­
nos suyos.
Y después de este día viene la gran vigi­
lia de Pascua, el Sábado Santo, y en estos

E l Sábado Sanio.
días es cuando con más propriedad parece que
se reviven los primeros tiempos de la Iglesia.
A los forasteros, llegados en viernes, se aña­
den otros tnuchos venidos de regiones que
distan dos o tres días de viaje a pie, pues

es este el único medio de comunicación que
pueden emplear nuestros cristianos.
Unos son catecúmenos que acuden gozosos
para recibir el bautismo el día de Pascua;
otros, son los más, son cristianos que vienen
a cumplir con la Iglesia. Y por cierto que lo
hacen de manera edificante.
X a tarde del sábado la emplean en puri­
ficar sus almas con el Sacramento de la Pe­
nitencia.
Y por la noche... ¿dónde encontrar aloja­
miento para tantos? Ellos resuelven pronto
el problema. Se recogen en el local de las
Escuelas de la Misión, se acurrucan como
pueden — no digamos que se sientan — en el
suelo y en este lugar y postura pasan toda la
santa noche cantando himnos religiosos y ha­
blando de los grandes misterios de nuestra
santa Religión.

La fíesfa de Pascua.
Con esta preparación llega el solemne día
de Pascua y la espaciosa iglesia parroquial
es incapaz para contener tantos fieles como
acuden a recibir el Pan de los Angeles. A
los pies de Jesús se encuentran reunidos ricos
y pobres, los europeos y los del país y estos
son una amalgama de todas las razas de
estos contornos, aunque predomina el ele­
mento khasi.
Vense viejecitos que apenas pueden moverae y jóvenes llenos de vida, hombres, mu­
jeres y niños con los típicos trajes que les
diferencian; pero sobre todos destaca el nu­
meroso grupo de niños de la Primera Comu­
nión......
Acostumbrados como estamos los europeos
a represeutanios los angelitos de cara blanca
y sonrosada, aureolada por los dorados bucles,
de su sedosa cabellera, casi no podemos pen­
sar en ángelos de tez oscura, nariz chata y
labios abultados.
Y sin embargo en la cara negra de estos
angelitos vestidos de blanco y coronados de
flores brilla un candor y una inocencia que
parece sale a borbotones de esos negros ojazos que con ternura indefinible se fijan en
los blancos velos bajo los cuales se esconde
Jesús. Y Jesús entra en aquellos corazóncitos, verdaderas flores silvestres, que im día,
merced a esta savia divina, se convertirán
en semilla bendita que produzca la conver­
sión de estas regiones hoy aún sentadas en
las sombras de la muerte.

-( 241 )
Más de dos mil fueron las comuniones ad­
ministradas en este día memorando y no obs­
tante que la función se hubiera prolongado
más de lo que podría esperarse, la iglesia se
volríó a llenar de nuevo para la Misa Ponti­
fical celebrada por Mons. Mathias.
La Misa fué precedida por otra ceremonia
digna de mención. Dos novicios salesianos,
hijos de la India, recibían la sotana de D.
Bosco. Otra esperanza de regeneración para

Por la tarde se continuó administrando el
santo Bautismo a los niños. Casi un centenar
fueron los bautismos administrados en este
día sólo en esta parroquia de Shillong; otros
varios se administraron en otros distritos,
y aún aqm' continuaron los días siguientes,
llegando los nuevos cristianos a la consoladora
cifra de i6o.
De esta manera el reino de Jesús se va ex­
tendiendo por estas regiones.

Shillong. - Vista general de nnestra Residencia.

estas tierras cuya evangelización recibirá es­
pecial incremento con los trabajos del ele­
mento indígena.

E ¡ Bautismo de los neófífos.
Estas funciones ocuparon toda la mañana;
pero contemporáneamente se desarrollaba
otra más consoladora aún: la administración
del santo Bautismo.
No obstante haber empezado m uy dema­
ñana el bautismo de los adultos, ocupó la dulce
tarea a varios sacerdotes hasta el medio día
ea que aún recibieron la Santa Comunión
muchos de los nuevos cristianos.

Por la tarde después de las vísperas acu­
dieron a la Casa del Noviciado a saludar a
Mons. Mathisa. El espacioso patio se hallaba
completamente ocupado por los cristianos,
que, acompañados de los niños de las es­
cuelas con sus banderas y la Banda de mú­
sica, venían a rendir este cariñoso homenaje
al que es Padre de todos.
Fué una escena de familia que induda­
blemente confirma a estos cristianos en la
idea de que al recibir el santo Bautismo so­
mos hechos hijos de Dios y por consiguiente,
todos hermanos.
Recibido Mons. entre entusiastas aplausos
y vítores, un muchacho le dirigió un discur-

•{ 242 )•
sito en nombre de los nuevos cristianos, en
el cual, en nombre proprio y de todos sus
Jiermanos daba las más rendidas gracias a
Su Excelencia por liaberlos regenerado aquel
día con las aguas del Santo Bautismo y luego
pasaba a felicitarle las Pascuas.
Contestó con afecto Monseñor y terminó
dando su bendición a todos ellos, que le
aclamaron con desbordante entusiasmo.
De esta manera celebramos aquí la fiesta
de Pascua, que dejó en el ánimo de estos

cristianos nuevos alientos para perseverar
en la fe abrazada, y en los misioneros nuevos
deseos de sacrificarse por un pueblo que tan
bien corresponde a sus desvelos y cuyo eco
quisiéramos que llevara al corazón de nues­
tros lectores y amigos nuevos entusiasmes
para seguir ayudando la hermosa obra de
las Misiones que tan consoladores frutos pro­
duce.
E duardo G utiérrez
Pbro. Salesiano.

Un Ilanwmienío a /as almas generosas.
ijesore! ;Qnién de vosotros ha oído este
nombre? Quizás pocos de los lectores. Pues
bien, sabed que Jesore es una pequeña ciu­
dad de Bengala (India) que pertenece a la
paupérrima y difícil Misión y diócesis de
Krisimagar, confiada recientemente a los
Padres Salesianos del Beato Don Bosco, y
regida por un Prelado español, Mons. Manuel
Bars y Geli.
Jesore es centro de un Distrito con tres
millones de habitantes, de los cuales sóloalgo
más de 2.000 son Católicos. Nuestra gente
son pobres pescadores y agricultores, es di­
fícil imaginar hasta dónde llega su pobreza.
Hay, o había en Jesore una Iglesia y una
casa para el Misionero, con un Asilo para
huérfanos; pero ¡en qué estado tan lamen­
table .se hallan! ha casa y el Orfanato han
sido ya deshabitados porque amenazaban
ruina. En idénticas condiciones se halla la
Capilla. El buen Jesüs, único consuelo de
estas pobres gentes, tiene que abandonar
su casa y gitarecerse en un pobre portal,
como aquel de Belén.
Eos huerfauitos de Je.sorc, pobres pája­
ros sin nido, se han visto abligados a volar
y refugiarse, en chozi\s y casas particulares,
y con ellos el pobre Misionero ha tenido que
buscar asilo en un pueblucho en el corazón
de la selva, en donde \*ive en la más austera

pobreza, por no llamarla miseria, desde
donde cuida su grey que tantas fatigas y
sudores le ha costado y por la cual está dis­
puesto a muchos sacrificios más, con tal de
no abandonarla. Allí retirado, sin cesar
nunca en su árdua labor de apostolado el
pobre Misionero reza y espera, sí, muy con­
fiado en c|ue la divina Providencia no faltará
tocando el corazón de las almas buenas...
y ya vé en su fantasía la Iglesia restaurada,
y el Orfanato poblado de nuevo por un
centenar de alegres y bulliciosos Iiidiecitos,
que juegan y cantan en las horas de recreo,
que estudian en la clase, y sobre todo que
rezan como angelitos en la Capilla, pidiendo
por todos sus Bienhechores y formándose
hombres de provecho.
¿Cuándo serán una realidad los ensueños de este jiobre Misionero? Cuando tú
quieras, lector amable: basta que oigas la
voz de Jesús que en estos momentos habla
a tu corazón pidiéndote una limosna para
reparar su casa y la de sus hijitos de Jesore.
No rechaces esta buena inspiración que
tantas bendiciones atraerá sobre tí y sobre
tu familia.
Los Católicos y los Huerfanitos de Jesore
elevarán diariamente al Cielo sus plegarias
por sus bienhechores y el Misionero los ben­
dice a todos con gratitud de corazón.

Culío de María Auxiliadora
Ecos de la Fiesía de María Auxiliadora.
De todas partes del mundo salesiano nos
llegan bellísimas relaciones de fiestas extraor­
dinarias celebradas en honor de María Au­
xiliadora. Colegios Salesianos, Parroquias en
donde activos y celosos párrocos, convertidos
en adalides de la Virgen de D. Bosco han
visto, gracias a su maternal ajmda, prosperar
la piedad y resurgir el espíritu cristiano;
gmpos de fervientes Cooperadores, que a
sus expensas organizan magníficas proce­
siones y simtuosos festejos, de tal modo que
no se nota la ausencia del Salesiano.
Es que la Santísima Virgen, bajo la dulce
advocación de Auxiliadora de los Cristianos,
se complace en derramar sus favores a sus
hijos y éstos saben corresponder con agrade­
cimiento a sus celestiales finezas.
Nos perdonarán los benévolos amigos que
remitieron detalladas relaciones de las fies­
tas, que las reduzcamos un poco, porque de
otro modo nos sería imposible dar cabida
en varios números- de nuestro Boletín a to­
dos los artículos que lian llegado a nuestra
Redacción.

RONDA (E spaña ). — Después del mes
que los dos colegios de la localidad celebra­
ron en sus respectivas capillas, con la piedad
y entusiasmo tradicionales, comenzó la so­
lemnísima novena el i6 de Mayo, celebrán­
dose todos los cultos en la Iglesia de Sta.
María la Mayor que se vió concurridísima
de fieles.
Ea parte del canto estuvo a cargo de la
Eacolanía de las'E scuelas de Sta. Teresa
los cuatro primeros días y los restantes a
cargo del Colegio del Sgdo. Corazón.

El día 24, como digno preludio de la fiesta,
tuvo lugar la Misa de Comunión general de
la Archicofradía.
E l 25, y a desde la mañana, se notaba una
animación y un entusiasmo indescriptibles.
Celebró la Misa de Comunión general el
Rvdo. P. Sordo, quien dirigió a- los niños,
momentos antes de la Comunión, un sentido
y apropiado fervorín.
A las 10 hubo Misa solemne, oficiada por
el Rvdo, Sr. Párroco de Sta. María, D. E u ­
genio Sánchez. Los niños de ambos Colegios
interpretaron con acompañamiento de or­
questa la misa Laúdate Pueri Domintnn, del
Mtro. Brunet y Recasens. El panegírico que
de la Virgen tejió el predicador fué digno re­
mate y coronamiento del solemne novenario,
pues cantó magistralmente las grandezas del
título de Auxilio de los Cristianos; uniendo a
las prerrogativas excelsas de la Madre, la
devoción filial y el celo- incansable de su
Apóstol, el Bto. Juan Bosco.
A las 7 de la tarde se ordenó la procesión.
E l paso de María Auxiliadora, verdadera ca­
nastilla de fiores naturales, esperaba en la
Iglesia Mayor.
Decir que, la procesión fué un triunfo, y
un triunfo magnífico de la Virgen, es decir
poco, pero es decir la verdad. Entusiasmo de­
lirante, público numerosísimo, apostado en
el trayecto, balcones y fachadas fastuosa­
mente engalanados, letreros luminosos, llu­
via de fiores que caían como cascada de luz
y de cariños sobre Slaría Auxiliadora, lá­
grimas nacidas del fondo del alma, manos que
aplaudían, labios que vitoreaban...
E l desfile por la calle Espinel, plaza Ríos
Rosas y el típico puente del Tajo, fué verda­
deramente sugestivo. En la oscuridad de la

— ( 244 )noche, las interminables hileras luminosas
ofrecían un aspecto fantástico en extremo.
Iva entrada de la Virgen en la Iglesia Mayor
fué también algo emocionante y conmove­
dor. lya amplia Colegiata, repleta de fieles,
esperaba anhelante la llegada de su Reina.
Y la Virgen entró entre los solemnes acor­
des de la Marcha Real y los ensordecedores

Ronda (Málaj^a) — Colegio Sgdo. Corazón de Jesús.
Trono de M ario Auxiliadora durante los solemnes
cultos del mes de Mayo.

vivas y clamores que brotaban de todos los
pechos...
Se cantó una copla popular y luego subió
al púlpito el r . Sordo para decir a los fieles
la última palabra del fervor y del entusiasmó,
la palabra de la satisfacción y de la com­
placencia de la Virgen por el amor y la devo­
ción con que la dudad de Ronda había se­
guido su paso por las calles; la palabra de la
protesta de fidelidad en el cariño y amor
cada vez más vivo y más intenso de los
Hijos para con la Madre.

A LIC A N TE (E spaña ). — Que es María
Santísima la Reina de los corazones alican­
tinos, que nutren éstos por Ella una devoción
tierna, un afecto más que filial, im amor sin
límites, nadie lo pone en duda, pues pmebas
de ello han dado, no en una, sino en millares
de ocasiones los hijos de la nobilísima Ali­
cante.
Y ¿qué prueba más fehaciente del amor de
los Alicantinos a la Reina de los cielos que el
esplendor de las funciones con que la han
honrado durante su mes? ¡Qué gozo tan
puro inundaba nuestra alma al ver todos
los días a un gran número de devotos
de María Auxiliadora postrados ante su altar
para ofrecerle durante el Ejercicio de las
Flores los homenajes de su cariñol ¡Qué
placer, qué satisfacción tan intensa la que
probamos en el hermoso día de la Consagra­
ción de los Niños y en el no menos hermoso
de la Consagración de las Señoras y Caballeros
a María Auxiliadora, al poder admirar la
fe sincera, la confianza amorosa con que se
entregaban en manos de Aquella que es
Señora del Universo y a quien constituían...
Dueña de sus casas!
[Qué emociones tan suaves, qué alegrías
tan arrobadoras las que de nuestro corazón
se apoderaban en los días de la solemnísima
Novena al ver que no bastaban en ocasiones
dos sacerdotes para distribuir la Comunión
a los fieles, al contemplar a un crecidísimo
número de Antiguos Alumnos asistir todas
las mañanitas, sacrificando parte de su sueño,
a la función que para ellos se celebraba, al
convencemos de que era pequeña, muy pe­
queña nuestra Iglesia, a pesar de sus conside­
rables dimensiones, para- contener el número
incontable de devotos de María Auxiliadora
que acudían por las tardes a ofrendarle los
homenajes de su veneración profunda, a re­
crear sus espíritus oyendo las alabanzas de
nuestra celestial Madre de labios del elo­
cuente, virtuosísimo P. José M. Soto de Sta.
Teresa, Provincial de las Escuelas Pías, que,
amante tiemísimo de María, supo comunicar
a los nuestros el fuego que abrasa su
corazón!
Y ¿qué decir del gran día de la Fiesta?
Día de gloria, día magnífico cuyo recuerdo no
se borrará jamás de la mente y corazón ¿e
los buenos Alicantinos, pues pocas veces,
quizá ninguna, habrán experimentado en su
vida goces más puros, más celestial alegría
que la probada al contemplar la victoria

( 245 )espléndida, el triunfo incomparable de los
amantes de María Auxiliadora. La procesión
salió, con más esplendor que nunca y fue
una procesión magnífica, preciosísima, por
que en sus filas figuravon a millares los que
sienten devoción por María Auxiliadora, los •
que la aman con cariño de hijos, los que for­
man en las procesiones no para ostentar y
lucir, sino para exteriorizar su entusiasmo,
para dar brillante ejemplo de fe, los que
tienen alma de cristiano, corazón de creyente.
Y la procesión hizo todo su recorrido en­
tre aclamaciones jubilosas de los fieles, eirtre \dtores entusiastas, bajo una lluvia de
flores que de los balcones, primorosamente
engalanados, descendía sobre la arrobadora
Imagen de María Auxiliadora, cuyas andas
lucían la espléndida iluminación eléctrica que
con sus sacrificios, han costeado los Caba­
lleros de la Archicofradía — Y como si el
entusiasmo de los fieles fuera aún poco,
como si las explosiones de nuestro delirante
ardor no fueran bastante vehementes, com­
prendiendo que mucho, muchísimo más de
lo que nuestra poquedad puede tributar a
María es lo que Ella merece, se unieron a
nosotros algunos individuos que ajenos en
cuerpo y alma a la procesión, cooperaron sin
quererlo a su brillantez con algunas salvas
que fueron contestadas con el grito enérgico,
atronador de ¡\^iva María Auxiliadora!
Y ¿como describir el momento culminante,
la entrada de la Imagen en su Iglesia?.
Acto tan emocionante y commovedor tuvo
un final verdaderamente apoteósico; mien­
tras la Imagen de María Auxiliadora, sobre
su hermoso trono, entraba en el templo salesiano, siempre de cara a los millares de
fieles que elevaban al cielo sus plegarias con
lágrimas en los ojos, hendían los aires los
cohetes luminosos, volteaban gozosas las
campanas y en el espacio se abrazaba el
estampido de los truenos de ima traca con
los acordes de la Marcha Real española,
mientras un grito unánime salía jubiloso
de todos los pechos: [Viva María Auxiliadora!
Y abajo las bóvedas del templo, el reveren­
do señor Director de las Escuelas Salesianas,
pronunció una breve, pero elocuente plática,
poniendo de manifiesto el sublime acto rea­
lizado por los catóhcos acompañando a su
Virgen por las calles de la población y esti­
mulándoles a seguir poi este camino para
bien de la Reli^ón y tranquilidad de las
conciencias cristianas, terminando con va ­

rios vivas que fueron entusiásticamente con­
testados por los millares de fieles que in­
vadían el templo.
TUCUM ÁN (R. A rgentina ). — E l día
de María Auxiliadora fué un día lleno de

San Cristóbal (Méjico) — Noeva y bellísima imagen
de M aría Auxiliadora, obra de nuestros talleres de
Sarrifi, adquirida por los Cooperadores.

júbilo. Desde el comienzo hasta la terminación
de esta alegre jomada, todo salió a pedir
de boca, llevándose a cabo, con singular
acierto el programa fijado.
Por la mañana el Sr. Obispo Mons. Bemal
Piedrabuena, qnien tiene ya. dadas grandes

•( 246 )pruebas de afecto y cariño a la Congregación
Salesiana, nos honró con su presencia, cele­
brando la Santa Misa de Comunión general
repartiendo el Pan Eucarístico a un buen
grupo de niños que a compás de suave canto,
entre armonías y perfumes se acercaron por
primera vez al santo altar para recibir la
sagrada hostia.
A las 9 ^ , se bendijo la nueva hermosa
imagen de María Auxiliadora, acto que estuvo
a cargo de Mons. Abrahan Araoz, Vicario
de la Diócesis, actuando de madrinas las
distinguidas damas de la alta aristocracia
de esta Ciudad, Sras. Julia Etchecopar de
Nougués, Carmela P'. de Terán, Apolinaria
1'. de Terán, Lola Dode de Terán. Alcira
Lacabera de Cossio.
A continuación se ofició la Misa Solemne
celebrada por el R. P. Oromí, Superior de la
Comunidad del Inmaculado Corazón de María,
ocupando la sagrada cátedra el predicador de
la novena, R. P. Honorato Piffero, redentorista.
La Schola Cantorum ejecutó con maestría
partituras de Perosi, Botazzo y Ravanello
mereciendo los pequeños artistas, los más
justos elogios por la correcta interpretación
de tan difíciles autores.
Por la tarde a las 3 entre músicas, flores
y cantos de una inmensa legión de niños
y jóvenes, devotos de María, se llevó procesionalniente la nueva imagen de María Auxi­
liadora por las arterias de este barrio que
desde ese día, podemos decir, oficialmente,
María Auxiliadora ha instalado definitiva­
mente su trono de misericordia y de gracias
en nuestra Capilla para desde allí derramar
a manos llenas sus favores sobre esta zona
de la ciudad.
Con los últimos ecos del adiós de despe­
dida y las melódicas notas del órgano, entre
espirales de incienso, majestuosa y solemne
sobre la muchedumbre que oraba, descendía
la bendición del Smo. Sacramento cerrando
' con broche de oro su divino Hijo las fiestas
de la Madre Celestial María Auxiliadora.
G ERO N A (Hspa S^a ). — Un nuevo altar
de María Auxiliadora. — Con inusitado
esplendor el 29 de mayo se inauguró en el
Convento de PP. Franciscanos de La Bisbal
el nuevo altar y estátua de María Sma.
Auxiliadora. Concurridísima se vió la Iglesia
de los Hijos de S. Francisco para la misa de
las diez, en la que se cantaron las glorias de

la Auxiliadora por la cálida palabra de un
Padre Franciscano; y el potente coro, refor­
zado con elementos de nuestra escolanía,
acompañado de nutrida orquesta, puso vi­
braciones de solemnidad y entusiasmo inter­
pretando una grandiosa partitura del Jltro.
Sancho Marracó. Nuestra Banda dió un con­
cierto, como también amenizó la procesión,
que se desarrolló por la tarde, y que puso de
manifiesto la devoción que ya en aquella
importante población se siente por la Virgen
de Don Bosco, pues no fué parte el mal
tiempo para impedir que la iglesia rebosara
de fieles. Justo es congratularnos con los
Padres Franciscanos, con la distinguida do­
nante y con el pueblo todo de L a Bisbal,
pues un brote, y tan pujante como el suyo,
de la devoción de María Auxiliadora, por
fuerza ha de ser prenda de gracias sin cuento
y garantía de las más selectas bendiciones
del cielo.

G R A C IA S
DE M ARÍA AU X ILIAD O RA

Curación de una enfermifa.

Habiendo caído enferma una hijita mía de
once meses» con síntomas de extrema gravedad,
acudimos llenos de la más firme confianza a
nuestra buena Madre María Auxiliadora, la que
en todas nuestras angustias nos consuela. Des­
pués de haberla desahuciado el médico, fué
mejorando rápidamente, a pesar de que todos
esperaban xm fatal desenlace. Al invocar a Ma­
ría Auxiliadora imploramos igualmente la pro­
tección de D. Bosco aplicando a la enfermita
su reliquia. Nuestras sxxplicas fueron escuchadas
y hoy goza la niña de buena salud que prospera
de día en día gracias a la protección de Jlaría
Auxiliadora y de su sierx'o el Beato D. Bosco.
Que este relato anime a cuantos se encuen­
tran en alguna necesidad o angustia a acudir
a esta Reina poderosa que siempre está dis­
puesta a atender y consolar a sus devotos.
Bogotá (Colombia) marzo de 1930.
A xa de T rüjiw .o y familia.
Devuelve la salud a mi madre.

Habiendo caído mi madre gravemente en­
ferma hasta tal punto que el médico ya nos
había anunciado que no quedaba esperanza
alguna de salvación, acudí a María Auxiliadora
por mediación del Beato Juan Bosco. para que

devolviera la salud a mi querida enferma. Al
día siguiente empezó a mejorar y a los pocos
dias se hallaba completamente restablecida.
Prometí publicar este milagro en el Boletín
Salesiano, así como dar una limosna, lo que
gustoso cumplo para honra y gloria de mis
celestiales protectores.
Vigo (España), abril de 1930.
J. F igueroa.
Gracias, M a d re nuestra.

Debido a la actual crisis aguda que atraviesa
el país, estuvieron mis hermanos a punto de

Dan fambién gracias a María Auxilia­
dora y envían una limosna:
AGUASCAEIENTES (MÉJICO). — Rebeca
Macías Valdés manda una limosna en agrade­
cimiento a M. A. por im señalado favor.
B,ARCELONA (España ). — Un devoto de
M. A. dá gracias por varios favores recibidos
■ con motivo de los exámenes.
CALI (Colombia). — Dolores Sardo y Re­
beca Machado agradecidas por varios favores
envían una limosna para las obras de D. Bosco.

San Joan de Cnyo (Argentina) — La Imagen de M aría Auxiliadora trasladada a su nueva capilla.

perder la única renta de que disponían para
atender a las necesidades de la casa. En tan
crítica situación acudimos a María Auxiliadora
en busca de remedio-para semejante mal que
amenazaba rodeamos de hambre. Le pedimos
con fe y confianza y fuimos oídos por tan bon­
dadosa Madre y se salvó íntegramente la renta
de que he hablado.
Debo agregar que éste es apenas uno de los
innumerables favores, tanto espirituales como
materiales, que en casa hemos recibido de nues­
tra misericordiosísima Madre Maria Santísima.
Loor y alabanza sean dadas a Maria Auxi­
liadora, a quien todo cristiano debe llevar en
los labios para glorificarla y en el corazón para
amarla, imitarla y servirla.
Bogotá (Colombia) 24 marzo 1930.
N. X., agradecido amante de Maria.

DEAN FUNES (Argentina).
María C.
de Pereyra envía 100 pesos en acción de gracias
por h a ^ r obtenido la curación de una hija.
FONTIVEROS (España ). — Hipólito )vópez, agradecido por un señalado favor.
MADRID (España ). — Francisco Javier por
grandes favores recibidos.
MEJICO. — María del R., da gracias por
varios señaladísimos favores. — Varias perso­
nas devotas manifiestan igualmente su gratitud
a María Auxiliadora y envían una limosna.
PANAMA. — Angélica de Salvat, por un
señalado favor.
SANTA TECLA (El S alvador). — Luisa
Ruiz, agradecida, envía lína limosna.
SEVILLA (E spaña). — Sor Ermelinda Zanello, agradece un señalado beneficio de María
Auxiliadora.

Por

e/ mundo

lyANÚS (Argentina ). — Inauguración de
un Oratorio Festivo. — Leemos en el periódico
I T/a Opinión». del 30 de marzo:
«La obra de Don Bosco, que la Sociedad
Salesiana, ha llevado a todos los extremos del
país, con una fecunda acción cultural y cris­
tiana era insistentemente reclamada en Avella­
neda, especiahnente en zonas tan* pobladas
como Lanús, donde la niñez de hogares modes­
tos, obreros en su mayoría, necesitaba esos ho­
gares espirituales y culturales de tanta impor­
tancia en la formación de las nuevas genera­
ciones argentinas.
Es difícil que no exista en algún pueblo del
país, honda huella de la noble misión sale­
siana, tan intensa ha sido la obra de los
Hijos del beato Don Bosco, recientemente
beatificado por la Iglesia, y cuya santificación
no ha de demorar mucho, tienen los salesianos,
en su programa de cultura, el fin que animó
toda la vida ejemplar de su santo fundador:
La educación cristiana de la niñez, especial­
mente de la que pertenece a hogares modestos
y pobres.
Los salesianos tienen escuelas numerosas en
la capital federal y casi todas las provincias
argentinas. Su acción es intensa en los territo­
rios dol Sud, las misiones patagónicas, donde
han alzado colegios que son verdaderos faros
de cultura y de conciencia en las tinieblas de
vastas extensiones, huérfanas de maestros y
de misioneros hasta su feliz arribo a la Patagonia.
Sus escuelas de Instnicción primaria, normal
y secundaria, de artes y oficios, iuteniados, etc.,
tienen en los Oratorios Festivos, la más caracte­
rística de sus fundaciones, la iniciación del
beato Don Bosco, en la fundación de la socie­
dad salesiana, su expresión nu\s simpática y
quizius más definitiva para el ix>r\-enir moral
e intelectual de la infancia.
Un oratorio salesíano, sintéticamente, es una
casa dotada de toda clase de juegos aptos para
la niñez, de grandes patios, donde alternan la
cancha de football con las luuuacas y las clá­
sicas calesitas; atendido por religiosos de esa
orden, hombres consagrados, en el servicio de

salesíano

Dios, a educar a la niñez; y en el que la instruc­
ción religiosa es llevada inteligentemente a la
inquietud de la niñez, con la atracción de las
diversiones.
Un oratorio de esta índole, cuyos beneficios
pueden palparse por la idea que da la simple
definición que hemos anptado, es el que bajo
el nombre de San Jorge fué fimdado ayer en
Lanús, y a cuya inaugiiración concurrió una
caracterizada concurrencia de damas coope­
radoras de esta benemérita obra, de autori­
dades eclesiásticas y mimicipales.
El acto que revistió gran lucimiento se inició
como estaba anunciado, poco después de las
15.30, con la recepción de Monseñor Fortunato
Devoto y señores padrinos y madrinas del
nuevo oratorio. Entonado el himno nacional
que fué escuchado de pié y en absoluto silen­
cio, el doctor Pedro R. Tiesi, presidente de la
comisión pro oratorio festivo en Lanús, pronimció un brillante discurso de circunstancias.
Luego se coreó el-himno de Don Bosco por
los alumnos del colegio metropoUtano de Santa
CataUua.
Se dieron enseguida cumplimiento a los nú­
meros del programa.
Monseñor Devoto, procedió a confiiiuación a
la bendición del oratorio-capilla y ornamentos,
sosteniendo en ese momento numerosas cintas
los padrinos y madrinas de la ceremonia.
Una vez finalizada la bendición, se procedió
a firmar por la comitiva oficial e invitados un
pergamino y un libro dedicados como recuerdo
del acto al Obispo Auxiliar de La Plata, Mon­
señor Francisco Alberti, distribuyéndose entre
los concurrentes medallas y estampas coiunemorativas.
Luego fué servido un lunch a la concurrencia.
La banda mmiicipal de Avellaneda y la de
Bomberos de La Plata, amenizaron la fiesta
con im escogido programa musical.
MEJICO. — Circunstancias especiales, muy
ajenas a la voluntad y al sincero amor que en
esta tierra mejicana se profesa al Gran Pe"
Bosco, habían impedido que se celebrara dignn*
mente la gloriosa fecha de su Beatificadóo-

•{ 249 )Las mismas circunstancias, con resistencia
lamentable, limitaron todas las acti^^dades,
\(s deseos y los programas formulados para
festejar a nuestro Padre por primera vez, el
26 de abril; fecha establecida por la Santa
Sede para venerarlo como,a Beato. Pero aún
así, con limitaciones y reservas, y también con
inmenso fervor, la familia salesiana de Méjico,
rindió su tributo de amor al gran Apóstol de
la juventud. Beato Juan Bosco.
Dla. 26 DE A b r il . — Fiesta de las almas, po­
demos llamar la de ese día.
Desde muy temprano los alrededores del co­
legio, ante cuya fachada se había improvisado
un bellísimo altar en que campeaba la gloriosa

lentísimo Sr. Delegado Apostólico Dr. D. Leo­
poldo Ruiz y Flores y celebró el Santo Sacrifi­
cio. El fervor de los presentes fué en aumento,
culminando a la hora del Banquete Eucarfetico,
del que tuvimos la dicha de participar absolu­
tamente todos los presentes, llegando la emo­
ción hasta las lágrimas; de improviso, surgió
ima suavísima armonía de delicados cánticos,
que en aquella hora suprema, semejaba coros
angelicales... eran las niñas de las Hermanas
que con sin igual maestría, ejecutaron terní­
simos motetes. ¡Nunca como en aquel momento
se experimentó la suprema belleza de nuestra
Santa Relgión! El Beato Don Bosco conmo­
vido, también, seguramente, premiaba con

Méjico. - La Presidencia de la Velada Músico-Liferaría dorante la fiesía en honor dei Beato.

imagen del Beato, se hallaban concurridísimos.
Toda la familia salesiana de la República, ha­
bíase dado cita allí: los superiores y alumnos
del Colegio Salesiano de Méjico y los niños del
Oratorio Festivo anexo; los superiores y todos
los alumnos del Colegio de l ’uebla; el Sr. Dilector y los representantes del Colegio de Guadalajara; el Sr. Director y representantes del
Colegio de Moreha; las respetabilísimas señori­
tas Directoras de todos los Colegios de las Hijas
de María Auxiliadora establecidos en el país,
con un numeroso grupo de sus alumnas y valios señores cooperadores y señores exalumnos,
® representación de sus respectivos núcleos.
Cn total de mil personas que en devoto recopniiento y transportados por la oración, ro­
deaban al Beato y amado Padre Don Bosco,
miiéndose a toda la falange salesiana esparcida
'or todo el mundo, que en aquellos precisos
"-omentos le glorificaba.
A la hora establecida, se presentó el Exce-

creces aquella fíestedta que las almas de sus
hijos le ofrendaban.
Una hora después, en uno de los anchurosos
patios del Colegio, todos los alumnos salesianos
ya mencionados, formando un imponente ba­
tallón, aclamaron alegres al Excelentísimo Sr.
Delegado Apostólico quien, rodeado de los su­
periores y cooperadores, tomó asiento en un
estrado improvisado. Dos pequeñitos, con sim­
pático diálogo, le dieron efusivamente las gra­
cias por su visita tan agradable y tan deseada.
En seguida, el dignísimo presidente de los coope­
radores salesianos, Ing. D. Rafael de la Mora,
con su proverbial elocuencia, ensalzó la Obra
del Beato Don Bosbo y de sus hijos, en Méjico;
arengó a los jóvenes aJh' presentes, invitándolos
a mantener incólumes los principios de cris­
tiana moral y a alistarse, más tarde, en las
vanguardias de acción católico-sociaL Acto se­
guido, tmo de los señores ex-alumnos, dirigió
breves frases de gratitud al Exemo. Sr. Dele-

'( 250 )■
gado, recordándole que siempre y en todo
tiempo, se había mostrado Padre y Pastor
amantísimo de los Salesianos y que entre sus
actos de anior por la Obra de Don Bosco, culmi­
naban el de la inolvidable Coronación que de
la imagen de María Sma. Auxiliadora había
efectuado en Morelia y el que en esos momen­
tos le tenía allí presente, revestido con la di­
gnidad de Delegado de Su Santidad, condividlendo la dicha de la familia salesiana, en
aquella hora, en que por todo el mundo salesiano, las caTnpanas de los grandiosos santuarios
y las de las humildes capillas, tocaban a gloria...
3Í1 Delegado Apostólico dirigió a los presen­
tes frase.s de unción y de cariño, reiteró a los
sale.sianos su amor y devoción por el Beato
Don Bosco y sus Obras y exhortó á todos a
caminar por el sendero que el santo fundador
dejó trazado; invocando su protección sobre
totla la juventud mejicana.
A las diez, segi'in lo indicaba el programa, el
ilustre Sr. Canónigo D. Feliiie Pineda, Director
Diocesano de los Cooperadores Salesianos. ce­
lebró la Misa solemne; los alumnos cantaron
la «Misa de Angeli.s » con toda perfección; inIra tnissam, el m\ty estimado Sr. Inspector de
los salesianos, D. Duis Pedemonte, hizo el pa­
negírico del Beato D. Bosco, y dió a conocer
la excelencia de sus virtudes, dejando en el
ánimo de los oyentes, gratísimas emociones.
Con dichos actos tenninó ese día la fiesta de
las almas.
Día 27 Dlí AnRii,, — Conforme lo anuncia­
ron las elegantísimas invitaciones, a las 10 y
media, dió comienzo la fiesta deportiva.
I,as alegres notas de una brillante marcha,
atumeiaron la presentación de los tres grupos
dcix)rtistas, quienes encabezados por la Banda
de Música, desfilaron marcialmente ante la con­
currencia; y después de hacer algunas evolucio­
nes, quedaron formando una inmensa lira; así
colocados, entonaron el canto «Don Bosco re­
toma », que les fué muy aplaudido. Adto se­
guido, el amabilísimo Sr. Inspector D. Luis
Pedemonte, subió a la tribuna y en elegante
discurso expuso la Obra de Don Juan Bosco
en el inimdo, haciendo interesante estudio de
la labor que desarrollan los salesianos en la
Argentina, Peni, Brasil, Chile y cu las demás
Repiiblicas Sudamericauas. Un estniendoso
aplauso coronó tiui brillante pieza oratoria.
Siguió el número confiado a los |x>queños alum­
nos de las ICscuelas Externas anexas al Colegio.
Muy agradables y nphuulidos fueron los ejerelcitvs que presentaron, especialmente la es­
trella humana y el acto de gloria, durante el
cual hicieron aparecer, entre las bajideras na­
cionales y extranjeras el cuadro de Don Bosco
con María Auxiliadora.
Después de la »Marcha Sinfónica » perfecta­
mente ejecutada por la Banda del Colegio ed

Méjico, entraron a la palestra los robustos y
alegres muchachos angelopolitanos, quienes hi­
cieron honor a la tradicional fama de que goza
el Colegio de Puebla: la precisa y rítmica eje­
cución de sus ejercicios y, sobre todo, el arte
con que formaron las palabras «Viva Don
Bosco », les valió el entusiasta aplauso de la
selecta concurrencia. — Al finalizar este nú­
mero el pequeño grupo de músicos que forman
los pobrecitos hijos de la gleba de la Colonia
de Sta. Julia, conmovió a todos: sólo viéndolo
se pudo creer que aquellos jovencitos humildes
fueran tan aplicados e inteligentes, capaces de
arrancar a sus instrumentos casi deteriorados,
las melodías que en aquellos momentos ale­
graban a los presentes.
Al llegar a este punto del programa, el muy
estimado Sr. Direc^r del Colegio de Guadalajara, abogado D. José Sutera, abordó la tri­
buna, entre aplausos y agradable sorpresa de
todos y con frase elocuente, lleno de entusiasmo
y de franca sinceridad, expuso: que en aquella
hora de gozo y satisfacción, todos los salesia­
nos, al festejar a su fundador y padre, al aplau­
dir y agradecer sus admirables Obras tan be­
néficas a todo el mundo, desde aquel lugar, y
en tan solemne ocasión, tributaban un caluroso
aplauso y un testimonio de tagradecimiento al
Honorabilísimo Gobierno de la Nación Méjicana, por todas las atenciones y facilidades que
en todo tiempo ha prestado a los salesianos;
por lo que, públicamente, en aquel momento,
daban al referido Gobierno de Méjico, el testi­
monio de su más grande gratitud. Un prolon­
gado aplauso corroboró lo dicho por el ilustre
orador.
Después siguió el número culminante de la
Fiesta: los jóvenes del Colegio de Méjico, ale­
gremente irrumpieron aquel campo deportivo
improvisado: con singular destreza y matemá­
tica precisión; con vigoroso empuje y elegante
apostura, a la voz de mando del empeñoso y
entusiasta Sr. Director D. Luis Franchi, de­
sarrollaron una serie de difíciles y vistosos ejer­
cicios que fueron interrumpidos por los frené­
ticos aplausos de los invitados; sobresaliendo
las pirámides andantes y el apoteosis final en
que apareció la imagen de Don Bosco sobre
una pirámide humana. Una salva de aplausos
muy nutridos y de vivas completó aquel bellí­
simo cuadro de sol, de vida, de amor, de alma
y corazón snlesiano.
Dió fin a la preciosa exliibición deportiva, la
sentida alocución del joven G. Ortega, que para
agradecer la asistencia del Sr. Ministro y demás
concurrentes, pronunció.
Les llegó su hora a los refectorios del Colegio:
el ojo acucioso del cronista pudo contar hasta
seiscientos comensales que alegremente hiele*
ron los honores al suculento menú. La Direc­
ción, hasta en esto se lució.

( 251 )E pílogo . — A las 17 de tan memorable día,
en uno de los patios, vistosamente engalanados,
las Bandas de Música de los Colegios salesianos
de Puebla, Méjico y Oratorio Festivo anejo,
dieron rm magnífico concierto tocando las me­
jores piezas de sus repertorios; tanta alegría,
tanto gozo, no cupo dentro del Colegio y se
dispersó por la Colonia de Sta. Julia. Y de esta
manera, el Colegio, en im momento, se vió pletórico de ima multitud abigarrada que, — y
ésto es lo más notable — guardó, dentro de
la mayor alegría, mucho orden y ejemplar com-

entera con sus dignas autoridades al frente ha
tributado rm homenaje de amor a D. Bosco y
de gratitud a los Salesianos por su incansable
labor durante veinticinco años. La brevedad
de espacio nos impide narrar en sus detalles
los actos realizados. Preferirnos dar a conocer
ligeramente a nuestros lectores el desarrollo
adquirido por el Colegio durante los cinco lus­
tros de esdsteucia.
La divina Prorddencia con mi gesto que nos
atreveríamos a calificar de elegante ha dis­
puesto se unieran en el mismo ano tres hechos

Matará (Espafia) — Vista general del floreciente Colegio Salesiano que celebró este aRo sus bodas de plata.

postura, asistiendo a los hennosísimos fuegos
artificiales y a la gran serenata que los peque­
ños artistas de los salesianos, nos regalaron.
Así, democráticamente, terminaron las fies­
tas que al amantísimo padre D. Juan Bosco,
su famiUa en Méjico, con todo el corazón, alma
y rida, le dedicó.
iL\TARÓ (España ). — Con extraordinario
esplendor se han celebrado las Fiestas del Beato
Juan Bosco y la solemnidad de las Bodas de
Plata del Colegio.
Para honrar al nuevo Beato tomaron parte
durante el triduo y Festividad, todas las auto­
ridades de la localidad: eclesiásticas, civiles,
académicas, militares y judiciales. La ciudadad

I

de singular importancia para el Colegio: la
Beatificación del Padre, las Bodas de Plata y
la casi total realización del proyecto, que en
tiempxjs pasados se consideraba im sueño.
A los tres pabellones de que se componía el
Colegio cuando los Salesianos tomaron pose­
sión, se han juntado otros tres y una magnífica
iglesia; a los dos únicos patios interiores se han
sumado cuatro externos y espaciosos, que tie­
nen como horizonte cercano las montañas p>or
nna paite y el mar Mediterráneo p>or la otra.
A medida que se agrandaba el local ha ido
creciendo el número de alumnos. Frente a los
treinta de hace veinticmo) años, se presentan
hoy doscientos sesenta internos, máxima cabida
del Colegio. Existe completa la primera y se-

-{ 252 )gunda enseñanza, con escuelas elementales, es­
tudios comerciales, clasificados en cuatro cur­
sos y el bachillerato elemental y universitario.
Dispone el Colegio de amplios salones para cla­
ses y de modeniísimo material escolar que ba
merecido entusiastas alabanzas de numerosos
profesores de Barcelona.
Todo esto unido a la situación encantadora
del Colegio y al prestigio que año tras año ha
venido consiguiendo en los exámenes oficiales
del Estado, ha contribuido a colocarlo entre
los primeros y más acreditados centros docen­
tes de Barcelona.
Por sus aulas han pasado falanges de jóvenes
que hoy brillan en la Patria por su ciencia y
su virtud. Pero otros frutos aun más sabrosos
al Beato Padre ha dado el frondoso árbol: nu­
merosos sacerdotes que hoy trabajan en la dió­
cesis y en diversas Ordenes y Congregaciones
Religiosas. Con satisfacción especial recorda­
mos al P. Escursell, S. S. abogado y licenciado
en Geografía e Historia, que se halla en la inci­
piente misión del Japón. Terminamos estas
lineas felicitando a los cuatro directores que
con tanto acierto han dirigido el Colegio con
la súplica al Beato Juan Bosco que ha escrito
el actual: «Sigue presidiendoi Padre! nuestro
Colegio y haz que en él siempre brille como
hasta el presente tu Espíritu, que es manantial
de vida y de triunfos ».
ALCOY (España ). — Alcoy, la fabril ciudad
levantina, ha querido sumarse a la universal
apoteosis del año de la Beatificación de Don
Bosco con \m triduo de fiestas solemnísimas,
dignas de la gloriosa tradición católica alcoyana.
I<as funciones religiosas de los dos primeros
días, 30 y 31 de mayo, se celebraron en la Real
Parroquia de San Mauro y San Francisco y la
fiesta principal se celebró el primer día de ju­
nio en la parroquial iglesia de Sta. María.
«Da Gaceta de Levante * dijo con ocasión
de estas solemnísimas fiestas que han consti­
tuido para la Religión y la Enseñanza mía
efeméride digna de eterna recordación y mere­
cedora de figurar en los anales del ilustre pue­
blo como una de las fechas que abren el pecho
a la esperanza, por denotar el afianzamiento
de una obra hermosísima que comenzó con la
fundación del Ixmemérito Patronato, obra del
llorado Moséu Chusep y que se agiganta en
proporciones extraordinarias con la labor fe­
cunda y abnegada de los hijos de D. Bosco,
que tienen para la juventud alcoyana los afectos
sentidísimos do padres y los cuidados educa­
tivos de expertísimos mentores ».
Las fiestas (le Alcoy han presentado con
límpida pureza todas las características que
awinpaflan por doquier los homenajes cele­
brados en honor del Beato Juan Bcksco.
Extraordinaria e insospechada afluencia de

fieles y admiradores a todos los actos con un
fervor y santo entusiasmo indescriptibles; asis­
tencia de todas las Autoridades; magistral panegírico a cargo del limo. Sr. Dr. D. Miguel
Juliá Vilaplana, Deán jde la Catedral de Segorbe; el traslado de la imagen de D. Bosco.
que resultó un plebiscito de amor y una mani­
festación de indescriptible entusiasmo; el gran­
dioso festival gimnástico; y la Comunión gene­
ral, celebrada en la Parroquia de Sta. María,
fueron los actos más destacados de tan solem­
nes festejos.
Sobre todo la Comunión general del día de
la fiesta, que a decir de un cronista, ha sido
una de las mayores manifestaciones de fe eucarística que se han registrado en la Ciudad de
Alcoy. ¡Así quiere D. Bosco que se celebre su
gloria! Y no podía ser de otra manera, pues
en todos los actos se percibía el aletear del
espíritu del inolvidable y siempre amado Mosén Chusep.

Bien se puede afirmar que las fiestas de Al­
coy no han sido otra cosa que la manifestación,
la explosión jubilosa de toda la devoción y
todo el amor cíe Mosén Chusep haeda el apóstol
de la Juventud Obrera del mundo en general
y de hoy en adelante, de la alcoyana en par­
ticular.
CORRIENTES (Argentina ). — El primer
aniversario de la Beatificación de D. Bosco ha
motivado en este rincón deb territorio Argen­
tino una manifestación entusiasta de amor y
adhesión a D. Bosco que dejará profunda huella
en la memoria de cuantos la presenciaron.
Durante los días 24, 25 y 26 de abril se ce­
lebró im solemnísimo triduo caracterizado por
la extraordinaria concurrencia de fieles que se
acercaban con devoción sincera a recibir la
Sagrada Eucaristía y por la tarde oía:i com­
placidos a los elocuentes oradores sagrados que
a porfía se esforzaban por enaltecer la figura
de nuestro Beato Padre.
Daba particular realce a estos actos la pre­
sencia de nutridísimos grupos de ex-alumnos.
que con su edificante piedad, servían de eficaz
estímulo a todos. También los Cooperadores
Salesianos, sobre todo el día 26, dieíon palma­
rias pniebas de su adhesión y afecto al Beato
y a su Obra, asistiendo numerosos a la Misa
de Comunión.
El día 27, destinado a la festividad del Beato,
fué un día de triunfo. Desde muy de mañana
empezaron las sagradas funciones. A las 6 ya
se veía junto al altar del Beato a un anciano
sacerdote, de blancos cabellos y venerable as­
pecto, que celebraba <x)n fervor de serafm d
santo sacrificio, bañados en lágrimas los ojos.
Era el venerando P. Castilla, quien tuvo la
gloria de conocer al Beato y ayudarle allá en
su lejana juventud una de sus Misas. La ine-

( 253 )-

Corríenfes (Arg.) — Bendición por el S r. Obispo
de la bandera del 22° Batallón de Explor. D . Bo&co.

{able dicha de que goza el buen anciano, se
transfunde en los presentes, que se sienten a la
par conmovidos y santamente impresionados.
Siendo insuficiente la iglesia para contener
a tanta gente, como quiere honrar al Beato,
ha sido necesario celebrar ima Misa de cam­
paña, en el vasto patio del Colegio, que se
bailaba adornado con magnificencia. E l limo.
Sr. Vicario General de la Diócesis, Mons. Pe­
dro Dionisio Tibiletti, celebró el Santo Sacri­
ficio ,al que asistieron una falange inmensa de
jóvenes: Alumnos, es-alumnos, Oratorianos,
Exploradores de D. Bosco. Todos asistían al
santo sacrificio con edificante compostura y se
acercaron a cumplir con el precepto Pascual
ofreciendo así al Beato im doble y magnífico
homenaje.
A las I o tuvo lugar el acto de bendecir la
nueva bandera del Batallón 22 de Explorado­
res de D. Bosco. El limo. Sr. Obispo de Corrien­
tes, Mons. Luis M. Niella bendijo la enseña de
la Patria, en medio de un solemne silencio en
que los corazones latían coñ violencia ante la
grandiosidad e imponencia de la ceremonia.
A continuación el Rvdo. P. Juan Esteban Bajac, Capellán de la Legión de los Patricios pro­
nunció un cálido discurso que hizo vibrar los
corazones de todos en sentimientos patrios y
religiosos.
Por la tarde tuvieron lugar varios actos de
expansión para los niños, que gozaron inmen­
samente con los diversos juegos y bellas fun­
dones con que fueron obsequiados, terminando
alegremente este día, que fué para cuantos los
presenciaron, uno de los más felices de la vida.
ALEELA (España ). — Han resultado un
verdadero triunfo los festejos con que este en­
tusiasta pueblo ha querido honrar al Beato
Juan Bosco. Gracias al celo del Rvdo. Sr, Cura
Párroco D. Juan Vallés, los cultos celebrados
® honor del Beato han sido un fiel reflejo de

la fecunda actividad de las incansables Hijas
de María Auxiliadora, que con tanto celo ejer­
cen su apostolado en esta población.
Los cultos religiosos se han realizado en la
iglesia parroqxxial, pues la capillita de las Her­
manas resultaba’ insuficiente para la multitud
que quería mostrar su devoción a nuestro que­
rido Beato. EUos mismos espontáneamente se
ofrecieron a costear una hermosa estátua, y
no contentos con esto, le han erigido en la
parroquia un artístico altar..
Los días 16, 17 y 18 de mayo fueron los de.stinados a honrar al Padre de la juventud. Ha­
bía que ver la enorme afluencia de fieles que se
acercaban con tanta devoción a los Santos Sa­
cramentos, seguros de así honrar del mejor
modo posible al Beato.
La Misa de Comimión general que tuvo lu­
gar el día 18 fué el acto más conmovedor.
A continuación se procedió a bendecir la
estátua del Beato y luego se celebró el Oficio
Solemne, cantando la Misa con mucha afina­
ción y gusto las alumnas y ex-alumnas del
Colegio de las Hijas de María Auxiliadora.
El panegírico estuvo a cargo del celoso Sr.
Cura Párroco, quien valiéndose de la hermosa
parábola del Samaritano caritativo, supo pre­
sentar en modo maravilloso la caridad y el sacri­
ficio que animaron la vida del Beato J. Bosco,
Terminada la Sta. Missa se dió a besar a
todos los fieles la Rehquia del Beato.

Alella (Espafia) — Hijas de M . A. — El alfar de 1a
Parroquia en el dia de la fiesfa de D. Bosco.

254



Talca (Chile) — E&fado adual de las O bras del Colegio en construcción.

Por la tarde, después de la clausura del Tri­
duo, se procedió a la traslación de la estátua
ilesde la iglesia Parroquial al Colegio de las
Hermanas, que resiiltó una verdadera mani­
festación de amor y de entusiasmo.
MONTKVTDEO (Uruguay ). — En los Talle­
ras D. Bosco. — Con toda la solemnidad que
el caso requería se celebró el 4 de Mayo en los
Talleres Don Bosco la fiesta de nuestro Beato
Padre a quien sus hijos contemplan gozosos y
felices lleno de gloria en los altares.
Fué precedida por un Iriiluo de preparación.
Dirrante los tres dios las varias asociaciones
l)iadosas y las cofradías se acercaron en masa
a la Mesa ICucarística para honrar al Beato
Padre, a aquel cuyos únicos junores eran Jesús
líiicaristía y María Auxiliadora.
Por la tarde la vibrante y autorizada pala­
bra del Rdo. P. Dr. José María Vidal preparó
y enfcn’orizó U>s corazones de todos los asis­
tentes al trid;io para el día de la fecha.
Durante estos días se dió comodidad a las
fieles para besar la reliquia del Beato (un trocito del cerebro) que se couser\-a religiosamente
en nuestra Cripta.
Si grande fué la concurrencia durante el tri­
duo, el ÍGTXOT y la de\*oción subieron de punto
el día de la fiesta pues en las primeras horas
de la muüajia las naves de nuestra Cripta eran

estrechas para contener la oleada de fieles ávi­
dos de acercarse a la Sagrada Comunión, y de
besar la reliquia del Beato.
A las 9 los jóvenes del Centro Don Bosco
cumpUeron en masa con el Precepto Pascual y,
terminada la misa, se organizó una manifesta­
ción en la que fué ovacionado con todo el eutusiasmo de pechos juveniles su santo prote^
tor el Beato Juan Bosco.
A las diez se dió comienzo a la misa cantada
. El coro de los Artesanos ejecutó la misa del
M*^ Vittadini a tres voces. Las partes variables
de la nueva misa del Beato fueron magistralnrente musicadas por el M° Alberto (5onzáleí,
director del coro.
Acompañó en el órgano nuestro insigne coo­
perador y amigo el M® Urquizú.
Por la tarde, después del canto de Vísperas,
el Rdo. Pdre. Dr. José Ma. Vidal predicador
del triduo, nos hizo el panegírico del Beato
desarrollando con la maestría que le es pecu­
liar el lema: * Da milii aninras caetera toUe *encamándolo en toda la vida del Beato.
Mons. Jorge Shalita nos honró con su p^^
sencia impartiéndonos la bendición con S. DEsta fiesta de nuestro Beato Padre ha dejado
ciertamente profunda hirella de bien en el alma
de sus devotos y de sus hijos que continuarán
aclamándolo cual Padre y Pastor mientras ten­
gan voz en sus pechos y latidos en sus corazones.

•( 255 )'

Talca (Chile) — Gruta dedicada a Nlra. Sra. de Lourdes en la cripta de nuestra Iglesia.

TALCA (CHiiyE). — Con gran afluencia de
fieles y realzados con la presencia de los Ihnos.
Sres. Obispos Mons. Carlos Silva, JIons. Miguel
León y Mons. Carlos Labbé se iniciaron los
festejos que para ensalzar al Beato D. Bosco
habían preparado los Salesianos e Hijas de
Haría Auxiliadora, Cooperadores. Alumnos y
Antiguos Alumnos de la ciudad de Talca.
En días anteriores los principales rotativos
de la ciudad publicaron oportunísimos artícu­
los ilustrando la vida y Obras del Beato, que
sirvieron de excelente preparación para los días
del triduo, 9. 10 y r i del pasado mayo.
Los sagrados cultos tuvieron lugar en el artís­
tico Templo de María Auxiliadora, engalanado
ron profusión de luces y de flores, especialmente
d altar del Beato.
Pontificó el primer día y cantó las glorias de
b. Bosco por la mañana y por la tarde el dig­
nísimo Sr. Obispo de Tacapacá, Mons. Labée y
Márquez. El ilustre orador supo con su palabra
de fuego encender las almas de sus oyentes en
amor y entusiasmo por D. Bosco y su Obra.
El día 10 desde las primeras horas de la
mañana era imposible la entrada en el templo:
tanta era la afluencia de fieles. El limo. Sr.
Obispo de Linares, Mons. Miguel León Prado
pmitificó en la Misa Mayor. A l Evangelio ocupó
sagrada cátedra Mons. Labbé y Márquez,
por la tarde ima inmensa multitud se congregó

en la estación de los feirocarriles del Estado
para recibir la reliquia de D. Bosco traída
desde Turín por el Inspector de los Salesianos
en Chile, Rvdo. P. Berruti. Una imponente
columna de gente que ocupaba varias calles,
acompañó la sagrada reliquia entre cantos y
acordes musicales desde la estación al Colegio
Salesiano, mientras de todos los balcones caía
sobre las reliquias preciadas ima lluvia de flores.
El domingo día i i los festejos culminaron
con el solemne Pontifical del Obispo diocesano
Mons. Carlos Silva. Con magistrales pinceladas
retrató la magnífica figura del Beato el mismo
ilustre orador que en los días anteriores lo ha­
bía presentado a la admiración de los fieles,
demostrando el limo. Prelado lo acertado de
aquellas palabras del Obispo de Barcelona en
los Fimerales de D. Bosco: * Hoy rendimos
homenaje a un hombre; mañana levantaremos
templos a im Santo ».
Por la tarde un imponente desfile de las insti­
tuciones salesianas ante las autoridades locales
hizo conocer al público la extraordinaria vitahdad de la Obra Salesiana en Talca.
Puso fin a la manifestación la cálida palabra
del Rvdo. P. Insp>ector, quien agradeció a las
Autoridades, a los Rvmos. Prelados y a los
fieles todos, el entirsiasmo y firme adhesión que
demostraron para ensalzar dignamente al gran
Apóstol de la Juventud.

( 256 )SAN CRISTOBAL (Venezxiei;a ). — Las
Hijas de María Auxiliadora residentes en esta
ciudad celebraron con entusiasmo la fiesta de
su Fundador el Beato Juan Bosco.
Ivl 26 de abril tuvo lugar la fiesta en el Co­
legio. Empezó con una Misa de Comunión ge­
neral, celebrada por el limo, y Rvdmo. Mons.
Sanmiguel Obispo de San Cristóbal, durante la
cual se cantaron escogidos nrotetes. A las 8 se
celebró el Oficio solemne cantando la Misa un
grupo de alumnas internas.
Por la tarde celebróse una simpática velada
literario-musical en la que todos los números
del programa fueron debidamente interpreta­
dos, causando inmejorable impresión en todos
los presentes.
El domingo 27 tuvo lugar la solemne Misa
Pontifical a la que concurrió todo lo más gra­
nado de la sociedad, que aciidió a la invitación
de las Hijas de María Auxiliadora. El pueblo
en masa se sumó también a los festejos reli­
giosos, dando pruebas una vez más del afecto
y simpatía con que miran la Obra y la simpá­
tica figura de nuestro Beato Fundador.

NECROLOGIA

hasta los últimos días de su vida consagró sus
preferencias a sostener vocaciones salesianas
en nuestra casa de formación.
Lectora asidua y entusiasta del Boletín Salesiano, tomaba "vava parte en todas nuestras
obras, y fue para ella día de grande satisfaccióu
aquel en que fundó ima Beca misionera en nom­
bre de sus amados liijos.
De noble* abolengo y de arraigadas conviccio­
nes religiosas, supo formar mía familia profun­
damente cristiana que correspondió a sus des­
velos y fué su digna corona.
Corazón generoso, siempre abierto a todas
las miserias humanas, no negaba su óbolo a
nadie y dispensaba a manos llenas sus riquezas
para remediar las necesidades que conoda.
Como todas las almas escogidas fué probada
y purificada por el crisol del dolor. Por más de
diez años estuvo reducida a la más completa
inacción, y mientras con profunda amargura
veía desaparecer de su lado a tres de sus aman­
tes liijos que la precedían para la eternidad,
sus labios bendecían a Dios y su alma buscaba
refugio en la oración y en la piedad que forma­
ban su mayor consuelo.
Conciencia delicada, alma bella, como pocas,
en el délo habrá ciertamente encontrado el
premio reservado a los qhe pasan por este
mimdo sin contaminarse y hadendo el bien
a todos los que encuentran en su camino.
El recuerdo de los méritos de esa mujer fuerte
y piadosa mitigue rm tanto las penas de los
lacerados corazones de sus dos hijos supéistites, Alfredo y María, su predosa herencia en
la protecdón generosa y entusiasta de las obras
de Don Bosco.
Los Salesianos, no satisfechos con haber su­
fragado abundantemente su alma, pedimos al
Beato D. Bosco que agradezca en el délo a tan
- buena cooperadora el bien que dispensó a sus
hijos en esta tierra.

Recordad en vuesfros sufragios:

Doña Guadalupe Uribe de Rutz«
El día 22 de diciembre último, voló al cielo
esta coo|)eradora que figura entre las bienhe­
choras más insignes desde la primera hora de
la obra salesiona en Colombia.
Kiv unión de su digno esposo, el Oral. Jacinto
M- Ruiz (q. e. p. d.) prestó decidido y eficaz
niX)}*o al P. Evasio Rabagliati en su heróico
apostolado en favor de los leprosos y más tarde

CALI {Colombia). — Doña Purificación vda.
de ScUs y Doña Delfina, vda. de Arce.
ECHAGUE (Fiupin as ). — D. Miguel
lasco, D. Maximino Paterno, y D. Gregorio
Araueta. — Rvdo. Sr. D. Nicolás Sebastián.
GUATEMiUyA. — D. José Gregorio Prem.
VILLA DE DON FADRIQUE (España). Doña Juliana Igiiado y Doña Francisca Rubio.
YUMBO (CotOMBiA). — Doña Ana Joaquina
López de H. y Doña Manuela Sánchez.
C o a aprabacióa de le aaioritled ecIesJásUce.
G eren íei D . D O .M E N I C O G A R N E R L
E cfablecim iealo T ip . de la Socied ad E ditora Interaaeiooal C o r to Regioe M ergherile, 176,

Fecha
1930.08